El pelotón de Kakaroto avanzaba tranquilamente en dirección al comedor, había pasado casi un mes desde que Kakaroto regresó de Racgan, las cosas se movían tranquilas y relajadamente, menos para Droxx claro, pues estaba a sólo dos días (contando hoy y mañana) de contraer nupcias con Asim, cosa que lo ponía muy nervioso, después de pensarsela mucho, realmente no estaba seguro de si estaba listo o no para actuar responsablemente, pero lo que le inquietaba más era la idea de ser fiel, ese pequeño detalle que no había considerado. En realidad en Vegita nadie se casaba, pero Asim pertenecía a la realeza, llevaba sangre pura del linaje saiyajin mas importante, por eso debía casarse. Y para acabar, Vegeta le dijo que él y Asim vivirían ahora juntos, en el palacio, ¡con él ahí! habría aceptado llevársela a la ciudad como hacían el resto de los soldados, pero Vegeta se negó totalmente, incluso volvería a Droxx comandante con su propio pelotón, cosa que en lugar de poner feliz al chico, lo hacía sentir demasiado triste, la idea de tener que separarse de sus amigos lo llenaba de melancolía. Se sentaron en la mesa grande y todos devoraban literalmente sus alimentos.
-oye Droxx… ¿Qué pasa hermano?...-dijo Broly con algo de comida en la boca, al notar que su compañero solo miraba su plato sin siquiera probarlo.
-… estoy bien… es solo que…-contestó haciendo una pausa soltando un suspiro, mirando con algo de tristeza al frente.
-¿Asim no te complace en la cama?- preguntó Raditz en un tono bromista.
-¡¿Qué?! ¡Ella y yo no hemos tenido nada de eso aun!- exclamó Droxx sobresaltándose un poco.
-¿no? ¡Pues ya se están tardando!- añadió Kyou despreocupado, Droxx se sonrojó un poco recargándose en su asiento nuevamente, sus amigos lo miraban sonrientes y bromistas, definitivamente extrañaría eso. En sus labios se dibujó esa sonrisa retorcida y loca volviendo su vista a la nada.
-tranquilo Droxx, todo estará bien… te apoyamos plenamente… además es lo que querías ¿no?- dijo Kakaroto en ese tono tranquilo y amigable, reconfortando al otro muchacho.
-si… en realidad mucho, no puedo creer que finalmente vaya a volverla mi esposa…- contestó Droxx hablando tranquilamente, seriamente, mostrando con esa suma seriedad su preocupación. Kakaroto le sonrió, de esa manera tan espontanea y sincera, sonrisa que fue correspondida e imitada por todos los presentes.
-oye… solo hay una cosa que yo no entiendo… ¿Cómo es posible que me de un momento a otro Asim te haya aceptado como si nada?- preguntó Turles y Kyou compartió una mirada cómplice con Droxx.
-es que… soy un galán…-dijo comenzando a reír, seguido por el resto de sus amigos, pero todos silenciaron después de unos segundos quedándose totalmente serios.
-ese poder…- dijo Turles poniéndose alerta. -es de…- no terminó de completar su frase cuando una suave y fría voz se escucho detrás de ellos.
-soldado, Lord Freezer lo espera en la sala principal…-indicó Zarbon con arrogancia mirando al comandante con desprecio y recelo. Kakaroto se trago lo que tenía en la boca y se puso de pie.
-¿Qué pasa?- preguntó y los ojos del sirviente de Freezer se abrieron grandes ante esa pregunta, lo miró de arriba hacia abajo unos momentos y luego se giró al frente con orgullo.
-no volveré a repetir la orden…- contestó con ese tono entre presumido e indignado, miró al frente y comenzó a avanzar en dirección al palacio.
-¿Por qué Freezer envía uno de sus hombres para llamarte?- preguntó Hidenori extrañado. –Zarbon no es ningún mensajero… debe ser algo importante como para que ese sujeto te venga a buscar…-añadió y Kakaroto asintió casi inconscientemente.
-tranquilo… la ultima vez también fue Zarbon quien nos mando a traer…- dijo Droxx para que Kakaroto no se preocupara por el asunto, aunque en el fondo sabían que eso, por alguna razón no sonaba bien.
-si, tienes razón… andando…- indicó dando unos pasos dudosos al frente.
-dijo claramente que te estaba esperando a ti… nosotros venimos sobrando…- comentó Broly sin levantarse de su lugar.
-vamos… no me dejen solo… andando…- reiteró su orden y todos se pusieron de pie sin pensarlo mucho, a decir verdad tenían mucha curiosidad, Freezer siempre decía cosas, interesantes. Comenzaron a avanzar por el edificio para adentrarse en el patio que conectaba con el palacio, Zarbon aguardaba en la puerta de la sala, cruzado de brazos y dejando revolotear su capa lila detrás de él. Se sentía la poderosa presencia de Freezer adentro, acompañado por Dodoria, y por supuesto Vegeta.
-seguramente será solo una misión mas…- dijo Kyou confiado cruzándose de brazos.
-si, seguramente, aunque acabo de regresar… no me gusta estar fuera tanto tiempo…-respondió el comandante en voz baja. Llegaron hasta la entrada y Zarbon miró al resto del ejercito d una manera tan amenazadora, que si hubiera podido, los habría exterminado a todos en ese preciso momento.
-mejor… te esperamos aquí afuera… je je…- dijo Turles y Kakaroto asintió con la cabeza sonriendo nervioso ante la imponente mirada del guardaespaldas del emperador. Los chicos esperaron afuera, pero en total y absoluto silencio, esperando poder escuchar algo de lo que le dirían a su comandante ¿Por qué Freezer no quería que ellos escucharan? Kakaroto entró seguido por Zarbon, quien dedicó una leve mirada de reojo al pelotón llena de desprecio y hasta asco. Vegeta estaba cruzado de brazos frente al trono mirando a la entrada de la sala, con el seño fruncido y en una pose que mostraba a la perfección su descontento con tan repentina visita. Freezer estaba sobre su deslizador flotante, cruzado de brazos mostrando en su rostro una retorcida sonrisa llena de maldad, mirando al comandante que se acercaba lentamente. Kakaroto llegó al frente y, como si hubiera estado diseñado para eso, se arrodillo de inmediato ante el emperador, Zarbon tomo su lugar al lado derecho de su amo, las manos de Freezer se juntaron al frente entrelazándose listo para comenzar a hablar.
-soldado Kakaroto… que gusto verlo…- dijo con esa voz entre elegante y pomposa, mientras viajaba su vista recorriendo al muchacho, mirándolo de una manera llena de arrogancia. –Te he llamado para encomendarte una nueva misión… - siguió con su explicación y el joven sobre el suelo asintió levemente con la cabeza, confirmando su idea de lo que se trataba. –Quiero que sometas otro planeta…- agregó haciendo una leve pausa soltando una risita casi imperceptible, Kakaroto alzó la mirada esperando su orden completa. -… necesito que viajes al planeta Tierra…- los ojos del comandante se abrieron al tope al escuchar eso, sin poder disimular su asombro, ¿el planeta Tierra? ¡Imposible! Él era incapaz de dañar el lugar donde creció, y mucho menos se lo daría al tirano más grande del universo ¿como haría algo así? - ¿hay algún problema?- preguntó el Lord al mirar la reacción del chico, Kakaroto negó con la cabeza sin decir nada, y bajó la mirada nuevamente intentando calmar sus pensamientos, y su corazón, pues este se alteró demasiado al escuchar ese nombre. –es un planeta muy rico en recursos, así que me servirá perfecto para el mercadeo, sus habitantes no tienen mucha fuerza, pero el lugar esta muy habitado, así que te doy dos meses para completar la misión, a diferencia de Racgan, en la Tierra cuentan con mayor tecnología, apuesto a que debe haber buenos ingenieros, que quizá nos hagan falta…- explicó Freezer y Kakaroto no terminaba de creérsela, por un lado su corazón sentía una felicidad al imaginar el hecho de que volvería al lugar donde creció, pero esa misma razón lo llenaba de tristeza y nervios, incluso miedo, pues la razón por la que volvería después de tantos años no era otra mas que ir y completar la misión que llevaba de niño, someter a la Tierra, sabía que cualquier planeta que “comerciaba” con Freezer, terminaba por ser destruido cuando los recursos se terminaban, además de que el genocidio entre los hombres de Freezer era muy común, había veces que solo hacían por diversión. Bulma atravesó en sus pensamientos, Oolong, también el maestro Roshi, Krillin por supuesto, Yamsha y Puar, Ox-satan e incluso su hija Milk que vio en una ocasión, Bora y su hijo Upa, el maestro karin, Yajirobe y por qué no, hasta el malvado de Pilaf. Todos ellos se hundirían junto con la Tierra, ¿pero que podía hacer? ¿Negarse ante esa orden? No, definitivamente no podía hacer eso, no tenía mas opción que obedecer.
-como usted ordene Gran Freezer…- acató después de unos segundos en los que solo se dedicó a cerrar el puño impotente. Freezer lo miró incorporarse, pero antes de que el chico se diera la vuelta para marcharse su fina voz volvió a sonar.
-Kakaroto, este trabajo me es de importancia, así que mañana mismo saldrás de Vegita, debes completar la misión lo más pronto posible…- ordenó y el joven saiyajin se frenó en seco, ¿tan pronto? ¿En solo un día estaría en la Tierra? ¿Tanto le urgía apoderarse de ese lugar?
-así será mi Lord…- contestó inclinándose al frente en su dirección Freezer sonrió complacido dedicando una leve mirada a Vegeta, quien solo se dedicaba a observar todo en silencio.
-estaré en contacto contigo soldado, así que sin falta, mañana a primera hora te quiero en ese lugar…- finalizó y se dio la vuelta en su deslizador para abandonar la sala, segundo por sus dos sirvientes, quienes ni siquiera se dignaron a mirar a ninguno de los dos saiyajins.
-adiós… Vegeta…- se despidió Freezer en un tono bastante extraño, como sarcástico y burlón, deteniendo su marcha incluso, cosa que le pareció bastante extraña al príncipe. Zarbon y Dodoria le dedicaron una mirada burlona con falsa sorpresa, para sonreír con orgullo, los tres avanzaron, pero antes de que Zarbon cruzara la puerta se giró a Vegeta para mirarlo en un modo victorioso, como diciéndole he ganado, levantó su mano e indicó adiós con los dedos, Vegeta solo lo miró con odio sin entender su extraño comportamiento, Zarbon alzó una ceja y soltó una risa burlona, mirando de arriba hacía abajo la construcción del palacio por unos segundos, para volver su mirada al príncipe y sin soltar ningún ruido pudo leer en sus labios verdosos que se abrieron y cerraron indicando un ultimo mensaje para Vegeta: “adióóósss”. El príncipe no dijo ni hizo nada mientras Zarbon se mofaba de una manera tan extraña, se giró a Kakaroto y lo miró ahí parado sin reaccionar, y de inmediato acudió hasta el.
-¿Qué pasa?- preguntó Vegeta acercándose a Kakaroto quien clavó su mirada desconcertante y pensativa contra el suelo.
-yo… yo crecí en la Tierra…-susurró y fue cuando el príncipe recordó el día de su llegada, arrastrado por Raditz y Broly desde el planeta al que había sido enviado. En sus ojos se mostró una gran sorpresa, Kakaroto temblaba inconscientemente, mientras miles de emociones y pensamientos corrían por su mente.
-vaya… yo…-las palabras no fluyeron y no pudo completar lo que quería decir, a Vegeta no le importaba en lo absoluto que le pasara al lugar, pero el rostro triste de su amante era el que lo ponía preocupado.
-esta bien… no… no importa…- dijo Kakaroto antes de que Vegeta pudiera decir algo. Caminó con la misma seriedad a la salida, donde su pelotón aguardaba, Vegeta lo siguió, pero en absoluto silencio.
-¿Qué te dijo?- preguntó Broly de inmediato a su comandante en cuanto este estuvo fuera del lugar.
-solo me encomendó una misión…-contestó el chico con voz fría, sin despegar su vista del suelo.
-¿si? ¿Solo eso? ¿Entonces por qué esa cara?- preguntó Kyou extrañado, Kakaroto alzó la mirada al frente pero parecía que sus ojos no miraban nada en realidad.
-… me mando a la Tierra…- agregó el comandante y tanto Broly, Raditz y Droxx se sobresaltaron con la noticia, pues ellos tres eran los únicos que sabían su origen.
-¿hablas… hablas en serio?- preguntó Broly titubeante, imaginando lo que debía sentir su amigo en ese momento, Kakaroto no contestó nada y asintió levemente con la cabeza, no hacía falta que lo hiciera de todos modos la expresión de su rostro describía todo claramente.
-lo… lo siento hermano…- dijo Raditz colocando su mano en el hombro de su comandante a modo de apoyo.
-¿Qué pasa? No entiendo…- comentó Hidenori mirando a los chicos en busca de una respuesta.
-yo crecí ahí…- contestó de inmediato Kakaroto sin mas explicaciones, el resto de los chicos que de igual manera no estaban enterados de eso asintieron con la cabeza comprendiendo el tema.
-Lord Freezer ha abandonado Vegita…-dijo Asim a su príncipe acercándose al grupo rápidamente. La mirada de Droxx se fue sobre ella de inmediato, y en sus mejillas se marcó un rubor que todos podían apreciar.
-bien… no se por qué ha venido solo para eso…- contestó Vegeta sin entender ese comportamiento suyo.
-hola Droxx…- saludó la chica levantando su mano para mover sus finos dedos en el aire dedicándole una sonrisa hermosa y sincera.
-ho… hola Asim…- contestó el chico en un tono nervioso, haciéndolo ver demasiado tonto, ¿se casaría con ella y ni siquiera tenía el valor suficiente para enfrentarla? Kyou lo empujó levemente con el brazo para que este se acercara un poco a ella. Asim tomó la iniciativa y rodeó el brazo de Droxx con su mano.
-¿y que vas a hacer?- preguntó Yoshi a Kakaroto para volver al tema anterior, pero en el fondo era para distraer su mente de tan desagradable escena que estaba frente a sus ojos, no podía evitar sentirse molesto, le gustaba Droxx desde el principio, sabía que no sería para el, pero, ¿debía restregárselo en la cara todo el tiempo?
-pues no tengo opción, debo acatar las ordenes de Freezer aunque no quiera, si me niego no seré capaz de enfrentarlo, él es muy fuerte, no tengo opción…- respondió el joven suspirando levemente.
-¿estarás fuera otro mes?- preguntó Turles pensando en que no les encomendarían ninguna misión nuevamente hasta que su comandante regresara.
-esta vez son dos meses…- contestó y todos quedaron asombrados, eso sonaba a bastante tiempo, y solo significaba que se aburrían de no hacer nada, mas que de entrenar todos los días.
-¿es en serio? Rayos… - dijo Kyou cerrando los ojos fastidiado.
-¿Cuándo planeas irte?- preguntó Turles resoplando un tanto frustrado con la idea.
-Lord Freezer me dejó indicado que debía marcharme mañana mismo, a primera hora…- respondió Kakaroto pensativo.
-¡¿QUÉ?!- gritó Droxx alterándose -¡¿NO ESTARÁS EN MI BODA?!- dijo y Kakaroto sintió como la razón volvía a su cuerpo.
-¡es cierto! ¡Te casas pasado mañana!- contestó Kakaroto sobresaltándose de igual manera moviendo sus dedos desesperados al frente, mientras todos observaban igualmente sorprendidos.
-¡DEBES ESTAR AHÍ! ¡NO ME IMPORTA SI FREEZER TE QUIERE EN LA TIERRA MAÑANA! ¡NO PUEDES FALTAR! ¡ERES COMO UN HERMANO PARA MI!- explicó Droxx sin imaginar como sería si Kakaroto faltara, era algo que simplemente no podía permitir.
-¡¿Por qué justamente tiene que ser ese día?!- dijo Kakaroto en un tono resignado, imaginando que no estaría presente en algo tan importante para Droxx.
-¡NO PUEDES FALTAR! ¡IRAS A MI BODA Y NO ES PREGUNTA!- insistió Droxx con furia. -¡NO TE PUEDES IR! ¡POR FAVOR! ¡QUEDATE! ¡SERÁ SOLO UN DÍA MÁS!- dijo esta vez en un tono mas inclinado a suplica. Kakaroto lo miró sin saber que contestar, era obvio que quería estar en su boda, Droxx era su familia.
-no puedo… son ordenes de Freezer…- contestó el chico bajando la mirada.
-solo será un día mas… si Freezer dice algo diré que ocurrió un improvisto a ultima hora…- soltó Vegeta dejando a todos sumamente sorprendidos, incluso a Kakaroto, quien lo miró sonriente y feliz, pero Vegeta mantenía la rectitud de su postura.
-¡¿en serio?!- preguntó el muchacho entusiasmado sin creérsela, Vegeta lo miró de reojo y asintió con la cabeza dejando salir una leve sonrisa. Kakaroto lo tomó por el rostro sin importarle nada, y depositó un cálido beso sobre sus labios, todos giraron su mirada a otro lado intentando evitar la escena, pero a Broly, cada momento como ese, se le quedaba impregnado en el corazón, apretó los ojos como deseando olvidar la imagen, le dolía demasiado, le dolía y le seguiría doliendo, no esperaba olvidar a Kakaroto incluso si viviera mil años. Lo de Droxx lo tenía superado, en primera ni había sido su idea intentar acercarse a su amigo, debía admitir que si le gustaba, pero este ahora se casaría y sería feliz, cosa que le ayudaba demasiado a evitar la tentaciones que transcurrían por su cuerpo frecuentemente.
-¡genial Droxx! ¡Iré a tu boda!- exclamó el comandante con alegría, Droxx sonrió también mirando a sus amigos y a Asim, aunque de una manera tímida.
-vamos Asim, arreglemos las ultimas cosas con el líder de Pain entonces…- indicó el príncipe llamando a su prima, la chica asintió y antes de marcharse colocó un beso sobre la mejilla de Droxx, logrando que este se pusiera nervioso.
-adiós Droxx… nos vemos mas tarde…- dijo la chica levantando su mano para menear de esa manera coqueta sus finos dedos de mujer.
-ella es muy dulce para ti…- comentó Kyou cuando esta ya estaba lo suficientemente lejos.
-¿de que hablas?- preguntó Droxx en tono molesto regresando a su realidad.
-de que tú necesitas alguien que te domine, alguien firme que te someta…-respondió el chico castaño siendo bastante claro, todos se dieron la vuelta para avanzar al cuartel.
-¡claro que no! ¡Ella es perfecta!- exclamó Droxx defendiéndola, pero por alguna razón, sentía que las palabras de Kyou eran muy ciertas.
-¿alguien más notó que Asim engordó?- preguntó Turles un poco a modo de burla, pero otro poco hablando muy en serio.
-¡HAAAA! ¡YA CÁLLENSE MALDITOS!- gritó Droxx para comenzar una discusión.
Rápidamente el día esperado llegó, todo el pelotón se levantó muy temprano, se asearon y arreglaron más de la cuenta, todos llevaban armaduras con el mismo diseño de hombreras, el mismo tipo y color de licra, usando la negra de manga larga tanto en camisa como en los pantalones. Droxx se peinó más de treintaicinco veces el cabello, para terminar, exactamente igual que al principio, era un saiyajin, sus amigos aun no sabían que resultado esperaba, pero seguía perdiendo el tiempo en el baño que había interno al 318.
-ya quita esa cara de una vez…- susurró Hidenori a Yoshi quien no ocultaba en lo mas mínimo su descontento, frunciendo el ceño y con una expresión que gritaba su enojo, haciendo parecer que odiaba a todo el mundo.
-¿y que quieres? ¿Qué me alegre y salte feliz por todos lados? ¿Qué felicite a la maldita de Asim y les brinde mis buenos deseos?- dijo Yoshi con sarcasmo hablando en voz baja de igual manera, no podía, simplemente no soportaba la idea y la situación.
-si, exactamente eso quiero, que te dejes de tonterías y sonrías de una buena vez… y que le desees felicidad a Droxx, él desde el principio no se notó interesado en ti, tu eras el único que te creaste falsas ilusiones…- contestó el mayor hablando a regañadientes, agachándose a la altura de su amigo, quien estaba sentado en la orilla de la cama.
-¿de parte de quien estas? Esa zorra solo lo esta utilizando…- soltó Yoshi deformando aun mas su rostro por el coraje.
-¿de que rayos estás hablando?-preguntó el otro muchacho mirando de reojo a sus amigos, quienes charlaban muy tranquilamente.
-de que la perra de Asim esta embrazada… y que por supuesto Droxx no sabe nada…- ese comentario hizo que Hidenori se sobresaltara demasiado.
-¿Cómo puedes asegurar eso?- preguntó dudando notablemente de sus palabras, sin poder creer que eso fuera así.
-por favor, lo dicen todos en Vegita, ella esta embarazada, pero el papá de su hijo, quien no es mas que Keget, se murió, y tuvo que buscar al primer idiota que se encargara de ese “asunto”…- explicó en un tono lleno de rabia y enojo.
-no, eso no puede ser cierto…- comenzó a negar con la cabeza, pero no podía dejar de procesar la información, en efecto, parecía que el vientre de Asim estaba cada vez mas abultado, además, la extraña y repentina boda, y él sabía a la perfección que Asim andaba con Keget antes de que este falleciera.
-tu estas mal Yoshi, deja de inventar cosas, lo dices solo porque te duele que él se case…- dijo Hidenori negándose ante la idea, aunque quizá lo que decía su amigo era verdad. Pero Yoshi solía aferrarse a algo, y cuando eso pasaba, hacía hasta lo imposible por conseguirlo, así que Hidenori imaginó que podría ser el caso y que su amigo solo estaba inventando cosas.
-te estoy diciendo la verdad…- insistió el chico apretando la quijada.
-eres un mentiroso, siempre has sido un mentiroso…- aseguró Hidenori ablando con el mismo tono enojado.
-Eso no es verdad… yo jamás te he mentido, y menos a ti… contestó el mas joven perdiendo la paciencia.
-claro que lo haces, ¿Cómo pretender intentar negar todo ahora?- dijo Hidenori recordando las múltiples ocasiones en las que había atrapado a Yoshi en alguna de sus mentiras, pues los dos eran amigos desde que tenían memoria. –Y tengo suficientes razones para pensar que eres un mentiroso- agregó e hizo que su amigo se enojara.
-¿Cómo te atreves a llamarme mentiroso? ¿Acaso crees que solo por celos inventaría algo como eso? Si lo digo es por que quiero evitarle una terrible condena a Droxx…- contestó Yoshi perdiendo un poco el control.
-¿evitarle una condena a Droxx? ¿Acaso piensas intervenir en la boda? ¡No seas imbécil! ¡No te lo permitiré! ¡No harás una cosa así solo por estar celoso!- gritó Hidenori llamando la atención de todos en el lugar. -¡y te llamo así por que eso eres! ¡Eres solo un mentiroso, eso solo son inventos tuyos!- agregó en el mismo tono y Yoshi se levantó iracundo, todos los miraban desconcertados, no sabían de que estaban hablando, pero por sus rostros imaginaron que debía ser algo muy feo.
-¡PUES PIENSA LO QUE QUIERAS! ¡YO SOLO DIGO LA VERDAD!- gritó Yoshi empujando un poco a Hidenori hacía atrás.
-¡no permitiré que arruines este día solo por uno de tus ridículos ataques locura!- agregó Hidenori poniéndose en pose retadora, elevando su Ki e incuso comenzando a formar una bola de energía en su mano.
-¡no diré nada! ¡¿Contento?! – Respondió el más joven caminando a la salida -¡Y TAL VEZ LA ÚNICA MENTIRA QUE HE DICHO ES DECIRTE AMIGO!- finalizó abriéndose paso entre sus compañeros abandonando la habitación a gran velocidad. Esas palabras hirieron a Hidenori, pues sabía que Yoshi era algo voluble, pero lo quería, ahora ellos dos eran los únicos de su raza, pero no solo eso, también se estimaban como hermanos, logrando únicamente que Hidenori se enfureciera aun mas.
-¿Qué paso?- preguntó Droxx saliendo del baño al escuchar los gritos y el poder elevado de sus amigos.
-eso mismo quisiera saber…-dijo Turles mirando, al igual que todos los demás, a Hidenori con los ojos al tope y con rostros confundidos.
-nada… Yoshi pierde el control rápidamente…- contestó Hidenori tranquilamente bajando su Ki lentamente.
-si… eso noté…- comentó Kyou sarcástico mirando a Hidenori extrañado. –La pregunta es que lo hizo explotar…- agregó y el Metirol-niano suspiró intentando contener sus palabras.
-a veces queda atrapado en sus propias mentiras…- respondió a modo de conclusión y se sentó en la orilla de la cama pensativo. Todo el pelotón compartió miradas cómplices, como si supieran a que se refería con su respuesta, decidiendo no decir nada más.
-¿ya Droxx? Ya casi es hora…- dijo Broly desesperado después de otros diez minutos ahí encerrado.
-yo no sé que tanto te haces, nada te va a quitar esa cara de estúpido que tienes…- se burló Kyou recostado en su cama.
-¡cállate idiota!- contestó Droxx desde el baño saliendo finalmente.
-¡wow! ¡Estás exactamente igual que cuando entraste!- dijo Turles burlándose fingiendo sorpresa en sus palabras.
-¡haaa! ¡Mamas Turles!- exclamó Droxx levantando la mano en puño.
-andando insectos…- dijo Vegeta parado al lado de la puerta con su clásica pose de brazos cruzados y su ya conocida cara de pocos amigos.
-¡insecto tu mama hijo de…! – contestó Droxx frenando sus palabras al notar que era el príncipe, pues no se percató de su presencia. -… de tu hermosa madre santa…- agregó con la voz temblorosa pasando saliva nervioso.
-¡vámonos de una vez sabandijas!- Exclamó dándose la vuelta en el pasillo. Todos asintieron siguiéndolo en silencio. –estúpido soldado, ya me las pagaras…- susurró para si mismo mirando a todos los cretinos detrás de él. -¿Dónde esta Kakaroto?- preguntó el príncipe después de unos minutos de camino.
-debe estar en la zona de despegue… dijo que tenía que hablar con el encargado…- contestó Raditz de manera gentil.
-vamos por él…- indicó Vegeta y nadie se atrevió a protestar, avanzando en dirección al patio principal de Vegita.
-¿listos para la exhibición de fuegos artificiales?- preguntó Freezer a sus sirvientes mientras salía por la parte superior de su gigantesca nave. Zarbon y Dodoria levitaban ligeramente sobre la placa que ascendía lentamente, dejándolos apreciar frente a ellos a Vegita, tan brillante, tan lleno de vida, y de asquerosos monos despreciables.
-por supuesto mi Lord, lo esperamos ansiosos…- respondió Zarbon en ese tono lambiscón que tiene al hablar.
-jajaja, esto va a ser divertido…- agregó Dodoria con su manera de ser menos arrastrada, usando un tono burlesco listo para apreciar el show. Finalmente la placa dejó de subir y el gran emperador, que podía sobrevivir en el espacio al igual que sus dos lacayos, se deslizó hasta estar en la orilla de la nave, levantó un dedo y un pequeño y resplandeciente brillo comenzó a generarse en la punta de su oscura uña. La bola creció un poco más y en los labios de Lord Freezer se formó una sonrisa tan llena de satisfacción, que hicieron deformar su cara por la magnitud de esta.
-¿Dónde esta Kakaroto?- se escuchó la voz de Vegeta afuera de la nave donde estaba el muchacho, perdido en sus pensamientos mirando las coordenadas de la tierra sobre el mando de control. Se sobresaltó al escuchar esa voz y de inmediato se dirigió a la puerta asomándose girando la cabeza de un lado a otro.
-¡hey! ¡Estoy aquí!- exclamó el chico levantando el brazo para llamar la atención de sus amigos.
-¡vámonos ya!- dijo Droxx nervioso, Kakaroto sonrió y bajó velozmente la rampa que conducía al suelo.
-sí… tranquilo…- contestó su comandante despeinando la parte frontal del peinado de Droxx.
-¡No Idiota! ¡¿Que hiciste?!- gritó Droxx intentando peinarse con las manos.
-¡jajajajaja! ¡No ves que la mujer tardó mas de una hora peinándose!- se burló Kyou mientras todos reían, pero algo como un chasquido, los silenció de inmediato, ese poder, esa energía, era inmensa, poderosa, increíble. Todos los muchachos se quedaron quietos ante tanto poder, abriendo los ojos asustados, a excepción de Vegeta, quien no entendió su extraña y repentina reacción.
-¿Qué… que es eso?- preguntó Turles con la voz temblorosa, pues ninguno de ellos había sentido tanto poder, era tal que el bello de todo su cuerpo se erizaba y una sensación como truenos recorrían su espalda agitadamente. Más tardó en preguntar que en lo que su respuesta fue contestada, un terrible estruendo agitó el planeta mientras una poderosa e inmensa bola de energía se colapsaba contra el cielo de Vegita, todos miraron asustados la escena, como descendía rápidamente, como no existía manera de detenerla.
-¡¿MALDICIÓN QUE DEMONIOS ES ESO?!- gritó Vegeta al mirar hacía la misma dirección que el resto de los chicos, los cuales no se podían mover dé la impresión estaban petrificados, no sabían que hacer, ¿Qué era eso? ¿De donde salía tanto poder?
-eso… eso nos va a matar a todos…- dijo Raditz mirando como pasaba todo en cámara lenta, observando como la bola solo se hacía mas y mas grande conforme avanzaban los reducidos segundos que les quedaban.
-¡hay que irnos! ¡HAY QUE IRNOS YA!- indicó Kakaroto tomando a Vegeta del brazo para sacarlo de su trance, caminando en dirección a la nave. -¡¿Qué no me escucharon?! ¡Vámonos ya! ¡Esa cosa nos va a aplastar a todos!- reiteró Kakaroto mientras la luz comenzaba a hacerse tan fuerte que era difícil ver algo alrededor, y el ruido era indescriptible. Raditz reaccionó ante las palabras de su hermano y corrió jalando a Turles consigo, de inmediato el restó despertó de su asombro y de igual manera se apresuraron a la nave, realizando esto en escasos mili segundos, entraron a la nave y Kakaroto ya estaba en el mando de control, a nada de presionar el botón de despegue.
-¡Yoshi! ¡No puedo dejarlo! ¡Debo ir por él!- dijo Hidenori frenándose en la puerta y girándose listo para volver, Kakaroto se percató del asunto pero encendió la marcha de la nave aun sin despegar.
-¡no seas idiota!- gritó Kyou intentando detenerlo, pero este se zafó corriendo de regreso al cuartel. -¡maldita sea!- exclamó Kyou parado a un lado de la puerta mirando como ese chico se alejaba, mirándolo por ultima vez.
-Asim… debo… debo ir por ella… - dijo Droxx en el tono mas preocupado y nervioso posible, soltó la pared de metal que sostenía para ayudar a cerrar la puerta y se lanzó rápidamente, Kyou fue lento y no pudo frenar su camino, pero otro lo tomó fuertemente del brazo lanzándolo de regreso a la nave. -¡suéltame debó ir por ella!- gritó Droxx a Broly quien lo sostenía parado a un lado de la puerta, estaba loco, no alcanzaría a llegar a tiempo, la enorme bola ya casi estaba sobre ellos, la tierra temblaba y rugía fragmentándose en pedazos, y a lo lejos el palacio ya estaba hecho añicos, terminarían por morir todos. Droxx intentó zafarse, pero tampoco lo dejaría morir, así que lo golpeó en la cara enviándolo al fondo de la nave. -¡ARRANCA!- gritó indicándole a Kakaroto que lo hiciera, Broly cerró la puerta de inmediato justo en el momento preciso en que el comandante hizo salir la máquina a toda velocidad. Ese vestido blanco que lucía la chica mirándose frente al espejo del palacio era verdaderamente hermoso, se miró al cristal conservando una sonrisa mientras acariciaba su vientre entonando esa canción que le dedicaba al príncipe cuando niño, cerró los ojos para dejar caer una sola lagrima de impotencia y resignación al momento de ser tragada por la igual luz cegadora de la poderosa energía.
-perdón…-fue lo ultimo que logró alcanzar a decir Yoshi cuando Hidenori lo cubría inútilmente con sus brazos como para protegerlo de lo inevitable, fundiéndose en una sola persona mientras llamas consumían sus cuerpos en vida, ardiendo y llenando sus cuerpos de un dolor indescriptible, que al final no duró mucho. La nave pareció suspenderse unos segundos frente al planeta, haciendo como si todo avanzara muy despacio, como para mostrar claramente lo ocurrido, a través del cristal miraron a su planeta hacerse añicos, de una manera literal, partiéndose a la mitad, luego en muchos pedazos, para terminar haciéndose polvo volátil en una explosión que cegaría a cualquiera, pero que a pesar de ello, todos los chicos pudieron apreciar perfectamente la enorme nave de Freezer sobrevolando el lugar, pero no solo la nave, también al mismo emperador presenciando todo. Finalmente el tiempo pareció transcurrir con normalidad nuevamente, dejando ver como avanzaban a una velocidad increíble, dejando solo apreciar la silueta de las estrellas a través de la galaxia.
-¡¡¡NOOOOOOO!!! ¡¡¡NOOOO!!! ¡¡¡NOOOO!!! ¡¡¡NO!!! ¡¡¡ESTO NO PUEDE SER!!!- gritó Vegeta desesperado tirándose al suelo para quedar en sus cuatro miembros. - ¡ESTO ES IMPOSIBLE! ¡ESTO NO ES CIERTO!- definitivamente la idea de que su planeta era ahora añicos era bastante dura, pero no solo para él, todos los presentes estaban horrorizados con lo sucedido, ninguno podía creerlo, sus corazones latían rápido y el bello de su cola asustada estaba erizado, ninguno podía articular palabra, mientras sus ojos no podían ni parpadear, mirando como su príncipe se soltaba en llanto en medio de la sala. Un pensamiento en particular corría por los cerebros de todos, que miraban con desconcierto al frente. Finalmente Droxx cayó en llanto de igual manera, solo que él de una manera menos escandalosa que el príncipe, su cabeza no dejaba de darle vueltas, ¿Cómo era posible eso? ¿Debía ser una terrible pesadilla? ¡Simplemente no podía ser verdad!
-¡¡¡ESE MALDITO FREEZER!!! ¡¡¡ ¿CÓMO PUDO?!!! ¡¡¡ ¿CÓMO DESPUÉS DE TODO LO QUE HICIMOS POR ÉL?!!- exclamó Vegeta furioso apretando los puños en el suelo, todos sin excepción apretaron la quijada, ese bastardo de Freezer, ese sujeto que los sometió y utilizó como animales, ¿Por qué? ¿Esa era su manera de pagar tanto esfuerzo?
-Asim… ella… ella estaba embarazada… ¡NO! ¡NO! ¡NO! ¡¡¡¡MALDICIÓN!!!!- gritó el príncipe golpeando el suelo con los puños. Droxx abrió los ojos grandes con esas palabras, entonces sus lágrimas que corrían por sus mejillas se hicieron mas abundantes, pareció caer en desesperación sintiendo que se quedaba sin aliento, como si alma abandonara su cuerpo, como si la fuerza desapareciera al grado que se deslizó por la pared hasta quedar sentado en el suelo, sus ojos parecían no ver nada, pero sus pensamientos observaban esa sonrisa en sus recuerdos.
-Hide… Hidenori… Yoshi…- susurró Raditz mientras, literalmente, todos dejaban salir su dolor expresado en humedad proveniente de sus cristalizados ojos. Esos dos chicos, que a pesar del poco tiempo de convivir con ellos, los estimaban al grado de considerarlos familia. La imagen del mayor marchándose a toda velocidad en su insistencia de ir por su compañero no abandonaba la mente de ninguno. Literalmente estaban hechos pedazos por dentro, al igual que Vegita, ellos parecían haber desaparecido, pues sus tristes, asustadas, confundidas, furiosas y sorprendidas miradas, no se separaban del suelo.
-¡¡¡FREEZER!!! ¡¡¡MALDITO!!!- gritó Vegeta y se levantó del suelo caminando rápidamente al mando de control. - ¡¡¡ME LAS VAS A PAGAR!!! ¡¡¡TE VOY A MATAR!!!- agregó y comenzó a teclear las coordenadas de Vegita sobre el teclado.
-¡¡¡ ¿QUÉ DEMONIOS ESTÁS HACIENDO?!!!- Kakaroto le jaló las manos intentando detenerlo, pero Vegeta comenzó a forcejear.
-¡¡¡TENEMOS QUE VOLVER!!!- explicó mientras se zafaba forcejeando el agarre de su amigo.
-¡¡¡ ¿QUÉ RAYOS QUIERES?!!! ¡¡¡NO PODEMOS VOLVER ESTAS LOCO!!!- el comandante lo alejó del mando cargándolo literalmente por la espalda.
-¡¡¡SUÉLTAME IDIOTA!!! ¡¡¡FREEZER ME LAS VA A PAGAR!!!- apartó a Kakaroto lanzándolo a un lado para presionar los botones al azar por la desesperación y rabia que consumían su cuerpo en ese momento.
-¡¡¡DETENTE IMBÉCIL!!!- exclamó Kakaroto empujando a Vegeta para apartarlo de mando, el príncipe intentó acercarse de inmediato, pero Kakaroto lo frenó de un golpe en la cara que lo arrojó al suelo, partiéndole el labio y dejándolo sorprendido, pero le sirvió para que un poco de cordura regresara a su cuerpo. Kakaroto se quedó en modo de ataque parado frente a su príncipe que yacía en el suelo, pero una luz roja llamó la atención de todos sobre sus cabezas.
-¡¿QUÉ DEMONIOS ESTA PASANDO?!- preguntó el comandante mirando los números de las coordenadas cambiar sin control en la pantalla. -¡MALDITA SEA VEGETA! ¡¿QUE HICISTE?!- el príncipe no pudo contestar y se puso de pie asustando ante el chillante sonido como de alarma que comenzó a retumbar en todo el lugar. Kakaroto tecleó el botón de reiniciar, pero el sistema estaba trabado, nada servía, y para empeorar la situación la nave comenzó a agitarse, fuertes turbulencias que sacudieron el suelo logrando únicamente que perdieran el equilibrio cayendo al suelo repentinamente. Kakaroto se sostuvo de la mesa del mando mientras las luces del teclado se encendían y se apagaban conforme a las brillantes luces rojas en el techo.
-¡¡¡MALDICIÓN!!!- gritó y en ese mismo momento la nave se agitó tan bruscamente que las luces se apagaron para después rugir fuertemente, las luces volvieron y con ellas la máquina aceleró a máxima velocidad, una velocidad a al que no estaba permitida viajar, sus cuerpos fueron arrastrados por la fuerza hasta una orilla, a través del cristal se podían apreciar las luces de lo que parecían los planetas, pero avanzaban tan rápido que apenas y se notaban unos hilos de luz. El agudo sonido repetitivo no silenciaba y con la fuerza en la que se movían era imposible mantenerse en pie, nuevamente comenzaron las agitaciones y cerraron los ojos esperando su también inesperado final. La nave hizo un estruendo mayor frenando repentinamente como si se hubiese estrellado contra algo, el ruido los ensordeció unos segundos, y una luz inmensa como fuego no los dejó apreciar nada, dando de vueltas agitadamente y mandando a todos a estamparse en las paredes el techo y el suelo sin poder resistirse a la inminente fuerza que se generó por la velocidad. Finalmente se detuvo y fue cuando una suave luz hizo que sus ojos se abrieran y a través del cristal roto y fragmentado pudieron apreciar el paisaje que estaba frente a sus ojos, habían llegado a la Tierra.
-estamos… estamos vivos…- dijo Kyou poniéndose de pie lentamente, herido del brazo por algo que no supo ni que, al igual que sus amigos quienes también habían sido golpeados con locura.
-maldición… ¿Dónde… donde estamos…?- preguntó Turles ayudando a Raditz a ponerse de pie.
-si no me equivoco…. es la Tierra…- contestó Kakaroto tirado en el suelo mirando con un solo ojo el verde pastizal y frondosos arboles que parecían saludar gentilmente desde afuera. Broly se quitó una especie de mueble que le quedó encima y se levantó tambaleante, miró a Krazack entre despierto e inconsciente a un lado y lo levantó colocándolo sobre su hombro.
-¡maldición!- exclamó Vegeta quitándose unos pocos escombros de la espalda y levantándose con algo de dificultad avanzando hacia el teclado del mando de control.
-¿estas bien?- dijo Broly a Kakaroto extendiéndole su mano libre para auxiliar a su amigo. El comandante tomó su mano y se levantó lentamente.
-¡tenemos que volver! ¡MALDITO FREEZER!- el príncipe no dejaba de teclear las coordenadas de Vegita en la pantalla, la cual parpadeaba sacando unas pocas chispas y soltando un sonido bastante extraño. Kakaroto lo miró y soltó a Broly para caminar hasta él.
-¡CÁLMATE DE UNA VEZ!-indicó Kakaroto quitando a Vegeta de en empujón.
-¡¿NO ENTIENDES?! ¡TIENE QUE PAGAR LO QUE NOS HIZO! ¡DEBO VOLVER! ¡LO MATARÉ! – gritó nuevamente aferrándose a su idea, pero nuevamente Kakaroto lo golpeó en la cara, con el puño cerrado, con todas su fuerzas, mandándolo contra el suelo otra vez, como si el golpe anterior no le hubiera quedado claro. Vegeta abrió los ojos sorprendido, pero enojado, el comandante apretó los puños con fuerza a los lados y frunció el seño bastante molesto.
-¡EL QUE NO ENTIENDE ERES TU! ¡VEGITA YA NO EXISTE! ¡¿A DÓNDE DEMONIOS PIENSAS VOLVER?!- explicó el chico golpeando con una mano la pantalla de la nave, para terminar de quebrarla en mil pedazos, en un tono de voz que jamás había sonado en él.- ¡¿ERES IMBÉCIL O QUE?! ¡ENTIENDO QUE ESTÉS MOLESTO, PERO NO ERES EL ÚNICO!- prosiguió señalando a sus amigos estirando su brazo a un lado, mientras Vegeta solo lo miraba asustado colocando su mano sobre su mejilla izquierda, donde había recibido ya dos fuertes golpes. -¡ADEMÁS ¿QUÉ? ¿PIENSAS QUE PUEDES MATAR A FREEZER?!- añadió y el príncipe se puso de pie frunciendo el seño para borrar esa imagen infantil de su rostro.
-¡ESE MALDITO TIENE QUE PAGAR!- gritó enfurecido apretando los dientes con furia, poniéndose en pose retadora.
-¡¿Y QUE PLANEAS?! ¡¿IRTE VOLANDO HASTA EL ESPACIO?! ¡¿ACASO PUEDES SOBREVIVIR SIN OXIGENO?!- preguntó el comandante alzando las manos hacía arriba en tono sarcástico que hizo enfurecer más a Vegeta y que dejó sorprendidos a sus amigos. El príncipe apretó la quijada al grado que se escuchó el rechinido de sus dientes, pero no dijo nada más. – ¡tenemos que esperar… tenemos que esperar si queremos que pague…!- finalizó el comandante y de un salto bajó de la nave para reunirse con sus amigos. Pasaron alrededor de veinte minutos en los que permanecieron en silencio, los siete chicos del pelotón estaban sentados sobre el suelo a unos pocos metros de la nave, pero Vegeta seguía en ella sentado entre los escombros.
-¿y ahora que?- preguntó Broly a su comandante al notar que sus lagrimas ya habían dejado de salir de sus ojos silenciosamente.
-pues… no lo se…- contestó suspirando pensando en que debían hacer ahora.
-¿Por qué? ¿Por qué Vegita?- preguntó Raditz abrazado a Turles quien solo se dedicaba a acariciarle su melenuda cabellera. Kyou y Krazack estaban tranquilos, pues en primera, ni era su planeta, y en segunda ya habían pasado por una situación así en una ocasión.
-¿Por qué a los saiyajins?- preguntó Droxx aun sin reaccionar bien.
-por que Freezer nos temía…- contestó Vegeta bajando de la nave parándose firmemente a un lado del grupo.
-¿a que te refieres?- dijo Broly extrañado ante sus palabras.
-habla del súper saiyajin…- contestó Kakaroto en un tono bastante serio.
-¿del súper saiyajin? Eso es solo un cuento…-comentó Turles en un tono frustrado, sin saber porque hablaban de algo considerado un cuento para niños en un momento tan serio. –Lo inventaron para intimidar otras razas…- agregó en el mismo tono frío y hasta cierto punto cruel.
-si lo crees así, ¿entonces cual es tu explicación?- dijo Vegeta en un tono prepotente, el chico tenía la idea de que siempre debía tener la razón ante todo.
-por que Freezer ama joder a todo ser vivo…- contestó el joven incorporándose lentamente a manera defensiva.
-Vegeta tiene razón…-intervino la voz de Kakaroto llamando la vista de todos. –Freezer temió de nuestra fuerza… por eso eliminó a Vegita…- dijo confiado de si mismo y apretó los puños impotente. –El súper saiyajin debe ser cierto… ¿Por qué otra cosa haría algo como eso?- aseguró e inconscientemente miró a Broly, estaba seguro que ese chico pareció haber estado cerca del guerrero dorado, y si era así, entonces había una oportunidad de sobrevivir.
-Kakaroto tiene razón… a pesar de convertirnos en Ozaru con la luz de la luna, tenemos la habilidad de incrementar nuestra fuerza hasta niveles absolutos… un poder tan grande que incluso supera la fuerza de Freezer…- explicó el príncipe ilusionado.
-¿y como alcanzamos esa fuerza? ¡Tardaremos años para lograr tan infinito poder!- dijo Raditz poniéndose de pie demasiado alterado.
-no nos queda más que entrenar, entrenar duro… es la única manera de volvernos más fuertes…- contestó el comandante con un leve entusiasmo en su voz.
-¿en verdad piensas que podríamos alcanzar el poder suficiente como para destruir a Freezer?- preguntó Droxx incrédulo, la energía de poder que sintió en Vegita era totalmente increíble.
-pues Freezer tiene un gran poder…pero si luchamos juntos tal vez…- contestó Broly pero Vegeta lo interrumpió.
-Freezer es más fuerte de lo que creen…-comentó y todos pararon sus pensamientos para mirarlo sorprendidos. –Freezer puede cambiar su apariencia para elevar su energía, al parecer pasa por una transformación que le permite elevar todo su poder…- explicó y todos, a excepción de Kakaroto que ya lo sabía, quedaron boquiabiertos, si ya Freezer contenía un nivel de pelea altísimo, debía ser un monstruo al transformarse.
-entonces… ¿Cómo rayos pretenden que lo matemos?- preguntó Droxx volviendo a lo mismo.
-¡pues con mucho esfuerzo! ¡Y con mucho entrenamiento!- contestó Kakaroto agresivamente. Todos sus compañeros asintieron con rostros duros, con la idea de que realmente, un día podrían exterminar al emperador. -¡no importa que pase! ¡Vengaremos la muerte de Yoshi y Hidenori, de los saiyajins, de todos los pueblos sometidos, de las múltiples razas asesinadas, recataremos nuestro orgullo!- exclamó decidido, haciendo que sus palabras llenaran de confianza a sus amigos. Todo parecía seriamente, pero Droxx se encargó de apagar el momento tan lleno de pasión por su causa.
-¿y que? ¿Cómo pretendemos ir a buscarlo? ¡No tenemos nave!- exclamó y todos borraron esa sonrisa y seguridad de sus rostros.
-pues…-dijo Kakaroto sin saber una respuesta viendo como sus esperanzas se desplomaban hasta el suelo.
-muy fácil soldado…-dijo Vegeta recuperando el aplomo y seriedad con la que siempre cargaba. –Según Freezer, Kakaroto estaba aquí en la tierra desde ayer…- todos abrieron los ojos recordando eso de inmediato.
-¡es cierto! ¡¿Qué carajo?! ¡¿Quería que te salvaras?!- preguntó Droxx a su comandante lleno de una especie de rabia y celos.
-al parecer Freezer vio algo en Kakaroto…-contestó Vegeta continuando con su explicación. –sea la que sea la razón por la que decidió que Kakaroto viviera nos ha convenido totalmente, Freezer tendrá que venir…- agregó y todos comprendieron su plan. –Te dio dos meses para que terminaras con este planeta, entrenaremos en ese tiempo, y cuando llegue el día y venga por ti, entonces nosotros atacaremos…- se dirigió a Kakaroto y este quedó pensativo unos momentos.
-en realidad Freezer no vendrá en dos meses, me dio dos meses para terminar con el trabajo, pero el no viene en cuanto esta finalizado, manda a un grupo de colonizadores para terminar todo, Freezer llega a inspeccionar el trabajo meses después, en Racgan me dio un mes para finalizarlo, pero el iría al paneta hasta cinco meses después de eso…- dijo Kakaroto y todos se quedaron pensativos nuevamente.
-¿y no hay manera de que nos quedemos aquí hasta que él llegue? Así tendríamos más tiempo…- dijo Kyou en un tono algo dudoso, pero con una idea bastante buena.
-tal vez si se lo pido…- susurró el comandante pensando paso por paso las cosas.
-eso quiere decir, ¿Qué a pesar de todo piensas someter a la tierra?- pregunto Turles con seriedad, realmente no estaba convencido aun con la idea, pero no tenía mas opción que aceptar sus planes, igual terminaría por hundirse con ellos.
-por supuesto que no, pero Freezer creerá que si, entonces le pediré que me deje a cargo de la colonización, ni siquiera se imagina lo que le espera…- contestó y el plan ya sonaba más lógico y mas solido, dando un poco de seguridad al grupo, quien asintió con dureza poniéndose rectos y firmes ante la situación.
-tengo hambre…- dijo Droxx arruinando una vez mas la atmosfera del asunto. Todos giraron sus miradas hacía el en forma de regaño.
-pero a decir verdad… yo también muero de hambre…- agregó Kakaroto tomando su estomago que rugió justo en ese momento. Todos bajaron la mirada con resignación y respiraron profundo. Broly comenzó a buscar algo entre su ropa sacando cuatro habichuelas.
-¡ho! ¡Comida, genial es mía!- dijo Droxx y las tomó de su mano echándoselas a la boca de inmediato.
-¡NO IMBÉCIL! ¡ESOS SON SAIBANMAN!- gritó Broly muy tarde pues Droxx ya se las había pasado.
-¡¿POR QUÉ DEMONIOS NO ME LO DIJISTE ANTES?!- contestó sacando la lengua asustado.
-¡¿TU POR QUÉ CARAJO HACES ESAS COSAS?!- respondió Broly enfadado sin saber que hacer.
-¡ESCÚPELAS PEDAZO DE IDIOTA! ¡¿NO SABES LO QUE TE PUEDE HACER?!- exclamó Vegeta dándole un zape como en la cabeza para que las sacara, tan fuerte que lo envió a ponerse de rodillas al suelo.
-¡NO, NO SE!- contestó en chico desesperado de rodillas.
-¡COMO ERES ESTÚPIDO!- gritó Vegeta y se colocó detrás de el para empezar a hacer contracciones en el estomago, pero parecía no funcionar.
-¡HAY! ¡PINCHE DROXX, YO NO SE COMO ESTAS TAN TARADO!- explotó Broly acercando a los dos. – ¡Déjame a mi!- pidió el chico mas alto y Vegeta se quitó rápidamente, pues sabía de sobra que Broly era mas fuerte. Lo tomó con fuerza por debajo de las costillas y en un movimiento lleno de fuerza en donde casi le rompe la espalda, finalmente las saco, a ellas y a algo que al parecer era su desayuno.
-¡MIERDA! ¡¿QUERÍAS SACARME LA CENA DE AYER O QUE?! ¡CASI ME MUERO!- se quejó Droxx con sus cuatro extremidades sobre el piso.
-¡CASI TE MUERES POR ESAS COSAS!- replicó Vegeta y en ese momento las cuatro semillas se transformaron en personitas verdes y feas.
-¡carajo! ¡Eso iba a dolerme!- exclamó el chico impresionado.
-¿y para que habías sacado las semillas Broly? ¡No ves que a Droxx le falta el cerebro!- dijo Kakaroto negando con la cabeza.
-¡oye! ¡Estoy aquí!- comentó Droxx levantándose pero fue ignorado.
-por que quería que nos ayudaran, ya sabes a “encontrar” un lugar donde quedarnos…- explicó el chico y Kakaroto negó con la cabeza.
-no mataremos a ningún terrícola…- dijo y en una estela de luz exterminó a los cuatro sujetitos.
-¡al menos hubieras dejado que me los comiera a ellos!- exclamó Droxx a su amigo, pero este solo torció los ojos sonriendo ligeramente.
-no tengo una idea…- comentó Kakaroto buscando alrededor con la vista. –Creo que existe alguien que nos puede ayudar en todo esto…- agregó formando una sonrisa en su rostro.
-ho cierto, que vivías aquí… y ¿Qué? ¿Conoces algún restaurante chungón o algo así?- preguntó Droxx en un tono tan bromista y natural que hacia imposible de creer que acababa de perder a su amada, el día de su boda.
-no Droxx…- contestó resoplando volviendo a su seriedad para concentrarse.
-tal vez busca a algún familiar… o amigo…- comentó Kyou a Droxx en un tono más bajo.
-así es…- respondió Kakaroto sonriendo levemente. –y ya se donde están…- agregó fijo en el horizonte.
-¿es tu abuelito?- preguntó Droxx cuando su comandante comenzó a caminar, pues lo había escuchado hablar de él en varias ocasiones.
-no, mi abuelito murió mucho antes de que Raditz viniera por mí…- contestó el chico evitando la parte de que había sido él, quien terminó con su vida accidentalmente.
-ho vaya, ¿fue el quien te puso el otro nombre?- dijo y Kakaroto sonrió de lado recordando todo.
-si, el me recibió como su familia, como era bebé no tenía uno, así que me puso Son Goku…- respondió el chico con orgullo al mencionar ese nombre.
-¿Son? ¿Tenias dos nombres?- preguntó el muchacho mientras el resto solo escuchaban atentos.
-no, Son era lo que marcaba su linaje, mi abuelito se llamaba Son Gohan, y me heredó su apellido…- respondió bastante feliz, dedicándole a su amigo una sonrisa.
-¿Gohan? ¡Vaya! ¡Que bonito nombre!- Exclamó Droxx feliz y todos alzaron el vuelo en ese momento.
-¿entonces a donde vamos?- preguntó Kyou siguiendo a su comandante que avanzaba en punta.
-con unos amigos, estoy seguro que podrán ayudarnos…- contestó percibiendo su Ki, que a pesar de tantos años, seguía reconociendo.
-oye Droxx… ven…- dijo Broly a su compañero en voz baja, este asintió y ambos fueron a la parte final del grupo bajando un poco la velocidad.
-¿Qué pasa?- preguntó el chico en voz baja.
-¿Qué rayos contigo? Te vez… feliz…- dijo y Droxx lo miró extrañado.
-¿y que no debería estarlo?- respondió el chico sonriendo y abriendo mucho los ojos.
-pues no, acaban de eliminar nuestro planeta, a nuestros amigos, y encima, a ti te dejaron viudo antes de serlo…- contestó sintiendo incluso mas pena que Droxx.
-si, me duele lo de Vegita, como no tienes idea, y por supuesto que me enoja y entristece lo de nuestros hermanos, pero eso ultimo, dios, gracias al cielo que me impediste ir por ella, habría muerto por alguien que no valía la pena…- dijo tan seguro de si mismo que dejó sorprendido a su compañero, ¿Cómo era posible que pudiera pensar así?
-¿hablas en serio? ¿Tanto te molesto que estuviera embarazada?- preguntó atónito ante la manera de pensar de su amigo, Droxx podía ser un tonto, retrasado, idiota, imbécil, tarado, pero nunca un maldito infeliz patán, solía ser fiel a sus pensamientos.
-si, la verdad es que si, eso y otras ideas que rondan por mi mente…- respondió y se formó una sonrisa en sus labios. –Creo que Lord Freezer me hizo un gran favor…- Broly comenzó a negar con la cabeza ante esas palabras sin poder creer que las estuviera diciendo su amigo, era sumamente imposible. Droxx se giró al frente y avanzó más rápido para tomar su anterior posición al lado de Kyou, dejando a Broly extrañado y sorprendido en la parte de atrás. Finalmente a lo lejos comenzó a dibujarse una ciudad, con edificios y autos volando, todos miraron sorprendidos el gran lugar, pero Kakaroto no frenó su camino ahí, prosiguió avanzando hasta llegar un poco afuera de la ciudad, descendiendo lentamente. Debajo había una especie de cuadrilátero, con gradas en las orillas y mucha pero mucha gente, descendieron un poco retirados del lugar, para que nadie pudiera verlos llegar volando.
-¿Dónde estamos?- preguntó Droxx a su comandante quien avanzó muy seguro y sonriente a la entrada.
-es un torneo de artes marciales…- contestó sin dejar de sonreír y sin quitar la mirada de la puerta del lugar.
-¿y eso que es?- preguntó Raditz mirando como la gente pasaba a su alrededor con tranquilidad.
-es un lugar donde la gente demuestra que tan fuerte es enfrentándose entre ellos mismos…- respondió Kakaroto caminando en paso firme.
-¿y tus amigos están aquí?- preguntó Broly extrañado escaneando rápidamente el poder de todos los presentes.
-si, así parece, ellos eran grandes guerreros, pero lo mejor es que están todos juntos… -contestó y finalmente llegaron a la entrada, sobre el gran arco de la puerta principal había un letrero con grandes letras sobre el, las cuales ninguno de sus amigos entendieron.
-¿y esos rayones que son?- preguntó Droxx quedándose fijo en ellas.
-es la escritura de aquí, ahí dice… “El 23° Torneo De Las Artes Marciales”- leyó Kakaroto en voz alta y sus amigos asintieron con la cabeza muy emocionados. Entraron rápidamente y un sujeto se les quedó mirando fijamente.
-¡oigan ustedes! ¡Grandulones! ¡¿No van a inscribirse al torneo?!- preguntó y todos voltearon a verlo.
-¿al torneo?- preguntó Droxx interesado mirando como entrenaban unos sujetos y como otros tantos realizaban múltiples ejercicios en los pasillos. -¡si, si quiero!- dijo entusiasmando caminando al tipo.
-¡no, no quieres!- dijo Kakaroto frenando su marcha.
-¿Qué? ¿Por qué no? ¡Son todos unos debiluchos! ¡Terminare con ellos en cuestión de segundos!- explicó el chico sonriente.
-¡por eso mismo no iras! ¡Aquí no es de matar, solo debes sacarlos del cuadrilátero o dejarlos fuera de combate!- explicó el comandante seriamente.
-¿ya has estado en uno?- preguntó Broly interesado en su gran explicación.
-si, a decir verdad estuve en el 21° Torneo De Artes Marciales, vine con Krillin después de entrenar muy duro con el maestro Roshi en la escuela de la Tortuga…- contestó muy feliz avanzando mas al fondo.
-¡por favor! ¡Déjame entrar!- insistió el chico loco jalando a su amigo del brazo como un niñito.
-¡que no!, no veníamos a eso…- respondió sintiendo un Ki conocido demasiado cerca.
-¡sería como un entrenamiento!- agregó Droxx y sus amigos rieron sarcásticamente.
-estos sujetos son tan débiles que no sirven ni para el calentamiento…- comentó Vegeta mirando a todos de una manera despreciable.
-Kakaroto…- llamó Broly seriamente.
-¿Qué pasa?- preguntó el muchacho mirando hacia las gradas.
-ya se te escapó…- soltó y de inmediato el comandante se giró enfurecido a las mesas de inscripción, donde Droxx ya estaba escribiendo su nombre, en otra simbología, pero a los sujetos no pareció importarles, solo le preguntaron como se pronunciaba eso.
-¡DROXX! ¡TE DIJE QUE NO!- gritó el muchacho llegando hasta su amigo.
-¡no seas mujer! ¡Anda, mejor vuélveme a explicar todo que ya va a empezar!- respondió el chico dando palmaditas en la espalda de Kakaroto bastante sonriente. Su amigo resopló cansado y asintió con la cabeza caminando al fondo del lugar. Una chica de cabellos del agua del mar estaba parada mirando fijamente el centro del lugar, esa chica que se aparecía en sus extrañas alucinaciones, era ella.
-¡¡Bulma!!- gritó Kakaroto emocionado caminando hasta ella rápidamente. La chica, que iba acompañada de un joven muchacho, un gato volador y un anciano, se giró ante el llamado del chico.
-¡Bula eres tú!- exclamó el saiyajin deteniendo su marcha hasta estar frente a ella.
-¿Quién eres tú?- preguntó la mujer ladeando la cabeza como para pensar.
-¡¿no me reconoces?!- dijo el chico sorprendido. Bulma lo miró de arriba hacía abajo, y como flashazos la imagen del pequeño niño del báculo rojo apareció en sus pensamientos.
-¡¡¡GOKU!!!- gritó emocionada y se lanzó a los brazos del muchacho apretándolo contra ella sonriendo alegremente. Pero su sonrisa se desvaneció de inmediato y se separó de él para mirarlo seriamente.
-¡GOKU!- volvió a gritar pero esta vez enojada frunciendo el ceño.
-¿Qué pasa?- preguntó el chico al ver la furia en sus ojos.
-¡¿te dejo unos momentos y te desapareces diez años?!- gritó inflando sus mejillas y pisando el suelo con furia.
-este… bueno… yo…- contestó chocando los dedos de sus manos.
-¡¿en verdad eres Goku?!- preguntó el anciano con una concha enorme en la espalda.
-¡Maestro Roshi! ¡Que gusto verlo!- exclamó el joven sobresaltándose.
-¡vaya Goku! ¡Has crecido mucho!- comentó el chico parado a un lado.
-¡¿Yamcha?! ¡wow! ¡Has cambiado mucho! ¡Y también eres mas fuerte!- dijo Kakaroto sorprendido, el Maestro Roshi se le quedó mirando seriamente, como buscando algo de él.
-realmente eres Goku, ¿Dónde estuviste todos estos años? Te estuvimos buscando, creímos que habías muerto…- dijo el anciano cruzando sus manos detrás de su espalda.
-pues no, en realidad mi hermano vino por mí y tuve que irme sin la oportunidad de despedirme…- explicó Kakaroto y todos lo miraron sorprendidos.
-sabía que no habías muerto… no pudimos revivirte con las esferas… Shen-Long dijo que estabas fuera de sus posibilidades…- escuchó una voz de joven detrás de él, una voz que sin dudar podo reconocer.
-¡¡¡KRILLIN!!!- gritó girándose hacia él, fue inevitable no abrazarse, realmente ellos fueron un día los mejores amigos.
-¡¿donde te metiste Goku?!- preguntó el chico calvo con ese traje naranja aun.
-¡volví a mi planeta!- contestó casi sin importancia en el tema, estaba sumamente emocionado.
-¡¿a tu planeta?! ¡¿De que rayos estas hablando?!- preguntó el calvito mirándolo de arriba abajo.
-bueno, es que yo en realidad no soy terrícola, yo vengo de una raza llamada Saiyajin…- contestó y todos abrieron los ojos al tope sorprendidos.
-¡¿es en serio?! ¡Ya decía yo que tener cola no era normal!- dijo Krillin notando la enroscada cola de sus compañeros en su cintura.
-jajajaja… si ahora lo se…- contestó rascándose la cabeza nervioso.
-¡vaya Goku! ¡No has cambiado en nada!- comentó Krillin sonriendo a mas no poder. -¡nos hiciste mucha falta! ¡No sabes por todo lo que tuvimos que pasar!- dijo el chico conservando su sonrisa todavía.
-¡en verdad lo siento! ¡Pero veo que te has vuelto mucho mas fuerte!- exclamó Goku (wi al fin) en un tono bastante alegre.
-¡si, en realidad he estado entrenando con Kamisama! ¡Debo hacerme fuerte para derrotar al demonio Piccolo Daimaku!- explicó Krillin diciendo eso ultimo en un tono fuerte, como si se enfureciera con solo pensar en ello.
-¡¿en serio?! ¡Genial!- dijo emocionado al escuchar sus palabras.
-¡no es para alegrarse! Me enfrente a él hace un año, pero no pude derrotarlo, era bastante fuerte, estuvimos en mucho peligro, pero logramos escapar antes de que acabara con nosotros, afortunadamente lo dejamos mal herido, y hasta ahora no ha vuelto a atacar, pero sabes que solo se ha estado haciendo más fuerte.
-¡eso suena perfecto!- respondió Goku emocionado, imaginando que sería el rival perfecto para sus entrenamientos.
-¡No creas que será un rival fácil! ¡Puedo sentir que eres muy fuerte, tu poder me sorprende, pero ese malvado demonio es muy poderoso!- dijo Krillin y entre los saiyajins hubo sonrisas sarcásticas, pues no entendían como el chico podía decir que Kakaroto era muy fuerte, si para ellos llevaban oculto su Ki casi al cero. Goku notó lo mismo que sus amigos, pero decidió no decir nada acerca de eso.
-¿de donde ha salido ese poderoso demonio?- preguntó el saiyan intrigado por los relatos de su amigo.
-es la parte mala de Kamisama, su cuerpo lo expulso cuando se volvió el dios de la Tierra, pero fue liberado por error por Pilaf, y ahora quiere dominar el mundo con su ejército de terribles monstruos- explicó y Kakaroto no pudo ocultar su felicidad sonriendo aun más emocionado.
-¡esto será genial!- comentó y detrás de él sintió una presencia, relativamente, mas grande respectó a otras.
-Krillin, ¿Qué esta pasando aquí?- preguntó un chico pelón con tres ojos sobre la cara, que estaba sumamente sorprendido con el poder de los guerreros del espacio, pues aunque también llevaban su energía en lo mínimo, era considerablemente más alta que la de todos los terrícolas.
-¡Tien! ¡Mira él es Goku!- contestó el calvito alegremente. El muchacho de tres ojos se colocó hasta estar frente a Kakaroto, seguido por un extraño niño volador.
-¡haaa! ¡Un pinche fantasma!- gritó Droxx señalando al niño de rojas mejillas.
-¡no! Tranquilo, él es Tien-Shin-han, y el pequeño es Chaoz, los conocí hace un tiempo, eran discípulos rivales del Maestro Roshi, pero terminamos por ser buenos amigos…- dijo Krillin riendo ante la expresión asustada del chico de largas patillas.
-así que tu eres Goku, es un gusto conocerte, el maestro me ha hablado mucho sobre ti…- dijo Tien en un tono serio y respetuoso, pero sin bajar la guardia mirando de manera desconfiada a los ahí presentes.
-¡un gusto!- contestó Goku sonriendo ampliamente.
-Goku, ¿te has inscrito en el torneo?- preguntó Krillin en cuanto el anunciador voceó la primera llamada.
-no, pero mi amigo si…- dijo pasando al frente a Droxx.
-¿vas a luchar? ¿No eres muy joven? Esto puede ser peligroso- comentó Tien mirando a Droxx, quien por llevar el nivel de pelea oculto, su musculatura no se veía tan notable como la de Tien.
-emm… es mas grande que yo…- susurró Kakaroto y Krillin lo miró sorprendido.
-¿es en serio?- preguntó el calvito sin creérsela.
-si, soy siete años mayor…- contestó Droxx ablando entre dientes algo furioso.
-¡¿Queee?!- dijeron al mismo tiempo Krillin, Tien, Chaoz y Bulma, quien estaba atenta a la conversación.
-¡te ves mucho más joven!- dijo ella mirándolo atentamente. –y atractivo…- agregó eso ultimo en un tono mas bajo, pero Yamcha la miró de reojo un tano amenazante.
-¡vaya! ¡Entonces no habrá problema en nuestro enfrentamiento! – dijo Tien hablando de manera confiada y sonriente.
-¡¿peleare contra ti?! Pero si solo tienes como setenta unidades por mucho…- respondió Droxx en un tono un poco desilusionado.
-no te confíes, no tendré compasión por nadie…-advirtió Tien y Droxx se giró a Kakaroto algo enojado.
-¿Por qué él no puede tener piedad y yo si?- preguntó a modo de reproche señalando al tres ojitos.
-Droxx, por que el poder de Tien esta por debajo de los cien, al igual que el resto de los presentes, pero el tuyo esta mas allá de los 30000, ¿Cómo pretendes no frenarte ate eso?- lo regaño el comandante y Droxx se puso pensativo.
-entonces ¿Qué debo hacer?- dijo y Kakaroto suspiró al notar que Droxx no había puesto atención a nada.
-no los mates, no lances poderes de energía, no vueles, solo golpéalos, pero despacio, e intenta que salgan del cuadrilátero, o que pierdan el conocimiento… ¡sin morir!- recalcó eso ultimó y Droxx asintió con la cabeza repitiendo las instrucciones en voz baja. Anunciaron la segunda llamada y un Ki, que los guerreros del espacio, llegaron a considerar, levemente mayor al de todos, se apareció en el escenario. Krillin y el resto se alteraron repentinamente con esa presencia, buscando de inmediato en el cielo. Una figura alienígena se apareció descendiendo del cielo como si nada, su piel era verde y su cara daba miedo.
-¡vaya! ¡Este es el desfile de especies ¿o que?!- dijo Turles cansado mirando al tipo avanzar en dirección a ellos.
-¡¿un Namekusei?! ¡¿Qué hace aquí un tipo de esos?!- preguntó Raditz con enfado bastante chocado.
-¿un que?- preguntó Tien mientras se ponía a la defensiva.
-un Namekusei, son una estúpida especie debilucha e inservible que queda en la galaxia del sur en 367492X 027471Y, a 2738X 87308Y del planeta Freezer número 35…- contestó Raditz, pero ninguno de los terrícolas pareció entender.
-ósea ¿Qué? ¿Están diciendo que también es un extraterrestre?- preguntó Krillin sorprendido.
-si, fuimos a su planeta hace como ocho años, un asco, son una bola de inútiles, tienen poderes de 1000 unidades, solo el Gran Patriarca nos fue útil, por eso decidimos perdonarle la vida a su raza…- respondió Turles despreocupado cruzándose de brazos.
-¿entonces Piccolo es un alíen? Eso explica el aspecto…- dijo Yamcha colocándose también en modo defensivo.
-espera, ¿ese es Piccolo? ¿Me estas diciendo que el “demonio malvado” es ese Namekusei inútil que es incluso el doble de débil que los de su planeta natal?- preguntó Droxx y las esperanzas de Kakaroto y del resto del equipo por entrenar con ese esperado guerrero, se fueron al suelo.
-¡que decepción!- exclamó Kakaroto rascando su mejilla pensativo.
-¡¿pero de que rayos estas hablando Goku?! ¡¿Quieres decir que Piccolo no es nada fuerte?! ¡Pero si supera los poderes de todos ustedes!- dijo Krillin y todos rieron sarcásticos al mismo tiempo.
-no seas ingenuo sabandija, nosotros somos guerreros saiyajins, nuestro poder supera el de cualquiera, un inútil insecto como ese sujeto no se compara en lo absoluto con nuestra fuerza…- respondió Vegeta en tono altanero, como de costumbre, sin siquiera descruzar los brazos. Piccolo llegó finalmente hasta donde se encontraban los chicos y se los miró fijamente, pero en especial se quedó fijo en Krillin, pues este era su actual rival.
-he venido a hacer las cosas a su modo, los venceré en este absurdo torneo, y después de eso terminaré contigo finalmente…-advirtió a Krillin y este tembló sin poder evitarlo.
-¿Por qué el si puede terminar con ellos y yo no?- preguntó Droxx quitándole seriedad al asunto nuevamente.
-cállate idiota…- indicó Broly dándole un leve golpe en la cabeza.
-finalmente conquistare el planeta…- agregó el tipo verde sin quitarle seriedad al asunto.
-eso dicen todos…- dijo Kyou burlándose recordando cuando el mismo llegaba a “conquistar planteas”.
-¡no te lo permitiré!- contestó Krillin hasta cierto punto muy confiado, pues por alguna razón sentía que él, ya no tendría que luchar mas.
-sí, bueno, me encanta su conversación escalofriante, pero ¿no van a ir a pelear o algo así?- dijo Kyou pues el locutor acababa de anunciar la tercera llamada. Piccolo se marchó y Krillin junto con Yamsha, Tien y Chaoz avanzaron rápidamente a la pista. Droxx avanzó después de ellos repitiendo en voz baja lo que le dijo su amigo. Comenzaron a vocear las parejas que pasarían a luchar primero, y Droxx tenía la primera batalla. El locutor les indicó que debían subir al cuadrilátero y el chico obedeció en seguida.
-¡no olvides lo que te dije!- reiteró Kakaroto nervioso.
-¡matar a todos! ¡No lo olvidaré!- respondió el chico alzando un pulgar.
-¡DROXX!- gritó enfurecido su amigo mientras todos negaban sorprendidos.
-¡jajajajaja! ¡Es broma tranquilo!- aclaró mientras el voceador indicaba el comienzo de la pelea. Enfrente del saiyajin había un tipo cualquiera de cuerpo demasiado voluminoso para su obsoleto poder de treinta, se arrojó contra Droxx quien lo detuvo con su dedo de la frente, el sujeto intentó quitarse la mano de su cabeza, pero el movimiento del saiyajin era tan rápido al evitarlo, que los golpes que lanzaba hacía este, hacían parecer que lo atravesaba.
-¿ahora tengo que sacarlo de la plataforma?- preguntó a Kakaroto de manera despreocupada, mientras todos presenciaban sorprendidos la escena. Su amigo asintió con la cabeza y Droxx le dio un muy ligero zape en la frente que lo mando a volar a un lado estampándose contra el piso.
-¿Cuándo esta afuera ya puedo matarlo?- preguntó nuevamente apuntando con la palma de su mano al sujeto inconsciente sobre el suelo. Kakaroto negó repetidas veces a su amigo haciendo ademanes con las manos. El voceador anunció su victoria y Droxx bajó nuevamente para reunirse con el resto de los chicos, que lo felicitaron muy sorprendidos. Las batallas fueron avanzando, hasta que finalmente quedaron Droxx, Krillin, Tien, Piccolo, Yamcha y una guerrera anónima. Los siguientes en pasar eran Droxx y Tien, así que ambos muchachos subieron al escenario.
-¡ponte en guardia! ¡No seré tan fácil como los otros!- advirtió Tien y Droxx asintió sonriente esperando a que sus palabras fueran ciertas, pues hasta ahora había ido ganando despojando a todos de simples empujones. Tien elevó su poder, cosa que no hizo inmutar a Droxx en lo absoluto. Se lanzó contra el usando su técnica de cuatro brazos, pero Droxx ya estaba parado detrás de él rascándose la cabeza sin saber que hacer.
-oye, ¿puedo pegarte no?- preguntó el muchacho al momento que Tien se giró para lanzar todos los ataques y técnicas que se sabía, los cuales soro eran evitados.
-¡se supone eso debes hacer!- respondió en tres ojos desesperado de que solo lo evitara. Droxx sonrió y lo detuvo de la cabeza sin dificultad golpeándolo en el estomago, Tien se desmayó del dolor, pero Droxx no se percató y finalizó dándole una patada que sacó a toda velocidad para estrellarse contra el suelo. Chaoz y otros más se acercaron a Tien para asegurarse de que siguiera vivo, cosa que, afortunadamente lo fue. Droxx bajó del escenario y toco el turno para Yamsha y la Guerrera anónima. Yamsha comenzó a titubear en cada ataque, pero la mujer era alguien brusca y aprovechaba cada oportunidad para golpearlo fuertemente.
-¡wow! ¡Esa chica es increíble!- exclamó Droxx mirándola detenidamente.
-na, su poder también viene siendo basura…-contestó Kyou recargado en una silla pasando sus brazos detrás de su cabeza.
-sí, tal ves, pero es sumamente hermosa…- agregó y su amigo lo miró extrañado.
-no Droxx, por favor, no otra vez…- dijo Kyou en un tono asustado, la chica sacó volando a Yamcha de una patada y la guerrera bajo en dirección a los saiyajins muy molesta, mientras el voceador anunciaba a Krillin y a Piccolo para luchar.
-¡¿Cómo te llamas tu?!- preguntó la mujer a Droxx en un tono enojado.
-Droxx… ¿Por qué?- preguntó asustado mientras comenzaba a recorrerlo rápidamente. En un movimiento que ni siquiera se esperó le apretó la cola girándolo para desenredársela.
-¡haaa!! ¡¿Qué demonios te pasa?! – gritó Droxx inmovilizándose por el dolor que le producía.
-¡lo sabía! ¡Tu también tienes cola!- exclamó la chica soltándolo finalmente.
-¡haaa! ¡¿Estas loca?! ¡Eso me dolió mucho! Además, ¿a que te refieres con que yo también?- respondió Droxx tomándose el rabo para acariciarlo.
-¡¿Dónde esta Goku?!- preguntó furiosa, tanto que intimido al grupo de guerreros del espacio, todos giraron su vista a Kakaroto, quien solo la miraba muy asustado.
-disculpa… pero ¿Quién eres tú?- dijo Kakaroto asustado mirando como la mujer se acercaba iracunda.
-¡¿realmente no me conoces?!- contestó enojándose aun más, Kakaroto negó con la cabeza formando en su cara una expresión de sorpresa. -¡vine desde muy lejos a buscarte! ¡Creí que estarías inscrito en el torneo! ¡Así que espero sigas siendo igual de fuerte!- dijo ella a modo de reclamo sin bajar la voz.
-perdón, pero de verdad no sé de que hablas, no tengo idea de quien eres…- reiteró Kakaroto y la mujer elevó su energía creando una estela de luz a su alrededor, dejando impresionados a los saiyajins.
-¡soy Milk!- gritó enfurecida y Kakaroto comenzó a mover sus pensamientos intentando recordarla, cosa que no le llevó mucho tiempo.
-¡vaya! ¡Milk, si que has cambiado mucho! ¡¿Cómo esta Ox-satan?!- preguntó despreocupado y bastante sorprendido, pues no se parecía en nada a la pequeña niña que conoció una vez.
-¡eso no importa ahora! ¡Vengo a que cumplas con tu promesa!- exigió y Kakaroto se puso a pensar seriamente esta vez. Recordando su encuentro, que apagaron su castillo, que poseían una esfera del dragón, que fue en busca del maestro Roshi, que vio el Kame-Hame-Ha, que Ox-satan le dijo que se casaría con ella… ¡¿QUÉ?!, lo recordó todo de momento, y en lo que llevaba de su vida sabía muy bien que era el matrimonio, y definitivamente no planeaba hacerlo.
-haa… la promesa… si claro, sobre eso…- dijo haciendo una pausa mientras asentía la cabeza como un tonto. -¡¡¡CORRAN!!!- indicó a sus amigos mientras se dio la vuelta para salir huyendo.
-¡GOKU! - gritó ella mientras lo alcanzó a tomar del cuello de la armadura frenando su marcha, nadie entendió que pasaba, pero sabían que su comandante estaba en problemas. –no escaparas… lo prometiste…- exigió ella en un tono mas sutil.
-sí, tienes razón, lo prometí y por eso mismo debo cumplir y aquí y ahora te digo que… ¡¡¡VÁMONOS!!! ¡¡¡CORRAN!!! ¡¡¡VUELEN LO QUE SEA!!!- gritó eso ultimo a sus amigos intentando volar y huir a toda velocidad, pero Milk aplicó todo esfuerzo y lo tiró al suelo de un jalón, pues no lo había soltado.
-¿Qué pasa?- preguntó Raditz en el momento en que Kakaroto intentó escapar arrastrándose en el suelo.
-¡ESTA LOCA! ¡AYUDENME!- suplicó el muchacho y Milk le pisó la espalda para provocarle dolor.
-¡debes cumplir con tu promesa Goku!- reiteró ella en un tono salvaje, al mismo tiempo que seguía pisándolo con el talón de su pie.
-¡pensé que era comida! ¡Lo juro!- suplicó el muchacho dejándose caer al suelo sollozando.
-¡¿Cómo puedes pensar que el matrimonio era comida?!- preguntó Milk alterada pisándolo con más fuerza.
-¡Droxx! ¡No eres el único idiota!- comentó Kyou a manera de burla, pero el cometario de la chica alteró a alguien mas de los presentes.
-¡¿Cómo que matrimonio?!- exclamó Vegeta aproximándose furioso a la mujer.
-tsssssssss…- soltaron Broly, Droxx y Kyou agitando una mano, logrado únicamente que el príncipe se alterara mas.
-¡a ti que te importa!- respondió Milk retadora aplicando más fuerza sobre la espalda de Goku.
-¡que insolente eres!- gritó Vegeta elevando su Ki demasiado como para enfrenarse a una simple terrícola, pero los celos lo estaban consumiendo.
-me suena a pelea de viejas…- comentó Kyou empeorando el asunto, pues ambos se sintieron ofendidos.
-¡¿A QUIEN LLAMAS VIEJA?!- gritaron Milk y Vegeta al mismo tiempo mirando con una mirada enfurecida al muchacho, que de inmediato borró su sonrisa para formar un rostro asustado.
-¡Goku se va a casar conmigo!- gritó la chica al príncipe, quien abrió los ojos grandes sorprendido por su confianza y por el hecho de que ella no temiera a su poder.
-¡por supuesto que no! ¡Estas loca si crees él aceptará!- respondió Vegeta resistiéndose a partirle la cara.
-¡él lo prometió!- explicó ella con tono de victoria.
-¡creyó que era comida! ¿Crees que algo tan burdo como eso vale?- contestó el príncipe rebajándose a pelear con una simple mujer.
-¡por supuesto que sí! ¡Tiene que cumplir con lo que le prometió a mi padre y a mi!- respondió en un tono orgulloso.
-¡pues no lo hará! ¡Además él no quiere! – dijo Vegeta y Milk solo aplastó mas a Goku hasta que su cabeza topó contra el piso. -¡¿Quién querría casarse con una mujer tan fea y loca como tu?!- agregó Vegeta en un tono tan gracioso que sus compañeros tuvieron que aguatarse la risa.
-¡pues no me importa si no quiere! ¡Además se va a casar él, no tu, así que si estoy fea o loca a ti no te interesa!- respondió Milk logrando que el príncipe refunfuñara.
-¡pero él es mio!- gritó y todos se quedaron sorprendidos, pues nadie esperaba que lo admitiera tan fácilmente. Vegeta levantó a Kakaroto del brazo parándolo a su lado.
-¡claro que no! ¡Él es mio! ¡Yo lo vi primero!- se justificó la mujer jalando a Goku de un brazo en su dirección.
-¡pero yo lo hice mio primero!- contestó Vegeta jalando nuevamente al chico.
-en realidad ese fui yo…- dijo Broly y ambos lo miraron furiosos.
-¡TU CÁLLATE!- gritaron al unísono para volver sus miradas llenas de furia al frente, Vegeta jaló con mas fuerza a Kakaroto arrebatándoselo a Milk, pero lo jaló tan fuerte, que este se estampo contra la pared de atrás, pero Milk y Vegeta no se quitaron la vista de encima, quitándole importancia a Goku y concentrándose en ver quien era superior, rugiendo como animales y frunciendo el ceño cada vez con más fuerza.
-¡Goku se va a casar conmigo por que es el hombre más fuerte del mundo y punto!- exclamó ella y Vegeta suavizo su mirada y sonrió levemente.
-Kakaroto no es el más fuerte del mundo…- dijo y la mujer lo miró extrañado.
-¿y a quien mierda le importa Kakaroto? No se ni quien es, yo hablo de Goku…- contestó ella extrañada.
-¡haaaa! ¡Por eso! ¡Kakaroto y Goku es el mismo insecto!- explicó Vegeta perdiendo el control
-si gracias, estoy aquí…- dijo Kakaroto ignorado por supuesto.
-¿Cómo estas tan seguro de eso? ¿Quién es el más fuerte entonces?- preguntó la chica y Vegeta alzó una ceja sonriente. Levantó su brazo y señalo a Broly parado a un lado, pero se percató en seguida y jaló a Droxx frente a él para que lo cubriera.
-¿él es el más fuerte?- preguntó Milk y Vegeta se giró para toparse con que señalaba a Droxx en su lugar. Estaba punto de negar, pero Broly le indicó silencio con su mano sin que Milk se diera cuanta.
-¿Qué yo que?- preguntó Droxx asustado, pues había girado su atención a la batalla de Krillin y Piccolo, la cual por supuesto iba perdiendo el terrícola.
-¿Qué si eres más fuerte que Goku?- dijo ella y Kakaroto asintió con la cabeza indicándole a su amigo que contestara eso.
-a si… ¿Por qué?- respondió el muchacho desinteresado.
-¿eres el más fuerte del mundo?- preguntó nuevamente y esta vez hasta Vegeta, a espaldas de Milk, le indico que asintiera.
-ha, si claro también…- contestó sin saber de que se trataba.
-¡si eso es verdad pruébalo!- exigió la mujer y Broly le dio un leve codazo para que hiciera algo. Droxx se giró al cuadrilátero y antes de que Piccolo realizara una técnica mortal para Krillin, Droxx lanzó una estela de luz que destruyó al Namekusei de inmediato.
-¡¿Por qué hicieron eso?! ¡Kamisama ha muerto también!- gritó Tien enfurecido.
-¿a Kami… quien?- dijo Droxx extrañado.
-¡haa! ¡Son unos idiotas! ¡Las esferas del dragón han desaparecido!- gritó Bulma acercándose a ellos furiosa.
-¿pero que no era el demonio no sé que y debían acabar con él?- dijo Kyou para intentar calmar las cosa.
-¡no! ¡Solo debíamos encerrarlo nuevamente!- exclamó Krillin ayudado por Yamcha para levantarse.
-¡mierda! ¡Pues yo que iba a saber!- se defendió Droxx alterado.
-¡¿y ahora que vamos a hacer?! ¡Ya no existe Kamisama, ni las esferas!- gritó Bulma furiosa cayendo en desesperación igual que el resto.
-¡Goku! ¡Son unos idiotas!- dijo el Maestro Roshi exaltándose también.
-¡esperen! ¡Esperen! ¡Tranquilos, tengo una idea…!- pidió Kakaroto al ver que se acercaban violentamente.
-en Namekusei había también esferas del dragón, solo que mas poderosas que las de la tierra, podemos pedirles que revivan a Kamisama…- explicó Goku un tanto nervioso y Bulma lo miró un tanto desconfiada. –solo que, existe un pequeño detalle, la nave con la que llegamos aquí esta averiada, y no podemos salir de aquí, así que si nos ayudas a repararla traeremos de vuelta a Kamisama e incluso atraparemos a Piccolo cuando renazca…- propuso el muchacho y El Maestro Roshi asintió con aprobación.
-por que te conozco sé que no mientes Goku, así que confiaremos en tu palabra, claro, si la linda Bulma esta dispuesta a reparar tu nave…-contestó Roshi seriamente.
-necesitaría verla, pero soy una chica muy inteligente, apuesto a que podre lograrlo aunque tenga la tecnología que tenga…- aceptó ella muy feliz.
-¡genial! ¡Que te parece si vamos justo ahora!- dijo Kakaroto entusiasmado.
-¡Goku!- gritó Milk parada detrás de él, con ese tono enfadado, pues parecía que el chico había olvidado que estaba ahí. –iré a hablar con mi padre, le contaré que ya no eres el más fuerte, y también le mencionare a tu amigo Droxx, para ver si aprueba mi matrimonio con él…- dijo la chica y Droxx se sobresalto.
-¡¿Qué?! ¡¿De que demonios están hablando?!-preguntó Droxx girando su cabeza buscando una respuesta.
-de que te casaran con la linda Milk por que eres el hombre mas fuerte de este mundo…- explicó Kyou en ese tono bromista que no dejaba ni un segundo.
-¡¿en serio?! ¡Genial!- exclamó dejando a todos sorprendidos. -¡claro nena! ¡Yo el gran Guerrero Droxx soy el más fuerte y guapo de todos!- agregó y todos negaron ante su ridícula y exagerada autoestima.
-si, veo que eres fuerte, derrotaste a ese temible hombre demonio, pero no se si mi padre acepte que me case con otro que no sea Goku…- dijo ella en un tono mas tranquilo.
-sí déjalo, a ese wey ni se le para…- respondió y todos lo miraron furiosos.
-¡DROXX! ¡Mejor cállate!- lo regaño Kakaroto y Milk se giró indignada.
-regresare con mi padre, pero si no aprueba esto no te salvaras Goku…- agregó Milk de espaldas al grupo.
-sigue soñando loca…- dijo Vegeta y Milk apretó la quijada llena de rabia, pero conservó la cordura y abandonó el lugar lentamente.
-bueno… y el ganador de esta pelea es el joven Droxx…- dijo el anunciador asustado igual que todo el publico en las gradas.
-¡¿en serio?!- preguntaron todos realmente extrañados.
-el joven Krillin esta fuera de combate, el señor Piccolo despareció en una extraña luz y la señorita Anónima acaba de abandonar el lugar, así que usted es el ultimo… en pie…- respondió y Droxx subió de inmediato al cuadrilátero para tomar los sacos con dinero que le estaban entregando.
-¡hey Milk! ¡Ahora también tengo dinero! ¡El cual espero sea mucho!- gritó hablándole a la chica que, aunque ya estuviera en la salida del lugar, lo alcanzó a escuchar riendo satisfecha de lado.
-¡bueno, vamos!- dijo Kakaroto tomando a Bulma de la cintura y alzando el vuelo. Los guerreros del espacio emprendieron el vuelo detrás de su amigo, pero Roshi frenó su camino.
-espera Goku… no podrían llevarme a Kame-House…-pidió y Kakaroto le indicó a Broly que lo llevara. Tien, Krillin, Yamcha, Chaoz y Puar, los acompañaron hasta la casa del Maestro Roshi, y en el camino les contaron todo referente a Vegita y Freezer, lo que les acababa de suceder, que estaban haciendo ahí y uno que otro disparate por parte de todos. Finalmente sobrevolaron la isla y todos bajaron rápidamente.
-¡Maestro Roshi!- dijo Oolong saliendo de la pequeña casa.
-¡¡¡¡HAAAA!!!! ¡¡¡UN CERDO QUE HABLA!!!- gritó Droxx cubriéndose detrás de su capitán.
-¿Goku? ¿Eres tu?- preguntó la gran tortuga con esa voz lenta y gruesa.
-¡¡¡¡HAAAA!!!! ¡¡¡UNA TORTUGA QUE HABLA!!!- gritó nuevamente Droxx empujando a su amigo al frente para protegerse.
-¡hola! ¿Cómo han estado?- saludó Kakaroto a los dos y ambos sonrieron incrédulos.
-¡Goku! ¡Estas vivo! ¡Que alegría!- dijo Oolong sonriendo y sus ojos se cristalizaron de la emoción.
-sabia que no podías haber muerto…- comentó la tortuga mostrándose muy feliz, pues el chico le había salvado la vida en una ocasión.
-¿verdad que si?, Goku no podía haber muerto…- comentó Puar con ese tono chillón acercándose a sus compañeros.
-¡¡¡¡HAAAA!!!! ¡¡¡UN PINCHE GATO QUE HABLA!!! ¡¿QUÉ ACASO TODOS LOS JODIDOS ANIMALES DE ESTE PLANETA HABLAN O QUE CHINGADOS?!- gritó Droxx asustado y confundido nuevamente.
-sí, empezando por ti…- dijo Broly mirando a Droxx como para que se callara.
-y eso que no has visto al presidente del mundo…- susurró Krillin riendo de lado, pues este no era mas que un señor perro.
-bueno muchachos, tengo que irme, vendré a verlos después, cuídense…- dijo a modo de despedida avanzando hacía atrás.
-¿no usaras la nube voladora?- preguntó Oolong y Goku recordó en ese momento que contaba con ese preciado elemento.
-¡tienes razón! ¡Hace tantos años que no la uso!- exclamó emocionado y se giró hacia atrás. -¡NUBE VOLADORA!- gritó y de inmediato la nueve esponjosa y dorada apareció en el cielo aproximándose a gran velocidad. Todos los guerreros del espacio quedaron impresionados con tan extraño artefacto. La nube se detuvo frente a Kakaroto y este se aproximó rápidamente, se sostuvo con las manos y luego salto e inesperadamente, cayó al suelo de inmediato.
-¡hay, hay, hay, hay, hay, hay, hay! ¿Qué pasó?- dijo sorprendido sobándose la cabeza, pues había caído con ella al suelo.
-pues parece que ya no posees la pureza metal necesaria para acceder a la nube…- explicó Roshi sin sorprenderse mucho.
-¿Qué? ¿Cómo? ¡¿Pero porque…?!- preguntó pero su mirada se desvió hacía Broly y luego hacía Vegeta, como dándose un mensaje el mismo. -… pero por que… no me acordé antes que pues no ya no se puede…- dijo con un tono de voz raro y se puso de pie. –Que lastima, la nube era muy buena y fiel…- comentó mirándola con melancolía.
-¿podías subir en ella?- preguntó Kyou mirando la nube atentamente.
-sí, pero ahora ya no, solo pueden subir las personas que tengan un corazón puro y una mente sana…- explicó el comandante suspirando.
-¡yo quiero intentarlo!- dijo Droxx entusiasmando.
-¿no escuchaste? Dijo personas de corazón puro, te caerás…- dijo Broly pero su amigo lo ignoró caminando hasta la nube, se sostuvo con fuerza y se aventó al centro, todos fijaron su mirada en el suelo para verlo caer, pero no fue así, se incorporó sentándose en la nube y dando leves brinquitos como para ver si aguantaba.
-¡¡¿ QUEEEEEE?!!- gritaron todos al mismo tiempo mientras Droxx sonreía alegre.
-¡la nube tiene que estar defectuosa!- exclamó Kakaroto intentando volver a subir, pero fallando nuevamente.
-¡si Droxx puede yo también!- dijo Kyou y saltó a la esponjosa cosa amarilla, pero falló también.
-¡¿Qué pasa Maestro Roshi?!- preguntó Goku después de una vez más de haberlo intentado.
-pues, la nube voladora dice que debes tener la mente sana, pero tal vez no puede leer la mente de Droxx, por que es un idiota…- explicó y todos se quedaron extrañados y boquiabiertos. – y lo del corazón puro, al parecer por culpa de lo primero, lo segundo parece estar intacto…- agregó y nadie pudo creerlo.
-¿y que como se maneja?- preguntó el muchacho buscando alguna clase de controles. –Hay que ir a un buen bar…- agregó y en ese instante la nube lo dejó caer.
-¡¿oye que te pasa cosa?!- se quejó levantándose del suelo.
-¡vaya! Solo necesitabas usar un poco tu cerebro para que la nube supiera quien eres…- dijo Broly burlándose de él.
-bueno, como sea… vámonos ya…- indicó Kakaroto y todos salieron volando, llevándose nuevamente a Bulma con ellos. Volaron por unos minutos más y finalmente llegaron a la nave de los chicos, bajaron de inmediato y Bulma comenzó a revisar todo adecuadamente, supervisada por Vegeta y Raditz, pues ellos eran los que mas sabían de la tecnología saiyajin.
-¿Qué le pasó a la pantalla? ¡Me llevara días averiguar que era lo que hacía!- exclamó la mujer y Vegeta negó con la cabeza como si no supiera nada, pues no quería recordar el accidente de esa mañana.
-solo esta dañada superficialmente, todo el sistema de coordenadas esta intacto en el interior…- contestó Raditz alzando un poco el teclado mostrando los circuitos internos.
-¡excelente! ¡No es nada! ¡Estará lista en un par de meses!- dijo orgullosa sonriendo a plenitud. Raditz levantó el pulgar a modo de aprobación, mientras Vegeta se volteó con prepotencia a un lado.
-¡hay! ¡Que chico tan amargado! ¡Que seas guapo no te quita lo grosero!- exclamó Bulma y el príncipe se sobre saltó ante sus palabras.
-¡que mujer tan irreverente!- gruñó Vegeta y Bulma sonrió burlona.
-Goku, la reparare, pero me llevara tiempo, así que tendré que trasladarla a Capsule Corp…- indicó la mujer y Kakaroto sonrió complacido.
-¡claro Bulma! ¡No hay problema!- contestó el muchacho amablemente.
-llamaré a mi padre para que traiga unos helicópteros o grúas de transporte…- sacó su celular tecleando unos números velozmente.
-¡no claro que no! ¡La llevaremos nosotros!- dijo indicándole a sus amigos, quienes de inmediato elevaron la nave alzando el vuelo. Bulma se quedó dentro de la nave hasta que llegaron a C.C. dejándola sobre el patio.
-si quiere pueden quedarse en mi casa… tengo bastante espacio…- propuso Bulma amablemente. –Ustedes son muy lindos…- agregó mirando a todos rápidamente, pero su mirada se detuvo en Vegeta para guiñarle un ojo, el príncipe la ignoró soltando un gruñido.
-no gracias, te ocasionaríamos muchos problemas, mejor hazme otro favor parecido…- dijo Goku hablando mas bajo. – préstame una capsula de las que tienes, una que sea una casa o algo, no tenemos donde estar, y algo de comida, lo que sea esta bien, por favor…- pidió humildemente.
-¡por supuesto que si!- respondió buscando algo en sus bolsillos. -¡toma! ¡Tal vez no alcancen las habitaciones, pero es la mas grande que tengo ahorita! ¡Además incluye de todo!- dijo entregándole una capsula de etiqueta morada. –Pero ¿seguro que no prefieren quedarse?- insistió haciendo leves pucheros.
-¡no gracias Bulma! ¡Ahora debemos entrenar muy duro! ¡Estaremos donde estaba la nave!- indicó y alzó el vuelo. -¡vendré a verte después!- finalizó volando de regreso al lugar, Bajaron y buscó de inmediato el lugar mas despejado posible. Presionó la capsula y la arrojó al frente, apareció de entre el humo una enorme casa demasiado lujosa para ser verdad, con esa forma semicircular que tenían todas las cosas pertenecientes a la corporación.
-¡vaya! ¡Es genial!- dijo Kakaroto asombrado entrando de inmediato seguido por sus amigos. Contaron las habitaciones y solo había cuatro cuartos, así que terminarían por compartirla de dos en dos. Ni siquiera hubo que pensársela quien con quien, pero Droxx no quedó muy convencido con la idea, pues le tocaba estar con Broly, y eso, aunque no quisiera admitirlo, lo inquietaba demasiado. Comieron ferozmente las provisiones del refrigerador, ya estaba oscureciendo, y no habían hecho comido más que su desayunado ese día. Finalmente se fueron a dormir, el cuarto contaba con una sola cama y un sillón largo y amplio, Vegeta se instaló en la cama, mientras Kakaroto estaba en el cuarto de baño, había uno en cada habitación. Se quitó la armadura y se metió entre las sabanas esperando a por su compañero, Kakaroto salió finalmente y Vegeta lo seguía de reojo, apagó la luz pero en vez de ir a la cama se recostó en el sillón cubriéndose con una sabana de un lado.
-buenas noches…-dijo Kakaroto en un tono frío, notando hasta ese momento su descontento.
-¿en verdad dormirás ahí?- preguntó Vegeta aguantándose la rabia, había notado a su amigo algo cortante, pero no se esperaba a que siguiera molesto, a decir verdad, ya ni siquiera recordaba bien porque.
-si, aquí estoy bien…-respondió fríamente. –perdóname pero no puedo dejar de sentirme molesto, sé que tal vez no lo merezcas, pero he pasado por tantas cosas hoy que quizá mi descontento no sea contigo realmente…- explicó dejando al príncipe más tranquilo, pero no pudo evitar molestarse también.
-has lo queras…- respondió girándose en el colchón para darle la espalda. En el cuarto de Broly y Droxx las cosas estaban silenciosas, pero no era un silencio normal, era un silencio incomodo y extraño, algo que hacía sentir pesado el aire. Droxx dormía en la cama, pero podía sentir la mirada penetrante de Broly sobre él, poniéndolo sumamente nervioso.
-¡haaa! ¡Si! ¡Si! ¡Así! Mmm… ¡si! Ahí, ahí…- se escuchó la voz de Raditz quien por desgracia estaba en el cuarto de a un lado.
-¡dios! ¡Continua! ¡No te detengas!- volvió a gritar seguido por múltiples golpes en la pared. Volviendo el silencio y la tensión aun más difíciles para Droxx, pues el sonido era difícil de ignorar, pero más difícil era ignorar una situación bajo sus pantaloncillos.
-¡ho! ¡Eres el mejor! ¡haaaa!- se escuchó esta vez Turles seguido por mas gritos y quejidos.
-oye Droxx…- dijo Broly rompiendo el hielo hablando con esa voz profunda logrando que su compañero se asustara de inmediato.
-¡olvídalo Broly!- exclamó Droxx para borrar cualquier posibilidad.
Continuará...