-¡Himmy! ¡Corre con más! –Grito de nuevo el entrenador Wolf -¡No te veo moviendo esas piernas!-
-Pero… si estoy… corriendo –Respondí entre suspiros –Hace media… media hora que estoy… corriendo –Me detuve por completo para respirar hondamente.
-¡No pares!! –Alzo la voz de nuevo, haciéndome empezar el ritmo de nuevo - ¡En un partido no podrás pararte de esa manera! ¡Necesitas correr todo el partido! – Grito su voz ronca desde el centro del campo de soccer.
-Pero si… si en los partidos nunca camino… -Mencione para mí mismo mientras veía la cara de Taichi preocupado.
El castaño estaba recogiendo los materiales, pues el entrenamiento del equipo había terminado. Había madrugado a entrenar por el amor y gusto que sentía por el deporte, aun así…
-¡Vamos Himmy! ¡5 vueltas más! –Grito a lo lejos uno de mis profesores favoritos. Incluso desde que le había gritado el sábado, había sido mucho más amigable conmigo.
¡Y si! El entrenamiento había terminado, todos mis compañeros se habían ido riéndose de mí. Hasta sentía que Yoshy me miraba con lastima… De hecho, mucha lastima. Todos habían realizado practica de soccer al final del entrenamiento, casi 30 minutos que jugaron a libertad sin mi presencia, pues el entrenador Wolf decidió que sería mejor para el equipo que yo mejorara mi estado físico. Por eso, mientras todos jugaban yo estaba dándole vueltas al campo mientras un viejo tonto me gritaba…
-¡Si no aceleras el paso te pondré otras 10! –Y ahí estaba gritando de nuevo. Me pregunto ¿Nuca se cansara de gritar? ¿O es que se cuida la garganta para gritarme a mí?
Aumente mi velocidad, pensando más en insultar a mi entrenador que cualquier otra cosa. Verlo ahí cruzado de brazos mientras discutía con Taichi me hacía apretar mis dientes. Cuando menos pensé había acabado con las 5 vueltas que me había ordenado hacer
-¡Ves lo que pasa cuando no eres perezoso! –A pesar de estar muy cerca, seguía hablando tan fuerte, que me provocaba dolor de cabeza - ¡Hoy la clase será en la Piscina! –Sonrió de forma asquerosa -¡Así podrás mejorar la fuerza física que tienes!... Además, sé que te encanta la piscina, así que considéralo una motivación– Ya no gritaba, eso lo hacía extraño, pero aun así no dejaba de generarme enojo.
-¡Taichi! ¡Me voy a desayunar! ¡Termina aquí!... –Hizo una pausa -… ¡Que Himmy te ayude! –Me señalo antes de darme la espalda y comenzar a caminar hacia los edificios. Taichi se acercó rápidamente.
-Valla, parece que ya te acepta como uno del equipo –Menciono el castaño sonriendo.
-¿En serio? Yo diría que está enojado por lo que le dije el sábado –Respondí mientras me sostenía en las rodillas intentando recuperar el aliento -¿Siempre ha sido así? Tan… Pues… ¿Gritón? – Divague un poco mientras veía como se metía a uno de los bloques.
-JAJAJA Ya te acostumbraste… solo queda que evites mirarlo feo y ya no afectara tus momentos con el jajaja –Dijo Taichi en tono de burla.
-Si jaja, tienes razón – Respondí riéndome de su comentario. Obviamente solo se podía soportar la personalidad del viejo y ya, no había nada más que hacer. -¿En qué te ayudo? – Pregunte, aun teníamos que organizar…
-Solo tenemos que llevar esto al almacén, lleva tú los balones y yo los implementos – Señalo una Tula muy grande de color negro. No dude en llevarla en mi hombro -¿Qué tal ayer? ¿Están todos bien? – Hablo el castaño mientras cogía lo que sobraba y caminaba a la par conmigo.
-EEmm si, nadie esta tan afectado como para sentirse mal –Respondí serio - Aunque los noto a todos muy fríos, no parece que quisieran alejarse de los demas… es algo raro –Pensé mucho en las palabras que acababa de mencionar, era como si todos estuvieran temerosos de algo pero… no quisieran estar lejos del dormitorio.
-Eso es normal, después de todo tanta información de ese tipo no es buena –
-Tienes razón, aun así pienso que nada malo pasara –Agregue mirando los ojos cafés del mayor –Solo es algo que debemos superar, al igual que las pruebas… solo hay que ganar y ya – Sonreí un poco, aunque no supe si era sincera o no.
-Hablando de eso ¿Están listos para el viernes? –Pregunto el castaño ansioso.
- No se… -Dije secamente –Habrá que esperar hasta ese día… incluso creo que podríamos pasar a la siguiente ronda jajaja –
-Qué bueno que tengas confianza, eso siempre ayuda con las pruebas de la vida – Sonrió Taichi –Es allí –Señalo una puerta que era parte del edificio del Coliseo –Este es el lugar donde se guardan los materiales del equipo de Soccer –Afirmo Taichi sonriente abriendo la puerta. El lugar no pasaba de ser una simple bodega oscura y llena de cosas.
-Al menos tienen muchas cosas –Hable intentando ver algo positivo de aquel lugar.
-¿Y qué tal ayer? ¿Te fue bien? –Aunque resultaba raro que Taichi me preguntara “¿Cómo me fue?”, no lo pensé en mal sentido.
-Ayer fue muy aburrido –Mencione rascándome la cabeza – Nos hicieron examen de matemáticas; Tuvimos clase de Literatura y Filosofía… que son aburridísimas; En Biología nos pusieron un taller muy largo que ayer mismo acabe; Y en las dos horas de Lenguaje practicamos una obra que debemos presentar mañana en clase –
-Wow jajaja ¿Tan aburrido estuvo tu día?... –Se rio Taichi sin tener compasión -… MMM Oye ¿Y qué obra es? –
-¡AAHH NO! ¡No te lo diré! –Lo señale sonrojado.
-¿Pero porque no? ¿Yo que hice? –Se defendió el castaño.
-Tu eres muy chismoso, si te cuento algo… se lo dirás a los demás y no quiero que nadie se entere –
Mencione sin dejar de apuntarlo con mi dedo. Definitivamente era verdad… AAAHHH RAYOSSSS ¿Por qué tenía que mencionar la obra? Se supone que solo tenía que soportar eso hasta mañana. Es más… Ni siquiera había pensado en eso desde que nos asignaron hacer esto hace una semana… AAHHHHH
-Ohh vamos, No le diré a Nadie… No seas malo conmigo Tommy… -Decía Taichi mientras me tocaba con la punta de su dedo el brazo –Dime ¿Si?... Guardare el secreto muy bien jiji… -NOOOO, No te voy a decir nada… No me convence… -Si no me dices, averiguare por mi cuenta, y ahí sí será más interesante – Su mirada maliciosa me hizo empuñar mis manos.
-AAAHHHHH –Rodé los ojos suspirando -¡Bien! Pero si le dices a alguien te… -
-Te doy mi palabra –Menciono el castaño levantando la mano derecha, como si eso significara algo para mí.
- El profesor nos dividió en grupos de 6 estudiantes, y repartió 6 cuentos infantiles al azar –Hable desviando la mirada- A mi grupo le toco el cuento de la Bella Durmiente y me toco el papel de ser la princesa que se chuza y se duerme por muchos años –
-JAJAJAJA ¿En serio? –El castaño estallo a carcajadas tirándose al piso -¿Entonces te toca disfrazarte y todo? Jajaja… - Hablo entre sus abultadas risas -… ¡Espera! No te vayas así… -Después de salir de allí azote la puerta con gran fuerza.
PPPPPUUUUUMMMMMMMMMMMMMMMMMMMM
¿Por qué rayos le tenía que contar esto a alguien?
Debo Ser…
XXXII. En estado de Debilidad
-¡Vamos Himmy! ¡Es tu deporte! ¡Rápido! –El sonido de sus graves palabras eran como música para mis oídos. Maldito viejo… ¡Deja de Gritarme!
-¡Voy lo más rápido que puedo! ¡CALLESEEE! –Grite furioso mientras me pegaba del borde de la piscina.
Tal y como había mencionado por la mañana, la clase de deportes de hoy seria en la piscina que tiene el Instituto, el mismo lugar donde tuve mi primera clase de deportes hace unas 3 semanas. Y aunque no era el mismo escenario anterior, ahora el tipo sí que se estaba pasando de la raya.
-¡No me hables así niño!!! –Grito sentado desde la silla del salvavidas. Tenía unas gafas oscuras y un gran sombrero; Parecía preparado para ir a la playa pero el clima actual no se veía muy vivo. Incluso venteaba fuertemente -¡Sal de Ahí! –Ordeno. Sin dejar de mirarlo feamente salí refunfuñando del agua -¡Darás 5 Piscinas seguidas sin descansar en tu próximo turno! ¡Así que vete preparando! -Grito a lo lejos mientras seguía dirigiendo a los estudiantes para que nadaran según su voluntad.
-AAArrgg –Gruñí en lo que me sentaba al borde de la piscina, intentando cubrir mi piel del fuerte viento que soplaba –Seguro va a llover – Mencione en voz baja mientras tiraba mi pelo mojado hacia atrás.
-Tienes razón, seguro empieza a llover en este mismo instante jaja – Al fijarme en quien me hablaba observe que junto estaba sentado un chico casi de mí mismo tamaño, se le notaba más la panza y más músculos que a mí, pero miraba el cielo con cara de tonto –De hecho, no te sorprendas si comienza a llover justo…. Ahora –Señalo el cielo sonriendo justo cuando la primera gota de agua fría, caía sobre mi espalda.
-¿Acaso eres adivino o algo? –Pregunte sorprendido. Más porque aquella gota me había provocado un escalofrió en la espalda -… Eso fue raro –
-jajaja No soy adivino –Respondió aquel chico mientras se ponía de pie peinaba el poco pelo que tenía –Soy como los animales, siento cuando el clima cambia –Me sonrió mientas más goteras empezaban a caer velozmente. Por un momento lo vi cerrar los ojos y sonreír mientras recibía la brisa, luego… -Me gusta cuando llueve, mi cuerpo se relaja con el frio –
De acuerdo… Eso sí que me parecía raro. Aunque hubiera tantas personas raras, este chico me parecía muy pacifico… muy extraño por la forma en esta parado.
-¡Todos me deben 5 Piscinas! ¡Háganlas y luego se van derecho a las duchas! –Grito el entrenador Wolf mientras caminaba mojándose hacia los vestidores -¡Himmy!... ¡Tú harás 10 piscinas! –Señalo con firmeza, para luego entrar a los vestidores.
-Parece que el entrenador te tiene aprecio ¿Se conocen de antes? –Menciono aquel chico con una mirada perdida, sin emociones.
-No es aprecio, yo no le agrado –Salte al agua. Me sentí tan entumido en los pies que tuve que frotarme los muslos debajo del agua –Y no… no nos conocemos de antes –Mencione mientras empezaba a nadar en línea recta por la piscina.
Llegue al otro lado, llevo 1 piscina. Sin pensarlo mucho emprendí el regreso y en poco tiempo ya llevaba dos piscinas. Pasados unos minutos el agua que caía del cielo empezar a caer con más fuerza, y ahora se sentía más caliente el agua de la piscina que la que caía sobre mi espalda. Llevo 9. Solo me faltaba una, mis brazos ya me ardían… el trote de esta mañana hacia que cada patada necesitara de mucha energía.
-Llegue –Suspire al sacar mi cabeza del agua luego de terminar el recorrido. Justo cuando iba a salir vi que aquel chico me estiraba la mano sonriente, no tuve que pensarlo mucho para aceptar su ayuda y salir del agua -¿Por qué me esperaste? Se supone que hace rato terminaste –Le recrimine mientras me dirigía rápidamente hacia los vestidores.
-Solo quería sentir la lluvia un poco mas –Respondió siguiéndome el paso.
Al llegar a los vestidores vimos que muchos de los compañeros ya se habían vestido con el uniforme, pero no se habían retirado por la intensidad de la lluvia. Otros más estaban en toalla esperando que el área se desocupara y había unos que estaban jugando debajo del área de las duchas ¿Habrá agua caliente?
-Wow Por el vapor que sale, debe haber agua caliente –Razone mientras sacaba de mi casillero la toalla que tenía.
-Cuando llueve en el Instituto, por alguna razón hay agua caliente en todas partes – Menciono aquel chico que seguía al lado mío. Su postura me estaba estresando…
-Ya veo, eso no lo sabía –Respondí cerrando mi casillero y caminando al área de las duchas –mmm Disculpa ¿Por qué me sigues? - Me atreví a preguntar por fin luego de que entrara a la ducha continua a la mía.
-No sé, siempre me ducho en esta –Respondió mientras se desnudaba –Me gusta este lugar en específico –Dijo sin ninguna vergüenza mientras se empezaba a lavar el cuerpo a mi vista –
-aahh Bueno –Mencione un tanto desconcertado de la situación. No hice más que quitarme la bermuda del Instituto, la pantaloneta que se porta debajo y empecé a bañarme. No tarde mucho, pues no era la gran cosa. Justo cuando me estaba secando…
-Tienes una piel muy bonita, casi como la mía – ¡Ya está bien! Este chico tiene algo mal en su cabeza ¿Es que no mide lo que habla? ¡Eso suena muy raro!
-Y eso que es la primera vez que lo vez jiji –Interrumpió una voz conocida – Deberías verlo más seguido así –
-Ritsu, pensé que ya te habías ido –Me dirigí a mi amigo rubio, que de hecho, no había visto en todo el fin de semana. Tenía una toalla a su alrededor –
-No me iba a ir, solo quería que los demás se fueran… - Menciono con voz baja -… para poder hacer esto –Mi amigo rubio se acercó a mí con rapidez y me agarro con sus frías manos mis pezones, para luego dirigirlas a mis nalgas–
-Eyy…Rits-su… para… ¡Detente! –Grite intentando resistirme, pero por alguna razón no podía contra la fuerza de mi amigo – ¡Basta! –Alce la voz con fuerza separándome bruscamente de él.
-Vamos pequeño, tu sabes que te gusta… -Menciono mirándome de forma lujuriosa -… Desde aquella vez en este mismo cubículo, siempre he querido repetir – Su tono de voz no me gustaba, para nada.
-¡No me digas pequeño! –Le recrimine exaltado – No me gusta que llegues y me toques así como así –Mencione con ira. El enojo no había pasado, es más, había aumentado considerablemente ¿Qué hacia allí? ¿Por qué me tenía que tocar como si nada? ¿Quién cree que soy? … ¿Por qué ese tarado no hace nada?
-ohh vamos… eso no fue lo que dijiste en tu aventura el sábado con tu amiguito ¿Cierto? –Hablo con ironía. Sus palabras llevaban veneno a mis oídos, si él lo sabía entonces… - Por tu cara parece que te vendiste a alguien más ¿Me equivoco? – Su cara se tornó despreciable.
-¡Yo no me vendí a nadie! –Dije exaltado - …es solo… algo natural que paso… -Respondí cabizbajo. No sabía que más decir; Que más agregar a mi discurso. No tenía explicación para eso… solo lo hice y ya – No hice nada malo –
-Claro que no lo hiciste Tommo, solo seguiste tus instintos e hiciste lo que tenías que hacer –Note que dio dos pasos hacia adelante. No lo había notado, pero el agua que caía sobre mi espalda estaba demasiado fría – No es malo hacer esto… -Sentí como sus manos volvían a tocar mi piel. Se sentían muy calientes por el agua fría -…Solo tienes que dejarte llevar… -Comenzó a manosear mi miembro -… Y disfrutar de lo que te suceda… -Alce la mirada para ver a Ritsu con un aura que aterraba. Se había despojado de su toalla y por su miembro se notaba que estaba muy ansioso, el mío en cambio, por más que lo tocara no respondía.
-…No quiero –Mencione –No quiero hacer… -
-SSHHH –Me tapo la boca con uno de sus dedos – Tu solo déjate llevar –Me empujo con suavidad hacia la pared, cruzo su mano bajo mi torso y cerro la ducha, luego me beso en el cuello mientras apretaba uno de mis muslos con si rodilla. No tardo nada para girarme bruscamente y ponerme contra la pared.
¿En serio lo iba a hacer? ¿Voy a dejar que Ritsu me haga lo que yo hago con Fuko? A Fuko le gusta pero… ¿A mí me gustara? ¿Si vale le pena sentir eso? Siento como me besa el cuello y la espalda, después sus dedos juegan con mi parte trasera; Hasta siento como me introduce algo por allá atrás. Duele bastante, pero no reacciono. ¡No sé qué pasa! ¿Por qué estoy confundido? ¿Por qué me dejo hacer esto? ¿Qué demonios pasa conmigo? ¡No quiero hacer esto! ¡No quiero que alguien me lo meta!... ¡No quiero que Ritsu me haga sentir as! Reacciona… Reacciona ¡Reacciona!
-Creo que estás listo mi pequeño –Menciono con voz dulce - ¡Oye tú! Te dejare mirar si nos avisas si viene alguien ¿De acuerdo?... Así me gusta. Mira cómo se disfruta de alguien tan puro –
PPPPPLLUUUUUUUFFFFFFF
-Oooucccchhhh –
El rubio recibió un golpe en el estómago por nada más y nada menos que mi puño derecho. No se trata de que sea bueno o no, no quiero hacer esto con él. Fuko queria hacerlo conmigo, y debe ser por alguna razón… pero yo no deseo hacer esto.
-Lo siento – Mencione apenado al ver al rubio arrodillado apretándose el estómago – No quiero que esto sea contigo… lo lamento amigo –Hice una reverencia mientras cogía mi toalla y salía del lugar. No dude mucho en cambiarme y salir lo antes posible.
-Sabes, pienso que me gustaría verte más seguido –Menciono el chico, que sorpresivamente se estaba vistiendo al lado mío. Lo ignore con ganas mientras terminaba de meter todo al casillero y dejaba la pantaloneta y la toalla en el cesto de lavado – ¿Me permites hablarte entre clases? –eeeee ¿EEMMM? Aunque no la podía deducir, sabía que mi cara de Póker Face era amplia… ¡Quien es este tipo tan raro!
-Clarooo –Respondí ampliando la palabra. Pura ironía mía – ¡Nos vemos! –Me despedí con la mano mientras salía apresuradamente del lugar. Así estuviera lloviendo no quería quedarme allí, ni por Ritsu… ni por este chico.
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-¡¿Te Tiraron el maletín por la ventana?! –Alce la voz llamando la atención de los pocos que quedaban en el comedor.
-Sí, si no es por Rei me habrían quitado la ropa también – Menciono Konu un tanto acongojado… mas no se le notaba triste – Todos los niños de mi salón se preocuparon por mí, incluso me invitaron a una pijamada el sábado –Menciono alegre.
-Ya lo vez, está feliz por lo que le sucedió –Menciono Takuya mientras sorbía su sopa.
-¿Qué fue lo que paso? –Pregunte apretando mi puño contra la mesa. Tanto los gemelos como Takuya me miraron pero siguieron comiendo.
-Cuando salí de clase, unos grandes estaban esperándome en el borde de las escaleras –Narro Konu con voz normal – Cuando iba a bajar me agarraron entre dos y el otro cogió mi morral y lo tiro por la ventana luego uno intento quitarme un zapato pero le pegue una patada –Dijo orgulloso sonriendo –En eso Rei le mordió la pierna a uno de los que me tenía agarrado y me soltaron enseguida –
-¿Lo mordió? –Repetí sin poder creerlo.
-Los ahuyente, incluso uno dijo que esto no se quedaría así –Respondió Rei quien estaba pegado del popote de su jugo –Voy por mas –
-¿Te hicieron algún daño? – Se me notaba la preocupación.
-Estoy bien, no te preocupes tanto por mí –Sonrió el pelirrojo mientras comía algo que debía ser arroz –Rei les dio su merecido jaja-
-A él no fue el único que le hicieron algo, a mí me tiraron un plato con Manís ayer cuando salía de la biblioteca –Comento Daji sin sobresaltarse – A mi hermano casi le manchan su cuaderno en el salón –
-No es obvio, nos están afectando de alguna forma – Dijo Takuya bajando la voz –Quizás a alguien no le gusta que nosotros seamos los favoritos –
-Es peor que eso, es como si todos los equipos se hubieran decidido a afectarnos de alguna forma –Hablo Koji por fin –Saben de la próxima prueba, y quieren sacarnos a nosotros por obvias razones –
-Debemos intentar estar más unidos, que ninguno este por los pasillos solo – Divague un poco – Que alguien se turne para traer a los más pequeños –Dije mirando a Konu sonreír.
- Yo no necesito eso –Hablo el aludido sin dejar de fijarse en su comida –Rei estudia en el mismo edificio que yo, entre los dos manejaremos el problema –
-Pero Konu – Alegue preocupado – No sabes que lo que pueden hacer esas personas… Deberíamos prevenirnos más –Mi tono de voz se agravo más. Era enfado lo que me invadía.
-Nosotros no tenemos miedo –Menciono Rei un tanto serio. De hecho, más serio de lo normal – No deberíamos tenerles a esos tontos-
-En cierto –Interrumpió Daji mirándome con seriedad -¿No crees que nadie de aquí lo ha pensado? Todos intentan buscar una solución a esto –Señalo abiertamente a todos - Todo por esa prueba del viernes –
-Eso quiere decir que este acoso frente a nosotros durara hasta el viernes ¿Cierto? – Indago Takuya con cara de intelectual.
-Solo es una estrategia para hacernos decaer en esa prueba; así de simple –Sonrió Koji – Como dice Rei, nosotros no debemos tener miedo, ya que nosotros somos el miedo de ellos –Concluyo metiendo un trozo de hielo en su boca.
-Uffff Que sabiduría… ¡El sabio Koji! – Menciono Takuya con un tono bastante gracioso – Deberías ser un filósofo jaja-
-Cállate moreno jaja –Respondió Koji sin sentirse afectado por las palabras del castaño.
-jajaja Hasta hablaste como un profesor –Señalo Konu burlándose del gemelo.
-¡No es cierto! –Inflo las mejillas el rubio mientras los pequeños y Takuya se burlaban de él. -¡Ya paren! No estoy para que se burlen de mí –
- jajaja La próxima vez no digas frases de películas –Dijo su hermano mientras se colocaba de pie con sus platos – No va contigo – Dio media vuelta y comenzó a caminar hacia la mesa donde se dejaban los platos sucios.
-Entonces ¿Quieren que no me preocupe? – Cuestione como si eso fuera lo que en realidad pensaban – ¿Que deje esto de lado? –
-No es eso, solo… no tomes las cosas con tanta preocupación –Dijo Takuya mientras se ponía de pie –No fue tan grave la verdad –
-Sí, hermano. Cálmate un poco, creo que esa obra de mañana te tiene mal de la cabeza –La voz de Konu era distinta, como si la sintiera muy lejana –Te ves muy mal –
¿Me veo mal? ¿Yo? ¡Se están viendo ustedes! Es como si hubieran perdido la razón. ¿Qué las pasa? Hace dos días estábamos muy preocupados por muchas cosas. Ahora sale otro problema y resulta que todos están tranquilos.
-Adiós hermano –Rei fue el que interrumpió mis pensamientos. Me gire y lo vi correr con sus platos siguiendo a Konu. ¿Se fue sin despedirse?
-Dales un poco de espacio, aún no hemos aceptado muy bien todo lo que nos contó Taichi –La armoniosa voz de Koji me hizo mirarlo. El único que seguía en la mesa –No es que no estemos preocupados en realidad, el asunto es que nada ganamos con preocuparnos demasiado ¿Me entiendes? –
-Creo que si –Asentí con la cabeza – Creo que yo también debería hacer eso –
-Sí, te vendría bien –Afirmo Koji –Además, se nota que no estás bien: Esas ojeras, tienes la piel muy pálida y se te nota muy cansado –Su mirada se tornó en seria y su voz sonaba preocupada.
-Hoy ha sido un día muy largo, no veo la hora de descansar –Me despeine un poco para después sentir mi frente. Se notaba algo caliente, pero debía ser por el calor del lugar –Hace mucho calor ¿No crees?-
-Sí, Tommoky –respondió el gemelo con una ligera sonrisa – Apenas salgas de clases, deberías irte derecho a la habitación, te llevare algo para que te relajes –
-Gracias –Respondí mientras me paraba de pie. Aunque no lo demostrara, me dolía estar de pie ¿Me abre lastimado esta mañana? – Nos vemos luego –Me despedí del gemelo, quien no dejaba de mirarme. Eso me sonrojo, así que comencé a caminar para salir del lugar.
Al salir del comedor volví a reflexionar sobre el calor que estaba haciendo en aquel lugar. Lo raro era que no había sol. Es más, aún estaba lloviznando un poco.
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-PPSSSS Tomo- Era ya la quinta vez que me llamaba por lo bajo. ¿Acaso no entiende que estoy enojado? Esta vez no Ritsu. Esta vez si te pasaste.
-¡Joven Himmy! –
AAAHHHHHHHH
El grito del profesor me asusto hasta tal punto de casi caerme junto con mi silla al suelo. Al menos no me caí, pero aun así…. Termine siendo el objeto de mirada de todos.
-Ya que esta tan ansioso por actuar, porque su grupo no empieza. Joven Himmy –La cara de enfado del profesor se notaba a través de sus arrugas. Su sonrisa estirada me generaba un asco mínimo, su postura… ni que decir.
-Pero profesor, se supone que las obras se evaluaran mañana–Me limite a responder mientras me ponía de pie.
-EEMMM cierto, pero creo que hare una excepción en esta clase –Hablo aquel viejo mientras se rascaba la cabeza -¡Todos los equipos tienen 5 minutos para prepararse! ¡El primer cuento será “La bella Durmiente”! – Alzo la voz para después sonreírme en la cara –Le sugiero que se apresure Joven, quiero ver su talento –
Este día no podría estar mejor.
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-¿En serio estas bien? –Pregunto uno de mis compañeros después de finalizar la clase –Durante la obra se te veía muy pálido-
-Solo eran los nervios, nada mas – Respondí sonriendo mientras recogía mis cosas.
-Seguro, también tenías fiebre cuando te toque –Volvió a mencionar aquel que hizo de príncipe azul en la obra - ¿Seguro no estas enfermo? – ¿Fiebre? Espere… ¿Podría estar enfermo? Naahhhh, no lo creo.
-Ahora que lo mencionas, creo que hoy ha sido un día muy ajetreado – Mencione sonriendo –Solo necesito descansar un poco y mañana estaré como nuevo –
Estando Cara a cara. Note que el compañero que tenía al frente apenas si lo reconocía, si lo diferenciaba un poco de los demás puesto que era uno de los más obesos del salón. Nunca nos habíamos hablado por más de 5 segundos, obvio porque soy el más nuevo y la mayoría de las personas…
hhhuuupppp
Al intentar ponerme de pie, no tuve la suficiente fuerza para permanecer derecho. Era como si no tuviera energía para para pararme.
-Si ves que no estás bien – Menciono aquel chico preocupado. ¿Porque se preocupa por mí? Ni que me conociera –Ven, te acompaño a tu cuarto –Me extendió la mano mientas sonreía.
-Bueno, pero yo caminare solo –Respondí suspirando. De verdad me sentía mal, necesitaba algo para calmar la fiebre y descansar un poco. No puedo estar así el viernes.
-Me parece adecuado –Menciono el chico – Por cierto, me llamo Kaseru. Un placer conocerte Tommoky –Me dio una palmada en el hombro justo cuando pude sostenerme en pie.
-¿Cómo sabes mi nombre? –Lo mire dudoso.
-Mi papa hizo todas las apuestas en contra de tu equipo – Hablo son seriedad –Cree que tu equipo solo ha tenido suerte. Como no dejaba de mencionar el color de tu equipo, busque en internet como te llamabas-
-Entonces tu padre no quiere que ganemos… no sería el único jaja –Reí con ironía mientras empezaba a caminar muy lentamente - ¿Entonces en internet salen nuestras fotos? –
-Así es, se las tomaron en día de la presentación de los equipos sin que ustedes lo notaran… –Afirmo Kaseru convencido. Su postura no me agrada, después de lo que me contaron hoy, podría ser una trampa y solo quiere acercarse para buscar el momento… JAJAJA Creo que estoy exagerando mucho… -… E incluso hay una pequeña descripción de cada uno, la tuya te hace parecer muy débil aunque no creo que sea cierta–
-¿Débil? –Cuestione muy sorprendido. Tanto, que estuve a punto de perder el equilibrio si no es porque el mismo me sujeta.
- No pienses en eso ahora, en este momento si estas enfermo jaja –Rio mientas inclinaba su espalda frente a mí –Sube, no creo que puedas llegar hasta tu cuarto, yo te llevare – Pero que… ¿me estaba ofreciendo su espalda? Entonces me iba a cargar hasta mi cuarto… -Súbete de una vez, no seas testarudo – Dijo con un tono de voz más serio.
-¡Bien! –Respondí avergonzado mientras me montaba sobre su ancha espalda y agarraba mis manos alrededor de su cuello –Listo –
-1… 2… y 3 –Con un leve movimiento me vi con un poco más de altura. Kasuma sin ningún problema me estaba cargando – Agárrate bien, llegaremos en 4 minutos – Sin decir más agarro mis muslos para que no me cayera y comenzó a caminar a una velocidad normal –Sabes, no pesas tanto jajaja Deberías comer mejor – No sé si ese comentario fue un insulto o una adulación en ese momento, ni me importaba en realidad.
…
-Oye… Kaseru –Hable por fin cuando estábamos empezando a subir las escaleras del bloque principal –Dime la razón de tanta amabilidad ¿Qué tramas? ¿Por qué me estas ayudando? – Pregunte con mucha desconfianza.
-No se… te veías tan débil y torpe que… – No podía ver su expresión y tampoco entendí el significado de sus palabras –Pensé que sería bueno ayudarte y talvez tu después me deberías algo jajaja -¿Qué dijo? –No lo tomes tan mal, hoy por ti mañana por mí… ¿Te parece? – A pesar de que no me convencía mucho, no me parecía que tuviera malas intenciones.
-Creo que no habrá problema –Mencione un poco más confiado –Solo déjame en el piso 4 y ya. No quiero que mis compañeros me vean en esta forma –
-Pero estas enfermo, es normal que te ayuden –Menciono terminando de subir las ultimas escaleras.
-Sí, pero no puedo parecer tan débil ante ellos –Respondí sin pensarlo mucho. En realidad no quería parecer débil ante nadie. ¡No lo soy! –Bájame aquí – Exigí con fuerza.
-Bien, bien, Solo no vayas a caerte ¿Si? –Dijo sonriendo.
-No lo hare jaja –Sonreí mientras le estiraba la mano – Gracias –
-De nada –Me apretó la mano con fuerza –Si gustas, algún día podemos volver a actuar jajaja, lo haces muy bien –
-¿Tú crees? A mí me gusta más el soccer –Soltamos el apretón. Colgué mi mochila al hombro –Nos vemos Kasuma –Me despedí con la mano mientras empezaba a caminar hacia mi cuarto.
- Claro que nos veremos Tommoky -Menciono aquel chico para después desaparecer por las escaleras.
Camine lentamente hasta llegar a mi cuarto, gire la perilla para entrar cuando la puerta se abrió rápidamente mostrándome a todos mis compañeros con una gran emoción en su rostro.
-Tommoky, llegas tarde. Se supone que hoy toca entrenamiento – Hablo Takuya un poco apresurado. Eso no era normal.
-AAhhh, cierto que hoy es martes –Mencione con impresión, no recordaba que hoy jugaríamos de nuevo.
-Vamos hermano, cámbiate rápido –Dijo inquieto Rei.
-Lo siento Rei, hoy no podré jugar con ustedes, no me siento muy bien –Respondí un poco desalentado. Me dirigí a la cama mientras aun me quedaban energías y me desplome sobre ella sin dudar. Todos se acercaron rápidamente.
-Tiene mucha fiebre –Hablo Daji luego de tocarme la frente – Debemos quitarle la ropa -
-Iré a mojar una toalla –Exclamo Konu alterado.
Aunque no veía muy bien, sentía el aliento de preocupación de todos los que me rodeaban. Sin oponer ninguna resistencia, termine por quedar en ropa interior sobre mi cama. Luego sentí como una sábana me cubría de pies a hombros.
-Aquí traje la toalla –La voz de Konu volvió a sonar en el entorno –
-Bien hecho Konu, hay que bajar su fiebre –Ese era Koji… o su hermano.
-Gracias a todos –Hable con las pocas fuerzas que podía. Casi un susurro.
-No hables, debes descansar ¿Cómo llegaste hasta aquí en este estado? – Pregunto uno de los rubios. Mis parpados se ponían pesados. ¿Tengo sueño? ¿O es por estar enfermo?
-Pero si en el almuerzo estabas bien ¿Por qué te enfermaste hermano? –Esa era la voz de Rei.
-Seguro no nos percatamos de que estaba mal –
-Cierto, para tener esa fiebre, debe ser grave –Ese Takuya –Como no me di cuenta –Oí un estruendo. Como si hubiera golpeado algo.
-Es culpa de todos. Todos dormimos aquí y nos preocupamos por el –Mis ojos ya solo veían siluetas paradas en el centro de la habitación. Solo la silueta más pequeña me estaba cerca de mí.
-SShhh Está durmiendo –Era Reisuke –Vámonos, así mi hermano descansara –
Aunque escuchaba susurros, no entendía bien las palabras. El cansancio me ganaba, y la fiebre no me dejaba pensar con claridad. Hace tanto tiempo que no me enfermaba, me pregunto… si alguien me hará caldo de pollo como lo hacía mi madre.
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-SSShh Despierta - ¿eehh? Mmmm – Tommoky ¿Estas despierto? –
Abrí los ojos de repente. ¿Quién me estaba moviendo? Debido a la oscuridad no distinguía quien era el que estaba frente a mí.
-Rápido, antes de que regresen los demás – Menciono otra voz en medio de la oscuridad.
¿Demás? Entonces no son mis amigos. Entonces quie…
-¡¿Quién está ahí?! –Grite con todas las fuerzas que tenía. Me sentía un poco mejor, pero no estaba del todo bien. Intente ponerme de pie con velocidad, pero…
-No te muevas así, no estás bien –Al escuchar la voz en un tono natural pude reconocer quien me ayudaba a no caerme.
-Yoshy –Mencione sorprendido mientras que mis nervios se calmaban un poco.
-Lamento que estés enfermo, pero tienes que acompañarme –Hablo muy rápido pero seguro –Es muy importante tanto para ti como para mí –
-Rápido, creo que aún no ha salido nadie del comedor –Una cabeza se asomó por la entrada de la puerta. Una cabeza muy conocida –Aah ya se despertó… pero no lo vamos a llevar así ¿Cierto? –El pelo rojo de Lain se veía a través de la luz del corredor.
-¿Lain? ¿Qué haces aquí? –Pregunte mientras Yoshy me ayudaba a sentar en la cama –
-Cumpliendo con un trato –Respondió mientras su cabeza salía de mi vista –Rápido… creo que escucho pasos-
-Rápido. Ponte algo y vámonos –Dijo Yoshy muy apurado.
-Pero… ¿A dónde? ¡No ves que apenas puedo moverme? –Mencione un poco enojado. No iba a ir a ningún lado con esta fiebre.
-Debes confiar en mí, es muy importante –Respondió el pelirrojo poniéndome una camisa a la fuerza, tanto así que no se dio cuenta de que me quedaba muy pequeña. Debía ser de Konu o de Rei – Todos los equipos se están moviendo… ¡Y están contra nosotros Tommy! Debemos mostrarnos también –
-Te refieres a las alianzas ¿Cierto? –Mencione con seriedad mientras me ponía un pantalón normal –
-Si ¿Estás listo? –Pregunto mientras se dirigía rápidamente a la puerta -… Lo siento, pero no puedo ir sin ti –
-¡Viene alguien! –Grito Lain algo ofuscado –Vámonos, si ven que vinimos por el así, no nos creerán mucho -
-¡Un segundo! ¡¿Quieres?! –Alzo la voz Yoshy –Mira Tommy, si no te necesitara no habría venido por ti. En verdad necesito que me acompañes – Su figura, iluminada por la luz que emanaba del pasillo generaba un bosquejo siniestro en mi mente, aun así… Sus palabras lograron algo.
-Vamos entonces –Respondí mientras me ponía los tenis de alguien más. Me calzaban algo grande – Pero tendrán que ayudarme –
-Andando entonces –Dijo Lain mientras ponía mi brazo sobre su cuerpo, Yoshy hizo lo mismo. Emprendimos el rumbo, luego de que cerrara la puerta detrás de mí.
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-Ya veo, entonces vamos directo a hablar con Nii Kato –Hable serio mientras caminábamos a buen ritmo por la plaza. No se veía mucha gente, pues era aún era la hora de la cena.
-Así que recuerdas su nombre – Sonrió Yoshy – Parece que le agradas ¿Lo sabias? –
-No lo sé, creo que solo es por la alianza –Respondí muy pensativo. Estábamos hablando de la persona que nos forzó a formar una alianza con otro equipo: El equipo Rojo primario, quien quedo en primer lugar en la primera prueba.
-No, parece que en verdad le agradas. No con todos se presenta tan formalmente como tú – Señalo insistente mi amigo – Por eso pensé que debías acompañarnos –
-Ya veo, puede que tengas razón –mire hacia el frente con nerviosismo. Estamos entrando a las puertas del bloque D. Así que aquí estaba su dormitorio ¿Me pregunto cómo será? –Subamos despacio ¿Si? –
-De acuerdo –Menciono Lain.
-Así que ya llegaron –Miramos hacia arriba para toparnos con Ushio, quien nos miraba con una cara seria – Mi jefe los espera –
-¿Jefe? –Repetí muy confundido.
-¡Hola Tommoky! Me dijeron que estabas enfermo –Grito a lo lejos –Déjame ayudarte - Casi que salto desde donde estaba para caer al lado de nosotros – Así tus amigos podrán retomar aire –
-¿Ehh? – Mis compañeros quedaron sin palabras.
- Yoshy –Puse mi boca cerca de su oído – No dejes que este acosador me toque… él quiere algo conmigo… es un… -
-Vamos Tommoky –Dijo Ushio cogiéndome del torso y alzándome entre sus brazos.
EEEHHHHHHHH
-¡Bájame! ¡Bájame! – Vocifere intentando zafarme de su agarre. Parecía como la princesa que interprete en la clase de la tarde – ¡No me siento cómodo así!
-¿Qué dices?... Así será más fácil llevarte –Comenzó a subir las escaleras firmemente conmigo pataleando –
-¡Suéltame! ¡Me vas a dejar caer! –
-No lo creo, soy más fuerte de lo que crees – Menciono Ushio mientras seguía caminando como si nada – Y también soy más mayor de lo que crees – ¿EEHHH? ¿Mayor? Pero si parece de mi misma edad –Parece que te deje helado con eso, pero será mejor así jajaja… -Su risa no me causaba gracias… solo me ponía a pensar más -… Llegamos – Dijo mientras me bajaba por fin.
-Entonces solo era hasta el tercer piso –Comente indignado por como Ushio había llegado hasta aquí – Hubiera podido llegar solo –
-Déjate el orgullo –La voz de Lain surgió detrás de mí. El y Yoshy acababan de llegar al piso tercero –Pesas mucho, si te cargamos no hubiéramos llegado nunca –Surgió una mirada de seriedad.
-No estoy gordo –Refunfuñe mirando para otro lado.
-Jajajaja –Yoshy estallo de la risa –No estamos diciendo eso jajaja –
-mmmm Creo que deberíamos seguir, no querrán hacer esperar a mi jefe –Dijo Ushio mientras avanzaba por el pasillo –Por aquí –
-Bien –Empecé a caminar por mi cuenta, con dificultad pero… -… ¡Yo puedo! – Mire a Yoshy, quien estaba a punto de acercarse a mí-
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-Entonces… ¿Para qué querías hablar conmigo? – Menciono aquel personaje que recordaba con facilidad, pues era imposible de olvidar. Después de cruzar a la derecha dos veces y pasar una puerta a través del corredor, Ushio abrió una puerta sin dejar que viéramos el número -… Y ¿Por qué tanta compañía? –
-Eh… Él es Yoshitory, es el capitán del equipo rojo ladrillo y él es Lain, es un amigo que sabe mucho de los equipos – Respondí intentando que no se me notara nervioso. Me temblaba bastante el muslo derecho – Están aquí por… -
-Yo fui el que pido esta reunión contigo –Interrumpió Yoshy –Se supone que yo también soy aliado de Tommoky, por eso quería… -
-¡Tú eres Vigilante! ¿Cierto? –El jefe de ellos: Nii Kato, nos mostró su rostro más inconforme hasta ahora. Una mezcla de sonrisa con… rabia – ¡A mí no me agradan los vigilantes! –Su forma de alzar la voz era peculiar. No tenía que gritar para asustar a la gente.
De repente salieron los demás miembros del dormitorio, incluyendo a Ushio. Ninguno tenía muy buena cara ni muchas ganas de saludarnos.
-Entonces viniste porque me necesitas ¿Me equivoco? –Razono mientras tomaba asiento en el piso. Eso en verdad me pareció raro.
-¡Sí! Lain me dijo que la mayoría de los dormitorios se habían aliado contra los dormitorios plata y contra el mío –Respondí dando un paso al frente –Por eso ayer y hoy han estado molestando a mis compañeros. Intentan afectarnos… Y también como estoy enfermo… no he podido hacer nada por ellos –
-¿Entonces lo que tu pequeño amigo averiguo resulto ser cierto? –Hablo aquel chico mientras hacía alguna clase de estiramiento raro… parecía Yoga –
-Además como no es parte de ningún equipo, no genera sospechas de ningún tipo –Aclamo Yoshy de nuevo –Su tamaño y bajo perfil nos han ayudado mucho-
-No es el bajito lo que me preocupa –Le regalo una mirada fría a Yoshy –En verdad… no me gustan los vigilantes –
-Nii, espera –Llame la atención dando otro paso al frente -Ya… ya tenía una alianza con su equipo antes de que tu propusieras la nuestra -¿Qué rayos estoy diciendo?... – Al igual que tú, él también me dio algo como muestra de gratitud y me dijo que nuestra alianza solo duraría hasta la cuarta prueba. Es decir, que llegábamos a la final… y nos enfrentaríamos con… –
-Yo solo quería tener al equipo estrella de mi lado –Interrumpió Yoshy con seriedad – Es mejor cuando estás del bando que está de moda y que la gente quiere más. Porque además de ser lo que tú odias- Señalo a Nii - también quiero ganar… y pasar sobre los demás –
No dejaba de mirar a Nii, o a cualquier otro miembro de ese equipo. Sus expresiones no cambiaban en lo absoluto. Si había inventado esa mentira para intentar convencerlos, todo había sido en vano…
-Jefe, no parece ser el mismo de siempre – Menciono el más pequeño de su grupo.
-Ya lo note, puede que su forma de pensar nos permita ir más adelante que los demás –Nii esbozo una sonrisa jovial. Muy parecida a cuando se presentó frente a mí ¿Lo habíamos logrado? -Ushio, tráeme la caja por favor – Me miro luego de dar la orden.
-Si- Menciono el pelinegro mientras salía del cuarto.
-Bueno Tommoky, parece que tu aliado hoy también se convertirá en mi aliado –Se puso de pie y se acercó rápidamente – Bienvenido al equipo estrella – Le estiro la mano a Yoshy, el cual no tardó mucho en apretársela – Programare una reunión para discutir algunos puntos con ustedes… Solo ustedes- Nos señaló a los dos – Y bueno el bajito también –
-Tú también serias bajito si tuvieras mi edad – Pero que… ¿Lain acaba de responderle? No se da cuenta de lo peligroso…
-Pues si jajaja, pero hasta que crezcas serás bajito para mí – Menciono entre risas Nii –Ohh Ushio dales la caja a ellos. Tómenla como muestra de amistad temporal y los espero mañana a esta misma hora –
-Bien, nos vemos entonces –Dije sonriendo mientras me dirigía a la puerta.
-Ahh y Tommoky… - Me gire para mirarle de frente -… Mejórate, te ves más pálido que siempre -¿Pálido?
-Lo hare, gracias –Asentí mientras salía de la habitación seguido de Lain y Yoshy. Sin decir nada empezamos a caminar. Al llegar a las escaleras deje soplar una gran cantidad de aire –Uuufffff Creí que me desmayaría –
-Lo hicimos bien, gracias Lain – Yoshy se refirió al más bajito.
-De nada, vamos… tengo hambre –Exclamo gruñendo mientras bajaba las escaleras.
-Jajaj que humor. Vamos, te ayudo – Se colocó de espaldas a mí y no dude en sonreír y permitirle que me llevara.