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¿Tú? ¡No puede ser! por Liss83

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Notas del capitulo:

Mas de dos mil review en un dia, no lo puedo creer. Simplemente a lo Soda Stereo GRACIAS... TOTALES, es que estoy viendo viña del mar y estan cantando los Fabulosos Cadilac asi que se ensendio mi lado roquero. Una pregunta, ¿ de donde son? Yo de la tierra mas linda de todas, Santa Cruz - Bolivia. Besos

  Aquel día estaba nublado y hacia algo de frío, por lo que se quedo en su habitación leyendo un libro que había encontrado en la biblioteca acompañado por sus amigos, quienes estaban acostados a los pies de su sillón.       Ya había pasado una semana desde el trato que había hecho con el lord. Si bien su noches se habían vuelto… intensas nuevamente tras… la reconciliación con el Lord, por decirlo de alguna manera, ya se había puesto en contacto con los gemelos Weasley para que le hicieran llegar un surtido de grageas que simularan la muerte de alguien, pedido exclusivo. Había pagado por adelantado, a pesar que los gemelos le dijeron que no era necesario.       Se paro para estirar las piernas, cuando vio por la ventana llegar a Draco, quien llevaba a Ron con él.       - Esperen aquí -  ordeno Harry saliendo rumbo al despacho del lord, sabiendo que en el camino se encontraría con sus ex compañeros de colegio - Mi lady – dijo Draco haciendo una venia - Lord Malfoy – respondió Harry mirando de reojo a su mejor amigo quien gruñía bajo -, ¿vienes a ver a Tom?  - Si mi lady – dijo acariciándole el cabello a Ron para tranquilizarlo - ¿Quieres… que… lo cuide… - señala a Ron – mientras… hablan? - No quisiera molestar a mi reina – respondió el rubio haciendo una venia. - En absoluto – dijo Harry tomando la correa -. Se llevara de maravillas con las mascotas que Tom me regalo. – Y por alguna razón esa palabras hicieron que a Ron se le erizara toda la piel – vamos - Ron, compórtate antes de irse – sentencio su amo       Harry regreso con el pelirrojo a su habitación en completo silencio, no sabia como reaccionaria este al ver a su hermano y cuñada convertidos en mascotas. Pero al entrar un potente ladrido de Bill lo saco de sus pensamientos, este se escuchaba molesto,  y el gimoteó de Flour, que estaban en una esquina       - ¿Qqqquuueee hhhaaaccceeesss ttttúuu aaaqquuuiii? – pregunto molesto Harry - Sssooolllóoo vvveeennniiiaaa aaa ppeeeddiiiirrrrlllleesssss qqqquuueeee innnttteerrrcedáaaannn póoorrr miíii annnttteeee llllaaaa rrrreeeiiinnnaá pppppaaaarrrrraaaa pppppoddddeéeerrrr ccccoooommmmeeerrrrr - Nagini no colmes mi paciencia. Le podría pedir a Tom un par botas nuevas - ¿Yyyy eeeessssoooo qqquuueee cccooonnnmiiiggooo – pregunto la serpiente dijo con altanería - Serán de… serpiente. Largo de aquí. Y tienes prohibido acercarte a ellos – ordeno Harry - ¡Tttteeennngggooo haaaammmmbbbrrreéee! – protesto Nagini - Siiiii teeee coooonnnviiiiierto en booootassss ya no ssssentirássss hammmbreeee – dijo Harry con simpleza. La serpiente siseo y se fue protestando por tener hambre - ¿Están bien? – pregunto Harry, por lo que la pareja se acerco temblando y gimiendo – tengo que sacarlos de aquí, pero ya – les hizo una caricia –. Tengo que ponerme en contacto con la orden. Miren quien vino de visita – dijo y Bill corrió hacia su hermano mientras gimoteaba. Este bajo la cabeza gimoteando también. – Perdónenme, yo nunca quise esto – dijo con lagrimas, por lo que Bill se las lamio y con la cabeza le acaricio la barbilla.        *          *          *       Draco desde pequeño había crecido convencido de que las ideas de el Señor Tenebroso eran las correctas acerca de la superioridad de la sangre. Para él era algo casi natural la situación del mundo mágico en ese momento, por lo que, cuando el Lord lo había llamado para encomendarle el hecho del reclutamiento de nuevos mortífagos fuera de Inglaterra, se sintió honrado. Era algo provisional, ya que quien se encargaría realmente de esto era Greyback, pero se necesitaba de contactos como los que tenían los Malfoys para abrir el camino. Dado que a Draco lo ponía nervioso el hecho de estar cerca del hombre lobo, viajarían por separado. El problema residía en su pequeña mascota. No quería exponer a Ron a un viaje tan largo con las incomodidades que ello representarían para el pelirrojo.        - Quizás podrías dejarlo con tu padre – sugirió el Lord –, Remus cuidaría bien de él - Lo ayudaría a escapar. Hace unos días, por ejemplo, lo intento y no quiero correr riesgos.  - ¿Lo castigaste? – preguntó intrigado el lord - Perdí el control y casi lo mato       *** FLASHBACK ***       Cuando Ron cayo inconsciente, recién se detuvo y fue consiente de que había perdido el control. Su mascota solo se había asustado de manera lógica.  Respiro hondo tratando de serenarse. Le pidió a Blaise que los dejase solo, con la firme promesa de que no seguiría castigando al pelirrojo.          Velo sus sueños durante toda la noche y cuando lo vio moverse, se acerco y le acaricio el cabello. Subió a la cama y lo acomodo entre sus brazos       - Shhh ya paso. – Le beso la frente – tranquilo. Disculpa la paliza. Perdí el control cuando te vi correr - No quiero tener hijos. – sollozo – no soy mujer - La reina también lo hará – Ron se aferra a la ropa del rubio - Tratas a Harry con mucho respeto – se limpio las lagrimas - Solo sobrevivo. Y si me dejas te puedo ayudar a hacerlo - ¿Cómo un perro? - Levanta la cabeza. – Cuando Ron obedeció, Draco lanzo un hechizo en su collar – Esto no permitirá que vuelvas a intentar huir jamás, y lo mejor es que nada ni nadie te podrá quitar el collar, así que… hazte a la idea de que eres solo mío – dijo acariciándole el muslo y besándole el cabello - Déjame ir – suplico Ron - Nunca – fue la única respuesta verbal que recibió        *** FIN DEL FLASHBACK ***       El lord lanzo una carcajada. Sabia sobre la crueldad del menor de los Malfoy, pero jamás se imagino su nivel. Le gustaba. Secretamente, deseo que Harry fuera así, pero también reconoció que era precisamente eso lo que mas le fascinaba de su pareja, su bondad. Era un autentico león, o mejor dicho, leona. Y es que aunque muchos pensaran que buscaba humillar a su pareja con ese trato, lo cierto era que esa era su rara manera de llegar a su corazón. Siempre había visto a Harry de esa manera, como una chica atrapada en el cuerpo de un hombre y él la había decidido liberala.     - Tengo entendido que tu mascota es el mejor amigo de Harry - Si mi lord. La familia de Ron prácticamente acogió a la reina cuando llego al mundo mágico - Si tanto te preocupa su seguridad déjalo aquí – sugirió el lord. – Estoy seguro que a Harry le encantara cuidarlo - No es mi intención causarle molestia a mis lores - No se diga mas – dijo el lord poniéndose de pie – Ron se quedara al cuidado de la Reina       Draco sonrió haciendo una venia y se retiro a buscar a su mascota. No confiaba para nada en Harry Potter, pero no le quedaba de otra, era prácticamente una orden directa del Lord, por lo que no se podía rehusar. Estaba completamente seguro que Potter iba facilitar la fuga de Ron, a menos que… Se dirigió al salón donde sabia estarían los Gryffindor. Golpeo  y una voz suave le dio autorización para ingresar. Harry leía un libro sentado en su sillón con los tres Weasley a sus pies       - Mi señora – dijo haciendo una venia  - ¿Ya te llevas a Ron? – pregunto Harry poniéndose de pie - Ron pasara unos días aquí – dijo el Lord entrando al lugar – ¿no te molesta cuidarlo, verdad querida? – pregunto abrazando a Harry por la cintura - En absoluto – dijo este con una sonrisa y pensando ya en como haría escapar a los tres Weasley - Me gustaría despedirme de él, si no es molestia - En absoluto – dijo el Lord -, chicos, vamos para que estiren las piernas – tanto Bill, como Flour siguieron a los lores fuera del lugar.        Una vez quedaron a solas, Ron se encogió ante la mirada de su amo que se sentó en el sofá donde antes estuviera la reina. Le hizo una seña para que se acercara. Le acaricio el cabello y le beso suavemente los labios       - Ven aquí  – dijo Draco haciéndole un gesto para que se sentara en sus piernas, este obedeció de inmediato acomodándose entre los brazos de su amo que rodeo su cintura con los brazos – ya escuchaste, me voy de viaje y tú te quedaras aquí al cuidado de la reina. No intentes aprovecharte de mi ausencia o sabrás lo que es dolor ¿esta claro? – Ron le lame el rostro al rubio – si te comportas hasta piense en la idea de dejar de tener una perra y comience a tratarte como mi mujer - No tendrá quejas de mi, mi amo     Lentamente se acerco y le dio un beso en los labios sintiendo como la entrepierna del rubio despertaba. Este le acaricio el muslo, por lo que el pelirrojo gimió en voz baja mientras pensaba en Hermione  

 

Notas finales:

Les gusto? Ideas. Lanzen ideas


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