Capitulo 9: tomare tu mano… .
¿Y que me dices?...
No lo se, nunca he salido al mundo exterior…-baja su cabeza- me da cierto miedo…
Tranquilo…-yami le coloca una mano en su cabeza- ninguno de los dos, te dejara solo…
El menor abre los ojos de sobre manera, se sonroja y baja la mirada, con una leve sonrisa susurra:
De acuerdo…
¡Preparemos las maletas pues!..-dice animada himeko, quien lo toma de la muñeca y lo lleva a su cuarto, claro seguidos por el (celoso) moreno.
“No entiendo…”
Piensa aquel niño, que se dejaba guiar por la pelinegra.
“Este calor que mi invade…”
La pelinegra va a su cuarto, comienza a sacar prendas de su armario y meterlas en una maleta, mientras reía animadamente.
Viajaremos en barco…-dice animada- a yami le marea viajar así jajajajajajaja…
¡¡¡NO ES CIERTO!!...-grita sonrojado el moreno- ¡¡no le creas yugi-kun!!...
El que lo niega, lo es…-dice picara la joven.
¡¡CALLATE!!...-grita el moreno.
“¿Qué es esto?... ¿Qué es… esta sensación?...”
Jajajaja…-el menor comenzó reír en voz baja, hasta que su risa se volvió más fuerte, más clara, hasta volverse una carcajada sonora y feliz- JAJAJAJAJAJAJAJA
Los mayores lo miraron extrañados, el menor, seguía riendo, riendo como un niño pequeño, tomo su estomago y una cuantas lágrimas de alegría brotaron de sus ojos muertos.
“¿Me estoy riendo?... ¿esto es lo que llaman “risa”?... ¿esto es…lo que llaman “felicidad”?”
Es hermoso…-murmura entre risas el menor- reír es hermoso… es como una melodía… jajajajaja- soltaba entre risas el pequeño…
¿Nunca has reído?...-pregunta el moreno.
Jamás…solo de pequeño y fue hace tanto que no me acordaba de cómo se sentía...-murmura con una gran sonrisa.
Los mayores se miraron sonriendo, de la nada, acompañaron al chico en la risa, los tres individuos reían a más no poder, no pararon hasta que su estomago dolió, yugi respiraba agitado, pero sonriendo.
Gracias…-murmura el chico tiernamente, con una sonrisa tierna, pero con su mirada perdida- gracias…
Yugi-kun…-yami lo abraza por los hombros y recarga su barbilla en la nuca del chico
¿yami?...-murmura sonrojado
Ha sido solo un impulso mío… -susurra- disculpa… pero….quiero tenerte en mis brazos…-esto se lo dijo al oído, para que nadie más lo oyese.
El menor abre los ojos de sobre manera, sus mejillas se pintan aun más de rojo, pero, guardo silencio y se dejo abrazar, cosa que hizo enojar a la pelinegra que miraba la escena con celos.
Yami…-llama la pelinegra- ¡SUELTALO!...
Jajaja…¿y sino?...-pregunta desafiante apretando su abrazo.
Hijo de……..-la joven lo mira con ojos de bestia y un aura negra la cubre, el moreno suelta al menor, no por una orden de ella, sino por temor que la seguridad del joven corriese peligro… (si claro…¬¬)
No te enojes hermanita… -dice divertido mientras suelta al pequeño.
Ggggggggh…-ruge la pelinegra entre dientes.
No entiendo….- murmura el menor sumamente confundido.
*al día siguiente*
Entre una gran multitud de gente, tres individuos caminaban, dos de ellos se tomaban de las manos, el moreno sonreía mientras apretaba la mano del moreno.
No te soltaré yugi-kun…-le dice alegremente
Maldito…-murmura enfadada himeko quien estaba detrás de ellos.
Jajajaja….-ríe el menor, mientras devuelve el apretón del moreno.
Yugi, era feliz, aquellos sonido, aquel aire, el calor de las personas, el bullicio de la gente, lo alegraba, le daba paz, era algo nuevo para el, pero… le agradaba…y mucho…
De toda la gente en movimiento, solo una se mantenía quieto, un hombre de mirada gris y pelo negro, quien fijo su mirada en el menor y al verlo, sonrió de lado.
“Es el…”