Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Empezar desde cero por maxi anime

[Reviews - 71]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

En Tokio se celebraba un torneo para mayores de veinte años, en una categoría semi profesional, aunque participaban también jugadores profesionales,  era solo por invitación ya que el objetivo del mismo fue reunir a las viejas promesas del tenis en un mismo torneo. El parque de tenis estaba muy concurrido, a simple vista se veían ciertos conocidos, jugadores de dobles o sencillos presentes y solo había un representante de Kanagawa, Sanada Genichirou, quien venia acompañado de su hijo Seichirou y su abuelo Genemon.

Para Seichirou era el primero torneo al que asistía, como observador, pero al menos estaba presente en un torneo, podría ver los partidos mar reñidos, conocer a jugadores profesionales, esperaba conocer frente a frente a Kunimitsu Tezuka, el jugador profesional, uno de los mejores de Japón. Genichirou había decidido participar mas que nada para mostrarle a su hijo lo bueno que era en tenis, había estado semanas atrás practicando y fortaleciéndose, tras recibir la invitación al torneo, no quería hacer gala de sus habilidades pero al menos quería recordar viejas épocas como jugador. Genemon había ido contento a ver aquellos partidos, Genichirou le había comentado algo de eso por teléfono y se oía emocionado, aunque también tenia deseos de ver jugar tenis a sus nietos, aunque en su deseo estaba ver jugar a Kazuya primero que nada, pero por como le hablaban de el, eso no pasaría pronto.

Seichirou, te ves emocionado- dijo el mayor de los tres desde la banca donde estaba sentado.

-Conoceré a Tezuka Kunimitsu y lo veré jugar, es profesional…

-Yo soy mejor- exclamo Genichirou tomando un sorbo de agua de la botella que tenia en la mano.

-Sanada…Sanada Genemon- dijo una voz bastante grave a un lado de ellos, los tres Sanada miraron hacia la procedencia de la voz y vieron a un hombre mayor que caminaba con un bastón.

-Kunikazu Tezuka- dijo el mayor de los Sanada sonriendo- ¡Cuánto tiempo!

-Los años ya ni los cuento…

-Aun me debes la victoria numero cien Kunikazu.

-Sera mi victoria Genemon.

-Disculpe- lo interrumpió Seichirou- ¿usted conoce a Kunimitsu Tezuka? Tienen el mismo apellido.

-Si, ¿Cómo no conocerlo? Soy su abuelo- respondió sonriendo- ¿y tu quien eres? A ver no me digas…eres Sasuke.

-Sasuke ya no es un niño, te quedaste en el tiempo, este de aquí que vez es mi Bisnieto Seichirou Sanada- respondió Genemon.

-Mucho gusto en conocerlo, soy Genichirou Sanada- interrumpió el de gorra acercándose- Seichirou debes de ser mas respetuoso.

-Oh, Genichirou…si te recuerdo…en realidad recuerdo tus partidos con mi nieto…que reñidos eran ¿participaras en el torneo?

-¿Cuántos nietos tienes?- interrumpió nuevamente Seichirou.

-Solo uno, Kunimitsu.

-¡Padre! ¿Te enfrentaste a Kunimitsu Tezuka? ¿El jugador profesional?- pregunto el menor con los ojos brillosos.

-Por supuesto, ¿Por qué crees que te dije que soy mejor?- exclamo con orgullo- no te mentiría.

-Solo le ganaste una vez y mi nieto otra cuando eras niño- le replico el mayor- Por lo que veo todos los Sanada son iguales.

-¿Qué quiere decir con eso?- respondiendo a la vez los tres.

Un niño de pronto se acerco corriendo, el pequeño de cabellos rubios, ojos celestes y que llevaba lentes, corría a toda prisa llamando a Kunikazu. El mayor de los Tezuka se dio vuelta y sonrió para luego agacharse a la altura del menor y revolveré el cabello cuando llego a donde estaba.

-Kunihiro, sabes que a que tu padre no le gusta que corras, te puedes lastimar y romper tus lindos anteojos- le dijo sonriendo- ¿Por qué tanta prisa?

-Mi padre esta por enfrentarse a uno de los representantes de Tokio…Yoshirou Akasawa escuche que se llamaba su primer oponente.

-¿El ex Buchou de Sent Rudoplh?...espero no ser el único FukuBuchou- susurro Sanada entre dientes.

-Ya vamos… o…cierto, debo presentarlos, Clan Sanada, el es mi bisnieto, Tezuka Kunihiro.

-Mucho gusto- dijo el menor haciendo una reverencia-Vamos bisabuelo, tenemos que llegar a ver el partido.

-Sabias que mi padre venció a tu padre- exclamo orgulloso Seichirou.

-¿He?

-Sanada Seichirou, hijo de Sanada Genichirou, quien tiene una victoria contra tu padre- explico cursándose de brazos.

-Y también una derrota- acoto Kunikazu.

-Eso fue en primaria y lo sabes, en un torneo infantil, la victoria de Genichirou fue en secundaria, en la final del torneo nacional, esa contaba mas que la primera- replico el mayor de los Sanada.

-Mi padre no pudo perder contra tu padre-exclamo orgulloso el de lentes mirando al pelinegro- porque mi padre es profesional desde los quince años.

*********************************************

El club botánico estaba tomando el te mientras se ponían al día sobre los acontecimientos de su vida en los diez años que no se vieron y el primero en hablar de todo fue Seiichi, quien no paro hasta comentar lo del juicio reciente, cuyo resultado fue a su favor.

El primero en hablar de sus últimos diez años fue Shiraishi Kuranosuke,  quien se había graduado de farmacéutico y enfermero, ambas carreras le habían llevado más tiempo de lo planeado pero le abrieron camino para trabajar en la secundaria Shitenouji con enfermero y luego como profesor en el área especifica que fue educación para la salud. En el amor no había casi ningún cambio, hasta la fecha su pareja era Chitose, a quien amaba profundamente, tenia en total tres hijos, Seisuke de siete años, Ryosuke de cinco y el pequeño Hirosuke de dos años. Shiraishi se desvivía por sus hijos, lo que no era novedad par nadie, pero también era extravagante en lo que hacia para ellos, al punto de realizar fiestas de cumpleaños bastante extrañas con los ex miembros del Shinten, los  dos niños estaban acostumbrados a dichas fiestas, en cambio el mas pequeño lloraba ante el ruido mas leve que sentía debido a dichas fiestas. Kuranosuke no había perdido contacto con sus viejos amigos, bueno no con la mayoría, tenía una excelente relación con Oshitary Kenya,  Ishida Gin, Tooyama Kintgarou, Koishikawa Kenjirou y Zaizen Hikaru.

Fuji era una vuelta de pagina, poco después de graduarse se había ido a visitar a Tezuka en Alemania, pero termino quedándose con el y comenzó una carrera como fotógrafo. Al poco tiempo, cuando el de lentes comenzó su carrera profesional el lo siguió a todas partes. De su relación con Tezuka había tenido dos hijos, Kunihiro de siente años y Syuichi de cinco, con el nacimiento del primero, quien había nacido en Alemania, regreso a Japón y se instalo en casa de sus padres, cuando nació Syuichi recién pudo mudarse a un apartamento. Su relación con Tezuka tenia sus idas y vueltas, ya habían tenido mas de cinco peleas, cuando estaban peleados el de lentes solo se aparecía los fines de semana para llevar a de paseo a sus hijos o a casa de sus padres, donde este se hospedaba hasta que se reconciliaran. En cuanto a su relación con sus ex compañeros, Syusuke tenía comunicación con todos, solía llevar a los niños al Sushi Kawamura de vez en cuando, en ocasiones  Oishi y Kikumaru los cuidaban cuando tenía que trabajar, Ryoma siempre andaba de torneo en torneo pero aun tenia comunicación con el, con quienes tenia poca comunicación eran Inui, Kaidoh y Momoshiro, no porque no quisiera hablar con ellos, sino por que los tres trabajan mucho y era casi imposible verlos.

-Veo que no nos hemos perdido casi de nada- Exclamo Fuji mirando a Syuichi jugando con un avión de juguete que le había prestado Geniichi.

-Ya no hay mucho que contar- acoto Shiraishi- solo que tengo tres hermosos y maravillosos hijos, Chitose es psicólogo del estado y aun no me he peleado con el.

-Yo también tengo tres maravillosos hijos Shiraishi- acoto Yukimura sentando en el más amplio sillón tomando su taza de té,  mirando a Geniichi jugando con Syuichi y Ryosuke.

-Cuatro- acoto Kazuya levantándose del suelo donde estaba jugando armando algo con bloques y se acerco a Seiichi para abrazarlo.

-Kazuya ¿Qué dices? Si son solo tres, Seichirou, Geniichi y tu corazón- exclamo llevándolo a sus brazos.

-Somos cuatro- marco con sus dedos- mis hermanitos y el bebe.

-¿Bebe?- preguntaron los tres adultos a la vez.

-Deberías creerle Seiichi, Chitose dice que tiene un enorme don- acoto Shiraishi.

-Se que mi hijo tiene un don…pero… ¿puede saber eso? ¿Cómo lo sabes corazón?- pregunto el peliazul sin salir de sus asombro.

-Porque tienes un aura mas linda y aquí hay otra de otro color…es como de mi color…pero mas clara- respondió el de diez años y luego toco su vientre.

-¿Puedes saber si será niño o niña Kazuya?

-Shiraishi, cállate.

-Nene- dijo sin dudarlo.

*********************************************

El parque infantil estaba repleto de familias que llevaban a sus hijos, muchos niños corrían por todos lados en los juegos. En una banca, mirando a los niños jugar, estaba Yanagi Y Kirihara, sin perder de vista a sus dos hijos, Ren que estaba anotando lo que veía a Akira hacer y Akira que subía a cada juego que podía. El castaño le sostenía la mano con delicadeza al pelinegro, mientras que a cada tantos momentos le robaba uno que otro beso. De un momento a otro ambos se levantaron de las bancas y fueron hasta detrás de unos arboles a seguir besándose.

-mmm, Akaya- exclamo Yanagi subiéndole la remera.

-Renji…espera- dijo avergonzado el menor- Los niños…

-Hasta aquí escucho los gritos de Akira pidiendo a Ren que deje de anotar lo que hace- acoto besándolo en el cuello- vamos…

-Renji…no- dijo apartándolo.

-¿Qué te pasa Akaya?

-Renji… ¿Por qué estas conmigo?- pregunto mirándolo seriamente- ¿acaso por diversión?

-Por que te amo- respondió sin dudar y luego lo abrazo- eres mi rebelde demonio ¿Por qué dudas que te amo?

-Te escuche hablando el otro día con Inui…le dijiste algo de que era importante para ti y no sabias como expresarlo, que querías hablar conmigo de una manera directa…que tenias que tomar una muy importante decisión y que querías hacerlo…si quieres irte con el, vete, no te detendré…los niños se quedan conmigo.

-Akaya ¿Qué fue exactamente lo que escuchaste?...no recuerdo haber hablado con el sobre…ha…ya entiendo lo que escuchaste… Akaya, tu eres lo que mas amo, junto a los niños, nunca jamás te dejaría…lo que escuchaste con Inui fue- intento explicar y se sonrojo.

-¿Qué? A mi no me engañas-

-Quería hacerlo en un restaurante…pero bueno, lo que escuchaste con Inui fue que le pedí ayuda para hacer LA pregunta…hacerte LA pregunta- dijo asintiendo el La y luego se arrodillo, sacando de su bolsillo una pequeña caja- bueno, ya escuchaste lo que te quería decir…creo que no hay mucho que decir, Akaya eres muy importante para mi, lo que mas amo desde que te conocí, eres quien me dio muchas alegrías, estas siempre conmigo, me entiendes, me acompañas, en las buenas y en las malas… no he querido hacerlo hasta ahora, porque quería que fuera de manera legal y no simbólica…pero Akaya, tu eres muy importante para mi.

-¿Es la pregunta que creo que es?

-Akaya Kirihara, mitad ángel, mitad demonio…con problemas del corazón… ¿te casas conmigo?- dijo abriendo la pequeña caja dejando ver un anillo- será un casamiento simbólico…y

-Si…si…si- dijo con emoción tomando el anillo y luego lo abrazo- Acepto, acepto, acepto…te are el hombre más feliz del mundo Renji.

-Ya lo soy- acoto abrazándolo- lo que si no puedo…hacer algo legal…lo sabemos…pero si simbólico…no tradicional que era lo que más quería.

-Mientras este a tu lado no hay nada mejor Renji.

-AL FIN- grito Akira saliendo detrás de un árbol- SIIII…

-Akira ¿estabas escuchando?

-Dos padres juntos y felices, hacen que el desarrollo de la inteligencia de un niño más óptima- acoto Ren- Eso dicen los datos.

-Siete años y ya es avanzado para su edad- exclamo Akaya.

-Bueno, serán niños inteligentes los dos…vengan acá.

 

*********************************************

Después de la hora de lectura Yagyuu se ocupaba de hacer la cena mientras Nioh veía televisión con los dos mas pequeños y Hiroki jugaba en la sala a su vista, al peliplata no le gusta ver cosas infantiles y  mucho menos que sus hijos las vean, pero Masashi era pequeño y tenia que verlas, por orden del de lentes. No era que Nioh no podía imponerse ante las ordenes de su pareja, de poder hacerlo lo hacia, pero el de lentes siempre estaba a un paso delante de el en todo, y lo primero que hizo después de la hora de lectura fue llevarse consigo el control remoto, dejando en al televisión puesto el canal de dibujos animados. Hiroki también gustaba de ver los dibujos animados de l televisión, pero esa serie en particular le era muy infantil para el, por lo que había subido a su cuarto y regresado con sus juguetes, ya que sus padres le prohibían que estuviera solo en su cuarto hasta que tuviera diez.

La puerta sonó interrumpiéndolos a todos, Yagyuu dejo a un lado lo que estaba haciendo y fue atender, dándose con la sorpresa de un visitante que no esperaba ver en muy buen tiempo, el padre de Masaharu, Masahiro Nioh, quien traía un par de bolsas en las manos. Lo invito a entrar, para no ser mal anfitrión ni nada, era su suegro después de todo y al menos debía tratarlo de manera cordial, por más mal que lo viera.

-Pase- dijo abriéndole paso.

-Muchas gracias.

-Abuelito- dijeron los tres niños al mismo tiempo al oír su tono débil de voz y corrieron a recibirlo.

-Papá ¿A que se debe tu visita?- pregunto Masaharu acercándose.

-Venia de hacer unas compras y me pasaba por aquí a saludar- respondió sonriendo- les traje algo a los niños.

-Llamare a mi madre y le diré que llegaste bien.

-No hace falta hijo, ya me voy…

-¿Quiere quedarse a cenar?- pregunto el de lentes- no hay problema- Eres muy amable…pero no.

-¿Qué hay en las bolsas abuelito?- pregunto Hirohito tomando una.

-Un par de obsequios para ustedes, no es mucho lo que pude comprar con mi jubilación, pero pude darme un gusto comprándoles cosas.

-Gracias- sonrieron los tres.

Nioh acompaño a su padre a la sala para sacar los juguetes en las bolsas, no era caros y mucho menos de ultima moda, solo eran juguetes que había comprado en un vasar y que le parecieron un buen detalle para con sus nietos;  un camión de juguete para Masashi, un set de policía para Hirohito y un tren de juguete para Hiroki; pequeñas cosas que esperaba le sacaran una sonrisa a sus tres únicos nietros. Después de ver las sonrisas de sus nietos ante los presentes, se encamino a la cocina para poder hablar con Yagyuu, tenía una charla pendiente con su yerno y ya no podía eludirla más, no después de lo que escucho la noche de navidad en casa de sus consuegros.

Flash Back.

Buscaba los baños de la casa en el piso superior, con la gran reunión familiar en la casa de sus consuegros los baños del piso inferior cada vez que se desocupaban al minuto siguiente ya se volvían a ocupar. El ambiente navideño le encanta, siempre le gusto ver niños correr y jugar, gritar y reír, ver a sus nietos disfrutar de las fiestas era para el una alegría inmensa, desde que sus hijos se habían convertido en adultos esperaba volver a disfrutar de historias bajo la chimenea, jugar con los niños e incluso esperaba contarle sus anécdotas del pasado. El piso superior estaba aparentemente vacío, ya que todos, o eso pensaba el, estaban abajo disfrutando de los cantos navideños y los especiales de navidad. Buscaba el baño con suma urgencia, a pesar de ir a diálisis regularmente, aun sus riñones funcionaban, gracias a una terapia que estaba recibiendo en el hospital general de Kanai.

Entreabrió la primera habitación, esperado que fuera el baño, pero se quedo tieso al escuchar las voces dentro, era  una habitación y quienes estaban dentro eran su yerno y su hijo, los cuales hablaban sobre separación. Sabia que no debía interferir, mucho menos ocasionar una pelea por defender a su hijo, el no tenia porque hacerlo, pero sentía que esa pelea era por su causa y quería saber específicamente a que se debía.

De la discusión solo pudo aislar algunas frases cuando comenzó a escuchar, de parte de su hijo  un “solo te enfrascas en el odio” y de parte de su yerno escucho claramente una frase que le pego como un puñal en el pecho “hace diez años pude perderte”. Esa simple frase salía de los labios del de lentes, pero provenía exactamente de su corazón, podía sentir un hilo de voz cuando pronunciaba aquella frase. Después de un momento de silencio sentía ganas de entrar, pero fue cuando su yerno volvió a hablar y espero…espero un momento oportuno para entrar.

-Hace diez años deje mis estudios por ti, no me importaba mas nada que verte, Que saber que ibas a mejorar aunque los médicos dijeran lo contrario, en ese momento solo era tu compañeros de dobles, a quien acudías cuando algo malo te pasaba, peleas callejeras allí estaba yo para curar tus heridas, mi cuarto era tu cuarto, mi casa tu casa, la noche en que no llegaste a dormir intente localizarte al celular, dos horas después llame nuevamente, me atendió una enfermera y me dijo lo que había pasado…fui al hospital, dije que era tu novio…tu familia nunca llego…te habían abandonado…yo no podía dejarte solo y me negué a hacerlo- escucho con una voz firme, pero a la vez quebrada, como si quisiera llorar mientras hablaba, pero no lo aria- Ese día me prometí que te protegería de todo, que velaría por ti…porque te amaba y te amo tanto como el primer día que te conocí….entiéndeme Masaharu, no puedo perdonar a aquel que casi me quita lo que más amo, no se si fue por ignorancia o por maldad, no puedo perdonarlo.

Esas palabras fueron como un puñal para el, dejo de escuchar, se alejo de la puerta y regreso al piso inferior, viendo a sus nietos viendo televisión alegremente, comparando a los personajes de la película con algún conocido. Se sentó en el sillón mas amplio, su sonrisa se había borrando, pero se esforzó para aparentar que todo estaba bien, no iba a preocupar a su mujer, a sus hijos y sus nietos, aquellos a los que había adorado años atrás, para el esa navidad no debía ser triste.

Antes de la cena vio bajar a su hijo, abrazado al de lentes, ambos reían, se susurraban cosas al oído, se decían alguna que otra cosa, se agarraban de la mano. Sonrió viendo aquella escena, no recordaba la ultima vez que había sido tan amoroso con su mujer, si recordaba que en el mismo año, antes de que naciera su hija, el ya había dejado de regalarle flores, el amor se había convertido en rutina tras poco mas de un año de convivencia, en cambio su hijo llevaba mas de diez años de convivencia con su yerno y ambos aun se demostraban, aunque les daba vergüenza hacerlo en publico, lo mucho que se amaba.

Fin Flash Back.

-¿Podemos hablar?- pregunto mirando al de lentes cocinar.

-No tengo nada que hablar con usted- respondió ajustándose los anteojos.

-Escucha…se que no tienes nada que hablar conmigo, pero al menos, quisiera que me escucharas- dijo cansado- llevo diez años con un nudo en la garganta, una melancolía incierta, un puñal que poco a poco me ha ido matando en estos diez años…

-Un puñal que usted mismo se ha introducido- interrumpió mirándolo con seriedad.

-Recuerdo cuando te conocí hace quince años ya- dijo bajando la mirada- Masaharu no había ido a dormir a casa y estaba preocupado, me atreví a ir a su cuarto y  en su agenda estaba anotada, en la primera pagina, la dirección de tu casa…tu nombre, fui a la casa de tus padres y pregunte por ti…me atendiste muy cortésmente, estabas vestido, en lo que decías tu ropa habitual, era fin de semana, una camisa y un pantalón de vestir, la camisa dentro del pantalón, muy elegantemente,  me dijiste que no me preocupara, que mi hijo estaba bien, durmiendo en tu casa…desde entonces nunca dude donde estaba cuando no volvía, podía llamar a tu casa y tu madre siempre me decía que ahí estaba Masaharu, durmiendo, haciendo la tarea e incluso cenando, siempre me aseguraba que estabas bien…contigo siempre estaría bien…

-¿Qué tiene que ver eso con lo que quiere decirme?- pregunto mirándolo cortante.

-Hace diez años…pensé que hacia bien, siempre le di todo a Masaharu, quería que el supiera que la vida de adulto no era fácil, que algún día entraría a al casa y no estaríamos su madre ni yo para solucionar sus problemas, que el tendría que valerse por si mismo.

-Y le negó una herramienta para poder valerse por el mismo, el estudio- le replico con enfado.

-Quería que el supiera el significado de la palabra esfuerzo.

-Lo abandono.

-No fue mi intención…mi error fue siempre ser muy blando con el.

-¿Acaso fue lo que hizo un especie de lección lo que hizo?...eso…casi lo mata.

-No fue mi intención, no pensé que el tendría un accidente, menos que es enfermaría de algo tan grave-

-De todas maneras no le creyó cuando lo necesito- le replico cruzándose de brazos.

-Cuando te conocí, creí que alguien como tu era lo que mi hijo necesitaba, alguien con reglas definidas, que le dijera a mi hijo que estaba bien y mal, que es lo que podía y no hacer…con el tiempo aprendí de ti, que tu estabas con mi hijo, no solo porque eras su compañero de dobles, su amigo, eras mas que eso, tu realmente lo querías.

-¿A que viene toda esta conversación?

-Hiroshi, no puedo pedirte perdón por lo que hice, no merezco ser padre, no debería ser el padre de un hijo tan maravilloso como Masaharu, pero me gustaría que escucharas mi parte de la historia de lo que paso hace diez años.

-¿Por qué debería escucharlo?

-Porque para un juez es importante escuchar las dos partes en conflicto, ¿no es así?

*********************************************

Sanada regreso a la casa entrada la noche, estaba cansado tras jugar varios partidos para llegar a la final del torneo, pero en uno de ellos, contra Atobe, había tardado demasiado, mas de lo que el esperaba para su gusto, por lo que los partidos se reanudarían al día siguiente y su rival a vencer era Tezuka Kunimitsu en la final del torneo. Entro a la casa y vio la cena ya dispuesta, por lo que se lavo las manos y se sentó a comer, los niños estaban cenando en total silencio. Después de cenar ayudo a Seiichi a lavar la losa, mientras los niños se habían ido a su habitación a toda prisa, lo único que tenia que hacer era secar los platos una vez que estaban lavados.

-¿Cómo te fue en el torneo?- pregunto el peliazul algo nervioso.

-Bien, vencí a Atobe, a Kite…

-¿Te enfrentaste a ellos?

-Hubo muchos, parecía un especie de reencuentro entre antiguos capitanes y sub capitanes, el antiguo sub capitán de Shitenoji estaba presente ¿Cómo se llamaba?  Kenjirou...- Dijo en un tono pensante- debiste asistir y Shiraishi también, en vez de juntarse a hablar de plantas.

-Sabes que somos el club de botánica.

-Lo se, pero hubiera sido bueno verlos a todos los ex Buchou presentes, y callarle la boca al hijo de Kunimitsu, ¿Cómo dijo que se llamaba? Kunihiro.

-¿callarlo?

-Anduvo diciendo que yo no pude vencer a su padre porque el lleva quince años de profesional y bien ¿Cómo estuvo la reunión de los amantes de las plantas?

-Muy bien…sabes es extraño, Yanagi en diez años ha mantenido casi exclusivamente su relación con Inui, manteniendo su amistad, pero Fuji casi no sabe nada de el…y Shiraishi corto toda comunicación con los que eran esa pareja de dobles extraña…somos el único equipo que sigue junto.

-Somos como una gran familia- acoto Sanada- Todos nos necesitamos mutuamente, tu eres el que impulsa todo, por el que todos hacen de todo, yo soy el estricto que tiene que ponerles limites, Marui es…es el adicto al azúcar que debes detener, Nioh el adicto al cafe…en fin todos nos necesitamos entre si, somos una gran familia, muy unida.

-Una gran familia- dijo mirando la losa que lavaba.

-Deberías volver a practicar tenis, volver a las canchas a hacerte ver como el rey del Rikkai, el invisible Seiichi Yukimura, el hijo de dios- exclamo abrazándolo por la cintura.

-Este año no- respondió sonriendo.

-¿Por qué?- pregunto sin entender el de gorra.

-Vamos a agrandar la gran familia del Rikkai…- exclamo indeciso.

-¿Agrandar la familia? ¿Hablas enserio?- pregunto con asombro subiendo su mano hacia su vientre.

-Kazuya lo dijo…si Kazuya lo dijo.

-Es una maravillosa noticia…espera…eso explica porque estaba muy mimoso…Kazuya ¿Cómo lo supo?

-Como supo que éramos sus padres…solo lo supo.

-¿Solo lo supo?- pregunto sin entender- Kazuya es un niño especial, de eso no hay duda…adiós a la habitación de huéspedes y hola habitación para el bebe.

-¿No estás molesto?- pregunto alzando una ceja- Genichirou.

-¿Molesto? ¿Cómo estarlo? Me aras padre…tu primer embarazo que yo podre estar presente y ver crecer al bebe…estoy mas que feliz…mañana venceré a Tezuka y le diré, en tu cara que seré padre de nuevo.

-¿Por qué tienes que hacer todo una competencia Genichirou Sanada? En especial con  Tezuka.

Continuara


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).