MESES DESPUES
Era la tarde de un sábado veraniego en el cual Viktor les había ordenado vestir unos diminutos trajes de baños de corte muy femeninos y salir a la piscina de la casa para relajarse un rato de sus obligaciones diarias. Sin embargo había sido Arthur quien completamente rojo de la vergüenza se había acercado a Viktor para decirle que el suyo le molestaba mucho y si se lo podía cambiar, sin embargo Viktor hizo una floritura con la mano y ése desapareció. Arthur aún más rojo debido a la vergüenza se lanzo a la piscina, pero Charlie y Billy lo siguieron para abrazarlo y ‘jugar’ con él
- ¡Ponle ropa en este momento! – exigió Ron
- Pero se están divirtiendo – dijo Viktor sentado en una silla cerca de la piscina
- ¡Ponle ropa en este momento! – exijo Ron nuevamente
- Solo si te la quitas tú – dijo Viktor
- Déjalo ir – repitió Ron por enésima vez
- Ron, me empiezas a aburrir – dijo Viktor señalando a los otros Weasley – y eso no es muy buena idea si es que las quieres
- ¿Qué más me puedes hacer? – dijo Ron
- ¿Quieres averiguarlo? – reto Viktor
- Amo – dijo Percy señalando el cielo
Una lechuza se acercaba desde el Norte. Segundo después dejaba una carta sobre la mesa donde estaban sus refrescos. Viktor tomo lo tomo y leyó la carta antes de sonreír malévolamente
- Charlie, hermosa – dijo poniéndose de pie – ven. Tendrás una visita importante y quiero que te prepares
- ¿Una visita? – dijo este sonriendo mientras salía de la piscina
- Una que te hará cosas que te van a gustar mucho – dijo Viktor acariciándole el trasero
- Viktor, no por favor – suplico Ron
- Obedece Charlie – dijo Viktor
- No – dijo Ron deteniendo a su hermano
- Suéltalo – ordeno el búlgaro
- Charlie no ira a ningún lado – dijo Ron interponiéndose entre ambos
- Pero el am… – dijo este
- Dije que te quedas aquí – ordeno Ron
- ¿Quién te crees…? – dijo Viktor pero un golpe que surgió de la nada
- ¡Ron, no…! – grito George
- ¡Te voy a matar! – Dijo lanzándose sobre este – ¡deja en paz a mi familia!
- ¡Deténganlo! – grito Arthur saliendo de la piscina
- ¡Ron, basta! – grito Percy, mientras Fred y Bill detenían a Ron
- ¡Suéltenme! – Gritaba Ron – ¡voy matarlo!
- ¡Suéltenlo! – Ordeno el búlgaro y los pelirrojos obedecieron – ¡ya me cansaste Ron! – grito mientras sacaba su varita
- ¡No amo! – Suplicaba Arthur asustado – ¡por favor no lo haga!
Llanto y suplicas era todo lo que se escuchaba en el lugar.
- ¡Mátame! – Desafío – ¡Mátame, o te juro que seré yo quien acabe con el terror que has sembrado en mi familia!
- ¡Piedad, mi amo! – suplicaban una y otra vez los Weasley
- ¡Mátame! – Ron gritaba desafiante a voz en cuello desde el suelo donde estaba tirado
- ¡No lo haga, mi señor! – suplicaba llorando Arthur
- ¡Piedad! – suplicaba Fred
- ¡Mátame maldito cobarde! – gritaba el Ron mientras se ponía de pie
- ¡Cállate o…! – exigió el ex jugador de quidditch
- ¡Romperé tu dominio! – Grito Ron desafiante – ¡y cuando lo haga…!
- ¡Avada…! – dijo Viktor
- No necesita matarlo – dijo Percy tratando de disimular su miedo al interponerse entre ambos razón por la que Viktor se detuvo – sométalo
- ¡Percy cállate! – suplico George
- ¡Mátame si eres hombre, maldita basura! – grito Ron
- ¡Tenga piedad! – suplicaba Arthur
- ¡Perdónelo! – rogaba George
- ¡Un Imperius lo arreglaría todo! – Dijo Percy desesperado – ¡hará lo que usted quiere!
- ¡Pero no me amara! – grito Viktor
- Entonces ordéneselo – dijo Percy sonriendo – es mucho mejor a que Ron siga enfrentándolo. Enséñele, aunque sea a la fuerza, el hombre maravilloso que es usted
- Un Imperius – susurro Viktor
- ¡cállate Percy! – suplicaba Bill
- Sera la señora de la casa – dijo Percy – lo complacerá tal como…
- ¡No! – dijo Viktor con tono enérgico
- ¡Piedad! – Suplicaba Arthur – ¡no lo mate!
- Tengo una idea mucho mejor – dijo Viktor sonriendo maquiavélicamente mientras de un empujón arrojaba a Percy a un lado
- ¡Mátame! – Gritaba Ron a voz en cuello – ¡Mátame! El hechizo no verbal golpeo en todo el pecho de su ex amante arrojándolo al piso sin piedad, lugar donde se quedo completamente inmóvil
- ¡Ron! – grito Arthur desgarradoramente intentando correr hacia él pero siendo contenido por sus otros hijos, quienes también lloraban desconsoladamente
Percy solo cerró los ojos conteniendo sus lágrimas. Tal vez nadie lo entendería, pero esa era la única manera de desviar la atención de Krum lo suficiente como para crear un plan lo suficientemente solido para escapar todos de ese maldito lugar. Si todos. Muy por el contrario a lo que todos creían, Percy no se iría dejando a ningún miembro de su familia atrás. Él entendía perfectamente que Ron haya decidido experimentar con su sexualidad, después de todo, su familia entera estaba en ese lugar por la misma razón ¿no? La diferencia radicaba en que Ron había tenido la oportunidad de elegir, ellos no…, hasta ahora
Todos se aparecieron en sus respectivas habitaciones y aunque intentaron salir les fue imposible. Se escuchaba el llanto de todos sus hermanos mientras Arthur seguía suplicando desesperadamente. Sentía como la magia de la casa dejaba de presionar la suya dándole esa libertad. Era como volver a respirar después de estar sumergido en el agua por mucho tiempo. Tiempo que ahora debería usar para pensar en como escapar
Las siguientes fueron horas muy extenuante para todos los Weasley, hasta que, como cada mañana, a las seis en punto la magia de la casa los despertó para cumplir con sus obligaciones.
Cerca de las ocho, Viktor bajo y todos esperaban que les ordenara enterrar el cuerpo inerte de Ron. Sin embargo solo bajo con paso altivo, se sentó en su lugar y empezó á comer. Todos lo imitaron sin hacer preguntas ni mirar a ningún lado. No fue hasta que todos habían terminado que escucharon unos aullidos lastimeros que miraron hacia los pies de Viktor. Allí desnudo y sentado como si fuese un animal, el cual esperaba impaciente que algo cayese de la mesa de su amo, estaba Ronald Weasley esperaba que se apiadasen de él
- ¿quieres comer? – Dijo Viktor señalándose su muslo – ¿tienes hambre? – Ron coloco su mentón sobre su muslo y sollozo – Toma – dijo dándole un bocado dé pan en la boca –. A partir de hoy Ron es nuestra nueva mascota
- Amo… – dijo George mientras Arthur sollozaba
- ¿Preferirían que Ronald estuviese muerto? – pregunto Viktor mientras Ron le acariciaba el cabello al pelirrojo que seguía comiendo
- ¿Él…? – pregunto Bill con lágrimas en los ojos
- Él sabe quien es, donde esta y porqué – dijo Viktor –, los reconoce, los recuerda. Pero no se volverá a comportar como humano hasta que aprenda cual es su lugar a mi lado. Desayunen. Tienen obligaciones que cumplir.
Nadie más se animó a decir nada más y desayunaron en silencio. Recogieron la mesa e iban a salir
- ¿Si amo? – dijo el mayor de los pelirrojos cuando este los llamo
- Bill, llévate a Ron contigo al jardín – ordeno el búlgaro – pueden jugar entre ustedes ¿esta claro? Y mejor si aprovechas y lo bañas
- ¿con la manguera? ¿En el patio? – pregunto Bill
- Si Bill, en el patio, con la manguera – dijo Viktor
- Si amo. – Dijo Bill tomando a su hermano del collar – vamos Ron – este obedeció sin protestar
- Ven aquí – dijo abriendo los brazos por lo que Arthur corrió a abrasarse a él llorando –. Ya, tranquila. Te prometo que estará bien – dijo Viktor besándole el cabello – no permitiría que nada le pasé a ninguna de mis niñas
- ¿Algún día mi…? – dijo Arthur
- No Arthur – interrumpió Viktor –, él ya no es tu hijo. Ninguno lo es. Y mientras mas rápido lo entiendan menos sufrirán.
- ¿Le puedo pedir un favor, amo? – dijo Arthur tímidamente
- ¿Qué quieres hermoso? – Dijo el búlgaro besándole suavemente los labios – pídeme lo que sea
- Es sobre Ron – dijo tímidamente
- Dime lo que sea – dijo Viktor
- por piedad no lo trate mal – suplico con lagrimas en los ojos
- Yo no trato mal a Ron, hermoso – dijo Viktor – lo trato como se merece. Ron me lastimo mucho y por es esta en esa situación
- Pero… – insistió Arthur
- No te preocupes por él – dijo Viktor – ya ninguno son tu responsabilidad, sino mía
- Lo que dijo de que… – susurro el mayor
- Si preciosa – dijo Viktor – ustedes ya no son padre e hijos, ni hermanos, con el paso del tiempo se darán cuenta. Lo único que tienen que saber es que me hace feliz que juegues entre ustedes y se mantengan listas para mí ¿está claro?
- Si amo – dijo Arthur
- Ve a la cocina – dijo el búlgaro dándole una nalgada – y dile a Charlie que lo necesitó
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Bajo la apariencia de un chico rubio, Charlie limpiaba la vajilla sentado en la alfombra de la sala cuando la chimenea se activo para dejar pasar a Theodore Nott, quien venia vestido con una túnica de Gala. Instintivamente Charlie se puso de pie.
- Buenos días – dijo Theo mirándolo con altanería – Busco a Viktor Krum
- Enseguida lo lla… – dijo Charlie con una sonrisa en los labios
- No es necesario, preciosa – dijo Viktor entrando seguido de Ron en actitud perruna –, mi buen amigo Theo – dijo sonriendo – bienvenido a La Casa de Las Fantasías, donde todo lo que sueñes se puede hacer real
- Algo así he escuchado – dijo Theo extendiéndole la mano –. Cada día la fama de este lugar crece.
- Nuestro servicio es garantizado – dijo Viktor estrechándosela
- ¿Y la privacidad? – dijo Theo
- Esta incluida – aseguro Viktor
- Perfecto – dijo el invitado – ¿es cierto lo que se rumorea de que son Muggle?
- Todos ellos, pero por favor no me delates. No quiero tener la visita fastidiosa de nuestra jefa del departamento de Seguridad Mágica – dijo Viktor acariciándole la cabeza a Charlie cuando Percy con apariencia de un chico asiático muy afeminado entro sujetando con una cadena a un Akita Inu
- De mi boca no saldrá nada – aseguro Theo sonriendo
- Pero mira nada más quien llego – dijo Viktor abrazando a Percy por la cintura – la criatura más hermosa que veras hoy
- Buenos días – dijo Percy sonrojado
- Por Merlín – dijo Theo besándole la mano – es una autentica joya
- Y no tienes ideas de las maravillas que hace con su boca – dijo Viktor acariciándole el muslo bajo la diminuta falda
- ¿Y este amiguito? – pregunto Theo acariciándole la cabeza a Ron
- Amiguita – dijo Viktor – el único Alfa de este lugar que las complace completamente soy yo ¿cierto?
- ¡Y muy bien! – dijo Charlie sonriendo sonrojado
- Pero es toda una prioridad – dijo Theo
- Yo te sugiero probar esta. Es más dócil ¡Y es toda tuya! – dijo Viktor empujando suavemente al ex domador de dragones
- ¿Así nada más? – dijo Theo sorprendido abrazando a Charlie
- Esta es parte de mi harem privado – dijo acariciándole la cabeza a Ron– y te atenderá tal y como desees
- Todo a cambio de convencer a Blaise de hacerte caso – dijo Theo con una carcajada
- Blaise y yo solo somos amigos – dijo Viktor bufando
- Pero a ti bien que te gustaría que eso cambie – dijo Blaise
- La verdad es que me interesa mas otra persona – dijo Viktor – y la tengo a mi entera disposición
- ¿Sales con alguien? – dijo Theo sorprendido
- Algo así – dijo sonriendo el dueño de casa – olvídalo. Durante el torneo de los tres magos fuiste un gran amigo. Al igual que…
- ¿Me contaras algún día quien te destrozo el corazón así? – pregunto Theo intrigado
- Toma – le entrego unas monedas – ya te explique como funciona
- ¿Puede ser…? – miro a su alrededor
- Piensa en lugar – dijo Viktor y Theo se concentro –. Llévalo donde la casa te indique – le ordeno a Charlie
- Como ordene amo – dijo este
- Que te diviertas – dijo Viktor
- ¿Qué pasaría si mi fantasía fueses tú? – dijo el invitado
- ¿En verdad quieres que te meta en mi cama? – dijo Viktor dando un paso así adelante cual si fuese un felino al acecho
- Te daría una clase gratis de lo que es un hombre – dijo Theo en la misma actitud
- “Todas” las que han pasado por mi cama lo han aprendido – dijo Viktor casi rozando sus labios contra los de su invitado
- ¿No quieres ser una mas? – susurró Theo
- ¡Qué te diviertas soñándome! – dijo Viktor antes de besarlo mientras Theo lo sujetaba de la cintura
- Algún día Viktor – sentencio Theo agarrando firme su entrepierna – algún día – repitió antes de besarlo apasionadamente
Segundos después se separo para ofrecerle el brazo a Charlie que sonrió sonrojado antes de subir a la segunda planta
Viktor respiro hondo mirando como si entrepierna había crecido, lentamente se bajo el cierre y se abrió el pantalón. Ron retrocedió e intento huir
- No bonita – dijo Viktor agarrándolo por el collar –, tú arreglarse el desastre que ese mal amigo hizo. Y mas te vale hacerlo muy bien, porque tengo otras cinco personas con quien desquitarme si no te comportas