Miyagi había sido el primero en regresar, para poder alistar todo para la cena o mejor dicho, el gran banquete que Akihiko había conseguido, es por ello que había logrado escuchar parte de la conversación de Shinobu y Misaki, por fortuna fue él y no tenía planeado informarles a sus amigo, ya ese sería asunto de los otros.
Akihiko y Nowaki llegaron casi media hora después y gracias a Shinobu y Miyagi ya todo estaba listo, solo faltaba servir; todos bajaron para cenar y sin duda todo lo que Akihiko había fanfarroneado con respecto a su banquete, era más de lo que cualquiera de los presentes esperaría, los platillos eran exquisitos y a peasr que había muchísimo más que para seis personas, terminaron con todo; eso ayudó un poco ya que no había mucha conversación entre todos, los que más hablaron fueron Miyagi y Shinobu, ya que Hiroki aún se sentía algo cohibido, mientras que Nowaki solo tenía un semblante algo triste; en tanto que el rostro de Misaki era un poema ya que Akihiko pese a los rechazos por parte del castaño, no daba marcha atrás y le susurraba cada cosa que había que el ojiesmeralda de sonrojara ferozmente.
Luego de la cena suculenta y la poca charla en general, todos fueron a descansar, para esperar el nuevo día, ya que tal vez eso era lo que necesitaban para de una vez empezar con el pie derecho.
La visita de Misaki le había alegrado el día a Hiroki, nunca había imaginado que lo buscaría y pediría disculpas después de todo lo que sucedió, en ese momento agradecía no haberle guardado rencor por lo que había acontecido, le había metido un susto del infierno pero gracias a Dios no pasó nada grave; ahora sabía que podía confiar totalmente en Misaki y Shinobu; pero aún tenía muchas dudas en él mismo, si bien había avanzado mucho en su vida laboral, su vida amorosa era un desastre ya que había estado enamorado de Akihiko durante muchos años, pese a que al principio le hizo vivir un infierno, así que se consideraba loco por haberse enamorado de alguien como él, pero ese sentimiento aunque seguía en su corazón, ya no era como antes, era solamente un sentimiento de cariño de una gran amistad y el apoyo de Misaki le había abierto los ojos por completo, ahora podía decirse con todas las letras, que amaba a Nowaki.
Quería buscarlo y hablar con él, decirle sus sentimientos, como en algunas ocasiones se lo había dicho Nowaki, pero tenía miedo, le había rechazado más de una vez y todo por cumplir esa ridícula promesa, la que ahora ya no existía más; lo otro era Akihiko, él le había pedido ayuda y si bien todo lo que aconteció no lo hizo con ese propósito, había logrado ayudar a su amigo, solo quedaba que Misaki le dijera sus sentimientos y solo en ese momento le diría primero todo a Akihiko y luego si Nowaki no le guardaba rencor, se confesaría.
Al día siguiente fue Hiroki el primero en bajar, estaba tan animado, que se puso a hacer el desayuno y los preparativos para el almuerzo de todos, en cuanto los demás bajaron le agradecieron el gesto y fue ahí que notaron la diferencia, esa que le había recalcado Shinobu a Misaki, por lo que este último solo sonrió de manera sincera por haber hecho lo correcto; ahora sabía que Hiroki no se cohibiría y Nowaki dichoso lo iba a aceptar, por lo que él también quería gozar de esa felicidad y amor, pero era un tanto orgulloso como para confesarse a Akihiko, cosa que nunca le había pasado con Nowaki, tal vez realmente nunca sintió amor por él, pero se esforzaría por no perder este nuevo amor.
Después de desayunar se alistaron para ir a la playa, llevando el almuerzo que había ayudado a terminar de preparar, tenían planeado pasar su última semana de vacaciones de la mejor forma posible.
En cuanto llegaron Shinobu arrastró como siempre a Miyagi hasta el agua, para esos momentos ya sabía nadar bien e incluso hacía carreras con el mayor al cual podía ganarle sin mucho esfuerzo; en cuanto a los demás, solo dejaron que las cosas se dieran por si solas.
-fuffh –suspiró decidido Misaki, aunque solo fuera algo simple, debía dar el primer paso- me muero de calor, voy por algunos helados, me… me acompañas Usagi san? –pregunta un tanto sonrojado-
-eh? –sorprendiéndole un poco la iniciativa de Misaki- claro que sí –responde sin pensárselo más, a lo que ambos se marchan, no sin antes de que Misaki le diera una mirada a Hiroki, lo que ya sabía que significaba-
-… -Hiroki no sabía cómo iniciar una conversación, veía a Nowaki con la mirada perdida en el mar, se le veía desanimado y sabía que era por su culpa-
-me vas a seguir ignorando? Incluso aunque estemos solos –suelta de pronto Nowaki, mirando con tristeza al castaño que solo estaba encogido abrazando sus rodillas-
-… -confirmado, Nowaki le guardaba rencor, pero no sabía que decir, tenía un nudo en la garganta-
-iré a nadar –se levanta de golpe dispuesto a irse, a lo que Hiroki desesperado se para también-
-no!, espera Nowaki… -sujeta la muñeca del ojiazul, deteniendo así su paso- yo solo… quiero disculparme –Nowaki se suelta y da media vuelta viendo como el castaño estaba cabizbajo- sé que toda esta semana yo te he evitado, pese a que siempre fuiste muy bueno conmigo, pero yo… -pensando en que decir, para no meter la pata- estoy un poco confundido –suelta sacándole una sonrisa al médico- solo necesito tiempo –de pronto siente la cálida mano de su amado tocándole su mejilla-
-me alegra saber que no me odias, creí que había hecho algo que te molestara
-claro que no! –menciona de pronto sujetando con sus dos manos a la mano que la acariciaba- cómo podría odiarte después de todo lo que has hecho por mí, después que me salvaste la vida… -cierra los ojos poniendo una expresión triste- perdóname por haber hecho que pensaras de esa forma, prometo no volver a ignorarte, aunque sobre lo otro, -mirando fijamente a Nowaki, para luego sonreírle de manera tierna- solo necesito un poco de tiempo, sí?
-el tiempo que quieras mi amor –se inclina para robarle un tierno beso a su amado, lo que hace que se sonroje- pero hasta entonces, no me separaré de ti ni por un instante
-gracias Nowaki, gracias por quererme tanto
-yo te amo Hiro san, te amo con todo mi ser, pero no me dejes de lado nunca más por favor
-te lo prometo Nowaki, estaré a tu lado mientras tú quieras –menciona emocionado y con una sonrisa que a cualquiera iluminaría el día-
-me alegra oír eso porque sé que nunca dejaré de querer… -devolviéndole la sonrisa- muy bien, ahora vamos a nadar
-no, espera!, es que no quisiera, la otra vez se me olvidó todo lo que me enseñaste y…
-es por eso que no entraste ni una vez en toda la semana al agua? –el menor asiente- en serio creí que era porque no querías estar cerca de mí, pero solo tienes que aprender de nuevo, verás que poco a poco, tu miedo volverá a irse y más pronto de lo que imaginas estarás como Shinobu –menciona señalando al par que estaba divirtiéndose en el agua- así que vamos que yo te sostengo –toma la mano de su amado y se lo lleva corriendo-
…
-wow!, sí que tenías ganas de helado –viendo como el menor devoraba su segundo helado, mientras caminaban de regreso con más helados para todos- pero lo que más me sorprende y alegra a la vez, es que ya no estés tan pegado a Nowaki, aunque no me molestaba hacer mal tercio –se burla-
-Usagi san… -se detiene en seco- en serio me amas?, no es una mentira solo para hacerme caer? –pregunta dudoso-
-si Misaki, te amo, ya te lo dije ese día en el auto, sería el hombre más feliz del mundo si me aceptaras
-Nowaki no me ama y descubrí que yo tampoco lo amo… -suelta de repente sorprendiendo a Akihiko- aún no puedo decir totalmente que sea amor, pero Usagi san, tú me gus… gus… gustas –susurra lo último-
-perdón, qué dijiste Misaki? –pregunta ilusionado y es que si lo había escuchado muy bien y solo quería cerciorarse-
-ya lo dije y no pienso repetirlo! –grita totalmente rojo hasta las orejas- sé que me oíste, así que confórmate! –le arrebata la bolsa con los helados y sale corriendo hacia donde los demás-
-lo sé y claro que me conformo, por el momento –menciona para sí mismo al tiempo que inicia la carrera para alcanzar a su pequeño en todo sentido-
La mañana pasó volando, esta vez y después de varios días, por fin se sentía la atmósfera llena de felicidad; Shinobu tenía razón, antes por más que Miskai parecía conforme con estar pegado a Nowaki, no estaba feliz, pero ahora que había sido sincero y aunque no del todo con sus sentimientos, podía pasarla realmente feliz, pero lo que más le alegraba era ver a Nowaki igual o más feliz que él, enseñando nuevamente a nadar a aquel que había odiado sin una razón justificada, ahora por fin podía sentir paz en su corazón.
Almorzaron y volvieron al mar, había disfrutado del agua como o mejor que el primer día, terminaron quemados y cansados, pero felices, porque ya todo iba por buen camino.
…
-dormirás de nuevo en el futón?, -pregunta Misaki al médico-
-si Misaki, es lo mejor, yo te pedí un tiempo, pero creo que ya no lo necesito, lo siento mucho Misaki, pero yo estoy…
-enamorado de Hiroki, -suelta de repente- lo sé, lo supe desde hace mucho, solo que no quería rendirme
-pero cómo… bueno, creo que fui muy obvio –responde con un semblante de preocupación-
-en este viaje sí, pero no te pongas así Nowaki, yo sabía que tú no podías amarme de manera pasional, que solo me querías como un hermanito, al contrario, soy yo quien debería disculparse, porque use ese cariño que me tienes y mi enfermedad para aferrarte a mi
-no Misaki, tú no me usaste, fui yo quien quiso darme una oportunidad contigo, pero cuando supe que lo nuestro debía terminar, no hice nada y te fui infiel, de muchas formas, tenía planeado terminar lo nuestro después de este viaje, pero no quería herirte, pero creo que no supe ocultarlo como debía, lamento arruinar el resto de tus vacaciones
-no lo hiciste, créeme, bueno quizás si no hubiera sabido lo de Hiroki, no me hubiera percatado de todo lo que sentías por Hiroki, pero en realidad fue Tsumori quien me lo contó, en sí, se puede decir que le saqué la información a la fuerza
-no puedo culparlo, él me lo advirtió… pero en serio lo lamento
-descuida, ya lo pensé con la cabeza fría y también me ayudaron a reflexionar al respecto y más me duele el verte infeliz y triste que del hecho de que no me ames, así que por favor sonríe y me sentiré mejor
-oh Misaki, en serio eres el mejor –abrazando al menor-
-solo me queda algo que decirte, es sobre Usagi san, -cortando el abrazo- él se me confesó
-ah, bueno, su interés por ti tampoco me pasó desapercibido, pero no creí que se confesara tan pronto, pero bueno no le puedo reprochar nada ya que antes le había confesado mis sentimientos por ti, sé que no debería decirte esto, pero quiero ser sincero contigo del todo
-ya lo creo que no puedes reprocharle nada porque tú también estás haciendo lo mismo con Hiroki, y cómo es, él te dijo algo sobre sus sentimientos?
-me pidió un poco de tiempo y yo se lo pienso dar
-no sé en lo que piensa, pero es mejor respetar su decisión
-y que hay de ti Misaki, tú también amas a Akihiko?
-creo que me estoy enamorando de él –sonríe bobamente-
-me da gusto por ambos, pero eso sí, le advertiré que no debe hacerte sufrit, porque no solo Takahiro lo querrá golpear, sino yo también –le sonríe al menor mientras le despeina sus cabellos- bueno, será mejor dormir –preparando el futón-
-duerme conmigo Nowaki, prometo no hacer nada, que sea el cómo dos hermanos comparten la cama, sí? –Misaki era honesto, no iba a seguir con lo mismo con Nowaki y también le daba pena que el ojiazul tuviera que dormir en ese incómodo futón cada noche-
-está bien Misaki, acepta metiéndose en la cama, a lo que Misaki se pone feliz y se acurruca en los brazos del médico para en unos segundos caer dormido-
…
-ya falta poco Hiroki!, estoy tan feliz, Misaki me dijo que le gusto –mencionaba tan alegre como nunca- ojalá pronto me diga que también me ama
-lo sé y me alegro por ti Akihiko –sonríe sinceramente-
-en serio muchas gracias por ayudarme Hiroki y en serio lamento usarte de esta manera, más aún cuando aún sientes amor por mí
-eso, bueno, yo no… -es interrumpido por el peliplata-
-gracias por tu sacrificio, espero que pronto puedas enamorarte de Nowaki, porque se ve que él en serio te ama
-lo sé –susurra con una sonrisa- supongo que mañana secuestrarás nuevamente a Misaki, verdad?
-claro que sí, y no sabes lo que tengo planeado –se acuesta en un lado de la cama- por lo que será mejor dormir, ya que quiero ser el primero en dejar la mansión
-eso si es raro, Usami Akihiko madrugando, a ver si es cierto –se burla mientras se mete al otro lado de la cama-
…
-ya basta Miyagi por favor!! –suplicaba Shinobu todo sonrojado-
-te dije que te castigaría por haberte portado mal Shinobu –palmeando nuevamente el trasero desnudo de Shinobu con la palma de su mano, las nalgadas no eran tan fuertes, pero si dolían después de haber recibido ya unas cuantas palmadas-
-sí, pero pensé que solo era una broma, además se siente raro –y es que por alguna razón se sentía más excitado que nunca, tenía una erección, la cual no era vista por Miyagi debido a la posición del menor-
-ok, creo que es suficiente umh? –al tratar de parar al menor se da cuenta de ese pequeño detalle por el cual el ojigris había dicho que se sentía extraño- Shinobu tú…
-es tu culpa! Y no!, no soy un sucio masoquista!! –le grita, limpiando sus lágrimas y es que estas habían salido más por la vergüenza que sentía-
-lo siento Shinobu chin, yo no quise provocar esto –menciona apenado y tragando duro, ya que ver así a su pequeño lo hacía querer ver incluso más-
-una disculpa no es suficiente –fulminando con la mirada al pelinegro- ahora debes hacerte responsable y solucionarlo –menciona con un semblante el cual Miyagi nunca le había visto, y con esa determinación se sienta a horcajadas sobre Miyagi-
-Shinobu chin?... –más nervioso que nunca levanta las manos-
-ya no soy un niño Miyagi y lo acabas de comprobar –rodeando con sus brazos el cuello del mayor- por favor no me rechaces –besa los labios de su amado- o no te lo perdonaré –amenaza-
-… -ese fue el detonante para que la lujuria, que Miyagi mantenía a fuerzas reprimido, despertara de manera voraz- no es necesario, porque yo mismo no me lo perdonaría –le susurra al menor en el oído, para luego tomarlo de las nalgas que ya estaban enrojecidas, y levantarlo así, sacando un sonoro gemido al menor- no quería tomarte tan pronto mi hermoso Shinobu –le habla mientras lo llevaba a la cama- pero viéndote así no me puedo contener –lo hecha en la cama y se posiciona sobre él, devorando de inmediato los labios del ojigris-
-mmhhgg –ese beso había tomado por sorpresa al menor, pero decidió solo disfrutarlo- ahhh estoy tan feliz Miyagi, siempre soñé con esto –volviéndose a besar, era un beso francés, pero en si más parecía una batalla campal entre las lenguas de ambos- ahhh –se separa del beso solo para gemir nuevamente al sentir como Miyagi toma su miembro para masturbarlo, eso era mejor que todos los sueños húmedos que había tenido en su vida y lo mejor es que era real-
-mi hermoso Shinobu… -menciona agitado mientras empieza a repartir besos por todo el cuerpo del menor, dedicando más tiempo en las áreas más sensibles, como esos deliciosos pezones que esperaban ansiosos ser devorados-
-ahí ahhh eso me gusta… mucho ahhh!! –Shinobu era muy honesto con su sentir y es que ahora que su anhelo más grande estaba realizándose, no iba a cohibirse con nada-
-ja, ja, me encanta tu sinceridad mi niño –dejando de saborear esos botones que ahora estaban rojos, para de inmediato bajar por su abdomen hasta llegar a los blancos muslos que se abrían para él; no dudó en repartir besos por todas partes, sacando más y más gemidos de su amado, los cuales no podías ser más sonoros cuando llegó a meterse el pene del rubio en su boca, en ese momento Shinobu estaba en la gloria y tan excitado que no había sentido dolor cuando Miyagi le introdujo un primer dedo en su entrada, esa acción solo lo hacía gemir aún más, pero en el segundo y el tercer dedo si sintió un poco de molestia, pero no dejaría que eso interfiriera en su entrega de amor-
-aaahhh –era el primer orgasmo del menor, eyaculó como nunca antes y el mayor ni corto ni perezoso se tomó hasta la última gota de ese delicioso néctar, encendiendo así nuevamente a Shinobu quién apenas estaba recuperando el aliento, pero quería avanzar más, así que lo exigió- ya Miyagi!! Ahh, ahh ya estoy listo ahh, rápido, por favor! –suplica todo sudoroso y sonrojado-
-amo que seas tan ansioso mi amor, ha, ha –jadeando- yo tampoco puedo esperar más, relájate mi niño, trataré de no lastimarte –menciona mientras posiciona su miembro en la entrada del ojigris, para de inmediato comenzar a introducirlo, con cada movimiento veía las reacciones de Shinobu y es que si notaba algo extraño, iba a detenerse-
-aahhhh –le dolía muchísimo, pero iba a aguantar, estaba seguro que ese dolor sería pasajero, era normal ya que era totalmente virgen, ni siquiera había querido usar unos de esos juguetitos que alguna vez se había animado a comprar, no!, solo iba a sentir placer de ese lugar con su amado Miyagi- sigue Miyagi, por favor no te detengas, -pide entre gemidos, lo que encendió más a Miyagi, a tal punto de no detenerse hasta meter su miembro por completo, haciendo soltar a Shinobu un alarido, que le alertó a no moverse; pero no tuvo que esperar mucho ya que en menos de un minuto Shinobu comenzó a mover sus caderas, queriendo más contacto, a lo que el mayor comprendió y decidió complacer a su pequeño-
-sí!! Ummhh más, más –exigía Shinobu gimiendo a más no poder- me encanta Miyagi, quiero más! Ahh, ahhhh –el ojigris hacía de todo por descontrolar a Miyagi, aunque el mayor sabía muy bien que Shinobu no lo hacía por eso, pero es lo que provocaba-
-ha, ha mi hermoso Shinobu, te amo, te adoro mi cielo! –embistiendo con mayor velocidad, mientras el menor se retorcía del placer debajo suyo, eyaculando nuevamente, estrangulando así el pene de Miyagi, provocando que este también terminara dentro de su amado niño-
-ha, ha, -recuperando el aliento- fue grandioso –menciona extasiado- te amo Miyagi… te amo mucho… -susurra como último para quedar inconsciente del cansancio-
-y yo más mi pequeño –cubriéndose con una cobija mientras encerraba al rubio entre sus brazos-
Continuará...