El sol trajo nuevamente la actividad rutinaria a "La Casa de las Fantasías". ¿Quién diría que había pasado tanto tiempo desde su llegada a la casa? Prácticamente ya habían pasado el cumpleaños de todos. Viktor se empeñaba en que ese día fuera especial para el festejado, por eso ese día no invitaba a nadie, y por el contrario organizaba una especie de almuerzo donde el plato principal era el festejado que recibía las atenciones de todos los de la casa, a excepción de Ron, claro, quien se negaba a participar
Ese día, cerca de las diez de la mañana, Viktor también había salido dejando órdenes muy claras de que debían cumplir sus obligaciones rigurosamente. Ron deambulaba por las sombras de la casa viendo como los demás cumplían lo ordenado en medio de juego y risas. En un determinado momento cansado de todo se fue a la parte trasera de la casa, donde se acostó para llorar hasta quedar dormido entre unos tablones y masetas viejas.
Unas voces y risas por lo bajo lo despertaron, pero opto por no salir de su escondite
- Basta - dijo Arthur y en su voz se notaba una sonrisa
- Niega que te gusta - dijo Charlie
- Si me gusta - dijo Arthur -, pero y si el amo se entera...
- El amo nos dijo que lo hagamos ¿lo recuerdas? - pregunto Charlie
- Pero tengo que ir a cocinar - dijo Arthur -, además...
- Deja que meta mi dedo - dijo Charlie
- Ahora no - dijo Arthur en medio de una carcajada - ¡me haces cosquilla!
- Prométeme que después me... - pidió Charlie
- Esta bien. Esta bien - dijo Arthur - después te dejare que me lo hagas, pero ahora me tengo que ir
- Dame un beso - dijo Charlie
- Charl... - decía Arthur cuando fue callado y se escucharon unos gemidos - me tengo que ir - dijo con una pequeña carcajada antes de escuchar pasos que se alejaban
Con absoluto asombro dio un paso hacia atrás y le callo un balde de pintura amarilla que lo ensucio completamente. El susto lo inmovilizo y segundos después Charlie lo encontraba
- ¡Ron! - Dijo el jardinero de la casa - ¿hace cuanto estas ahí? Tranquilo. Tranquilo. Ven aquí - con cuidado lo saco del lugar - Eso tranquilo. Todo estará bien. Vamos - lo tomo del collar - debemos bañarte
Lo llevo al jardín y trajo la manguera para bañarlo, mientras la conectaba Ron se acostó en el pasto. Un par de minutos después el agua lo bañaba
- Vamos Ron, levántate - dijo Bill - no seas perezoso. ¡Levántate! - Ron intento decirle que lo dejara en paz, pero lo único que salió de su boca fue un ladrido -. Ves, yo sabia que te gustaba - Ron se lanzo a quererlo morder pero Bill fue mas rápido y se alejo - ¡Eres un lento! No me alcanzas - Ron ladro y lo siguió - ¡Lento! ¡Lento! ¡Lento! - Ron se arrojo sobre él y le lamio la cara - ¡No! Déjame - repetía Bill en medio de una carcajada - gírate - Ron retrocedió y quiso huir - ¿con miedo del agua? Ahora te aguantas ¿o quieres oler feo para el amo? - lo agarro del collar y le hecho shampoo para luego enjabonar su cuerpo - eso tranquilo, debo lavar también este bonito lugar - colando su dedo índice en el ano del menor, por lo que este intento huir. Como no lo consiguió intento morder a Bill, pero automáticamente un bozal le cubrió la boca - ¿ves lo que provocas? Solo intento asearte. Tranquilo - le acaricio el cabello - te va gustar tanto como cuando te lo hace el amo - Ron se revolvió con más ganas
- Pero que lindas se ven así - se escuchó la voz risueña de Viktor razón por la que Ron se asusto y dejo de moverse
- ¡Amo! - dijo Bill corriendo a abrazarlo
- Hola preciosa - dijo Viktor abrazándolo y acariciándole los glúteos mientras lo besaba - ¿Cómo se porta la mascota de la casa?
- ¡No me deja lavarle su huequito! - se quejo Bill haciendo un puchero infantil
- ¿Con que no te deja lavarle su huequito, eh? - dijo Viktor sonriendo - entonces yo lo voy a sujetar y tú lo vas limpiar, pero con tu lengüita ¿Esta claro? - Y Bill sonrió mientras Ron intentaba retroceder pero Viktor lo sujeto del collar con mano firme - tranquila. Te va gustar. Hazlo Billy
Ron sintió como su Billy lamia su ano como si de un manjar se tratase
- Si no quieres que nuestra sexi domadora de dragones salga lastimada - dijo Viktor abriéndose el pantalón - disfrutarás este manjar como si no existiera nada mejor ¿esta claro? - las lagrimas de Ron cayeron a raudales mientras la lengua de su hermano mayor lo violaba en un patio a plena luz del día y él era obligado a hacerle el sexo oral al secuestrador de toda su familia
Cuando el baño terminó, Billy regreso a sus obligaciones en el jardín, mientras Ron era llevado en brazos a la sala de la casa y sentado en las piernas de su amo
- Bill es muy bueno haciéndose cargo de ti - dijo Viktor acariciándole el cabelló mientras una lechuza entraba por la ventana y le dejaba una carta cerca de su mano y salió volando - veamos - abrió el sobre y leyó la carta para sonreír maliciosamente después empezar a besarle el cuello mientras le acariciaba el muslo
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Marcus Flint fue el rival por excelencia de Percy Weasley durante su época colegiala. Mas de una vez los slytherine, solamente por el placer de molestar al león, solían preguntar en voz en alta y fuera del alcancé de los profesores, "Weasley, ¿y tu padre gime también como tú cuando un hombre les hace el favor?". Normalmente Percy ignoraba esos comentarios, pero más de una vez se fue a los golpes contra Flint. Cuando esto pasaba inevitablemente las manos del moreno se deslizaban hacia alguna zona privada del cuerpo del pelirrojo para acariciarla mientras le regalaba una sonrisa morbosa. Aunque lo peor no era eso, sino los mensajes vía lechuza que recibía después con frases muy explicitas de lo que quería hacer con el pelirrojo.
Si había algo que Perry tenía más que claro era precisamente su orientación sexual. Muy a pesar del hecho de ser el amante del héroe Harry Potter a él no le gustaban los hombres. Es por eso que cuando Marcus le pidió tener una relación en su último año de colegio, le respondió con un gancho en la cara. Obviamente se cuido de no ser visto por los profesores, pero dado que hacía poco había descubierto el mismo Marcus tomando sin permiso un libro de la biblioteca, ninguno dijo nada
Esa tarde, cuando Marcus cruzo la puerta de la casa de Viktor Krum, lo último que espero encontrarse era precisamente con una sala completamente vacía. Llamo varias veces pero nadie le contesto, así que de apoco se fue internando en la casa hasta llegar a la cocina, donde encontró a Arthur Weasley limpiando el lugar vestido con un vestido de muñeca, rojo con cuadros blancos que le llegaba a la mitad de sus muslos, no tenia mangas y la falda tenia bolado. A la altura de la cintura llevaba un cinturón blanco

- ¿Señor Weasley? - dijo Marcus sorprendido
- Marcus - dijo este girándose con una sonrisa radiante - bienvenido a la casa de las fantasías, donde todos sus sueños se hacen realidad
- ¿Y si mi sueño es usted señor Weasley? - dijo Marcus con una sonrisa picara
- Se pude solucionar - dijo la voz de Viktor
- ¡Viktor! - Dijo Marcus sorprendido girando para mirarlo - ¡creí que...!
- Arthur, ve por el Whiskey de fuego - ordeno Viktor dándole una nalgada
- Enseguida - dijo este sonriendo mientras se retiraba
- ¿Cómo...? ¿Tú...? ¿Él...? - dijo Marcus
- ¿Te gustaría meter en tu cama al respetable y siempre honorable señor Weasley? - dijo Viktor sonriendo lobunamente mientras lo invitaba a sentarse
- ¿De que hablas? - pregunto Marcus sentándose
- Arthur... - dijo Viktor cuando este entro con una bandeja en la que llevaba una botella de weskey de fuego y dos vasos
Con total asombro vio cómo su más grande fantasía sexual servía los vasos, uno le entregaba a su anfitrión y otro a él mientras se sentaba en sus piernas con aire completamente inocente
- ¿Viktor...? - dijo Marcus mirándolo nervioso mientras Arthur se restregaba contra su entrepierna y acomodaba su cabeza en el hueco de su hombro
- ¿te gusta? - dijo Viktor
- ¿Cómo...? - exhalo Marcus en medio de un orgasmo
- Es el nuevo negocio que estoy por abrir aquí, en el Londres Mágico - dijo el búlgaro
- ¿Y Potter sabe...? - pregunto Flint acariciando tímidamente el muslo de Arthur
- El ministro no será ningún problema - aseguro Viktor mientras acariciaba al Akita Inu que estaba a su lado
- En si ¿de que trata la Casa de las Fantasías? - pregunto Marcus curioso mientras acariciaba la entrepierna de Arthur con algo mas de confianza
- Simple, el cliente nos dice con quien desea estar - dijo Viktor - e introduciendo una moneda nuestros chicos que iría directo a nuestras cuentas del banco, ellos se transformaran en el sueño del cliente
- ¿Cómo entraría yo en el negocio? - pregunto Marcus oliendo el cabello de Arthur
- Te sabes mover en el mundo Muggle - dijo Viktor -, así que tu trabajo seria conseguir a nuestr... as "habitantes" de las diferentes casas
- Suena muy interesante - dijo Marcus mirando Arthur que lanzo una sonrisa boba - si no supiera que es un muggle juraría que en este momento tengo al verdadero Arthur entre mis brazos
- Entonces olvídalo y disfruta - dijo Viktor sonriendo - luego tomas tu decisión
- Puedo hacer lo que usted quiera - le susurro Arthur al oído -, como usted lo quiera y donde usted lo quiera - Flint miro a Viktor que sonrió
- Ya ordene que suban algo de comer - dijo Viktor -. Arthur ya sabes que hacer
- Jugar con el señor Flint - dijo Arthur mordiéndole el lóbulo de la oreja al invitado
- Arthur - dijo Viktor - procura que el señor Flint no llegue tarde a nuestra reunión. Que la pasen bien. Cariño, vamos - y se retiro seguido de Ron
- ¿Quién eres realmente? - pregunto Marcus
- Quien mi amo quiera - dijo Arthur sentándose a horcajadas en las piernas del invitado
- ¿Y si yo quisiera... verte bailar la danza del vientre mientras subimos a la recamara y te desviste para mí? - dijo Marcus contra sus labios acariciándole la espalda
Arthur se puso de pie, sin dejar de mirar a Marcus a los ojos, se dirigió al centro de la sala, en donde empezó a moverse al ritmo de la música que sonó en cuanto se comenzó a quitarse el vestido lentamente y lanzárselo al invitado con una sonrisa boba, quedando solo en un especie de calzón que le recordaba a las muñecas muggles
- ¡Por Merlín! - Exclamo Marcus mientras Arthur se mordía el labio - esto es... - dijo poniéndose de pie - señor Weasley usted es una niña muy traviesa. No es correcto que usted haga esas cosas así que tendré que castigarla
- No por favor - dijo Arthur haciendo un lindo puchero
- No señorita - dijo Marcus - mi deber es corregirla
- ¿Y me va doler mucho? - dijo Arthur
Marcus lo abrazo por la cintura y empezó a besar su cuello mientras los aparecía en la habitación, bajaba sus manos hacia sus glúteos. Luego subió sus manos hasta colocarlas sobre sus hombros y presionar suavemente hacia abajo. Arthur entendió la indirecta y se arrodillo frente a Marcus, quien se abrió el pantalón. Arthur iba empezar a besarlo cuando alguien golpeo la puerta desesperadamente