CAPITULO IV
MI AMO
El deber de un esclavo es servir ciegamente las ordenes de su amo
(pov’s Sasuke)
Cada centímetro de mi cuerpo en estos momento lo único que corre es mucho miedo, primero se llevan a mi madre y es vendida a un joven rubio, según dice un príncipe, cuando llaman a mi aniki me asuste mucho, algunos querían comprarlo, pero el mismo rubio lo compro…
-ven –me jala del brazo un hombre- siéntate –me lanza al suelo-
-auch –me quejo-
-aquí tenemos a un joven doncel….virgen…
Sabía lo que me esperaba sería vendido, que me harán ahora tengo tanto miedo, si mi oto-san estuviera aquí el no permitiría que sea vendido, durante mucho tiempo le ayudaba a papá a negociar sus camellos, nunca pensé que yo estaría en lugar de uno de ellos, pero esto era peor.
Él está aquí…
Aquel hombre que mando a matar a papá estaba ahí frente a mi dispuesto a comprarme, pero ahí alguien más que me quiere, no me digno a mirar quienes son los que se pelean por mí como dos perros por un trozo de carne
-vendido!!
Vendido? Tengo un amo, soy un esclavo que será de mi ahora tengo mucho miedo…no quiero que me toque….no quiero!!
Siento que alguien está en frente mío, no quiero verle tengo miedo, temo que me lastime
-ve conmigo
Escuche decir…que me valla con esa persona no quiero…
-ahora eres mío…
Soy suyo….soy suyo…no quiero!!!.....tengo miedo!!...
-no –me aferro a mis rodillas-
-has sido vendido ve con tú amo –dice ese hombre-
-no se atreva a golpearlo –dice mi amo- desátalo…
-hai –siento mis manos libres-
-no –me aferro más-
-ven no te haré daño –su voz suena sincera-
-tengo miedo –me separo un poco-
-a mi lado estarás bien
-yo –alzo la mirada-
En frente mío tenía dos hermosos ojos color cielo mirándome y al mismo tiempo estirando su mano para que la tome…
-yo…-no sabía si tomar su mano-
-tranquilo no te haré daño –sonríe-
-hai…-acerco mi mano a la suya- gracias –susurre al tomarla-
-no es nada –besa mi mano-
No sé que me paso pero cuando sentí sus labios en mi mano mi rostro se cubrió de color algo en mi interior me decía que él era muy especial
(pov’s Naruto)
Mi bello ángel me tenía miedo y no los culpo después de todo de lo que vivió me imagino que no va confiar fácilmente en mí.
Después de tanto trabajo al fin siento sus manos sobre las mías, que hermosa sensación siento como que entre mis manos tuviera a la ceda más fina, definitivamente es muy especial.
-vamos –lo ayudo a bajar de la tarima-
-donde –susurro-
-con tú familia –llego donde Kakashi-
-amo? –me mira su madre-
-mira pequeño…tú madre…ve con ella…
-oka-san!! –la abraza llorando-
-tranquilo amor –lo consuela-
-algo más de comprar Kakashi…
-no señor tenemos todo…-contesta-
-Vamos a casa…por cierto –miro al niño- soy Naruto Namikase, como te llamas…
-soy….Sasuke –dice bajito-
-bien….Mikoto e Itachi van con Kakashi en el carruaje, y tu Sasuke vienes conmigo…-lo miro-
-hai –algo asustado-
Es algo raro tener a mi lado alguien tan puro como él, se nota que nunca nadie lo ha tocado, su familia fue con Kakashi y yo lo guíe a mi carruaje, sube y se sienta algo alejado de mí y a la vez asustado.
-vamos –indique-
Íbamos los dos en completo silencio, no quería incomodarlo o asustarlo más de lo que ya estaba, pero tenía que conocer algo más de él…
-Sasuke? –le llame- eh?
Él estaba llorando y a la vez temblaba, en ese momento algo en mi interior se descoloco ver llorar a tan bella criatura me partió el alma, me acerco lentamente a él.
-estas bien…
-shif –lloraba con más fuerza, mientras cerraba sus ojos-
Era fácil de dar cuenta me tenía miedo, me imagino que ha de pasar en esos momentos por su inocente cabeza que lo voy a tomar a la fuerza aquí y ahora
-Sasuke –acaricio su cabello- no te voy a lastimar
-shif –llorando-
-ven –lo jalo un poco y lo abrazo- no te voy a lastimar…
Lo acerco lentamente a mi pecho recostándolo, sus lágrimas mojaban mi pecho, mientras temblaba por el miedo.
-si piensas que te voy a violar estas equivocado, nunca haría tal cosa
-shif…yo
Su cuerpo temblaba mientras lloraba, no dije nada más solo lo abrace protegiéndolo de todo peligro a su alrededor, siento como deja de llorar, lo muevo lentamente
-se durmió
Definitivamente era la criatura más bella, pura y tierna de todo el mundo, su rostro mostraba una pureza incomparable nunca había sentido algo así.
-eres tan delicado –acaricio su rostro-
Poco a poco empezaba a despertar sus hermosos ojos me miraban, ya más tranquilos, sus ojos reflejan el brillo de dos zafiros negros.
-como te sientes? –pregunto-
-lo siento amo –baja la cabeza-
-no bajes la cabeza –alzo su mirada- tienes miedo?
-si…-contesta-
-como una bella criatura como tú llego a ser vendido…
-mi padre… -suspira-
Acaso su padre lo vendió, como es posible que exista gente como ese miserable, juro que le haré pagar muy caro….
-….murió
-que? Tú padre muerto?
Su padre muerto?...por Kami como pensé que su padre lo vendió…si es así la cosa es muy diferente…
-aquel hombre que parece serpiente…llego ayer a mi casa –me empieza a contar- quería comprar nuestras tierras mi padre se negó…luego me vio a mi….y
-te quiso comprar…
-si…pero papá se negó, él amenazo en matarlo, en la noche, llegaron unos hombres, quemaron nuestro hogar…y….y…mataron a papá –llora-
-no llores tranquilo –limpio sus lagrimas- a mi lado no te pasara nada…
-no entiendo, compro a mi madre para la cocina cierto?
-si tienes razón
-mi hermano para guardia
-es muy cierto
-yo yo…para que….no soy útil…los que son como yo…siempre van a la cama –dice cabizbajo-
-sabes –alzo su mirada- tienes razón…te quiero para mi…
-que –se asusta-
-cuantos años tienes?
-catorce –susurra-
-eres muy pequeño…Sasuke –lo miro- tú eres el esclavo más caro que he comprado en toda mi vida
-eh?
-y como tal quiero ser el primero en tu vida, pero –lo miro- no ahora…
-no entiendo…
-en tú cumpleaños dieciséis serás mío, mientras tanto…
-que amo? –me mira-
-quiero conocerte, no voy a forzar estar conmigo
-eh?
-eres especial en tu mirada se nota…una gran pureza…
-pureza?
-los ojos son las ventana del alma, tu alma no tiene maldad, eres inocente y como tal yo te protegeré…-sonríe-
-amo! –se asombra-
-mira llegamos a tu nuevo hogar
Estábamos frente a mi hogar no es tan grande como el de mi padre, yo no vivo con él, al llegar Kakashi abrió la puerta.
-gracias –bajo- ven Sasuke –le ofrezco mi mano-
-gracias –sonrojado tomo su mano-
-este será tú hogar….Kakashi indícale a Mikoto e Itachi sus nuevos aposentos yo llevare a Sasuke al suyo…
-eh? –mira a su familia-
-luego podrán reunirse….Mikoto…Sasuke me conto que cocina delicioso espero deleitarme hoy con su comida…
-claro amo –dice ella-
-vayan –se aleja- vamos
Aun tomado de la mano entramos al palacio Sasuke se encontraba fascinado con todo lo que observaba, mi palacio era hermoso no lo niego.
-Sasuke tú no vas a dormir donde duerme los demás empleados
-eh? Porque amo…
-porque como dije tu eres muy especial…en esta parte de la casa solo duermo yo…nadie más, ni mis odaliscas duermen aquí.
-odaliscas?
-si las conoces
-mi mamá fue una de joven…sirvió al rey Minato…
-enserio!! No lo sabía…luego le pregunto a papá…
Seguimos recorriendo el palacio, hasta llegar a los pasillos de las habitaciones escogí la esta junto a mi habitación…
-esta es tu habitación –abrí la puerta-
-guau –se asombra-
Es una las habitaciones más grandes, las paredes son color de color blanco, la habitación tiene un pequeño juego de muebles como mesa en el centro, en una esquina como tipo escalera esta la cama blanca, con un espejo detrás de la misma, tiene su guarda ropas y baño propio.
-te gusta?
-si…esta hermosa…en verdad es mía?
-si….mi habitación esta a lado –sonrío- toma una ducha, ya te traigo ropa para que bajemos comer –salgo-
-gracias –le escucho-
-que ropa de doy –entro a mi habitación- este es perfecto…
Encuentro una ropa, camisa larga blanca y pantalones del mismo color (tipo aladin) llego a su habitación y la dejo en la cama
-en la cama esta su ropa…
-hai –escucho-
Sabía que no era normal lo que hacía con él era un esclavo pero no quiero tratarlo como tal el ahora estaba a mi cuidado…a su lado tenía un bello zafiro…
-estoy listo –sale cambiado-
-Sasuke –tomo su mano- a partir de hoy serás, el zafiro más hermoso y preciado que he conseguido –sonrío-
No entendió mis palabras ni yo mismo sé que voy hacer ahora solo se que no voy a permitir que nadie lo lastime.
Nadie manda en la voluntad el corazón cuando existe el amor.