Después de horas llego la hora del almuerzo, Misty y yo cogimos nuestra comida y nos fuimos a sentar en la mesa de siempre que estaba al fondo del comedor junto con una ventana de buenas vistas.
Mientras comíamos aparecieron esos 2 chicos nuevos junto con otro chico algo mas mayor, quizás 1 año o 2, era el mas alto, moreno, pelo marrón oscuro, ojos rasgado y musculoso, y como la primera vez me los quede viendo, sobretodo a el…
-¡tierra llamando Ash responda!- grito Misty en mi oído dejándome algo sordo
-¡¡ ¿Qué?!! No grites
-no gritaría si la persona con la que estoy hablando no me escucha y no me has oído lo que te he dicho ¿verdad?
-no… lo siento, ¿que me decías?
- te estaba preguntado si querías venir a mi casa a ver el maratón de películas pero ya veo que te han gustado los nuevos
-¡¡¡ ¿Qué?!!! Claro que no me gustan los nuevos, osea parecen buena gente, pero no me gustan de gustar.
- ya claro, no soy tonta Ash, a ti te gusta uno de ellos se te nota en la cara ¡mira te has puesto como un tomate!
-¡no es cierto!... ¿tanto se nota?- (bueno se me olvido decir que me siento atraído por los hombres)
-si, pero no me gustan esos chicos
-¿eh? ¿Por qué?
- tienen algo raro, algo misterioso, algo terrorífico y no me gusta
- no digas eso sin haberles conocido
-da igual, de todas formas no me interesa juntarme con ellos, ¿y entonces que?
-¿Qué de que?
-¡SOBRE LAS PELICULAS!
- aahh… me gustaría pero no puedo, tengo que ir al súper a llenar la nevera de comida y el profesor de historia nos ha mando hacer un trabajo de 5 hojas, que rollo.
-Jo, que lastima, bueno ya quedaremos otro día, suerte con el trabajo
-gracias
Después del almuerzo, volvimos a clases que transcurrió normal, si es que se le puede decir así, ya que los chicos nuevos eran el chisme del día.
Al terminar el instituto Misty y yo nos dirigimos de vuelta a casa juntos hasta llegar al cruce donde nos encontramos y nos despedimos para ir cada uno a su casa.
Al llegar, me fui a la cocina y me prepare unos espaguetis, y tras una hora de relajarme y cambiarme de ropa salí con la lista en la mano hacia el súper.
(Tras 1 hora larga)
-al fin termine de comprar, cielos, que cantidad de gente había en la cola para pagar.
En mitad del camino hacia mi casa, escuche unos ruidos fuertes que provenían de una de las calles y para mi sorpresa y susto salió un tío vestido de negro armado que me empujo al suelo e iba a dispararme cuando escucho un disparo que no provenia de su arma y callo desplomado al suelo muerto y empezo a formarse un charco de sangre.
Estaba paralizado de miedo, no podía creerme lo que acababa de pasar y para mayor sorpresa salió el asesino de ese hombre y era nada más y nada menos que él.