Capítulo 14 Original
Ambos se mostraban cansados y decaídos, Rem cada día estaba más triste, le gustaba estar con Leon pero estaba tan preocupado tenía miedo por Rafael temía que algo le pasara, Leon no tenía mejor pinta se mostraba tan ansioso y nervioso.
Estaban a un día de llegar, el moreno se mostraba un poco más calmado.
-Mañana llegamos- le dijo con una sonrisa cansada, Rem correspondió la sonrisa y no pudo evitar preguntar.
-¿Crees que estén bien?- Leon le miró y asintió
-Estoy seguro que si, están juntos- respondió confiado, esa afirmación calmó a Rem quien asintió animado.
-Esforcémonos al igual que ellos-
-Esa es la actitud- dijo con una gran sonrisa, emprendiendo lo que les faltaba de camino ambos sonrieron ampliamente al encontrarse a las puertas del santuario.
-Descansemos por hoy, mañana estaremos con Belferont-
-si, vayamos a estirar las piernas-
-Si, estoy cansado de estar sentado- ocultaron el pequeño carruaje y salieron a explorar, Leon se estiró en verdad había sido un viaje largo y en muy poco tiempo, estaba exhausto, caminaban tranquilamente cada uno /sumido/perdido/ en sus pensamientos, en sus preocupaciones por una persona en especial.
-Leon- le llamó con voz baja, por lo que el mayor no lo escucho –Leon- le llamó de nuevo con mayor fuerza el mayor se giro a mirarlo.
-Si-
-¿Por qué una persona como él es el rey? No lo entiendo- habló frustrado. Leon le miró decaído, suspiro y contesto
-¿Por sucesión? ¿Por qué su familia era quien mayor poder mágico tenia- bajó el rostro avergonzado –No lo sé pero es una vergüenza-
-¿Tenia?- pregunto, el mayor le miró confuso no entendía lo que Rem intentaba preguntarle –Dijiste tenía, eso quiere decir que ya no tiene poder- hablaba excitado miró serio a su amigo –Pueden derrocarlo-
-¿Qué?- le miró sorprendido.
-Pueden hacerlo si se unen, si Ametsu-
-Rem- le llamó con autoridad asustándolo –Eso es imposible-
-¿Por qué? Estoy seguro que si se unen-
-Rem escúchame- lo tomó de los hombros –Lo que dices es imposible, él tiene a mucha gente de su lado, además- bajo el rostro apesumbrado –A todos nos une un juramento… en cuanto tomo el trono, todos sus súbditos de la milicia realizamos un juramento inquebrantable de siempre protegerlo- Rem se sintió mal, le había hecho recordar cosas tristes.
-Yo… lo siento-
-Se que quieres cambiar muchas cosas y sonará horrible lo que voy a decirte pero este no es tu mundo pequeño-
Rem bajo el rostro y asintió, nunca había deseado tanto estar en su mundo como en ese momento, Leon notó el daño que había hecho y se acercó a abrazarlo.
-Discúlpame- Rem negó, Leon sintió un duro golpe en le pecho sus ojos se llenaron de lágrimas.
-No, discúlpame tú, me inmiscuí en cosas que no me corresponden, tienes toda la razón- se separó y le sonrió tristemente, Leon negó
-No te obligues a sonreír, no me gusta- lo abrazo nuevamente –No cuando no lo haces sinceramente- aquellas palabras conmovieron a Rem quien lloró con más fuerza.
-Tengo…- no pudo continuar ni el se entendía en esos momentos, tenía miedo, se sentía frustrado, quería que en ese instante esos brazos que lo estrechaban con fuerza fueran los de Rafael.
-Wwwwaaaaahhhhh… lo amo- dijo con sentimiento, Leon sonrió, acarició su espalda y dijo
-Lo sé pequeño, lo sé- Rem lloró con tanto sentimiento, como nunca antes lo había hecho, ni cuando sus padres lo abandonaron comprándole aquel departamento donde vivía para que no les molestara en sus nuevas vidas, ni siquiera en ese momento se había sentido tan solo, tan angustiado como en esos momentos, Leon le tomo del rostro e hizo mirarlo.
-Anímate, en cuanto regresemos al castillo podrás estar con Rafael y podrán hacer cosas sucias- le dijo picadamente, logrando hacer sonrojar a Rem.
-Leon- le dio un pequeño golpe, el mayor rió había logrado que dejara de llorar.
-¿Qué? Es una posibilidad- se justifico, rem todo rojo contesto
-No… no lo considero posible, Rafael es un caballero-
-Pero puede estar muy feliz porque correspondes sus sentimientos y entonces-
-Leon-
-Jejeje, eres tan lindo- lo abrazó con cariño
-Leon- le llamó bajito, el mayor le miró
-¿Qué pasa?- Rem se mostraba tan avergonzado bajo la cabeza, Leon notó como sus orejas se ponían coloradas, sonrió enternecido.
-Y… si… ¿Y si pasa lo que dices?-
-Pues pasara si tú también lo deseas- lo calmó, Rem se encogió un poco más
-Pero- Leon se tuvo que acercar para lograr escucharlo ya que su voz era tan baja –Yo… nunca- Leon no le entendía
-Perdón pequeño no te escuche- Leon le miró todo rojo
-Yo nunca he…- Leon comprendió de inmediato.
-Ohhh… mmmm podrías- lo abrazó –Estoy seguro que Rafael comprenderá si decides decirle, como bien dijiste es un caballero-
-Pero…- no se atrevió a continuar
-¿Pero?- lo ánimo Leon
-Él…es más grande que yo y… debe… tener más experiencia-
-Mmmm no lo sé, solo le conocí una pareja al comandante- Rem le miró asombrado.
-Pero es tan guapo-
-Y también muy reservado, sabes me alegra que hayas llegado a su corazón- Rem le miró con un suave sonrojo un tanto apenado.
-¿Crees que sea eso y no solo algo físico?-
-Mmmm creo que es un cincuenta, cincuenta- Rem le miró y asintió con una sonrisa.
-Yo también estoy así con él, es muy guapo pero me gustaría conocerlo más- Leon asintió.
-Si, una cosa es el físico pero cuando comiences a tratarlo y conocerlo, estoy seguro que caerás completamente enamorado de él- Rem sonrió pero preguntó
-¿Por qué estas tan seguro?- Leon le miró y sonrió
-Porque hacen una linda pareja- dijo con una gran sonrisa
-¿En verdad?- dijo un tanto decaído
-Si pero la mirada que tienen ambos al mirar al otro- Rem alzó el rostro para verlo –Eso es lo que me hace estar seguro- Rem le miró asombrado se preguntaba a que mirada se refería, le sonrió a Leon.
-Gracias-
-Sabes estoy feliz de ver que has aceptado los sentimiento de Rafael y los tuyos también-
-Soy un tonto- dijo cabizbajo
-Eh, no digas eso, creí que ya estabas de mejor humor-
-Si pero es que solo…-
-Aja- lo animo Leon tomando su mano.
-Solo hasta este momento cuando estoy lejos de él, me di cuenta de lo que siento por él y no puedo hacer nada más que preocuparme y morirme de la angustia- habló frustrado. Leon apretó con fuerza su mano.
-Claro que puedes hacer algo- Leon le miró confundido
-Puedes hacerle llegar tus sentimientos- Rem le miró sin entender.
-No olvides que en este mundo existe la magia piensa en él, en como le darás tu respuesta a lo que te propuso- Rem se sonrojo al imaginarse frente a Rafael diciéndole que a él también le gustaría intentarlo, Leon sonrió –Ves así me gusta, piensa en lo que le dirás- Rem miró a Leon y rió como no lo haría desde que salieron del castillo.
-Estoy seguro que me pondré todo rojo-
-Pero te ves lindo así- Rem se sonrojo y asintió
-Sabes… creo que cuando vea a Rafael me arrojare a abrazarlo- Rem asintió sin dejar de sonreír.
-Creo que también será lo primero que haga cuando vea a Kamei, le extraño- Rem le miró
-Hazle llegar tus sentimientos- contesto con una gran sonrisa, Leon le miró asombrado para luego reír encantado
-Tienes toda la razón soy un tonto- le miró con cariño
-¿Qué vas a hacer cuando veas a Kamei?- Leon sonrió
-Correré a abrazarlo, besarlo y cuando estemos solos le dejaré hacerme el amor toda la noche-
-Leon- le dijo escandalizado Rem
-Jejejeje ¿Qué? Los dos nos amamos, además- su mirada se torno nostálgica –Es la primera vez que podemos estar juntos tanto tiempo… pero ahora es como si nuevamente… Rem lo abrazó
-Deja de pensar en eso, mejor piensa en lo que harán una vez que estén juntos nuevamente- Leon correspondió el abrazó.
-Si, gracias pensaré una vez que estemos juntos nuevamente y estoy seguro que le llegaran mis sentimientos- Rem se separo, lo miró ilusionado y asintió contento.
-¿Nos quedaremos aquí a acampar?- Leon lo pensó
-Mmmmm si, porque no- le devolvió la sonrisa.
Lla comida comenzaba a terminarse pero eso no parecía preocupar a Leon, eso le causaba dudas y ansiedad a Rem, esa noche decidieron dormir a la intemperie, en aquel lugar Leon se sentía seguro se recostaron mirando el hermoso cielo despejado lleno de estrellas, Rem no se cansaba de ver aquel cielo.
-Leon ¿Qué pasara cuando la comida se acabe?- preguntó preocupado, Leon sonrió, se giro a mirarlo y dijo
-El bosque nos dará nuestro alimento, tu no te preocupes- habló confiado, Rem se vio contagiado por su entusiasmos y asintió con una gran sonrisa.
-Me gusta estar contigo- dijo Rem
-A mi también pequeño, es divertido-
-¿Crees que cuando todo se calme… los cuatro podamos…- no se atrevió a continuar, Leon le miró y termino –Salir juntos- Rem asintió
-Claro eso sería genial- dijo entusiasmado, Rem le miró con cariño.
-Ya quiero que todo esto termine-
-Yo también extraño los brazos de Kamei- Rem lo miró
-¿Cómo lo llevabas en el campo de batalla?- el rostro de Leon se ensombreció
-Era muy difícil… estábamos en diferentes batallones, él estaba en un frente y yo en otro… siempre temiendo que uno de los dos no saliera vivo de esa batalla, que aquella fuera la última, cuando el día terminaba, eso era lo peor, la hora en que enterrábamos a nuestros muertos y atendíamos a nuestros heridos, cada vez que veía una cabellera azul, el corazón me daba un vuelco… siempre tenía miedo de…- su voz se quebró, Rem se arrepintió de haber preguntado eso, algo que hería a su amigo, lo abrazó con fuerza
-Basta, no pienses más en eso, ahora están juntos no volverán a pasar por eso- Leon lo abrazó sin poder hablar, en verdad quería creer en eso amaba tanto a Kamei, una vez que se calmo, se separó a mirar a Rem.
-Vamos a dormir, ha sido un viaje largo y lleno de lágrimas- Rem asintió, besó la mejilla de Leon, se acomodo para caer dormido, Leon le siguió.