CAPITULO 71
Mientras tanto, despus de reavivar a Marianne y consolar a Pansy un rato ms, Narcisa dijo:
-Pansy querida, voy a hablar con Draco.
-De verdad hablara con l? –Pregunto Pansy esperanzada con la nariz y los ojos rojos.
-Tenlo por seguro, linda. –Respondi Narcisa besndola en la frente.
Cuando Narcisa sali de la habitacin, se recargo en la puerta cerrada a la vez que se cubra la boca con las manos; Su corazn lata apresuradamente mientras pensaba en todo lo que haba ocurrido ah dentro.
La carta, la reaccin de Draco, incluso lo de su revelacin acerca de las preferencias de su hijo y de las de Harry no estaba en el plan; No era una mujer que se dejara llevar por sus impulsos, sin embargo, casi en el instante en que abri la boca, lo hizo pensando en que era hora de que Draco enfrentara sus fantasmas, y como era obvio que no iba a arrojar solo a su hijo a la marejada que estaba por desatarse, Harry Potter iba tambin.
Y para qu negarlo?... ver la cara de Pansy cuando ella revelo todo, simple y sencillamente no tenia precio.
-Ah Severus... –Pens bajando sus manos dejando ver una sonrisa- Y tu regalito... es la cereza del pastel. –Eso s estaba ms que planeado.
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Cuando Draco abri la puerta, por un instante crey estar alucinando.
-Ha-Harry? –Exclam parpadeando como un bho.
-Draco... –Dijo Harry caminando hacia l- Vine por ti.
-Por m? -Respondi Draco demasiado aturdido, y aun ms al ver a Snape atrs de Harry- Padrino?
-Draco, -Dijo Harry poniendo sus manos en sus hombros- Vmonos, luego te explicare todo.
-Un momento, un momento... –Exclam Draco dando un paso hacia atrs soltndose del contacto de Harry- irnos?... de qu rayos hablas, Harry?
-No hay tiempo, vmonos.
-Padrino Qu rayos significa esto? –Pregunt Draco sin entender nada.
Severus solo alz los hombros en un gesto claro de que le importaba un soberano cacahuate cualquier tipo de conversacin en ese momento; l saba perfectamente y desde un principio, que a lo que menos haban ido ah, era precisamente a platicar.
-Vamos! –Dijo Harry tomndolo de la mano.
-Yo no me muevo de aqu, -Respondi Draco soltndose- No s qu clase de locura est pasando por tu mente ni en la de mi padrino, y francamente no me importa, lo nico que quiero es que as como llegaste, te desaparezcas.
-Ests loco? -Exclam Harry tomndolo de nuevo de la mano- Vine a rescatarte.
-Rescatarme? –Respondi Draco frunciendo el ceo- Y quin te dijo que necesito ser rescatado?
-Draco, por favor...
-Por favor, nada... –Respondi Draco soltndose nuevamente- Cre que ya lo habamos hablado.
-Pues nos vamos de aqu. –Dijo Harry comenzando a enojarse.
-Oblgame. –Respondi Draco cruzndose de brazos.
-Crees que no lo hare? –Dijo Harry alzando una ceja.
-Me pones un dedo encima y grito.
-Por favor, Draco... –Exclam Harry sonriendo- Siempre amenazas con hacer eso y nunca lo haces.
-Crees que no soy capaz?
-Francamente no lo creo.
Draco entrecerr los ojos y dijo con voz amenazante:
-Te lo advierto.
-Adelante.
Draco torci la boca, pero ante la sorpresa de Harry, la abri de nuevo aspirando aire, y justo en ese momento, una mano tap su boca sorprendindolo por completo.
-No tan rpido, Malfoy... –Dijo Ron atrs de l.
-Harry, vmonos! –Exclam Hermione.
-Ay!... –Grito Ron soltando a Draco- Me mordi!... Harry, el muy maldito me mordi!
-Y espero no morir envenenado! –Exclam Draco buscando su varita, de la cual no tena la ms mnima idea de donde haba dejado.
-Eres un...! –Dijo Ron tomndolo por un hombro y dndole vuelta alzando el puo, listo para estamprselo en la cara.
-No, Ron! -Exclamaron al unsono Harry y Hermione; uno detenindole el brazo y la otra apartndolo de Draco.
-Pero me mordi!
-Te lo mereces por imbcil! –Respondi Draco soltndose de Hermione.
-Tu eres el imbcil! –Dijo Ron intentando alcanzarlo de nuevo.
-No ms que t, comadreja idiota! –Respondi Draco forcejeando con Hermione para alcanzar a Ron; pero justo en ese momento, se escucho un simple:
-Desmaius.
Y Draco cay fulminado siendo sostenido apenas por Hermione que termino por caer encima de l.
-Qu pas? –Pregunt Ron sorprendi- Yo no hice nada!
-Muy bien, par de intiles... –Dijo Severus guardando su varita—Hagan lo que tienen que hacer.
-S, claro! –Exclam Harry saliendo de su estupor.
Pero justo en ese momento, unas voces cada vez ms cercanas los pusieron alerta.
-No es nada, Lucius... –Escucharon decir a Narcisa.
-Te digo que algo raro est pasando ah dentro, no estoy loco, escuch algo.
-Pero Lucius...
-Qu pasa, Narcisa? Estas portndote muy extrao y eso es... -Todos quedaron en silencio al abrirse la puerta, incluido Lucius, quien despus de permanecer mudo por unos segundos, dijo: -Qu demonios est pasando aqu?!
-Lucius, amor... si te tranquizas...
La situacin era ms comprensible que una suma de uno ms uno, por lo que Lucius inmediatamente llev su mano a su varita, acto que todos imitaron, por lo que terminaron apuntndose unos a otros a excepcin de Narcisa.
-Aljate de mi hijo... –Dijo Lucius apuntndole directamente a Harry.
-No. –Respondi Harry con firmeza.
-Lucius... –Dijo Severus apuntndole- El asunto es conmigo.
-El asunto es con este maldito hijo de puta que quiere llevarse a Draco. –Respondi Lucius entre dientes sin dejar de apuntarle a Harry.
-Potter... vete de aqu. –Dijo Severus.
-No te atrevas. –Exclam Lucius apretando con fuerza su varita.
-Lucius, escchame... –Dijo Narcisa tocndole un hombro- Tu hijo no ser feliz si...
-Cllate Narcisa, no creas que no me doy cuenta de que estas inmiscuida en este sucio asunto.
-No vas a dejarlos pasar?
-Nunca.
Narcisa exhalo un suspiro de desaliento, y luego, sin decir ms, sac su varita y apuntando a la espalda de su esposo, exclam:
-Petrificus Totalus.
Lucias solo alcanz a abrir los ojos por la sorpresa para despus caer al suelo como una tabla; Los tres chicos miraron perplejos la escena, hasta que Snape los hizo reaccionar.
-Qu esperan tro de tontos?
Rpidamente Harry apunto a Draco diciendo:
-Levicorpus. –Y con el cuerpo del rubio flotando delante de si, los tres salieron por la puerta saltando el inerte cuerpo de Lucius.
Y siguiendo el plano que les haba dado Severus, Ron y Harry seguan a Hermione, quien era la que lo lea caminando por varios pasillos.
-Por Merln! –Exclam Ron con la frente perlada de sudor mientras caminada apresuradamente atrs de Harry cuidndole la retaguardia desmayando a todo aquel que se encontraban en el camino, ya fuese humano o elfo- Esto parece laberinto!... Como es que los ricos no se pierden en sus propias casas?!
Mientras tanto, en la habitacin de Draco, Severus tom la varita de Lucius para luego apuntarle con la suya diciendo:
-Finite Incantatem.
-Maldito, desgraciado hijo de perra! –Grit Lucius ponindose de pie- Y t! -Exclam rojo de furia a Narcisa- ests loca?!
-Lucius, clmate por favor...
-Nunca espere esto de ti, Narcisa!... Pero ya hablaremos t y yo, por ahora hazte a un lado, voy a rescatar a mi hijo.
-Tu hijo, Lucius... –Dijo Narcisa plantndosele enfrente- No necesita ser rescatado, al menos no de Potter.
-Lucius... –Dijo Severus dando un paso.
-Contigo no quiero hablar... –Respondi Lucius con sus ojos grises relampagueando de furia- Solo devulveme mi varita.
-No seas necio. –Respondi Severus.
-Lo nico que impide que aqu ocurra una desgracia, es que cobardemente me has quitado la varita.
-Djate de tonteras, -Respondi Severus- No creas que te tengo miedo... lo que tengo es ira porque eres muy estpido.
-Y a ti qu? –Respondi Lucius sonriendo sardnicamente- Si soy estpido o no, es mi problema.
-Tambin lo es mo si est involucrado Draco.
-Draco es mi hijo, no tuyo.
-Eso ya lo s, pero no puedes impedir que me interese por l, despus de todo soy su padrino.
-Eso ya lo s, y maldita sea la hora en que se me ocurri drtelo como ahijado... Pero ahora no tengo tiempo para ridiculeces. –Dijo Lucius dndose la vuelta.
-Lucius! –Llam Severus con voz fuerte.
-Vete al diablo, Severus! Voy por mi hijo.
-No! –Exclam Narcisa ponindole las manos en el pecho.
-Narcisa... –Dijo Lucius mirndola fijamente- Nunca te he puesto una mano encima... no me obligues...
-Lucius... –Dijo Severus; llamado que el mayor de los Malfoy ignoro como si de una piedra se tratara- Lucius... –Volvi a llamar Severus.
-Narcisa, djame pasar.
Severus guardo ambas varitas y tomndolo de un brazo, le dio la vuelta.
-Te estoy hablando.
-Sultame, imbcil! -Exclam Lucius intentando zafarse del agarre, mismo que Severus presiono con ms fuerza tomndolo de ambos brazos ante el asombro de Lucius quien solo exclam: Qu demonios crees que haces?!
-Impidiendo que le arruines la vida a tu hijo por segunda vez.
-Arruinarle la vida? –Repiti Lucius- Es que no lo entiendes, idiota?... para no hacerlo de nuevo es que estoy haciendo esto!
-Pues esta no es la manera...
-Y quin eres t para decidir si lo que hago est bien o mal?! -Exclam Lucius soltndose al fin.
-Clmate y hablaremos... –Dijo Narcisa.
-Djenme pasar, Potter se lleva a mi hijo! –Exclam Lucius comenzando a sentirse desesperado.
-Lucius, Draco merece ser feliz... –Dijo Severus caminando hasta la puerta, junto a Narcisa- Y aunque te cueste aceptarlo, Potter es esa felicidad, l tambin quiere a Draco.
-Me importa un cuerno lo que ese quiera!... Severus, djame pasar!
-Lucius no seas necio!... la guerra lo ha lastimado demasiado, ya djalo en paz!
-No! –Respondi Lucius hacindolo a un lado de un empujn, y quitndole la varita a Narcisa apunto a Severus diciendo: Crucio!
Pero Severus alcanz a esquivarlo por muy poco ocasionando frustracin en Lucius, quien nuevamente lo apunto:
-Cru...!
-Basta Lucius! –Grit Narcisa abrazndolo con fuerza.
-Suel-sueltame! –Exclam Lucius intentando quitarse de encima a su esposa, con la que comenz a forcejear; hecho que aprovecho Severus.
-Expelliarmus!
-No! –Grit Lucius al verse desarmado.
-Por favor, mi amor!... –Grit Narcisa al borde del llanto- Deja a Draco en paz, el merece ser feliz!
-Es que no entienden, par de estpidos!? -Exclam Lucius sintiendo una enorme angustia oprimirle el corazn- Precisamente por eso lo hago!... Para que no lo lastimen ms!
-Lucius! –Exclam Severus intentando tocarlo al ver que haba logrado soltarse de Narcisa.
-Crees que no lo s, Severus!? –Exclam Lucius alejndose de la mano de Severus- Crees que no se que le arruin la vida a mi hijo?!... al ser que ms quiero?!... Por el que dara la vida misma?!
-Y entonces por qu haces esto?!
-Estas ciego?... Si lo pongo en la cima y pongo el mundo a sus pies, nadie ms podr lastimarlo!
-Lucius... –Exclam Severus sorprendido.
-S que todos nos odian!... S que quisieran vernos muertos!... pero yo puedo soportarlo, Narcisa puede soportarlo!... Pero que pasara con Draco si algo me pasa?!... que pasara con mi hijo si no estoy yo para cuidarlo?! –Exclam Lucius tomndolo de las solapas- Debo asegurarme de que este bien, debo protegerlo!
-Mi amor... –Musit Narcisa igualmente sorprendida.
-Intentaran hacerle dao a la primera oportunidad, lo s muy bien!... –Continuo Lucius sin soltarlo- Pero el dinero es poder, Severus t lo sabes!... Draco debe ser poderoso para que nadie lo lastime!
-No Lucius... –Dijo Severus tomndole suavemente de las muecas- El poder que te ha sostenido a ti, a Narcisa y a Draco, no ha sido el del dinero...
-Claro que s! –Exclam Lucius sintindose desesperado.
-No Lucius... acaso no lo ves?... El poder de la familia es lo que los ha mantenido en pie... el amor que hay entre ustedes es lo que los ha protegido hasta ahora...
-Pero...!
-Escchame Lucius... –Dijo Severus tomndole el rostro con ambas manos- Tu hijo, lo nico que desea es ser feliz, pero no se atreve para no decepcionarte... ese chico te ama demasiado...
-Pero...! Pero quien lo cuidara si algo me pasa, Severus, quien?! –Respondi Lucius con los ojos inundados de lgrimas- Mi nio... yo le besara los pies al diablo con tal de que nada le pasase...
-Lo se... pero ya lo has hecho y no sirvi de nada... lo que debes hacer ahora es procurar darle armas para que se proteja a si mismo...
-Y cmo?... –Balbuceo Lucius dejndose caer de rodillas al piso- Cmo, si soy un fracaso de padre?
-Si fueras un fracaso, Lucius... –Dijo Narcisa llorando y arrodillndose junto a su esposo- Draco no sera tan buen hijo... no te das cuenta?... nos quiere demasiado, por eso est dispuesto a casarse con quien t le digas... Lucius... –Lucius ya no respondi, solo se dejo envolver en el fuerte abrazo de su esposa, quien lo oprima contra si con todo el amor del que era capaz.
Mientras tanto, no muy lejos de ah, los chicos alcanzaron a ver un balcn despus de recorrer varios pasillos.
-Al fin! –Exclam Hermione aliviada.
-Abre las puertas! -Dijo Harry.
-Ya voy, ya voy! –Respondi Hermione abriendo las puertas de cristal con cortinas de encaje, dejando inmediatamente a la vista a:
-Sirius! -Exclam aliviado Ron- por un momento pens que no estaras!
-Y perderme la poca diversin que hasta ahora he tenido? –Respondi Sirius recostado en Buckbeak mientras fumaba un cigarrillo.
-De prisa! –Exclam Harry acercando a Draco al hipogrifo, quien nerviosamente olfateo el cuerpo inerte del chico rubio.
-Calma amigo... –Dijo Sirius palmeando el emplumado cuello.
-Tal vez recuerde que una vez le ofendi. –Dijo Ron preocupado.
-Buckbeak no es rencoroso verdad amigo? –Exclam Sirius tirando su cigarrillo y tomando por debajo de las axilas a Draco para despus jalarlo hacia s, sentndolo de lado en el lomo del enorme animal- Bien... –dijo despus de acomodar a Draco- Ahora tu, Harry.
-No. –Respondi Harry firmemente.
-Cmo? –Exclamo Ron.
-Harry, no me digas que...
-As es Hermione... –Respondi Harry mirando a su amiga- Debo regresar, no puedo irme sin antes hablar con Lucius Malfoy.
-Ya lo saba. –Exclam Sirius sonriendo de lado- No puedes irte sin antes arreglar este asunto, verdad?
-As es. –Respondi Harry.
-Bueno, pues me voy, en cuanto llegue a casa, abrir la red flu para que lleguen por ah.
-De acuerdo, chicos... Ustedes no tienen por qu quedarse...–Dijo Harry dirigindose a sus amigos.
-Ya sabes que iremos contigo. –Respondi Ron sonriendo mientras rodaba los ojos.
-Gracias! –Respondi Harry no pudiendo sentirse aliviado, mas por la solidaridad que sus amigos mostraban que por otra cosa, as que despidindose de Sirius con la mano, regresaron al interior de la mansin.
-Bueno muchacho... –Dijo Sirius a su hipogrifo- A casa!
La enorme y fantstica criatura extendi sus alas y levanto el vuelo despus de caminar unos cuantos pasos y en cuestin de segundos se encontraron surcando los cielos.
Sintindose raro, Sirius mantena la vista fija al frente, la carga que llevaba en los brazos le quemaba el corazn, y no pudiendo resistirse ms, bajo la vista y lo mir.
Draco estaba con los ojos cerrados y los labios ligeramente entreabiertos; Sirius lo sostena contra su pecho con un brazo mientras que con la otra se sujetaba a Buckbeack, y tenindolo as, tan quieto y tan cerca, pudo observarlo detenidamente; No pudo evitar sonrer mientras pensaba:
-Rayos... eres el vivo retrato del idiota de mi cuado... pero tambin eres igual a Narcisa... tus ojos son los de l, pero tu rostro es como el de ella... mi madre te adorara si no estuviese muerta... y yo tambin... –Pens exhalando un suspiro- Yo hubiese sido tu to favorito... te hubiera enseado muchos trucos divertidos y tampoco serias tan estirado...
Y sin dejar de sonrer, su mano solt las speras plumas con las que se sostena y le quit la mascada de seda del cuello y la solt al viento, luego meti sus dedos en la engominada cabellera y la revolvi hasta despeinarlo completamente.
-As est mejor... as te parece ms a un Black, ahora volemos a casa... listo para que me detestes por completo.
Mientras tanto, Harry y los dems llegaban a la habitacin de Draco encontrando la puerta cerrada, y tras dudarlo solo unos momentos, Harry decidi tocar.
Fue Severus quien abri y mirando al tro despectivamente, dijo:
-No s porque no estoy sorprendido... pasa. –Harry, Ron y Hermione dieron un paso para entrar a la habitacin, solo que Snape se interpuso entre los dos ltimos diciendo: -Solo Potter. –Y sin ms, les cerr la puerta en la nariz.
Una hora despus, la chimenea de Grimauld Place chisporrote luces verdes dejando ver un cuerpo saliendo de ella.
-Por Griffindor!... –Exclam Sirius alzando las manos y rodando los ojos- Al fin llegaste!
-Qu pasa? –Pregunt Harry- Algn problema?
-Algn problema? -Repiti Sirius recargando su cabeza en el respaldo del sof al tiempo que cerraba los ojos- Vaya que s lo hay... tal parece que no secuestramos a un muchacho, sino a una banshee histrica.
-Por qu? -Pregunt Harry subiendo las escaleras.
-Y todava lo preguntas? –Respondi Sirius levantndose y siguindolo- Desde que lo despert y lo met a ese maldito cuarto, no ha parado de gritar... y vaya con las cosas que gritaba eh?... cualquiera dira que se cri en un embarcadero.
-Pero est bien...
-Y porque no habra de estarlo?... no niego que llegue a desear ponerlo sobre mis rodillas y darle los azotes que el intil de Lucius nunca le dio, pero te aseguro que no lo hice... ah pero por los calzones de Merln! Tuve que insonorizar esa seccin de la casa para librarme del escndalo... aunque muy tarde, aun siento sus gritos taladrar mis odos, la cabeza me estalla.
-Sirius... –dijo Harry detenindose frente a la puerta de la habitacin en donde estaba Draco- Podras...?
-Ah claro, claro! -Respondi Sirius detenindose y dndose la vuelta- Buena Suerte... te la deseo de corazn.
-Y vaya que la necesitare... –Pens Harry para luego sacar su varita y abrir la habitacin.
Amor Yaoi
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