Un año. Había pasado un año desde aquel primer episodio de Vixx Tv, un año desde que habían comenzado aquella línea de contacto con sus fans, aquellas chicas y aquellos chicos que habían conseguido que llegaran hasta donde habían llegado y cada día llegar un poco más lejos. Una extraña sensación le recorrió el cuerpo. Se sentía muy halagado y abrumado por los acontecimientos. Aún le costaba creerse que gente alrededor del mundo les conocían, y les apoyaban. Por esas personas siempre intentaba darlo todo en los ensayos, en cada actuación, en cada disco, quería que todas sus fans estuvieran orgullosos de ellos. De la misma manera que él estaba orgulloso de los miembros de Vixx y de sus fans.
Al escuchar un golpe en el departamento, N escondió su portátil, dejándolo encima de la cama, y salió, viendo como por la puerta entraban los demás miembros. Ken molestaba a Leo, que le ignoraba, mientras tensaba el rostro. Hyuk miraba su teléfono con ansias y HongBin le intentaba espiar, para ver que hacia. Y por ultimo Ravi, entro, estirándose, parecía cansado. Una pequeña sonrisa salió de sus labios al verlos, eran su familia, imperfecta familia. Se acercó rápidamente, tomando por el cuello con su brazo a Ken, parando así el ataque a la paciencia de Leo, que todos sabían que era pequeña. Ken se quejó, pero después de unos momentos olvido a Leo y comenzó a jugar con él. Ken, aquel chico tan divertido como alocado y despreocupado. Hyuk y HongBin fueron a la cocina, quizás a buscar algo de comer. Leo rápidamente como entró, desapareció de la sala para ir a su habitación. Solo suspiró y después de mandar a Ken a que comiera algo, se sentó en el sofá, un poco cansado. Masajeó su sien con cuidado, mientras entrecerraba sus ojos, al parecer el trabajo en el portátil le estaba pasando una mala pasada, un dolor de cabeza agudo. Espero que la pastilla que hacia unos minutos había tomado hiciera efecto y ese insistente dolor desapareciera. Mientras masajeaba su sien, sintió como el sofá se hundía por otro peso, y un fuerte brazo rodeaba sus hombros, obligándole a apoyar su rostro en el hombro del otro. No le hizo falta alzar el rostro para saber quien era. El simple aroma de aquella colonia, el tacto de aquella mano o la calidez que aquel gesto transmitía era inconfundible.
No podía ser otro que Ravi.
Se acurrucó mejor en aquel hombro y dejo que la tranquilidad que solo el menor le transmitía le recorriera. No recordaba realmente el día a lo largo de aquel año que habían dejado de ser compañeros, amigos a ser algo más. No recordaba que lo hubieran hablado, simplemente se dio. Aun recordaba aquel primer beso, torpe y sorprendente, que le robo Ravi. Aquel día no pudo dormir, nervioso, sin comprender que estaba ocurriendo en ambos. Los días fueron pasando, y después de otros besos, se vio metiéndose en la cama de Ravi, abrazándole. Y fue ahí cuando ambos se confesaron, debajo de la luna que entraba por la ventana, en el departamento donde los demás miembros vivían. Lo habían intentado ocultar, pero por suerte o desgracia Ken les había encontrado varias veces, lo que le hizo aprender que debía picar antes de entrar.
Lo que le gustaba de Ravi es que no preguntaba, solo se quedaba ahí, abrazándole, hasta que él quisiera decírselo. No le agobiaba, no le interrogaba. Solo estaba ahí, para él. Sonrió levemente, aferrándose de aquel abrazo y después alzó un poco el rostro, encontrándose con aquella mirada penetrante, con un intente de preocupación. Solo negó, robándole un leve beso, un simple roce de labios, sabiendo que eso seria lo suficiente para calmar la preocupación del más alto. Y así era. Lo conocía demasiado. Se reincorporó del sofá, y tomándole la mano al otro, le obligo a levantarse. Se miraron a los ojos y Ravi sonrió a N, como si hablaran sin tener que decir una simple palabra. Una simple mirada era suficiente para comprender sus pensamientos. La tarde fue entretenía, comieron juntos. Ken seguía molestando, hasta que Leo acabo amenazándole con un golpe y le empujo. N y Ravi rápidamente lo pararon, aunque sabían que no era peligroso, así que rieron todos, mientras Ken hacia pucheros y se marchaba, escondiéndose detrás del pobre Hyuk, que reía sin poder aguantar. Siempre debían que actuar de aquella manera con los otros, aunque sabían que Ken disfrutaba molestando a Leo, porque disfrutaba las reacciones de rabia de Leo, cuando le intentaba golpear, le gustaba la atención de Leo.
Ken estaba enamorado de Leo era mas que obvio, y Leo le encantaba golpear a Ken.
Poco a poco los chicos se fueron marchando a sus habitaciones, algo que N esperaba con ansia. No es que no quisiera estar con los demás, pero tenia algo que enseñarle a Ravi. Y quería que fuera pronto. Se levantó rápidamente, acomodándose aquel pijama ancho que usaba y se giró a Ravi, sacando la lengua.
- Hoy te toca a ti limpiar los platos –Y dicho aquello salio corriendo a su habitación. Podía escuchar las quejas de Ravi pero poco le importaba, la sorpresa que le daría después le bastaría-
Al entrar, se lanzó encima de la cama, abriendo el portátil de nuevo, viendo como el video que el mismo había creado estaba intacto. Sonrió, mientras veía unos pocos segundos del video. Era una recopilación de los VIXX TV, con momentos de ellos dos juntos. Le había sido complicado elegirlos, pero después de muchos días, lo había conseguido. Como canción, era mas que obvia. Acabo de colocar el portátil en el escritorio que utilizaban, y se sentó en la silla contigua, esperando a que Ravi apareciera. Cuando escucho la puerta apagó rápidamente la luz. Escucho una queja del otro, pero simplemente lo ignoro. N tenía otros planes. Cuando sintió que Ravi estaba mirando a la luz del portátil, comenzó a reproducir el video.
Yes, I’m so sick
Because of you, but I love you
This song is for pretty you oh oh
This is love song
This song for you you you you you
Alright listen up my boo
Why is love so bittersweet?
Why do you keep pushing me away?
I’ve never been shot down wherever I go
But in front of you, I am kneeling
La canción “Love Hurts” comenzó a sonar, mientras los pequeños momentos de ambos en aquel programa que ellos presentaban iban apareciendo. Los primeros episodios, donde ambos salían tan nerviosos, entusiastas que alguna de sus fans los vieran, presentando a los miembros de su grupo. Las luces seguían apagadas, dando una sensación de más nitidez al video, y N simplemente miraba la pantalla, impaciente de ver la reacción de su novio. No era un gran regalo, simplemente un pequeño detalle que quiso tener con él, y esperaba que el menor le importara tanto como a él le importaba.
(Love you you you you you)
Woo jju jju jju jju jju^
(Ma boo boo boo boo boo)
I want to hug you
(Oh chu chu chu chu chu)
Will you be my boyfriend?
Love you you you you you
Al sonar el estribillo encendió la luz y le cantó, señalándole y haciendo aquellos dulces gestos de los que era famoso y que sabía que encantaban a Ravi. El rostro de Ravi era un poema. Estaba mas que sorprendido, con la boca entreabierta y los ojos abiertos. Eso asusto un poco a N, sin saber muy bien que estaba pasando por la cabeza de Ravi. ¿Le había parecido demasiado empalagoso? ¿No le había gustado? Dio un paso adelante, queriendo tocar el rostro de Ravi, pero no lo dejo. El mas alto le tomo de las muñecas y de golpe lo lanzó a la cama, subiéndose encima y le beso con suma fuerza. N solo pudo cerrar los ojos, correspondiendo a aquel apasionado beso que compartían.
Las manos de Ravi recorrían su espalda con fuerza, alzando poco a poco aquel fino y antiguo pijama que usaba, disfrutando del tacto que solo aquella piel de porcelana le entregaba. Mientras el más mayor tenía los ojos cerrados, entrelazando junto a la lengua de su pareja la suya propia, empezando una guerra que a ninguno de los dos le importaba ganar. Era más que obvio quien era el hombre en aquella pareja, y ese detalle no cambiaria nunca. No obstante, N se separó de aquel beso para encararle, queriendo saber el porque de aquella reacción.
- P-Porque estas así? –Le preguntó sorprendido, mientras veía como su novio acababa por lanzar la camisa que usaba, dejándole desnudo de cintura para arriba y comenzaba a atacar su cuello-
Ravi no le contestó, no en ese momento. Siguió besando y lamiendo su cuello, mordiendo de vez en cuando aquella suave y nívea piel, disfrutando de los moratones y las marcas que le causaba, amaba marcarle como de su propiedad, y amaba más cuando los demás lo veían, aunque no supieran que era. Una de las manos del ahora rubio tomó la mano del más delgado y el bajo, hasta dejarla en su entrepierna, dejándole ver aquel enorme bulto que él mismo había causado.
- N, eres tan empalagoso, que me vuelves loco –Le susurró con aquel tono sensual y provocador, que conseguía que N se derritiera en ese mismo instante. ¿Quien podía resistirse al atractivo y brusco Ravi, con un cuerpo de infarto y un rostro aniñado y dulce? Nadie-
El líder de VIXX se sonrojó con fuerza, sintiendo como el miembro que tantas veces había notado en el pasado, empezaba a despertar hasta quedar en todo su esplendor. No recordaba la última vez que había conseguido excitar tanto a Ravi en tan poco tiempo. Tendría que apuntarse el hacer ese tipo de sorpresas más a menudo.
La ropa salía disparada, golpeando en algunos momentos las paredes, como los zapatos de los ambos, que seguramente dejaron una marca en la pared. Ya después limpiarían, ahora poco les importaba. HakYeon no perdió la oportunidad de desnudar al rapero, viendo con gula y deseo aquellos trabajados abdominales que le volvían loco. Odiaba a su novio por ser tan extremadamente sexual. Luego él tenía que evitar empujarle contra alguna de las paredes y obligarle a practicar sexo hasta que el sol se marchara. Le empujó con fuerza, acabando por subirse encima, viendo la sorpresa y el deseo de Ravi. Amaba que N tuviera el control, amaba verlo activo, lo sabia, y siempre lo usaba en su contra. Sus labios comenzaron a recorrer su piel, su cuello, sus hombros, donde no dudo en morder con fuerza, causando un pequeño jadeo de su pareja que se tomo con una mano de las sabanas y con la otra, recorría la espalda del otro, ya desnuda. Los besos fueron bajando hasta llegar a sus abdominales, donde con su lengua recorrió cada uno de los surcos de su pecho, disfrutando de los suspiros de WonSik, eran como música para sus oídos.
WonSik entrelazo los dedos de su mano diestra en el cabello del otro, obligándole a bajar. Quería sentir como le quitaba aquellos molestos y apegados pantalones, quería sentir la jugosa y juguetona lengua de su pareja recorriendo su pene. El líder de VIXX lo comprendió al instante, y sin dudarlo, le bajo con violencia el pantalón y los boxers, comenzando a recorrer con la punta de su lengua el glande, dejando unas pequeñas succiones, para después bajar con su lengua el tronco del mas alto, sintiendo como iba humedeciéndose con su propia saliva. El rapero bajo la mirada, y vio una de las imágenes mas sensuales que había vivido. Amaba como se veía su novio en aquel momento. Lamia con insistencia su pene, con el cabello rojizo despeinado, una mirada fija en sus labios, y sus mejillas levemente sonrojadas. En ese momento, podría correrse. Pero no seria divertido. Obligo con la mano a que el mayor abriera la boca e introdujera su pene. Él mismo marco el ritmo que quería, quería disfrutar de nuevo de aquel sexo oral que el mayor siempre le otorgaba. Sus ojos estaban cerrados con fuerza, de su boca solo salían pequeños jadeos, mientras golpeaba con la mano libre la cama. Poco a poco fue sintiendo como el final estaba pronto, pero tenía una mejor idea. Quería llegar al final.
Tomo el rostro de N con sus manos y le hizo tumbarse en la cama. Ahora él tomaba el mando. Con fuerza, bajo el pantalón holgado que usaba el mas bajo como pijama y mirándole fijamente, comenzó a masturbarle por encima de la ropa interior. Amaba el rostro de placer de N, era increíble. Su boca entreabierta, con pequeños jadeos, sus mejillas sonrojadas, sus ojos vidriados, deseando más. N era el hombre mas sensual que había conocido, y era suyo. Con fuerza acabo desnudando al más bajo, abriéndole las piernas de golpe, sin dejar de mirarle a los ojos fijamente, sonriendo de manera ladina.
- HakYeon, te aseguro que como sigas haciendo estas cosas, acabaras sin poder andar un mes –El no era conocido como un chico dulce y calmado, y en el sexo mucho menos. No era la primera vez que lo hacían, y N se había acostumbrado a aquella manera brusca que tenia Ravi de darle amor-
N solo asintió ligeramente mordiéndose el labio inferior y se aferro de los hombros de su pareja, mientras Ravi tomaba su pene con lentitud, posesionándolo en la entrada del chico. No eran de tomar precauciones, ni de preparaciones, eran bruscos, y así se amaban. De una sola estocada, el menor entro. El pasivo dejo escapar un fuerte grito y clavo sus uñas en la espalda del otro, cerrando los ojos con fuerza, pero sin esperar siquiera a acostumbrarse, comenzó a mover su cadera, dándole a entender que no hacia falta ninguna pausa. Y Ravi lo agradeció porque no podría aguantarse mucho más. Pronto comenzaron las embestidas. Ambos pechos se rozaban mientras el pene del más alto golpeaba con violencia el interior del más bajo, que solo se retorcía de puro placer, gimiendo con suma fuerza, sin importarle que los demás lo escucharan.
- W-WonSik, dios mas! Más duro! –Le suplicaba con suma fuerza, acabando por arañar con una de sus manos la espalda de su pareja, disfrutaban marcándose, arañándose como puros animales-
Las embestidas iban aumentando hasta un ritmo casi inhumano, la cama iba golpeando la pared con suma fuerza, haciéndoles pensar que quizás la estantería que había arriba pudiera caer sobre ellos. Estaban desesperados, como dos animales en celo que deseaban mostrarse todo lo que se querían. El final estaba cerca, ambos lo sabían, pero en vez de bajar el ritmo, dieron todo lo que tenían en su mano para hacer aquel momento, el mas especial del mundo. N tomó el cabello del rapero con fuerza tirando, mientras llenaba ambos pechos de su esencia, apretando su interior, algo que causo que Ravi no pudiera mas y ambos acabaran. A los pocos segundos Ravi cayó contra su pecho, respirando entrecortado, con los ojos cerrados. Lentamente, el mas delgado abrazo a ambos y suspiró feliz.
- Te amo, líder idiota –Le susurró el rapero acurrucándole con cuidado contra su pecho- Y amo estas ñoñas sorpresas…-Le comentó señalando con la mirada el ordenador ahora apagado por el tiempo en espera-
N solo sonrió asintiendo, susurrándole en voz baja un “Yo también”, mas vergonzoso de admitir lo que sentía en voz alta. Y todo hubiera sido perfecto, de no ser porque de golpe escucharon un ruido y vieron a Ken, en la puerta, haciendo morritos, mientras Hyuk intentaba quitarle del marco de la puerta mirando hacia otro lado avergonzado. Ken, no obstante, no dudo en mirar a la pareja y comenzó a fingir besos y abrazos, imitando las palabras que antes ambos habían compartido. Un cojín voló y golpeo el rostro de Ken, que cayó de culo fuera de la habitación cerrando la puerta. Un gran lanzamiento de Ravi, debía confesar.
En ese momento se dieron cuenta de dos cosas, debían matar a Ken y debían comprar un pestillo.