Ese día había empezado tan rutinario y aburrido como ya era costumbre para Harry, salió de su habitación saludo, se dio un baño y bajo a desayunar, lo único agradable para esa monotonía diaria era que efectivamente Hermione seguía tratándolo como siempre. Desde que Harry se había dado cuenta de ese fijación hacía los chicos era inevitable que mirara los cuerpos de algunos, de esa manera encontró características que le parecían agradables, había una persona que tenía esas características, de hecho era la persona que le había mencionado a Hermione, cuyo nombre prefirió evitar mencionar, de hecho no fue porque la chica no lo fuese a comprender mas bien porque ella le daría ideas, pero el comprendía que ese amor sería imposible.
Últimamente los ataques al pobre rubio aumentaban empeoraban, pero ese había sido el peor de todos, fue una vil emboscada, cuando dio vuelta por un pasillo salieron alumnos de todas las casas, incluso de Slytherin, la mayoría le apuntaban con varita en mano y se dio cuenta de que no tendría salida, los hechizos llovían, había logrado evitar muchos con “Protego”, pero sabía que ante tantos no soportaría mucho y así fue, le lanzaban hechizos para ridiculizarlo y se burlaban de el, Draco no entendía porque siempre defendían a los de las otras casas ante un roce mínimo, pero a el siempre lo humillaban, lo ofendían y lastimaban, sin siquiera saber lo que había vivido, lo que había sufrido, en momentos como ese solo quería escapar de ese dolor, pero no perdería su orgullo, no porque así había sido educado y no podía evitarlo, su ropa se encontraba ya algo rasgada y tenia demasiados golpes, de todo tipo, rasguños, cortadas moretones, era horrible como lo trataban, ni siquiera les importaba si era prefecto, no tenían piedad con el.
El pobre rubio no podía si quiera pararse por el dolor que tenía en todo su cuerpo, intentaba vanamente de levantarse o mínimamente de articular un par de palabras pero le era imposible. Cuando Draco estaba por perder la conciencia Harry junto con sus ahora 3 inseparables (Hermione, Ron y Ginny) estaban pasando por uno de los patios que daban plena vista a lo que pasaba, rápidamente por su sentido de justicia, o eso quisieron creer los demás, se interpuso.
-¡Dejenlo!, ¿Esta es su manera de arreglar las cosas?, ¿Siguen todos con tontos reconres?.-
-Eso no es de tu incumbencia, Potter, o deberíamos decirte “Salvador”, y a parte besarte los pies, y lamer el piso por el que caminas, ¿¡Eh!? “héroe”- Incito alguien que mientras hablaba con tal arrogancia parecía mofarse de Harry.- Como tu no perdiste nada en cambio ganaste mas fama te parece fácil aceptar a estos mortifagos.- Dijo con desprecio.-
Eso si fue ir demasiado lejos, ¿Qué sabia ese cretino para hablar así?, así que Ron intervino.
-Harry es un ejemplo de una persona que perdió demasiado en la guerra, el simple ejemplo de haber perdido a sus padres desde años antes es suficiente.- iba a continuar peor Harry lo interrumpió.
-Ron, no tiene caso que pierdas tu tiempo, no es como si fueran a comprenderlo, todos están tan sumidos en ellos mismos, lo que deberías hacer es bajar puntos, como prefecto que eres puedes hacerlo, no tengas compasión 10 puntos por alumno de cada casa, rápido antes de que escapen.- En ese momento iba llegando Pansy que en cuanto supo lo que estaba pasando quiso dirigirse con Draco pero no había podido, cuando se percato de que Potter estaba ayudando a Draco, en un principio se sorprendió, pero después se acerco a el.-
-Potter, debo admitir que de ti me sorprende, pero aun así, Gracias.- Musito Pansy.
-En si, no lo hice por Malfoy, Parkinson, simplemente no me parece bien que se guarden estos tontos rencores, el pasado es solo eso, pasado.- se dirigió a Pansy.- Hermione, ¿podrías ayudarle a Parkinson a llevar a Malfoy a la enfermería,? y tu Ginny ¿podrías informarle a Dumbledore y a los jefes de casas sobre esto?.- Al asentir las dos chicas empezó a irse de ahí´.- yo me largo de aquí que todo esto me enferma.- termino.-Pero antes de desaparecer por el pasillo agrego.- No quiero presencia mas de estas tontas escenas de rencor por cosas que ya pasaron, hacia nadie, si vuelve a pasar algo así frente a mi presencia no tendrán la misma suerte que en este momento.-Dijo irritado antes de retomar su camino hacia su clase.
Esa noche Harry se sintió mas extraño que las otras, y en cuanto se fueron a dormir los de su dormitorio tomo su capa, su varita y el mapa del merodeador, pero al salir de su dormitorio volvió a toparse con Hermione que lo invito a sentarse junto a ella para hablar.
-Ven Harry, siéntate.- Harry sabia que no era buena idea darle la contra, por eso se sentó con ella.
-¿Necesitas algo, Hermione?.-
-Solo quiero decirte que me siento muy orgullosa de ser tu amiga, y de la forma en que defendiste a Malfoy hoy.- Antes de que Harry replicara que no fue por Malfoy agrego.- Aunque no haya sigo por el, me sorprende el sentido de justicia que tomaste, en especial ante alguien que te trato mal durante años.-
Solo quiero que esta “guerra” termine, pensé que al asesinarlo las cosas mejorarían, tampoco espere que aceptaran a los hijos de mortifagos o las personas que se relacionaron con ellos tan rápidamente, pero tampoco me lo imagine tan difícil, enfermizo y frustrante.-suspiró.- Honestamente, no tengo ganas de hablar solo quiero salir a caminar y despejarme, discúlpame.- Tomo su varita y el mapa del merodeador.
-Pero, Harry.- fue lo ultimo que escucho antes de salir, peor no se imagino que lo único que deseaba decirle era que había olvidado la capa de invisibilidad, y cuando se dio cuenta pensó que era demasiado tarde, y que para eso le serviría el mapa.
Draco había salido rápidamente de la enfermería con las pociones de Madame Pomfrey, y estaba ya en su estado normal, pero se sentía muy hostigado esa noche así que para despejarse un poco salió a dar una ronda como prefecto.
Harry estaba siendo cuidadoso, según el, pero no había notado que tenía mal doblado el mapa y había una parte que no logro ver, era donde se encontraba Draco, al dar vuelta en una esquina el rubio se percato de que había alguien fuera de la cama, lo siguió un poco y al parecer ese alumno no se había percatado de haber sido descubierto, y entonces lo noto, ese no era un simple alumno era Potter, tenía la oportunidad perfecta para que lo castigaran, pero debía admitir, muy a su pesar, que le debía una, y una muy grande que incluso pudo haberle costado la vida, a parte también tenía la oportunidad de descubrir que tramaba el chico de lentes, así que cautelosamente continuó siguiéndolo, y se dio cuenta de que realmente tramaba algo (al menos según Draco tramaba algo) al verlo salir del castillo, aun fuera del castillo continuo siguiéndolo, ahora no podría hacer nada en su contra porque también se llevaría a el mismo en el proceso, y no podía darse el lujo de perder puntos para su casa, porque de por si ya había unos mismos de ahí que la traían contra el.
Los siguió hasta que llegaron a un hermoso paisaje, que le encanto a Draco, el lago y su agua cristalina, los arboles y sus abundantes copas, y el hermoso cielo, cubierto de una bella manta de estrellas que lo adornaban aun mas con su brillo esplendoroso, dándole un aire de paz y tranquilidad a aquel sitio oculto.
Draco se encontraba tan ensimismado en la preciosura de aquel sitio en el bosque, que no se había percatado de que Harry había comenzado a desnudarse, cuando se percato de ello, en un principió pensó en irse de ahí, pero Potter ya se había quitado la camisa y vaya que tenía los músculos definidos, entonces decidió quedarse viendo desde detrás del árbol en el que estaba, de ahí podía ver bien, Harry tomo su cinturón y lo tiro a un lado para después deshacerse de su pantalón, bajo la mirada de un rubio que el ignoraba su presencia, aquel rubio observaba las bien torneadas piernas del ojiverde que realmente el quidditch hacia efecto, pero ¡Por Dios! Cuando se quito los boxers dejando ver su hombría ¡Santo cielo!, y ni hablar de ese bien formado trasero, al parecer Potter ocultaba un buen cuerpo debajo del uniforme, al igual que unos preciosos ojos esmeralda debajo de sus gafas, Harry se introdujo en el lago, y se quedo un rato meditando.
El moreno comenzó a pensar en aquel chico que llamaba su atención, y su imaginación jugándole una mala pasado, le hice imaginar una situación comprometedora, y cuando se dio cuenta su erección le agolpaba un dolor que exigía atención, el rubio no había perdido detalle de los movimientos de aquel atlético cuerpo, pero cuando vio su cara sonrojada se sorprendió realmente.
Potter empezó a acariciar su abdomen bajo, su mano estaba debajo del agua, lo cual no le permitía ver, de un momento a otro el moreno salió del agua se sento en el orilla, y después recostó un poco su cuerpo dejando parte de las piernas dentro del agua, pero el resto del cuerpo acostado, su mano acariciaba su abdomen, mientras que la otra empezaba a tomar su pene que claramente hacía ver el éxtasis en el que se encontraba su cuerpo, primero con mano firme lo apretó haciéndolo soltar un fuerte gemido, mientras su otra mano bajaba por sus piernas, después empezó un movimiento de arriba abajo con su mano, mientras sus caderas en busca de mas fricción se removían en un tormentoso vaivén para los ojos del rubio, y los gemidos de Harry inundaban el silencioso bosque, después subió su mano frotando su palma con la punto, haciendo le gemir aun mas fuerte, volvió a bajar su mano y a subirla cada vez mas rápidamente, una mano se encontraba acariciando su miembro de arriba abajo, mientras que la otra se encontraba frotando la punta, estaba mojándose, sus mejillas se encontraban coloradas estaba ligeramente bañando en sudor, era un vista magnifica y Draco Malfoy podía observar aquel espectáculo, un espectáculo tan bueno que el mismo rubio se estaba excitando sentía a su miembro duro golpear contra su pantalón, pero no pensaba desquitarse ahí porque se vería descubierto, así que en silencio continuo observando, las manos de Harry se movían cada vez mas y mas rápido, sin contar el movimiento de sus caderas los numerosos ruidos que salían de su garganta, hasta que al final un liquido blanco y viscoso lleno su mano mientras su boca desprendía un ultimo grito mas fuerte excitante que los demás, haciendo excitar aun mas al rubio que prefirió desaparecer