.-13 Años Después-.
El tiempo había pasado rápido ya que todo estaba en completa paz y podía tener vidas "normales" los gemelos ya no eran unos niños puesto que acababan de cumplir sus 18 años, ahora en vez de un maestro privado iban a clases en uno de los mejores institutos que había en el país además de ser sumamente costoso.
Los mellizos habían salido de clases y esperaban afuera del instituto para que su chofer llegara por ellos, normalmente lo esperaban dentro pero hoy querían llegar antes a su casa ya que como todos los años iban a visitarlos sus amigos y siempre las reuniones había un buen hambiente.
Por parte del castaño se moria de ganas por hablar con Lavi, ya que en todos esos años le había tomado una gran confianza además de que sabia que no importaba que le contara el no lo olvidaría ni le diría a nadie si le confiaba algún secreto, pero también estaba ansioso de quería ver de nuevo a Kanda, aunque no quisiera admitirlo le llamaba demasiado la atención pero su orgullo le impedía aceptar tener sentimientos hacia una persona del mismo sexo después de todo eso estaba mal la iglesia no lo permitia.
En cuanto al albino también estaba emocionado por la visita, ciertamente le gustaba platicar con todos y ver todas las caras conocidas recordando como eran antes y todo lo que habían cambiado al pasar de los años pero su objetivo principal era el japonés, ciertamente le impresionaba que a pesar del tiempo el se conservara exactamente igual que cuando lo conoció no había cambios en su físico segui pareciendo un chaval de 18 años, aunque la realidad fuera otra.
Por fin su chofer había llegado y los había conducido hasta su mansión donde los había dejado en la entrada para que no les tocara caminar absolutamente nada- Al bajar del carro cosa que pocos tenían ya que todavía no eran muy comunes.
Al entrar a la mansión los recibieron dos jóvenes mucamas dándoles la bienvenida y ofreciéndose para cargar sus cosas para después ayudarlos a quitarse los abrigos y dejarlos en el elegante perchero.
-Señoritos tienen visitas, en este momento se encuentran habando con sus padres en el jardín- dijo una de ellas inclinándose un poco en forma de reverencia para después iniciar a caminar donde debían de estar sus visitas, al llegar nuevamente hizo una reverencia para terminar - aquí es señoritos, se les ofrece algo mas- pregunto cordialmente
-No gracias, estamos bien asi, ahora puedes retirarte- dijo amablemente el castaño para luego dirigirse donde todos estaban seguido de su hermano que lo vei raro- Por que me ves asi, es incomodo
-Por que le dijiste que se fuera y yo tengo sed y quería algo de beber- repocho el albino ante la conducta del castaño
-Por favor ya no tarda para que nos habisen que la comida esta servida depues de todo ya casi es hora de cenar, no te quejes creo que ellas tienen otras cosas que hacer- se defendió el castaño ante el reproche de su hermano.
-O chicos, que bueno que ya llegaron vengan acérquense- dijo cariñosamente Nozomi a su "pequeños"
Los chicos simplemente asintieron y se intergraron a las demás personas.
-Hola a todos, hace mucho que no los veíamos- dijo sonriente el castaño mientras se acercaba a cada uno de los presentes para saludar formalmente, al las señoras con un beso en la mano y a los señores con un apretón de manos-
-Es cierto hace mucho que no los veíamos- siguió el albino el recorrido que su hermano había hecho y saludo individualmente a cada uno, después tomo asiento junto a su hermano y empezaron a platicar de cosas sobre el instituto y demás platicas triviales.
-Y esta vez se piensan quedar mas tiempo- pregunto entusiasmadamente el castaño ya que casi no los veía y cuanod los veía era por muy poco tiempo
-Lo sineto Kosen, pero me temo que no ya que tenemos asuntos que atender pero algún dia nos quedaremos por ms tiempo- dijo la china un poco apenada ya que a ella también le gustaba estar ahí se sentía comoda y cada vez que veía a Allen le recordaba a su viejo amigo y eso la hacia sentir bien.
-Yo te tengo una sorpresa- dijo alegre el pelirrojo al notar que la mirada de los adolecentes se reflejaba un poco de tristeza al saber que su encuentro apenas duraia unas horas, los chicos giraron su vista rápida estaban ansiosos por saber cual era la sorpresea de Lavi, quien al ver que había tomado toda la atención se decidió a hablar- Yo me voy a quedar un tiempo por aquí, justamente le pedi a Nozomi y a Tykky ver si me dejaban hospedarme ya que tengo unos asuntos que resolver- dijo alegremente el pelirrojo, ciertamente la edad le había sentado de maravilla sus facciones eran mas maduras y su voz un poco mas profunda haciéndolo ver muy sensual a los ojos de cualquiera, se mantenía muy bien ya que no aparentaba mas de 30 casi parecía un veintiañero.
-Que bueno que te puedas quedar mas tiempo- dijo alegremente el albino al saber que el pelirrojo se quedaría-
A todos se les escapo una sonrisa claro con excepción del japonés que no le agradaba nada la idea que el albino halla hablado tan contento por que el pelirrojo se quedara, ciertamente estaba celoso y mucho, pasado un tiempo se había dado cuenta que no quería estar solo y lo que le había dicho su moyashi era cierto el tenia que ser feliz el se lo habi prometido pero lo que no se espero era que le había gustado lo que hoy seria el sobrino de Allen, ciertamente eran muy parecidos casi iguales y eso le llamaba demasiado la atención al samurái ya que veía a su allen en el joven muchacho.
-Es cierto ahora que recuerdo también Kanda se quedara algún tiempo- dijo Tykky recordando que el japonés también había hablado con ellos para saber si se podía quedar un tiempo ahí-
-Eso es verdad Kanda-san- pregunto el castaño mientras veía fijamente al japonés, estaba realmente emocionado y eso no lo podía negar ya que le agradaba la idea de compartir mas tiempo con el japonés-
-Si es cierto, tengo algunos asuntos por aquí- dijo seriamente el japonés
-Que bueno que sea así- termino por decir el albino para sorpresa de algunos ya que el joven se había levantado de su asiento muy entusiasmadamente. Todas las miradas se posaron el él cosa que hizo que se sonrojara levemente por sus actos, pero el leve tono de piel que había adoptado su piel no fue del todo desapercibido ya que Lavi y Kanda lo habían visto haciendo que en sus mentes recordaran a su gran amigo.
-Disculpen la intromicion pero la cena ya esta lista pueden pasar cuando gusten al comedor- dijo una de las empleadas de aquella mansión en tono sumiso mientras hacia un reverencia a los presentes.
-Muchas gracias por avisarnos, enseguida vamos- dijo Nozomi para después hablar con los demás- Bueno chicos que tal si vamos a comer ya es un poco tarde- termino para acto seguido levantarse de su lugar, una vez que todos se pusieron en pie caminaron juntos hacia el comedor donde podrían disfrutar de una deliciosa comida.
La comida paso sin mayores noticias todos calmados hablando fluidamente de cosas muy triviales ya que lo mas importante había pasado, una vez terminada la comida se despidieron de sus amigos ya que la mayoría se debía de ir, pero esta vez 2 de ellos se quedaban cosa que alegraba a sobremanera a los mas jóvenes.
.-En la Sala-.
Se encontraban 6 personas, cada una sentada comodamente en los sillones que se encontraban, seguían platicando de asuntos pendientes entre mas cosas, hasta que la única mujer decidió cambiar el tema pero había dos personas que no debían escuchar.
-Chicos por que no se van a arreglar, ya es noche y mañana tienen clases especiales, ya que son los exámenes - dijo amablemente Nozomi a sus hijos, ya que al siguiente dia a pesar de ser sábado ellos tenían clases de idiomas y tenían que asistir al club deportivo en el que estaban inscritos cabia decir que eran muy buenos en los deportes también.
-Bueno esta bien, después de todo Lavi y Kanda-san se van a quedar por un tiempo luego ppodremos platicar- dijo sonriente Kosen, nadie le podía quitar la sonrisa del rostro.
-Esta bien- contesto con un poco de mala gana Allen, su interés de seguir la platica le había ganado.
Una ves que los jóvenes se fueron la conversación se mostro mas seria.
-Y que han sabido, algún rastro de materia oscura o algo- dijo seriamente Nozomi
-No nada, porque lo preguntas- dijo el bookman serio ya que no era normal hablar de materia oscura o akumas, no después de la batalla final.
-Tengo un mal presentimiento- solto un suspiro, volvió a tomar aire no estaba del todo preparada si sus hipótesis se hacían claras no eran buenas noticias, tenia miedo. Estaba nerviosa se eso hacia mucho que no lo sentía no se pudo tranquilizar hasta que sintió la mano de su esposo sobre la suya apretándola gentilmente dándole fuerzas para seguir, ya que él sabia lo que le pasaba.
-Habla de una vez- la paciencia del japonés había llegado a su limite.
-Ustedes saben que poseo el corazón de la inocencia- empezó tranquila para poder planear como seguir con sus palabras, pero para su mala suerte la paciencia del japonés era nula y mas después de aquel silencio.
-Al grano que quieres decir- repocho ante lo que iba a ser un gran rodeo.
-Estoy sintiendo cambios en la inocencia- dijo seriamente, agarrando valor de su esposo para seguir rápido- se siente inquieta es como si tuviera miedo, tiembla constantemente se estremce, es una señal de que algo malo va a pasar ya que la unica vez que sentí tal estremecimiento fue antes de que me encontrara con Kosen, lo que pienso yo según la fecha seria cuando despertó como Noah- dijo seriamente su voz era fría un poco cortante pero también poseía una gran preocupación.
-Pero eso es imposible, el mato a todos los Noah que vivan en los humanos y el conde esta atrapado en aquella dimencion eso es imposible.- dijo el bookman tratando de no entrar en pánico ya que si era cierto tendrían graves problemas.
-Sinceramente note a mugen un poco inquieta, procuro usarla para seguir entrenando por si pasa algo y en los últimos días la sentí diferente- dijo el japonés recordando sus entrenamientos.
-Ahora que lo mencionas Lenalee me dijo algo raro, menciono que sus piernas estaban mas pesadas que era como si sus energias se perdieran en momentos- dijo el bookman seriamente recordando la platica con su amiga.
-Esto puede ser muy malo, lo quería comentar con ustedes para que pudieran pasarlo a los demás ya que yo no tengo contacto con todas las personas compatibles, solo estoy en contacto con los alumnos de Kosen, pero es difícil viajar por el mundo para encontrarlos- dijo seriamente Nozomi- Tal vez sea una falsa alarma pero de cualquier momento ahí que estar preparados-
-Esta bien nos comunicaremos con los de la orden para ver que sucede puede que Hevlaska también lo halla sentido y asi poder llegar a una conclusión- dijo seriamente el japonés-
-Entonces tenemos que esperar- dijo lavi mientras se estiraba para relajarse- cambiando el tema, Yuu por que siges igual, no envejeces para nada, pareces un chiquillo de 18 años- se burlo un poco el pelirrojo pero tenia razón Kanda no había cambiado absolutamente segui igual.
-Es cierto Kanda sigue igual- dijo Tikky entrando en la charla ya que también le interesaba el tema-
-che-no le gustaba ser interrogado pero no le hacia daño decirles a ellos después de todo le darían hospedaje por algún tiempo- Es por culpa de un hechizo, recuerdas el tatuaje en mi pecho- pregunto el japonés al pelirrojo quien lo recordaba pues era un bookman y en varias batallas el japonés había terminado con la ropa hecha trisas.
-Si lo recuerdo- dijo seriamente el de ojo esmeralda
-Gracias a eso mis heridad sanaban rápidamente y como ahora casi no me hago heridas lo que hace es mantenerme en buen estado por eso mismo no puedo envejecer- dijo secamente el japonés.
-Entonces Yuu, siempre te quedaras asi con la apariencia de un joven de 18- pregunto el pelirrojo preocupado por su amigo ya que no era fácil quedarse siempre con el mismo físico debía ser duro puesto que la gente normalmente esta malinterpretando todo-
-Hasta que no se rompa el hechizo este seguirá- dijo mientras se incorporaba para salir después de todo la platica había terminado.
Fueron dirigidos a sus cuartos por 2 jovencitas parte del personal de servicio de la mansión.
Los mellizos ya se habían arreglado, a pesar del tiempo seguían compartiendo habitación, solo que esta vez era mas grande y dormían en camas separadas.
-Oie Allen, estas dormido- pregunto en un susurro el castaño por si su hermano si había conciliado el sueño-
-No, sigo despierto- dijo el albino mientras se incorporaba para quedar sentado en su cama- No tienes sueño verdad- interrogo
-La verdad no, me gustaría seguir platicando con ellos- dijo con un deje de tristeza el castaño
-Yo tampoco tengo sueño- dijo el albino- que te parece si vamos can lavi y Kanda, sus cuartos están cerca de aquí y por lo tanto están lejos de los de papa y mama- dijo sonriente para acto seguido ponerse de pie- Vamonos
El castaño obedeció, le había parecido una excelente idea, y asi los 2 jovenes salieron de su habitación, y caminaron por un largo pasillo hasta llegar frente a un par de puertas que estaban de frente a cada lado.
-Kosen, si entramos los dos a platicar con uno de ellos lo mas probable es que se arme un alboroto asi que mejor cad quien habla con uno- propuso inteligentemente el albino
-Bueno esta bien- acepto en voz baja
-Entonces yo voy con Kanda y tu con Lavi- dijo sonriente mientras empujaba a su hermano a una de las puertas, mientras el se dirigia a la otra, el primero que toco fue Allen, después de todo era una persona alegre, de inmediato se escucho la voz del japonés con un "Enseguida voy" no paso ni un minuto cuando el samurái abrió la puerta encontrándose con el albino quien le sonreía.
-Puedo pasar- dijo alegre mientras le dedicaba una dulce sonrisa al oriental-
-Adelante- fue lo único que pudo decir, luego miro alrededor y sin ver a nadie entro a su cuerto y cerro la puerta tras de el.
-Que bueno que me escondi- suspiro Kosen saliendo de su escondite para tocar la puerta del pelirrojo quien abrió en cuanto la escucho y valla sorpresa que se dio el bookman el castaño estaba en frente, mientras sonreía abiertamente.
-Buenas Noches Kosen, pasa- dijo abriéndole paso para que entrara, encuanro el muchacho entro cerro la puerta para después sentarse en la cama mientras veía al joven.
-Que bueno que me visitas, se te ofrecía algo- pregunto amablemente el pelirrojo el ver que el niño no iba a hablar-
-Nada en particular, solo que no tenia sueño y quería hablar con usted- dijo el chico levantando la mirada haciéndola chocar contra la esmeralda, quien se sorprendió ya que nunca había visto al joven como ahora lo veía, siempre que platicaban estaban acompañados por todos y las platicas eran muy superficiales y generalizadas, pero ahora estaban solos y para su sorpresa el chico era realmente apuesto y tenia un aura de pureza que lo rodeaba. Se regaño mentalmente, el ya no era un muchacho para pensar en esas cosas, ahora tenia una responsabilidad como bookman, pero ahora que lo pensaba que tenia lo de ser bookman con lo que había pensado se volvió a regañar, era imposible que le empezara a gustar el joven que tenia enfrente.
.-En la habitación de Kanda-.
Los dos se encontraban callados, el japonés se había sentado en una silla de la habitación mientras el albino se había adueñado de la cama.
-Kanda, quisiera deicrle algo muy importante- dijo seriamente el albino mientras miraba con detenimiento al japonés-
-Si que pasa- pregunto despreocupadamente, le había sorprendido que el chico vieniera a su habitación y mas por que ya era tarde y para su desgracia seguía atrapado en el cuerpo de cuando tenia 18, y por lo tanto las hormonas seguían arriba cosa que no le gustaba para nada y menos por las miradas que recibia del albino, tan solo en pensar que estaban solos a mitad de la noche y el lo miraba de esa manera lo ponía nervioso claro que no lo demostraba para nada, después de todo el era una persona fría, pero cada vez que veía a aquel joven en su cabeza recordaba al moyashi, tal vez con cualquier persona esa situcaion no le hubiera puesto nervioso ni nada pero ese chiquillo por que se tenia que parecer a su moyashi, eso si era peligroso.
El japonés estaba tan sumido en sus pensamietos que no se dio cuenta cuando el joven se acerco tanto estaba a escasos centímetros de él y no se había dado cuenta, otra vez estaba sumiéndose en sus pensamientos cuando la voz del chico volvió a escucharse.
-Me gustas, me gustas mucho- fueron unas plabras apenas unas palabras las que dijo y el estaba inmóvil no sabia que hacer el chico se l habi declarado, eso estaba mal el era un niño, aunque su cuerpo estaba como el de un joven seguía siendo un adulto.
Fue sacado de sus conclusiones cuando sintió un contacto tibio en sus labios, el chico lo había besado, no tardo nada cuando le contesto, realmente le gustaba el contacto era como tener a su moyashi de vuelta no lo pensó dos veces cuando lo abrazo fuertemente, no quería soltarlo a decir verdad le gustaba mucho aquel chiquillo, el beso profundiso mas ahora el contacto era mayor tuvieron que separarse por falta de aire, al verse estaban levemente sonrojados por la falta de aire.
-Entonces es un si- pregunto el niño mientras veía al mayor detenidamente
-Si- fue su respuesta, depues de todo el joven le gustaba
-Eso es lo que quería decirle, ahora debo irme que mi hermano se preocupara si ve que no llego- dijo el albino para sonreírle al japonés y luego dejar un beso rápido y salir casi corriendo del lugar.