CAPITULO 26
Al día siguiente, después del desayuno y de las primeras clases, Harry logró verse con Draco en un salón en desuso lleno de trebejos; en cuanto entró, Draco salió de su escondite y se le abalanzó abrazándolo con ímpetu haciendo que Harry por poco cayera.
-¡Cuidado!... -exclamó Harry riendo al tiempo que abrazaba a Draco por la cintura.
-No, me debes muchos besos, -respondió Draco besándole las mejillas una y otra vez para luego pasar sus brazos encima de los hombros de Harry.
-Oye Draco, ¿Cómo vas con el hechizo de la profesora McGonagall?
-Vaya, tu sí que sabes matar el momento ¿eh? -exclamó Draco arrugando el ceño.
-Es que me eh fijado que tienes buenas notas solo en algunas materias... en otras no lo sé, no las compartimos todas, ¿Cómo vas en esas?
-jmm... creí que mi papá estaba en Malfoy Manor.
-¿Quieres que te ayude a practicar?
-No, no quiero. -exclamó Draco soltando a Harry y tomando sus propias manos atrás de su espalda.
-No seas necio, soy bueno en eso.
-Dije que no.
-¿Por qué no? -dijo Harry acercándosele y alzándole la barbilla.
Torciendo la boca y mirando hacia un lado, Draco dijo:
-Porque... me da vergüenza.
-¿Vergüenza porque? -dijo Harry abrazándolo- quiero ayudarte, eso no es nada vergonzoso.
-No para ti, -respondió Draco aun con los brazos atrás y dejando que Harry lo abrazara mientras le besaba la sien- pero para mí... bueno... en realidad, alguien más va a ayudarme con eso.
-¿Quién? -preguntó Harry sin dejar de darle besitos a Draco.
-Blaise.
-¿Blaise? -exclamó Harry deteniendo sus besos- ¿y porque él?
-Porque es mi amigo.
-¿Y yo que soy?
Ante esa pregunta, los dos se miraron.
-Bueno... -dijo Draco titubeante- mi amigo no eres... nunca lo fuiste.
-Si pero... ¿lo que tenemos ahora no cuenta?
-Se sincero Harry ¿me ves como a un amigo? -Ante tal pregunta, Harry no supo que contestar- ¿lo ves?
-De acuerdo, pero podríamos empezar ahora ¿no te parece?
-¿Ahora?
-Si Draco... -dijo Harry sonriendo- quedamos en que nos conoceríamos mas ¿no?... esta es una buena oportunidad.
-Pero... no se...
-Dicen que soy un buen maestro, hasta logre que Neville hiciera un "Patronus".
-¡Vaya!... entonces sí que lo eres si lograste que ese tonto hiciera eso.
-Draco...
-Ya sé, ya sé...
-¿Entonces qué dices?
-mmm... no sé... -dijo Draco comenzando a sonreír traviesamente mientras decía: -¿Por qué no intentas convencerme?
-Pequeña serpiente... -exclamó Harry abrazándolo con fuerza- Ven acá.
Cuando se sintió entre los brazos de Harry, Draco levantó los suyos y los pasó por encima de los hombros de Harry, se levantó de puntitas y le dio un beso en los labios, besó que Harry aprovechó para atraparlos con fuerza.
La tibia humedad de la boca de Harry fue explorada por Draco con sumo deleite mientras sentía las manos de Harry bajar por su espalda hasta sus firmes nalgas; separándose un poco, murmuró sobre los labios de Harry:
-¿No puedes...mmm... tocarme... sin manosearme?
-No... No puedo. -respondió Harry sonriendo.
-Me gustas mucho Harry... -respondió Draco pegando mas su cuerpo al de Harry.
-Y tú a mí... -dijo Harry besándole una oreja y luego susurró: -ahora... ¿podemos practicar el hechizo?- Al oír eso, Draco se separo lo suficiente de él para verlo con expresión de sorpresa- Se siente feo ¿no? -dijo Harry riendo- el que te detengan en seco...
-Pues no es gracioso. -exclamo Draco separándose de él y cruzándose de brazos- No quiero practicar ahora.
-¿Acaso estas haciéndome un berrinche? -dijo Harry con la ceja levantada y expresión de incredulidad- porque déjame decirte que no me interesa si no quieres, lo haremos de todos modos.
-Yo no hago berrinches, -respondió Draco alzando la barbilla desafiante- solo he dicho que no quiero practicar ahora y no lo voy a hacer.
-¿Qué educación te dieron en tu casa, Draco? -exclamó Harry sonriendo- ¿nunca te dijeron "no"?
-Estas equivocado si eso piensas, de hecho, mi papá es muy estricto... no deja de atosigarme con que debo prepararme para ocuparme en un futuro del "imperio Malfoy" - dijo Draco imitando la voz de su papá en la última frase- una vez me dijo que es una vergüenza que Granger me supere en los estudios siendo una sang... -exclamó Draco callándose abruptamente ante lo que estuvo, o más bien, dijo a medias- yo...eee...
-Esta bien, -dijo Harry dándose cuenta de lo sucedido- no me enojaré, solo intenta evitar eso, ¿de acuerdo?
-Pues lo intentaré, no prometo nada. -respondió Draco evitando a toda costa dar una disculpa.
-Bueno, ¿comenzamos?
-¿A qué? -preguntó Draco con el ceño fruncido.
-Pues a practicar, saca tu varita.
-¿Qué parte de "no quiero" no entendiste, Harry?
-¿Y tú que parte de "no me importa" no entendiste, Draco? -respondió Harry con naturalidad mientras sacaba su varita de entre su ropa- de acuerdo, -continuo Harry haciendo caso omiso al gesto adusto de Draco- me he fijado que sujetas las varita como si quisieras estrangularla, debes aflojar mas los dedos... ¿Qué pasa?
-Nada, -respondió Draco mirándose las uñas muy quitado de la pena- solo observo tu monologo.
-Draco, saca tu varita.
-No.
-¿No quieres hacerlo bien?
-Si, pero no quiero que tú me enseñes.
-¿y porque con Blaise si lo harás?
-Ya te lo dije.
-Eres muy obstinado. -exclamó Harry bajando los brazos.
-No, el obstinado eres tú qué quieres obligarme a hacer algo que no quiero.
-Pero... significaría mucho para mí. -dijo Harry sentándose en un viejo pupitre.
-¿Por qué?... solo es un estúpido hechizo.
-Porque estaríamos compartiendo algo, serviría para conocernos más.
-Rayos... -exclamó Draco con aire derrotado- de acuerdo... enséñame como se hace.
-¡Bien! -saltó Harry al instante- saca tu varita y sostenla de esta forma.
-¿Así?
-No, afloja los dedos.
Después de dos horas, el pupitre que transformaron en piedra para practicar, terminó por caminar muy lentamente dos pasos en sus cuatro patas como una araña gigante antes de dejarse caer pesadamente.
-¡Lo logré! -exclamo Draco lleno de alegría al tiempo que alzaba los brazos en señal de triunfo- estoy agotado... pero lo logré.
-Ya sabía que lo harías, -dijo Harry tomándolo de la cintura- eres un buen mago.
-Claro, soy un Malfoy. -respondió Draco muy ufano de sí mismo al tiempo que abrazaba a Harry.
-Eres imposible.
-mmm... también eso, ahora creo que debemos irnos, nos perdimos la comida y la siguiente clase está a punto de empezar.
-Si, ya es tarde. -dijo Harry soltando a Draco y tomando su túnica- pero creo que valió la pena, y tú que no querías... para la próxima lo harás mejor.
-Si...mmm oye Harry.
-¿Si? -respondió Harry dirigiéndose a la puerta al tiempo que jalaba a Draco de la mano.
-Lo que pasó el lunes en el comedor... ¿Por qué te levantaste de la mesa?
-El alboroto me llamó la atención.
-No... -dijo Draco deteniéndose- ibas a ir a defenderme, ¿verdad?
-¿Defenderte? -repitió Harry deteniendo el paso también y girándose para mirarlo- claro que no.
-No necesito que lo hagas. -Exclamó Draco con calma- de verdad.
-¿De qué hablas?
-De tu sentido innato de protección, San Potter, -respondió Draco sonriendo- acéptalo, ibas a defenderme... y bueno, pues... te lo agradezco, pero no lo necesito; durante años, las otras tres casas, incluyendo a muchos de la mía, me creyeron un aliado fiel e incondicional de Voldemort, incluso tú pensaste que yo era el heredero de Salazar Slytherin, así que ya te imaginaras sus tratos; incluso sobreviví al señor Tenebroso cuando vivió en Malfoy Manor... por lo tanto, San Potter... -dijo Draco acercándosele- ahórrate tus buenas intenciones cuando veas que alguien me agrede, como has podido ver, no soy yo quien sale castigado.
-De acuerdo, lo acepto. -dijo Harry alzándose de hombros- pero como tú ya lo has dicho, es algo que no puedo evitar, así que tampoco esperes que no haga nada cuando alguien te este dando una paliza.
-Nadie me ha apaleado.
-¿Seguro?... ¿Qué hay de Hermione?
-Me tomó desprevenido. -Respondió Draco con el ceño fruncido- fuera de eso, nadie me ha apaleado.
-Hasta ahora... -completo Harry- ya veremos después, ¿nos vamos?
-Si, ya es tarde.
Al despedirse, cada uno se fue por su lado cuidándose de no ser vistos, y para cuando Harry llegó a su habitación, Ron, quien estaba acostado en su cama, dijo:
-Caray Harry, ¿Dónde has estado todo el día?
-Por ahí Ron, por ahí. -Respondió Harry dejándose caer en la cama- muero
de hambre.
-Pues claro, -respondió Ron- el amor no llena la panza.
-¿De qué hablas? -preguntó Harry haciéndose el desentendido.
-Estuviste con tu chica, no lo niegues. -dijo Ron recargándose en un codo y mirándolo inquisitivamente.
-Estas loco.
-Cuéntame algo, amigo... ¿Qué tal besa?
-¡Oye! -exclamó Harry mirándolo con sorpresa- ¡no voy a contarte esas cosas!
-Vaya... eso significa que bien... -dijo Ron sonriendo de manera traviesa- y dime... ¿ya llegaron a tercera base?
-¡Ron! -exclamó Harry levantándose de un salto- ¿¡Que clase de preguntas idiotas son esas?!
-mmm... ¿¡eso significa... que ya?! -dijo Ron anonadado.
-Eres un tonto... -dijo Harry dirigiéndose al baño y cerrándolo de un portazo para luego sentarse en el inodoro con la tapa bajada; era cierto que no podía comentar nada con Ron respecto a Draco, pero también era cierto que deseaba compartir con alguien lo que le estaba pasando, y la curiosidad de Ron era perfectamente normal, así que sintiéndose algo culpable, sopesó que tanto podía hablar con el pelirrojo de su situación sin revelar demasiado.
-¿Te enojaste? -preguntó Ron algo serio al verlo salir del baño.
-No, como crees, -dijo Harry sentándose en su cama.
-Ah... porque eso pareció.
-Bueno... algo hubo de eso, pero no pasa nada.
-¿Entonces si me contaras? -volvió a decir Ron con gesto travieso, lo que le valió un almohadazo en la cara.
-Bueno... -dijo Harry algo titubeante- ¿Qué quieres saber?
-Que tal besa. -Respondió Ron sentándose con las piernas cruzadas en la cama al tiempo que abrazaba la almohada mientras lo miraba con expresión curiosa.
-Rayos... -exclamó Harry con un suspiro- pues... la verdad...
-¿Si?
-Besa muy bien.
-¡Lo sabía! -exclamó Ron dejándose caer en la cama para luego levantarse rápidamente volviendo a quedar sentado- tu expresión lo decía todo.
-¿Mi expresión? -dijo Harry mirándolo con extrañeza- ¿Qué rayos quieres decir?
-Te ves contento Harry... y a veces te pesco con expresión de idiota.
-¡Oye!
-Lo siento hermano... -dijo Ron sonriendo- pero es la verdad... y siendo sinceros... bueno... yo también me siento así cuando...
-¡No me digas! -exclamó Harry tapándose las orejas- ¡no quiero saber ningún detalle de ti y Hermione!
-No seas tarado... aun no pasa nada entre ella y yo.
-¿Ah no? -dijo Harry destapándose las orejas.
-No, -respondió Ron un poco más serio- no es que yo no quiera pero... creo que ella tiene miedo o algo así.
-¿Por qué lo dices?
-Es que cada vez que... bueno, estamos a punto...
-¿Si?
-Dice que no.
-mmm... a lo mejor tiene miedo. -dijo Harry alzando los hombros.
-¿Pero miedo de que? -preguntó Ron con gesto contrariado- yo nunca la engañaría ni me aprovecharía de ella... en verdad la quiero.
-Si pero eso de tener... bueno, tu sabes... es algo muy serio Ron, es un paso muy importante.
-¿Tu ya te acostaste con tu chica?
-¿Eh? -exclamó Harry sintiendo arder sus orejas- bueno... yo... eee...
-Ya lo hiciste, -dijo Ron- ¿y cuanto tiempo llevas con ella?... el mismo que Hermione y yo.
-Son solo unas semanas Ron.
-Si pero es una de dos... o a ella le gustas mucho para habértelas dado ya o es... ¿Cómo decirlo?... muy... fácil.
-Ron... -dijo Harry frunciendo el entrecejo.
-¡Es que me muero de ganas de hacerlo con Herm, Harry! -exclamó Ron dejándose caer de lado en la cama- ¿Cómo es que tú ya lo lograste?
-¿Qué como lo logre? -pensó Harry sonriendo sin poder evitarlo- si te lo dijera, los padres de Hermione te matarían.
-¿A qué te refieres? -preguntó Ron muy intrigado.
-A nada... pues mira Ron, yo no sé en realidad qué consejo darte.
-Pues yo esperaba que si habiéndolo hecho ya. -dijo Ron con expresión de contrariedad y decepción.
-Pues ni modo.
-Bueno... y a todo esto... -dijo Ron un poco más animado- puedo preguntar... ¿Qué tal lo hace?