Steve lo beso con dulzura en los labios. Era increíble que en apenas unos días se hubiese enamorado de ese hombre de esa manera. Lo que en su momento le había parecido una locura, ahora era parte esencial de su vida, al grado de desear que Danny jamás se recuperara de esa amnesia
Steve volvió en la noche. El papeleo le había impedido hacerlo antes. Al encontrar la casa tan silenciosa supuso que Danny ya estaba dormido. Preparo la cena y fue a la habitación para despertarlo con un beso. Grande fue su sorpresa al no encontrarlo, recorrió la casa pero no había señas de este. Corrió al closet y no encontró las cosas de su compañero. Reviso toda la habitación y encontró una carta dirigida hacia él sobre la mesita de noche. Con mano temblorosa la abrió y leyó
“Steve te dejo esta carta porque me siento incapaz de pararme frente a ti y confesártelo.
Lo que en un principio fue irritación y molestia hacia tu manera de ser y tus métodos pocos ortodoxos, se convirtió en verdadera amistad y compañerismo con el tiempo. Aprendí a disfrutar de cosas simples, como desde tu excéntrica forma de conducir mi auto hasta el hecho de saber que ser tu amigo significaba tener dibujada una diana en todo el cuerpo. Aprendí a comer sano, aunque no me guste. Aprendí que podía volver a sentirme vivo si tú estabas cerca.
Y aprendí lo que eran los celos. Celos de que alguien más tenga tu atención, celos de que te toquen, celos de que te besen, celos de no poder ser yo quien haga todo eso. Así que cuando la oportunidad se presento no dude en tomarla y fingí no recordar ser solo tu amigo. Perdóname Steve. Mi egoísmo te robo a la mujer que amabas y no medí consecuencias. Me voy de tu vida sabiendo que jamás olvidare ni tus besos ni la noche que me regalaste. Me voy con el alma hecha pedazos por amarte, pero no me arrepiento. Perdóname, pero después de Grace, tú eres lo mejor que me paso en la vida, aunque deba renunciar a ambos
Adiós mi amor. Adiós mi Steve.
Tu Danno”
Solo al terminar de leer la carta, fue consiente de las lágrimas que surcaban su rostro a raudales. Danny tenia razón, ninguno fue consiente cuando habían dejado de ser solamente de amigos y pasar a ser un amor inmenso y fuerte, lo suficientemente para sobrevivir a las inseguridades del detective y su estupideces propias. Como de costumbre en lo que se refería a su vida personal, solo actuó por impulso. Salió de prisa y condujo a casa de Rachel lo más rápido que pudo. Al llegar salto del Camaro y toco el timbre insistentemente. Afortunadamente Danny había dejado el auto
- Steve – dijo Rachel sorprendida – ¿Qué haces aquí?
- ¿Has visto a Danno? – dijo este desesperado
- Él… – dijo la mujer
- Tío Steve – sollozo Grace corriendo hacia él
- Monito – dijo alzando a la niña
- Mi papá se fue – dijo llorando –, ya no lo voy a ver
- ¿Sabes dónde fue? – dijo Steve nervioso
- No creo que debam… – dijo Rachel
- A… ca…sa de la a… abu…ela – dijo la niña – di…jo que yo iría en va…caciones, pe…ro que él ya no ven…ven…dria. Yo quiero que vuelva
- Grace, ve adentro – dijo Rachel
- ¿Hace cuánto se fue? – pregunto Steve
- Hace una hora más o menos – dijo Rachel
- Va volver monito – susurro Steve –, te lo prometo
- Grace, adentro – ordeno su madre
- Adiós tío – dijo la niña y obedeció
- Disculpa – dijo Steve – sé que no debi…
- ¿Qué paso para que Danny tomara esta decisión? – dijo Rachel intrigada
Steve le conto a grandes rasgos lo ocurrido con Danny y le prometió traerlo de vuelta para tranquilidad de Grace. Luego condujo hacia el aeropuerto sin un plan fijo en la cabeza, excepto traer de vuelta Danny a Honolulu
* * *
Estaba feliz de volver a su casa, a su hogar, pero le era imposible pasar por alto el hecho de que ya no vería a diario a su hija, ni a…
Su madre le estaba preparando la cena mientras él estaba perdido en sus pensamientos, a pesar de estar en la sala rodeado de su padre y sus hermanos, aparte de… Jack. Lo conocía de toda la vida. Habían sido compañeros de escuela, y aunque nadie lo sabía, quien le había robado su primer beso. Ni bien Jack se había enterado de su regreso, lo había ido a visitar invitándolo a salir a mil lugares
- ¿Me estas escuchando? – dijo Jack
- Si – dijo Danny sonriendo, mientras sonaba el timbre insistentemente – será un placer ir contigo
- Veras que no te vas a arrepentir – dijo Jack
- ¡Así que aquí estabas! – dijo Steve entrando a la habitación
- ¿Qué…que… ha…ha… ces… aquí? – dijo Danny sorprendido y nervioso a la vez
- ¡Ve por tus cosas en este momento! – ordeno Steve – nuestro vuelo sale en una hora
- ¿De qué hablas? – dijo Danny sorprendido – ¿Qué vuelo? Yo acabo de llegar
- ¡Hoy mismo nos volvemos a Hawaii! – exigió Steve
- Yo no voy a ningún lado – dijo Danny – sé que estas furioso por la mentira que te dije…
- ¿Qué pasa aquí? – dijo sorprendido el padre de Danny
- ¡Ve por tus cosas en este momento, Danno! – ordeno Steve
- ¡Tú no me mandas, animal! – también alzo la voz el rubio
- ¿Quieres ver que tan animal puedo ser? – dijo Steve con su mejor sonrisa
- ¡Quita esa sonrisita – exigió Danny caminando hacia atrás – que no presagia nada bueno! ¡Y aléjate de mí!
- ¿Ya desempacaste? – pregunto Steve acercándose
- Aléjate Neanderthal – exigió retrocediendo mas
- Ya escucho – dijo Jack interponiéndose entre ambos
- No quiero problemas amigo – dijo Steve – así que ¡quítate de mi camino!
- Lo dudo “amigo” – dijo Jack – no creas que vas a llegar y…
- ¡Quítate! – dijo Steve tomándolo de la camisa
- ¡Steve no…! – dijo Danny, pero este lanzando a Jack lejos mientras todos gritaban histéricos – ya esta. Steve al natural
- Vamos a casa – exigió abrazándolo por le cintura
- Steve, escúchame… ¡Neanderthal! – grito cuando Steve lo levanto y se lo hecho al hombro como si fuera un saco de papa – ¡bájame ahora!
- Lamento la manera en que llegue – dijo Steve mientras Danny forcejaba – volveremos para las vacaciones de Grace con más calma. Permiso y buen día – concluyo antes de salir con Danny al hombro
- ¡Bájame! – gritaba Danny
- Llamare a la policía – dijo la madre de Danny corriendo tras la pareja
- ¡No! – grito Danny mientras Steve lo metía al taxi – es capaz de incendiar todo el estado. Vendré en las vacaciones
- Al aeropuerto – ordeno Steve
El viaje al aeropuerto lo hicieron en completo silencio y luego el regreso a la isla. Danny sentía que su corazón se le iba salir en cualquier momento. ¡Steve lo había ido a buscar, a su estilo claro, pero había ido! Quería, necesitaba, desesperadamente que le dijera que era porque lo amaba, porque quería estar a su lado, pero por momentos esas esperanzas se iban al traste imaginando los peores escenarios. Llegaron a Hawaii al amanecer y se fueron directamente a casa del comandante
- ¡Ya basta! – dijo Danny ni bien entraron a la sala – ¡esto se llama secuestro y puedo presentar cargos!
- ¿Quién era ese? – exigió Steve
- ¡Que te importa! – grito el detective haciendo gestos con sus brazos
- ¡Claro que me importa! – grito Steve – de ti me importa todo
- ¿Por qué? – reclamo Danny pero fue callado por unos labios que reclamaban los suyos con total desesperación
- Me importa porque te amo – dijo Steve apenas separando sus labios –, me importa porque herví de celos de solo pensar que ese imbécil te pudiera tocar. Porque solo yo te puedo mirar, solo yo te puedo adorar
- ¿Qué… estas…? – susurro Danny
- No eres el único al que el corazón traiciono Danno – dijo Steve acariciándole el cabello mientras lo sentaba en sus piernas – tuve que medio perderte para aceptar que estoy perdida e irremediablemente enamorado de ti detective
- No juegues con eso Steve – suplico el rubio
- ¿Crees que es un juego? – dijo el Marín sorprendido – mira todo lo que hice para traerte de vuelta. ¿De verdad crees que es un juego?
- Yo… – susurro Danny bajando el rostro
- Te… a… mo – dijo Steve - ¿Crees que es un juego?
- Estas confundido – susurro el detective
- Cuando leí tu carta – dijo Steve – fue como recibir un golpe, una paliza. Siempre sentí que algo cambiaba entre nosotros, pero era mil veces más simple hacer de cuenta que era mi imaginación, un absurdo, pero no era asi. Y si no crees mis palabras, me remito a mis hechos. Se que actué mal, pero que ese hombre se creyera con derechos de... – cerró los ojos y respiro hondo – dime que aun no te perdí. Que estoy a tiempo de ser feliz a tu lado
- ¿Y Catherine? – dijo Danny
- Otro terrible error del cual tu… “amnesia” me salvo – dijo Steve –. Danno solo te pido una oportunidad. Mira te propongo que lo intentemos hasta las vacaciones. Si funciona, que se que pasara, le pediremos permiso a Rachel para llevar de paseo a Grace a New Yersey y yo me presente como se debe con tu familia
- ¡Te van a matar! – dijo Danny sorprendido
- Nada de eso – dijo Steve besándolo mientras el teléfono suena – me van a adorar. Ya lo veras
- Hola – dijo Danny al teléfono mientras Steve le besaba el cuello – ¡Mamá! – escucha – no te preocupes esta todo bien. Acabamos de llegar – escucha –. No, solo es poco impulsivo. Un animal Neandertal, nada mas, pero yo lo se controlar. Ya le puse la correa – escucha y ríe – te entiendo
La conversación con su madre fue larga pero divertida porque Steve en ningún momento le permitió salir de sus brazos.
La que estuvo realmente feliz fue Grace porque su papá había regresado y esta vez para siempre. Danny se mudo definitivamente con Steve, razón por lo que este no podía dejar de sonreír ni siquiera durante la semana posterior
- ¿Y tú de que te ríes animal? – grito Danny furioso mientras enmanillaba al sospechoso
- Es que nunca lo había notado, incluso durante un tiroteó te vez sexi – dijo sonriendo Steve, provocando la carcajada de sus compañeros y el sonrojo del rubio
- ¡Cállate Animal! – mascullo este
Tal como Steve lo prometió habían vuelto a Yersey para las vacaciones de verano en compañía de Grace que estaba de mas de feliz de ver a sus abuelos. Aunque estos miraban un tanto recelosos a Steve.
- Abuelo – dijo la niña mientras Steve y Danny discutían preparando la cena – no quieras asesinar al tío Steve por sus peleas con Danno. Es su rara manera de decirse te amo. Mi mamá y Stand se besan, Danno y el tío Steve discuten
- ¡Grace! – dijeron Steve y Danny al mismo tiempo algo sonrojados
- ¿Qué? – dijo la niña – ¿acaso miento?
Los Williams no pudieron evitar reírse cuando Steve abrazo a un Danny totalmente sonrojado que intentaba esconder en el pecho del Marín que lo abrazaba de manera protectora. Grace tenia razón, ese par se amaba
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