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You're my Sky, my Sun and my Moon por Gaara_Uchiha

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Notas del capitulo:

Bueno, hola, me arde la cabeza como no tienen idea así que corregí hasta la mitad, espero que no les importe(?) y que les guste el capítulo, en lo personal, a mi me encantó.

 

Aprovecho para invitarlos a leer mi three-shot SeKai "Under Your Wings" que prontó terminará ya que le falta un capítulo :3

 

Tambien iba a decirles que haré un JooNew *O* Así que esperenlo~

Segundos después de que la rubia pronunciara la última palabra, la puerta de la habitación de abrió de un portazo dejando pasar a un par de chicos y a una chica, los dos primeros tenían una expresión de desagrado, molestia y un deje de furia, mientras que la muchacha denotaba confusión y estupefacción por cada poro de su cuerpo.

 

— ¿Chae Rin? —Murmuró Min Ji sin salir de su asombro, tanto CL como Seung Ri se habían quedado mudos en el instante en que la puerta se había abierto— ¿Acabas de decir que tú...? —Simplemente no podía articular bien las palabras, aún no salía de su impresión.

 

— ¿Embarazaste a Chae Rin? —Interrumpió Taeyang mirando de mala gana al Seung Hyun menor, éste optó por quedarse callado.

 

—Seung Ri ¿Cuándo...? ¿Por qué? —Preguntó Daesung, su ceño estaba fruncido y su característica sonrisa y buen humor habían desaparecido, dejando ver una mueca de enfado en su rostro.

 

—Nosotros...—Dijo por fin Seung Hyun, no pudo decir nada más ¿Qué le diría a los mayores? Lo tacharían de estúpido e irresponsable, además de infiel; pero eso era, había actuado como un completo tonto al beber de más sabiendo que tenía muy poca tolerancia al alcohol,  la exagerada cantidad de bebidas que había consumido habían hecho efecto en su organismo, así que, gracias a eso, y por su mente y cuerpo de adolescente, terminó dejándose llevar por sus hormonas alborotadas, trayendo como consecuencia un embarazo no planeado de la que consideraba su hermana mayor. Sí, Lee Seung Hyun era un idiota, pero tenía que hacerse responsable de sus actos.

 

— ¡Habla de una vez! —La calma que difícilmente Young Bae había tratado de guardar, terminó por esfumarse. Ahora  podía notarse realmente lo furioso que estaba, pero ¿Cómo no? Seung Ri lo había decepcionado, demasiado. Hasta el mismo Dae Sung se había sorprendido por la actitud del mayor ¿Qué decir de los otros?

 

—Hyung...—Susurro el menor de los chicos en un tono de voz apenas audible.

 

—Solo responde... ¿Embarazaste a Chae Rin? —Cuestionó el de cabellos grises. Ellos sabían la respuesta, pero eran tan masoquistas que querían escucharla de nuevo—Respondan—Aunque no fue una orden, su voz había sonado autoritaria.

 

—Sí...—Respondió Seung Ri. En ese momento se sentía como el tonto más grande del mundo—Embaracé a Chae Rin—Afirmó seriamente, cosa que no había hecho en mucho tiempo. Los rostros de Daesung y Taeyang parecieron desfigurarse en el instante en que menor alegó aquello.

 

—Young Bae oppa... Daesung oppa... Fue un error, nosotros no queríamos...—Intentó explicar CL.

 

— ¿Un error? —El de la cresta sonrió con amargura—El error aquí lo he cometido yo...—Murmuró con rabia—Al haberme metido contigo...—Con esas palabras, el más chico sintió su corazón romperse, pero quizás se lo merecía, o eso era lo que pensaba él.

 

—Hyung...—Susurró el chico Lee evitando a toda costa romper en llanto, su cuerpo temblaba y sentía que en algún momento dejaría de respirar. Young Bae no dijo nada, solo se limitó a salir de ahí, ya no lo soportaba más—Daesung hyung...—El aludido negó lentamente con la cabeza en señal de desaprobación e hizo lo mismo que el mayor, se retiró de allí.

 

La habitación quedó en profundo silencio, ninguna de las chicas decía nada, pero luego la incomodidad en la que se encontraban  fue interrumpida por el pelinegro, quien se dirigió a paso apresurado hasta la puerta.

 

— ¿Irás a...? —Iba a preguntar la rubia, mas no pudo terminar de formular la interrogante puesto que el muchacho paró en seco, girándose un poco para verla. El chico negó con la cabeza y dejó escapar un sonoro suspiro.

 

—Ya todo terminó—Susurró con una expresión melancólica plasmada en su rostro, pudo leer un "Lo siento" en los labios de Chae Rin, le dedicó un sonrisa forzada y como acto seguido, salió de ahí.

 

—Chae Rin ¿Cómo sucedió? —Dijo Minzy, que por fin decía algo coherente en todo el tiempo que estuvo allí, la aludida desvió la mirada y bajo la cabeza, estaba muy apenada—Vamos, dime—Insistió acercándose a la otra chica, quien pareció haber temblado levemente por un momento—Confía en mí, somos amigas ¿Cierto? —La rubia asintió y levantó el rostro, dejando ver como un par de finas lágrimas se escapaban de sus ojos.

 

¿Cuánto tiempo habían pasado encerradas en esa habitación mientras conversaban? ¿30 minutos? ¿2 horas? Ninguna de las dos se había fijado en eso, una solo se limitaba a hablar, y la otra a escuchar atentamente.

 

—Entonces... ¿De verdad estaban ebrios? —La mayor asintió y pronto las lágrimas volvieron a salir de sus oscuros ojos—Unnie, no llores...—La muchacha de cabellos largos hizo caso omiso a las palabras de la castaña y como al principio de la plática, rompió en llanto.

 

— ¿Qué voy a hacer...? —Se preguntó a sí misma en voz alta, sus ojos estaban enrojecidos y su cuerpo tiritaba, como por acto reflejo, la menor la abrazó fuertemente, sintiendo como su pecho era empapado por las salinas gotas que salían de los ojos de la de mayor estatura.

 

—Todo saldrá bien...—Susurró Min Ji acariciando suavemente los cabellos de la mayor, que no hacía más que sollozar entre aquel abrazo—Te lo prometo... Yo estaré contigo...—Dijo en un tono de voz apenas audible, CL pareció haberse calmado con las palabras antes pronunciadas por la otra chica, se separó un poco del cuerpo de la menor y elevó ligeramente la cabeza, mirándola fijamente a los ojos.

 

— ¿Lo prometes...? —Cuestionó Chae Rin sintiendo como repentinamente sus mejillas comenzaron a arder, Min Ji asintió y le dedicó una leve sonrisa.

 

—Lo prometo—Afirmó nuevamente, muy segura de lo que decía, la muchacha de cabellos largos sonrió ante lo que acababa de escuchar—Siempre estaré ahí para ti...—Después de dicha frase, como si se tratara de alguna fuerza magnética que las atraía, terminaron juntando sus labios en un dulce beso.

 

Al pasar las horas, un nuevo día se hizo presente, el sol empezó a salir, iluminando con sus rayos toda la isla. La oscuridad se disipaba, la noche se terminaba.

 

A través de la ventana, la luz del nuevo día iluminó la habitación de aquel caro hotel en el que los alumnos más grandes del prestigiado internado H.T.D, se estaban hospedando. También el único ser humano de esa estancia recibió los rayos solares. Aron frunció el ceño ante el cambio de luminosidad. Se revolvió en aquella amplia cama con molestia. Tendría que haber corrido las cortinas antes de acostarse.

 

— ¿Qué hora es? —Se preguntó a sí mismo en voz alta al instante de haberse incorporado en la cama, para después clavar su mirada en el pequeño reloj de aguja que colgaba en una de las paredes de aquel cuarto—Es temprano—Murmuró, lanzó un sonoro suspiro, estrujó cuidadosamente sus ojos y bostezó un par de veces, paseo su vista por toda la habitación percatándose de que  sus compañeros seguían plácidamente dormidos; Baek Ho junto a Ren, JR  estaba solo en una esquina y Minhyun ¡Un momento! ¿Y Minhyun? Aron no lograba divisarlo por ningún lado.

 

—Minhyun no está—La voz de Dong Ho lo hizo alarmarse de sobremanera, el rubio lo miraba desde su cama, abrazaba a un dormido Minki por la cintura de una manera un tanto posesiva y le dedicaba al mayor una sonrisa socarrona, cosa que hizo que éste se molestara un poco.

 

— ¿Y? —Preguntó el castaño frunciendo levemente el entrecejo, Baek Ho rio por lo bajo.

 

—Lo estabas buscando—Respondió el de cabellos platinados con una sonrisa ladina dibujada en sus labios.

 

—No es cierto—Dijo Aron intentando sonar lo más convincente posible ¿A quién diablos quería engañar? Dong Ho tenía toda la razón.

 

—No discutiré contigo lo que es obvio—Musitó el menor soltando una leve carcajada, Aron le refunfuñaría un par de cosas de no ser porque el chico de la mohicana tapó completamente su cuerpo, junto con el de Ren, dando como terminada la conversación.

 

Kwak gruñó bajito, se levantó de la cama y se dirigió al baño, tomaría una larga y relajante ducha, comería algo y luego saldría para disfrutar de la extraordinaria belleza del mar, pero no pudo siquiera tomar el pomo de la puerta del cuarto de baño ya que la voz de JR lo detuvo.

 

—Por cierto, hyung, Min está con Danee—Luego de esas frase, las risas de Dong Ho y Jong Hyun no se hicieron esperar, el castaño rodó los ojos y suspiró fastidiado, si les hacía caso, esos dos no dejarían de molestarlo.

 

Por otro lado, como había mencionado JR al castaño, Minhyun se encontraba con Danee en la playa ¿Qué hacía ella ahí si no era de último año? Simple, después de rogarle al director y hacer que sus padres intervinieran, la chica logró ir al viaje junto a su inseparable amigo.

 

—Dani ¡Atrápalo! —Estaban jugando animadamente con un frisbee, ahora era el turno de la pelinegra para atrapar el disco volador, quien por un descuido, lo dejó ir, logrando así que el objeto cayera inevitablemente al agua.

 

— ¡Yo voy! —Exclamó la muchacha dirigiéndose a donde había caído el disco.

 

— ¡No, yo voy! —Dijo el chico de igual forma, de un momento a otro, ambos habían comenzado una carrera para ver quién entraba más rápido al agua y tomaba del frisbee, la pelinegra estuvo a punto de hacerlo, de no ser por Minhyun, que la tomó del brazo jalándola hacía su cuerpo, empezaron a reír sonoramente y olvidándose por completo del objeto con el que habían estado jugando minutos antes, y como niños pequeños, se dispusieron a jugar con la salada y cristalina agua que estaba bajo ellos.

 

Se revolcaron en el agua, se salpicaron con ésta como si no estuviesen lo suficientemente empapados ya, y por último, terminaron tirados en la caliente arena, con sus respiraciones agitadas y sus sonoras e incesantes risas retumbando por todo el lugar; todo eso bajo la atenta mirada de un chico castaño, quien al haber hurtado sigilosamente los binoculares del salvavidas, estaba espiando desde lejos a los dos chicos.

 

—Oppa, nos espían—Murmuró la pelinegra con una leve sonrisa en su rostro puesto que desde donde estaban, se podía ver a Aron en su escondite para nada disimulado, se encontraba detrás de un grupo de chicos, quienes lo miraban con extrañeza, mas no decían nada al respecto.

 

—Ya lo sé—Dijo el chico alto de igual forma, se apoyó en su brazo derecho y se dedicó a mirar a la chica, que sonrió ampliamente y con una señal de su dedo índice, hizo que el mayor se le acercara a su rostro, aprovechando así para besar rápidamente una de sus mejillas, Minhyun rio e hizo lo mismo que ella.

 

Aron, desde donde estaba, frunció el ceño ¿Quién se creía esa chica para besarlo? ¿Y por qué él también la besaba a ella?

 

—Si ya terminaste de espiar a esos dos, por favor, regrésame mis binoculares, los necesito—Musitó un chico rubio detrás de Aron, señalando a Minhyun y Danee. Pronto las risas de parte de los chicos que estaban ahí, se hicieron presentes, causando así un intenso sonrojo en las mejillas del castaño, que estaba más que avergonzado.

 

 —Ah... Sí... Lo siento—Susurró desviando la mirada hacía donde estaban el alto y la pelinegra, Minhyun lo miraba ¡Lo estaba mirando! Quiso que en ese mismo instante se abriera un agujero en la arena y se lo tragara, o quizás que llegara un monstruo marino y se lo tragara, estaba muy apenado. Se levantó de donde estaba, entregó los binoculares al rubio y salió corriendo de ahí, no lo soportaba, sentía como otra vez, después de mucho tiempo, todos se reían de él. Chocó contra un par de personas, casi se resbaló con una que otra toalla tirada en el piso, pero aquello no le importó, simplemente quería salir de ese lugar, lejos de todas aquellas miradas llenas de burla.

 

Llegó lo más rápido que pudo a la habitación que compartía con sus amigos y entró en ésta como alma que lleva el diablo, dando un portazo, sobresaltando a los chicos que allí estaban.

 

— ¿Hyung, qué sucedió? —Preguntó Ren con preocupación al ver al mayor entrar al cuarto notablemente agitado.

 

— ¿Pasó algo entre Minhyun y Danee? —Bromeó Baekho, JR rio, y ambos recibieron un codazo y una mirada de desaprobación de parte de Minki.

 

—...—Aaron suspiró pesadamente y sin prestar ni la más mínima importancia a lo que decían sus compañeros, tomó su toalla, la cual estaba colgada cerca de su cama, y entró al baño ¿Que se había bañado hace poco menos de dos horas? ¿Y eso que importaba? Cualquier cosa era mejor que estar ahí dándoles explicaciones a los menores.

 

Poco tiempo después de que el mayor ingresara a la ducha, Min Hyun entró al cuarto abriendo la puerta rápidamente, encontrándose con los otros tres chicos que miraban perplejos la puerta del baño.

 

— ¿Hyung, qué paso con Aron hyung? —Cuestionó Minki fijando su mirada en el castaño alto.

 

—N-nada...—Su voz tembló, y de la misma forma que entró a la habitación, salió de ella.

 

—Tontos...—Susurró el de cabellos platinados negando levemente con la cabeza—Vámonos—Dijo al rubio, que asintió dudando en irse o no de ahí.

 

—Iré a ver a Jin Ki hyung...—Murmuró Jong Hyun ganándose un par de miradas pícaras de parte de los dos rubios— ¿Qué? Solo voy a pasar un rato...—Se defendió.

 

—Claro—Dijeron Ren y Baek Ho con sarcasmo.

 

Pasaron las horas, el sol se escondió dando paso a la luna, que esa noche resplandecía con más intensidad. La playa estaba desierta, no se escuchaba ningún ruido, a excepción del que producían las olas, que esa noche parecía estar más agitadas que las anteriores.

 

Un chico castaño y de baja estatura se encontraba sentado a la orilla del mar, admirando la magnificencia de éste. Sus cabellos eran mecidos armónicamente por la suave brisa de aquella gélida noche. Tenía frío, mucho, suspiró lánguidamente y cerró los ojos con fuerza, dejándose llevar por la armonía presente en ese lugar.

 

—Soy un tonto—Se reclamó aún con los ojos cerrados. Por fin lo admitía era un completo tonto, por no haber hecho caso a sus sentimientos cuando se dio cuenta de ellos, por como trató a Minhyun desde el primer día que lo vio, todo por tratar de conservar esa apariencia de chico rudo, cosa que sabía muy bien que no era, porque muy en el fondo, era débil, y sobre todo, sensible. Se maldecía cada vez que recordaba el día en que hizo suyo al heredero de la familia Hwang, el cómo lo trató después de eso, y sobre todo, las palabras que le dijo el más alto "Por supuesto que fue un error, el más grande de mi vida" aquellas palabras se repetían una y otra vez en su mente, atormentándolo de sobremanera.

 

—Sí, lo eres—Comentó Minhyun apareciendo a su lado, Aron se alteró un poco ¿Cuándo había llegado hasta allí? El mayor no lo había sentido en ningún momento, tal vez la razón era que había estado completamente sumergido en sus pensamientos— ¿Estás bien? —Preguntó sentando al lado del más bajo, éste asintió ligeramente con la cabeza—Hyung...—Intentó decir pero fue interrumpido inmediatamente por el mayor.

 

 —Lo siento...—Se disculpó sorprendiendo al muchacho que estaba a su lado, a quien en ningún momento miró, no se sentía capaz de hacerlo—Yo... Lo siento, por todo...—Dijo en un susurró apenas audible, realmente no sabía que decir o como actuar en esa situación.

 

 

—Está bien...—Respondió el alto, Aaron negó.

 

—No lo está... Actué como un tonto todo este tiempo... Yo... Lo siento—Repitió observando cara a cara al menor—Desde que te conocí te traté muy mal, ni siquiera intenté... Yo no...—Comenzó a decir incoherencias de un momento a otro.

 

—Hyung...—Susurró Min Hyun.

 

—Y creo que... Me gustas... No—Musitó desviando la mirada—Te amo—Sus mejillas enrojecieron y su corazón se aceleró, se regañó mentalmente por haber dicho aquello, es decir ¿Lo trataba mal y luego le decía que estaba enamorado de él? ¿Qué clase de idiota hace eso? Una hermosa sonrisa se dibujó en los labios del menor, cosa que Aron no pudo ver ya que tenía la mirada fija en la arena—Lo siento—Se disculpó nuevamente, estuvo a punto de levantarse, de no ser por la mano del más alto, que tomó fuertemente su muñeca, impidiéndole que se alejara— ¿Qué...? —Preguntó mirando al menor, la sonrisa en su rostro lo dejó notablemente descolocado ¿Qué significaba eso? Aquella pregunta fue contestada cuando sus labios fueron sellados delicadamente con los Minhyun, abrió sus ojos en demasía comprobando que aquello fuese cierto, y realmente lo era, Hwang Min Hyun lo estaba besando.

 

Aaron se dejó llevar por el momento, no supo cómo ni cuándo había sido recostado sobre la arena, Minhyun estaba sobre él, besando con dulzura sus labios, al mismo tiempo que acaricia su rostro suavemente con una de sus manos, puesto que con la otra se apoyaba en el piso, para así no caer encima del cuerpo del más bajo.

 

— ¿Por qué tú...? —Quiso preguntar, pero no logró terminar de formular la pregunta, sus pómulos estaban teñidos de rojo y su respiración era irregular.

 

—Babo...—Susurró Min Hyun riendo por lo bajo—Te amo—Dijo para después volver a juntar sus labios con los de su hyung.

 

 

Notas finales:

Gracias por leer, espero que les haya gustado, dejen rws, ya saben que de ellos me alimento(?)

 

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@ChocoGaaDeLimon

 

Bye~


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