12.- NADA ES IGUAL
Kuchiki Byakuya al fin podía regresar al lado del pelirrosa que le roba el sueño, no entendía como es que había podido sobrevivir seis mese sin ese pequeño a su alrededor, pero bueno se dijo a sí mismo “si ya viviste años sin él, que tanto son unos cuantos meses”, pero eso en realidad solo se escucha fácil cuando es sumamente difícil, haber estado tantos años sin el amor de su vida era demasiado , sobre todo teniendo que soportar al odioso de su asistente, ese chico que en todo ese tiempo estuvo acosándolo, casi se le desnuda en frente de él solo para que le dé una mirada, pero eso se le hacía tan corriente y vulgar, para él al único que no le importaría ver desnudo es a cierto pelirrosa que lo trae en las nubes.
Por fin el avión estaba aterrizando, eso significaba que pronto vería al chico, estaba consciente de que había dicho que lo que quería era enamorarlo de una forma o de otra, pero opto por ser un poco paciente con él, conociéndolo estaría nervioso e inseguro y lo que menos quería era incomodarlo por lo cual tenía que ir despacio pero con ataques consistentes y de forma que no se sienta presionado, así ganaría bastante terreno en su corazón.
Cualquiera que viera sus pensamientos pensaría que estaba planeando como ganar una guerra o simplemente un juego, pero hay que ser sinceros, el amor es una de las cosas más difíciles a las que se tienen que enfrentar las personas y aunque las cosas en relación con el amor nunca salen como uno quiere seria mucho peor si no está aunque sea mentalmente preparado, pero lo que no sabía nuestro querido pelinegro es que el dejo de ser el cazador que va por su presa al punto de ser el la presa.
Iba saliendo del aeropuerto y estaba decidido a tomar un taxi cuando una mano en su hombro lo saca de sus pensamientos – Kuchiki-san he venido a recogerle espero que no le moleste, es que Shu me lo pidió para que no se sintiera incomodo viajando en taxi, aunque si le digo un secreto, es más bien para llevarlo directo al departamento de el jaja – dijo un pelirrojo de ojos grises mientras lo conducía a una camioneta blanca que estaba estacionada muy cerca enseguida del taxi.
- Nakano? – el pelinegro no se esperaba que lo estuvieran esperando.
- sip, estoy cumpliendo órdenes!! – dijo el pelirrojo mientras metía las maletas en la cajuela de la camioneta.
- a que te refieres? - pregunto extrañado el pelinegro.
- pues que Shu quiere que le lleve directamente a su departamento porque quiere darle una agradable bienvenida - se acerco al pelinegro y le puso una mano en el hombro - no se preocupe, el solo quiere verlo, le extraño mucho.
El pelinegro no necesito escuchar mas, se sentía extrañamente feliz por lo que le dijo el pelirrojo, al parecer esa era una muy buena señal, mientras tanto el pelirrosa estaba algo nervioso, ya tenía su plan trazado y no era que fuere un súper plan, de hecho era el mas común de todos y constaba de una cena romántica, una deliciosa cena que se componía de entrada de una deliciosa ensalada al estilo cesar, después un platillo fuerte que consistía en pechugas de pollo bañadas en salsa chipotle y de postre un delicioso pastel de frutas que sabía de antemano que era el favorito de Byakuya y todo esto acompañado de una muy buena botella de vino, acompañado de la luz de las velas y la luna, todo era perfecto pero aun así había algo que no le dejaba tranquilo, eran los nervios de la reacción del pelinegro, que tal si no le gustaba o qué tal si decide no venir a verlo y le dice a Hiro que no quiere verlo, que quiere descansar y no ser molestado..."ya basta!!!, el no es así" pensó para sí mismo, "el no es como...Yuki", así es, toda su inseguridad se debía a eso, las reacciones de Yuki cuando el preparaba algo como eso era decir "no tengo tiempo para tus cursilerías", "no molestes tengo mucho trabajo" o cuando planeaba con anticipación y el no se aparecía, alegando que tenia reuniones de trabajo y no podía postergarlas dejando la cena entrarse.
Decidió dejar de pensar en esas cosas y darse los últimos toques a su aspecto para cuando el pelinegro lo mirase le gustara lo que viera, estaba vestido con un pantalón negro a rallas a la cadera y completamente ceñido a su cuerpo dejando ver a la perfección la perfecta forma de su trasero y sus piernas, una camisa también ceñida de color rosa pálido, con un collar negro de cuero con un dije de cruz y un saco negro a rayas que era el conjunto del pantalón y por ultimo su calzado, unos zapatos negros, en realidad el chico se veía extremadamente bien pero las inseguridades lo estaban poniendo muy nervioso, recordaba como muchas veces Yuki lo criticaba por según el, su mal gusto para vestir.
Respiro profundo para tranquilizarse, necesitaba convencerse de que nada de eso pasaría con el pelinegro, ya nada seria igual por el hecho de que no es Yuki con el que tendrá la cita, la persona con la que tendrá la cita es alguien que no tiene miedo de decir lo que en realidad ciento, así que no será lastimado, no de nuevo, salió de sus pensamientos al escuchar el timbre y fue directo hacia la puerta y con el corazón latiendo a mil por hora abrió la puerta.
El pelinegro había llegado al departamento de Shu, en realidad estaba bastante intrigado por el proceder del pelirrosa, pero todo eso le hacía feliz ya que al parecer el pelirrosa lo había extrañado más de lo que se imaginaba, no, con el solo hecho de haberlo extrañado, ya sea una mínima parte lo hacía sentir bien, Hiro le ayudo a subir su equipaje dejándolo en la puerta del departamento de Shu, Hiro le dijo "suerte", el pelinegro solo asintió con la cabeza y con una mueca en su cara que parecía una sonrisa, cuando el pelirrojo desapareció de su vista el pelinegro toco el timbre, no espero mucho rato cuando la puerta fue abierta dejándose ver al pelirrosa Byakuya se quedo en Shock después de verlo.
Pov Byakuya
" no puede ser, se ve hermoso, en realidad esa ropa le queda de maravilla, siempre lo había visto con ropa nada formal pero que siempre se le veía bien por ser él quien la portaba, pero así en realidad hace que mi deseo por el crezca mas de lo que debería para poder controlarme y no hacerlo mío de una vez por todas, pero mejor me armo de valor para soportar esta hermosa visión, si no lo terminare violando, jeje el rompe todos mis esquemas"
- Bien-bienvenido Kuchiki-sempai - "su voz, por Dios!! como la extrañe, a pesar de hablar seguido con él en mi ausencia, escuchar su voz en vivo es mil veces mejor"
fin Pov Byakuya
Pov Shuishi
" por fin poder verlo después de tanto tiempo, su porte y galanura son abrumadoras, sus ojos tan negros como la noche son y siempre serán tan cautivantes que me hacen perderme en ellos, mi mira con cierto brillo en ellos que no sé cómo interpretar, solo sé que me ponen más nervioso de lo que ya estoy pero aun así pude articular palabras y darle la bienvenida, pero el aun sigue sin hablar, no le gustara lo que ve, será que está molesto porque lo hice venir"
- lo-lo siento...debió ser muy problemático venir hasta mi departamento... - "dije bajando la mirada, no quiero ser una molestia para él, pero entonces siento como él me levanta la cara con una de sus manos en mi barbilla".
- estoy de vuelta - " me dijo con una sonrisa, yo me alegre de verla, las extrañaba mucho"
- le tengo una sorpresa - "le dije mientras le hacia una seña para que mirara hacia el comedor donde estaba servida la cena"
fin Pov Shuichi
Pov Byakuya
"me quede muy sorprendido cuando mire hacia donde me había indicado, estaba una mesa con una pequeña flor en medio custodiada por dos velas y junto a ellas se podría apreciar un bello brillo que daba gracias a la luz de la luna, dos platos uno frente al otro, al parecer mi pequeño pelirrosa me había preparado una agradable bienvenida, lo mire con una sonrisa en mi rostro, no disimulada como siempre, esta era completamente directa y hacia él, solo para el"
- no tenias por que hacerlo.
- claro que si, cenemos, después hablemos de algo importante - "algo importante?, me sorprendí y me preocupe al instante por ello, de que se tratara?"
- hay algo importante que quieres tratar conmigo? - "le pregunte, pero al hacerlo vi como se puso sonrojado, eso me quito un poco el solo de mis pies, pero disimule muy bien, en realidad verlo de esa manera es extremadamente lindo, le deseo, le deseo, le deseo"
- s-si...pero... cenemos, ha de estar cansado y con hambre, el viaje es algo cansado...no? - el chico se veía algo nervioso, Byakuya lo noto, pero no dijo mas y dejo sus maletas en el recibidor y se sentó frente al chico el cual comenzó a servir la cena, platicaron cosas del como les había ido con sus trabajos, cosas irrelevantes en realidad.
- tu cocinaste? - le pregunto el pelinegro al chico, este asintió algo avergonzado.
- no está rico? - pregunto con algo de desconfianza de nuevo, Yuki siempre se quejaba de lo mal cocinero que era y por ello había decidido aprender pero después de las dos comidas que Yuki había comido del chico este jamás quiso probar nada hecho por él y eso le desanimaba demasiado, y como no había cocinado desde hace tiempo pensaba que no sabía bien, pero después respiro aliviado con la respuesta del pelinegro.
- esta delicioso, eres mucho mejor que yo - "en realidad la comida estaba deliciosa, yo solo preparo cosas para no morirme de hambre, pero el parece un experto, pero ahora que recuerdo..." - dime, te metiste a algún curso verdad?
"el me miro sorprendido, al parecer así era" - si, como lo supo?
- antes quemabas hasta el agua, pero se nota que te has esforzado mucho, aunque en realidad si no supiera tan bien la comida aun así me la comería, porque fue hecha por ti - " vi como se sonrojaba, es hermoso, aun no entiendo como ese escritor hizo tantas idioteces cuando tenía el amor de este chico"
- sem-sempai...yo...tengo algo....importante que quiero decirle.
- te parece si vamos a la sala? - "le pregunte en realidad se veía algo nervioso y yo quería estar cerca del, el me dijo que si, fuimos hacia la sala el se sentó en un sofá y yo junto a el, lo mire directo a los ojos que tanto me gustan, esos amatistas que me cautivaron desde que lo vi por primera vez" - que es lo que quieres decirme - "no pude evitar tomarlo de las manos" - ...dime-
- yo pensé en todo lo que me dijo y... - dudo por un momento - ...también recordé todo lo de secundaria... - " yo no sabía cómo interpretar eso"
- y a que conclusión llegaste? - me aventure a preguntar, estaba muy intrigado, no podía ver sus ojos ya que los tenia dirigidos hacia nuestras manos, sentí como deciso el agarre y las subió hasta tomar mi cara con ambas manos, después voltee a verlo y sus ojos estaba con un brillo muy especial, entre tímido y decidido, fue acercando su rostro hasta estar a centímetros de el, y entonces paso lo que nunca pensé que pasaría, por lo menos no ahora, me beso, un beso tierno y tímido, delicioso, sus ojos estaban cerrados y yo no pude mas, cerré los míos y mis manos fueron hacia sus caderas para acercarlo un poco mas y hacer mayor el contacto, lambí su labio inferior pidiendo permiso para entrar en ese manjar de boca y me lo concedió tímidamente, explore cada rincón y acariciaba su lengua tibia con la mía, su sabor era exquisito, pero todo lo bueno dura poco y nos separamos poco a poco para tomar aire, yo abrí mis ojos y el estaba con la mirada gacha, pero pude ver que estaba completamente sonrojado.
- sempai, yo quiero corresponderle, se que piensa que es muy pronto pero yo le amo, suena tonto pero yo le amaba en secundaria y sé que acabo de terminar una relación pero necesito avanzar yo... - "me miro con lagrimas en sus hermosos ojos" - ... yo quiero sentir lo que es el amor correspondido, quiero que me enseñe aquello de lo que me privo Yuki por sus miedos.
- ya no le amas?
- ... - abrió sus ojos de impresión por la pregunta pero contesto - el siempre será una parte importante de mi vida, pero yo...no lo sé, le quiero pero amarlo ahora, en realidad no lo creo, lo he pensado y han pasado muchas cosas, mucho antes de que me engañara, yo tarde o temprano creo que lo dejaría por una cosa o la otra, pero eso no quita lo importante que fue para mí.
- ... - "estaba sorprendido, así que el engaño de ese escritor solo fue la gota que derramo el bazo, en parte eso estaba bien, al parecer ese tipo estaba ya saliendo de su corazón antes de que yo apareciera, pero entonces necesito saber..."- me amas?
- creo que siempre lo hecho, pero supongo que antes estaba inseguro por ser tan joven, olvide los sentimientos como me los pidió para no llorar por su partida, pero al verlo de nuevo supe que esos sentimientos jamás desaparecieron y ahora los entiendo porque ya no soy tan inmaduro - era verdad había pensado mucho en ello, incluso estaba sorprendido de lo que decía.
- entonces quieres ser mi Koi? - "necesito que me digas que si mi pequeño pelirrosa, te necesito y quiero darte aquello que quieres, quiero darte amor, mi amor"
fin pov Byakuya
- si... - fue la tímida respuesta que dio shuichi y entonces Byakuya acerco su rostro hasta estar cerca de sus labios y susurro sobre ellos.
- entonces llámame Byakuya, mi amado Shuishi - todo el cuerpo de Shu se estremeció al escuchar de nuevo su nombre salir de los labios del pelinegro, cerro sus ojos incitándolo a que lo besara y este así lo hizo, al principio de forma tierna y tranquila para después pasar a una más necesitada y pasional, Byakuya tomaba el rostro de Shu para jalarlo más hacia su boca mientras con la otra mano la ponía sobre su cadera para jalarlo más hacia el, de repente se separo de el, Shu lo miro confundido y entonces le extendió la mano la cual shu acepto, caminaron hacia la habitación del pelirrosa, entraron y Byakuya cerró la puerta, shu se paro frente a la cama y luego volteo hacia el pelinegro que lo miraba con un gran deseo en su rostro, el pelinegro se acerco hasta el y le quito el saco dejándolo caer al piso para después el quitarse el suyo junto con la corbata, el traía puesto un traje blanco con una camisa negra que resaltaba mas su piel pálida, esto lo hacía verse hermoso.
El pelinegro lo beso de nuevo, cada vez eran besos con más pasión, saboreándose el uno al otro, Byakuya lo recostó poco a poco en la cama y con sus manos comenzó a recorrer el cuerpo del pelirrosa sobre la ropa, quito el collar que tenía el chico y empezó a dar besos y pequeñas mordidas, Shu no pudo evitar comenzar a gemir despacio, el pelinegro comenzó a desabotonar la camisa del chico mientras seguía jugando con su cuello.
Después de desabotonar la camisa y quitársela se posiciono en medio de las tetillas del chico para dar pequeños besos en el pecho del chico, después se dirigió al botón rosa y comenzar a darle pequeñas lambidas para después succionarlo con fuerza - Aaaahh...mmm... - pequeños gemidos salían de la boca de shu, esto era como música para los oídos de Byakuya, con una de sus manos comenzó a atender el otro pezón hasta ponerlo duro, el sabor del cuerpo de Shu para el pelinegro era esquicito, comenzó a descender dando pequeños besos hasta llegar al ombligo del pelirrosa y comenzar simulaciones de penetraciones con su boca -...aaah... - shu puso sus manos en el cabello largo de Byakuya, esto en parte era algo que nunca había sentido, la forma en que lo tocaba, tan delicado, tan protector, era algo muy diferente a lo que sentía con Yuki.
El pelinegro se incorporo un poco para quitar el cinturón del chico, después sus pantalones dejándolo en bóxer, se quedo maravillado de lo que veía, el cuerpo semi desnudo del chico en realidad era hermoso, delgado pero varonil, facciones delicadas pero correspondientes a un chico, era completamente hermoso, desbotono su camisa pero no se la quito, Shu no pudo evitar ponerse sonrojado al ver el pecho del chico y al no quitarse la camisa parecía la persona más sexy que pudo haber visto, el pelinegro quito poco a poco el bóxer del chico hasta dejarlo como llego al mundo, puedo ver su creciente erección y luego miro la cara del chico, sus ojos amatistas entrecerrados medio ocultos por su cabello húmedo sus mejillas sonrojadas y sus labios entreabiertos, "perfecto" no había otra palabra para definirlo pensó el pelinegro, relamió sus labios lo que hizo que el chico se sonrojara mas.
- Eres hermoso, eres perfecto - desabrocho su cinturón y sus pantalones solo para aliviar un poco la opresión en sus pantalones por la erección que fue consecuencia de ver de esa manera a Shu, bajo hasta el miembro del chico y con su mano comenzó a masturbarlo, el pelirrosa comenzó a dar pequeños gemidos.
- aaaahhh....Byak...kuya.... - gimió mas fuerte al sentir como su miembro era prisionero por la boca del pelinegro - aaah...aa...aaah - se sentía realmente bien, a este paso no tardaría en terminar, el pelinegro lo metía y sacaba de su boca succionando con fuerza, deteniéndose de vez en cuando a jugar con la punta del miembro, después lo empezó a masturbar con la mano para deleitarse con los testículos del chico, succionándolos de igual manera sacado como premio mas gemidos del chico - aaaahh....me-me...vengo... - el chico no podía mas, el pelinegro volvió a poner en su boca el miembro del chico y comenzó a succionar con más fuerza, el pelirrosa puso sus manos en la cabeza del pelinegro mientras movía sus caderas mas rápido - ...aaaaAAAAAhhh!!... - no pudo más y el chico se vino en la boca del moreno, este se separo y se relamió los labios para que ninguna gota de la escancia del chico se le escapara.
- para ser la primera vez que hago algo como esto, eh de decir que es extremadamente delicioso, supongo porque eres tú - dijo mientras subía para darle un beso al chico el cual estaba sorprendido por lo que dijo.
- qu..qué? - en realidad no podía creerlo, acaso el era... bueno pero con chicos tal vez, no creía que el fuera...
Byakuya sonrió de lado - soy virgen shuishi - ooh si eso si que no se lo esperaba - no podía hacerlo con alguien que no amara, la poca educación que recibí de mis padres antes de morir, me dijeron que el mejor placer del mundo solo se obtiene cuando estas con la persona amada, muchas y muchos me han besado pero yo siempre termine alejándome de ellos, no necesito mas vacio en mi vida, al hacerlo con ellos hubiera sido simplemente sexo, sin significado, yo de eso no necesito mas - en realidad su vida había sido así, ver a personas que actuaban cortésmente con el simplemente por ser quien era algo que le causaba un gran vacío así que se juro a si mismo que jamás permitiría que en el amor existiera ese sentimiento, si no significaba nada la otra persona, si no era importante ni siquiera la tocaría, era algo que consideraría sagrado, ya que era lo único que aun estaba a salvo del mundo en el que cayó por sus padres.
Shuichi solo lo miro y sonrió " si es esa clase de persona, le amo" tomo el rostro entre sus manos y se fue incorporando hasta quedar frente a frente, aun tenía una pequeña duda.
- entonces, como sabias...? - no sabía cómo preguntar, lo que pasa es que parecía que Byakuya tenía mucha experiencia en la cama, por la forma en que lo tocaba, Byakuya al entender lo que intentaba preguntar Shu no pude evitar sonrojarse cosa que por poco hace morir de una hemorragia nasal a Shuishi.
- yo...estudie...para cuando...tú me escogieras...- oooh, esa era la primera vez que shu escuchaba trabarse al hablar a Byakuya, no se había inmutado en decir que había guardado su virginidad para la persona que alguna vez amara, pero su para confesar que estudio para satisfacerlo por su falta de experiencia, "extrañamente tímido" pensó el pelirrosa, así que sin más dudas termino la distancia entre ambos y esta vez Shu fue el que beso al pelinegro con gran pasión, este se dejaba hacer por el chico, ambos estaban sentados, shu sobre las piernas del pelinegro.
Shuichi decidió tomar el control por un momento para regresar un poco del placer y del amor que le había dado el pelinegro, dejo los labios de Byakuya y bajo hacia su cuello, dejando pequeñas mordidas y besos, subió hasta el lóbulo de la oreja derecha del pelinegro y susurro - te amo - y después la mordió provocando una corriente eléctrica por la columna del pelinegro y un gemido ronco salir de sus labios, shu de un movimiento algo brusco dejo boca arriba al pelinegro acostado en la cama, quito los pantalones y los bóxer de un jalón a Byakuya, quedando maravillado por el perfecto cuerpo que tenia Byakuya, este lo miraba con sus penetrantes ojos de una forma entre deseosa y con amor eso le causaba una gran emoción al pelirrosa, este se coloco enfrente del miembro del pelinegro y de un solo bocado se lo metió en la boca, ganándose un gemido por parte del pelinegro, shu sabía que si quería que durara un buen tiempo dentro de el tenía que hacer que tuviera su primer eyaculación para que la segunda durara mas y sentir más las sensaciones de tenerlo dentro del, amándolo de la forma en que lo hace y también así hacer sentir mejor al pelinegro por esa dolorosa erección que ya clamaba por atención.
- ...mmmm..aah... - gemía Byakuya, eso se sentía muy bien, la pequeña boca de su envolvía su miembro y succionaba con fuerza.
Por su parte shu batallaba un poco por que el miembro de Byakuya era grande y grueso, y cada vez se ponía mas duro, el pelinegro tomo entre sus manos la cabeza de shu aumentando el ritmo, eso indicaba que pronto terminaría, shu con sus manos comenzó a jugar con los testículos, esta estimulación hizo poner en blanco la mente de Byakuya y se vino en la boca de shu, este trago todo lo que pudo pero era demasiado y poco escurrió entre la comisura de sus labios, Byakuya con la respiración aun agitada, tomo del brazo a shu y lo acerco hasta lamber su propia esencia que escapaba de la boca de este e introduciendo su lengua el boca del otro, estuvieron besándose gran rato, hasta que los papeles se invirtieron y era Byakuya el que estaba encima del pelirrosa comenzando a masturbarlo, se incorporo haciendo que el pelirrosa abriera las piernas, se puso en medio de ellas miro a shu y dos de sus dedos viajaron a su propia boca, esto prendió aun mas al chico con esa visión y mordió su labio inferior.
Byakuya saco sus dedos y sonrió ante lo que hizo su pelirrosa, sus dedos viajaron hacia la entrada del chico, introduciendo uno poco a poco - aaahh...aaahh... - el pelirrosa empezó a sentir incomodidad, tenía mucho tiempo sin tener relaciones, mucho antes de dejar al escritor, ya que su vida de pareja desde antes estaba muy mal.
- quieres que me detenga? - pregunto preocupado al ver la mueca de dolor en shu.
- ummm...no, si eres tu...está bien - eso le regreso la confianza al pelinegro así que introdujo otro dedo ganándose mas gemidos de dolor que a poco se convirtieron de placer - ummm...umm...aaahh... por favor....ummm yaaahh - el pelirrosa ya quería sentir al pelinegro dentro de el.
- tu deseos son ordenes - le dijo en el oído, esa pequeña suplica le había robado cualquier rastro de cordura al pelinegro, saco los dedos y metió su miembro de un solo golpe.
- aaaahhh....sii.... - shu estaba excitado, se acostumbro a la invasión y movió sus caderas en señal de que el pelinegro se podía mover.
- ummm...mmm...aaahh... esto se siente magnifico....aaahh shuuu.... - las envestidas fueron de lentas a rápidas y fuertes.
-aaahh... Byakuya...mmmasss...fuerte...aaah...aaahhhmmm... - Byakuya así lo hizo y decidió atender también el miembro del chico - aaaahhhhh...me...vengo...
- ummhh shuuu un...poco mas...- el tampoco no tardaba en llegar, unas estocadas más fuertes y shu se vino entre el vientre de ambos, haciendo que su entrada se hiciera más estrecha de lo que era y así provocar que el pelinegro se viniera dentro de el - ....mmmmaaaaAAAHHH!!!... - si eso había sido placer, estar de esa manera con la persona que amaba estaba seguro de que no se compararía con simples sesiones de sexo con quien sabe quien, se dejo caer a un lado del chico después de salir despacio del para no lastimarlo.
Ambos tenía su respiración entre cortada y se fue calmando poco a poco, shu se recostó sobre el pecho del pelinegro el cual ya subía y bajaba con regularidad, este lo abrazo más a su cuerpo.
- te amo shuishi, no tienes idea de cuento - dijo para después buscar sus labios y darse un beso tierno y tranquilo.
- yo también te amo Byakuya - le dijo después del beso regalándole una hermosa sonrisa.
- shu lo siento pero... - shu lo miro extrañado y después de examinar al pelinegro noto su problemita, al parecer la sonrisa que le dedico desperto en el pelinegro más que ternura, este le volvió a sonreír y se posiciono sobre el pelinegro.
- supongo que estar con la persona amada es perfecto, no? - dijo con una picara sonrisa el pelirrosa.
Byakuya sonrió - claro, pero me hiciste esperar mucho, así que es hora de que te hagas responsable de eso - y así entre beso y caricias se siguieron demostrando toda la noche el amor que tanto necesitaban demostrarse.
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