Desperté e hice la misma rutina de los otros días, solo que ahora estaba mi madre en la cocina junto a papá
-¡hijo!, ¿nos extrañaste?- me estrujo en un gran abrazo, besando mis mejillas
-me dejaron abandonado- quería hacerlos sentir mal un poco
-fue algo que no planeamos, el vuelo de nuestro anfitrión de atraso por el clima así que todo se pospuso para el sábado, y se nos hizo mejor idea el de quedarnos en un hotel el viernes, y te llamamos pero no contestabas jovencito, ¿Dónde andabas?- puso de nuevo sus puños en su cadera y levanto un poco su ceja, “nada mama solo acostándome con el vecino, al cual apenas conozco”, si claro como si fuera capaz a decir eso
-estuve comprando videojuegos y me quede un rato en el puente, se me paso el tiempo- me sirvió el desayuno el cual era fruta con yogurt y mi jugo de naranja, empecé a desayunar
-de acuerdo hijo, pero no andes afuera a tan altas horas de la noche- te juro mama, que jamás va a pasar de nueva cuenta, volveré a ser tú mismo buen hijo de siempre
-si mama- vaya, si hablo muy poco- me debo ir, otra vez iré en vagón, me levante y me despedí de ambos note que mi padre no había dicho nada en la mañana
-cuídate cariño, regresa temprano- pellizco un poco las mejillas
-si mama… espera duele- creo que me estaba advirtiendo por si se me ocurría llegar tarde, dejo de pellizcarlas y me beso la frente-que te vaya bien- asentí, tome mi mochila y la llave, y salí de casa, hacia frio, saque un poco de vaho, y por reflejo me talle las manos un poco, jale las mangas del suéter y me cubrí las manos con ellas, empecé a caminar, otra vez no voltee a ver la casa de Logan, debía pensar mejor las cosas, él no me gustaba…o puede que si…pero no lo amo, casi llegaba a la caseta, mientras pensaba en los próximos estrenos de manga y los capítulos de series anime que salían esta semana, llegue a la caseta
-¿Qué tal Kalil?,- me saludo como siempre tan alegre Samantha
-hola, Sam, con mucho frio ¿y tú?- talle mis manos
-no me debo quejar, el trabajo llama- sonrió mostrando sus dientes, de verdad que me caía bien, empezó a abrir el portón
-nos vemos más tarde Sam- me despedí moviendo un poco mi mano
-aquí estaré- sí, ahí estarás, porque es dentro de tu horario, salí de la privada y pensé en Edmundo, me hubiera gustado platicar un poco con él, quería pedirle un consejo, ya sé que solo es un guardia, pero ¿a quién más podía pedirle uno?, además él tiene mucha experiencia, según el claro, pero dicen que los viejos con muy sabios, ¿Qué daño me aria en intentarlo? Además no tenía a nadie más, y mis padres… no gracias, ellos fuera de estos asuntos, sería bastante incomodo… quise olvidarme de estos pensamientos y me concentre en la ciudad que apenas despertaba, había negocios aun cerrados y había más estudiantes que otra cosa, llegue a la estación y me senté a esperar el vagón, saque mis audífonos, los conecte al celular y puse un poco de música, concentrándome solo en ella, la cual eran los Soundtracks de una serie que me gusto, Death Note, me hubiera gustado tener esa libreta para escribir el nombre de Logan, y tener mi shinigami para contarle mis problemas, se sentó alguien a mi lado pero no hice caso, ahora empezó el soundtrack “L's Companions”, era uno de mis favoritos, me deje llevar en la música, hasta que escuche que alguien decía mi nombre, me quite los audífonos y voltee a mi lado, ahí estaba Bruno observando con una ligera sonrisa, ¿ya no necesitara más tiempo?, ¿estará mejor?, se paró de su asiento
-¿Qué no vas a subir al vagón?- amplio la sonrisa, mire al frente y si, ya estaba ahí el vagón esperándonos
-si- le sonreí un poco y me levante del asiento, caminamos en silencio hasta que entramos al vagón, y nos sentamos de frente, casi me volvía a poner los audífonos cuando bruno me llamo
-Kalil…escucha- se empino un poco y me miro- siento lo del puente…me deje llevar un poco…y después yo no sabía…-
-no te preocupes- lo mire a sus ojos, ahora el tenían unos cuantos cristales, -está bien, no hay nada que arreglar… al fin y al cabo eres mi primer amigo- le sonreí ampliamente, él se volvió a recargar en el asiento, y soltó un suspiro ruidoso, lo mire divertido
-gracias Kalil- puso su vista a la ventana y no quitaba esa sonrisa, me puse los audífonos y vi los paisajes de la ciudad, podía ver un poco lejos el puente, pasaban carros, bastantes carros, después mire el lago, hasta que se me ocurrió algo para llevarme mejor con Bruno
-¿después de clases quieres ir a mi casa a jugar videojuegos?- el volteo a verme sorprendido
-¿seguro?- ¿Qué tenía de malo?, podíamos comer y después jugar un rato
-claro, o será que… ¿tienes miedo de perder?- debía provocarlo un poco, levanto sus cejas y puso un puño en su pecho
-por supuesto que no tengo miedo, y claro que iré, solo para callarte y demostrarte mis habilidades- casi lo grito, seguía con su puño en el pecho
-ya lo veremos- volví mi vista al paisaje de la ciudad
-ya verás Kalil, te mostrare que soy un dios de los videojuegos- sonrió ampliamente y solo lo mire de reojo
-si lo que digas- quería hacerlo enojar, y lo logre un poco, llegamos a la escuela y seguimos platicando de que videojuegos tenia y mangas para leer, al llegar al salón supimos que los profesores de las 2 primeras horas tendrían una reunión, debieron avisar así dormía un poco más, vaya que si son malos los de la escuela, Bruno y yo decidimos quedarnos en el salón, ya que hacia un frio horrible y se sentía la humedad en el aire un tanto incomoda, seguíamos platicando como si no tuviera fin
-¿y por qué te mudaste a San Francisco?- saco una bolsa con ciruelas y la puso sobre nuestra mesa- puedes comer si gustas- acepte y tome una
-por los negocios de mis padres- mordí la ciruela, estaba jugosa y deliciosa
-oh ya veo- siguió mordiendo su ciruela, quería saber un poco más de él así que, me atreví a preguntarle sobre sus padres
-¿y tus padres?- dejo de morder la ciruela, ¿no le gustaba hablar de ellos?, ¿se habrá molestado?, ¿me vi muy chismoso?...no…porque él también me pregunta cosas, así que sería justo… creo- lo siento…- no termine
-mi padre es abogado y mi madre es doctora, pero están en trámites de divorcio- siguió comiendo la ciruela y me miro a los ojos, no sabía que responderle, me sentía un poco mal por esa noticia, pero es que hoy en día se llevan muchos divorcios y los que salen más afectados somos nosotros, los hijos, parece que los padres no se acuerdan de nosotros… ¿Cómo lo sabía?, fácil, mis padres andaban en las mismas pero supieron salir adelante
-te comprendo un poco, mis padres también querían divorciarse porque ya no se veían tanto por sus trabajos, pero… creo que reaccionaron y enterraron ese tema- tome otra ciruela y Bruno me miro un poco sorprendido- ¿Qué?
-no nada… solo que en el caso de mis padres… es diferente…- tomo otra ciruela y la mordió, se volteó a verme- ellos ya no quieren verse, porque mi mama descubrió a mi padre con su secretaria en plena acción- dio varia mordidas más a la ciruela, ¿le había sido infiel el papa de Bruno a su mama?, que fuerte, eso nunca ha ocurrido con los míos…
-que difícil- termine mi ciruela
-si lo sé, el que acaba mal soy yo, como ahora no viven juntos, tengo que turnarme al ir a verlos y estar 2 o 3 días, mi padre vive en la privada donde tú vives y mi madre vive en A Alamo Square- nos quedamos un momento en silencio, ha de ser muy complicado estar haciendo todo eso a diario
-eres sorprendente- tome otra ciruela, me estaban gustando bastante-, Bruno me miro, juntado un poco su cejas- lo digo…porque si yo estuviera en tu lugar…no lo soportaría ni una semana- empecé a comer la ciruela, pero Bruno se acercó y me abraso, ¿Por qué lo hacía?, ¿quería enterrarme una daga por la espalda o algo así?
-eres una buena persona Kalil- se alejó de mí, y comió otra ciruela, ya casi se acababan, ¿Por qué decía eso?, solo dije lo que creo que es verdad, cambiamos de tema y empezamos a platicar de varias bandas de música, descubrí que tenemos en común la banda “One Ok Rock”, “Supercell”, “Heidi”, “nano” y “An Café”, y la única canción que teníamos en común favorita era una de la banda “nano” y la canción era “now or never”, después pasamos nuevamente a los temas de videojuegos, a ambos nos gustaban los juegos de rol y uno que otro de Facebook, cuando platicábamos me reí bastante con cada ocurrencia que decía, luego de ese tema pasamos al de la comida, a él le encantaba la pizza, las hamburguesas, los hot dogs, las papas fritas…toda una comida de dioses, se nos había pasado el tiempo muy rápido y llegaron los profesores, en clases me pasaba papelitos diciendo
“ese profesor es un ogro, siempre me reprueba” o “¿ya viste esa mancha en la parte trasera de su pantalón?” y como me ganaba la curiosidad volteaba a ver lo que me mencionaba, y siempre se reía con la cara que hacia al descubrirlo, varios profesores nos llamaron la atención para guardar silencio y prestar atención a su clase, pero Bruno hacia muecas y me provocaba la risa otra vez, tarde o temprano debían cacharme, las últimas dos clases del día las pasamos en silencio, yo pensaba en todo lo que me había dicho Bruno y por esos momentos se me olvido Logan, pero ahora, regresaba a mis pensamientos, esa tarde del viernes jamás la iba a olvidar, le di algo importante, ¿pero qué piensas Kalil?, no eres una chica, arranque una hoja y la hice bolita con mucha fuerza, estrujando la bolita, y la guarde en mi mochila, ¡repite Kalil!, eres un chico y no una chica, eres un chico y no una chica, un chico y no una chica…un chico al que le gustaba los chicos, solté un suspiro, debía dejar de tortúrame o los sesos me iban a explotar.
Por fin sonó el último toque, recogí mis cosas y Bruno me espero, me sentí un tanto feliz… salimos de la escuela y el seguía contando cada cosa que se le venía a la cabeza, de vez en cuando respondía y le daba mi punto de vista, llegamos a la estación y subimos al vagón que estaba un poco lleno, pero teníamos tanta suerte que encontramos 2 asientos vacíos, eso era suerte del demonio, al llegar a la caseta de la privada me encontré con Samantha
-hola Kalil- me saludo y empezó a abrir el portón
-hola Sam…te presento Bruno, es mi compañero- extendí una mano hacia Bruno
-mucho gusto Sam, espero llevarnos bien- la saludo frenéticamente, pero a la vez amablemente, tomando con sus dos manos la suya
-yo también Bruno, y espero cuides de Kalil- baje mi vista al piso… Bruno me miro y después a Samantha
-cuenta con ello Sam- puso su puño sobre su pecho, nos despedimos de Samantha y empezamos a caminar hacia mi casa,
-me agrado Sam- sonrió ampliamente y puso sus manos atrás de su nuca, y camino delante de mí
-sí, es buena gente- casi llegábamos a mi casa cuando sentí que alguien me jalaba del brazo, me dolió un poco y vi que quien me jalaba del brazo era… ¡Logan!
¡Era Logan!
-debemos hablar Kalil- ahora me tomo de los dos brazos,
-¿Qué?- aún no cabía en que era Logan el que me estaba sujetando, hasta que volvió a hablarme
-vamos a mi casa- no…, me empezó a jalar, no… debo resistirme, pero… no puedo…- camina Kalil- me apretó un poco más, eso sí me dolió
-¡oye! – Escuche la voz de Bruno atrás de mi – déjalo amigo, lo lastimas- mire a Bruno, quien tenía una mano en mi hombro, creo que estaba a salvo, mentira, ahora estaba entre los dos
-no te metas- dijo lo más serio que había escuchado hasta ahora, me apretó un poco mas
-enserio amigo, suéltalo- ahora Bruno puso su mano sobre la mano de Logan y empezó a quitar la mano de Logan- ahora él está conmigo- ¿Qué yo que?, sentí que Logan aflojaba el agarre y me moví rápidamente al lado de Bruno, vi que Logan miraba a Bruno y Bruno lo miraba con una pequeña sonrisa, ambos median casi lo mismo, pero Logan era un poco más alto, se empezó a poner el ambiente muy pesado y tenso, tenía que alejarlos
-vamos Bruno- lo tome del suéter de la escuela y lo jale, se rompió el contacto visual entre ellos dos y empezamos a caminar a mi casa, no quise voltear a ver a Logan, pero sentía su mirada clavada en mí, llegamos a la puerta principal, saque mi llave y abrí la puerta, ambos pasamos y en el momento en que cerré la puerta, me sentí aliviado, di un largo suspiro
-lo siento Bruno- dejo su mochila en el sofá y se sentó como si fuera su casa
-¿Quién era el?- deje mi mochila en el primer escalón de las escaleras y volteé a verlo
-mi vecino- fui y me senté a su lado, el soltó un suspiro
-pues que vecino- cierto, Bruno no sabe nada de lo que he pasado con Logan
-si…lo sé- ahora su suspire
-¿Qué paso entre ustedes?- vaya que Bruno no es lento en captar las cosas
-varias…cosas- me empecé a desabrochar el suéter, y lo puse a mi lado, solté otro suspiro
-bueno… no te quiero poner en un momento incomodo, así que olvidemos esto y empecemos con los videojuegos ¿te parece?- lo mire, me estaba poniendo las cosas muy fáciles, tenía esa gran sonrisa
-bien… pero antes hay que comer algo- le sonreí y puse mi mano sobre mi estomago
-me parece perfecto- ambos nos levantamos del sofá y lo guie a la cocina, ahí encontré arroz y unas brochetas de carne, me acorde que Bruno era vegetariano, lo mire
-tengo carne…- el arrugo un poco la nariz y fue a abrir el refrigerador, vio su interior por unos momentos y saco muchas cosas, en las que eran más zanahorias, calabacitas, brócoli, coles de Bruselas, espárragos, una lechuga, lo puso sobre la mesa, busco un cuchillo, puso una poca cantidad de todo en un traste hondo, las lavo, saco un traste que en medio tenía una lámina, que según yo y algunas de las explicaciones de mama, se utilizaba para hacer verduras al vapor, él ya había hecho todo eso… mire el arroz…
-¿sabes cocinar?- me puse frente a él, solo nos dividía la mesa, puse mis codos sobre ella y recargue mi cabeza entre mis manos
-sí, aprendí porque se me hacía difícil encontrar comida que no tuviera carne…- arrugo otra vez un poco la nariz
-eso es… fantástico- el rio un poco, vi como con maestría ordenaba los vegetales y los cortaba en rodajas exactas, pero lo hacía con gran velocidad… se veía como todo un chef
-¿y tú sabes cocinar?- levanto la vista de los vegetales y me vio
-si te refieres a calentar la comida que ya está hecha... sí, soy un experto- se hecho una carcajada y continuo cortando, después algunas verduras las hecho en un sartén, vertió un poco de aceite de oliva y espero que se calentara el aceite, a las otras verduras las hecho en el trasto con la lámina, vertió agua, encendió la estufa, y después de un rato, ya empezaba a salir un agradable aroma, pero de verduras, a mí no me gustaban las verduras, pero estas se me antojaban, momentos después el comía sus verduras y yo mis brochetas de carne, me quede viendo un momento su plato, se veía rico,
-¿quieres probar?- pico con su tenedor unas cuantas verduras y me las ofreció, tenía que probar aquello
-si…- evite mirarlo a la cara y metí el tenedor a mi boca, las probé lentamente, estaban deliciosas,
-¿Qué tal?- lo mire un poco, tenía una gran sonrisa- soy un gran chef, lo sé- ambos reímos, la verdad es que estaba muy buena esa comida
-están muy buenas- seguí comiendo mis brochetas- pero prefiero la carne- arrugo otra vez la nariz y seguimos comiendo entre platica y platica y muchas risas, después lavamos lo que ocupamos y lo guie a mi habitación para empezar a jugar videojuegos, el plan desde el principio.
Así pasamos la tarde, ya nos habíamos puesto muy cómodos, ambos nos quitamos los Convers que traíamos, él se quitó el suéter y el chaleco y se había sacado la camisa, y yo seguía con el chaleco, pero me había quitado los Convers, reíamos a cada rato, la verdad es que era muy, pero muy bueno en los videojuegos en algunos me gano, en otros empatamos y en unos pocos le gane, que vergüenza, era un farsante de gamer, pero el reía con mis caras de frustración y de quejas en algunos le reprochaba que hacia trampa, o que no era justo él tenía más esto, tenía más lo otro, y así más cosas, ya casi oscurecía y él se tenía que ir
-mañana pasare por ti- se empezó a poner los Convers
-¿enserio?... ¿porque?- ya estaba raro esto
-en primera porque me toca quedarme con mi padre y en segunda porque no quiero que te topes de nuevo con ese vecino- termino de ponerse los Convers, de verdad le apreciaba eso, pero…
-pero no es nece…-
-Kalil… lo es, que bueno que vine hoy contigo, si no, no sé qué hubiera pasado si no era así- tal vez me hubiera besado con Logan…
-si…- puse mis manos atrás de mi espalda- gracias Bruno, me salvaste el pellejo- le sonreí
-no hay de que, me voy, vendré mañana por ti, así que se puntual, no quiero esperar mucho- que exigente, rodee un poco mis ojos
-sí, sí, si- tomo su mochila y abrió la puerta de la entrada
-nos vemos Kalil- salió de mi casa y yo subí a mi cuarto, momentos después llegaron mis padres, les conté que había venido Bruno, no les mencione el pequeño problema con Logan…, les conté de la pequeña clase de cocina con Bruno, ellos estaban felices y mi madre maravillada
-nos alegramos hijo, que bueno, y espero mañana ver que si es un buen muchacho como dices que es- dijo mi mama, y me dio un beso en la frente
-yo no podré verlo, debo salir más temprano, pero después invítalo a comer o a cenar- menciono mi papa quien puso una mano en mi hombro
-si papa- me despedí de ambos y subí a mi cuarto, me puse la pijama, vi mi ventana, estaba cerrada, decidí abrirla y me dio el aire, no vi hacia la casa de Logan, así que entre rápidamente, apague la luz, recordé la buena tarde que pase con Bruno y me quede dormido.