Abrió los ojos y se encontró en aquel parque, pero estaba solo y era invierno, se abrazo así mismo, su intuición le dijo que mirara a su izquierda, ahí un niño lo miraba con e ceño fruncido y lo supo, la bazooka estaba descompuesta.
--¿Quién eres herbívoro?—pegunto el pequeño que lo vio aparecer de la anda
--Mi nombre es Sawada Yoshi
--¿Sawada? ¿Conoces a Sawada Tsunayoshi?
--Sí, es mí…mmm…primo
--Él fue llevado a la estación de policía
--entiendo, ¿tú eres?
--Hibari Kyoya, yo soy…
--Eres amigo de Tsuna ¿no?
--No—dijo bajando la mirada y apretando los puños
--Yo creo que si—exclamo mirándolo—bueno me voy, iré a ver Tsuna y le diré que tú le mandas saludos
Dijo el castaño alejándose del pequeño, que le miro entre sorprendido y esperanzado.
Llego a la casa de Nana, sabía que estaba Iemitsu, pero necesitaba hablar con su madre.
--¿sí?—pregunto la mujer al ver a aquel chico--¿es algo de Tsuna?—pregunto con un ligero tinte de miedo
--Si, señora, vengo por él, pero no me quedare mucho, por eso quería saber si usted se puede quedar con él por un tiempo, hasta que nuestros padres regresen
--Claro—dijo haciendo que una luz brillara en los ojos de la mujer--¿Cuándo lo traerá?
--Antes de navidad, ¿me permite entrar por él?
--Claro, por cierto ¿su nombre es?
--Sawada Yoshi—dijo con una sonrisa
Subió a su habitación, tomo una manta y un cojín, lo envolvió para fingir que era el pero durmiendo
--Gracias señora, regresar dentro de unos días con el pequeño
--Claro Yoshi…
Así el chico camino de regreso a su antigua casa, donde se quedaría por un tiempo. A estar en su habitación cerró los ojos para dormir.
Al día siguiente bajo a comprar un almuerzo su intuición le hizo ir al árbol donde encontró el pequeño pajarillo que hizo que Kyoya y él se hicieran amigos, ahí suspiro profundamente y cerró los ojos para prender su llama
Aquella llama anaranjada, pura, que representa el cielo. Se mantenía así hasta que le da sueño y se recarga en el tranco.
No se dio cuenta de tres miradas curiosas, un niño sentado en el árbol, mismo con el que había hablado el día anterior, un niño con el cabello blanco y un niño de cabello negro con un bat de béisbol.
Cuando despierta se levanta y se dirige a su casa, no sabe que esos niños ahora lo investigaran. Que había creado otra línea.
No tenía mucho dinero por lo que tendría que ir con su madre, pero ¿Qué le diría?, decidió que comería un sándwich, así fue al parque donde estaba el pequeño Hibari, quien lo miraba fijamente
--Hola Kyoya—saludo con una sonrisa
--Herbívoro—dijo el pequeño
--Tsuna te manda saludos
--mph… ¿Cómo está?—pregunto fingiendo que no le interesara mucho
--Bien, un poco enfermo, pero bien, saldrá en unos días—respondió mientras se sentaba en su banca y comía un emparedado, Kyoya simplemente lo miraba
--Hola Yoshi—exclamo una mujer con una sonrisa, ante su presencia Hibari se aleja
--¿Aria-san?
--Si—dijo con una sonrisa—hola joven Yoshi, o debería llamarlo Tsuna-kun
--¿Qué hace aquí Aria-san?
--Creo que lo sabes
--¿puedo hacerlo?
La mujer simplemente sonrió de forma enigmática.
*********
El pequeño Tsuna se despidió de su padre, su graciosa sensación le decía que todo estaría bien de ahora adelante, pero también que ya debería prepararse para irse, aquello lo entristecía, pero era necesario.
Así se fue a Kokuyoland, donde se sorprendió al ver el lugar, le habían contado que el lugar había tenido algunos cambios, Mukuro y Chrome tomaron la decisión de darle un pequeño tour al castaño, quien estaba feliz de saber que su amigo tenía una bonita casa.
Después de jugar un rato decidieron acostarse a dormir…
Al día siguiente Tsuna sonrió, se despertó y desayuno con sus amigos, poco a poco sus tíos fueron llegando y así partieron al lugar donde disfrutaron de todas las diferentes atracciones, e incluso ganaron cosas para el pequeño castaño y el líder de ellos.
Nadie se percató del brillo nostálgico del pequeño, el simplemente estaba feliz, porque por fin tenía amigos, aunque ellos eran grandes, pero tenía miedo de perderlos.
--¿Todo bien Tsuna?—pregunto Hayato mirando al pequeño que estaba mirando el lugar
--si es un bonito lugar, Hayato ¿Cuándo nos conozcamos vendremos?
--Claro que si Tsuna—dijo con una sonrisa y su mirada se dirigió a donde Yamamoto se preparaba para participar en un juego de destreza
--Takeshi es muy agradable
--Lo sé—respondió
--Sabes Hayato, Takeshi te mira como mi papa Alaude mira a mi papa Giotto—las palabras del castaño provocaron un sonrojo en el chico bomba
--N…no diga eso decimo—dijo mirando a otro lado
--Yo Tsuna, Gokudera—exclamo Yamamoto llego con dos peluches—toma Tsuna—dijo entregándole un peluche de un león
--Gracias Takeshi
--Y este es para ti Hayato—dijo entregándole el peluche de un perro
--Gra…gracias—dijo sujetando el peluche con un sonrojo
--Me alegro que te guste—dijo Yamamoto con una sonrisa que hizo que Gokudera ocultara su rostro en el peluche
--Voy con Kyoya—dijo el pequeño para salir corriendo con su peluche
--E…espera Tsuna—dijo Gokudera para ya era demasiado tarde, el niño ya se había ido
--Vaya, parece que aun siendo un niño Tsuna esta cómodo con Hibari
--S…si
Tsuna llego hasta Kyoya, quien le miro
--No corras Tsuna
--Lo siento Kyoya—exclamo con una sonrisa, mientras que dueño de Roll lo cargaba--¿no crees que Hayato y Takeshi hace una bonita pareja?
--Si, si lo hacen—dice con una sonrisa--¿Qué te pasa?
--Nada, solo que los voy a extrañar cuando me valla--dice con sinceridad y a Kyoya le duele escuchar eso ya que serían diez años para volver a verlo
--Búscame Tsuna—dijo haciendo que el pequeño le mirara—ve al parque donde nos conocimos, siempre estaré ahí, en la banca
--Pero…no debo
--¿Quién lo dice? ¿Él bebe? ¿Tus padres?—exclama con el ceño fruncido—búscame Tsuna, hazlo
--Lo hare—susurro
--Vamos con las cabezas de piña
--Si
Así continuaron con la salida, y mientras Tsuna hacia todo lo posible para que Hayato y Takeshi quedaran juntos en los juegos, también disfrutaba de estar con Mukuro y sus hermanos, con sus tíos y su pareja próxima. Pero aun así sabía que debía volver con Nana y tener diez años de soledad.
El día termino y todos estaban regresando a Kokuyoland donde estarían hasta el día siguiente en que Giotto o Alaude irían por el pequeño castaño.
Después de jugar un rato decidieron irse a dormir, más el pequeño Tsuna no lo hacía, tomo una libreta y una pluma comenzando a dibujar, sintió que algo húmedo caía por sus mejillas, toco sus mejillas y se dio cuenta de que estaba llorando, se levantó y salió no quería que sus amigos lo vieran llorando.
--No me quiero ir, no quiero estar solo—susurro
No estarás solo, tendrás a tus amigos
--pero para eso faltan mucho años
Sé que falta mucho, pero no te sentirás solo, papa siempre estará con nosotros
--Pero no lo voy a ver, ni a él, ni a padre
Sé que es duro, pero es necesario
--Pero…pero
Te aseguro que las cosas cambiaran, no te preocupes, pero debes decirles a todos que vallan al parque donde llegaste
--Está bien, ¿debo hacerle caso a Kyoya?
¿Qué te dice tu graciosa sensación?
--Bueno…
Papa siempre ha dicho que le hagamos caso y eso hay que hacer, pero recuerda que el abuelo ira a visitarnos
--Bien, entonces hasta luego
Susurro mientras se limpiaba las lágrimas.
--Tsuna—llamo Daemon al ver al pequeño fuera--¿este bien?
--Si tío Daemon—sonrió el pequeño—Tío ¿podemos ir a mi parque favorito?
--Claro, ahora vamos a dentro, debes dormir, mañana iremos al parque donde nos encontramos
--Si—exclamo con una sonrisa
--Claro, ahora a dormir.
El pequeño asintió mientras iba con el hombre de la pica en el ojo se percató de que aquel pequeño león se iba.
Al día siguiente Tsuna se despertó y le pidió a Chrome que le diera una pequeña mochila para poder guardar algunas de sus cosas.
--Papi, papa—exclamo el pequeño mientras corría a los brazos de ambos hombres que llegaban
--Tsuna—dijo cargándolo—mi niño
--Tú y papa ¿ya se contentaron?
--Si Tsuna, tu papa y yo ya nos contentamos—exclamo Alaude revolviendo el cabello del niño
--¿Qué tal te portaste ayer?
--Muy bien Takeshi nos regaló un peluche a Hayato y a mí y estuvieron todo el día los dos juntos—dijo haciendo que el mencionado se sonrojara
--Me alegra escuchar eso—murmuro sonriendo
--¿y cuáles son s planes para hoy?—pregunto Knucle mirando a la familia
--Quiero ir a mi parque favorito—exclamo Tsuna con una sonrisa que no llego a sus ojos
--Primero desayunamos Tsuna—dijo Giotto comprendiendo lo que sucedido—y partimos
--si
--Vamos Su-kun—exclamo Nagi llevando al pequeño que se había bajado de los brazos de su papa
--Quiero hoy cakes Nagi
--Claro
Así los chicos se fueron dejando a la primera generación sola
--Así que ya se arreglaron ¿eh?—exclamo G--¿Qué fue lo que sucedió?
--Solo confórmate con saber que estamos bien y juntos—dijo Alaude abrazando a Giotto por la espalda—Gio ¿Qué te pasa?
--El pequeño se va hoy
--Así que por eso salió anoche—susurro Daemon—Pero el mayor regresara y estaremos tranquilos de saber que él está bien.
--Si, vamos a desayunar y disfrutar el día con el chibi—dijo Asari con una sonrisa triste
Así iniciaron el día con el desayuno para poder hacer que el pequeño se fuera con una sonrisa.
Después de eso fueron a la casa de Nana, donde se Tsuna se despidió de la mujer y después se encontró con Varia y su abuelo, quienes los acompañaron al parque.
Ahí los jóvenes comenzaron a jugar por un rato hasta que Tsuna se detuvo y se comenzó a despedir de todos y cuando termino con ellos, le regalo un beso a sus padres y se alejó con un peluche y la mochila
--Te la regresare en el futuro Nagi
--No te preocupes Su-kun, cuídate
--recuerda lo que te dije
El pequeño asintió y así frente a ellos las llamas del cielo lo rodearon y después el humo rosa apareció y la sombra del chico de quince años se pudo visualizar.
Cuando este desapareció el Tsuna de dieciséis años apareció con una sonrisa
--Hola chicos—exclamo con una sonrisa
--Bienvenido pequeño—exclamo Giotto mientras se acercaba a abrazarlo—hola mi niño
--Papa
--Pequeño—exclamo Alaude también acercándose
--Padre—dijo abrazándolo
--Hay que ir a casa Tsuna—dijo Reborn—hay cosas que debes saber, respecto a tu pasado y al por que comenzaste a recordar ahora
--Está bien, vamos a casa, tengo hambre—dijo con una sonrisa de satisfacción.
Al llegar a casa Giotto estaba un poco nervioso ya que no sabía cómo explicarle al chico la verdad
--¿papa? ¿Sucede algo?—pregunto el castaño al ver a su padre nervioso
--Tsuna ¿has recordado algo más de tu pasado?—inicio Reborn mirado al castaño
--Si…recuerdo quien era—dijo de forma seria, haciendo que Giotto lo mirara—recuerdo a mi papa y al tío Daemon…yo…
--Tsuna, pequeño, perdóname—exclamo Giotto—aun no me sentía listo para decirte mi secreto, de decirte que era un doncel, por eso te grite aquel día
--No te preocupes papa—dijo sonriéndole—creo que no hubiera entendido mucho ¿y quién era mi padre?—pregunto con interés aunque su intuición le decía que lo conocía
--Yo—dijo Alaude—hubo un estúpido rumor en nuestro tiempo que hizo que Giotto tomara la decisión de irse—fue la explicación de la primera nube
--Ahora entiendo por qué no podía llamarlos por su nombre
Después de aquello las cosas comenzaron a tomar su rutina normal.
Cuando Tsuna regreso a su casa con sus padres y quedaron en verse al otro día en Nami-chu, para comenzar a planear navidad.
--Tsuna—llamo Alaude
--¿si padre?
--¿En qué piensas?—pregunto mientras miraba como el joven se acariciaba su vientre
--En mi pequeño yo—exclamo
--Hiciste bien—dijo abrazándolo—estoy orgulloso de ti
--Gracias
Giotto se acercó y también abrazo al chico, estaba consciente de lo que había hecho y se alegraba por eso ahora solo era disfrutar del tiempo que venía.
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Hibari iba a hablar con ese herbívoro, quería que le llevara con Tsuna, quería hablarle.
--Herbívoro, quiero ver a Tsunayoshi
--El llegara pronto Kyoya—exclamo con una sonrisa—yo me tengo que ir y no lo veré, pero por favor cuídalo, el futuro de Tsuna es duro y te va a necesitar, va a necesitar un carnívoro que lo cuide, por favor Kyoya cuídalo
--Lo prometo, me volveré un gran carnívoro para cuidarlo
--Lo sé, serás el más fuerte de todos, la nube que solo esta con el
--¿Nube?
--Dentro de diez años entenderás
El chico se alejó y el humo rosa se hizo presente dejando en su lugar a un pequeño castaño que comenzó a llorar al entender que ahora estaba solo. Kyoya se sorprendió, pero se recompuso y se acercó al niño
--Tsuna—llamo de forma cálida, el pequeño lo miro, soltó su peluche y se abrazó a él —ya pequeño, no llores, no te voy a dejar solo
--Kyoya ¿me lo prometes?—cuestiono mirándolo con aquellas almendras
--Te lo prometo—exclamo regalándole un beso en los labios—te voy a cuidar mi pequeño cielo
--Disculpen—exclamo Aria mirando enternecida la escena—debo llevar a Tsunayoshi con Nana, ¿quieres acompañarnos Hibari-kun?
--Sí, quiero saber dónde estará Tsuna
Así Tsuna regreso a aquella casa en compañía de Kyoya y aria, así su destino cambio, el futuro que había conocido no se repetiría.
El noveno nunca bloqueara sus recuerdos y Reborn llegaría antes de tiempo por petición del anciano y de la hija de su amiga Luce.
Por qué en los días futuros Kyoya dividiría su tiempo en cuidarlo, la escuela y entrenar para volverse en un gran carnívoro.
Por qué en la escuela conocería a un niño de su edad, venido de Italia y de nombre Gokudera Hayato, un poco enojón, pero que después de ese día se convertiría en su amigo y mano derecha.
Yamamoto Takeshi, por curiosidad también se uniría a aquel grupo recién creado por curiosidad.
Sasawaga Ryohei también se unirá al ver a Gokudera y Yamamoto pelear y ver a su compañero de clases Hibari con ellos, un poco más alejado.
Y cuando tenía siete años, su primo Mukuro seria llevado por Aria-san a su casa y lo sucedido en la familia Estraeno no sucedería, pero días antes irían por Nagi.
Por qué antes de los quince años la décima generación se uniría.