El día era prometedor, un poco nublado y con una brisa fría excelente; no me gustaban los días soleados, sudas mucho, te pones pegajoso y no es lindo. Termine de vestirme y saque ropa que ya no usaba porque me quedaba pequeña. Luhan, estaba dormido boca abajo sobre la cama, ayer solo le habíamos dado vueltas al asunto, no quería decirme las cosas si yo no le decía nada.
—Luhan despierta, debemos irnos
— ¿Qué? Si, mmm ajam — Comenzó a hacerse bolita
—Luhan, ¡hay donas!
— ¿Donde? — se paró de golpe, aun dormido —Kai, mentiroso
—Si no te levantas y te bañas, no habrá nada
Se levanto, tomo la ropa y entro a paso lento al baño, la puerta sonó y se abrió, dejando ver a Haeri entrar con el desayuno, lo dejo en la mini sala y se retiro.
— ¿Kai?
— ¡Oh! Baek, ¿qué pasa?
— ¿Ya te vas?
—Solo espero a que Luhan termine de bañarse
— ¡Ohhh! — lo miré detenidamente, aun estaba pensando en lo que había pasado con Luhan
— ¿Quieres desayunar?—asintió — Puedes quedarte
— ¿Qué? — Era una excusa, no diría nada —¡Espera! no creo que sea buena idea
— No exageres
Luhan salió secando su cabello y ya cambiado, sonrió al ver el desayuno y se sentó junto a nosotros.
— Hola Baekhyun — saludo y me sorprendí al igual que Baek — Lamento lo de ayer
—No, está bien, también fue mi culpa
—Lo sé, pero no debí contestarte así, lo que hagas con...
— Luhan — lo mire sorbiendo un poco de café —eso no va al caso
—Bueno, el punto es que si me agradas Baek
Ambos sonrieron, el desayuno fue más ameno, Baek se levanto poco después ya que tenía que ir con Chanyeol, y respecto a mí debía irme con Luhan. Subimos al auto como la última vez con dirección al centro comercial, pasamos junto a las tiendas de niños y las de juguetes, para llegar a mis tiendas frecuentes.
—Si no te gusta nada me dices y vamos a otra ¿Ok?
— ¿Tu compras tu ropa aquí? — Asentí — Me gustara, veamos
Tomo varios pantalones de mezclilla en varios colores y algunos negros; varias camisas que intento combinar con los pantalones, gorras, gorros, ropa interior, todo lo necesario para poder vestir. Entro al vestidor y al poco tiempo salió, traía un pantalón blanco en su totalidad que tenía tres cierres en cada pierna de forma vertical de la cintura hasta las rodillas, una camisa blanca sencilla con un estampado en el mismo color solo que brillante y como hacia frió un abrigo a la cintura color hueso de botones desabrochado. Se veía como un ángel.
— ¿Qué tal?
—Perfecto — sonrío y nos llevamos las bolsas — Vamos a pagar, y por zapatos
Al salir de la tienda la gente lo miraba, lo que al parecer le ponía nervioso y más porque era lo contrario a mí que llevaba Jeans negros, camisa negra, chamarra y tenis al igual.
—Kai
— ¿Mande? — lo mire y sus manos se aferraban a su abrigo — ¿Que tienes?
—Puedo... — me tendió su mano mirando a otro lado — tomar tu...
Sonreí y tome su mano, jalándolo un poco más cerca de mi cuerpo, la tensión en su cuerpo se fue y camino sonriendo. Ya en la tienda de zapatos, solo paso entre tenis "Converse", botas, zapatos, sandalias, pantuflas y demás. Había creado una Diva de las compras y para salir de ahí tomo unos converse en blanco.
— ¿A dónde vamos?
—Solo necesitamos algo más — lo hice entrar a una tienda un tanto diferente
—Oh! Buenos Tardes, Joven Kim
—Buenas Tardes, Sulli — sonreí — Necesito 2 trajes
—Ok, ¿mismas medidas?
—No
—Espera un momento.
Conocía a Choi Seol Ri o mejor llamada Sulli desde mi primer traje, ella solo era una niña que ayudaba a su madre, era de mi edad por lo que nos llevamos bien desde entonces.
— ¿Y qué cambio? ¿Tu trasero creció o tus brazos?
— No es para mí, es para... ¿Luhan? — lo mire, me daba la espalda caminado a la salida — ¿A dónde vas?
—No necesito saber si tu trasero creció — nos miro molesto — y ella tampoco
—Luhan los trajes son para ti, los necesitas
— ¡No quiero!
—No terminaremos si no compramos esto — hizo un puchero y tuve que ir por él — Vamos
Aunque se resistía dejo que Sulli le tomara las medidas, se quito el abrigo y lo tenía junto a mi sentado frente a él, pensando en que color debían ser los trajes de Luhan.
— Listo, ¿en qué color van a ser?
—Mmm — mire a Luhan — ¿Que te parece negro y blanco?
—Como quieras
—Ok, que sean en blanco y negro
—Tela, ¿vicuña como siempre?
—Si
—Ya sabes el depósito y el resto cuando se entregan
—Sí, mandaré el cheque
— ¿Qué lindo, un amigo? —Sonreí ante los susurros de Sulli, nos habíamos acercado más
—Luhan ven
— ¡NO! — salió corriendo
— ¡LUHAN!, perdón no se qué le pasa — intente tomar las bolsas pero eran demasiadas
—Yo te las mando más tarde
— ¡Gracias!
Corrí detrás de Luhan, no era muy difícil saber por donde había pasado, lo sabia por la reacción de la gente, << ¡Malditos mirones! >>, Lo divise no muy lejos, pero corría rápido, le alcance por un segundo tomando su mano antes de que volviera a perder ventaja. Le gire, pero no me miró mantenía la mirada en el piso.
—¿Qué te pasa?
—Nada
— Oye, mírame — negó —Luhan
Lo obligue a que me mirara y tenía un puchero enorme, tan tierno que no pude evitar poner mi dedo índice sobre sus labios y reír un poco.
—Tengo hambre — me sorprendió su repentina demanda —Trae algo
— ¡Haa! Ok espera aquí, no te muevas —Resople y asintió — Hablo enserio
Entre en un local de Crepas, por lo que parecía Luhan era adicto a lo dulce, a mi parecer un lobo bástate raro. Compre una, de Fresas con crema batida y jarabe de chocolate, yo no tenía hambre así que estaría bien.
— Toma — volteó aun con la misma mirada —¿Porque estas enojado?
— No lo estoy
—Ok — comenzó a comer
— ¿Quieres? — Negué — ¿Ahora tu estas enojado?
—No, ¿no que no estabas enojado?
— No lo estoy — resopló — Estoy celoso
Lo miré nervioso mientras el parecía disfrutar de su comida, como si lo que hubiera dicho fuera tan natural como respirar. Pensando un poco me había dado cuenta que tal vez Luhan tenía una idea equivocada conmigo por como lo cuidaba y consentía, << ¿Pero yo pienso lo mismo? >>, Negué rápido.
—Dame una fresa
— Ya no hay — lo mire y le había llevado la ultima fresa a la boca—¡Perrdónn!
— Está bien — revolví su cabello, aun tenía la fresa en la boca, se veía la mitad fuera de ella —, solo era un antojo…
Tomo mi cara con sus manos y su boca choco con la mía. Sorprendido, no me moví, el movió sus labios, sentí el jugo de la fresa en mi boca y resbalando por la comisura de mis labios hasta mi barbilla. La había mordido y empujaba la mitad con su lengua, lo supe cuando abrí un poco mi boca dejando entrar el cacho de fruta y su pequeña legua choco con la mía.
No pensé, mis brazos fueron a su cintura atrayéndolo más y los suyos envolvieron mi cuello, la fresa había pasado a segundo plano, nuestros labios se movían sobre los ajenos con ritmo lento, una nueva forma de comer, disfrutando el sabor de sus labios mezclados con la mitad de esa fresa que iba de su boca a la mía y de regreso.
— ¡Jum! — Me separe de golpe, cuando mi celular vibro en mi bolsa — ¿Si? — era Yunho, mire a Luhan estaba sonrojado y un poco acelerado, yo me había quedado con el cacho de fruta — ¿Qué?, No, como fresas — le deje hablar hasta que me dijo algo que no me gusto — Ahora?, Ok voy para allá
Suspire debía ir a la empresa de mi padre.
—Luhan...
— ¿Si? — no me miraba
—Debemos irnos, debo pasar a otro lugar antes de regresar a casa
— ¿Es una chica? —reí nervioso
— No, es trabajo
Se levantó y camino a mi lado e intento tomar mi mano, pero solo la rozo y la regreso junto a su otra mano, con el impulso solo la tome, atraje su mano a la mía hasta llegar al auto. Maneje hasta el trabajo, que todos esperaban fuera mío en un futuro, Luhan iba en total silencio y llegamos.
—Buenos Días, Joven Kim — solo hacia una reverencia a las secretarías
—Vamos Luhan — volví a tomar su mano y subimos al elevador
Un momento de silencio.
—Yo...
—Yo... — hablamos al mismo tiempo —¿Dime?
— No tu primero
—Está bien, puedes decirme
—Yo, lo siento, no me medí y...
— No hiciste nada malo, ni que me molestara, así que está bien
Mire sobre mi hombro cuando el elevador se abrió y él sonreía otra vez, caminamos directo a la oficina principal.
—Ya estoy aquí Yunho
— Hola Jong In y... — Miro a Luhan — Joven PET
—No lo llames así, su nombre es Luhan
— Oh! Disculpa, Hola Luhan
— Hola — devolvió el saludo de Yunho
— ¿Que pasa que tuve que venir hasta acá?
—Bueno, es algo delicado siéntate — lo hice y le hice una seña de que prosiguiera —Verás...
— ¿Qué es esto? — Mire a Luhan tomar una figurita del escritorio de Yunho — ¿Para qué sirve?
—Es un ángel, solo es decorativo — Luhan formo una perfecta "O" con su boca — ¡Que lindo!
— ¡HEY! ¡Estamos aquí por trabajo!
— Sí, claro…
— Kai, ¿vamos a ir por las donas? Y a mi ropa, ¡la dejamos!
—Luhan está bien, siéntate aquí —lo puse en un sillón y llamo mi atención un juguete que guardaba Yunho desde que yo era niño — Juega con esto
— ¿Que tengo que hacer?
—Es un cubo "Rubik", debes poner todas las caras del mismo color
Comenzó a mover y jugar con el cubo, regrese con Yunho que me miraba atento con una sonrisa.
— ¿Qué?
— Así que ya tengo... ¿yerno? — Me sonroje al pensar en el beso — ¿Si?
—Cállate y prosigue con lo que decías — soltó una carcajada, pero luego que se puso serio
—Algo está mal, Junsu quiere que nos unamos a una compañía fármaco-biológica muy importante...
—Pero eso no nos ayuda en nada, somos una compañía de Medicina ya tenemos eso.
— Lo sé y se lo dije a Junsu, pero al parecer está comenzando a hacer todo de manera ilegal, ya que es tu tutor y tus estudios no están terminados, sus decisiones se toman como tuyas...
— Tú también tienes peso en las decisiones
— Gracias eso es que lo detuvimos, pero nos dimos cuenta de sus trabajos sucios, es horrible.
—Hablare con él — estaba bastante enojado — Y...
— No Jong In, por ahora lo dejaremos, necesitamos averiguar más y poder acusarlo.
—¿Qué clase de cosas hace?
—Trafica gente, en su mayoría PET...
— ¡YA TERMINE! — Ambos miramos atrás — Kai, ya lo termine
Reímos por un momento y camine hacia Luhan, ya habíamos terminado ahí.
—Ya nos vamos
— ¿Puedo llevármelo? —Miro a Yunho
— Claro, es de Jong In
—Viste, lo terminé — sonrío mostrándome en cubo resuelto
—Eres muy inteligente — acaricien su cabello — te comprare mas donas hoy
Tomo mi mano sonriendo, su presencia me transmitía calma y no pude evitar sonreír igual, voltee para despedirme de Yunho y solo me repitió lo que Baek
—Kai, estas cambiado…