Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Por Culpa de su Padre por Tatsuya

[Reviews - 335]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Woolas!! a todos :D

Espero que esten bien... pk lo q es yo estoy muerta de sueño... son las 17.40 en shile y no dormi casi nada... todo para ver a girugamesh en vivo *---*!! aww fui tan feliz al verlos... sobretodo a Ryo <3 <3 <3 <3! i love him *-*

 

Siempre lo digo.. pero no me aburriree XD

 

GRACIAS por sus reviews del cap anterior, ahora mismito me ire a responderlos =3!

 

Disfruten este Capitulo :3

 

No sabía si acercarse o no, se veía ocupado, además tenía 20 minutos ahí parado y ni siquiera se había percatado de su presencia, tal vez una corta interrupción no le molestara, lo mejor era acercarse y hablarle, a eso había venido.

 


- Buenos días- saludó al tiempo que dejaba sobre el escritorio el ramo de rosas rojas que había llevado con él.


- ¡Satoshi!- exclamó el pequeño sorprendido- que lindo detalle.


- ¿Creíste que lo había olvidado?- preguntó incrédulo- ¡Feliz Cumpleaños!

 


Ruki se puso en pie y Satoshi rodeo el mueble para abrazarlo, que bien se sentía tenerlo cerca, aunque claro su timidez no dejaba decírselo abiertamente, se separaron con rapidez, no quería que todo el piso se enterara que era su cumpleaños, ya podía imaginar la fila india que harían tanto chicas como chicos para “felicitarlo”.

 


- ¿Te llego la invitación a tu mail?- preguntó intentando desviar la mirada, el pulso se le había acelerado más de lo normal y hasta podía sentir como se le habían subido los colores al rostro.


- Si... supongo que también invitaste a Shima-chan...- dijo al tiempo que se sentaba en el asiento frente al él.


- Si y te advierto que seguramente ira con Reita... no quiero peleas- se apuró a decir el rubio, esos dos hombres no simpatizaban, aunque tampoco para él el frío de Akira no era santo de su devoción- es el novio de Uru y que le vamos a hacer- suspiró con cansancio, tomó el arreglo y aspiró el dulce olor de las flores frescas.


- Solo por ti voy a soportarlo- dijo sin pensar, por lo que tosió después y giro el rostro con disimulo.


- Hola Sato, ¿Cómo estás?- preguntó el castaño saliendo de su oficina, era raro ver a Satoshi en ese piso, únicamente se veían fuera del trabajo, el pelinegro era muy profesional, por no decir que un esclavo del trabajo, pero seguramente su visita se debía al día tan especial que era para Ruki.


- ¿Qué tal Shima?- saludó sonriente.


- Bien- dijo al tiempo que le devolvía esa sonrisa- ¿Listo para la fiesta?- preguntó alzando las cejas en ademán pícaro.


- Eso si- se adelantó Ruki- nadie puede faltar.


- Ahora que lo dices, no le he comentado nada a Reita... - dijo con preocupación.


- Pues si no quiere ir pues mejor para nosotros- comentó con fastidió Satoshi.


- Haré como que no oí eso Sato- dijo sonriente- los dejo solos quede de ir a Reita a su oficina.


- Hasta luego- respondieron al unísono, a lo que ambos sonrieron.

 


Era su imaginación o esos dos se traían algo?

 

 

 

 


*~*

 

 

 

 


Akira se acomodó en su asiento, pronto esa ya no sería su oficina, quizás mudarse a la oficina de Takashima era una buena idea después de todo……… después de hoy, sería el socio mayoritario de Maverick y podía darse esos lujos. Miró los papeles que descansaban sobre su escritorio, cuanto valor podía darles una simple firma… la firma de Takashima Kouyou, quien sin sí quiera sospecharlo cavaría su propia tumba.

 


La verdad, sentía temor, no sabía cómo reaccionaría después de mañana, cuando se viera como dueño y señor de toda la fortuna que le fue robada a su padre, ¿Sentiría remordimiento? ¿Lastima? O ¿Cuál sería su percepción de ese hombre al que había envuelto y enamorado solo con el fin de despojarle de aquello que supuestamente le pertenecía? ¿Qué le diría? Si es que algo debía decirle, lo único que sabía, era que debía manejar la salida de Takashima de la empresa con la mayor discreción y sin revelar a nadie la relación tormentosa que sostuvieron.

 


Unos leves golpes en la puerta lo trajeron de nuevo a la realidad, era Uruha, le había resuelto a Aya que le permitiera la entrada sin ser anunciado.

 


- Hola Reita... - saludó con soltura el castaño una vez que la puerta estaba asegurada y podía hablar con tranquilidad.


- Te estaba esperando... siéntate por favor- pidió con cortesía.


- Estas muy educado, ¿Qué pasa?- preguntó intrigado, al tiempo que obedecía.


- Como te dije ayer, hay unos documentos que necesito que firmes... - dijo colocando que enfrente suyo dichos papeles.


- ¿De qué se trata?- preguntó, Akira era el abogado de la empresa, así que podía explicarle mejor el contenido en vez de leer el mismo los términos legales que no entendería.


- Es un poder notarial para... - se detuvo, le miró directamente a los ojos, después de esa firma todo cambiaria, podía leer en ellos la expectación.


- ¿Te sientes bien?- preguntó preocupado- Ayer tomaste y aun tienes que cuidarte esa resaca.


- Estoy bien- respondió pero para Uruha eso no fue suficiente, se había puesto pálido de repente.


- Firmare esto si es lo que quieres...

 


Tomó los papeles sin reparar en nada de lo que decían, seguro era algún poder para representarlo en algo, Reita lo miró completamente hermético, sentía que no podía ni respirar por solo pensar que Takashima leyera cualquier detalle, que pudiera exponerle la verdad. Kouyou sonrió cuando al final de la última hoja aparecía la línea que solicitada su nombre y sin más lo puso.

 


- Para que tanta intriga- le sonrió con franqueza- Jamás dudaría de ti.- Uruha se levantó con rapidez y Reita lo hizo casi mecánicamente.


- Que tonto casi lo olvido... Ruki cumple años hoy y nos invitó a su departamento a festejar... ya sé lo que me vas a decir, que no se caen bien ni él ni Satoshi ni tú, pero por favor... ¿Sí?.

 


El rubio se quedó en silencio, como le hubiera caído un gran balde de agua encima, ya no tenía por qué quedar bien con Uruha, si quería podía correrlo en ese preciso instante, podría demostrarle abiertamente lo mucho que lo aborrecía, pero el lado compasivo que aún no lo terminaba de abandonar le hizo recordar “hasta los sentenciados a muerte tienen derecho a su última voluntad”.

 


- Esta bien... - dijo sin más, a lo queUruha sonrió de oreja a oreja.


- Gracias- le tiró un beso antes de salir.

 


Esta noche sería la última vez que soportaría la cercanía del castaño, la última vez que tendría que ser complaciente, no pudo evitar echar un suspiro sonoro, además de libre era millonario.

 

 

 

 


*~*

 

 

 

 


La noche llegó rápido y ahí se encontraban en el departamento del chibi, vestidos para la ocasión, Uruha simplemente unos jeans claros, una polera tono rosado y encima una chaqueta blanca, en cambio Reita llevaba unos pantalones negros con una camisa negra, fue el castaño quien se aventuró a tocar el timbre.

 


- Gracias por acompañarme- sonrió en agradecimiento.


- Chicos, que bueno que vinieron- Ruki abrió la puerta y los recibió efusivamente.


- Buenas noches!-Uruha le dio un cálido y apretado abrazo.


- Buenas noches- dijo secamente Suzuki, estrechándole únicamente la mano en forma de saludo y felicitación.


- Pero pasen, no se queden en la puerta.

 


En cuanto entraron Satoshi salió a su encuentro ofreciéndoles un vaso de refresco, sabía que Shima no tomaba y si Akira lo hacía que se sirviera él mismo, él no la iba a hacer de su “barman” particular.

 


- Gracias- aceptó el castaño la bebida.


- Me serviré algo- dijo únicamente Reita antes de dirigirse a la pequeña barra de alcoholes.


- ¿No que estaba en rehabilitación?- preguntó Ruki sorprendido.


- Si... - dijo únicamente pero sin entender nada.

 


Akira inició primero con un vodka, mientras observaba sin mucho interés el par de amigos que sentados en los sillones platicaban amenamente, Uruha había ido varias veces a hablarle, pero ante su poco animo desistía con rapidez, lo único que deseaba Suzuki era festejar……… la verdad también él se encontraba contrariado, nunca en su vida había probado una gota de licor y ahora parecía que fuera diestro en el asunto, seguramente la terrible experiencia que había vivido con Takashima le dejaría ese pequeño recuerdo.

 


- No deberías beber- le había dicho Uruha con preocupación- sé que es terrible la combinación del alcohol con los fármacos.


- Ya no estoy tomando pastillas por la resaca...- atinó a decir para salir del paso.

 


Aunque claro el efecto siempre es el mismo en alguien que no está acostumbrado a beber, después de unos pares de copas Reita ya estaba fuera de su estado “normal” y Shima también lo notó.

 


- Ya no bebas más... - le pidió con cansancio- será mejor que nos vallamos.

 


Y así fue, dejaron la fiesta entre miradas de reproche, si no les había caído bien a ese par con la conducta de bebedor menos, pero a Reita lo tenía sin cuidado, no sabía por qué pero una vez que inició a beber no pudo detenerse, como si intentara olvidar algo o a alguien.

 


El trayecto en automóvil fue en silencio, Uruha no tenía ánimos de hablar, si Reita aun podía mantenerse despierto ya hablarían en el apartamento, porque en ese momento tenía la mirada fija en la ventana, tal vez estaba molesto con él por un motivo que desconocía, le había parecido tan raro que bebiera de esa forma, en ningún momento intento unirse a la conversación, solo los había estado mirando y aunque en ese instante culpo a su imaginación, no podía dejar de pensar que en sus ojos había visto un destello de odio.

 


- Él se las toma y a mí me hacen efecto- pensó al tiempo que sonreía por su loco pensamiento.

 

 

 

 


*~*

 

 

 

 


- ¿Puedo saber que te sucede?- preguntó el castaño poniéndole llave a la puerta una vez que ambos estuvieron dentro del departamento.


- ¡¿Podrías dejarme en paz aunque sea un segundo?! ¡Me asfixias!- gritó con fuerza mientras manoteaba al aire intentado que no se le acercara, provocando con tal acto, que Uruha se tambaleara y cayera sobre el sofá.


- Lo siento, solo quiero saber qué te pasa- se apresuró a disculparse, no quería tener problemas con él.


- Que te importa... - dijo intentando caminar, pero sus pies tropezaron con la mesita de centro y cayó sobre la alfombra.

 


Uruha se dirigió a ayudarlo, no sabía que sucedía con Reita, él no podía hacer que se lo dijera, además el rubio no hablaba mucho, así que a pesar de la renuencia del por permitirle acercarse, Uruha lo abrazó cariñosamente hasta que los intentos por escabullirse de su cercanía cesaron.

 


Reita sintió como todo en un segundo se volvió el inconfundible olor de Takashima, intentó alejarse, dio varios manotazos al aire y uno que otro hacia su odiado amante, pero este no parecía inmutarse, al contrario se aferraba a él en un afán fijo de calmarlo.

 


Se quedaron ahí entrelazados unos momentos más hasta que la respiración de Reita se normalizó, indicándole a Uruha que había cedido, sus brazos habían caído a sus costados... dormía como un bebe.

 


Se veía tan tranquilo así... durmiendo, eran pocas ocasiones que podía disfrutar de su calor, de ese dulce calor que desprendía su cuerpo, como le hubiera gustado estar así por siempre, sonrió levemente y posó un beso con ternura en la curva de su cuello que se alzaba demasiado apetecible, pero solo fue uno, no había porque aprovecharse de la situación.

 


Lo levantó con cuidado pasando su brazo derecho por encima de sus hombros, Uruha era un chico fuerte y con solo un poco de esfuerzo logró llevar al rubio hasta su habitación.
Lo recostó sobre la cama, separando las sábanas del lado contrario para así cubrirlo, le acarició los cabellos que caían desaliñados sobre la almohada y se atrevió a besarlo suavemente en los labios.

 


- Te amo- susurró en su oído con voz melosa, antes de plantarle un nuevo beso, pero ahora en la sonrojada mejilla. Se separó lentamente con el propósito de irse, pero la mano de Reita sobre su brazo se lo impidió.


- Te necesito... - murmuró el rubio con voz entrecortada, impidiéndole al castaño marchar.

 


Uruha se acercó un poco y rozó sus labios con los entreabiertos de Akira, quien rápidamente se apresuró a atraerlo hacia sí para girarse y depositarlo sobre el cálido colchón.

 


- Reita... por favor- imploró, sabía que no debían tener intimidad, la salud de su pareja estaba antes que todo, antes que sus propias necesidades.


- Shh- le acalló colocando uno de sus dedos en sus labios.

 


Uruha disfrutó de cada caricia y cada beso dado, igual que las y los que dio, sabia a miel la piel de su amante y sintió por extraño que pareciera que era el primero en degustar cada tramo del cuerpo de Reita, sus gemidos y suplicas le llenaron los oídos como le mejor música jamás escuchada, hasta que terminó y los estremecimientos le hicieron aferrarse a él con fuerza.

 


Uruha pensó que había finalizado todo puesto el alcohol que había ingerido Reita conjuntamente con el reciente orgasmo, lo adormilaría, pero se equivocó, en un segundo después tenia al rubio encima suyo deseando devorarlo a besos.

 


Creyó estar soñando cuando las manos inquietas de su amor comenzaron a abrirse paso bajo la ropa y los besos se intensificaron hasta que ambos se les dificultaba respirar, sabría lo que pasaría, así que cerró los ojos mientras Reita lo exploraba con una desesperación hasta entonces desconocida. Después de que Akira lo preparaba torpemente suspiró de puro placer cuando se incrustó él mismo haciéndose uno, en cada estocada del rubio contra su cuerpo febril y cuando le lleno las entrañas no pudo más que gritar estremeciéndose y tiritando por haber llegado al éxtasis juntos.

 

 

 

 

 


*~*

 

 

 

 


Todo estaba oscuro, un par de voces se oían lejanas, más que voces parecían gemidos, pero se dispersaban hasta que se volvían un reclamó cargado de odio... no pudo distinguir lo que decía pero lo sentía en el pecho, sentía una angustia creciente, la angustia de haber defraudado a alguien, a alguien muy querido...

 


Sabía que caminaba, mas no podía verse, sabia porque sentía sus pies moverse por un camino que no podía ver, sintió miedo a lo desconocido, ya que no sabía porque caminaba ni hacia donde lo hacía... pero solo sabía que entre más caminaba más nítidas eran esas voces, hasta puedo identificar una de ellas que le habló por un nombre, la sangre se le heló en las venas cuando supo de quien se trataba... era la voz de su padre... se detuvo sin previo aviso, simplemente sus pies dejaron de andar, y esa voz ya reconocida, se volvió un gemido sordo que le destrozó el alma, para volverse un reclamó que oyó claramente.

 


- Me has fallado...

 


Se despertó abruptamente, sintiendo como su corazón saltaba en su pecho y su latido llegaba a su oído como un tambor en plena batalla, había despertado pero sus ojos no se habían abierto aun, por una extraña razón supo con certeza, que el motivo de ese extraño sueño lo sabría al abrir los ojos.

 


Se enfrentó al terrible miedo que lo había invadido, como rezago de ese sueño donde había escuchado a su padre decirle que le había fallado y abrió los ojos.

 


Lo primero que pudo distinguir fue la habitación, era la habitación que ocupaba en el departamento de Takashima... se giró un poco para ver a su lado y estuvo a punto de caerse de la cama cuando divisó la melena castaña de Uruha asomarse de entre las sábanas, entonces notó su desnudez e imaginó el resto.

 


Mil preguntas se formaron en su mente, pero todas llegaban a la misma conclusión.

 


Por culpa de su borrachera había terminado acostándose con Kouyou.

 

 

 

 


Continuara...

Notas finales:

Chan chan chan!!!

Y???? Que creen que pasara ahora???

Como creen que Uruhitaperinassersis se entere? o no se enterara?

Reita seguirá alli o se ira lejos con su miyu para casarse? D:!

 

Ahh! el lemon.. ehmm.. cofcofcof no lo kise hacer muy detallado... pk creo que la ocacion no lo ameritaba... siq solo trate de hacerlo resumido :3 pero tranquilas... quizas...tal vez... mas adelante aparesca algo D: xDDD

 

Gracias por los que leen siempre, make me happy~

 

Ja ne~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).