Natasha observaba detalladamente a su hermano menor, un par de horas habían pasado después del mediodía por ello las dos parejas pidieron algo de comer, los demonios no necesitaban consumir alimentos regularmente como los humanos pero desde niños debían convivir con ellos por esa razón se acostumbraron a sus hábitos, en cierto punto lograban disfrutarlo, para beneplácito de las damas la comida seleccionada fue Italiana, los cuatro tomaron asiento en el elegante departamento de HimChan quien solo tenía platicas esporádicas con Ailee, en ese instante el demonio estaba navegando en un mar de dudas, era verdad que esa mujer fue su primer amor, una de las razones por las cuales quería reivindicar el apellido Kim ser digno para pedir su mano pero después del beso con Up su mundo dio un giro de 360 grados, ahora solo le importaba mantener a salvo al humano, protegerlo.
—Déjame comer en paz, me cansa que trates de meterte en mi mente si quieres saber algo solo pregúntalo.— Hablo el líder dejando caer el tenedor a un lado de su plato para después masajear su cien.— ¿Qué tanto quieres encontrar en mi cabeza? No estoy listo para comprometerme apenas tengo 50 años si esa es tu preocupación.
—¿Por qué tienes humanos viviendo a su lado? –Interrogo directamente observando a los ojos de su hermano quien solo desvió su mirada.—Estas en la etapa de rebelde? ¿Estas tratando de probar cosas nuevas?
—No es un crimen tener amantes humanos siempre y cuando no nos mezclemos conocemos perfectamente las reglas, no somos unos estúpidos.—Contesto HimChan quien se tensó al notar como Ailee bajaba la mirada, no deseaba lastimarla pero no quería que la identidad de Up y Zelo se descubriera, era preferible que los tomaran como sus amantes.— Somos demonios que viven cientos de años y creo que es justo que probemos cosas nuevas y cómo pudiste ver la belleza y juventud humana es muy atractiva.
Al terminar su frase le dio un sorbo a su té, sus ojos se fueron a otro punto a uno donde no se pudieran topar con los de Ailee, porque ella simplemente descubriría que estaba mintiendo, desde el día que la conoció estuvo cautivado por su belleza por su fragilidad como demonio también fue su capricho egoísta para humillar al jefe de la Familia Lee, ese hombre que desplazo a su abuelo, el demonio que causante de la muerte del hombre que fue como su padre, era verdad HimChan Kim no era un demonio bueno, era un vengativo y cruel, levanto la barbilla orgullosos para volver su mirada al frente, donde estaba su hermano del alma.
—De ti lo puedo creer hasta de DaeHyun.—Hablo Natty señalando a Him para después voltear a mirar a su hermano.—Pero tú eres distinto, tu no sientes afecto o atracción por algún ser, te quiero pero también admito que solo deseas el poder de controlar a los demonios sabes que estoy de tu lado por favor ten confianza en mí.
—Es como dice Channie solo es un juguete para entretenerme un rato después solamente lo dejaré ir, tú lo viste es un niño, en joven malcriado que está encantado por tener los lujos que nunca ha tenido, solo es mi pequeño sunshine.— .Dijo relajando los hombros y poniéndose de pie, detestaba que su hermana lo conociera tan bien, Jun no era un capricho, él era algo distinto.— Es el amante en turno solamente eso.
—Qué extraño que no hayan regresado, ya es tarde.—Interrumpió Ailee con un tono de voz algo molesta estaba herida.—Se nota que ustedes también solo son un juego para ellos, los humanos siempre están interesados solo en el dinero.
Him unió sus labios hasta formar una línea recta, Ailee tampoco era una niña buena, era consiente que continuaba siendo una Lee, que el veneno seguía recorriendo su cuerpo, revolviéndose en su sangre, una efímera maldad combinada con belleza, por eso la adoraba, se había vuelto loco por ella tan distinta a JongUp, tan contrastante, se puso de pie tentado a tocar ese cabello rojo, lo acaricio con el dorso de su mano, suave, radiantes como su dueña, al final de su vida estaba seguro que ella sería su esposa, la madre de sus hijos, por esa razón le pidió a Natasha cuidarla, adoptarla para que fuera un demonio fuerte, que estuviera a la altura del consejero del primer Rey, la mano blanca de la joven se puso encima de su piel, lo deseaba.
—No somos sus dueños y si aman el dinero es su problema así no tendremos dificultades al momento de separarnos.—Contesto Bang dedicándole una sonrisa a su hermana.— ¿Cuándo me darás un sobrino? Ya está demasiado grande si continuas en ese camino jamás podrás hacer que Charu sea papá.
La pregunta provoco que las mejillas de Natty se tiñeran color rojas, la mujer se puso de pie para despeinar a su hermano los dos comenzaron a pelear en forma de juego, Guk la tomo de la cintura para elevarla por el aire y dejarla caer delicadamente sobre los sillones ambos reían aunque sus puestos en la jerarquía demoniaca los enfrentaban continuamente seguían teniendo la misma sangre, el lazo que los unía era más fuerte, para YongGuk solo le importaba Natasha y su abuelo de su verdadera familia, por sus padres no sentía el mínimo afecto y claro que Nam era su rival, no es que lo odiara pero desde el momento que nació su mundo alrededor lo obligo a verlo como su enemigo, él era al demonio que debía acabar si quería tener lo que tanto deseaba, poder, una simple palabra que representaba todo para el pelinegro, el primer Rey no puede ser una agradable personas y él no era la excepción, entre los manoteos Natasha presiono el botón de la grabadora de mensajes del teléfono fue entonces donde se escucharon distintas voces diciéndole a Guk que consiguiera una novia..
—¿Te agrado mi broma? No tenía nada que hacer, la cena con la familia siempre es aburrida así que obligue que nuestros padres y hermano hablaran con ese tono de voz sabía que te sorprenderías.— Dijo sonriendo la rubia mientras acomodaba la cabeza de su hermano en sus piernas, su pequeño niño que cuido desde el momento que nació, ya no era ese angelical chiquillo que conoció ahora era un hombre frio.— Debes enamorarte, cuándo conozcas a alguien que te haga vibrar veras la vida diferente no quiero verte solo, la vida de un demonio es demasiado larga como para vivirla solo.
HimChan y Ailee solo continuaban mirando la escena conmovidos ninguno de los dos lograba entender que había en la cabeza del primer Rey, que objetivo tenía su existencia, ¿Para qué peleaba todos los días? ¿Por qué estaba obsesionado con el poder, con el control, que tantos pecados estaba dispuesto a cometer para alcanzar sus sueños.
Cinco jóvenes salían de las tiendas más caras del centro comercial de Seúl, sus manos estaban ocupadas de bolsas no dejaban de reír, de bromear fascinados, nunca habían tenido la oportunidad de entrar a esas finos establecimientos donde alguna vez en el pasado fueron sacados por no tener el suficiente efectivo para comprar, ya cansados se sentaron en una cafetería a comer algo, no paraban de coquetear con algunos chicos desde niños permanecieron como almas libres dedicadas hacer lo que les agradaba ser, vivir la vida como mejor les convenia, Key toco el cabello de Jun quien aunque sonriera tenía una aura de tristeza.
—Necesitan un cambio de look si quieren que sus amantes sigan locos por ustedes.—Dijo emocionado poniéndose de pie.—Vamos a un salón de belleza para que les den un cambio radical y después iremos al club Amadeus a festejar, un amigo me recomendó el sitio, Uppie tu galán ha estada preguntando por ti.
—Es verdad la otra tarde fue al video club a buscarte.—Interrumpió animado Sung pasando su brazo sobre los hombros del castaño.— Wow tiene un cuerpo de infarto ese hombre, no sé por qué aún no aceptas andar con él.
—Obvio por el nuevo chico con el que anda mira todo el dinero que le ha dado está claro porque Up no aceptaba al chico dumbo.— Ahora hablo Ren robándole un sorbo a la malteada de su amigo.— Siento envidia pero también estoy contenido por ustedes ¿están muy viejos sus novios?
Todos saltaron en un mar de risas los dos hermanos comenzaron a bromear diciendo que sus amantes eran dos ancianos de closet que por razones familiares nunca pudieron salir, no pararon de burlarse de ellos, de hacer bromas, el ambiente se convirtió en un juego de chistes, era su manera de decir que no podían revelar la identidad de sus nuevas parejas, después de disfrutar una agradable comida se dispusieron irse a un salón de belleza donde los cincos les hicieron retoques a sus respectivos looks, Jun decidió teñirse el cabello plateado le agradaba ese tono rebelde mientras que Up eligió un tono más conservador, el morado oscuro le quedo a la perfección, al salir de ese sitio se dieron cuenta que ya la noche los había alcanzado así que decidieron arribar al famoso club Amadeus, un lugar que solo personas de mente abierta podían asistir, cuando llegaron las personas voltearon a mirarlos, los cinco lucían exquisitamente sensuales, perfectos.
—Por primera vez disfrutaremos lo que merecemos.— Grito emocionado Ren levantando su copa, estaban en la mesa VIP esa noche ninguno trabajaría, lo que hicieran ese tiempo sería por placer, por egoísmo, por voluntad propia.— Por hoy somos los reyes de la noche, ningún anciano nos obligara a tener sexo, hoy elegiré con quien irme.
—Solo por este momento quiero elegir a la persona a quien quiero besar.— Grito eufórico Key guiñándole el ojo a un guapo pelinegro que estaba en una mesa contigua.— Mira Up que coincidencia ahí anda Dumbo.
Los presentes dirigieron su mirada a donde el dedo del mayor apuntaba en medio de la pista un joven de cabellos negros quien tomaba asiento en una mesa con otros cinco chicos quienes al notar la mirada se giraron a saludarlos, Key les animo a unírseles de esa manera rodearon a los menores, las parejas se armaron así que rápidamente se dirigieron a la pista de baile Jun K arrastro a Zelo al centro de la pista ambos sonreían bastantes divertidos, Key se colgaba del cuello de Nichkhun tratando de ser lindo, JunHo se apoderaba de la cadera de Ren por ultimo Sung tímidamente le coqueteaba a Wooyoung.
—Espera Moon quiero hablar a solas contigo ¿Podemos salir un rato? .—Cuestiono el pelinegro alto tomando por la mano al menor quien asintió y lo siguió hasta una terraza donde el ruido era menos.—¿Dónde has estado? No he podido contactarte bueno en la Universidad casi no coincidimos y has dejado de trabajar en el videoclub ¿Estas bien?
—Lo siento pero hace poco tuvimos un problema y pues nos mudamos pero no te preocupes ahora estamos con unos amigos, discúlpame por no avisarte.—Contesto sonrojado, sus manos tontamente chocaron con las del mayor quien retrocedió nerviosamente.— Hace poco me entere que DongHae había regresado así que entre en pánico y le pedí a Zelo que nos cambiáramos de casa.
TaecYeon recordó que hace unos días había encontrado los cuerpos de la banda de DongHae parecía que se habían convertido en licántropos desde el momento que se enteró lo ese mafioso le había hecho a su querido Moon deseo acabarlo pero su rango en la policía imperial se lo impedía, era el comandante general su status estaba por encima de venganzas personales, Ok Taec Yeon era el capitán del equipo elite de la policía imperial, ocupaba un rango especial desde pequeño fue reclutado para ser entrenado como un cazador de demonios y subterráneos, sus habilidades sobresalieron desde el primer día, nunca se ha detenido hasta acabar con sus enemigos, por una misión fue obligado a enlistarse en la Universidad donde conoció a JongUp, los recuerdos de su pasado se combinaron con el presente por lo cual termino enamorado de ese pequeño castaño.
—Hace poco leí en las noticias que encontraron su cuerpos junto al de su banda calcinados en el Bar que frecuentaba parece que se metió con algunos mafiosos pesados.— Dijo colocando sus manos sobre los hombros desnudos del menor quien se sorprendió por la noticia.— Ya no debes tener miedo está muerto y no puede lastimarte.
Las dudas saltaron en la cabeza morada del menor pero se quedaron ahogadas en su garganta solo se dejó llevar por esos brazos que lo guardaban, que lo reconfortaban, aspiro el aroma del mayor, olía distinto a su hyung, Taec era muy diferente a HimChan, recordar a su nuevo protector lo lastimaba, saber que por mucho que lo llegará a querer este jamás le correspondería le clavaba una daga en el pecho, a su mente volvió aquella imagen donde una pelirroja y un pelinegro se miraban, perdidos en su propia burbuja, lo sabía ellos tenían un pasado en común y tal vez un futuro los unía.
—Eres el mejor policía de la ciudad ya me siento más tranquilo con la noticia.—Logro articular deshaciendo el abrazo.—Olvidemos todo y vamos a bailar.
—Vamos a disfrutar de la noche pero después me explicaras donde te estas quedando.— Contesto animado el mayor siguiendo a su amigo.—Eres todo un misterio y te vez hermoso con ese color de cabello.
El joven agradeció colocándose de vuelta su gorra.
HimChan miraba por la ventana angustiado, ya había anochecido y los pequeños no llegaban trato de comunicarse por el celular pero Up había olvidado el suyo y parecía que el de Jun no tenía batería giro su rostro para toparse con la mirada seria de su líder quien seguía sentado en un sillón mirando el horizonte, las cortinas estaban abiertas dejando ver la inmensidad de la noche por los enromes ventanales, tenía un par de horas que las chicas se habían retirado cansadas de esperar a que los maknaes regresaran, Nattasha estaba interesada en conocer el pequeño juguete de su hermano, de la cocina un ruido llamo su atención Dae hizo acto de presencia con pan en la boca.
—Si están tan preocupados vamos a buscarlos.— Dijo honestamente dejándose caer en el sillón que estaba en un lado de Bang quien solo lo seguía con la mirada.— El auto tiene un gps o con nuestros poderes los encontraremos en cualquier momento.
—Tiene razón Dae vamos por ellos si Gain sabía el secreto de Zelo alguien más lo debe estar siguiendo.—Dijo en tono preocupado el consejero tomando su saco.—No quiero llegar cuando sea muy tarde prometimos que cuidaríamos de los dos niños.
Bang de un salto se puso de pie levanto la manos para que las ventanas se abrieran, no necesitaba de un GPS sabía dónde se encontraba el menor tomo su abrigo café para después saltar lo ventana seguido de sus dos hermanos, ninguno de los tres toco el piso nunca saltaron de edificio en edificio, en dirección a donde el club Amadeus estaba ubicado cada vez que se acercaban sus instintos se activaban, era una zona neutral donde subterráneos, demonios y humanos convivían en un ciclo de decadencia, los tres demonios desaparecieron sus aromas muchos seres desconocen el rostro del primer Rey así que la única manera de detectar a un yokai era por su olor, rápidamente se mezclaron con la gente del lugar muy pocas personas eran humanos, la mayoría eran vampiros, eso les daba una mala espina ya que un grupo de licántropos arribaba al sitio esas dos especies por años han estado envueltos en una guerra estúpida, los vampiros orgullosas especies seducidas por la belleza mientras que los hombre lobo eran bestias ansiosas de soberbia ninguno de los dos podía admitir que uno fuera mejor que el otro mientras que ambos estaban por debajo de los amos de la oscuridad, los demonios.
—Trata de detener la pelea en lo que encontramos a los niños.—Les ordeno mentalmente el líder a DaeHyun mientras esquivaba a las hadas que trataban de seducirlo.— HimChan busca a JongUp en lo que yo encuentro a Zelo, nos vemos en el estacionamiento.
Yes sir, fue lo único que contestaron los tres hermanos menores mientras de dispersaban en el sitio, el líder tapó su boca asqueado por el lugar, detestaba convivir con otras especies no estaba acostumbrado a estar en una misma habitación con muchas personas, noto que en ese lugar tampoco importaba el género que poseyeras dos chicas se besaban en una esquina mientras dos bellos vampiros lo hacían mitad de la fiesta, movió la cabeza solo un sujeto era un chupa sangre el otro solo parecía ser su cena, “Humanos estúpidos cegados por el placer de conocer más” dijo mentalmente al ver que ese rubio era arrastrado a una salida nuevamente enfoco su mirada a las personas que bailaban fue cuando encontró su objetivo, ya no tenía sus cabellos del tono de los rayos del Sol ahora eran grises, plateados, brillaba aún en medio de la oscuridad el chico a su lado acaricio su espalda, sus hombros, acercaba sus labios a su cuello a Jun parecía no importarle lo que el sujeto estaba a punto de hacer, la mano derecha de Guk formo un puño, sus nudillos se volvieron blancos una ráfaga hizo que ese extraño levantará la cara.
—Estúpida bestia no te atrevas a tocarlo. —Dijo moviendo sus labios sin que un sonido saliera de ellos, el receptor dibujo una sonrisa encantado como si no le importará lo que el demonio le ordenará. —Debes entender tu lugar en la jerarquía perro idiota.
El licántropo que bailaba con el joven de pelo plateado observo como su mano derecha ardía en fuego, nadie parecía darse cuenta de ese evento así que se separó de su compañero asustado, Jun cuestiono su comportamiento pero el lobo se alejó asustado, una torcida sonrisa se formó en los labios de Bang quien continuo escondido en las sombras, le fascinaba el nuevo look de ese joven, su pantalón de cuero adherido a sus largas piernas, el saco negro que perfectamente se amoldaban a sus pequeños hombros, su piel blanca sobre saliendo era lo que más captaba su atención, ese delicado conjunto de células era su adicción, su alegría no fue duradera ya que otro chico se le acercaba.
HimChan se libraba de una molesta bruja que no dejaba de tratar de llevarlo a la cama, el consejero era muy quisquilloso para las personas que llevaba a la cama su grandeza no podía ser compartida por cualquiera, fastidiado torció su cuello giro su rostro para toparse con la mujer, la tomo de la muñeca murmuro un par de palabras y una marca apareció en la piel de la dama quien se arrodillo por el dolor.
—No vuelvas a rogar es patético en una mujer. —Hablo cruelmente soltando el agarre. —Ten un poco de más dignidad hacia tu especie.
El pelinegro se alejó de la chica quien tardo un par de minutos en ponerse de pie, el descendiente de los Kim notó que un grupo de personas rodeaban a un chico con gorra así decidió unirse a los fanáticos, solo por curiosidad, fue entonces que encontró su objetivo quiso abrir la boca para detenerlo pero quedo impactado por el movimiento de sus caderas, ese pantalón ceñido a su trasero levanto varios suspiros a su alrededor, estaba seguro que no era lo único que había levantado, sus hombros estaban desnudos, la chaqueta era corta y ajustada, no era el tierno niño con el cual todas las mañanas desayunaba era distinto ese joven de la pista era una persona completamente diferente, la vista del demonio fue interrumpida por un chico que se acercaba a bailar con el menor, un chico de cabello largo color castaño, los presentes gritaron su nombre, Taemin es lo que repetían.
—Un inútil chupa sangre. —Comento Him quien rápidamente hizo un movimiento de manos para que el subterráneo resbalara y se lastimara Up detuvo su baile para ayudarlo pero otra persona se adelantó, ese nuevo pelinegro observo al demonio. —Los accidentes suceden.
MinHo estuvo a punto de írsele a los golpes pero cuando detecto el aroma del demonio se detuvo, solo agarro a su amigo y se fue, JongUp estaba atónito que su hyung estuviera en ese antro nunca pensó ver a HimChan en un sito de ese tipo trató de formar una sonrisa pero falló debido a que la gente no dejaba de observarlo bajo la mirada ante este gesto el pelinegro hizo un movimiento para que los presentes se dispersaran, caminó hacia el joven para tocar sus hombros le quito la gorra acariciando su cabello ¿Uva? ¿Morado? No sabía que matiz pero le fascinaba, tener tan cerca al humano le provoco abrazarlo por la cadera no podía detener lo que su cuerpo sentía, lo deseaba, anhelaba volver a tocar sus labios.
—No llegabas a casa y tuve miedo de que algo te pasará. —Comento a su oreja en un suspiro, Up se tensó al sentir ese aliento golpear su piel. —Debes avisarme donde estas.
—Lo siento quería salir con mis amigos. —Contesto alejando al mayor, no deseaba malinterpretar sus palabras ni sus muestras de cariño. —Perdimos la noción del tiempo.
Him desapareció su sonrisa al notar que el menor se alejaba cada vez que intentaba tocarlo ¿Estaba enojado por lo de la mañana?, no le agradaba su actitud, quería tocarlo, besarlo, sentir su calor, de un rápido movimiento lo tomo de la mano.
—No importa vamos a casa. —Dijo tratando de sonar tranquilo nuevamente toco su cabello. —Se ve hermoso el color. —Podemos despedirnos de mis amigos además debo encontrar a Ok-hyung solo fue a contestar una llamada. —Comentaba Up tratando de zafarse del agarre y lanzando su mirada a la gente para encontrar a sus compañeros de fiesta. —Vamos a la mesa a esperar no quiero que hyung se vuelva a enojar conmigo además te puedo presentar con él así no estará preocupado por mí.
Him detuvo el andar el menor ¿Quién era Ok-hyung? ¿Por qué Up debía despedirse de él? Sus labios formaron una línea recta, un demonio es un ser egoísta por naturaleza, posesivo por obligación, los peores defectos de los humanos aumentados a lo triple, sus manos se apoderaron de la cadera para del menor para comenzar a bailar al ritmo de la música agradecía que el DJ fuera un demonio de bajo rango así logró obligarlo a poner esta tonada.
—Aunque primero podemos bailar. —Dijo formando una sonrisa pegando su frente a un nervioso moreno. —Puedes abrazarme prometo no morder.
Up trató de oponerse pero la mirada del mayor no lo dejó estar en paz, él deseaba bailar pegado a su pecho, absorber su aroma, su esencia, levanto sus brazos para colgarse de su cuello, se dejaba llevar por el momento, por ese ambiente de sensualidad que se colaba por su piel, lograba sentir la respiración de mayor había cometido un error al aceptar los sentimientos de Taec cuando su corazón ya le pertenencia a su nuevo protector, era un idiota por fomentar esperanzas en una persona que nunca lograría amar ¿Ahora cómo podía terminar una relación que llevaba una hora de iniciar?.
Bang ya estaba cansado de deshacerse de todos los insectos que se acercaban a su pequeño sunshine quien parecía tener un clase de feromona que atraía a todos los subterráneos del lugar, fastidiado el mayor salió de su escondite para detener la huida de peliplateado con su acompañante ya que parecía que deseaban irse a un lugar más privado, se interpuso en su camino por lo cual el brujo se molestó.
—No deberías llevarte a un jovencito que está borracho. —Hablo metálicamente el pelinegro tomando la muñeca del peliplateado quien tenía los ojos abiertos como plato. —Vamos a casa.
—No quiero ir contigo. —Dijo de golpe el menor soltándose del agarre, el alcohol en su sangre había aumentado su valor y claramente su resentimiento hacia su “novio”. —No eres nadie para decirme lo que debo hacer.
El mayor abrió los labios como un pez sorprendido por la actitud del humano ¿Por qué estaba tan irritado? Nuevamente sujeto el brazo del peliplateado pero esta vez el brujo se interpuso es gesto aumento la molestia del demonio, le dio un aventón para impedir que tocará al humano.
—No es lugar para que hagas berrinches. —Dijo aumentando el tono de voz pero el menor no le temía sino todo lo contrarío se animó a colgarse del brazo del brujo quien lentamente comenzaba a distinguir a su rival. —Tenemos mucho de qué hablar, no hiciste la parte de tu trabajo huiste cuando mi hermana estaba en casa, tenemos un trato.
—Solo te importa tu maldito trato, solo quieres deshacerte de tu familia y no te intereso pues sabes una cosa puedes meterte tu dinero por donde no llega el Sol. —Grito tomando los hombros de su pareja y lo beso descaradamente, era consiente que el mayor no tenía la culpa por no corresponder a sus sentimientos, en ese momento estaba despechado, dolido por ser despreciado, su beso se vio interrumpió por un repentino movimiento. —¿Qué rayos haces?
Bang había jalado del brujo del cuello para elevarlo por el aire y después azotarlo con el piso el hombre al ver la mirada de su rival salió corriendo después Guk al ver que había ganado se giró para observar la cara de sorpresa del menor pasó su mano por su cabello había tacado al tipo sin pensarlo dos veces, su instinto era quien había reaccionado antes de su lógica, torció sus labios.
—Valiente noviecito te conseguiste. —Dijo en tono burlón al notar que el peliplateado hacia tiernos pucheros con sus rosados labios. —Si me vas a engañar busca a alguien que tenga más valor.
—Eres un tonto ese chico me gustaba mucho, deja de arruinarme la noche. —Contesto tratando de huir entre la gente pero el pelinegro lo abrazo por la espalda. —Aléjate o nadie va querer bailar conmigo.
Una risa escapo de los labios del demonio al inicio se molestó por la actitud del menor pero ahora le parecía bastante tierna, siempre el alcohol volvía más honestos a los mortales continuo repeliendo a los futuros pretendientes de su “novio” no quería encontrarle sentido a esas acciones tan infantiles que le provocaban hacer el humano, era consiente que si encontraba el origen a ese sentimiento que los humanos llamaban celos sería una mala señal para su futuro, nuevamente un bufido escapo de los labios de su prisionero.
—Admite que te gusto. —Dijo en un susurro el peliplateado girándose para toparse con los ojos cafés del mayor, se colgó de su cuello repegando más sus caderas las cuales se movían despacio a causa de la música. — ¿Estabas celoso? ¿No se supone que no te gustan los hombres?
—Deja de imaginarte cosas he invertido mucho en ti, mi relación contigo solo es un negocio en el cual por cierto llevo perdiendo demasiado dinero. —Contesto orgullosamente el peliengro quien estaba dispuesto a continuar hablando pero unos labios lo detuvieron, Zelo lo había besado, no dulcemente, no tímidamente sino todo lo contrario, era salvaje, pasional, tenía que alejarlo eso es lo que su mente le gritaba pero su cuerpo no parecía seguir esas órdenes, sus manos acariciaron esa pequeña espalda, quería poseerlo, introducirse en su piel, arrinconarlo en una cama para escucharlo gritar su nombre, su lengua se introdujo en esa húmeda cavidad. —JunHongie deja de quererme, no entiendes que no sé cuánto tiempo me llevara olvidarte cuando te vayas.
Dijo pegados sus labios, en un susurro que no llego a los oídos del menor, Bang no lo arrempujo como la última vez, no tenía la fuerza para alejarlo, no se puede detener una tormenta, un terremoto o la erupción de un volcán esos son fenómenos de la naturaleza que ningún ser humano puede controlar, de esa manera ningún demonio puede reprimir su deseo, su sed de sangre, Bang aun siendo el primer Rey tampoco lograba mantener al margen sus emociones, estaba seguro que el tatuaje que llevaba en la espalda era una broma porque en ese momento era capaz de sentir, de vivir sentimientos que nunca antes pudo percibir.
—Jun que bueno que te encuentro. —Interrumpió un pelinegro quien lucia muy preocupado pero al ver al demonio se sonrojo. —Perdón por molestar pero tenemos problemas.
—¿Qué pasa? —Contesto nerviosamente por la mirada fija del mayo, Sung le contó que Key había salido con un chico a besarse al callejón pero que de repente unos tipos rodearon a la pareja.—Busca al resto mientras nosotros vamos a ver qué pasa.
Bang no pudo oponerse ya que se vio arrastrado por el humano al llegar al callejón vio como un vampiro estaba arrinconado en la pared protegiendo a un humano rubio, los reconoció al instante ya que era la pareja que había visto unos minutos antes, los licántropos parecían aprovecharse de los jóvenes, al fijar mejor su mirada descubrió que el chico que JongHyun el jefe de uno de los clanes de vampiros más famosos de Corea, esa era una venganza, unos días antes escucho que el clan SHinee había atacado a una camada de lobos por ello esos chicos buscaban cobrarse la muerte de sus amigos, se podría decir que era justicia, ojo por ojo, diente por diente por esa razón detuvo su andar, no se inmiscuiría en un enfrentamiento estúpido.
—No pienso meterme en una batalla que desconozco. —Argumento el mayor deteniendo el andar de su compañero quien lo miró sorprendido. —Esto le enseñara a tu amigo a no confiarse de una cara bonita.
—¿Cómo puedes ser tan cruel? Es mi amigo y no dejaré que alguien lo lastimen. —Contesto molesto el peliplateado soltándose del agarre para correr hacia la pelea no sin antes girarse. —Eres un cobarde.
Bang chasqueo la lengua irritado, no es que fuera un cobarde pero no tenía el derecho de meterse en peleas de subterráneos, ellos debían arreglar sus conflictos, los demonios solo eran espectadores, metió las manos en las bolsas de su abrigo y se acercó al grupo quienes se giraron al escuchar los gritos de Jun quien les pedía detenerse, el menor llego a socorrer a su amigo quien abrazaba a su pareja.
—Niño tonto es mejor que te vayas esta es una pelea entre esta sabandija y nosotros. —Dijo uno de los lobos levantando un bat. —Vete si no quieres que dañe tu lindo rostro.
—No es justa su pelea, ustedes son siente mientras que el novio de mi amigo solo es uno. —Les contesto el menor tratando de levantar a la pareja de Key ya que sabía que el rubio no lo abandonaría.—Son unos cobardes.
Un suspiro escapo de los labios de Guk, Jun había utilizado el adjetivo que más detestaban los licántropos, cobardes, una simple palabra que enfurece la sangre de los lobos quienes son orgullosos y soberbios siempre levantando la bandera de valientes, leales y honestos todo lo contrario a los vampiros, notó como el chico del bat se disponía a golpear al peliplateado así que rápidamente se interpuso entre el atacante y su objetivo, con una sola mano detuvo el objeto deportivo.
—Es mejor que le hagan caso al niño. —Dijo con tono frio mirando fijamente a los ojos del líder de la manada, desprendió un poco de su aura para que supieran que era un demonio de alto rango. —No les conviene hacerme enojar lo sabes Woo Bin.