La vida de Alex y Peter era casi perfecta; tienen una madre amorosa, cariñosa, dulce, protectora, de su padre nunca supieron quien era y si se lo preguntaban a su madre su rostro se transformaba de dulce a una gran tristeza, por ello los gemelos dejaron de preguntar, su pequeña familia lo conforman un tío con grandes problemas de actitud, una tía que ha sido la mejor amiga de su mami, un par de tíos Asgardianos, si todo era perfecto hasta que cumplieron doce años, en plena fiesta un hombre enmascarado venia por ellos pero su madre los defendió como pudo, el resto de su familia no estaba por distintos motivos, estando solamente los tres, los gemelos vieron morir delante de sus ojos a su madre que los envió a un lugar seguro, donde descubrieron quien era su padre, quien no era nada más que el capitán América.

Cuatro años después, Steve no puede creer que sus propios hijos lo odien con cada célula de su cuerpo, como también no puede perdonar a Tony por haber ocultado su embarazo, Alex tiene sus mismos poderes, Peter tiene poderes arácnidos y ambos hermanos posee la misma inteligencia del hombre que a pesar de todo lo que le hizo sigue amando con locura.

Los gemelos descubrieron que hubo un tercero que hizo que la relación de sus padres entraran en un laberinto, como otros integrantes de los vengadores, pero aun sabiendo eso no pueden perdonar a su padre por el sufrimiento de su mami, a sus dieciséis años solo desean tener nuevamente a su madre y un amigo de Iron Man les ha dado la oportunidad de volver dieciocho años atrás, para ayudar a descubrir al tercero en discordia que hizo mucho daño a los vengadores….

Alex abrió sus ojos sorprendiéndose de lo que estaba viendo, su hermano menor lo estaba señalando balbuceado las palabras, en cambio el mayor solo tenía un tic en su ojo izquierdo, es que el amigo de su mami no podía ser más…

STONY y otras parejas

Theo tiene la cabeza echada hacia atrás y los ojos cerrados de forma tan enérgica que las luces blancas tras los párpados sólo se intensifican. Son unos segundos en los que se ha perdido, en los que ha subido a la luna y bajado al infierno sin que pudiera hacer demasiado por evitarlo.

| Stheo.