Amor
Sangre hubo en la palea rostros con expresiones de cansancio pero ninguno quería rendirse su cuerpo, pedia a clamor por un descanso pero orgullo y desahogo recompensaba con creces la extenuación.
-. Ríndete Fenix
-. Ja, algo mas juez de pacotilla
Siguieron con la guerrilla Ikki casi logra pegarle a Rada lo que le concedería la victoria, pero por un resbalon pierde el equilibrio; Wybern lo sujeta de la nuca quedando cerca de los labios en vez de darle un golpe lo besa furioso mordiendo su labio para sangrarlo mas, el beso fue correspondido de la misma forma, esos dos querían degustar la sangre del perdedor, porque tenían que admitirlo ambos eran unos perdedores.
No hubo ni ganador ni perdedor en esa pelea imprevista el beso pasa de ser agresivo a suavizarse con los minutos. El aire se hizo necesario, separándose un poco, alientos calientes chocaron embriagándose mutuos.
- Poco hombre- decía Wybern
- Mal perdedor- contesta el contrario
- Sonríen mirándose a los ojos entendiendo lo que ahora querían el uno del otro un consuelo que solo ellos se podían dar.
Ikki atrapa a los labios hinchados del juez para devorarlos y limpiarla la sangre, Rada que no le gusta mucho ser sumiso lo hace demandante, las manos viajan a la entrepierna del pollo y lo aprietan como si lo despreciara.
- Ahg..ma-di-to aahg
- Jajaja lo seré pero asi es como te gusta fénix
Le da una sonrisa torcida al parecer su sexo seria salvaje y eso los excitaba mas, en el piso se recuestan ikki en venganza clava las uñas rasgando su piel y las va bajando , hace un camino que queda rojo y con gotas de sangre. Wybern se queja del dolor y como remuneración presiona mas su pene en su mano, era incluso una batalla en el sexo pero asi se entendía y asi disfrutaban con sadismo, locura, deseo y pasión.
Lengua pasionales peleaban por el dominio del otro, los besos de fuego de Rada bajaron hasta el cuello, clavícula, hombros pecho , todo hasta que llega al ombligo. Ikki solo suspiraba retando al juez en negarse a gemir .
- Gime caballero
- jamas- hablo entrecortado
- jajaja ya verás como si vas a gemir- se mofó
Fue a la entrepierna del menor y dio fuertes mordidas en su ingle.
- Quiero verte sangrar y luchar caballero
- - … - no quería gemir- te…ya verás maldito bastardo- el menor no quiso quedarse atrasado jalo queriendo arrancarle los cabellos rubios al juez pero el muy infeliz le hizo ancla en la ingle, el otro sonreía porque entre mas lo jalaba mas lo lastimaba, ikki se quejaba del dolor pero no se rinde, buscó otra forma.
Comienza a golpear los costados del mayor, el cuerpo del juez se encontró tenso resistiendo los desafiantes y desesperados golpes del ateniense pro quitarlo de su entre pierna.
Ikki dio su lucha pero aun asi el juez le hizo un sexo oral envidiable, realmente se veía lo experimentado.
- Hmmm…no sabes nada mal pollo jaja, ya quiero saber que tal sabe tu semilla- miro desafiante y lujurioso, el menor estaba sonrojado y jadeante pero mas que nada molesto por caer ante el juez.
Pateo y le dió de lleno en su estomago se levanto pero fue jalado por Radamanthys de vuelta al piso siguió forcejeando pero los besos demandantes lo apaciguaron un poco, y eso aprovechó el juez ya no perdió le tiempo y se metió la hombría del pollo a su boca para succionar y morderlo hasta llevarlo al límite de cordura.
No el de cabello azul no podía creer que disfrutara de la mamada que le hacía el juez esa lengua chupaba como dios.
-Ahhh …aah…rada…manthys ..maldito bastardo chupas ..ah como los dioses.- perdió su batalla ante tan buen amante
- soy un dios del sexo mocoso- respondió lascivo y termino su tarea. El de cabello azul se vino en la boca del mayor que gustoso debió hasta la última gota.
Se besaron, esos malditos besos que en su mente maldecía el pollo pero que se volvió adicto a ellos, no podía negarlo el juez de verdad era un dios del sexo.
Wybern colocó las piernas de ikki en sus hombros tomando la posición del yunque y lo penetro bien duro y certero; el orgulloso inhalo aire profundo mordiendo su labio, sin tiempo perdido comenzó a embestirlo bélico, en un principio resistió el menor peor ya no pudo aguantar y comenzó a gemir .
-. Ahhh….aaahh---eres una bestia….aaah puto infeliz hijo de..&%$#&&$
-. Jajajaj bien que te gusta cómo te doy lo veo y siento , aaahhh…ahhh eres bien pin&%$ estrecho…ahh que rico.!!- Radamanthys de verdad que si lo disfruta y se lo hacia ver al fénix para encabronarlo mas y valla que era erótico para él verlo enojado, y agresivo avivaba mas su deseo desenfrenado no podía creer que sus pleitos terminarían en la cama y peor o mejor aun con su rival de amores.
Mas sometido no puedo estar ikki,de fénix, pero el sometimiento resulto ser el mejor de su vida muy placentero aunque no lo dijera a los Anemoi para dispersare. Al salir del menor por unos momentos lo hizo para cambiar de postura ya ni siquiera intento llevarle la contraria lo mira retándolo diciendo “ahora que juez”.
Rdamanthys camba de la pose del yunque pasa hacer una pose la del a indra , el mayor se yergue sobre sus rodillas, el menor tumbado sobre su espalda echa sus pies contra el pecho del amante, Rada se inclina hacia adelante para comprimir los muslos de su amante contra su pecho; logrando una penetración máxima y profunda, la estimulación es fuerte para ambos gracias a la compresión del vientre haciendo que los anillos aprieten con mayor ahínco mientras el pene de ikki se masturba entre su abdomen y piernas .
Los cuerpos tenían su cadencioso momento, ya no había rivalidad, ahora disfrutaban lo que el destino bien planeado por terceros les planearon, los insultos pasaron de lado, las mascaras y pantallas se esfuman, , los hombres en ningún momentos se apartan de mirarse a los ojos.
Todo acontecimiento tiene un inicio y un final, y el pregonamiento llega a la cumbre, donde la convulsión orgásmica declara su fin. Esculturas hechas hombres, manchadas de un fino pero espeso manto viscoso, el interior de feniz derramando ese mismo manto, los cuerpos pesados quedan recostados, sus pechos luchan por recuperarse del recién compartido placer. La nada es lo que se oye ahora, pues los combatientes se han quedado sin voz y sin ganas, ya han descargado todo lo que tenían y mas. Ahora lo que les interesa es yacer con esa plenitud en su pecho.
=o=
Con los invitados….
Athena y Hades seguían en sus asuntos diplomáticos para el mejoramiento de la paz en la que habían llegado pero para ninguno fue de sorpresa ya no ver a fénix y wyvern ya que enterados de antemano sabían de sobra lo que ocultaban los corazones de esos dos , lo mas extraño fue no ver a Pandora e Hypnos.
Seguían sin imaginarse todo lo que sucedía dentro del castillo, pero no pasaría mucho hasta que le dios del inframundo lo intuyera.
No paso más que unos escasos minutos para que el matrimonio apareciera de la mano y con una sonrisa, por fin la chica de cabellos morados lucia contenta y el dios no puedo esperar a saber por qué.
-. Pandora, te ves muy hermosa y contenta, debió pasar algo muy interesante.
La chica no contesta inmediatamente, se tomó su tiempo y mira a su esposo para sonreír, por raro que se vea Hypnos igual corresponde, después dos pares de ojos ven a su señor.
-. Si mi señor, lo que pasó es que ya todo está en su lugar.- fue muy ligera su voz, los dioses ya entendían a lo que se refería la chica. El viento sopló y hades ya no tenía que preguntar, todo fue dicho resultando para bien.
=o=
-. Y ahora que sigue espectro del hades?- ikki quería salir de dudas ya que después de ese sexo desenfrenado y salvaje sintió algo en su pecho: no estar lejos de Radamanthys.
-. No sé, hay que dejar cosas salgan por si solas.
Ikki sonríe con mucha irionia pero dando la razón al a vez.
-. Tal vez sea el inicio de un nuevo capítulo, ¿tú qué dices espectro?
-. Un nuevo amor?.- alza su uni ceja con con diversión y curiosidad. No le desagragradaba esa opción y al parecer tampoco al fénix.
-. Uno nunca sabe.- los dos ríen mirándose a los ojos con ese fuego abrazador
-. Otra ronda?
-. Me leíste la mente.
Fin.