Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Susurros del más allá por Higary

[Reviews - 215]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holi hola, gente bonita!!! Aquí yo de nuevo dándoles lata, jejeje. Muchas gracias por sus bellos comentarios, son mi motivo para seguir delirando y con ánimos de traerles mis fumadas ideas XD Por cierto, me han estado preguntando mucho sobre S.E.M.E.S., y es que antes de año nuevo iba a editar los capítulos que llevaba para ya entrar de lleno con el nuevo... pero los archivos se perdieron junto con mi colección de doujinshi sasunaru TT_TT así que tendrán que esperar un poquito más. Bueno, sin más por el momento mejor pasen a lo que vinieron y que disfruten del capítulo: ¡¡a leer!!

 

Muro de los susurrantes: Hananasu, lobo512, hana-no-tenkai (jeje, ya se verá), Kaoru (a mí también me gusta ese apodo XD), Yume-chan, merissa_chan_shunidaime (gracias!! Y sí, te recuerdo desde hace muchos fics, jejeje), yelina uchiha, sue, eminahinata, Zchizophrenia, Saya_Misaki (estaré al pendiente de ese nuevo fic!!), Tsimi13, sayu-san, livi chan, hina_chan (es que quise que el bastardo aquí no lo fuera tanto ¬¬) y michixx (claro que no lo abandonaré, incluso a mano ya está todo escrito, jeje, sólo es cuestión de irlo transcribiendo a Word n.n).

 

Disclaimer: Los personajes aquí utilizados son propiedad de Kishimoto-sensei. A lo mejor tiene algunos detallitos de las películas Ghost, Sexto sentido y la serie Ghost wishpers, pero en sí la idea es producto de mi mente maquiavélica.

CAPÍTULO 5: EL DON CONSIDERADO MALDICIÓN

 

Oficina de Akatsuki. Todos los miembros estaban trabajando en los casos que tenían pendientes.

-Pein –llegó Hidan con el líder-, ya terminé de revisar el automóvil del caso Uchiha.

-¿Y qué pasó?

-Tenían razón, desconectaron los frenos. Pero lo hicieron de forma tan sutil que difícilmente alguien lo notaría.

-Quiere decir que no fue un accidente –concluyó Kakuzu

-Así es.

-¿Encontraste alguna huella digital? –preguntó Pein

-No. Debido a las condiciones en que quedó el vehículo me fue imposible.

-Oigan –llegó Sasori-, tengo la investigación del chico, Uzumaki Naruto. Encontré que ése no es su verdadero nombre, lo cambió.

-Interesante –comentó Pein-. ¿Algo sospechoso?

-Según lo que logré averiguar es un chico bastante solitario, no tiene padres, sólo sus abuelos paternos. Vive solo, no posee amigos porque en su escuela todos lo evitan, dicen que atrae a los espíritus malignos y la mala suerte.

-A mí no me parece tan terrible –comentó Hidan mirando la foto del rubio y se la pasó a Kakuzu

-Un chico con tantos problemas podría ser fácilmente manipulable –dijo Pein-. Tengamos un ojo encima de él, bien podrían haberlo contratado para vigilar a Uchiha Sasuke.

-Entendido.

-¿Cuál es su verdadero nombre? –preguntó Zetsu; ahora él tenía la fotografía

-Namikaze Naruto –contestó Sasori

-Por cierto, ¿dónde está Konan? –preguntó Kakuzu

-Dijo que conseguiría grabar la voz de ése chico –explicó el líder-. Sospecha que pudiera ser él quien llamó a Kisame. Necesitamos estar seguros de todo ahora que sabemos que el accidente fue provocado.

Todos asintieron. Zetsu seguía observando la foto con detenimiento, ya que luego de oír su apellido le pareció conocido de alguna parte.

-Mmm… Sólo que no logro recordar de dónde.

 

Como era ya una costumbre los domingos Naruto decidió ir a comer ramen en Ichiraku, su restaurante favorito. Caminaba felizmente por la calle seguido del fantasma pelinegro.

-El ramen te gusta mucho, ¿verdad, Naruto-kun? –preguntó Itachi caminando a su lado

-Sí, es el mejor alimento del mundo –sonreía con alegría

El pelinegro sonrió también, pues era reconfortante ver tan feliz a aquél solitario chico. De pronto volteó alrededor, pero no observó nada sospechoso.

-¿Qué pasa? –preguntó el rubio

-Nada, es que me dio la impresión… Olvídalo.

 

Oculta tras una pared se encontraba Konan con unos binoculares en la mano.

-Menos mal –suspiró ella-, por un momento creí que me descubriría. Qué niño tan curioso, habla solo –sonrió-. Pero eso no le quita lo lindo.

 

Naruto e Itachi llegaron al restaurante y el ojiazul se sentó frente a la barra.

-Hola, señor. Un miso ramen, por favor.

-Hola, Naruto. Claro, enseguida te serviré.

Konan ingresó al local y se sentó a su lado.

-Buenos días –lo saludó sonriendo

-Eh… Buenos días –respondió con seriedad y esquivó su mirada

El fantasma suspiró. Ahí estaba otra vez la barrera que el joven siempre ponía para mantenerse alejado de la gente. Le parecía una pena, puesto que en realidad el chico era muy agradable, cualquiera que llegara a conocerlo se encariñaría con él. Volteó a ver a la mujer y la miró fijamente hasta que la reconoció.

-¡Aaaahhhhh! –gritó señalándola

Debido al susto Naruto escupió el té que había estado bebiendo.

-¿Estás bien? –le preguntó el dueño del lugar colocándole su tazón de ramen

-Cofcof, sí, lo lamento.

-Toma –Konan le ofreció un pañuelo para que se limpiara

-Oh, gracias.

-Mucho mejor. Un chico lindo siempre debe mantener el estilo, jejeje.

El ojiazul se sonrojó levemente porque no estaba acostumbrado a recibir ese tipo de comentarios.

-Naruto-kun, mantente alerta –advirtió Itachi-. Esta mujer es miembro de Akatsuki.

-¿Seguro? –susurró

-¿Dijiste algo? –preguntó ella

-Yo… Que seguro el ramen de aquí le gustará –mintió

-Ella también fue a Konoha, la recuerdo bien –le aseguró Itachi-. Deben estarte vigilando por alguna razón, tienes que ser precavido.

-<<Claro, pero entonces deja de hablarme>> -pensó comiendo

 

Un rato después Naruto terminó y pagó la cuenta. Se puso de pie listo para irse; no era seguro que permaneciera mucho tiempo cerca de esa mujer.

-Ah, sí. Siento mucho lo de su pañuelo, señorita.

-No te preocupes –contestó sonriendo-. Fuiste una compañía agradable.

-Eh… Hum, con permiso.

 

Salió del local y se encaminó rápidamente a casa.

-¿Nos está siguiendo? –preguntó en voz baja el rubio

-No, no hay señales de ella –respondió Itachi

-Menos mal –suspiró aliviado-. ¿Crees que me consideren sospechoso de algo?

-Tal vez. ¿Sabes, Naruto-kun? Creo que lo mejor será decirle la verdad a mi hermano.

Él abrió sus ojos azules de sobremanera. Quiso soltar un grito, pero no podía hacerlo a mitad de la calle, de modo que optó por hablar con Itachi llegando a casa. Tocar ese tema con Sasuke era algo que temía mucho.

 

Regresando al Ichiraku, Konan dejó unos billetes para pagar la cuenta. Apagó una pequeña grabadora que llevaba en su bolso y sacó su celular para llamar.

-Soy yo –dijo-. Díganle a Kisame que esté en la oficina dentro de una hora. Ya tengo capturada la voz de Naruto-kun –colgó y suspiró guardando el teléfono-. Él parece un buen niño. Espero que no esté metido en problemas.

 

Kisame llegó puntual a las oficinas de Akatsuki. Le entregaron un informe con las pistas encontradas en el automóvil. El hombre se dejó caer en una silla, llevándose las manos a la cara.

-Les pedí que investigaran porque ya lo sospechaba –dijo con pesar-, pero confirmarlo es horrible –apretó los puños-. Juro que haré pagar a quien haya asesinado a mi amigo.

-Averiguaremos quién fue –prometió Pein

-Siento la demora.

Konan llegó e inmediatamente todos se le acercaron.

-Aquí está –le dio la grabadora a Hidan-. Escucha bien a ver si la voz te es conocida, Kisame.

El hombre presionó un botón y se escuchó la voz de ella y la de un chico.

-Mucho gusto, soy Konan. ¿Y tú?

-Eh… Uzumaki Naruto.

-No sueles hablar mucho, ¿verdad?

-Hum… Creo que no realmente.

Escucharon un poco más de la conversación antes de que Hidan detuviera la grabación y todas las miradas se posaron sobre Kisame, quien lucía pensativo.

-Sí –afirmó tras unos segundos-, es el mismo que me llamó por teléfono y me dijo lo del auto.

-¿Estás seguro? –preguntó Zetsu

-Totalmente.

-Y no olvidemos lo que me dijo a mí cuando fuimos  Konoha –añadió Sasori

-Ése chico parece saber más de lo que debería –comentó Pein-. Lo mantendremos vigilado. Me parece sospechoso que se acerque tanto a Sasuke y además nos diga exactamente qué investigar. Buen trabajo, Konan.

Ella asintió con el entrecejo fruncido, seguía sin creer que el rubio fuera peligroso. Por su parte Zetsu continuaba haciendo memoria para recordar de dónde le parecía conocido el apellido del chico.

 

Naruto se encontraba sentado en la sala cambiando los canales de la televisión sin prestar realmente atención a la programación. A su lado Itachi lo miraba seriamente.

-Naruto-kun, no me has dicho nada sobre lo que comenté.

-Hum… ¿Es realmente necesario hacerlo, Itachi-san? Si le digo algo así a Uchiha… seguro creerá que estoy loco.

-Pero no podemos arriesgarnos. Tienes que ganarte su confianza antes de que alguien le insinúe que pudieras estar involucrado con mi muerte.

El ojiazul no contestó.

-¿Por qué lo dudas tanto?

-Porque… no quisiera que él me viera de la misma manera que los demás.

Itachi lo miró con ternura. Iba a acariciarle la cabeza, pero se detuvo al recordar que todavía no podía controlar del todo el poder tocar las cosas y a las personas sin traspasarlas.

-No te preocupes, Sasuke no es así. Estoy seguro de que te escuchará.

 

Llegó el lunes y con él una nueva semana de clases. Naruto esperó hasta la hora de descanso para seguir a Sasuke. Lo encontró como de costumbre en uno de los rincones más alejados del patio.

-Ah, Uzumaki. ¿Qué pasa? –preguntó al verlo tan serio

-Disculpa, Uchiha, tengo que hablar contigo en un lugar privado. Es acerca de tu hermano.

-¿A qué te refieres?

-Este no es un buen lugar y créeme que es algo importante.

-Bien –aceptó el azabache-. Saliendo de clases iremos a mi casa.

El rubio asintió y se marchó rápidamente. Quería retardar la conversación lo más que pudiera.

 

Desgraciadamente cuando queremos que el tiempo pase más lento suele ocurrir el efecto contrario. Las clases terminaron rápidamente y ahora se encontraban en la habitación del ojinegro. Naruto estaba sorprendido, sabía que los Uchiha tenían dinero, pero por las actitudes tan modestas de ambos hermanos no esperaba que fuera tanto. Aquella habitación era enorme y majestuosa. Detuvo su vista en una fotografía de Sasuke (de unos seis años) siendo cargado sobre los hombros de Itachi. Ambos lucían muy alegres.

-La tomaron el día de su cumpleaños número seis –contó el espíritu-, fuimos al parque de diversiones –sonrió-. Fue muy divertido.

-Entiendo.

-¿Qué es lo que entiendes? –preguntó Sasuke de pie junto a su cama

Naruto inhaló aire y lo miró con nervios. Lo que estaba a punto de decir probablemente acabaría con las conversaciones que mantenían, los saludos por las mañanas e incluso los insultos de vez en cuando. Sasuke parecía contrariado por la cara que el rubio tenía.

-Sé… que lo que voy a decirte sonará como un disparate, pero te juro que no estoy loco y digo la verdad –cruzó sus miradas-: puedo ver fantasmas.

-¿Qué?

-Lo que oíste, puedo ver fantasmas. Te he estado vigilando porque Itachi-san, tu hermano, me insistió mucho para que lo ayudara. Él está aquí en estos momentos, me acaba de decir que esa foto fue tomada cuando cumpliste seis años y fueron al parque de diversiones.

Sasuke lo miraba con seriedad sin decir nada, cosa que preocupó al rubio.

-¡Te juro que hablo en serio! ¡Él me acosó hasta que accedí a ayudarlo! ¡Se puso toda una noche a cantarme canciones viejas de anime! Yo…

-Te creo –lo interrumpió sujetándole los hombros-. En serio te creo.

-¿D-De verdad?

-Claro que sí. Sé que tú nunca bromearías con algo como esto.

Itachi se sorprendió porque creyera tan rápido en sus palabras. Eso significaba que su hermano confiaba plenamente en Naruto. Una sonrisa adornó su rostro al contemplar cómo el par seguía observándose.

-Ya veo –murmuró sin borrar su sonrisa-. Con que así son las cosas.

El azabache y el rubio se sentaron en la cama; el ojiazul todavía no procesaba que le hubiera creído.

-¿Cómo puedes estar seguro de que no te miento? –le preguntó

-Mmm… Tal vez porque Itachi hizo lo mismo para convencerme de ir a la playa durante unas vacaciones. No me gusta mucho ir porque luego me miran como si fuera el último pedazo de carne sobre la tierra.

Naruto sonrió ligeramente por el comentario.

-Pero si él sigue aquí –continuó el azabache-, ¿significa que tiene asuntos pendientes?

-Sí. Escucha bien, Uchiha: Itachi-san dice que su accidente fue provocado y teme que el responsable ahora vaya por ti.

-¿Q-Qué? A Itachi lo…

-Asesinaron –confirmó con pena-. Siguiendo sus palabras he tratado de guiar la investigación que Kisame-san y Akatsuki están llevando a cabo, pero ahora sospechan de mí. Es por eso que decidimos que lo mejor era confesarte todo para ponerte sobre aviso.

-¿Por qué no les dijiste la verdad?

-Vamos, Uchiha –sonrió con ironía-, no todas las personas creen cuando les dices algo como esto. Probablemente me encerrarían en un manicomio.

-Pero nos estás ayudando.

Naruto suspiró y miró un punto fijo, o eso le pareció al moreno.

-Itachi-san, quisiera habla con él en privado, por favor.

-De acuerdo. Ah –volteó a verlo antes de atravesar la pared y sonrió-, no le digas que te he visto bañarte, no quiero que destroce mi tumba.

El rubio se sonrojó, molesto. Odiaba cuando le hacía ese tipo de comentarios.

-¿Qué pasa? –Sasuke arqueó una ceja al notar su sonrojo

-No es nada –volvió a ponerse serio-. Verás, a decir verdad… odio poder ver fantasmas y finjo que no tengo esa capacidad. Que él me descubriera fue por un descuido mío. Al principio me negué a ayudarlo, pero por su insistencia y terquedad accedí. Luego me sorprendí al saber que se trataba de tu hermano, era algo que nunca me habría esperado. Pero le di mi palabra y, aunque no me guste este poder, voy a utilizarlo para cumplir con mi promesa.

-Mmm… Gracias, Uzumaki –le sonrió levemente-, por ayudarnos a pesar de eso.

El rubio volvió a sonrojarse un poco y desvió la cara.

-En realidad no he hecho gran cosa.

Sasuke no quiso contradecirlo porque seguro el otro se molestaría.

-¿Ya tienen idea de quién es el responsable? –preguntó

-Todavía no –agachó la cabeza-. Pero trataremos de seguir lo que Akatsuki averigüe para ver si podemos serles útiles en algo más.

-Muy bien, entonces desde ahora yo también los ayudaré –apretó los puños con furia-. No perdonaré a quien haya matado a mi hermano.

Naruto asintió. Justo como lo prometió cuando aceptó ayudar a Itachi, estaría con ellos hasta el final.

 

¿Qué pasará ahora que Sasuke sabe la verdad?, ¿por qué le habrá creído tan fácilmente a Naruto?, ¿de qué se dio cuenta Itachi?, ¿los culpables harán otro movimiento? Esto y más en el siguiente capítulo: Sólo confía en mí.

 

 

~~~~~~~~~~ HISTORIA DE UNA FRASE ~~~~~~~~~~

 

V

 

Sasuke y Naruto habían sido los mejores amigos desde que eran pequeños, pero Sasuke ya estaba cansado de ello: él quería ser algo más que un simple amigo.

-Oye, Naruto.

Estaban en el parque comiendo un helado.

-¿Qué pasa, Sasuke?

-Bueno, es que yo… Eh… ¿Tú…? ¿Tú me quieres?

-¡Por supuesto que sí!

El azabache se sonrojó, pero su sonrisa se borró al oír sus siguientes palabras.

-¡Tú eres mi mejor amigo!

-¡¡Yo no hablaba de eso, dobe!!

-¿Ah, no?, ¿entonces a qué te refieres?

-Yo… Yo no quiero ser tu amigo. Yo…

Naruto le dio una patada.

-Auch, ¿qué te pasa, usuratonkachi?

-¡¿Qué me pasa?! –lo miró molesto- ¡Si ya no querías ser mi amigo sólo debiste decírmelo!

Dio media vuelta para irse corriendo, pero Sasuke alcanzó a detenerlo y lo sujetó con sus brazos.

-¡Suéltame, Sasuke! ¡Eres un idiota!

-¡No, espera! –forcejeaban- ¡No me malinterpretes! ¡Eso no era lo que quería decir!

-¿Entonces? –dejó de forcejear, pero seguía molesto

-Yo –le dio la vuelta para verlo de frente-… quiero ser más que tu amigo. ¡Te amo, Naruto! ¡Quiero que seamos novios!

El rubio se sonrojó completamente.

-¿D-De verdad? –el otro asintió- Yo… Yo también… siempre te he amado –agachó la cabeza-, pero creía que no me correspondías, por eso…

-Está bien –le sonrió-, siempre podemos comenzar de nuevo. ¿Y?, ¿aceptas?

-¡Obvio que sí!

 

“Ofrecer amistad al que busca amor es dar pan al que muere de sed”

 

Notas finales:

HIGARY-NOTAS:

Jejeje, una historia sencilla y algo romántica para hoy de cuya frase no recuerdo el autor X.x Y las cosas parecen ir adquiriendo forma en el caso Uchiha, jojojo (Kyuu: El bastardo le creyó muy fácil ¬¬). Sí, me pregunto por qué XD (Kyuu: Tú ya sabes la respuesta -_-) Bueno, como siempre saben que esperaré sus comentarios con quejas, pedradas, flores, jitomatazos, saludos, cebollazos, felicitaciones, amenazas, bombas y demás. Seguiré trabajando en mi nuevo fic, la esperada continuación de S.E.M.E.S. y sin falta la próxima semana les traigo el penúltimo capítulo de Nuestro futuro. Se me cuidan mucho y bye byeeee!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).