Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una cuestión de pelos por Orseth

[Reviews - 66]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 

            Se quedó de pie como estatua al divisar a lo lejos a un pequeño grupo de chicos en donde curiosamente uno de ellos sobresalía, pero no sabía si era por su rebelde cabello negro o por su complexión un poco más baja que la de los demás o simplemente porque se veía más lindo que todos ellos.

            -¿Mas lindo? –pensó horrorizado de si mismo mientras se escondía tras una columna.

            El grupo Griffindor paso cerca de él riendo y conversando animadamente mientras él se desplazaba conforme iban pasando y cuando al fin se alejaron lo suficiente salió de su escondite maldiciendo a esa bola de chicos escandalosos que estaban justo en donde no se les quería.

            -¿Pero porqué quiero que esté solo? –Se preguntó recargado en la columna viendo al grupo alejarse- ¿acaso se lo voy a pedir de verdad?

            Para ese momento inclinó la cabeza mientras suspiraba con aire derrotado dándose cuenta de que desde el momento en que le mintió a Blaise para salir solo del cuarto, ya se había decidido a pedirle eso a Harry Potter.

 

__________________________

 

 

            Desde ese momento se dedicó a vigilar a Harry cuidando de encontrarlo solo pero para su desgracia siempre estaba acompañado, sino de Granger entonces de ese Weasley que detestó más que nunca por entrometido.

            -¿Acaso nacieron siameses? –pensó con fastidio cuando los vio salir de los vestidores de los jugadores de Quidditch.

            Nunca se había puesto a pensar que tanto tiempo pasaban juntos esos dos a pesar de pertenecer a la misma casa y justo cuando pensó que pasaría otro día perdido pues ya era martes por la tarde, Harry se separó de Ron y se enfiló hacia un pasillo desierto en donde se encontraban unos baños.

            Entró apresurado para vaciar su vejiga y encontrarse con Hermione y Ron para comparar unas notas antes de la cena.

            -¡Uff! –exclamó aliviado cuando por fin comenzó a orinar en el mingitorio, pero su alivio se acabó cuando vio a través del espejo a cierto rubio abrir la puerta.

            Fulminándolo con la mirada pues últimamente Malfoy se había puesto más insoportable, terminó de orinar y se dirigió a los lavabos para después salir de ahí y evitar una pelea pues se había propuesto golpear al rubio a la próxima provocación sin importarle un pito el castigo que pudiera ganarse, pero curiosamente esta vez Malfoy no dijo nada o al menos eso pensó por un momento pues al tomar la perilla de la puerta escuchó una voz.

            -Potter…

            Harry rodó los ojos y se giró para encararlo encontrando a Draco recargado en la pared con los brazos cruzados y en una actitud que realmente no supo interpretar.

            -Te lo advierto Malfoy, si empiezas con tus…

            -No quiero pelear –interrumpió odiando como nunca ese momento de su vida.

            -¿Eh? –exclamó descolocado por la respuesta de Draco.

            -Escucha, solo quiero hablar contigo un momento ¿podemos?

            ¿Podemos?... esa era una pregunta nada convencional en el Slytherin que al parecer solo sabía insultar, no pedir cosas y menos de manera amable.

            -No hay ningún truco –dijo percibiendo la confusión y duda de Harry- escucha, esto es difícil para mí y solo te pido un momento ¿vale?

            -¿Quién eres?

            Draco rodó los ojos e hizo un gesto de exasperación.

            -¡Soy yo, soy Draco Malfoy! ¿¡Pues quien creías?!

            -Es que Malfoy suele ser un estúpido arrogante de mierda hijo de puta que no suele pedir nada y mucho menos es amable conmigo –respondio alzando una ceja.

            Draco hizo un chasquido con la boca mientras negaba con la cabeza sin poder debatir aquello.

            -Escucha Potter, lo acepto… sé que fui un tanto… grosero… -El resoplido de Harry al escuchar aquello hizo que hiciera una mueca y añadiera tentativamente: -de acuerdo, fui un tanto déspota contigo.

            -Fuiste un maldito bastardo de mierda Malfoy y ahora si me disculpas… -dijo dándose vuelta y tomando la perilla de la puerta.

            -¡No, espera! –Exclamó casi corriendo hasta donde estaba Harry, quien en seguida se puso en guardia- ¡de verdad, de verdad solo quiero hablar, lo juro!

            Harry frunció el ceño mirándolo sospechosamente.

            -Por favor Potter, solo será un par de minutos.

            -¿Por favor?... ¿tú me estás pidiendo algo  a mí por favor?

            Draco inclinó la cabeza mientras suspiraba y se rascaba una oreja, pero no la normal sino la gatuna.

            -Sí pero antes prométeme que no le dirás a nadie lo que conversamos.

            -Yo a ti no tengo que prometerte ni una mierda, así que déjame en paz y quítate de la puerta.

            Draco alzó la vista y vio a Harry a muy poca distancia preguntándose cómo alguien tan guapo podía ser tan obstinado.

            -¿Guapo?... que un mal rayo me parta –pensó torciendo la boca y mirando al techo.

            -Quítate o te quito.

            -Potter, en serio… ¿tanto te cuesta hablar conmigo cinco minutos? ¿Acaso la comadreja y Granger no pueden vivir sin ti?

            -¿Y así quieres que te preste atención?

            -No le dije sangre sucia a Granger –exclamó como si fuera un gran gesto de su parte.

            -¿Y debo agradecerte eso? Ay por favor, ya hazte a un lado.

            -Por favor Potter, de verdad que necesito hablar contigo –exclamó poniéndole una mano en su hombro, gesto que hizo a Harry fulminarlo con la mirada.

            -Yo… -dijo retirando la mano de inmediato- por favor, déjame hablar.

            Viendo que Draco en verdad parecía muy urgido de hablar con él y que solo así lo dejaría pasar se hizo un paso hacia atrás mientras cruzaba los brazos en una clara actitud de espera impaciente.

            -Pero prométeme que…

            -Ya te dije que no y te concedo un minuto para decir lo que tengas que decir y ya llevas cinco segundos.

            Draco torció de nuevo la boca y miró hacia un lado más por nerviosismo que por otra cosa sintiendo la garganta seca.

            -¿Y bien? Ya llevas diez segundos.

            -¡No me presiones!

            Harry lanzó un bufido mientras descruzaba los brazos y daba un paso adelante.

            -¡De acuerdo, de acuerdo, hablaré!

            Harry regresó a su posición original viendo como curiosamente las mejillas de Draco enrojecían de repente.

            -Yo… yo debo hablar de algo muy importante contigo.

            -Eso estoy esperando.

            -Pero no es nada fácil y por eso quiero que seas discreto.

            -Ya te dije que yo hablo con quien quiera.

            -Sí, lo sé… pero yo apelo a tu sentido Griffindor de ser discreto… digo ¿no se supone que todos los Griffindor son ñoños y buenos?

            Harry lo miró incrédulo y simplemente sonrió al ver que Draco en verdad no notaba lo exasperante que podía llegar a ser.

-En serio no tienes idea…

            -¿De qué?

            -De nada y como precisamente nada es lo que estás diciendo, me voy.

            -¡No, espera! –exclamó poniéndole las manos en el pecho, toque que deshizo de inmediato- pero si no eres discreto en esto te juro que iré aplicándole Obliviates a todo aquel que escuche que habla de esto y si no me sale bien poco me importa matarles las pocas neuronas que tienen y dejarlos más idiotas de lo que ya están.

            Harry hizo un gesto de sorpresa al escuchar la advertencia de Draco, pero simplemente ya no dijo nada, solo guardo silencio y suspiró con evidente impaciencia haciendo que Draco retomara el asunto con evidente pesar.

            -Bueno Potter, tú has escuchado lo que la gente anda diciendo ¿verdad?

            -¿De qué hablas? –frunció el ceño mientras permanecía con los brazos cruzados.

            -Sí, de lo que dicen de… de los rumores acerca de mis orejas de gato.

            -¿De qué rumo…? Espera… -exclamó esbozando una pequeña sonrisa al comprender a que rumores se refería el rubio- ¿hablas de lo que dicen de ti, de mi y de tus orejas de gato?

            -Sí, de eso –respondió sintiendo que la cabeza iba a explotarle.

            -Mira Malfoy, no vayas a empezar a joder que fui yo quien comenzó esos rumores porque te juro que…

            -No, ya sé que no fuiste tú.

            -¿En serio?

            -Sí, así que el punto no es ese.

            -¿Y entonces?

            Draco inhaló profundo como queriendo darse valor, pero no era nada fácil lo que quería decir.

            -Esos rumores… esos rumores son ciertos.

            -¿Qué? –exclamó entrecerrando los ojos sin entender ni jota.

            -Qué para que mis orejas desaparezcan pues… tú sabes…

            -No, no sé.

            -¡Qué un rayo te parta Potter, ya sabes lo que dicen los rumores, no me hagas repetirlo! –dijo dando pasitos impacientes por el reducido espacio.

            Harry por poco y estalla en carcajadas al ver el claro conflicto de Draco y de ver su rostro sonrojado mientras se moría de vergüenza.

            -Estás a punto de carcajearte de mi desgracia, puedo verlo.

            -¿Y? yo me rio de quien se me da mi puta gana.

            Eso no ayudaba en nada a Draco pero ya estando ahí, debía seguir aunque no pensó que fuera tan difícil entablar una conversación con aquel Griffindor.

            -De acuerdo, solo recuerda lo que dije de andar regando por ahí esta conversación.

            -¿Pero qué conversación Malfoy, si solo te la has pasado divagando cosas sin sentido?

            Draco se quedó con las palabras atoradas nuevamente en la boca, así que espero unos segundos antes de poder seguir.

            -Bien, yo… bueno como te decía, los rumores que dicen sobre la manera de romper el hechizo, es cierta- Ni con eso Harry dejo de sonreír pues hasta el más tonto debía saber que esos rumores eran falsos- ¡hablo en serio!

            -Por Dios Malfoy, no puedes ser tan estúpido para creer semejante cosa ¿Qué no ves que todo es producto de un malintencionado?

            -No lo es, de hecho yo desearía que así fuera pero no… de hecho tengo pruebas de que es verdad.

            Solo entonces la sonrisa de Harry comenzó a desaparecer.

            -¿Y qué pruebas son esas?

            -Recibí una carta de la persona que me hechizó, me hablo de ciertas cosas que solo Madam Pomfrey y yo sabemos.

            -¿Cómo qué?

            -Cómo que recibí una poción de sangre.

            Con eso Harry termino por convencerse pues efectivamente sabía que ese asunto no era conocido por nadie más, a excepción de él y sus amigos claro.

            -Sí que la cagaste en serio Malfoy.

            -¿De qué hablas?

            -¿Con quién la cagaste tan feo que de plano tuvo que desquitarse así de ti?

            -Yo no le he hecho nada a nadie –respondio muy indignado mientras alzaba la cara con altivez.

            -Esa no te la crees ni tú, andas tirando tanta mierda al mundo que de plano alguien te la regreso y en plena cara.

            -Bueno ¿vas a ayudarme o no?

            -¿A qué?

            -¿Cómo que a que Potter?... pues… pues… a romper el hechizo claro -La boca de Harry se abrió pero no dijo nada, aunque más bien fue porque no pudo- tomar la decisión de pedirte ayuda no fue nada fácil y de hecho pagaría lo que fuera porque esto no fuera necesario, pero de plano estoy desesperado y necesito desaparecer estás orejas y cola antes del fin de semana.

            Pero ni con esa explicación Harry se descongeló, por lo que Draco rodó los ojos exasperado.

            -¡Reacciona Potter!

            -¿Y qué quieres que te diga?

            -Pues… pues que vas a ayudarme.

            -¿Estás demente? ¿Acaso quieres que te coja para que se rompa tu hechizo?

            -¡Obvio que no quiero! ¿¡Acaso crees que hago esto por gusto?!... Es solo que estoy desesperado.

            -Pues sigue desesperado que yo no voy a ayudarte –respondio caminando hasta la puerta pasando a un lado de Draco.

            -¡Espera Potter, no puedes irte así como así!

            -Mírame.

            -¡Espera! –dijo tomándole la mano que Harry había puesto en la perilla- por favor al menos piénsalo… yo que se no es fácil que alguien diga eso y uno acepte así como así, aunque claro, para alguien como tú no debería ser tan difícil.

            -¿Alguien como yo? –repitió retirando su mano de la de Draco.

            -Sí, un raro… digo, a ustedes les gusta el sexo más que nada ¿no?

            Harry volvió a abrir la boca de la sorpresa y de plano lo aventó para salir de ahí, obviamente seguido por Draco.

            -¡Potter, no te vayas!

            -Eres un idiota –masculló mientras se alejaba a paso rápido del baño con el rubio pisándole los talones.

            -¿Y ahora que dije?

            Harry se detuvo para mirarlo estupefacto.

            -¿Hablas en serio?

            -Sí ¿dije algo malo? -Harry sonrió incrédulo mientras miraba a su alrededor- Si dije algo malo no fue mi intención.

            -¿Sabes que es lo peor?

            -Qué.

            -Qué de verdad creo que no lo fue.

            -¿Lo ves? Mas a mi favor –respondio con cierto alivio.

            -Así es, ahora veo que eres un hijo de puta por naturaleza.

            -¿Pero que dije de malo?

            -¡En primera Malfoy, los homosexuales no somos promiscuos solo por ser gays!

            -¿Ah no?

            -No y segunda y más importante… tenemos nuestros gustos como cualquiera, así que no andamos buscando culos que montarnos a la menor provocación, así que como podrás darte cuenta justamente alguien como tú no entra en mis gustos.

            Oír eso fue más duro de lo que imaginó, el saber que Harry estaba rechazándolo y diciéndole claramente que nunca le gustaría le dolió más de lo que pudo admitir.

            -De acuerdo, entonces me disculpo por ello, yo pensaba que las cosas eran así.

            -Pues no –dijo retomando su camino.

            -Pero no te pido esto por gusto, es porque en verdad necesito hacer algo antes del fin de semana.

            -Vete al diablo.

            Draco lo seguía viendo desesperado que Harry de plano se le estaba yendo sin lograr nada.

            -Al menos piénsalo ¿sí?... pídeme lo quieras y yo te lo daré.

            -¿Crees que tengo precio?

            -¡Por Merlín Potter, todo lo que digo te ofende!

            -¡Exacto! Y eso porque solo sabes tirar mierda por la boca.

            -Te lo pido… -dijo de plano poniéndosele enfrente para detener su apresurado andar- por favor… sé que no es nada fácil tratándose de mí, pero… pero ayúdame, por favor ayúdame -Harry vio la desesperación en los ojos de dos colores y por un instante su furia comenzó a menguar- desearía tener otra solución pero no la hay, al menos no una que yo conozca, pero al menos piénsalo ¿sí?

            Harry tardo unos instantes antes de recomponerse y decir:

            -De acuerdo, lo pensaré.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).