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Black Clover por carina_mew12

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Notas del capitulo:

wola a todos/as!!!!! ^^ espero q estén teniendo un buen inicio de semana, jeje... x fin les traje el capi new; weno, si he d ser sincera, iba a subirlo ayer pro staba cansadita y luego m puse a hacer otras cosas y s m olvidó XD en fin, esa s otra historia, mejor vayamos al capi... ¬u¬ esta vez tiene muxas sorpresas

8. Despair

 

- tú...- dijo el moreno de repente- también tienes un artículo del milenio- Ryou, al ver que su sortija descansaba sobre su pecho, la cubrió con sus manos, intentando en vano ocultarla- ¿por qué... por qué también hay uno igual a ti?...

- ...- el peliblanco se estremeció, ¿qué debería hacer? Se suponía que Malik no debía saber nada aún; lo único que pudo hacer fue desviar la mirada y quedarse en silencio

- ¡responde!- desesperado, Malik sujetó al albino por los hombros, sacudiéndolo con fuerza

- Malik... me lastimas...- se quejó Ryou al borde de las lágrimas

- ¡Malik, ya basta!- intervino el tricolor, separando a los otros dos- ¡te estás comportando como desquiciado, ¿qué te pasa?!

- ¡tú lo sabes, ¿cierto Yugi?!- dijo el moreno dirigiéndose al mencionado- ¡¿por qué hay otro igual a él?!

- si quieres saberlo tendrás que calmarte- las palabras del peque parecieron surtir efecto, pues Malik se quedó en silencio y le miró fijamente. Yugi tomó aire, sabía que lo que iba a explicarle al egipcio no sería fácil

- como te había dicho, Ryou, tú y yo nos conocemos desde pequeños

- ¡claro que no! ¡Yo lo conocí hace apenas unos días!

- bien. Trataré de explicártelo, ¿recuerdas la vez que te conté sobre las debilidades de esos tipos?

- sí, ¿pero eso qué tiene...?

- por favor, no digas nada hasta que termine- le interrumpió Yugi antes de seguir su explicación- como te dije esa vez, tanto sus poderes como debilidades fueron determinados por los objetos que usamos en el ritual; pueden parecer muy fuertes, pero su existencia depende de algo que proviene de nosotros, algo así como su "alimento". En el caso de tu yami, él se alimenta de tus recuerdos, eso fue lo que pasó, para seguir existiendo, Marik se alimentó de tus recuerdos, borró tu memoria, es por eso que no recuerdas a Ryou...

- ¡imposible! ¡Nadie puede arrebatarte tus recuerdos!

- en primera, ellos no son cualquiera. Y en segunda, todo se volvió posible desde que ellos aparecieron

- bueno, en eso tienes razón, pero...- se quedó callado un momento, y de pronto, se dio cuenta de algo importante- espera un momento, si lo que dices es verdad y me han quitado mis recuerdos... Yugi, ¿qué te han quitado a ti?

- p... pues...- Yugi se quedó helado ¿debería decirles? No, no podía. Sabía lo impulsivo que era Malik, si le contaba que lo que le arrebataba Atemu era su vida, seguramente lo enfrentaría... estaría en peligro como hace unos instantes- no es... nada importante...- profirió nervioso en su defensa

- no mientas Yugi, dime ¿qué te ha hecho ese tipo?- preocupado, el moreno vio cómo los ojos del peque se humedecían- por favor, dímelo...- susurró posando sus manos sobre sus hombros y poniéndose a su altura- Yugi... - En ese momento, alguien llamó a la puerta, siendo ésta abierta poco después.

- chicos, será mejor que vayan a casa- habló el abuelo de Yugi entrando a la habitación- Yugi necesita descanso, y supongo que Ryou también- dijo sonriente mirando a los chicos

- vamos Ryou- dijo el egipcio poco después- te llevaré a tu casa- caminó hacia la salida, siendo seguido por el albino- te llamo más tarde, Yugi- habló sonriente antes de salir de la alcoba. Salomon acompañó al par de jóvenes a la salida, viéndolos alejarse desde la entrada de su hogar- ¿y qué hay de ti?- preguntó de repente al peliblanco mientras caminaban- ¿qué es lo que se supone que ese tipo necesita de ti?

- mi... mi calor...- respondió sonrojado- absorbe mi calor corporal

- así que es por eso que estás vestido así- Ryou asintió levemente- ¿y estarás bien?

- sí. Mi calor se puede restaurar, aunque sea lentamente...

- ¿y qué hay de Yugi? ¿Tú sabes lo que le hace ese sujeto?

- no realmente. Yugi no me ha...- mas sus palabras se vieron interrumpidas al recordar una conversación entre Yugi y su yami...

"Bien, los ayudaré, pero... Yugi tendrá que pagarme..."

"¿Qué sucede? Creí que no le temías a la muerte"

"Hoy estoy de buen humor, así que te daré la oportunidad de que me pagues con otra cosa que no sea tu vida..."

Esas palabras resonaron en su mente, sería posible que... no, eso era imposible, aún para aquellos espíritus. Pero, ¿y si fuese verdad? ¿Si realmente le estuvieran arrebatando la vida a Yugi? Aún si fuese verdad, no podía decirle nada a Malik, pues si Yugi hubiera querido, se lo hubiera dicho, no entendía el por qué, pero Yugi prefirió guardar su secreto, y él también lo haría

- Yugi no me ha dicho nada...- terminó su frase poco después, sonando lo más convincente posible

- entiendo- parecía que Malik no había notado nada, era un verdadero alivio

- e... entonces... Malik, ¿nos crees, verdad?... Sobre tus recuerdos

- sinceramente, eso no me preocupa ahora, ayudar a Yugi es mi prioridad. Tengo que ir a mi casa, nos vemos después- aceleró sus pasos, dejando al peliblanco atrás.

**********************************

- [[pobre Yugi]]- pensaba Ryou mientras entraba a su hogar mientras suspiraba, abatido. Se quitó el abrigo y demás cosas que traía puestas, al parecer, su calor corporal se había restablecido- [[debí decírselo a Malik, quizá él pueda hacer algo por Yugi... pero,... pero probablemente ocurriría lo mismo que pasó hoy...]]- suspiró de nuevo y miró su sortija. La tomó entre sus manos y sonrió

- ¿qué ocurre contigo?- habló de repente Bakura desde el rompecabezas antes de aparecer frente a su hikari- ¿por qué te ves tan feliz?

- gracias- profirió el menor con una sonrisa aún más grande- de no ser por ti, seguramente hubiese salido herido en esa pelea

- no te confundas, niño- habló prepotente su yami, cruzando sus brazos- no los detuve porque estuviese protegiéndote; te lo dije antes, no puedo permitir que mueras hasta que tu alma sea mía

- ya veo- agachó su mirada y sujetó el anillo del milenio con más fuerza- en ese caso, no creo que debas seguir esperando- su yami le miró confundido- Bakura, mi alma...

- ¡espera!- le interrumpió Bakura casi a gritos

- te engañé- dijo Ryou comenzando a reírse, y más aún al ver el rostro avergonzado de su yami, quien desapareció momentos después, ingresando al artículo milenario. El albino no podía parar de reír, ver el rostro sonrojado de Bakura era una de esas cosas que sólo se ve una vez en la vida; mas sus risas se vieron interrumpidas en cuanto escuchó voces en la entrada de su hogar.

Poco después, su padre entró a la casa tambaleándose, sin duda estaba ebrio; tras él entró otro par de sujetos, en el mismo estado que él, riéndose y compartiendo una botella de coñac.

- ¡oh, Ryou, llegaste antes!- exclamó su padre contento al ver al menor- no esperaba que estuvieses en casa

- yo... sólo vine por algo que olvidé- respondió Ryou nervioso- me voy, tengo que regresar a clases,... y no quiero importunarlos...- hizo una reverencia y, literalmente, corrió a la salida, mas fue interceptado por los hombres que acompañaban a su padre

- ¿cómo? ¿Te vas tan pronto?- le dijo uno, abrazándolo- ¿por qué no bebes un poco con nosotros?- le acercó la botella, intentando que el albino tomase su contenido

- no... no gracias...- con una mano, Ryou alejaba la botella con sus manos, mientras que con la otra intentaba zafarse- no bebo, y... además, soy menor de edad...

- ¡vamos chico, no seas tímido!- el otro sujeto lo sujetó de las muñecas para que no se moviese; su compañero sujetó al peliblanco por el mentón, obligándole a separar sus labios. Justo estaba por darle a beber el primer sorbo cuando el padre de Ryou tomó a su hijo y lo separó de ellos

- van a lastimar a mi precioso Ryou- reclamó el hombre, abrazando al mencionado- hay otras formas más fáciles- le arrebató la botella a su compañero y le dio un sorbo, acumuló el líquido en su boca y unió sus labios con los de su hijo, obligándole a beber el coñac que había retenido en su boca.

En cuanto su padre lo soltó, Ryou comenzó a toser, intentando expulsar el alcohol de su sistema. El mayor volvió a sujetarlo, y usando la misma técnica anterior, le obligó a beber casi todo el líquido que quedaba en la botella. Ryou terminó de rodillas en el suelo, mareado y con náuseas, pues su organismo no estaba acostumbrado al alcohol. Con mirada borrosa, vio cómo los presentes le observaban con malicia.

- tenías razón, tu hijo adorable- escuchó decir a uno de los amigos de su padre a éste- ¿nos dejarás jugar con él un rato?- Ryou se estremeció al escuchar lo último, mentalmente, rogaba porque su padre detuviera aquello

- sólo procuren dejar algo para mí- fue hasta la cocina, regresando un rato después con otra botella en mano. La abrió, tomó una silla y se sentó frente a Ryou, dispuesto a disfrutar el espectáculo que le ofrecerían los presentes. Los otros dos rieron levemente y acomodaron al peliblanco en el suelo mientras que éste no hacía más que llorar.

- [[¿por qué, papá?]]- divagaba en sus pensamientos mientras aquellos hombres le desnudaban. Estaba demasiado turbado en parte por el alcohol y en parte por lo que acababa de hacer su padre; lo entregó a dos completos extraños- [[lo odio...lo odio... quisiera que desapareciera... quisiera...]]- Bakura...- murmuró entre sollozos, sin ser escuchado por los demás presentes, pues tenían toda su atención centrada en admirar y acariciar la tersa piel de aquel joven- te daré mi alma si quieres,... pero deshazte de él...

- no puedes decir eso a estas alturas- habló su yami telepáticamente desde la sortija

- claro que puedo... ¿quieres mi alma, cierto?- le respondió Ryou mentalmente- bien, te la daré, pero deshazte de ese hombre...

- no... no puedo...

- se supone que deberías cumplir mi deseo... y lo que más quiero es que deshagas de él... Bakura, mi al...

- ¡no lo hagas!- volvió a interrumpirle- no es necesario que lo hagas...- el anillo del milenio, el cual fue arrojado al piso junto con la ropa del albino, se iluminó, soltando una ráfaga de viento helado que hizo volar a aquel par de hombres lo suficientemente lejos de Ryou; del suelo emergieron delgadas estalagmitas que se retorcían cual tentáculos, sujetando al padre de Ryou y a los otros dos contra el suelo, inmovilizándolos.

Ryou se levantó y miró a su alrededor; tanto su padre como el otro par de sujetos intentaban soltarse mientras murmuraban cosas incomprensibles; brotaron nuevas columnas de hielo, las cuales se enredaron en el cuello de los atacantes de Ryou, cortándoles la respiración. Una vez que los tres quedaron inconscientes a falta del aire, el hielo se dispersó y finalmente apareció Bakura junto a su hikari.

Lo único que pudo hacer Ryou fue llorar al mismo tiempo que le agradecía; lo que más deseaba en ese momento era ir con su yami y abrazarlo con todas sus fuerzas, pero sabía que si lo tocaba, indudablemente moriría congelado. Bakura fue por el abrigo de Ryou y lo colocó en su espalda antes de desaparecer nuevamente...

****************************

Mientras, en casa de Yugi...

Almorzaba en silencio mientras veía de vez en cuando a su abuelo, quien dormía tranquilamente en una silla junto a su cama. Suspiró largamente en cuanto terminó sus alimentos; levantó la charola que tenía sobre sus piernas y luego se puso de pie. Dejó la charola sobre el buró y regresó a su cama, quitando una de sus cobijas para cubrir a su abuelo.

- perdóname abuelito- susurró Yugi- sólo hago que te preocupes- besó suavemente su mejilla y se dispuso a regresar a su cama, pero al darse la vuelta se encontró de frente con su yami.

Éste, rápidamente lo tiró sobre la cama y se subió en él, cubriéndole la boca con una de sus manos mientras que la otra lo sujetaba con fuerza de la muñeca. Yugi comenzó a retorcerse y patalear, intentando sacarse a Atemu de encima.

- será mejor que guardes silencio si no quieres despertar a tu abuelo- habló el mayor en voz baja, quitando su mano de los labios de su hikari. Apenas terminó de hablar, besó el suave cuello del peque, recorriéndolo lentamente con su lengua

- e... esp...- las palabras de Yugi se vieron interrumpidas cuando Atemu depositó un casto beso en sus labios, que no tardó en volverse impetuoso y desesperado, como si la vida se le fuese en ello.

Por más que Yugi gritaba, sus gemidos eran sofocados en la garganta del otro, quien ahora no sólo lo besaba, sino que también recorría su pecho con su mano libre, la que el peque, sin éxito alguno, había intentado detener. Unos momentos más tarde, Atemu soltó sus labios para regresar a su apetecible cuello, lamiéndolo ávidamente, recorriendo cada centímetro de él hasta llegar a sus orejas.

- no... no más...- suplicaba Yugi casi en llanto, cerrando sus ojos. Inesperadamente para el peque, su yami se detuvo, obligándole a mirarlo y saber por qué había parado. Abrió solamente un ojo para examinar la situación, mas su sorpresa fue mayúscula al ver el rostro de su yami cerca del suyo, con una expresión que no supo descifrar.

Abrió el segundo ojo y le miró fijamente; aquel par de ojos carmesí no se veían tan tenebrosos como siempre, más bien... parecían tristes... Atemu soltó su muñeca y entrelazó su mano con la de su hikari, para luego envolverlo en un abrazo, haciendo que se sonrojara de inmediato... Yugi podía sentir el pecho de su yami golpeando enérgicamente el suyo, logrando que éste hiciera lo mismo; ¿qué ocurría?, ¿por qué de pronto su corazón se había agitado tanto?

- Yugi- musitó el mayor cerca de su oído, logrando así que el rojo en las mejillas del peque se hiciera más intenso... se separó levemente del cuerpo del otro y abrió sus labios, listo para decir algo, mas las palabras jamás salieron. Resignado, Atemu lo abrazó nuevamente, juntando su mejilla con la de su hikari, sintiendo la calidez de su cuerpo y su agitado corazón.

Sostuvo más fuerte su mano, logrando arrancarle un débil gemidito de sorpresa. El aliento de Yugi le golpeaba la nuca, mientras que el peque se había quedado completamente paralizado, sintiendo el cuerpo de su yami sobre el suyo y preguntándose si aquel ser realmente no era humano...

**************************

Un par de horas después, en casa de Malik...

Sentía el agua empapar su espalda, por lo que, inevitablemente, despertó. Se levantó del suelo, mirando confundido a su alrededor

- ¿qué hago aquí?- dijo Malik para sí mismo, sintiendo un fuerte dolor en la cabeza. Se puso de pie dificultosamente, pues todo el piso estaba cubierto del agua. Al escuchar el agua cayendo, miró hacia la tina, encontrándola completamente llena y desbordando mucha agua, que seguramente fue la que la ayudó a despertar. Estiró su brazo y cerró la llave, observando por un momento el desastre del baño- ¿por qué duele tanto?- se quejó el moreno, llevando una de sus manos a su nuca y mirándola poco después, estaba empapada de sangre- ¿pero...?- alcanzó a divisar en el suelo un objeto dorado, el cual no tardó en reconocer como su cetro del milenio; mientras le miraba, su mente empezó a recordar lo que había ocurrido horas antes...

--Malik Flash Back-

Cerró la puerta con violencia en cuanto entró. Se dirigió al baño, y una vez ahí, se miró frente al espejo, quedándose quieto unos instantes antes de tomar entre sus manos el cetro del milenio que cargaba en la parte trasera de sus prendas.

- es una estupidez- habló en voz alta mientras observaba aquel artículo- es imposible, simplemente imposible... nadie puede robarte tus recuerdos...- se repitió mientras dejaba el cetro sobre el lavabo.

Se apartó del espejo y fue a la bañera; colocó el tapón y abrió la llave del agua, dejando que la tina se llenase mientras se desvestía. Apenas se quitaba la camisa cuando sintió que alguien lo observaba; se sacó la playera rápidamente, dirigiendo su vista hacia atrás, encontrando a su yami con una expresión seria. Aquel gesto en su rostro le pareció incluso más anormal que de costumbre, así que el moreno, por instinto, empezó a retroceder hasta que llegó a la pared; comenzaba a deslizarse a la salida cuando algo parecido a una trampa de arena atrapó uno de sus pies, inmovilizándolo.

Hizo el vano esfuerzo de zafarse mientras veía cómo su yami se acercaba más a él, pero cuando vio que Marik ya estaba prácticamente a su lado, se preparó para darle su merecido, cerró los puños con fuerza, listo para lo que viniese, sin embargo, lo que ocurrió ni siquiera él lo anticipó; el mayor acarició su mejilla, acercó su rostro y le robó un beso.   

- ¡¿por qué hiciste eso, idiota?!- gritó sorprendido el moreno, cubriéndose la boca con las manos. Marik apartó sus manos y volvió a besarlo; mas Malik se negaba a cooperar y apretó fuertemente sus labios.

- ¿estás asustado?- le murmuró Marik al menor al apartarse un poco, tocando su pecho desnudo con una de sus manos- estás temblando- advirtió al sentir los escalofríos que recorrían el cuerpo del otro

- cállate y suéltame, engendro - ordenó autoritario Malik, evitando ver los ojos de su yami. Marik bajó levemente, y con su lengua, comenzó a recorrer el cuello del egipcio hasta su pecho con su lengua mientras que sus brazos lo asían por la cintura- e... espe... de...- Malik no podía terminar sus palabras, pues había algo que se lo impedía, una extraña sensación que no tardó en recorrerle de pies a cabeza.

Con sus manos intentó quitarse a Marik de encima mientras que con la mirada buscaba desesperadamente algo que le ayudase a salir de aquella situación. De pronto recordó el cetro del milenio, miró hacia el lavabo; tenía suerte, el lavamanos no estaba tan lejos, estiró el brazo y cogió su artículo del milenio, lo sostuvo firmemente, y con todas sus fuerzas, golpeó a Marik con él en la cabeza. No sólo logró que el cráneo del otro se desintegrase en arena, sino que también hizo que lo soltase; quiso correr, pero había olvidado la arena que lo apresaba del pie, e inevitablemente calló, golpeándose la cabeza con el lavabo en el proceso...

--End Flash Back-

- ¡Malik!- le llamó Ishizu, golpeando la puerta, devolviéndolo a la realidad- ¡Malik, ¿está todo bien?! Llevas mucho tiempo ahí dentro... ¡Malik!

- ¡ya voy!- Malik abrió la puerta, dejando que la ojiazul entrara y viera el desastre en el que estaba convertido el baño

- por dios, ¿qué pasó aquí?- exclamó la chica, sorprendida

- estaba por darme una ducha, pero me resbalé y... y creo que perdí la conciencia en algún momento

- ¿y estás bien?- Ishizu acarició los cabellos de su hermano, notando enseguida la herida que tenía en la cabeza- ¡oh, querido, este golpe se ve serio, tenemos que llevarte al hospital!

- estoy bien Ishizu, sólo es un golpe

- aún así, quiero estar segura- tomó la mano de Malik y juntos se dispusieron a ir al hospital, no sin antes ponerle una camisa al egipcio...

***************************

Al final no había sido un golpe grave; afortunadamente, la contusión no dañó el cerebro. Malik e Ishizu regresaron a casa, y una vez que el moreno comió, su hermana le ordenó ir a su alcoba a descansar, ya se encargaría ella de limpiar el baño.

Pero en cuanto Malik entró a su habitación, supo que algo no estaba bien; su cuarto no estaba como recordaba, tenía un orden completamente distinto, sin mencionar que algunos de los objetos ni si quiera le eran familiares. Recorrió el lugar lentamente, como temiendo que algo fuese a pasar; pero en cuanto estuvo frente a su librero, no pudo evitar que el terror lo invadiera.

- no... no es posible...- habló para sí mientras tomaba un libro escrito en egipcio, lo miró y luego lo arrojó al piso. Tomó otro, varios más, cada uno de ellos escrito en su lengua nativa, pero todos terminaron como el primero, en el suelo- no, no, no... esto no puede estar pasando,... no... puede...- corrió a su cama, se arrodilló en el piso e introdujo su mano debajo de ella, sacando el libro que había traído a sus yamis a ese mundo... con manos temblorosas, miró la portada y luego comenzó a hojearlo desesperadamente- ¿por qué? ¿por qué?...- se repetía, poniéndose más nervioso- es simplemente imposible,... pero... ¿por qué... por qué no puedo leer ninguno de mis libros?...

 

Continued...

Notas finales:

-suspiro- esta aquí, x hoy... ñam, stoy en un predicamento, ya s m acabaron los capis escritos XD aún no tengo el capi 9 a chompu, s supone q ya iba a empezarlo pro m puse a escribir otro capi d otro fic, jojo, en cuanto termine ese m sigo con éste ^^

Atemu: ¬¬ creo q tu problema sq t distraes demasiado y empiezas a hacer una cosa sin terminar otra...

- ^^U jeje, eso lo sé... voy x una gelatina

Atemu: >.< termina d actualizar primero!!!

- ayyy ¬¬ bueno, ya... pues como siempre, espero hayan disfrutado el chapter, y x favor, no olviden los reviews!!!

lo q me recuerda ^^ gracias x los reviews del capi pasado, jojo, m animaron muxo

weno, antes d irme, y si uds pueden, m gustaría q vieran mi videito:

http://www.youtube.com/watch?v=3687Vy0FviY

¬¬ aunq no s xq motivo, causa, razón o circunstancia s repite sin sonido... pro spero q lo puedan ver...

^^ nos leemos en el capi 9!! chau!!


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