Dulces
-Dice… Un kilogramo de vainilla.
-Kyu Jong lee bien.
-Estoy haciendo eso. Un Kilogramo de vainilla Saeng.
-Okey. Necesitas lentes… unos ahora mismo – dejo la masa en el horno, pongo el tiempo y luego voy literalmente corriendo hasta donde está con la receta en la mano – Si no encuentro el kilogramo de…. – Comprendo sus intenciones cuando termino sentado en su regazo y no a su lado como había planeado.
-Me equivoque. Era unos gramos de vainilla – Deja un beso en mi hombro y me sonríe como un niño. Me quedo en blanco por sus acciones, mi corazón está latiendo rápido, muy rápido… Y él solo sigue sonriendo. Parece cansarse de mi quietud y da el primer paso, que es besarme.
-Creo que me gustas Kyu… - ha sido un susurro cuando pensé que solo estaba en mi mente. Kyu Jong sonríe más que antes. No está nervioso como yo, me abraza y vuelve a besarme. Esta vez no me quedo quieto, mis manos viajan a su cabello y lo pintan de blanco. Empiezo a reír cuando me aparto y lo veo. Deja un último beso en mi mejilla antes de dejarme libre - ¿Qué sigue?
- Mezclar con cuidado mientras echas un vaso de leche… ¿Escondiste mi teléfono? – Es obvio que lo hice, pero no porque quería esconderlo si no porque quería tenerlo lejos de nosotros.
-¿Lo quieres de vuelta?
-No… solo… – Aparece a mi lado, aprovecho su presencia e impido que me abrace para que en cambio me ayude.
-Entonces no importa – asiente dudando – Mamá llamo más temprano, tu semana libre sigue en pie mientras ella arregla todo - Vuelve a asentir, más convencido que antes – Ahora ayúdame, aún quedan muchas cosas para preparar.
-Kyu… - digo rompiendo el “silencio” luego de una hora, tiempo en el que hemos estado viendo una película extraña acompañados de algunas galletas que prepare -¿Vas a terminar ya con ella? – Él me mira como si tuviera 2 cabezas más.
-¿En serio estás preguntando eso? – Conozco la respuesta y él también, lo he escuchado meses quejarse sobre lo tanto que se aman.
-¿No puedo preguntar? – responde riendo, burlándose de mi como siempre lo hace. Al menos está relajado… eso me basta.
-Voy a terminar con ella el martes. ¿Feliz? – asiento de inmediato sin darme cuenta de lo que hago. Me quedo quieto, mirando la película y evitando su mirada – Yo también estoy feliz Saeng –deja un beso en mi cuello como hace cada dos minutos.
-¿El drama… - su expresión de divertida cambia a molesta. Ambos sabemos lo que pasara con los personajes o al menos con el suyo. Van a matarlo y a darle una nueva pareja a Hara porque la niña hizo algún pacto con el diablo para no ser sacada. Coge una de las galletas y se la come sin tener intención de responderme. Pero lo hace…
-Claro. El drama… tampoco es que como si me hubiera gustado demasiado – no va en serio, si no le hubiera gustado no habría aceptado. Dejo que siga comiéndose las galletas y no insisto con el tema. Mi mirada viaja a la cocina, queda otra hora más para tener listo los pasteles y entonces poder disfrutarlos. Kyu Jong vuelve a dejar un beso en mi cuello.