Me senté a lado de Ivan, solo para ver correr a Alfred.
- ¿Qué crees, que vaya a hacer?-. Me pregunto Ivan.
- No lo sé-. Respondí, mientras seguíamos almorzando.
A los pocos minutos escuchamos la chillona voz de Alfred en el alto parlante:
- ¿Ya esta prendido, Mathew?-. Decía Alfred.
- Sí, pero no lo puedes usar, es solo para anuncios importantes-. Le contestaba Mathew a Alfred, ellos son hermanos pero son muy diferentes.
Mathew es el hermano gemelo de Alfred, él es el encargado de dar los anuncios escolares, como los son: Festivales, Calendario de exámenes y demás cosas.
- Pero, mi fiesta es de suma importancia… -. Decía Alfred, mientras se aclaraba la garganta-. “Estimados alumnos de la World School, están todos invitados este sábado a la fiesta que se llevara a cabo en mi casa, con motivo del inicio de clases, pueden llevar a quien quieran, la dirección pídasela a mi hermano Mathew, aquí en la cabina, no vayan a faltar”.-. Termino Alfred su anuncio, en eso una multitud de estudiantes se dirigió corriendo hacia la cabina de anuncios, para ese rato Alfred ya se encontraba frente a nosotros terminando su almuerzo, es bastante veloz, cuando le conviene.
Mientras me disponía a terminar mi arroz frito, sentí como la mano de Ivan me acariciaba una de mis piernas, lo hacía suavemente, no pude evitar sonreír.
Ivan, es mi novio, pareja o como quieran llamarle, nos conocimos justamente en la fiesta del año pasado.
Flashback
Un año atrás…
Alfred, fue de los primeros con los que inicie amistad junto con Arthur y Francis, debido a ese motivo, Alfred quiso dar una fiesta, a mí se me ocurrió ofrecer mi casa, la cual es bastante amplia, pensé; “Solo seremos nosotros 4”, pero para mi sorpresa, estaba todo mi salón de clases reunido, sin olvidar alumnos de otros grados, a quienes yo no conocía.
Había alumnos de segundo y tercero, mi amigo de origen americano se le ocurrió la “brillante idea” de invitar a media escuela a mi casa, sin avisarme. Yo solo intentaba que nadie rompiera algo, que nadie lo hiciera en la cama de mis papás, estaba a punto de darme un infarto.
Estaba rescatando un florero de un alumno de tercero, de nombre Gilbert que lo usaba para recibir su vomito causado por el exceso de alcohol, al intentar recuperarlo me sorprendió que me lo diera un estudiante de segundo, se presento como Ivan Braginski, la verdad ni le preste atención.
Él al ver la poca atención que le ponía, me quito el florero, me agarro de la cintura y me dio un beso, su lengua exploraba mi boca, al principio me resistía pero termine aceptando y correspondiendo el beso.
- Me gustas mucho-. Me dijo.
- ¿En serio?-. Le pregunte sonrojado.
- Da, desde que te vi hace unos días, eres la cosa más adorable del mundo, ¿Cuál es tu nombre?-. Me pregunto, yo seguía sin creerlo.
- Wang Yao-. Le respondí.
- Muy bien, pues te voy a secuestrar-. Me dijo muy serio.
- ¿Secuestrar?-. Le pregunte a Ivan, algo sorprendido.
Ivan solo sonrió y me cargo estilo princesa, la verdad eso me gusto mucho y me llevo a la primera habitación que vio vacía, lo cual me hizo recordar cambiar las sabanas de varias camas, llegamos al cuarto de mis padres, yo intente detenerlo, pero él ni caso me hizo.
Me tiro en la cama, se empezó a quitar su saco, se posiciono sobre mí y me comenzó a besar, mordía mis labios salvajemente, podía saborear mi sangre.
Ivan comenzó a quitarme la ropa, dejándome solo en bóxers, el ruso al ver mi ansiedad decidió apresurar las cosas. Se quito toda su ropa dejando únicamente su bufanda, la cual jale para besarlo, tenia los labios bastante hinchados.
Mi amante aprovecho para quitarme mi ropa interior y comenzó a masajear mi miembro, yo gemía en su boca, rompimos el beso por falta de aire.
En pocos instantes me vine en su mano, él seguía duro, podía sentirlo chocar contra mis muslos, Ivan comenzó a introducir sus dedos en mi entrada, me dolía, pero después me gustaba la sensación.
Introdujo el segundo dedo, al poco tiempo un tercero para después introducir su miembro en mi, empezó con leves embestidas pero esta fueron aumentando conforme yo pronunciaba su nombre acompañado con un: “Más rápido”, ya no me importaba nada, solo quería seguir sintiendo en mi a Ivan, este se vino adentro de mí, lo cual hizo que yo lo hiciera en mi abdomen, está sumamente agotado, ya no podía escuchar la música de la fiesta.
Me desperté alrededor de un par de horas después, eran las 4 de la mañana, olvide que había una fiesta en mi casa, me preocupe, empecé a agitar a Ivan.
- Ivan, despierta-. Le decía, este solo abría los ojos pesadamente.
- ¿Eh?, ¿Qué pasa?-. Decía todo adormilado.
- Despiértate, mis papás me van a matar-. Le dije mientras me terminaba de vestir, lo que me tranquilizo era no escuchar ruidos en la casa. Salí de la habitación.
- Alfred, Arthur, Francis-. Empecé a gritar, a mi paso solo veía vasos vacios, botellas de alcohol, restos de comida y manchas de dudosa procedencia.
Me encontré con mi amigo francés, abrazado de una plata, intente despertarlo. Alfred estaba al pie de las escaleras dormido rodeado de botellas de cerveza y a Arthur en el sillón tapado con una caja de pizza, que había utilizado de cobija, intente despertarlos, estos crudos y molestos a causa de mis histéricos gritos empezamos medio limpiar, Ivan también ayudo, lo cual hizo que se ganara la confianza de mis amigos.
Pero no importo mucho el esfuerzo por limpiar, porque mis papás se enteraron de la fiesta, mencione que me castigaron por ello, sin salidas, sin dinero y sin televisión. Lo único bueno es que conocí a alguien maravilloso, Ivan y somos novios desde entonces.
Fin del Flashback.
Había sonado la campana para regresar a clases, me despedí de Ivan con un beso en la mejilla y me dirigí junto con Alfred hacia nuestra aula.