— ¿Y como te fue con el príncipe Gaara, Sai...? — a tal pregunta produjo que se ruborizara el ojinegro, nunca había tenido ese tipo de sentimientos. Tenia a un padre que era muy sobre protector y no permitía que tuviera la libertad de tener una pareja teniendo vacío corazón que solo demostraba con falsas sonrisas a sus amigos para que no se preocuparan por el. Sobre todo Naruto, que desde que lo conoce ha sido muy alegre y se preocupaba por todos; y no escamita en ayudar al que lo necesite.
—Yo creo que bien, mira como se ha puesto — le mencionaba el pelilargo a Naruto, tomando agua de su botella
—Si cuéntanos que ese tono carmesí no lo quiere contar todo — le hablaba la pelinegra con pequeño tono de burla y timidez por el pelinegro
—Tiene razón Hinata ya cuéntanos ttebayo — le decía zangoloteando al delgado azabache para que soltarla todo lo que había dicho el soberano Gaara sobre todo
—Bueno les diré lo que paso — le dijo dando un gran suspiro... haciendo que Naruto, lo soltara.
~~Flash back~~
—Mañana me cuentas — mostrándole una gran sonrisa zorruna haciendo que se sonrojara el ojinegro — hasta mañana príncipe Gaara, cuida mucho a “mi gran amigo” — haciendo énfasis en gran amigo mostrando unos ojos de que asesinaran al más inofensivo gato; lo cual comprendió el bermejo y le dijo
—Si por eso no te preocupes y se cuida igualmente, por que no se que me pasaría si le llegue a suceder algo — lo cual el rubio rápidamente entendió un doble sentido de esas palabra haciéndole tomar un tenue color carmesí lo cual molesto al ojinegro por que el también había entendido ese mismo doble sentido de las palabras.
Después de que se retira el rubio empezaron el largo trayecto a la casa de Sai, ninguno dijo nada solo se miraban fijamente hasta que al fin llegaron y el bermejo fue el primero en bajar después de que abriera la puerta el castaño.
—Yo me encargo — le mencionaba agarrándole el hombro a Kiba
— Como usted ordene su majestad — estaba por marcharse para tomarle la palabra al pelirrojo cuando lo detuvo la misma voz llena de seriedad que producía el bermejo
— Esto no es lo mío... — algo vacilante —...pero perdón por lo de hace unas horas. — algo que no entendía muy bien anqué, sin embargo tenia que tener en cuenta con quien estuvo toda esa noche y como estuvo el soberano de molesto. Que le enviaba esos inexpresivos ojos al castaño que lo mataban.
— A mi no me lo tiene que decir, su majestad — le mencionaba el castaño dirigiendo la vista hacia a dentro de carruaje en donde se encontraba el azabache levantándose para salir. Por que era muy complicado su kimono — el es muy inteligente y se percato... — le decía soltando una pequeña risilla —...pero bueno lo dejo con sus problemas su majestad — decía retirándose un poco y provocando que se perturbara un poco al pelirrojo por lo anterior dicho que ni se percato que el níveo ya se había bajado de carruaje cuando el tenia las intenciones de ayudarlo a bajar de dicho vehículo
— Espéreme joven Sai, ¡yo lo acompaño! — casi le gritaba al moreno por que estaba dispuesto para pedirle una disculpa pero el azabache le contesto diciéndole
—¡Ya déjeme en paz...! yo no le hecho nada para que me este acosando así, estoy fastidiado yo no se como son lo donceles en su reino para que crea que aquí somos iguales y usted llegue su sonrisa, que es mas fingida que la mía y crea que todo es de su pr... – ya no pudo seguir con mas de sus insultos que le tenia, porqué el soberano Gaara, para acallar todo lo que le estaba diciendo le planto un beso que al principio era muy a la forzado que poco a poco el ojinegro se fue dejando besar por los labios del pelirrojo, comenzado a fundirse en un largo y demandante beso jugando con sus lenguas, explorando su cavidad bucal de ambos, luchando con sus lenguas hasta que alguno resultara el victorioso, se vieron forzados a separarse por la falta del valioso oxígeno. Pero fue grave error para el soberano que al finalizar de ese gran beso el soberano recibió una gran puñetazo en la mejilla que dejo tirado al pelirrojo que se sobaba la parte afectada mientras recibía ojos de desprecio por parte del azabache que a la vez estaba todo colorado por ese beso.
—Le ofrezco una disculpa pero no se que tiene... pero desde que lo vi ayer por primera vez me ha encantado — le mencionaba el pelirrojo levantándose de lugar en donde había caído y tomando por la cintura al níveo haciéndolo colorarse — pero yo se que usted no me esta creyendo lo noto en esa mirada... — el ojinegro lo miraba con recelo y completamente lleno de ira — ...pero me gustaría que tuviéramos una relación para conocernos tal vez... — ya no pudo proseguir por que interrumpió hombre que había salido de hogar del azabache.
—Hump...hump, buenas noches — decía un hombre moreno de cabellos azabache y ojos rasgados de color negro ya de avanzada edad que se miraba molesto la imagen que estaba presenciando.
—Hola oto-san — hablaba muy avergonzado lleno de timidez, y con algo de miedo el pelinegro separándose del soberano que estaba tan apenado que no le salía ninguna palabra de la boca lo que vio el príncipe y decidió hablar
—Buenas noches señor, déjeme presentarme — le mencionaba con una pequeña reverencia el bermejo — soy el príncipe Gaara del reino de Suna.
—Hump, con que el príncipe — le decía rodando los ojos el moreno sin creerle a lo que le decía el pelirrojo — ¿pero que hace aquí el soberano? — dijo con algo de hipocresía, no creía para nada que era un príncipe solo por traer las ropas dignas del príncipe.
—Acompañar a este dulce doncel, que claramente me encargaron su seguridad — decía sin inmutarse el pelirrojo lleno de valentía — pero me marcho que ya es muy noche y no quiero molestar a los emperadores con mi retraso, que serian de mis modales — a lo cual miraba con bastante suspicacia — me dio mucho gusto conocerlo ¿señor...?
Shimura, Danzo Shimura – contesto el pelinegro mayor.
—Entonces me retiro señor Shimura — decía el bermejo marchándose hacia el carruaje en donde lo esperaba con las puertas abiertas Kiba, mas cuando iba subir recordó algo a sí que decidió regresar para decirle a Sai, que todavía esperaba en la entrada de su hogar junto a su padre. — joven Sai lo que le dije antes de la interrupción de su padre es enserio y esperare una respuesta mañana en palacio de emperador — dijo muy decidido siendo observado por par de pelinegros que ni se conmovieron por lo dicho y se marcho hacia a su carruaje con algo de desdicha por que no le pudo ofrecer una verdadera disculpas que merecía el azabache
~~Fin de flash back~~
—Entonces ¿cuál es tu respuesta Sai? — le preguntaba muy enérgicamente el rubio
—Que sí — le contestaba muy avergonzado casi un susurro — es que siento que es verdad lo que me ha dicho y lo que hizo antes ha reforzado lo que estaba el fondo de mi corazón aparte de que siento una gran protección con el — le decía demasiado pensativo
—Aaah — dijeron los tres al escuchar lo que estaba diciendo su amigo por que casi no decía mucho por que era demasiado introvertido.
—Pero Sai, estas realmente seguro...— le preguntaba el blondo -...sin no mal recuerdo. –Tocándose el mentón – dice la ley N.5 del libro de historia de Konoha. Ningún menor de 18 podrá elegir un compromiso con ningún emperador, guardia, o etc. Sin la autorización de cualquier padre o tutor a cargo del menor.
Todos quedaron sorprendidos por que le rubio. Sabía al pie de la letra aquella ley — ¡guau! —Exclamaron todos los presentes.
— Ototo de donde salió eso — miraba Deidara de pies a cabeza a Naruto.
—Si es que... en la mañana lo leí — les comentaba rascándose la cabeza mostrando una sonrisa zorruna — pero me aburrí a la segunda pagina y me deshice de el — lo que provoco que cayeran de recio al suelo
—Baka — le dijo Deidara golpeado a Naruto en cabeza que instantáneamente se agarro — pero eso no seria problema Sai, ya tiene 18 y su próximo cumpleaños es el — se mordía la uña de su pulgar — 25 de noviembre — y volteo a ver al níveo que con el movimiento con su cabeza para confirmar lo del pelilargo
—Pero en caso de que Danzo-sama, niegue sabes que con nosotros... — señalo el rubio a Deidara y Hinata pues sabían que el padre de Sai, siempre exageraba con la enseñanza de Sai y se molestaba con cualquier error que tuviera — tendrás con quien contar y una gran protección eso es una promesa de veras — le decía el blondo, abrazando a su azabache compañero — pero que estamos haciendo aquí tienes que darle tu respuesta – soltándose del abrazo para salir corriendo a la dirección de el palacete dejando a la pelinegra y el pelilargo
—Espérenos chicos...— les gritaba la ojiperla apunto de salir corriendo cuando fue agarrada por Deidara —...pero Deidara-kun no los vamos alcanzar — le mencionaba mirando que ya tenia un largo trayecto sus amigos
—No te preocupes Hinata, ahorita los alcanzamos —le dijo haciendo una señal, mirando como se acercaba una carreta en la cual pidieron que si los podía llevar al palacio en donde se encontraría los dulces donceles que habían salido a toda prisa.
No tardaron en llegar el par de lindos donceles con algo de cansancio por la larga carrera a la entrada del palacio; el cual era muy presuntuoso aquel palacete sus torres altas adornas de paredes grises y techos azules rodeadas por un reja que cubría la mayoría de este, pero se le hizo extraño que estuviera cerrado, lo cual nunca había pasado a lo cual el rubio se acerco a la entrada la cual quería entra sin embargo recibió una negatoria por un guardia que custodiaba la entrada en momento que lo vio le dijo que estaba prohibido el paso; lo cual provoco que se molestara ya tenia varios años yendo y nunca le había prohibido el paso y menos siendo el futuro emperador.
— ¡Déjeme, pasar dattebayo! — Le gritaba al guardia que lo estaba agarrando para que no pasara — ya déjame pasar nunca nadie me había detenido y tu no vas hacer la ¡excepción ttebayo! — ya gritando con desespero por que quería entra; por lo de su amigo no quería hacer un berrinche como su amigo lo estaba provocando cuando vio a, Deidara y a Hinata lo cuales se sorprendieron al ver la conmoción que estaba provocando Naruto que decidió preguntar Deidara
— ¿Qué pasa?
—Deidara-sempai — le contesto aquel guardia que no dejaba pasar a Naruto
— ¿Por qué no dejan pasar a mi hermano y al joven Sai que tiene una información importante para el soberano Gaara? — decía con un tono molesto el ojiazul
—Lo siento pero se nos dieron ordenes que se tenia que prohibido el paso a cualquier civil.
—Pero que demonios, estas diciendo, déjanos pasar ya — le gritaba pero con una furia retenida a lo rápidamente se le vino una ingeniosa idea — yo no soy ningún civil, déjame pasar.
—Lo siento pero usted menos puede pasar.
— ¡Que!, acabas de decir — ya había aguantado demasiado, se molesto como podía ocurrir eso, era la pareja de Itachi el príncipe del reino de Konoha. Aunque no todo imperio se había enterado para que llegara a gozar de algunos beneficios, pero era imposible que lo tratara de esa manera. Siendo un guardia de la familia imperial.
—Cálmate, Deidara- kun — le hablaba la pelinegra que había notado la furia que desprendía a igual que Naruto — déjame hablar por favor, Deidara- kun, debe haber una explicación y se cortes de calmar a Naruto ahorita arreglamos este asunto — le dijo, dirigiéndose al guardia — etto...Riichi-san — se dirigía al joven de pelo café y ojos de mismos color pero con apariencia a estar cansado — ¿por que no podemos pasar?
—No lo se Hinata-chan, solo nos dieron ordenes que no los dejáramos pasar a hasta nuevo aviso — le hablaba aquel castaño con mucho respecto aquella doncella que le había pedido aclaraciones.
—Yo, le puedo decir por que no pueden entrar — salía al rescate del castaño, Minato para decirle por que es la prohibición
— ¡¿Qué no podemos entra padre?! — gritaban el par de rubios al escuchar a su padre que al menos con el tendría un oportunidad entrar
— ¡Por que no! — con voz totalmente fría, que cualquier padre tiene cuando esta molesto; y mas cuando sus hijos los están dejando como un mal padre por no controlar a su hijos lo cual notaron el par de blondos que se empezaron a tranquilizar no quería enfurecer mas de lo que ya se veía. Parecía dos pequeños gatitos que acorralaba un gran perro danés.
—Entonces padre deja pasar a Sai, que tiene que decirle algo a príncipe Gaara — le hablaba con el seño fruncido por que su padre nunca le había hablado así y menos enfrente de la gente, aunque fueran conocidos. Se les hacia muy extraño
—Lo siento pero él ya no esta, tuvo que marcharse esta mañana — cuando dijo eso vio que todos se habían puesto triste por que había llegado demasiado tarde.
—Entonces nos retiramos padre hemos perdido el tiempo — decía el blondo pelilargo que representaba todos marchándose con la misma desdicha que los había dejado a los demás
—“Sabia que era una mentira” — pensaba el pelinegro agachando la cabeza para retirarse
—Esperen — les llamaba Minato — pero esto le ha dejado joven Sai — sacando un sobre blanco
~~flash back~~
—Minato-sama... — hablaba el pelirrojo mirando hacia el horizonte — me puede hacer un favor.
—si, que es lo que desea.
—Quiero que le entregue esta carta Sai, si llega a venir hoy. Si no llega a venir hoy tiene el derecho a destruir esta carta — decía algo cabizbajo introduciendo se a una carreta.
~~fin flash back~~
Ofreciendo un sobre que inmediatamente levanto su cabeza sorprendido abrió y saco una hoja que decía así:
Konoha, Miércoles 17 de julio de 1889.
Hola (querido) estimado: Sai
Si esta leyendo esta carta, es que no he podido estar para obtener su respuesta que supongo que es un, si acepto, y si tengo una oportunidad para poder conquistar ese duro corazón que no me dejaba entrar. Pero lamento decirle que he regresado a mi reino por que ocurrieron algunos problemas que espero resolver lo mas pronto para estar a tu la lado lo cual me tiene muy triste por no poder decirte lo siguiente enfrente a usted que a robado mi corazón.
Desde que lo vi golpeando a su entrañable amigo me flecho, y al saludarlo vi sus brunos ojos que hicieron que perdieran porque que poseían un gran agujero negro, que me absorbía no quería que se me soltaran. Pero cuando se retiro con aquel rubio incluso quería correr a su lado pero mis estúpidos modales como invitado del príncipe Itachi como del reino... no permitieron a lo que no hubo ninguna posibilidad de algún conversación que me permitiera conocerlo al principio creí que simplemente era una obsesión asía su persona pero al verlo de nuevo con ese hermoso kimono morado, me segó mas sin embargo al verlo agarrado del brazo del guardia Kiba me quería lanzar como un demonio pero yo creo que me controlo el amor que empezaba a sentir en esos momento, a lo cual no arme la escena mas grande, pero se dio cuenta de mis rotundos celos y cuándo usted me negó su brazo lo cual hizo que me sintiera destrozado he impotente por perder la única oportunidad que me dispuse tener cuando le dije a, Minato-sama, así que tuve que idear otra forma, pero te encontrabas nuevamente con aquel (Kiba) me matabas de celos sentía que me clavaban miles de estaca con espinas en mi corazón. Y cerebro tan caliente estaba que tenia puras estúpidas ideas para poder acercarme, la cual fue acompañarlo a sus respectivos hogares con algo de ayuda del soberano Itachi y Sasuke que siento que todavía no me aprecia por pretender quitarle a Naruto; la cual funciono (no lo puedo creer), pero vuelvo aclarar que me enamorado de ti Sai, que al sentir tus deliciosos, carnosos y rosados labios y su golpe en mi mejilla, me quedo claro que de ti me he enamorado que soy capaz de decirte que te amo, lo cual me siento orgulloso de tener este hermoso sentimiento por usted ladrón de corazones.
También quiero aclara bastantes cosas mas. Pero mejor cuando vuelva verlo directamente a sus brunos ojos los cuales me dice que no debo abandonar en este momento pero no puedo dejarlo pasar algo terrible habrá pasado para que mi hermano me haya solicitado en el reino.
Sin más que poder decirle hasta el momento me despido.
Atentamente:
Gaara no Sabaku
Príncipe de Suna
P.d. Esperó pronto tenerlo entre mis brazos.
Al terminar de la lectura le salieron unas traicioneras lágrimas las cuales alarmaron al par de blondos que inmediatamente se preparaban para armar un alboroto al soberano por al burlarse de corazón de Sai, pero sobre todo preguntarle que había pasado
— ¿Qué paso, Sai? ¿Por qué las lagrimas? —Preguntaba muy preocupado Naruto – no me digas que simplemente que se burlo de ti – “voy a matarlo” – pensaron al unísono el par de blondos
—No, Naruto... lee — le mostraba la carta para que leyera lo que su mapachito le había puesto lo cual alegro al blondo y cargo de la alegría que lo llenaba en esos momentos diciéndole lo feliz que era que por que su amigo al fin había encontrado el amor que tanto busca su querido amigo.
—Hinata, Dei, miren es hermoso lo que le dejo — les mostraba la carta a ambos que se quedaron encantados de la forma que se expresaba el soberano Gaara de Sai.
—Te has ganado la lotería. Mira que hermosas palabras te ha puesto — le decía el pelilargo blondo mostrando una sonrisa al pelinegro – “si así fuera Itachi de amoroso, pero solo es un hentai que quiere que este arriba del guayabo todo el día.”
—Gracias — le con una sonrisa que no mostraba falsos sentimiento si no llena de alegría que noto Naruto, que miraba muy feliz la felicidad de su amigo hasta que fue llamado
—Naruto, ven para acá – le hacia señas el blondo mayor con algo de molestia por lo ocurrido anteriormente que alarmo a Naruto poniéndoles los cabellos de punta.
— ¿Qué... que pasa? Oto-san — con temblorosa voz le preguntaba por que cuando su padre se molestaba era mas violento que un ogro y mas por que sabia como se había comportado incorrectamente hace unos minutos atrás con Riichi-san.
—Tu madre me dijo que fueras y le llevaras esto antes de las tres que van... — se cayo de inmediato en cuenta que iba decir de mas así que le mostro una pequeña lista donde venia unos articulo para alimentar un batallón. Y una pequeña bolsa de con varias monedas de bronces
—Si padre, ahora me dirijo... — no dijo nada mas de lo que quería, por que había visto en los zafiro ojos de su padre algo de furia y melancolía que no entendía muy bien por que la tenia — “que te pasa padre te hice algo”- pensó por que tenia el presentimiento que ya había ocurrió algo parecido pero no recordaba en donde o el porque — chicos me marcho tengo que llevarles algunas cosas a mi oka-chan.
— ¿Te acompaño? — le pregunta el pelilargo
—No, Dei, yo voy solo, como si fuera pasar algo malo — y le hizo un ademán con su mano para despedirse ya que salió corriendo
~~POV. Naruto~~
Salí corriendo hacia al centro del reino para comprar lo que parece una despensa para un batallón pero me estoy preguntando por que mi oto-san tenía un gran enojo y tristeza en sus ojos que sigo sin creer que sea por el problema con Riichi-san
—Hay ya se ttebayo — me dije en voz alta golpeando mi puño — se peleo con oka- chan — y a sin pocas de preocupaciones me dirijo al puesto de legumbres de la familia Hyuga en donde veo que esta atendiendo una castaña a una personas
—Hola Hanabi — la saludo asustándola un poco, pero veo que un gran enojo en su ojos lo que me recordaron a los de mi padre — ¿enojada? — le pregunto pero inmediatamente me contesta que...
—No, Naruto, ¿pero que te traer por aquí? — me contesto con gran cambio de enojo a alegría que desbordaron en sus perlados ojos al iguales que Hinata cuándo estaba conmigo antes que se enterara que era doncel.
~~Flash back~~
Estoy jugando con Sai, Kiba y Shikamaru a las atrapadas cuando de pronto nos llama Kakashi-sensei eran uno de mis primeros días el en la FAGRK
—Necesito una fila de donceles, una de doncellas y claramente una de varones — nos vocifero — que hoy tenemos un pequeño entrenamiento de rescate. Primero veremos el rescate de donceles con donceles, doncellas con doncellas y varones con varones. — nos decía leyendo un libro que sacaba de su bolsillo.
Y yo rápidamente fui a formarme y que de atrás de Sai, cuando me vio Hinata, se acerco y me dijo
—Oye Naruto-kun... — con una voz chillona — T-te equivocaste de fila — que con un gran sonrojo
—No Hinata, Naru, es un doncel — dijo Sai, con una sonrisa un poco torcida lo cual a veces me asusta y molesta, sin embargo lo que me afligió fue la mirada de Hinata.
~~fin de flash back~~
Que bueno momentos aquellos, que malo que no recuerdo algunos he, he.
— Naru, Naruto — me saca de mi ensoñación Hanabi; y le comento a lo que he ido
—Vine a ver si me puedes despachar esto — le enseñe la lista que me había dado mi padre lo que volvió a recordar el enojo que tenia mi padre—” ¿Por qué?... ¿que hice?”— me sigo preguntando por que no creo que haya sido por mi madre, tal vez algo hice para que se verdad lo molestara.
—Si Naruto-kun tengo todo ahora mismo te lo preparo — y se fue de mi vista a traerme lo que en la lista sin embargo vuelvo a recordar los ojos de mi padre. Me torturan y no se por que
—“¿Desde cuando padre?” — me sigo castigandoa mi pobre cerebro que no sabe reaccionar demasiado rápido —” ya lo recuerdo”.
~~Flash back~~
~~Hace seis meses~~
Me encuentro regresando de la celebración de búsqueda para la nueva o nuevo pretendientes que fue dada por el príncipe Sasuke, con una pequeña semilla entre mis manos, sin embargo al ingresar veo a mi padre que inmediato me lanzo a darle un abrazo y un beso ¿Por qué?, sale mucho con los emperadores y casi no lo veo y menos hace un par de horas en palacete, y me pregunta
— ¿en donde estabas...? — Con algo de felicidad en su azulina mirada — ¿y tan bien arreglado? — lo cual yo me sonroje por lo que dijo mi padre casi no me lo dice, por que no me gusta arreglarme como los demás donceles...y le conteste con alegría que desbordaba demasiado por tener una pequeña oportunidad en mis manos.
—Fui al evento de compromiso del príncipe Sasuke — a lo cuál repentinamente cambiaron sus ojos a un gran enojo que me empezó a reclamar y dar miedo.
— ¿Por que has ido...?, ¿Quién te ha dicho? — me agitaba yo estaba totalmente anonadado sin poder decirle que, mi mamá había sido la que me había dicho. Pero yo tampoco iba a traicionar ahora que ha estado un poco resfriada, y mucho menos como estaba ahora mi oto. Y fue cuando escuche la celestial voz de mi oka decirle
—Minato, yo fui — con una mirada desafiante que no pude entender el comportamiento de ambos por que la miro con un gran enojo algo me ocultaban por que inmediatamente se llevo a mi mamá a su habitación.
~~Fin de flash back~~
—Van hacer 150, Naruto — escuche su delicada voz que me sacaba nuevamente de mis pensamientos
— Claro Hanabi, ten-y le extendí mi mano para que recibiera la monedas mientras recibía una canastas llena de vegetales y frutas.
— Solo falta que recojas una pequeña maceta de tulipanes.
— ¿Eh...? — fue lo único que salió de mi boca y me enseño la lista que observe que tenia razón le dije
— Gracias, Hanabi — y me despedí para dirigirme a la florería de los Yamanaka a la cual llegué muy rápido. Al entrar tenia un agradable olor como cualquier otra florería y estaba Ino, y la salude con mi carismática sonrisa.
—Hola Ino — y ella me devolvió la el gesto y me hablo
—Ya tengo preparado los tulipanes que pidió Kushina-san, Naruto — se marcho al invernadero para recogerlos y escuche un grito.
— ¡Que bueno que no me hiciste caso! — “¿de qué?” y recuerdo inmediatamente
~~Flash back~~
~~Hace una semana~~
Me encontraba con aquella rubia con una coleta alta y con un mechón enfrente en uno de ojos azules celeste y piel blanca agarrándome de mi muñeca para que observara las flores que ella vendía.
—Ándale, Naruto escoge, la flor que se hace digno de tú amor — me decía con gran alegría
—No creo que sea muy honesto, mejor no, Ino — le dije completamente afligido por su comportamiento como de los demás participantes que salían con hermosas flores
—Ándale que Sakura, ya se llevo una rosa, estaba hermosa no querrás quedarte sin el príncipe — lo que hizo que dudara un poco, pero reafirme mi autoridad. Y le dije
—No Ino, estoy bien a sí — mostrando una radiante sonrisa — bueno me voy, Ino nos vemos — y salí casi corriendo de aquella florería. No quería que me convenciera por que a veces soy muy blando para las decisiones, y podría hacerme cambiar de opinión.
~~Fin de flash back~~
—Mira — me dijo mientras me mostraba un sobre y dejaba la maceta en el mostrador — ya recibí mi invitación y definitivamente iré — fue lo que me dijo yo estaba tan atónito mirando aquel sobre
—Puedo— no la quería abrirla sin su permiso.
—Claro.
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>>Toc-toc-toc. >>
Tocaban la puerta de una casa de estilo rustica de grandes dimensiones. Un hombre de castaña caballera y piel morena que traía unos pantalones azules con un saco rojo con mancuernillas doradas y a su lado derecho una bolsa bruna, que se encontraba demasiado abultada. Que era abierta por una joven de cabello castaño con un par de chongos, unos ojos al igual que su cabellera y de piel canela que traía un ligero vestido rojo con un delantal café
—Buenas tardes — reverenciaba — esta el la residencia de la noble familia Haruno.
—Si aquí es — contestaba la castaña con una pequeña reverencia.
—Le puedo entregar esto — aquel moreno le mostraba una sobre que sacaba de la bolsa que traía a lado derecho — es una cordial invitación al baile de compromiso por el par de príncipes Uchiha.
— Gracias yo se le entregare el sobre a la familia — la oji-café se despidió del encardado de entregar la invitaciones para fiesta real.
—Señorita, trajeron esto —- decía la castaña que había entrado al vestíbulo de la residencia Haruno para mostrándole la invitación que había llegado.
—Haber dame eso — se paraba la peli rosa de un sillón de piel color crema, abriendo inmediatamente aquel que sobre que le entregaba la morena para sacar un pequeño trozo de papel con que venia plasmado el escudo oficial de la familia Uchiha que consistía en un par de halcones a las orillas y en centro es símbolo Uchiha con una corona encima que decía así.
Estimada familia Haruno.
La familia real les hace una cordial invitación para:
El baile por el cumpleaños numero 18 del soberano:
Sasuke Uchiha;
He igualmente su compromiso con el doncel Naruto Uzumaki;
Como al igual que el compromiso de
Uchiha Itachi, con el guardia y doncel Deidara Uzumaki,
Que se estará festejando el salón principal de palacio
El martes 23 de julio del presente año
La familia real estará agradecida con su presencia.
Después de leer el pequeño comunicado le salió una maliciosa sonrisa en su rostro que estremeció a joven castaña que la miraba con incredulidad. Por que ella conocía muy bien
—Ten-ten, prepara el mejor vestido que tenemos, hay un cumpleaños que festejar y una relación que separar —. Que miro con desaprobación
—Si, señorita — le contesto marchándose del vestíbulo, temiendo lo peor por la pareja que iba sufrir
—Al fin, Uzumaki... me las pagara voy a sepáralos y es mejor que disfrute tu relación por que no durara mucho mas.
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Salí de mi ensoñación no podía creer que ya estaban las invitaciones tan pronto ya tenia mi nombre como pretendiente de Sasuke, le entregue su invitación a Ino, me despedí de ella dándole un beso en la mejilla agarre la maceta y la deposite en canasta para que no ocurriera ningún accidente a llegar a caérseme.
~~Fin de P.O.V. de Naruto~
Al salir para dirigirse a su hogar escogió, el camino mas corto que estaba cruzando una gran avenida la cual, que están pasados muchos carruajes pasaban demasiado rápido, al cual detuvo su paso. Pasaron unos momentos empezaron a cesar aquellos carruajes Naruto, como la demás gente que quería cruzar al ver eso decidieron seguir el paso, pero el zapato del rubio se le había soltado así que se agacho para acomodarse el calzado se levanto, he igualmente la canasta que había dejado en suelo y vio que venia una carroza que no tenia conductor a demasiada velocidad que lo dejo en completa estupefacción que nada mas cerro los ojos esperando...
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Se encontraba Deidara, muy pensativo sufriendo por una decisión que había tomado incorrectamente
—ah, debí al menos a acompañar a Sai y comprar algo de arcilla para hacer algunas figuras, ya desde hace mucho no hago una escultura y Kurotsuchi, no ha regresado de su visita a su abuelo y me siento muy solo tal ves, debería buscarme algún amigo o amiga que el trabajo de guardia me mata... — se decía sobándose su cuello cuando escucho una voz
— ¿Qué te esta matando hermosura? — El blondo al escuchar que alguien le hablaba volteo reconociendo inmediatamente a Itachi que se encontrar montado en un caballo completamente negro, un completo semental
-Hump- volteándose haciendo que Itachi se bajara de inmediato por que conocía mucho a su Dei, y para que lo tratara así significaba que algo le había hecho y rápidamente fue a cuestionarlo
— ¿Qué pasa?
—-Nada
— ¿Cómo que nada?
—Solo que ya no me quieres
— ¿Cómo que ya no te quiero? — agarrándolo de la cintura para empezar a darle besos en cuello que eran su adicción y eso lo sabia muy bien y así es sabría que podría obtener la manera más rápida de que lo perdonara lo mas pronto por cualquier motivo.
—Es...es que — decía con temblorosa voz por que ya estaba cayendo en lo encantos del pelinegro — nos no dejaron pasar hoy al palacete — lo cual sorprendió al oji-bruno, que dejo de darle los besos mirándolo a los ojos, por que nadie podía impedir el paso de nadie y menos de un guardia como lo era Deidara.
—Eso es un error a nadie se le tiene prohibido el paso y menos tú. No creo que mis padres, lo hayan excepto que...— dejando al aire la cuestión que Deidara le pregunto inmediatamente
— ¿excepto que?
—Tu padre
—Te refieres a eso.
—exacto.
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...Esperando el golpe que nunca llego, lo único que llego fue un fuerte brazo que lo sostenía por la cintura a lo cual temeroso empezó abrir su ojos notando quien lo sostenía para escuchar la voz de su salvador.
—Dobe, estás bien.
— ¿Te-te-teme? — preguntaba incrédulo observando que estaba siendo sostenido por el brazo de Sasuke que venia montando un hermoso caballo color negro con blanco que aun galopaba lentamente para al fin detenerse para soltar a Naruto y bajarse rápidamente.
—Estas bien — observaba temeroso el azabache al rubio que todavía se encontraba en completo shock — contéstame Usuratonkanchi.
Hasta que al fin le volvió a hablar el rubio saliendo un poco del shock — Sasuke, estoy bien ttebayo — le dijo el blondo para tranquilizar al azabache, que miro como se levantaba. Dejándolo sentado en el suelo, para irle a reclamar aun indefenso anciano que llegaba a calmar al caballo de la carreta.
— ¿Usted?, ¿es el dueño de este carruaje...? — le pregunto el ojinegro
—S...si, su majestad — decía aquel anciano hombre que se tragaba su propia saliva. Por que a pesar de todo el reino buscaba la igualdad y justicia... ante el se encontraba el hijo del emperador que se rumoreaba desde que tuvo un accidente se volvió el más frio incluso mas de lo ya que era a su corta edad.
— ¡Guardias! — grito tan lleno de frialdad que se diría que asusto a media aldea. Por aquel hombre que sufriría el yugo del príncipe que se había percatado de que el caballo ataco a su amado doncel.
Llegando rápidamente los guardia que se encontraba en las cercanías
—Llévense a este anciano.
—-Por que cargos —el guardia no iba permitir que por ser el soberano que se hiciera la impunidad a un pobre anciano. Es lo que en algún momento les estipulo el emperador Fugaku. Cuando hubo un problema que sucedió hace mucho.
—Por el intento de asesinato del futuro emperador — a lo cual dejo conmocionada a la gente que miraba incrédula; por que no todo el pueblo de Konoha sabia del compromiso de soberano y menos con el rubio imperativo.
—Sasuke — le hablaba el rubio — ¡Sasuke! – grito el blondo que se encontraba levantándose pero el bruno no le hizo caso así que grito con mas fuerza — ¡¡¡Teme!!! — llamado la atención de toda la gente observando, pero sobre todo de Sasuke que volteo a verlo con una vena palpitante en la frente.
—Que te dije — le hablo como si de una madre se tratara regañando al niño pequeño por a hacer una travesura haciendo que provocara que el moreno empezara a recordar
~~Flash back~~
—Nada de guardias, no quiero que me trates como una florecilla indefensa por que no lo soy, yo me entrene para no serlo.
Eso le dijo por que había tenido una discusión después de la cena en donde el azabaches le decía que quería darle todo, la protección para que no le pasara nada lo cual no le gusto Naruto y mucho menos al ojinegro que tuvo que tragarse su orgullo por que le había ganado el blondo en su primera batalla como pareja.
~~Fin flash back~~
—Naruto, el te trato de matar que no lo entiendes.
—El que no entiendes fuiste tú, fue mi estupidez, ¿quien se acomoda un zapato a mitad de calle? — Preguntaba a lo que callo a Sasuke mas esta vez no iba dejar que le ganara.
—No me importa, que fueran tus estupideces o descuido de demás gente, se tiene que hacer justicia ¡así que llévenselo! — exclamo lo mas fuerte para que Naruto, tuviera la respuesta de quien ganaría este enfrentamiento
Así fue como el anciano fue llevado por lo guardias sin embargo el rubio, los detuvo mostrándoles a los guardias sus muñecas. Lo que dejo desconcertados a los aldeanos como el azabache por lo que hacia el rubio.
— ¿Qué haces usurantonkanchi?
—Justicia — le contesto con una sonrisa llena de superioridad que le molesto al bruno
— ¿Qué justicia estas hablando? — se estaba cargando una gran cólera que si decía algo mas Naruto, probablemente su cabeza explotaría dejando su sesos esparcidos por todo el imperio
—Yo también tuve la culpa de que ocurriera este espectáculo — señalaba a todas las personas que hacia los disimulados y caminaban en direcciones opuestas al alboroto que se presentaba.
—Pero eso no tiene que ver en esto — señalaba el pelinegro a los aldeanos — tú fuiste atacado por un carruaje que no tenia conductor. A lo cual tú no tienes que carga la responsabilidad de este inconveniente... — iba ser interrumpido por el rubio así que lo tomo de la cintura y se lo monto en el hombro como si fuera un costal de papas agarro su canasta que traía el blondo y rápidamente se monto a su caballo sin ningún inconveniente. y se marcho con un rubio que pataleaba, para que lo soltara ante la atenta mirada de los aldeanos, pero sin antes decirle a los guardia que soltara al anciano, dándole un advertencia, Naruto, solo le concedió una sonrisa ante de salir rápidamente por la rápida cabalgata a una zona neutral para seguir discutiendo sobre quien tenia la culpa.
— Ya bájame teme, ¿Quién te crees? — algo dudoso por que sentía que lo conocía demasiado y que algo como lo siguiente iba contestar
— Pues quien mas que el futuro emperador del reino de la hoja.
– Ah – soltó un bufido ya no soportaba que dijera eso que no se sabia otra escusa– ¿siempre dices eso?, ¿verdad? — a lo que dejo con un gran intriga al níveo
— ¿Qué quieres decir? — le contesto con otra pregunta por no saber a lo que se refería. Pero lo que no sabia Naruto es que era la única forma de ocultar los sentimiento que tenia el albino por el.
— Nada... y dicen soy un usurantonkanchi — diciendo lo ultimo en un susurro dejando un silencio sepulcral que incomodaba a lo dos jóvenes que se miraban — como ha sido tú día, que el mío a sido algo agitado — Naruto, se decidió a eliminar el silencio que había provocado... pero con inquietud en su voz por que sentía como su corazón saldría de su pecho por no saber que decirle. El sabía cuales eran los modales de un doncel ante la alteza. Pero ya no era lo mismo iba convertirse en su pareja tal vez iba a ser muy difícil por que el no quería que lo trataran con un delicada flor y mucho menos por haber ganado la propuesta que tenia como nombre *la flor más bella* no lo quería el había tenido un duro entrenamiento desde muy pequeño no por que lo ordenara el reino si no para que no lo trataran como lo estaba haciendo Sasuke, cuidando a su pequeña muñeca de porcelana.
— El mío no, hasta hace algunos momentos. Donde querían arrollar a mi hombre — lo que dijo sorprendió al rubio – pero falta el resto del día, por ejemplo tengo entrenamiento a las tres — dijo sacando su reloj del bolsillo de su chaqueta mirando que marcaba 2:51.
— ¡Las tres! — grito alarmando. A lo que Sasuke, por su repentina reacción se sorprendió algo que no ocurría a menudo ese rubio joven lo estaba cambiando.
—Si... ¿Por qué? — respondió con mucho interés quería enterarse, pero como podría decirle si que se viera demasiado pretencioso.
— ¿Qué hora es? – le preguntaba muy interesado. Su padre le dijo que su madre lo esperaba antes de las tres.
—2:52 — haciendo un ademan como si estuviera marcando la hora en su reloj
— ¡Qué! me tengo que ir, me va matar ttebayo — iba salir corriendo cuando lo atrapo Sasuke de la muñeca.
—A donde — volviendo a cambiar su estado de humor a un completo lleno de seriedad y coraje, por que cualquier momento que tenia con el rubio eran perturbado por alguien que fuera parte de su relación ya molestándolo lo cual no notaba Naruto.
—A mi hogar, lo siento su majes...Sasuke — dándole un beso casto en la mejilla, sin embargo cuando iba correr Sasuke, no lo dejo que hiciera lo mismo que la noche anterior. A lo que lo jalo para azotarlo en viejo árbol y darle un apasionado beso en donde entrelazaban su boca dándole paso a sus lenguas para empezar lo que sería el beso deseado y demandante lleno de electricidad, lo necesitaban ya llevaban cerca de 4 cuatro días como pareja y necesitaba mucho ese sello de que seria su esposo hasta que la muerte los separara.
Se soltó del ese beso tocando se los labios suspirando —“¿Que es esto que siento? Siento como si recordara algo” — pensó para rápidamente salir corriendo recogiendo su cesta por que sabia que su madre lo iba a matar, y mas si lo necesitaba su madre ante de las tres. —“¿Que será, de tanta importancia madre?”— corría y corría completamente. Agitado llegaba a su casa. Abriendo la puerta a su paso
— Qué bueno que ya llegaste hijo — Decía la pelirroja — se nos hace tarde.
— ¿Tarde?— una gran interrogativa salió
— ¿Qué?, ¿tú padre no te dijo? —soltó un gran bufido desviando la mirada— iremos con tu abuela Mito.