Bang manejaba con tranquilidad pero se detuvo en una de las orillas ya que su mente estaba llena de confusiones y miedos, no sabia que hacer con la actual relación con el maknae, deseaba saber que sentía, ¿Que pensaba? Si en verdad estaba enamorado de él o solo era una confusión por su temprana edad. Tenía miedo de saber la verdad porque eso significaría que su corazón se rompería en mil pedazos y con cada uno de ellos seguiría amando al más joven. Él estaba seguro de sus sentimientos pero también estaba decidido a no dejar que nadie pisoteara su corazón antes no pudo darlo y pero siempre había una primera porque él sería capaz de arriesgarse por Zelo ya que lo merecía, él era un pequeño ángel en su vida que llenaba de luz su soledad con su brillante sonrisa. Subió decidido a la camioneta ya que hablaría claramente con el más joven y si en verdad lo amaba pelearía por los dos para que pudieran estar juntos sin importar la diferencia de edad.
La extraña se adentro a la casa con su peculiar sonrisa ante la cara de asombro del rubio ambos tomaron asiento en la sala, la incomodad y el silencio reinaba en el sitio.
—Lo siento pero no esta HimChan en casa. —Decía en tono neutro.
—No te preocupes él me acaba de enviar un SMS y me dijo que lo esperara ¿Puedo? —Contestaba con una falsa sonrisa.
—Claro ¿Quieres algo?— Decía cortésmente.
—No, Gracias ¿Estas solo? —Cuestionaba.
—Si. —Contesto al minuto sentándose.
Ambos se quedaron en silencio pero en el rostro de la joven una sonrisa malvada se dibujaba era el momento perfecto para comenzar con su venganza, si Bang no era para ella nadie lo tendría, su orgullo como mujer estaba destrozado al saber que el corazón de la persona que más amaba le pertenecía a un mocoso de 16 años, eso la enfermo.
—Sabes YoungGuk es una gran persona tan protectora con las personas que ama. —Comentaba en un suspiro. —Cuando estaba entre sus brazos me sentía la mujer más segura del mundo ¿Haz tenido esa sensación?
La pregunta sorprendió al rubio quien no sabia que contestar, claro que él conocía ese sentimiento lo habían abrazado tantas veces que comprendía perfectamente lo que era sentirse protegido por su líder.
—Si, No … bueno él es nuestro líder y nos protege a todos. —Contestaba tartamudeando.
—Si como líder es protector imagínate como pareja, es el ser más maravilloso que existe en la tierra, tan romántico, tan varonil. —Decía en un suspiro. —Pero eso tú ya lo debes de saber ¿No?
Las palabras de las joven se adherían a su mente como parásitos que carcomían su frágil alma, ¿Qué debía hacer en ese momento?¿Que tenia que contestar? ¿Qué era lo mejor? Estaba lleno de dudas y miedo.
—No sé a que te refieres. —Contestaba con voz temblorosa, levantándose del sillón. —Creo que debería irme.
—No, crees que no vi como se besaron en la playa. —Contestaba corriendo para encararlo. —¿No te da vergüenza? ¿No tienes miedo de acabar con su carrera?
—Lo nuestro no debería terminar con nuestra carrera. —Contestaba confuso. —¿Por qué me debería dar vergüenza?
—Por favor tienes 17 años y él 23 años ¿Qué piensas que dirá la gente? —Lo miraba desafiantemente. —Verán a Bang como un pederasta por estar con un niño, puede ir a parar a la cárcel y todo por tus juegos infantiles. Destruirás todo lo que él con tanto esfuerzo ha creado, todos lo odiaran y rechazaran por haber seducido a un chiquillo.
—Yo también tendría la culpa ambos cargaríamos con el peso. —Trato de defenderse. —Ambos deberíamos ser juzgados.
—Por favor eres un mocoso nadie creerá en tus palabras al único que verán como un monstro será a Bang, las fans que tanto lo aman y admiran terminaron repudiándolo, lo crucificaran por haber destruido tu inocencia porque tú solo serás la victima. —Le gritaba mirándolo a los ojos.
Zelo trato de no escuchar las palabras pero todo eso era verdad, él podía destruir todo lo que su Hyung había creado con tanto esfuerzo porque su amor era prohibido, porque él solo era un niño que no sabía lo que era el amor, por un capricho podría dejar sin nada a la persona que más admiraba. Tenia miedo de escuchar a su corazón porque él le decía que debía pelear por ese sentimiento que sentía hacia su líder pero su mente le repetía que admitir ese pecado sería el fin para esa persona, ¿Que debía hacer?, las lagrimas comenzaron a salir sin su permiso y un frio congelo su cuerpo deteniendo su respiración, cerro los ojos y miles de recuerdos llegaron a su mente, una tierna sonrisa seguida de un cálido beso en sus labios y por último una voz repitiendo “Conocerte fue realmente un gran evento.” Las lagrimas no se detenían al igual que el frio, estaba destrozado por dentro, solo era un niño que era incapaz de luchar.
—¿Estas enamorado de Bang YoungGuk? —Grito agarrándolo por el cuello. —Dime ¿Lo amas?
Esa la gran pregunta que también se tenia Bang, cuando llego a la casa escucho gritos y al ver que la puerta estaba medio abierta decidió ingresar al lugar y ver como Lee le hacia la misma pregunta que él deseaba hacerle al maknae.
—No, él solo es mi Hyung. No me gustan los hombres. —Contesto entre lágrimas. —Yo solo lo admiro por el gran ser humano que es.
—¿Por qué aceptaste sus besos? —Le volvía a cuestionar. —¿Por qué ser cariñoso con él?
—Soy solo un niño que desea hacer feliz a su hyung. —Contestana dejándose caer en suelo. —Estoy confundido pero solo lo veo como mi hermano mayor.
Tenia que mentir para que nadie lastimará a la persona que más amaba en el mundo, porque ahora estaba seguro que ese sentimiento dentro de su pecho era amor, era capaz de sacrificar sus sentimientos para que la persona que amaba no fuera lastimada y en su mente solo repetía “Esto es lo que mi corazón me dice que haga, así que duele incluso más. Te amo, pero tengo que terminar contigo” ahora entendía la letra de esa canción, ahora entendía porque a veces hay que dejar ir a la persona que amas. El corazón de Bang solo se fragmento en miles de pedazos mientras que un dolor inmenso invadía cada centímetro de su cuerpo había escuchado lo que más temía, tenia ganas de llorar no por él sino por Zelo por todo el daño que le hizo con sus constantes acosos.
—¿Qué esta pasando? —Cuestiono tratando de mantenerse de pie.
Pero no hubo contestación corrió para poder abrazar al pequeño pero este lo rechazo ambos quedaron sorprendidos por la reacción.
—No quiero que me vuelvas a tocar. —Mentía. —No quiero que las personas malinterpreten mis sentimientos.
Esas palabras fueron más dolorosas que las anteriores, las lágrimas estaban a punto de salir pero su voluntad fue más fuerte así que se levanto y miro a Lee a los ojos.
—Vete no te quiero volver a ver en mi vida. —Decía con voz pausada. —Te quiero lejos de los integrantes de B.A.P principalmente de Zelo y HimChan.
—Pero no puedes hacerme esto… —Trataba de explicar. —Déjame explicarte…
La joven se vio interrumpida por el resto de los integrantes que ingresaron a la casa y se asombraron al ver aquella escena, Moon y Yoo corrieron para abrazar al maknae mientras que Kim no sabia que hacer.
—He dicho que te vayas ahora. No la quiero volver a ver cerca de mi o de los chicos. —Gritaba con furia. —¿Entendiste Kim HimChan?
El aludido jalo a la joven llevándola fuera de la casa ante la mirada atónita de todos, DaeHyun también se unió a consolar al más joven, el lugar se quedo en silencio por varios minutos hasta que HimChan regreso.
— ¿Qué sucedió? —Cuestiono el pelinegro. —¿Estas bien mi querido baby?
Pero no hubo respuesta así que corrió abrazarlo también, la culpa carcomía el alma del líder quien sentía que él era el único culpable en ese lugar por lo que agarro su mochila y la coloco en su hombro, tenia que salir de ese lugar, no soportaba escuchar como su pequeño lloraba por su culpa.
—Llamaré al manager para que venga por ustedes. —Comento sin voltear.
Bang desapareció por la puerta, el corazón de YoungJae sentía que debía seguirlo así que se deciso del abrazo y corrió en dirección a su líder, al ver lo que pretendía hacer DaeHyun lo sujeto del brazo negando con su cabeza. No podía dejarlo ir con él porque sentía que perdería algo muy importante.
—Tengo que estar con él. —Decía con voz baja. —Me necesita.
—Tienes que quedarte a mi lado. —Comentaba en su susurro presionando. —Por favor no te vayas con él.
—Esto es lo que mi corazón me dice que haga, así que duele incluso más. —Le decía con los ojos llorosos.
Él no podía negar una petición a esos bellos ojos pero dejarlo ir significaba el fin a algo maravilloso que creció en su pecho pero esa petición junto a esa mirada lo obligan a dejarlo ir, por lo tanto lo soltó dejándolo libre y algo en su pecho se fracturo, al ver una linda sonrisa y un silencioso “Gracias” se dejo caer en el piso aferrándose al rubio, él también había dejado ir a alguien muy importante. Yoo corrió hacia la calle tratando de encontrar a su líder pero no podía distinguirlo en su interior los remordimientos crecían pero él necesitaba estar a lado de Bang ahora él lo necesitaba, llego a una parada de autobús donde distinguió a un rubio con la cabeza baja sentado en una banca. Se coloco frente a él para después arrodillarse y abrazarlo con ternura el mayor se quedo sorprendido por el repentino abrazo pero al ver quien era solo se dejo abrazar su alma estaba siendo torturada por la incesante culpa que devoraba poco a poco su cordura, tenia ganas de salir corriendo, gritar, maldecir, golpear o algo que sacara el incesante dolor que crecía en su cuerpo, Jae abrazo con más fuerza a su líder sentía como comenzaba a temblar.
—Conozco tu corazón, lo sé. Conozco tu forma de amar. —Comentaba en un susurro.
—Estoy perdido, no sé que hacer. —Contestaba con voz profunda. —Todo es mi culpa. Todo lo que toco lo destruyo, lo ensucio. Soy un monstruo.
El sol se fue perdiendo al horizonte, el maknae no abrió la boca para nada aunque sus hyungs lo presionaban él solo veía la puerta donde había huido el amor de su vida después de varios minutos huyo a su habitación, Moon al verlo en ese estado lo siguió y al entrar al cuarto lo vio hecho un ovillo en la cama aún las lagrimas salían de sus ojos pero su mirada estaba en otro lado como su mente, el castaño se acostó junto a él quedando cara a cara y unió su frente a la del rubio con una mano le cerro los ojos y él hizo lo mismo, guardo las blancas manos entre las suyas y las lagrimas comenzaron a fluir. Él también estaba dolido, él también tenia ganas de llorar hasta quedarse vacío, su corazón también estaba roto porque HimChan se mostraba indiferente a su frialdad, porque su amor no era correspondido. Los sollozos comenzaron a resonar en la habitación por que ambos maknaes sufrían en silencio aunque ninguno de los dos supiera porque el otro lloraba estaban seguros que el dolor era el mismo y que el frio que cubría su piel era por la misma razón. HimChan estuvo sentado en la sala aún tenia en su mente el rostro de Bang y las lagrimas de JunHong pero lo que atormentaba su alma era la indiferencia de Moon, lo extrañaba demasiado, es como si una parte de su vida desapareciera, le faltaba el aire y su corazón no dejaba de llorar por la compañía de su ángel sonriente. Así que decidió ir a la habitación de los jóvenes pero se detuvo en la puerta al escuchar como lloraban, no él no estaba listo para ver las lágrimas de Up, eso lo mataría. Recargo su frente en la puerta “Sólo estaba acostumbrado a recibir amor, creo que sólo estaba pensando en mí”, una lagrima se escapo para rodar por su mejilla.
—¿Te han lastimado mucho? ¿Estás cansado? —Comentaba entre sollozos —¿Hice las cosas muy difíciles para él? Pero no puedo dejar de amar.
Ambos jóvenes se quedaron profundamente dormidos, el cansancio había debilitado su frágil alma. El pelinegro se sentó en el pasillo recargado en la pared escuchando como sus dos tesoros sufrían. DaeHyun escapo a la habitación que compartían YoungJae y HimChan se acostó en la cama del primero donde una de sus camisas estaba extendida la tomo entre sus brazos para poder disfrutar del dulce aroma de su mejor amigo, “Conozco tu corazón, lo sé. Conozco tu forma de amar, pero supongo que no es para mí” esas palabras cruzaron por su mente no entendía por qué su pecho dolía, ¿Qué era ese sentimiento que invadía cada fibra de su piel? ¿Qué significaba YoungJae para él?
La pareja iban sentados en la parte trasera de un autobús que se dirigía a Seúl el más joven comenzó a tiritar de frio por lo que el mayor saco una de sus sudaderas y se la extendió aunque sus hombros iban demasiado juntos sus mentes estaban en otro lugar. El rubio había escapado de su culpa mientras que él más joven había escapado de su mejor amigo. Jae tomo la mano del mayor y la sujeto con fuerza, tenia que sentir que lo único real que había en su vida era YongGuk la persona que le mostro que había siempre una salida, su primer amor. Recargo la cabeza en su hombro cerrando los ojos “Esto es lo que mi corazón me dice que haga, así que duele incluso más
Te amo.” Repetía en su mente. El mayor al ver que su acompañante se había quedado dormido mira por la venta esa hermosa luna que brillaba en lo más alto.
—Mi corazón y yo mismo nos arrepentiremos. Pero de todas formas, no lo demostraré incluso si las lágrimas caen. —Decía en silencio.
Tomo su celular para escribir un mensaje después de enviarlo recargo la cabeza en la de Jae, ahora él era su único apoyo, la única persona en la que podía confiar. Él ya no tenia corazón porque JunHing lo había destruido ahora no podría amar a nadie. El pequeño rubio escucho su celular sonar así que lo abrió para ver quien era y se llevo una gran sorpresa al ver quien era el remitente así que lo abrió para leer lo siguiente: “Maldíceme todo lo que quieras, creo que eso te hará estar mejor. No te daré ninguna excusa patética, esto es lo que soy. Conozco tu corazón, lo sé. Conozco tu forma de amar, pero supongo que no es para mí. Perdóname por todo el daño que te hice espero un día ser capaz de verte a la cara y tener tu perdón.” El menor se levanto de la cama con cuidado tratando de no despertar a su compañero para después sentarse junto a la venta y ver la luna.
—Cuando todas las canciones de amor se conviertan en tristes canciones de despedida. Las escucharé y pensaré en ti, lo confieso dentro de mi corazón. Lo recordaré, cuando piense en las aquella historias que compartimos ¿Qué será de nosotros? ¿Estaremos en diferentes relaciones mientras nos olvidamos mutuamente? ¿Estaré culpando a mi corazón? ¿Está realmente bien seguir sólo lo que mi corazón me dice que haga? —Canto en silencio.
Ya no había lagrimas que derramar, solo contemplaba la luna deseando estar a lado de su hyung mientras que Bang tenia el mismo pensamiento mirando la luna desde la ventana de un autobús.