12º SEDUCCIÓN
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--------------------------------------------------------- Sábado ---------------------------------------------------------
- Law, te voy a pedir un favor
- Dime
- ¿Podrías encargarte de los cuidados de los pacientes de las habitaciones 503, 505, 506, 507, 509 y 512?
- Claro Paulie, sólo espero que no sean cuidados muy severos
- No lo son, las enfermeras encargadas decidieron dejarte ese pequeño trabajito. Todos los pacientes de esas habitaciones tiene fracturas o dislocaciones, sólo revísalas y llévales comida, después de eso puedes ocuparte de otros asuntos
- Ok, no te preocupes
El ojeroso hizo caso a su primo con pequeña pesadez, la verdad, era que no le agradaba mucho la idea de estar de “enfermera” para con algunos pacientes, pero en fin, mientras más experiencia tuviera, mejor para él.
Law atendió rápido y tranquilo a los pacientes de las primeras 5 habitaciones, les dejó comida y les provisionó agua. Quien le traería “complicaciones” era el paciente de la habitación 512. Entró con la carretilla donde llevaba la comida sin mirar al paciente, solo se aseguraba de que la sopa no se derramara. Revisó el historial, cuando leyó el nombre del huésped se tensó y subió su recelosa mirada hasta encontrarse con los ojos del afectado, quien también lo miraba sorprendido. Trago saliva y se acercó cuidadoso al otro.
- ¿Tú? – dijo sarcástico el pelirrojo
- Tsk, que…. ¿te vas a quejar?
- No, es solo que no me esperaba que fueras tú el que me cuidaría hoy
- Sólo será por este turno, no te hagas ilusiones
El ojeroso revisó tenso el hombro del pelirrojo, desató cuidadoso las vendas, como si fuera a romperse y comenzó a palparlo con sumo cuidado. El sonrojo no se hizo esperar en los jóvenes; Law empezaba a atiborrarse de nervios al tocar la blanca piel del pelirrojo con una delicadeza fina; por su lado Kidd se empezaba a tensar y sus latidos comenzaron a acelerar al saberse tocado tan suavemente por el moreno. No cruzaron palabra alguna durante la revisión.
- Aquí está tu comida, luego vengo para recoger la bandeja – dijo el ojeroso dejando la bandeja sobre las piernas del pelirrojo
- ¿No vez que no puedo comer con una sola mano? Se me derramaría la sopa, sabes que no debo mover mi otro brazo – decía incómodo Kidd
- Si se puede…... además ese no es mi problema…. Arréglatelas
- Mala respuesta, podría quejarme y hacer que te despidan
- Tsk – Law sabía que ese hospital era su futuro, aunque dudaba que lo despidieran, no tenía la mas ínfima intención de ganarse mala fama
De mala gana se acercó al pelirrojo, se sentó al filo de la cama y comenzó a darle de comer. Las manos del moreno temblaban con notoriedad mientras observaba como el pelirrojo abría la boca para recibir las cucharadas de sopa. Inconscientemente se lamió la comisura de los labios al recorrer con la mirada los carnosos labios del pelirrojo. Pasado un rato, Law terminó su labor con el pelirrojo y se dispuso a retirarse.
- Oye acomódame la almohada
- Tsk – se acercó y acomodó la almohada del pelirrojo detrás de su espalda porque este último aún permanecía sentado
- Abre las ventanas que hace calor
El ojeroso nuevamente hizo caso con algo de incomodidad.
- Tápame un poco que tengo frío – dijo nuevamente el pelirrojo
- Primero tienes calor y ahora frío ¿me parece o estás jodiéndome? Además, eso lo puedes hacer tú
- Ejem…… ¿¡Enfermera!? ¿¡Enfermera!? ¡Auxilio!
- ¡Oye! ¡Que rayos crees que haces! – reclamó Law acercándose para cumplir el pedido de Kidd
El pelirrojo lo tomó del brazo y lo atrajo hacia él, lo miró dulcemente y acercó sus labios a los del moreno. Law cerró los ojos, dejándose llevar por el beso; abrieron sus cavidades dando paso a sus dos desesperadas lenguas ansiosas por saborearse las cuales se enredaron con suma rapidez.
TOC – TOC – TOC
- ¿Se encuentra bien? Escuchamos que alguien nos llamaba – preguntaba una enfermera desde fuera de la habitación esperando la respuesta del huésped
- Tsk – chasqueó el pelirrojo separando sus labios del moreno – se ha equivocado de habitación, aquí estoy perfecto, agradecería que me dejara descansar
- Ok disculpe las molestias – dijo amablemente la enfermera para después retirarse
Kidd y Law retomaron el intenso beso hasta que el pelirrojo empezó a recorrer la espalda del ojeroso con la mano que podía mover.
- Ah……… espera…... – dijo Law como pudo separándose del pelirrojo
- Ah…... ¿sabes como puedo calmar esto? – dijo Kidd señalando un bulto entre sus dos piernas que sobresalía de entre las delgadas frazadas.
- Yo…... yo…… - trataba de decir el ojeroso a la vez que se sonrojaba
- No puedo dejarlo así…… haz algo al respecto….
- N…. no puedo………. Me voy para que te lo atiendas tu solo
- A mí no me gusta masturbarme
- P…… pero…… no puedo hacer nada
- Yo si creo que puedes hacer algo – dijo Kidd mientras lo tomaba del mentón
- N…… ¡No!.... me…….. me voy – dijo para luego retirarse de la habitación con un más que notable sonrojo
Law se paró recostando su espalda en la fría pared lejos de la habitación del pelirrojo, bufeó cerrando sus ojos e intentando calmar sus nervios.
Kidd se quedó incómodo en la habitación con el deseo en fresco. “Mierda, esta me las va a pagar, ya recibirá las consecuencias de provocarme” pensaba sarcástico el pelirrojo.
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------------------------------ Tiempo después…… (Aproximadamente 1 mes u.u) ---------------------------
---------------------------------------------------- Narra Sanji ----------------------------------------------------------
Con unas simples palabras llevé a Zoro a los jardines para según yo, disfrutar de la vista; este me siguió inocente, me impresionaba que hasta ahora no me haya pedido que hagamos “eso”. Hasta el momento todo había sido besos, abrazos, caricias, tomadas de mano y frases cariñosas; yo estaba dispuesto a dar el siguiente paso, me era imposible resistirme más sabiendo que ese irresistible cuerpo podía ser mío.
Busqué un lugar alejado y cubierto por arbustos para evitar que nos molestaran; nos sentamos en el suave césped, él sacó de su mochilita una pequeña merienda suponiendo que estábamos ahí para comer, dado que era la hora de receso; repartió alegre las raciones mientras lo miraba algo aburrido e impaciente.
- Listo, a comer ^^
- No tengo hambre – le dije serio
- ¿Mn? Pero si me dijiste que tenías mucha hambre, por eso vinimos a merendar al jardín
- Me apetece…….. otra cosa…... – dije acercándome a él
- N…. no comprendo bien….
- Está bien que parezcas algo tonto, pero cualquiera se daría cuenta de qué es lo que quiero…... – le dije incómodo para luego agarrar su entrepierna por encima de la ropa
Mi peliverde se tensó un poco y empezó a respirar aceleradamente, supongo que estaría algo nervioso.
- Dos años…… deseándote…. – le dije seductoramente en el oído mientras desabrochaba su camisa.
- Sanji…… yo…….. yo……… también te deseo……. Pero…….. no quería apresurarme…….
- En vez de apresurarte…… me pareció que ibas demasiado lento.…...
Le saqué la camisa, desabroché su pantalón y se lo quité junto con su bóxer dejándome ver su grande hombría.
- Valla…… mira de lo que me estaba perdiendo – le dije seductoramente con una sonrisa provocando que se sonrojara
Nos empezamos a besar dulcemente; nuestras lenguas jugueteaban dentro de nuestras cavidades, saboreándose. Rompí el beso para empezar a desabrochar mi molesta camisa mientras él desabrochaba mis pantalones. Me puse de pie luego de quitarme los zapatos y la camisa para bajarme el pantalón y mi bóxer quedándome también desnudo.
Él permanecía sentado a la vez que recostaba su espalda en el tronco del árbol mientras me observaba sonrojado. Me arrodillé a su altura y empecé a besarle el cuello, él solo suspiraba levemente; bajé de golpe a su hombría, tomándola con cuidado para luego introducirla de golpe a mi boca; comencé con un rápido sube y baja, engullendo lo más profundo que podía mientras una de mis manos acariciaba su muslo. Lo miré de reojo; su rostro había cambiado, ya no parecía tímido, todo lo contrario, ahora me miraba desafiante mientras se lamía la comisura de los labios. Levantó mi mentón logrando que sacara su miembro de mi boca y lo atrajo para besarme al mismo tiempo que me tumbaba al césped logrando estar sobre mí. Mientras nos besábamos, sus manos recorrían mi cuerpo lentamente, rompió el beso para luego comenzar a besar y morder mi cuello mientras sacudía sus caderas logrando mas contacto entre las erecciones.
- Mhnnn
Hizo un rápido recorrido por mi pecho, deteniéndose un momento en mis pezones para saborearlos y pellizcarlos, luego bajó lentamente por mi torso mientras le daba ligeras mordidas. Parecía que mi piel se derretía con cada contacto suyo, mi cuerpo deseaba con desesperación ser poseído por él. Llegó a mi hombría y empezó un suave sube y baja.
- Ah…... Zo…….. Zoro……. Mhn…... – me retorcía por el placer mientras tiraba de sus verdes cabellos
Pasado un rato me vine en su boca – dis…… culpa……. – le dije sonrojado mientras nos observábamos; él sonrió pícaramente para luego tragarse mi semilla y lubricar con s saliva tres de sus dedos – Relájate – me dijo dulcemente mientras metía el primer dedo en mi entrada; intenté relajarme pero la invasión era dolorosa y me ponía nervioso, luego metió el segundo logrando tensarme más por el dolor – Ah…... du…… duele… - le dije como podía pues él había retomado la felación – el dolor…… pasará….. – dijo apartándose de mi hombría para subir y lamer mi torso. Pasado un rato metió el tercer dedo y comenzó a embestir mi entrada con ellos; el dolor se fue disipando poco a poco logrando que me impacientara – Mhn……… lo……. Harías…. ¿ya?.... – le dije seductoramente logrando que me mirara y sonriera; retiró sus dedos e introdujo su miembro lentamente.
- Mhmm……… estrecho…. – le dije mientras sacudía mis caderas intentando que se introdujera más
Colocó mis piernas en sus hombros – Ah…. Que flexible…... eres…… - me dijo para luego empezar a embestirme suavemente durante un rato – Ah……. Ah…… m…... Más…... Rápido…... – suplicaba entre gemidos. El calor me envolvía por completo, era sofocante tanto placer…….. – Ponte…… de a cuatro…… - me dijo jadeante mientras retiraba su hombría de mí. Hice caso inmediatamente, apoyé mis codos y mis rodillas en el pasto y lo sentí entrar de golpe – Ah…… - gemí fuertemente por el dolor – Mhn……… discúlpame…... ha…. – me dijo mientras empezaba a embestirme más rápido que lo anterior.
- Ah…... ah…….. a…….. ahí…….. ah……. Más……...
Zoro rozaba una y otra vez ese lugar en mi interior que me volvía loco de placer; tomó mi cadera y empezó a marcarme el apresurado ritmo de sus estocadas mientras su legua recorría mi espalda lentamente. Pasado un rato, juraría que nuestros gemidos se escuchaban por todo el jardín…… pero supongo que nadie andaba cerca como para interrumpir. Mi peliverde comenzó a masajear mi miembro para que lograra venirme avisando que el final estaba cerca – Ah…… Zo…... Zoro…... más duro…... – suplicaba como último pedido antes de que terminara; y me izo caso, sus embestidas aumentaron el ritmo y fuerza mientras sentía su agitada respiración en mi hombro derecho. Colocó su mano sobre la mía anunciándome que estaba en su clímax – Ha…… un……. Poco…… ha…… mas – me dijo jadeante para luego de un rato venirse dentro mío haciendo yo lo mismo en el césped. Salió lentamente de mí mientras sentía ese cálido líquido bajar por mis muslos; una vez estuvo fuera, se sentó, cogió su mochilita y sacó papel higiénico. Por mi parte solo me senté a observarlo. Me entregó un poco y nos dispusimos a limpiarnos.
- Me gustó – le dije sonrojado mientras nos vestíamos
- ………………………………….
- ¿A ti no?
- Qué dices……….. me encantó……. – me dijo rojo como un tomate
- Jajajaja……….. supongo que deberíamos hacer esto en vez de merendar en el receso – le dije pícaramente logrando que se sonrojara más de lo que estaba
- Yo………. – no lo dejé terminar y aprisioné sus labios con los míos mientras lo abrazaba del cuello hasta que el timbre sonó indicando que el receso había terminado
Me aparté, le sonreí y nos dirigimos sonrientes al aula mientras conversábamos alegremente.
(Narro yo ^.^)---------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------
- ¿E…. esos…. No eran Sanji y Zoro? – preguntaba sonrojado el pecoso mientras miraba al par alejarse
- P…. pues creo que sí…….. entonces ellos eran los que gemían – dijo a medio ruborizar el risueño rubio
- Que imprudentes…….. hacerlo en el jardín……. No tuve una tranquila merienda producto de esos distractores gemidos
- ¿También quieres hacerlo en el jardín? – preguntó pícaramente el rubio
- N…... nada de eso…… eso de hacerlo en lugares públicos no va mucho con mi moral
- ¿Quieres que te enseñe a perder esa moral?
- Pero que dices
El celular de Marco comenzó a timbrar interrumpiendo al par.
*Conversación por el celular……… obviamente Ace solo escucha lo que Marco contesta*
- ¿Aló?
- ¡Marco! Soy yo Sacchi
- Ah…… que sorpresa ¿Cómo conseguiste mi número? Que yo recuerde…… no te lo había dado……
- El tío Newgate me lo dio…
- Ya veo
- Oye tengo un favor que pedirte
- Dime
- Hoy no podré ir a trabajar……. Pero necesito que me traigas unos pedidos a mi casa….
- ¿Qué clase de cosas?
- En tu casillero del almacén te dejé pegado una listita…… por favor…. Es urgente….
- Hm….. esta bien…… pero será para la tarde
- ¡Claro! No puedo pedirte que lo cumplas ahora porque sé que estás estudiando
- Esta bien, nos vemos entonces
- Ok y gracias por la ayuda Marco
- No hay de qué, adiós
- Bye
El rubio colgó el teléfono con una tenue sonrisa, no iba a negarlo, quería a su primo como si fuera un hermano y siempre que pueda serle útil lo hacía sentir alegre.
- ¿Quién era? – preguntó serio el pecoso
- Nadie importante, un familiar mío
- …………………..
- Por cierto, hoy no podré quedarme tarde después de la salida…… me surgieron cosas que hacer
- ¿Qué? Pero hoy iríamos a comer helados
- Lo sé…... pero este familiar me ha pedido un favor que debo cumplir hoy mismo
- Tsk
- Mañana iremos……. ^^
El par se retiró a clases mientras caminaban lentamente, pero el pecoso ya no estaba tranquilo, el hecho de imaginarse a otra persona ocupando la mente de su pareja lo ponía de muy mal humor.
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Continuará......... .____.U