11.- FIN DE LOS RECURDOS, TOMANDO DECICIONES.
- no puede ser posible eso!!! - decía un pelirrosa completamente conmocionado por lo recién descubierto, él y Byakuya se habían besado en el pasado y el extrañamente lo olvido, ¿Cómo pude ser eso posible? – Hiro! Dime que eso no es verdad?
- lo siento shu pero no hay más verdad que esa, tú y Kuchiki-san se besaron esa vez, para serte sincero creo que tú y el estaban completamente enamorados el uno del otro – dijo el pelirrojo recordando cómo eran las cosas de ese entonces.
- pero… - no pudo decir más porque hiro le interrumpió.
- vamos shu, solo piensa un poco, acaso no relacionas todos esos sentimientos que alguna vez tuviste por el escritor al inicio de la relación con los que tenías por Kuchiki-san en aquel entonces? – le pregunto su mejor amigo, Shu comenzó a pensar en ello, era verdad, desde que se encontró de nueva cuenta con el pelinegro esa idea siempre se le pasaba por la mente no tenía idea de que significaba aquello, hasta ahora, pero si eso era verdad porque nunca tuvieron algo?, porque jamás existió una relación entre ambos?, esa era la duda que surcaba su mente en ese momento.
- entonces dime Hiro, porque nunca llegamos a tener una relación?, eso no lo entiendo, bueno…si los dos… pues nos gust-gustabamos…por… - en verdad que esto era muy difícil de preguntar para el pelirrosa por lo que Hiro, sabiendo a que se refería decidió interrumpirlo.
- pues fue después del entierro de tu abuelo, más bien después de ese beso, tu comenzaste a evitarlo un poco, aparte solo le quedaba si mucho dos meses en la escuela – dijo recordando que en ese tiempo se graduaba el pelinegro – y él te escucho cuando las chicas te preguntaron si tú estabas enamorado de alguien no sé si recuerdas esa vez?
El pelirrosa por supuesto que recordaba aquella conversación, era con las chicas que se la pasaban acosándolo para pintarlo, o para que dijera quien le gustaba y cosas por el estilo…
Flash Back
- Shuuuu ¡!!! – gritaban las chicas persiguiendo a un pobre pelirrosa, al cual le querían sacar información de acerca de quien era la persona a la que le gustaba ya que últimamente se le veía suspirando por los pasillos como una chica boba enamorada.
- déjenme en paz!!!! – gritaba el pobre pelirrosa, ya quería quitarse a esas chicas que eran demasiado pesadas como para llevarse o tratar de llevarse bien con ellas, solo eran un montón de chismosas.
El chico era experto en correr nadie le ganaba en ello, bueno, solo una persona era la que lo había podido alcanzar, pero fuera de ello nadie, eso no quitaba que el chico no fuera tan inteligente y en vez de correr hacia otro lado solo le da vueltas al edificio por lo cual cuando creyó que por fin se había librado de las chavas ellas ya se encontraban frente de él.
- te tenemos!!! – dijo una de ellas.
- ahora si no te nos escapas!!
- no te preocupes no te vamos a comer - “si claro” pensó Shu ya resignado a que las chicas no lo iban a dejar en paz.
- y que es lo que quieren ahora?
- simple mi querido shu!, queremos saber quién es la persona que te trae en las nubes.
Shuichi no tenía ni la más mínima intención de revelar esa información, sobre todo porque:
Primera: a él se le consideraba como un dios al cual si el tuviera una persona favorita seria como la catástrofe más grande del mundo.
Segundo y tal vez la más importante, que la persona que lo trae arrastrándose es otro hombre.
Si ese era uno de los principales problemas ya que según él no tenía la fuerza para enfrentarse a las habladurías, quejas, malos tratos, etc. Y mucho menos expondría a la persona que le gusta de esa manera, y si la palabra correcta era “gustar” no lo podía negar, aunque claro, estaba confundido ya que todo esto podría ser solo por admiración o respeto, pero llegar al grado de un beso?, eso era lo que lo tenía descolocado un poco y por lo cual él tenía la idea de que si, definitivamente la palabra correcta seria “gustar”.
- ha!! Ya seee!!! – grito repentinamente una de ellas.
- que sucede? – pregunto Shu algo asustado ya que ese grito lo trajo de vuelta a la realidad.
- sii que sucede Temari?
- ya se quien le gusta a Shu – dijo muy segura de sí misma y mira que no fue a errar – te gusta Kuchiki-sempai – a lo que Shu abrió los ojos de sobremanera y las chicas gritaron de emoción, ellas eran las típicas chicas yaoistas que se emocionan con esas cosas y como ellos no hacen tan mala pareja, de hecho hasta se ven tiernos pues es muy agradable a la vista.
Pero que ellas no lo vean de una forma mala no significa que shu lo vea con buenos ojos, sobre todo por el hecho de que fue educado medio a la antigüita, donde con quien te debes juntar en una relación es con una mujer, casarte y tener hijos, claro eso fue hasta antes de enterarse de algo sumamente importante que cambio las formas de ver la vida en un futuro no muy lejano, pero como era de suponer el chico reacciono mal, lamentablemente todas las cosas que dijo, que en cierto modo no fueron muy fuertes, si hicieron meya en el corazón de cierto pelinegro que estaba escuchando la conversación casi desde el inicio.
- QUUUEEEE!!!! – “oh no, si empiezan a hacer ese rumor lo más probable es que metan en problemas a sempai, aparte no es como si el me correspondiera, ese beso me lo dio por lastima por lo sucedido con mi abuelo” se decía a sí mismo el chico – no digan estupideces, Kuchiki-sempai es hombre, eso no está nada bien.
- pero que dices? Si hacen una pareja estupenda – decía una chica que le encantaba verlos juntos.
- si es verdad, aparte no te hagas, se la pasan juntos.
- claro porque él es mi tutor, él se graduara pronto y ya no nos volveremos a ver, así son las cosas y dejen de decir cosas sin sentido – las regaño un rato más y las chicas mejor se fueron al ver que no le sacarían mucha información al chico, Shu por su parte se deslizo por la pared donde estaba acorralado hasta llegar al piso y se puso a llorar – que tontería, yo gustarle a él, ya!!, estoy tan confundido!! – decía el pobre chico entre lágrimas.
Byakuya había visto todo y se sentía mal por ver al chico así, pero que podía pedir, el en realidad era un niño y él aunque no era mayor de edad era una persona centrada y razonable por lo que sabía que el chico no tendría ni la más mínima idea de lo que está sintiendo en ese momento, Byakuya tenía una pelea consigo mismo sobre si insistir con el pelirrosa o dejarlo por el bien del chico, ya que por su propio bien eso era imposible, su bien era estar cerca del chico, tocarlo, abrazarlo, hacerlo suyo y esto claro para el chico sería demasiado y no quería terminar odiado por la persona que más ama y a la única que ha amado y estaba seguro que nunca amaría a nadie más.
En Flash Back
- entonces dices que el escucho esa conversación?
- sí, lo vi desde el salón y cuando me dijiste de que se trató la plática pude descifrar la expresión en su rostro – shu lo miro sin comprender – al parecer también estaba confundido y sobre todo triste por verte en ese estado.
Shu se quedó en silencio y con la mirada baja después hablo – ósea que se rindió por ello, es mi culpa – el pelirrojo le puso una mano en un hombro y le dijo.
- no Shu, él no se iba a rendir – el pelirrosa lo miro desconcertado – el problema vino cuando sus padres murieron, él iba a estar contigo hasta que te aclararas, te iba a dar el tiempo hasta que supieras que era lo que necesitabas hacer, pero a las muertes de sus padres el tenía que comenzar a viajar y a trabajar en los negocios que ellos dejaron por lo cual eso le absorbería demasiado tiempo y las cosas por ser alguien tan joven pues se le iban a poner difíciles por lo cual decidió mejor dejarte ir.
Shuichi miraba sorprendido a su amigo como era posible que supiera esas cosas – cómo?
- hable con él, no sé si recuerdas la forma en que se despidió de ti?
- si… - con algo de duda - …creo fue con una…carta.
- así es shu, y quien te la dio?
- tu – si por fin recordaba las cosas, poco a poco las imágenes, los sentimientos llegaba a su cabeza.
- así es, yo le pregunto porque y él me dijo que no te quería arrastrar a ese mundo, supongo que ya recuerdas porque olvidaste todo esto, no?
- si… - dijo empezando a llorar – para evitar el dolor de haberle perdido… - no pudo evitar recordar la carta.
Flash Back
Había pasado casi un mes desde el acoso de esas chicas y hace apenas unas horas le dieron una noticia que cambiaba casi todo su mundo, en parte se sentía feliz y en parte inseguro pero con ello ya tenía una respuesta a todas esas preguntas que le carcomían.
- Shu necesito hablar contigo de algo importante.
- ahora no hiro necesito hablar con sempai – estaba feliz y estaba decidido a decirle lo que sentía aunque a la vez muy preocupado a como fuera a reaccionar su sempai.
- es sobre él, mira, es para ti – le dice el pelirrojo para después darle una carta – es de él, él ya se marchó, va camino a Londres.
- q..? – eso sí que fue una gran sorpresa.
- léela… - dijo el pelirrojo y shu abre inmediatamente la carta para leerla y saber que era lo que pasaba.
Mi querido Shuichi.
Esta es la primera vez que te llamo por tu primer nombre, me hubiera gustado que no fuera la última vez aunque creo y si la vida nos permite nos volveremos a ver.
Me he tenido que ir así de improviso por la muerte de mis padres, los cuales eran dueños de muchas empresas importantes, tanto para Japón como para Londres y EEUU por lo cual al ser uno de los herederos más importante y ser el mayor he de tener que hacerme cargo de todo por lo cual hoy salgo para Londres y es muy probable que no regrese en mucho tiempo.
Es por esta razón que he de decirte que deseo que encuentres a alguien que te haga extremadamente feliz, que tengas una vida completa y que luches por tus sueños, te cases y que tengas hijos con aquella persona que te amé y que sobre todo que ames.
Sé que los últimos días tuviste muchos conflictos contigo mismo por lo sucedido con aquel beso, nunca fue mi intención hacerte llorar como lo hice, yo solo deseaba transmitirte paz y todos mis sentimientos hacia ti, Te quiero como no tienes una idea por lo cual te pido que me olvides ya que no poder ayudarte a aclarar esas dudas que tienes, no poder estar a tu lado y pedirte que me esperes es absurdo, eres demasiado joven para atarte a una persona de por vida , así que olvídame y despejas esas dudas con alguien que si pueda estar a tu lado y te de las respuestas que buscas.
Quiero que sepas algo, yo siempre seré tuyo, te amare por siempre y disculpa que no te lo diga de frente pero no quiero ver esa carita con miedo a algo que no conozcas y que no comprendas y que te atormente por no saber que decirme al estar frente a ti y no saber qué contestarme, así que tranquilo no tengas prisa por crecer, resuelve esas preguntas y si alguna vez nos volvemos a encontrar y aún tengo alguna oportunidad de estar a tu lado te juro que jamás te dejare partir y si aún tienes esas dudas la resolveremos juntos.
Te amo
Kuchiki Byakuya
- no puede ser… - decía el pelirrosa con sus ojos rojos de tanto llorar “lo perdí”, era lo único que tenía en su mente en ese momento.
- Tranquillo shu…
End Flash Back.
- después de eso lo olvidaste.
- sí, no sabes cómo me arrepiento, si hubiera sabido antes de mi condición y hubiera tenido esa platica con mi madre antes de que él se marchara las cosas tal vez hubieran sido un poco diferentes – dijo shu con su cara gacha, el pelirrojo lo miro con desconcierto.
- a que te refieres shu?
- yo soy … un doncel Hiro – dijo poniéndosele sonrojadas sus mejillas, Hiro no se lo creía, estaba asombrado.
- desde entonces lo sabes y jamás me lo dijiste?
- lo siento, pero ya sabes mentalmente me cerré a tener una relación y mucho menos con un hombre.
- lo entiendo, pero después apareció Yuki-san.
- si pero siempre me cuide, incluso después de… - dijo tomando aire de lo horrible que es recordarlo – después de la violación tome las pastillas que me recetaron en caso de que no pudiera protegerme antes del…sexo.
- entonces siempre te has cuidado?
- si…
- pensé que querías tener una familia con Yuki-san, jamás te lo planteaste en verdad, cierto shu?
-mmm…no, no me daba confianza, tu sabes cómo es el, me hacía sentir inseguro… - le interrumpió Hiro.
-si así es, pero cuando se trató de Kuchiki-san estuviste seguro, no? Por eso te dolió tanto su partida al grado de olvidar esos sentimientos por él, no?
- …si… -así era y es por esa razón por la cual él estaba completamente seguro de lo que aria ahora, ya no más dudas, es el momento de seguir adelante – ya sé que voy a hacer Hiro – el pelirrojo vio una gran determinación – sé que amo a Yuki, pero por sempai también siento algo muy fuerte por lo cual me voy a dar una oportunidad con él, necesito avanzar y ver que me espera, no puedo detenerme, y es el momento de dar algo de lo que me ha dado sempai – esto sí que sorprendió a Hiro, pero estaba feliz, su amigo se quería dar una oportunidad de ser feliz y era con alguien que estaba seguro el pelirrosa que amaba tanto como amaba a Yuki, solo que esta vez sí será correspondido y le mostrara lo que es el amor de dos y no el unilateral que conoce de sobra.
Al día siguiente tenía la reunión con Hurahara para decir que se iba a hacer con esas canciones.
- como estas Shu? – la relación con el rubio en esos tres meses creció, convirtiéndose en buenos amigos a pesar de la diferencias de edades.
- bien gracias Kisu-chan!!! – Decía un muy alegre pelirrosa – ya sé que voy a hacer con las canciones para que ya pueda estar tranquilo y se regrese con su amor sote jajaja
- jeje eso es una excelente noticia, y dime que as decidido.
- pues me quedare solo con estas tres canciones las demás se las puede dar a NG – dijo muy seguro y decidido, cosa que le agrado de sobremanera al rubio.
- muy bien, así será y dime como es que de repente se te ilumino el camino? - pregunto recordando lo difícil que estaba resultando ser para el pelirrosa.
- pues tuve una conversación con Hiro y no solo supe que hacer con las canciones, sino también con mi vida – dijo el pelirrosa con una sonrisa.
-… - eso sí que le causaba curiosidad al rubio – a que te refieres?
- tú y Kuchiki-sempai son muy buenos amigos verdad?
- si los mejores, porque?
- supongo que sabes que yo… pues…
- que le gustas y ha estado enamorado de ti desde la primera vez que te vio? – trato de darle una ayudadita al chico.
- si jejeje
- pues sí, lo sabía – dijo con una sonrisa recordando la vez que el pelinegro le confeso que se había enamorado de un chico, cuando se lo dijo por poco se muere de la impresión, sabía que el chico tenía su corazoncito a pesar de lo frio que era o que mostraba ser y que tarde o temprano se enamoraría, lo que le sorprendió era que esa persona fuera alguien de su mismo sexo.
- qué piensa de ello?
Hurahara lo miro a los ojos – pienso que él es una persona confiable, el jamás jugaría con tus sentimientos y vería por tu por el resto de su vida – dijo para después sonreírle – el jamás dejara de amarte.
- sí, sé que él es de esa clase de persona.
- ya tomaste una decisión, no es así? Ya le tienes una respuesta, verdad?
- si… - dijo con una sonrisa y mucha determinación en sus ojos.
- pues solo hay que esperar 3 meses – shu solo asintió, después el rubio se puso de pie y le ofreció la mano al chico la cual acepto gustoso – tengo que regresar a Japón, vendré dentro de un mes, cualquier cosa dile a Inue que contacte conmigo y estaré aquí en un segundo, bueno lo que dure el vuelo, jajaja
- claro y hasta luego – después de eso, Hurahara por fin regreso a Japón, se dirigió a NG para entregar las canciones y después se fue al departamento que compartía con su amor, le comento la plática que tuvo con el pelirrosa y al parecer coincidían de que al regreso de Byakuya al lado del chico se llevaría una muy agradable sorpresa.
Shu por su parte siguió actuando con naturalidad con el pelinegro cuando conversaba con él, no quería hacer que el otro se diera cuenta de lo ansioso que estaba por su regreso, aparte tenía que planear el cómo llevar a cabo lo que tenía en su mente desde que se dio cuenta de lo que sentía por el pelinegro, por lo que le pidió ayuda a sus amigos, tatsuha al enterarse suspiro con gran pesar pero no podía negar que ver al chico emocionado con sus planes lo ponía muy feliz, después de tanto tiempo el chico se veía bien así que sin importar el hecho de que esto alejaría a su hermano del lado del pelirrosa no podía negarse a ayudarlo.
Y así entre planes y trabajos pasaron los tres meses que faltaban para el retorno del pelinegro, y ese día llegaba de Japón, Shu ya tenía todo listo aunque tenía miedo, regularmente siempre que preparaba algo Yuki terminaba arruinándolo o dejándolo esperando.
- Ya basta Shu!! – Se reprendió el mismo – él no es Yuki, así que ya no dejes que el pasado te amargue y sigue adelante – se dijo a sí mismo y ya solo era cuestión de minutos para que el pelinegro llegara a su departamento según el plan que se formó.