Capitulo4. El Acercamiento.
Sasuke
Vaya, eso no salió como quería, por lo menos ya di un paso. Aunque se fue con la Hyuga, y eso me disgusto, al menos esa chica ya se calmo. Hinata es una chica diferente de las otras, por eso, cuando la vi tan débil, triste y temerosa, era como ver a una criatura inocente en peligro y recordé al dobe cuando era agredido por mi y los otros… otra vez esa imagen y esas palabras, eras horribles palabras ¿Cómo pude ser tan cruel? Mi hermano no me enseño eso. Si me viera ahora se sentiría tan decepcionado. En fin debo ya apurarme e irme al salón, antes de encontrarme con esos tipos o con la molestia de Haruno.
En mi salón, se rumoraba de un nuevo chico hermoso, y otros decían que ese chico era el dobe y todos quedaban con la boca abierta, pero luego seguían hablando de él, “diciendo como no lo vi antes, bla, bla, bla, es muy bello, bla, bla, bla, voy a casarme con él, bla, bla… ¿Eh? Nunca le prestaban atención ¿Y ahora quieren que sea su amor platónico? Vaya la gente en verdad puede ser muy superficial, como si creyeran que acercándose al dobe este le va a dar la mínima atención, después de cómo lo tratamos todos, dudo que quiera hacer amigos como ustedes. Aunque ahora que lo pienso, ese usuratonkachi tiene aquí un par de amigos, además de Hinata tiene a...
Ya estamos en el segundo descanso, medite un poco, y trato de ver cómo puedo enmendar las cosas, ya sea de una manera buena o mala, pero con cada cosa buena aparece 3 malas. No soy un hombre se sentimientos, no me gusta demostrarlos, pero cuando se trata de demostrar mi lado malo, soy muy bueno en eso. Oh, miren ahí está como siempre ese dobe sacando cosas de su casillero, no ha cambiado mucho, sigue siendo muy torpe, y lo sé porque siempre trata de cargar los libros y meter otros al mismo tiempo, ocasionado que se caigan al suelo, jeje. ¿Eh? ¿Acaso me reí? No, no creo. Si hubiera sido como en el pasado, me habría acercado sigilosamente, me habría puesto de tras de ese rubio, lo miraría un buen rato contemplándolo y oliendo su aroma sin querer hacerlo, siempre olía a orquídeas, una flor dulce mas no empalaga, pero ahora vuele a eso y una combinación de perfume masculino pero sutil ¿Eh? ¿Qué mierda? Salí corriendo y note como el dobe miraba volteaba confundido por aquella brisa que lo movió sus cabellos ¿Cómo no me di cuenta que me estaba acercando inconscientemente a ese dobe? Encima de eso, comencé a contemplarlo y sentir su aroma sin darme cuenta, como lo hacía antes de que cambiara. Me sobo la frente para calmarme un poco, si mi nii-san estuviera aquí me ayudaría con esto, el es muy bueno con estos temas de disculpas y sentimientos. El podría ayudarme, pero de seguro el tiene sus problemas con esa persona que le gusta pero aun así…
** Sono te hanasanaide, hanasanaide Boku ga sobani iru kara…** (El el tono de mi nii-san)
-¿Hola? ¿Itachi?... – Conteste desganadamente como siempre.
-** Ototo, me alegra ver que estas de tan buen ánimo como siempre**- Se escuchaba feliz.
- Aja ¿Qué es lo que quieres? Estoy en el receso de la escuela, no tienes mucho tiempo. – Para que fuera al punto.
- **Bien, te seré muy directo. Este viernes te hare una visita hermanito** -
- ¡¿Qué cosa?! – Me exalte mucho, no me molesta que venga, pero está en medio de su de semestre y pronto vendrá los exámenes y eso…
-** Se lo que piensas, y descuida, mi escuela estará cerrada toda la siguiente semana por desinfección y control del edificio. Nuestro instituto es enorme, por eso se demorara un poco. Aun así, algunos maestros nos dejaron un poco de tarea, jaja, sabes que lo acabo rápido. No importa, me dará mucho gusto verte mi lindo hermanito, espero ya llegue el viernes, ya quiero hablarte de quien es esta persona a la que amo. Nos vemos** - Colgó.
Así que mi nii-san vendrá, esto significa más dolor de cabeza, el es muy diferente a mí, aunque seamos casi parecidos somos diferentes, aunque a veces tenemos similitudes y tenemos ideas parecidas, pero aun así, dos estanques de agua tiene un arroyo diferente. Suspire hondo y pesado, recargue mi cabeza en los casilleros, estaba cansado, muy cansado. ¿Ah? ¿Una multitud? ¿Qué demo…? ¿Están acosando al dobe? ¿Esas locas están acosando al dobe?
-Eto… ¡Déjenme en paz, dattebayo! – Trataba de salir de ese lugar pero las chicas lo arrastraban otra vez al centro de todo y lo tomaban de donde sea – Oigan, no, me lastimas ¡Ey! Ese es mi cabello, ¡No saquen la camisa! ¡¿Ustedes son de esta escuela?! ¡Ya, paren!
- “Todas: Kyaaaa, te queremos ¿Cómo te llamas? ¿Eres de aquí? ¿Tienes novia? ” – Lo empezaron a bombardear de tontas preguntas, vi como el dobe estaba nervioso y sus muecas de dolor e incomodidad demostraban lo mal que la pasaba, pero se ve gracioso. Escuche que una de ella dijo algo muy malo – ¿Eres nuevo en esta escuela, verdad? Eres hermoso ¿quieres salir conmigo? – Y se abalanzo a su cuello. El dobe abrió los ojos grandes, más de lo que ya eran, pero luego puso una expresión seria y algo molesta, quito los brazos de la chica lentamente y empezó a querer irse otra vez de la muchedumbre. La chicas trataron de pararlo, pero entonces el giro con una expresión fría y mostraba algo de desprecio.
- Ustedes son personas superficiales y patéticas. – Las chicas frenaron ante el tono frio y lúgubre de Naruto. Hasta yo me quede quieto – ¿No ven con quien están tratando? – Las chicas lo miraron confundidas – No creo, ya que son muy huecas. Yo soy el nerd, feo, pobre diablo, la rata de callejón, el pordiosero, el sabiondo sucio, el… huérfano y bicho raro de Naruto Uzumaki, de 4to año, división C. – Todos quedaron impactados, hasta yo – Es triste de solo por cambiar mi apariencia ustedes se arrastren como perros callejeros en busca de carne, rebajándose de ese modo. No me juzguen ahora, ustedes me hicieron así, y no sé si voy a llegar a perdonarlos algún día. – Ladeo un poco la cabeza y miraba al piso y puso una expresión muy triste y también una sonrisa de igual modo. – Ya que ustedes… me hicieron mucho daño… mi corazón… está muy herido y roto – Miro a las chicas aun con esa misma expresión pero hubo como un reflejo de luz que lo hacía brillar un poco, lo hacía ver como un modelo de revista – Nos vemos. – Y se retiro dejando a todas las chicas y expectantes con la boca abierta y sonrojados e impresionados.
Cuando el dobe giro y desapareció de la vista de todos, todos lo que estaban ahí, empezaron a gritar y a derrochar amor y corazones en todas partes, diciendo cosas como “yo curare tu corazón”, “pobrecito “y “que era hermoso”. Me tuve que tapar los oídos por el ensordecedor griterío por parte de las chicas y de admiración por algunos chicos que miraban. Mire con molestia todo ese asunto y solo bufe por lo verdaderamente tontos que son. Salí de ese lugar sin más. ¿Qué demonios les pasa a esas locas y locos? Casi me dejan sordo y despellejan al usuratonkachi. Ahora entiendo bien su punto, en verdad esta escuela está llena de gente falsa y superficial. Pero creo que me di cuenta muy tarde de eso, ahora debo corregir muy rápido todo lo que hice para poder tener en orden las cosas, si no logro que me perdone, jamás podre estar tranquilo, aunque quiera, y no sé porque esa manía de querer arreglar las cosas, pero si no lo hago, me volveré loco. ¿Ah? ¿Qué hace Sabaku ahí? Esta arriba de unos de los arboles, el es una persona distante y reservada, casi como yo, pero sé que tiene sentimientos muy frágiles debajo de esa capa de indiferencia. Me subí a ese, lo hice con mucho sigilo y con verdadera destreza, propia de un ninja, pero como de esperarse de mi compañero, apenas me acerque me dijo “¿Qué quieres Uchiha?” con su tono sin expresión de siempre.
-Eso debería preguntarte yo… ¿Qué haces aquí? – No me miraba, su vista estaba como hipnotizada en la nada.
- Solo medito, eso el lo que hago ¿Por qué preguntas? ¿No era qué ya no éramos un grupo? – Por fin me miro, pero su rostro y vos seguían sin expresión.
- Mmm, es verdad, pero de todo ese maldito grupo con el que mejor me llevo eres tú, aunque sea un poco – Le dije indiferentemente, era verdad lo que le decía, era como un compañero cercano, pero aun no lo considero un amigo completo.
- Ya veo – Volvió a girar su vista y se hipnotizaba otra vez – Yo pienso lo mismo Uchiha. Y en verdad me alivia que hayas querido terminar con todo eso de agredir al Uzumaki. Yo estaba pensando lo mismo hace un tiempo.
- ¿Y por qué no me lo dijiste? – Colando mis manos en los bolsillos le seguía hablando con tranquilidad.
- Se lo dije a tu novia, perdón, tu ex novia – Me asombre un poco.
- ¿Cómo que se lo dijiste a Haruno? ¿Qué le dijiste? – Me incline un poco aun sin sentarme y lo mire con en seño algo fruncido.
- Mmm… bueno, fue hace una semana, ella estaba cogiendo sus libros del casillero y me acerque para hablarle… me saludo indiferentemente, cambiando un poco de tema, nunca me agrado esa chica, siempre pensé que era una víbora, sin ofender Uchiha – Me miro aun con el rostro relajado.
- No me ofende, es la verdad, lástima que yo me di cuenta tarde, pero continúa. – Le dije algo más calmado.
- … Bien. Le dije que te llamara que quería hablar algo serio contigo, ella me contesto que si tenía que decirte algo se lo podía decir bien a ella. Me moleste, pero tuve que resignarme y decirle, sino… se vuelve una verdadera molestia. – Frunció un poco el seño ¿En verdad Haruno era tan insoportable con todos?
- ¿Qué le dijiste Sabaku? - Ya estaba impacientando tanto suspenso.
- Le dije, que quería hablar contigo al respecto del porque agredir tanto al Uzumaki. Hace más o menos 2 meses me estaba hartando de eso. Me di repugnancia a mi mismo por maltratar a alguien inocente y puro. Quería aclarar contigo el porqué la agresión a ese niño y tratar de persuadirte de que lo dejáramos tranquilo.- Se veía serio y arrepentido como yo, hasta triste (Estaba apoyando sus brazos en sus rodillas mirando aun hacia un lado) - Pero cuando Sakura Haruno escucho eso, se puso como histérica y loca y empezó a gritarme que si llegara a decirte esa estupidez me iba a patear el culo de la peor forma. – empezó a rascarse la cabeza con molestia y el seño fruncido y había agachado su cabeza y miraba hacia el frente. – Para ser una “señorita de clase”, es unas verdadera ****.
- Jajaja – Me reí con ganas, eso era anormal en mi, hasta Sabaku me miro asombrado, pero se contagio de mi y empezó a reír también. – Vaya, la verdad tienes razón. Esa chica es una verdadera plaga – Yo también me empecé a rascar un poco la nuca.
- Pero bueno, no me inmute ante ella, es mas solo me dio lastima. No iba a abandonar la idea de decírtelo, pero ella siempre te arrastraba y no me daba la oportunidad de hablarte y con eso que cuando intenté llamarte, ella me quito el celular, lo piso y lo tiro al agua. – Dijo con notoria molestia.
- ¡¿Ella te rompió y te tiro el celular al agua?! – En verdad estaba me quede asombrado a que tal extremo llego Sakura para que Gaara no me hablara. – Vaya… eso es woow.
- Si lo sé… Pero me alivie que por tu cuenta hayas decidido acabar con esto, y que abandonaras a esa zorra, sin ofender de nuevo.
- No, no me ofendes. – Ambos reímos por debajo. - ¿Y qué haces aquí? O mejor dicho ¿En qué meditas?
- En muchas cosas, principalmente en la nueva imagen de Uzumaki. Yo creo que no debió haber cambiado, era perfecto tal como era. – Dijo acostando entre sus brazos y estos se apoyaban en sus piernas. ¿Eh? No sé porque, pero algo de lo que dijo Gaara no me gusto.
- ¿Cómo perfecto tal como era? No digo que estés errado, pero ¿Por qué lo dices? – Me miro aun recostado en sus brazos.
- Porque es verdad, el era dulce, listo, inocente, sincero, determinado, muchas cosas que no caben en un mundo lleno de malas personas que lo lastimaría, pero aun así, aunque le hayamos hecho todo eso y aunque haya cambiado su imagen, el sigue siendo el mismo chico de siempre. – Dijo mirando esta vez abajo. Mire también y vi que ahí estaba el dobe con Hinata y un par más de su amigos.
- ¿Estas mirando al usuratonkachi? – Me sorprendí, más que todo eso me molesto.
- Yo ya estaba aquí. El llego luego, pero aun así no dejo de mirar y pensar… aunque… veo que te molesta ¿Por qué? – Me miro y apoyo su cara en una de sus mano esperando que le respondiera algo que ni yo sé.
- No me molesta, solo me sorprende ¿No odiabas a ese dobe? – Trate de verme más relajado.
- Nunca dije eso. Sai me arrastro a esto diciendo que sería divertido, por un par de meses lo fue, pero después empecé a volver a razonar y vi que era estúpido. – Gaara este año se nos unió, solo lleva aquí 4 meses, pero aun así el razono más rápido que yo. Otra vez me sentí frustrado.
- Bien… tienes razón, fue estúpido ¿Qué vas a hacer ahora? – Me miro algo confuso. - ¿Vas a tratar de arreglar las cosas? – Volvió a voltear.
- Claro que quiero… pero no es fácil. Aunque dicen que a veces esperando el momento ayuda, así no presionas nada. – Eso me pareció ilógico.
- ¿No te parece que no haciendo nada, no se resolverá nada? – Trate de ser lo más directo posible.
- Si, lo sé. Pero el debe estar molesto, es mejor esperar a que las cosas se calmen un poco. Ya que las cosas a partir de ahora se le complicaran.
- … - Lo mire confundido - ¿Eh? ¿A qué te refieres? – El me miro seriamente.
- Solo te digo que no descuides a una mujer rencorosa… porque al más mínimo descuido… no dudara en tragarte. – Sin más que decir se paro y salto a otra rama de otro árbol para ir bajando de rama en rama hasta llegar al suelo (Y todo con los ojos cerrados y las manos en los bolcillos) en verdad ese chico es habilidoso.
Me quede ahí en ese árbol viendo a Naruto. Era verdad, aunque haya cambiado un poco… no deja de ser Naruto. Una sonrisa de lado se dibujo en mi cara y baje de ese árbol.
Naruto
Vaya, es relajante estar con mis amigos después de de ser invadido por esas locas. Vaya, la gente se ha vuelto acosadora con mi nueva persona, ¿Eh?
-¿Por qué me miras así, Shikamaru? – Shikamaru Nara es de mi mismo año pero diferente sección.
- La verdad es sorprendente como cambiaste, pero es muy fastidioso ahora que todos te siguen. – Bufo con su típico tono de molestia.
- Shikamaru tiene razón Naruto-kun ¿No crees que llamas mucho la atención? – Él quien me habla ahora es Chouji Akimichi.
- Si, lo sé. Pero solo esto demuestra lo superficiales que son todos-ttebayo – Me cruce de brazo haciendo un puchero de niño molesto.
- Je, pero veo que no cambiaste, sigues siendo el mismo retardado – Inclino su cabeza hacia atrás con un tono pesado e burlón.
- ¡¿A quién llamas retardado?! ¡Baka yaro! (Bastardo estúpido) – Me moleste mucho.
- ¡A ti! ¡Kisama yaro! (Desgraciado) – Ambos nos miramos con ojos de enfado y notaba como salían las chipas de rencor de nuestras vistas.
- Eto… chicos… vamos a calmarnos ¿Chouji qué haces? – Dijo Hinata en al escuchar eso Shika y yo volteamos a ver a Chouji. Chouji estaba dado vuelta de espaldas con una caja. Hina, Shika y yo nos acercamos para espiar lo que hacía.
- ¡AHHHHH! ¡INUSHISHI! (Cerdo) ¿te pensabas comer eso sin invitar? – Chouji giro lentamente y trato de esconder la caja.
- No trates de esconder nada, Chouji, siempre compartimos todo, no puedo creer que me escondas algo… - Shikamaru parecía molesto de verdad.
- Chi-Chicos, va… vamos, no se enojes. Estos chocolates no se consiguen fácilmente y… - muy nervioso.
- Estas… muerto – Empezó una pelea para quitarle la caja a ese mezquino de Chouji, en esa pelea una capa de humo nos envolvía y nos movíamos girando por toda el área. Esto duro unos minutos y por fin.
- ¡¡JAJAJA!! ¡¡CONSEGUIMOS LOS CHOCOLATES!! ¡¡DATTEBAYO!! – Yo estaba con un pie encima de la espalda de Chouji y otra arrodillada a un lado de du cuerpo mientras que Shikamaru estaba sentado en sus piernas. Chouji lloraba por la perdidas de sus dulces pero antes de que su fuerza lo invada Shika agarro dos barras de chocolate, y yo cuatro, la caja tenía como 30 y el ya se había comino como 13.
Cuando mi amigo de mejillas espirales se levanto agarró la caja y lo abrazo posesivamente y con un aura amenazante de que si le sacamos una más nos mata. Sin más que decir Chouji salió corriendo dejándonos solos a Shika, Hina y a mí. Shikamaru estaba comiendo el chocolate lentamente como corresponde. En cambio yo me acerque a Hinata y le extendí uno de los cuatro que había tomado.
-¿Eh? ¿Naruto-kun? – Me miro confundida, yo solo la mire sonriendo.
- Tenlo, son deliciosos, vamos acéptalo, además lo tome para ti y no pienso dárselo a nadie más que a ti – Vi como se puso como un tomate ¿Le estará dando fiebre?
- Ah… eto… ha-hai, arigato Naruto-kun – Tomo el chocolate muy tímidamente y solo sonreí mas al ver lo tierna que era. Voltee mi vista ya que me pareció haber escuchado algo o a alguien, mire el árbol cerca de nosotros, no sé porque, pero me parece que había alguien ahí. – Eto… ¿Naruto-kun? ¿Estás bien? – Voltee a ver a Hinata, creo que me quede un largo rato mirando el árbol.
- Hai, solo me pareció ver algo, pero no era nada, no te fijes. – Le acaricie los cabellos y ella se sonrojo, jaja, se apena muy fácil.
Hablamos ahí hasta que termino el descanso… fuimos a nuestras clases, es una lástima que todos vayamos a distintas divisiones. Al cruzar el pasillo por donde tenía que ir para llegar a mi salón vi mucha gente ¿Habrá pasado algo? Me trate de acercarme para ver que paso y cuando llegue a una estudiante le pregunte ¿Qué sucede? ¿Esperan a alguien? Y la chica al verme se quedo viéndome con la boca abierta y se le subieron los colores y grito como loca, empezó a decir que era yo a quien buscaban y yo dije ¡¡¿WTF?!! Empezaron a querer acorralarme de nuevo, me puse nervioso, la gente estaba prácticamente encima de mí, estaba en problemas… ¡No! ¡Ya no soy ningún niño llorón! ¡Dije que le daría lo que se merecen y lo hare-ttebayo!
Respire hondo y exhalé profundo, cerré los ojos para tratar mejor de calmarme… pensé en todo y en nada a la vez, cuando abrí mis ojos, sabía que mi cara de niño había desaparecido, las chicas seguían acorralándome, pero tome a una del brazo y la acerqué a mí colocando mi otro brazo alrededor de su cintura, todas callaron… la chica que tenia aferrada a mi parecía estar sorprendida, con la cara roja y se veía asustada, sonreí internamente ante eso, pero mantuve mi rostro sereno sin quitar mis ojos de ella y ella de los míos. Tome su mandíbula con mi mano derecha, mi dedo índice rosaba con el borde de su labio y mi pulgar estaba en su mejilla, la seguía mirando serenamente lo que provoco que se sonrojara un poco más, todo esto ante la mirada de todos.
-¿Sabes? Su acoso solo me lastima más. Se buena y regresa a tu clase, no querrás que te regañen ¿Verdad? – Mientras le decía eso, con una vos muy madura y que uno diría algo sexy, me acercaba lentamente a su rostro y frene para terminar de decirle eso, para finalmente dedicarle una sonrisa dulce, que mas que sincera, era muy prepotente y arrogante, pero ella, al igual que las otras, no lo notaron. La solté delicadamente y mire a las otras con una sonrisa y ladeando un poco la cabeza. – Ya vayan a clases si – Finalice cerrando mis ojos, a lo escuche suspiros y las chicas empezaron a desmayarse. Como no sabía qué rayos pasaba, con una gran habilidad, para no lastimar a las chicas en el suelo, evite a esas personas para ir a mi salón. Solo escuche que ellas decían cosas como, “cásate conmigo”, “es tan hermoso”, esas tonterías de niñatas agrandadas, pero bueno, que mejor manera de vengarme que dándole ilusiones para destrozarlas completamente. No es algo tan malo, pero tampoco algo bueno, recuerdo que mi nii-san me decía que mama siempre decía que hay que tratar a las chicas caballerosamente, estaba de acuerdo con eso, pero si las chicas me trataron como basura antes, ¿Cómo quieren que las trate bien ahora? No señor. No olvidare tan fácil todo. Bien basta de afligirme, me voy a mi salón.
El resto del día paso igual, al fin pude irme a casa. Estaba muy feliz, salude a mis amigos, debía apurarme ya que había nubes y era muy obvio que llovería, así que tome un atajo y cuando caminaba por la plaza (La estaba atravesando) vi más adelante a dos figuras, se notaba que eran del instituto pero no sabía quienes era, aun así no sé porque, pero me escondí entre los arbustos y árboles y me escabullí hasta estar cerca de esas dos figuras. Aun no se distinguían bien por la luz anaranjada del atardecer, trate de agudizar mi vista, las nubes ya estaban más presentes y gracias a eso pude notar quienes eran y para mi sorpresa, esas personas eran Sasuke-teme y la ama (Perra) de Sakura. No era algo que debía interesarme, así que me iba a ir, pero oí que estaban hablando de mí, de su relación y de cómo le advertía de algo que me dejo con la boca abierta del impacto.
Hablaron por un rato, cada palabra solo me impactaba mas, una revelación se me hiso, a la cual me acorde recién pero de igual modo me quede aun así. Llegaron a discutir y Sakura empezó a golpear a Sasuke, primero cachetadas que hasta a mi me dolían, esa mujer tiene la mano muy pesada para ser mujer, pero el teme no hacía nada, se dejaba hacer, dejo de un lado las cachetadas para empezar con los golpes y luego con los golpes bajos, esa mujer está loca, ese tipo ni siguiera la detiene ¿Por qué? El cielo comenzaba a oscurecer un poco más, las nubes grises ya estaban sobre nosotros, sentía los estruendos de los truenos que querían anunciarme que llovería muy pronto, aun así, no me moví y seguí mirando, el teme ya estaba en el suelo, ya que esa psicópata lo golpeo con su bolso en el estomago y este cayo. No creí esto, ¿Por qué el no hacía nada? Aunque lo odie no me gusta ver a la gente así, oí que ella le hiso una pregunta y el respondió algo que me dejo asombrado y perplejo, vi como ella agarraba una rama muy larga y la punta se veía muy peligrosa, me quede frio, no sabía que es lo que esa sádica pensaba hacer, o mejor dicho no quería creer lo que creo que tiene pensado hacer, oí como le decía unas palabras, palabras que significaba algo como una despedida y luego hiso una amenaza contra… mi. Sakura estaba a punto de clavar eso en algún lugar que no quería saber, me pare, estaba por salir pero… el teme tomo la rama y empujo a Sakura… le dijo cosas que me hicieron sorprender y creo que estaba empezando a querer derramar unas lagrimas, pero las contuve, aun no se las merece. Sin más rompió la rama y lanzo los pedazos lejos y le dijo a esa baka que se largara. Sakura se fue hecha un demonio oscuro y rojo, pero el teme no le quitaba la vista. Empezó a llover, pero aun así no me moví, espere ahí, viendo como el teme dejaba de observar el camino por el cual se fue la plasta rosada y con los ojos cerrados subía su vista al cielo, recibiendo las gotas de lluvia en su rostro lastimado, pero aun así se veía relajado. Inclino la espalda un poco hacia adelante agachando la cabeza, giro y abre los ojos grandes al verme parado frente al él, ni yo me di cuenta de cuando había salido de mi escondite para acercarme al él, estaba viéndolo con los parpados algo caído, con tristeza y sentía como el agua de la lluvia caía por mi rostro, estaba lloviendo mucho y muy fuerte. Nos quedamos mirando un rato, sin decir aun nada.
Sasuke
Ya salí de la escuela, estaba cansado y solo quería llegar a casa. Aun no entiendo cuando me enoje solo porque Naruto le dio ese chocolate a su amiga, aun así me molestó y no quiero pensar en eso, pero aun recuerdo las palabras que le dijo, en verdad ese tipo me exaspera, cambia de personalidad cada rato… me pare cuando razone algo, que no era así, solo era su verdadero yo cuando estaba con la gente que quiere. Recuerdo cuando pasaba por el pasillo, el dobe tomo a una chica y se le empezó a acercar a su rostro, por un momento mi corazón dejo de latir pensando que Naruto iba a besar a esa chica pero solo le dijo algo para soltarla y decir algo a las otras luciendo todo como un Don Juan. Suspire pesado, mejor me voy a casa… ¿Hm? Algo me paro y eso era la Haruno, que estaba frente a mi apoyada en un árbol de la acera, con las manos en su bolso y un pie recargado en el árbol a la altura de la rodilla. Solo fruncí el ceño un poco y solo iba a pasarla de largo, pero ella me sostuvo del brazo y cuando voltee a verla, ella tenía un rostro sin expresión y muy seria me dijo que si podía hablar con ella. Creí que tal vez sería una mala idea, pero debía terminar con esto más claro que nunca ahora y para siempre.
Caminamos por la acera y llegamos a la entrada de la plaza, ella de adentro y yo la seguí. Llegamos a un centro rodeados de arbusto y arboles, la mire ya impaciente.
-¿Qué es lo que quieres Haruno? – Sonó lo suficientemente indiferente.
- No me llames así, Sasuke, no lo hagas – Me dijo aun serie y con la mirada gacha.
- ¿Y cómo quieres qué te llame? ¿Engañadora, manipuladora? Como sea… dime ya el punto de por qué me trajiste aquí para hablar. – Gire a verla muy seriamente.
- Quiero que volvamos. – Terminante.
- Es muy descarado de tu parte pedirme eso, después de todo lo que hiciste…
- No solo fui yo, tú también lo hiciste y no puedes negarlo – Mierda, tiene razón en eso. – Tanto tu como yo, hicimos algo malo y no podemos hacer nada, por eso, olvidemos esto y volvamos… nos merecemos y tú lo sabes, somos tal para cual. – Sonaba como una psicópata obsesionada.
- Sakura… - Trate de calmarme. – No vamos a volver ya te lo dije… por…
- ¡LO HACES POR EL ESTUPIDO DE NARUTO! – Vaya ya perdió el control. - ¡Solo le defiendes porque piensas que hiciste algo malo! Pero no es así – Sonrió de una manera que me asusta – No es así, mi amor… - Se acerca un poco – El se lo merecía, personas como el no encajan en nuestro lugar. Es una rata repugnante, es una persona que no merece vivir… Nosotros por el contrario, si lo merecemos, merecemos ser felices, merecemos todo. Deja ya de hacer estupideces y volvamos y continuaremos nuestras vidas. – Me extendió los brazos para que vaya con ella.
- Haruno, te etas volviendo loca. Escúchame, no volveré contigo. Lo nuestro fue un error provocado por ti misma. Me engañaste por tres malditos años y me hiciste hacer miles de cosas a alguien inocente. No creo que pueda perdonarte y tampoco creo que pueda perdonarme a mí mismo. Sakura, terminemos con esto bien, y dejemos de hablar de esto. Haremos como si nunca nos hubiéramos dirigido la palabra, has como si ese día te hubiera rechazado, como si te hubiera ignorado, has eso. Tal vez, algún día, podamos ser bueno compañeros. – Trate de sonar calmado y sensato, pero eso solo la altero mas.
- ¿Por qué dices esas cosas tan crueles? ¿Por Naruto? – Frunció el ceño y se le asomaban lágrimas. - ¿Por qué haces todo esto por él? ¡¿POR QUÉ ME HACES ESTO SASUKE?! ¡YO TE AMO! ¡TÚ ME AMAS! ¡¿POR QUÉ LO ARRUINAS TODO POR ESA PESTE, ESA RATA, ESE HUERFANO?!
- ¡¡YAAAA CAAALLAAAATEEEE!! – Ahora si perdí el control. – Desgraciada, maldita perra ¡¡No hables así de Naruto!! ¡¡No te atrevas!! ¡¡Tu eres el ser repugnante!! ¿No te das cuenta? ¡¿Eres tan manipuladora, eres tan cruel eres…?!
- ¡¡No soy la única!! ¡¡Tú también hiciste cosas horribles!! Así que no me eches toda la sal, entiendes. – Trato de calmarse sosteniéndose un poco la frente, me miro – Mira… Lo que trato de decir… es que, volvamos y hagamos como si nada de esto pasó. Hasta dejare a tu pequeño bicho raro en paz. Todo estará bien de nuevo. –Se me estaba acercando, pero me aparte - ¿Sasu…ke?...
- No lo entiendes Sakura, jamás lo entenderás… pero yo… no podría vivir sabiendo de todo lo que le hice al dobe… - Me sorprendí de que sonreí al decir esto.
- ¡SI PUEDES! ¡QUE SE MUERA! ¡QUE TERMINE DEGOLLADO EN UN ESTANQUE EN LA RUTA! Pero volvamos, Sasuke vol…
- ¡No! Eres… Tú me engañaste hace tres años diciendo que ese chico te acosaba y que había forzado a que un ser querido para ti a irse a otra parte y yo caí porque me dijiste que ese chico… me describiste al chico que había conocido cuando estaba en 2 año. El de ojos azules, pero… me convenciste con las tres marquitas en cada mejilla, cuando lo conocí, el llevaba muchos libros que le encargo la bibliotecaria… y unas chicas le hicieron tirar todos los libros y le ayude… en ese momento que lo vi, esas marcas en las mejillas me llamaron la atención, eran especiales, algo que lo caracterizaba como único, y vi en sus ojos, sinceridad, dulzura y muchas cosas, cuando lo vi me dije… que quería ser su amigo… pero tu apareciste y me dijiste que se marcho por tu acosador, y me enfurecí tanto, pero tanto, que cuando me lo señalaste… estaba tan cegado que no me detuve a hablar con él, a dejar las cosas claras y comprobar si eran ciertas… no, no lo hice… y ahora… estoy tan arrepentido – Vaya, soné a perro arrepentido, pero no me importa… en verdad estoy muy arrepentido - … Por eso…
- ¡QUE BASURAS DICES, IMBECIL! – Me dio una bofetada. – ¡¡¿QUE TE PASA?!! ¡¿POR QUE HABLAS COMO UN IDIOTA?! – Me dio otra bofetada. - ¡¡ ¿POR QUE MIERDAD DEFIENDES A ESA MIERDAD DE NARUTO?!! – Me empezó a dar cachetada tras cachetada, una y otra vez no paraba - ¡¡Eres un imbécil!! ¡¡Te odio, te odio, te amo, te amo…!! – Me empecé a sentir un poco mal por ella, estaba sufriendo y se estaba volviendo loca, aun así no dejaba de ¡Ouch! - ¡¿Ves, ves lo que logras qué haga?! ¡¡Solo eres una escoria, maldito infeliz!! - ¡Ouch! Esta chica golpea fuerte debo reconocerlo ¡Ouch! ¿Pero debe llegar tan lejos por ser rechazada? ¡Ouch! Solo logra verse patética ¡¡OUCH!! A-ahora ya-a esta em-pe-ezano a dar golpes bajos. ¡OUCH! ¡¡OUCH!! ¡¡¡OOUCCHH!!! Ya esta pasándose… pero… lo merezco… a Naruto… lo golpee peor que esto… me merezco todo. ¡¡AAHH!! Me está dando con su… bolso… ¿Qué mierda tiene ahí? No puedo moverme bien, por lo contantes golpes en mi entrepierna, estomago y algunos lugares donde están mis órganos vitales. Esa chica golpea , muy duro… pero…si fuera un hombre ahí estaría peor.
- ¡¡YAAAA MEEE CAAANSAAASSTEEE BAASTAARDOOO!! – Me dio otro golpe y salí disparado hacia atrás. Estuve tosiendo un poco por que el golpe me callo de muy lleno en el estomago cerca del diafragma… me faltaba el aire. No la miraba pero sentí que había agarrado algo del piso… genial… ahora de seguro me va a golpear con eso… lo merezco… así que… - Sasuke… mi amor. Podríamos haber sido tan felices juntos… pero esa plaga tuvo que intervenir en nuestras vidas…
- No… no Sakura… tú te metiste en mi vida… quien sabe… ahora podría haber sido amigo de ese dobe. – Me reí por debajo, pero ella oyó, me miro perpleja, será porque ella nunca logro hacerme reír de una manera tan sincera y dulce como lo hice ahora, ya que pensaba en el dobe como mi amigo, sería muy gracioso y divertido.
- Eres un mal nacido…- su voz era lúgubre, vi como empezaba a querer levantar esa rama contra mi… esta ¿Me quiere matar? – Sasuke… Sasuke… mi amado Sasuke – Me está dando asco y algo de temor, sabe que no hare nada por defenderme ¿Qué planea ahora? – Te odio… pero a la vez… te amo, te amo mucho y me hubiera encantado estar contigo ¡pero preferiste a la rata de Naruto que a mí! – Sonreí de lado y le dije con sorna.
- Y lo haría otra vez Sakura – Me miro penetrantemente.
- Sasuke, créeme que no te culpo del todo… al quien culpo es a Naruto… y no te preocupes, no te hare más daño, ya que te amo mucho y voy a cuidarte en el hospital después de que te clave esto en tu cabeza…- ¿Qué? - … te amo Sasuke…. Y en cuanto a Naruto… no te preocupes por el… me encargare de que su ultimo respiro… se con mucho dolor… Hasta siempre, Sasuke – elevo esa cosa yo me quede pensando en lo que me dijo… así que me enoje y tome esa rama y se la arrebate para empujarla lejos de mi.
- Escúchame bien Sakura, puedes hacerme lo que quieras a mí, pero si te atreves a tocar a Naruto, no dudare en enfrentarte y olvidar el hecho de que eres una mujer… Naruto no te hiso, no nos hiso nada. .. Le hicimos mucho daño y ahora porque ya no te quiero ¿Le echas la culpa a él? No eso no te lo voy a permitir.
- ¿Por qué? ¿Por qué, maldita sea? Ti y yo… éramos tan felices… – Estaba muy histérica, pero luego empezó a llorar.
- Escucha Sakura, no dudare que te quise en un momento, pero ahora que analizo todo, en realidad nunca te ame, solo ame lo despiadada que eras con otros, pero después me di cuenta que eso no está bien, y que me hiciste hacer algo horrible por tres años. No creo que Naruto me perdone, pero hare el intento… lo hare aunque deba dar mi vida. – Hasta yo me sorprendí de lo serio que fui, pero era verdad, daría todo por resolver las cosas.
- Sasuke… - Rompí la rama en dos y las lance tan lejos como mi rabia me lo permitía. Sakura me seguía mirando pasmada, yo solo le sostuve la mirada seriamente.
- Sakura… ya vete… y no creas que ahora me dejare maltratar por ti, ya que se que si algo me pasa, lastimarías a Naruto. Vete y no vuelvas a hablarme. – Me fulmino con la mirada y se fue muy furiosa.
Me quede viéndola hasta que se fue de mi vista, aun así quede un rato en esa pose, luego sentí como las gotas de la lluvia me empapaban y bañaban por completo. Cerré mis ojos e incline mi cabeza hacia arriba, sintiendo esa lluvia, era tan agradable… sentí algo de dolor y me retorcí un poco, pero no era nada. Me quería ya ir, así que me enderece, tome mis cosas y… ¿Eh? ¿Naruto?
Si era Naruto, me estaba viendo ¿Con lastima? ¿Tristeza? No lo sé, pero no le aparte la mirada, estuvimos un tiempo así ¿Cuánto tiempo estuvo ahí escuchando? Se me acerco, creí que tal vez el terminaría lo que hizo Sakura… así que solo me prepare para lo que venga y cerré mis ojos lentamente.
-En… ¿Es enserio eso teme? – Lo mire confuso.
- ¿De qué hablas? – Que mal, soné demasiado serio.
- No te hagas, escuche todo. Y creo que en verdad fuiste un idiota… un verdadero idiota. – Sus palabras me herían ¿Por qué? – Aun así, gracias a esto, pude recordar. - ¿Eh? ¿Recordar qué?
- ¿Recordar? – Bueno, mi tono ahora es más suave, bien.
- Si… recordar… no sabía ya que no usaba lentes y veía muy borroso… pero ya sé que paso y eso basta para verte de una manera diferente. – No entendí bien lo que me quería decir, pero… sentí al final algo como… esperanza de un arreglo, aunque era muy pequeña… me hacia… feliz. – Pero aun así, no sé si perdonarte por todo lo que me hiciste… no sé si lograre hacerlo.
- Lo dijiste
- ¿Eh? – Me miro inocentemente confundido, jeje, que tonto.
- Que lo dijiste. No sabes. Por lo que eso significa… que tengo una oportunidad y créeme… que voy a aprovecharla para poder… arreglar las cosas contigo y empezar de cero. – Me miraba con sorprendido, me acerque más a él – Sé que no merezco que me des tu perdón, pero me esforzaré – Le acaricie con mi mano la mejilla - Por ti hare lo que sea. Hasta dar mi vida. – Lo mire dulcemente, el se vio muy asombrado y hasta note en sus mojadas mejillas como se sonrojaba. Eso me hiso sonreír tiernamente. El abrió los ojos y un poco la boca al verme hacer eso así que se alejo apartando mi mano bruscamente, lo cual no me molesto
- ¡Teme!… ¡yo jamás voy a perdonarte! – Me miraba con odio, pero también note que en lo que decía, no parecía muy seguro, así que aun no sabe si lo hará o no, eso solo aumenta mis ánimos a lograr conseguirlo.
- Aun así lo hare, dobe – Me miro con mas enojo, pero a la de un niño haciendo un berrinche, es adorable ¿Adorable?
- ¿A quién llamas dobe, grandísimo teme? – Le sonríe otra vez y el desvió la mirada – Eres un desgraciado… yo… ¡jamás te perdonare-ttebayo! – Se marcho. Corriendo y dejándome solo en esa lluvia, pero aun así estaba feliz.
Mire un buen tiempo por donde salió corriendo el dobe, estaba más feliz porque antes de desaparecer del parque me grito “Mejor vete a tu casa o te enfermaras teme” y salió disparado otra vez. Estaba seguro, seguro de que podría conseguir que me perdone, el es un buen chico. No garantizo nada, pero tengo por primera vez, siento por primera vez algo… ¿Felicidad y fe? No sé, pero aun así estaba muy contento. Me fui de ahí, ya estaba empezando a sentirme ardiendo ¿Sera que me estoy enfermando?
Camine tranquilamente casa, sin ponerle importancia a la lluvia y solo sentía su abrazo en cálidas gotas. Paso uno, acercamiento, completado.
Continuará….