En la entrada del castillo una joven se despedía de su familia, a partir de ese momento comenzaría una nueva vida y afrontaría lo que el destino le destinara
-¿hija estarás bien?
-claro madre no se preocupen
- eres nuestro orgullo Rosaled, sé que tu boda traerá consigo la paz que nuestros reinos anhelan
-l-lo se padre, yo – la joven abrazo a sus padres – yo cumpliré con mi deber, los quiero
-nosotros también hija, dentro de dos semanas vendremos a tu boda, cuídate
La joven miro el horizonte por donde sus padre se marcharon, como era de noche se adentró al castillo, llegando a su habitación, solo quería descansar después de tantas emociones.
La princesa ingreso a su cuarto y se dispuso a bañarse, Julieta le presto algo de ropa para cambiarse y dormir, una vez colocado el camisón se introdujo en su cama y callo en un placentero sueño.
Eran las 2 de la mañana cuando un rechinar de la puerta despertó a kasidid, esta miro a todos lados estaba aún oscuro, pero alcanzo a distinguir como alguien se adentró a su alcoba, el miedo la invadió, sus sentidos se cerraron, estaba a punto de gritar cuando su visitante le tapó la boca evitándolo
-¡cállate! Quieres despertar a todo el mundo
-¡juliet! , ¿Cómo se te ocurre venir a estas horas?
- no quería que nadie se diera cuenta de mi visita
-pero ¿Qué haces aquí?
-jajajaja kasidid- la joven se subió sobre esta acostándose en su pecho- ¿no es obvio?
-¿q-que es obvio?
-¡quiero estar contigo! – la princesa de Bongolia, miro a los ojos a su amada y no pudiendo con la tentación beso esos labios que tanto le atraían.
-ahh no Saraí, esto no es correcto
-kasidid te amo, y tú a mí, yo… solo quiero estar contigo, no me importan los demás ¿puedes comprenderme?
-si… p-puedes hacer lo que quieras- la otra sonrió victoriosa
- te amo –
Solo bastaron esas palabras para despertar la pasión que había entre ellas, Juliet besaba con desespero el cuello Rosaled, marcando cada centímetro de este, sus manos se recorrían una a la otra. La ropa poco a poco perdió su poder, profundizando con este las caricias y aumentando el deseo.
Por primera vez ambas se unían como pareja, era una entrega en cuerpo y alma, sus corazones se conectaron como no lo harían con nadie más. Se sintieron en lo más profundo de su ser. El aroma que se desprendía en el lugar las excitaba, los jadeos y gemidos eran la mejor melodía que podían escuchar. Esa noche marco sus destinos, para siempre.
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La mañana llego al palacio, todo mundo iniciaba sus deberes. En cierto cuarto el despertar era el más maravilloso para ambas jóvenes.
-mgm- kasidid abría sus ojos, mas sintió a alguien a su lado -¿Qué?- las escenas de la noche se le vinieron a la mente, mas a pesar de estar avergonzada el haber sido de su amada Juliet, era lo mejor que le pudo pasar – amor – le deposito un tierno beso en los labios – despierta
-mgng 5 min mas – Saraí con un brazo atrajo a su pareja, impidiendo que se levantara
-ahh es tarde pronto vendrán a buscarte, necesitamos…. Vestirnos – esto último lo dijo en un susurro pues le avergonzaba su posición
-gracias mi amor
-¿Por qué dices eso mi Juliet?
-el saber que fui la primera persona que te tuvo me hace increíblemente feliz
-yo… yo te amo solo a ti. Yo sé que mi cuerpo no será solo tuyo pero…. Mi corazón si
-¿Por qué no podemos amarnos sin restricciones? ¿Por qué nuestro amor es prohibido?
-eso es….- un toque la puerta interrumpió el momento
-¡señorita Rosaled! ¿Esta despierta? – una vos desde la puerta las alerto - ¿puedo pasar? – ambas se pararon a tropezones buscando sus prendas
-eto… ¡dame un minuto por favor! –
-¿Dónde está mi bata?- preguntaba Saraí en un susurro
-no lo sé.. ah halla esta-
- ¿sucede algo?, ¿no está con usted la princesa Juliet de casualidad? No la hallamos en su cuarto
-“diablos”- si aquí estoy, pasa- ya ambas estaban cambiadas y lo mejor arreglada posible
-Juliet-sama, ¿Qué hace aquí?
-eto… estuve platicando con la princesa Rosaled, y se me fue el tiempo cuando acorde ya me había dormido
-bueno, se les solicita en el comedor para que desayunes, con permiso
-adelante – una vez que la maid salió del cuarto ambas pudieron respirar
-¡te dije que nos descubrirían!
-ya no paso nada, kasidid- dijo la otra quitándole interés
-jump, vamos arreglarnos.
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Una vez que llegaron al comedor, se dispusieron a desayunar, mas a la princesa de arcadia le toco por derecho y obligación sentarse junto su futuro esposo, el cual no perdía oportunidad para tratarla y tomarle la mano, esto molestaba tanto a sarai como a kasidid.
Después de desayunar y ciertas miradas de complicidad entre las jóvenes El rey les informo a las princesas que habría una fiesta de compromiso donde anunciarían el compromiso a los reinos vecinos.
-además del compromiso, tal vez y encuentres pareja hija – le decía el rey a Juliet, esto no le agrado a ninguna de las dos.
-padre no creo que sea el momento de eso no me siento preparada – “no pienso ser de alguien que no sea Rosaled.
–como sea hija. Por el momento arréglense que el evento es hoy.
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En el salón la música sonaba con la melodía, todo el mundo se divertía menos dos jóvenes princesas, Rosaled usaba un vestido negro de gala, con una corona de oro, mientras que Saraí traía uno blanco con detalles plateados, el pelo trenzado de lado y su corona.
-ya veo ¿Cuándo será la boda?- preguntaba un noble a la “feliz” pareja, armando tenia agarrada a su futura esposa de la cintura mientras que esta solo miraba a su amada platicar a lo lejos con unos príncipes de otros reinos, eso no le agradaba para nada
- si es dentro de dos semanas mi amada y yo estamos esperando la fecha ¿verdad?- el príncipe deposito un beso en su mejilla, sorprendiéndola
-¿eh? Ahh si claro –“maldición eso estuvo cercas, como le hare para soportar sus besos y caricias…. ¡Juliet! Mi amada solo tu puedes hacer latir mi corazón, ¿Qué hare? “
-princesa Juliet, esta tan hermosa como una flor
-gracias conde franston – la joven odiaba tener que soportar a esos egocéntricos príncipes, de vez en cuando miraba donde su hermano y le molestaba que este la tocara con tanta confianza.
-¿Quién diría que esta boda fuera tan provechosa? – estoy molesto a la princesa
-una boda no debería ser un contrato si no una unión de dos corazones- la mirada de la joven delatan su amor.
-y dígame…. ¿no tiene planes de boda?- esa pregunta la descoloco
-¿ehh? Eto…. Pues no la verdad aun no – el joven se le acerco más de su gusto
-por una joven tan hermosa como usted. Me casaría cuando lo dispusiera – dicho esto la tomo de la cintura, Juliet quería golpearlo por atrevido pero estaba paralizada
-disculpe, me podría prestar a la princesa- para su suerte kasidid llego donde ella y la tomo de la mano sin esperar respuesta, caminaron fuera del alcance de todos.
Varios pasos las llevaron a los pasillos, donde nadie podía verlas, más Rosaled no decía nada solo se quedo callada con la mirada perdida
-¿sucede algo? ¿Ya te cansaste de divertirte con mi hermano?- esto molesto a kasidid
-¿disculpa?
-lo que oíste – de un movimiento Saraí la coloco contra la pared- te veía muy divertida con él, además ¿Por qué dejas que te toque con tanta confianza? ¿ya se te olvido que tu eres mía?
-¡¡cállate!!, snif no deberías decir eso snif cuando tú estabas a punto de besar a ese tipo snif – kasidid se agarro de esta llorando
-¿estás celosa? ¡Idiota! Yo solo te amo a ti, eres mía y no te compartiré porque te amo- con sus manos Juliet levanto la mirada de su amada- ¿me amas?
-¡¡si te amo!!- sin decir más se aventó hacia esta besándola, cada vez estos besos se volvían mas demandantes, más apasionados, pero se les olvidaba algo muy importante
-ahh espera – Saraí besaba el cuello y despojaba a la otra del vestido- estamos en el pasillo. Ahh vamos a- a el cuarto >////<
- está bien ahh pero rápido necesito poseerte – entre besos llegaron a su destino, abrieron la puerta y se perdieron amándose mutuamente, sin importarles la dichosa fiesta.
Mas para su desgracia un par de ojos miraban impresionados y sorprendidos dicha escena.
Continuara------