Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Confusiones; inofensivas cartas... por EnfasisClown

[Reviews - 30]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

creo que mi historia no tuvo popularidad u.u

jajaja no me preocupo ya que  me gusta escribir.

solo espero que sea de su agrado.

Capítulo II

 

 

Primera carta.- Rukawa

 

 

Pequeño botón de rosa:

 

Espero no te molestes por llamarte de esa manera,

Realmente es así como te veo, como un delicado botón de rosa que

Pronto brotara para convertirse en la más grandiosa flor.

Eres increíble, lo sabes?

Logras que actué como un tonto cada vez que te veo pero por ti

Haría lo que fuera.

 

Desde la primera vez que nos encontramos me enamore locamente de ti y de

Esos ojos que me miraron con asombro y dulzura.

 

Tu fresca y delicada Piel me estremece y tu dulce aroma me enloquece.

Me gustaría caminar contigo tomados de las manos,

Abrazarte cada vez que sientas frio, acariciar tu sedoso cabello para consolarte y hacerte reír,

Para que seas feliz, ya que no deseo verte triste jamás.

 

Lamento mucho no poder expresarme mejor, pero me cuesta

Decirle a la persona que quiero, todo lo que siento.

Me gustas,

me gustas demasiado pero temo decirte mi identidad por miedo a tu rechazo.

 

Ojala puedas corresponder a mis sentimientos

Cuando este cobarde se atreva a

Presentarse ante ti.

 

Por lo general, el no hubiera ni abierto esa carta. Nunca lo hacia ya que siempre era lo mismo. Típicas confesiones de chicas que creían estar enamoradas de el. De hecho bufo molesto de tan solo ver el sobre pero esta vez, sin saber porque le picaba la curiosidad el leerla. Como aun tenia tiempo decidió echarle una ojeada pero con leer solo la forma en la que se referían a el como destinatario, termino leyéndola completa.

Cuando termino no comprendía nada. De seguro era una equivocación.

Botón de rosa?  El, un botón de rosa? Estaba confundido y algo avergonzado pero por un lado era algo gracioso ya que le pareció bastante cursi. Miro detenidamente la letra de la carta, y  aunque le era bastante familiar no logro saber de quien podría ser. Miro a todos a su alrededor creyendo encontrar a alguien delatándose, si es que era broma, claro, pero nada. Doblo el papel y lo guardo tal cual como había sido entregado, y lo introdujo en los bolsillos de su pantalón de entrenamiento. Mas tarde tendría tiempo de preguntarle a Yasuda la identidad de esa persona. Ahora, era tiempo de entrenar.

Tomo uno de los balones para driblear un poco pero su mirada se desvió hacia uno de sus compañeros; Mitsui. Este sudaba a mares, y eso que aun no comenzaban el calentamiento. Más no le dio importancia cuando lo vio retirarse.

 

-          UUUUY!!!! Pero quien se cree!!!- su mirada se poso junto a la de todos los presentes en el gimnasio, hacia la manager del equipo, quien estaba bastante rabiosa por así decirlo. Estaba hecha una furia mientras  gritaba  y arrojaba al suelo un picadillo de papel.- cuando sepa quien me mando esto! Uuuuy- ella apretaba los dientes y se hablaba  así misma.

 

Al otro extremo del gimnasio ahora se escuchaba a una chica sollozar pero luego su llanto se intensifico. –“y ahora que?!” Pensaba Rukawa. Todo el mundo parecía estar sensible el día de hoy y eso lo molestaba de sobremanera. Noto que era esa chiquilla de la que tanto hablaba el pelirrojo, aquella que no dejaba de mirarlo, la hermana del capitán. –Patética – susurro. Afortunadamente ella había salido corriendo seguida por sus amigos.

Ahora que lo pensaba mejor (miro  Ryota y a Hanamichi) esos dos se estaban comportando demasiado raro. Desde que los vio en camarines hasta ahora que los veía totalmente devastados. –“estarán tramando algo?” pensó. Enarco una ceja al ver como ambos lloraban mientras trataban de consolarse. – Idiotas…

 

                                                           *****

 

-          Como te sientes? Porque yo estoy algo nervioso- decía Ryota.

-          Me siento igual que tu, aunque algo emocionado. Tal vez debí poner mi nombre desde el principio.

-          No, es mejor crear algo de incertidumbre- reía bajo. - veamos como reaccionan las chicas.- aunque creían actuar de manera “normal” se notaba a lo lejos que algo tramaban. Observaban de reojo cada movimiento de las chicas, esperando ver el sonrojo de sus rostros, alguna sonrisa picara o quien sabe, mas no fue así. La primera en terminar de leer fue Ayako, quien dejo ver su rostro totalmente  furioso.

 

-          UUUUY!!!! Pero quien se cree!!!- hacia picadillo el papel- cuando sepa quien me mando esto! Uuuuy- pisoteaba los papelitos.

 

La cara de Miyagi cambio por completo.

-            Que rayos le escribiste para que se enojara tanto?!- susurraba el pelirrojo

-          Yo- yo solo decía la verdad- tapo su boca con su mano, cerró sus ojos al tiempo que escapan unas lágrimas. Hipaba pero su amigo Hanamichi estaba ahí para darle palmaditas en la espalda.- no.. no pensé que le molestaría tanto.

-          Ya, ya tranquilo.- trataba de tranquilizarlo, miro a Haruko con algo de esperanza pero al Igual que Miyagi su carta no tuvo un impacto positivo.

 La castaña había leído algo bastante horrible para cualquier chica. Estaba incomoda, se sentía horrenda y poco femenina. Cada palabra fue un martirio. Las lagrimas brotaban por si solas hasta que lloro con mas fuerza sin importarle la gente a su alrededor y salió del gimnasio como si se la llevara el diablo. Sus amigas junto al Gundam de Hana estaban bastante preocupados y tuvieron que correr tras de Haruko.

-          NOOO HARUKO!!!!- gritaba teatralmente el pelirrojo cayendo de rodillas al suelo.

-          Que hicimos mal?- Ryota aun lloraba en silencio apoyando su mano sobre el hombro de su amigo.

-          “Pero que diablos le pasa a estos ahora? ¬¬” se preguntaba el capitán Akagi.- Bien la práctica dará comienzo. Ustedes Miyagi y Sakuragi dejen de hacer el tonto!

-          Gorila insensible~ -susurraron ambos. Se ganaron unos buenos golpes.

 

 

 

 

 

 

 

Segunda carta.- Mitsui

 

 

Amor mío:

 

Seré directo contigo,

 No sabes cuan agobiado me siento,

 y solo por el hecho de saber que yo no soy nadie para ti,

Mientras que tu lo eres todo en este mundo para mi.

 

Bueno, siempre te he dado razones

Para que sepas cuan enamorado estoy de ti pero

Parece que no le das importancia.

Me duele, sabes, tu indiferencia hacia mi, me duele.

Aun así no desistiré,

Se que algún día podrás aceptarme tal cual soy. Creo que la apariencia no es lo mas importante y que mi estatura no afectara nuestra futura relación.

Te deseo, con exceso, locura y desesperación.

 

Todos los días espero despertar a tu lado,

poder sentirte entre mis brazos y recorrer con mis manos tu exquisita piel, en serio,

No sabes las incontrolables ganas que tengo de poseer tu cuerpo.

No te enfades por  decir la verdad.

 

Mañana te espero en el gimnasio,

 Después del entrenamiento del equipo.

Por favor, no faltes.

 

-o-oh, por dios (glup)- traga fuerte mientras susurra. Sus manos que afirmaban fuertemente el papel temblaban por cada letra que leía. Busco a Yasuda con la mirada y lo vio al otro extremo de la cancha. Camino firme hasta el y lo llamo lo mas discreto posible.

- sucede algo Mitsui?- lo miraba interrogante.- te ves algo pálido, si quieres te llevo a la enfermería?- se ofreció como buen compañero que era.

- E-esta carta… (Miro de lado a lado) estas seguro que te la entrego el profesor Ansai...para mi?

-claro. Bueno,  me llamo hasta su oficina y me pidió que te la entregara. Dijo que era importante que la recibieras hoy.

 

Que haría? El profesor Ansai, aquel quien admiraba, aquel que lo quería como un padre, se le estaba declarando! Cada palabra que leía era como una estocada directa al corazón. –que hago?- susurraba. Se sentía mareado y con un calor recorriendo por todo su cuerpo. –no me siento bien…- comenzó a sudar.

Akagi al notarlo se le acerca algo preocupado pero antes de preguntarle algo el mas bajo se le adelanto.

-          Akagi, puedo dejar el entrenamiento por hoy?

-          Te sientes mal?- interrogo- quieres que alguien te acompañe a la enfermería?

-          No, puedo ir solo.- se alejaba a paso lento, con el famoso papel arrugado en una de sus manos. –esto no me puede estar pasando a mi…

Los pasillos de la preparatoria se le hacían eternos, ni siquiera se molesto en cambiarse de ropa o ir en busca de sus pertenencias al camarín. Iba pensativo, es que no podía ser cierto lo que acababa de leer. Detuvo sus pasos y comenzó a reír como un loco.

-          No es posible, jajaja. De seguro alguno de los chicos esta detrás de todo esto. (asentía con los ojos cerrados)- no se percato que alguien estaba tras el.

-          Mitsui, que haces saltándote el entrenamiento.- esa voz lo descoloco.  abrió sus ojos y se dio vuelta. Comienza a tartamudear.

-          B- bueno y-yo voy a… es que…- mira de reojo el papel en su mano y  su acompañante también.

-          Veo que ya recibiste mi carta. Que opinas?- el moreno no sabia que contestar- bueno si estas de acuerdo mañana nos vemos después del entrenamiento, HOHOHOHO.  Ahora muchacho no pierdas mas tiempo y ve con tus compañeros.- el profesor se alejo sin antes darle unas palmaditas en la espalda a Mitsui que estaba hecho piedra.- vaya tienes nudos en la espalda, quizás mañana te de algunos masajes para que te relajes.- se aleja lentamente.

-          (sollozos)

 

****

El entrenamiento había terminado por hoy. Había estado agotador y casi mortal, y eso que el ánimo en el lugar estaba por los suelos. El capitán estaba fastidiado ese había sido un día de locos. Su manager parecía andar en sus días, Mitsui se salto el entrenamiento por estar enfermo, el par de tontos estaban deprimidos y su hermana, al parecer le había ocurrido algo por la forma en que salió llorando. Y lo mas extraño fue que el pelirrojo no había querido iniciar alguna de sus peleas con Rukawa como era de costumbre.

-          Bien, es todo por hoy!- grito el capitán- vallan a las duchas! –todos caminaban en la misma dirección agotados. -Sakuragi, Miyagi!- los aludidos voltearon desganados y con los ojos hinchados- ustedes se quedaran a la limpieza!

Ordenes eran ordenes y aunque estaban sin ánimos solo debían obedecer. Ni siquiera rechistaron, cosa que preocupo al capitán.

Sus compañeros se iban de apoco, la enfadada Ayako era una de ellas, quien ni se despidió. Eso hiso mas daño al pequeño Ryota. – “si hubiera puesto mi nombre, ya seria hombre muerto…” pensaba.

-          Hanamichi ya termine aquí- decía Ryota –iré a cambiarme –el pelirrojo solo asintió.

Sakuragi aun no terminaba la limpieza y no tenia ganas de hacerlo. Se sentó cerca del aro dejando el trapeador en el suelo.  No podía hacer más que pensar en lo triste que iba Haruko. ¿Que habría escrito mal para que ella saliera llorando? Se sentía un tonto.  Pero recordó que sus amigos habían ido tras ella así que mas tarde o quizás mañana preguntaría por lo ocurrido. Dejo caer todo el peso del cuerpo para recostarse en el frio suelo.

-          Todavía estas ahí? Vamos Hanamichi no te desanimes –Ryota salía con sus pertenencias, no se había duchado ni cambiado de ropa. Solo quería ir a casa rápido- mañana vemos como arreglamos este asunto. Rukawa esta por salir y No olvides cerrar el Gimnasio.- Se despidió de Hana. El pelirrojo solo levanto su mano en son de despedida.

-          Como se supone que arreglare esto.- susurraba.

Rukawa salía tranquilo, miro de reojo al Do´aho pero sin interés en decirle algo. No pretendía perder el tiempo con el, pero una simple frase detuvo sus pasos haciéndolo voltear de manera exagerada.

-          (suspiro) que voy hacer contigo mi pequeño botón de rosa…? (suspiro)- como el pelirrojo estaba acostado y con los ojos cerrados ni se percato de que era observado por su rival.

El moreno tratando de meter el menor ruido posible, salió del lugar con el corazón latiendo a mil. Nuevamente el Do´aho lo estaba atormentando con sus estupideces. “porque son estupideces, cierto?” pensó. – debe haber una equivocación o es solo una forma mas de fastidiarme…

 

FIN CAPITULO II

Notas finales:

gracias por leer!

saludos


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).