-Ahora nada ni nadie podrá separarnos… Hoy mismo se lo diremos a mi padre…- decidió Vegeta, mientras Goku asentía con la cabeza…
Al fin estaban juntos de nuevo… Ya nada podía salir mal…
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-¿Cuánto falta para entrar en la atmosfera terrestre soldado Zarbon?...- preguntaba en ese momento el emperador del universo, sentando en su trono flotante…
Sus soldados Zarbon y Dodoria estaban detrás de él, como los lambiscones que eran…
-Apenas estamos en el cinturón de Kuiper… El exterior del sistema solar Señor… Pero estaremos entrando en la atmosfera terrestre en aproximadamente unas dos horas…-
-Perfecto…- susurró Freezer, mientras frotaba sus manos con fuerza y divisaba ya un lejano punto de luz que solo podía ser el sol…
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Luego del momento de intensa pasión que Goku y Vegeta habían compartido, ambos decidieron que lo mejor sería volver a la mansión y afrontar al Rey de una vez por todas con la verdad… Lo que no sabían era lo que les esperaba al volver allí…
Los dos se vistieron en silencio, aun apreciando la belleza de ese lugar que se había convertido en el paraíso secreto de ambos…
Esa manera en la que el sol le arrancaba destellos de oro al agua del tranquilo río, era casi mágica para ambos… Y el bosquecillo entero que rodeaba ese lugar parecía refulgir lleno de esa misma luz…
En el margen del río, unas hermosas flores de color lila y pétalos pequeños que parecían hechos de terciopelo se agitaban con suavidad, mecidas por la calida brisa del recién llegado verano, y entremedio de ellas, una mariposa de brillantes colores agitaba sus alas…
-Sabes… creo que amo este lugar…- murmuró Vegeta en ese momento, llamando la atención de su profesor, que recién terminaba de vestirse…
-Yo también lo amo… antes solo me gustaba… pero desde que lo comparto contigo he comenzado a amarlo…- respondió Goku con una sonrisa, terminando de abotonarse la camisa y yendo al lado de su príncipe…
Con un tierno abrazo le rodeó la cintura y apoyó sus labios sobre el pelo de su príncipe, besándolo tiernamente…
-Pero no existe nada, en este mundo ni en ningún otro, que ame más que a ti…-
Vegeta se ruborizó y sonrío…
De nuevo su imagen le era devuelta en el reflejo del agua…
Ya no se sentía extraño al verse de esa manera…
Al verse tan humano…
Ahora se sentía feliz… enteramente feliz… completo…
-Prométeme… que volveremos siempre a este lugar…- susurró quedamente el príncipe, respirando toda la paz que allí había e inundando su cuerpo con la sensación acariciadora del sol y de aquellos brazos que lo sostenían…
-Te lo prometo… es mas… cuando todo se halla solucionado… nos vendremos a vivir aquí… construiré una casa para ti… y viviremos juntos en este lugar… solo tu y yo… y nuestros hijos…Pero tu también prométeme que te quedaras a mi lado para siempre…- respondió el profesor…
Vegeta se dio vuelta entre sus brazos para mirarlo a los ojos tiernamente, de un modo tal en que las miradas de ambos se fundían en una sola hasta hacer vibrar sus almas…
-Es la mejor idea que nadie haya tenido jamás…y claro que te lo prometo… estaré a tu lado siempre…- dijo Vegeta, alzándose un poco, casi en puntas de pie, para llegar a los labios de su profesor y robar un tierno beso de ellos…
-Ahora es momento de regresar…- susurró el príncipe, separándose de esos hermosos labios que lo volvían loco, y Goku asintió con la cabeza… El vuelo de regreso fue tranquilo y relajado, volaban uno al lado del otro, mirándose a cada rato para sonreírse…seguros y confiados de que esta vez no había nada que temer… Que ya nada podía separarlos después de la decisión que habían tomado… Esa de estar juntos para siempre sin importar los “peros”…
Nada mas descendieron en las puertas de la mansión, vieron que la limusina del Rey estaba allí, lo que significaba que este ya había regresado de la iglesia…
Vegeta tomó aire antes de llamar a la puerta, como si ya previniera de antemano lo difícil que se iba a tornar la situación, pero la mano de Goku se encontraba rodeando la suya, y eso le daba el valor para afrontar lo que fuera…
Apenas sus nudillos chocaron contra la madera de la puerta, el mayordomo la abrió, como si hubiera estado apostado detrás de ella todo el tiempo… Esperándolos…
-Príncipe Vegeta… su padre esta adentro…- dijo el mayordomo con sumo respeto, dejando pasar al profesor y a su alumno en el interior de la mansión…
Los dos entraron tomados de las manos y decididos, pero lo que no esperaban para nada era ver quien estaba en el sofá descansando…
Bulma… Con su largo vestido de novia aun puesto y con los ojos cerrados y las pestañas mojadas de lo que había estado llorando…
Goku de inmediato se sintió culpable… Pero no arrepentido… Esa mujer tenia que entender que Vegeta le pertenecía a él y a nadie más…
-Así que han vuelto…- dijo una voz peligrosa, saliendo de entre las sombras…
Era el Rey, y su expresión no se veía nada bondadosa…
-Si… y tenemos algo importante que decirte…- comenzó Vegeta, pero su padre avanzó rápidamente hacia él y lo silenció de una humillante y dolorosa bofetada que volteó el rostro del príncipe…
-Estúpidos! Ingratos! Insensatos!! Siempre arruinando mis planes!!! Con que objeto!!!? Que parte de que no pueden estar juntos no entienden???!- exclamó el Rey coléricamente, mientras Goku sentía que una ola de furia invadía su cuerpo al ver como Vegeta era golpeado…
-Eso no era necesario!!- exclamó el profesor, dando un paso hacia delante e interponiéndose entre el Rey y su hijo de un modo protector casi inconciente…
-Tienes razón! Ahora ya es muy tarde! Debí golpearlo mas cuando era un niño para que comprendiera su lugar!!...- gritó el Rey…
-Se muy bien cual es mi lugar!- respondió Vegeta con firmeza, volviendo el rostro de nuevo para enfrentarse a los ojos llenos de ira de su padre… -Mi lugar es aquí! Al lado de Goku…-
-Ustedes no pueden estar juntos! Tú tienes que casarte con Bulma! Ya te expliqué como es el asunto!!! Y tu Kakarotto!!! No te he dicho que mi hijo es tu hermano!! Como puedes…- exclamó el Rey, volviendo su furia esta vez hacia Goku…
-No me importa lo que seamos!! Yo lo amo!! Y mi lugar siempre es y será entre tú y tu hijo! Y nada cambiara eso! Además… Además tendremos un hijo!...- soltó Goku, sin detenerse a pensarlo…
El Rey se quedó pálido de la pura sorpresa…
Como…? Entonces Goku también era… un Fukuro???
En su mente el Rey empezó a sacar cuentas…
Bardock había tenido a Goku cuando tenía 20 años…
Y el periodo de nacimiento de los Fukuros era cada 20 años…
Como no lo había pensado antes????
La reproducción de los Fukuros siempre había sido un misterio…
Ellos no transmitían su sangre ni sus genes a sus hijos, simplemente los llevaban dentro… Podían transmitir sus genes y su sangre solo embarazando a una mujer, como había sido en el caso de Bardock con la madre de Goku… Pero lo demás era todo un misterio… Ademas, no eran pocos los casos en los que los hijos de padres fukuros heredaban la misma misteriosa capacidad, incluso cuando los astros no estaban en posición para que se engendraran fukuros…
Pero el Rey se dio cuenta de que no habia pensando en eso hasta ese momento, que estupidamente habia ignorado el hecho de que Goku al ser hijo de Bardock tenia la posibilidad de heredar aquella cualidad de su padre…
Y ahora Goku le decía que llevaba dentro de si, a la prole de Vegeta…
Que era otro maldito Fukuro…
Nada estaba saliendo bien…
-Esto no puede ser cierto…- susurró el Rey llevándose una mano a la frente…
-En realidad son dos… los hijos que estoy esperando…- remató Goku…
-Dos???- preguntó Vegeta sorprendido al igual que su padre, comprendiendo por que junto al río Goku había dicho “nuestros” hijos…
-Dos???!- repitió el Rey estúpidamente, anonadado de nuevo… Eso le recordó algo… Pero no… Cuantas eran las posibilidades de que justamente Goku fuera la excepción que existía en la regla de los fukuros??
-Estas… absolutamente seguro???!- volvió a preguntar el Rey…
-Si…- respondió Goku, sin comprender por que tanto alboroto…
-No lo puedo creer… Esos hijos que llevas allí serán hijos de los dos…- susurró el Rey casi para si, recordando aquella única que se excepción que se daba muy raramente en los hombres Fukuro…
Cada ciertos miles de años, la alineación planetaria que se daba durante un mes para producir el nacimiento de los Fukuros, recibía una alteración de otro cuerpo celeste lejano durante un día entero, lo que provocaba que los niños concebidos durante ese día fueron Fukuros capaces de transmitir su sangre y sus genes a las criaturas que albergaban dentro de ellos… Y no solo eso, este era el único caso en que el Fukuro llevaba dos niños dentro, por que si no siempre era uno solo…
Entonces Goku… Goku era…
-Pues claro que será así…- respondió Goku en ese momento…
-No lo puedo creer…- repitió el Rey –Tus hijos llevarán tus genes y los de mi hijo… es… un caso único…había oído hablar de esto… pero jamás… se habían tenido pruebas… de que fuera real…-
-Como que único?? Acaso no es lo normal…???- inquirió Vegeta, comenzando a confundirse…
-No… Los Fukuros no son mas que bolsas! Sin capacidad de transmitir sus genes a los niños que llevan dentro!! Pero existe un caso especial que se da cada muchísimo tiempo… Y Goku es ese caso especial…- susurró el Rey, emocionado e impactado…
-Fukuros?? Que… que estas diciendo?… Que era… Bardock entonces??- preguntó Vegeta, comenzando a intuir la verdad detrás de toda la situación por la que pasaban…
El Rey levantó la vista y enfocó sus ojos en aquellos dos que tenia adelante…
En sus labios había una pequeña sonrisa mezquina…
-Bardock era un Fukuro ordinario…- respondió el Rey, sintiendo que ya no tenia sentido ocultar la verdad…
-Quieres decir… que Bardock… solo fue la bolsa dentro de la cual me gesté yo…? Me estas diciendo… que no llevo su sangre?- preguntó Vegeta de un modo casi amenazador…
-Así es… mentí. Ustedes dos no son hermanos de sangre… Pero eso que importa!! No están entendiendo acaso??!!! Kakarotto es capaz de concebir hijos!!! Y no solo eso! Si no también de darles sus genes y su sangre!! Comprenden lo que esto significa!!!? Podremos hacer resurgir la raza saiyajin!!!- exclamó el Rey con los ojos brillantes…
Goku le lanzó una mirada de verdadero odio…
-Me estas diciendo… que nos dijiste que éramos hermanos… ¿Solo para separarnos?...- preguntó Goku intentando modular su voz…
El Rey lo miró por un instante casi con desprecio…
-Eso no importa ahora… Lo importante es que los saiyajin volveremos a ser lo que éramos!! Y haremos de la tierra un nuevo Vegita!!!... Pero esos niños… esos niños serán los descendientes de mi casa real… llevan sangre de la nobleza… y deberán ser criados como tales… Así que deberán quedarse conmigo…-
En ese momento Goku no fue capaz de contenerse más y se lanzó arriba del Rey, sujetándolo del cuello con todas sus fuerzas…
Vegeta se quedó inmóvil al ver esa reacción violenta de su profesor, sobre todo cuando la espalda de su padre chocó contra una de las padres de la mansión, agrietándola, mientras el profesor no soltaba su agarre…
-Esto tiene que ser una broma… Primero nos mientes… Y ahora quieres conquistar este planeta!!!!??? Vegeta me dijo como era nuestra raza!!! Y yo nunca permitiré que este lugar pacifico sea convertido en un lugar como Vegita!!. Y mucho menos dejaré que pongas un solo dedo sobre mis hijos!!!!.- exclamó Goku, realmente furioso… Un viento extraño había comenzado a soplar por toda la mansión, alborotando el cabello de Goku…
Bulma aun en el sofá parecía desmayada y no se enteraba de nada, pero la situación era tan tensa que casi parecía que se podía cortar el aire con un cuchillo…
-No es necesario… No es necesario que participes… en la purga de este planeta si no quieres…- dijo el Rey con voz ahogada, sosteniendo el brazo de Goku con ambas manos… -Pero debes aceptar el lugar que te corresponde como saiyajin… Ahora gracias a ti podremos mantener… pura nuestra raza… Cuando esos niños hayan nacido, se te permitirá… verlos de vez en cuando… pero tendrán la educación que corresponde… a su linaje… y luego de un tiempo… Tu llevaras semillas mías en tu interior… y podrán reproducirse entre ellos…- susurró el Rey con voz ahogada y con una media sonrisa espantosa desfigurándole el rostro mientras la mano del profesor aun se ceñía a su garganta apretadamente, y Goku apenas si podía creer lo que escuchaba…
-Nunca permitiré eso!!!- exclamó Vegeta, ardiendo de indignación… -Te has vuelto loco padre!!...-
-Se equivocan… soy el único cuerdo aquí… El único… que aun es leal a su raza…- susurró el Rey, tratando de librarse del agarre de Goku, pero la mano del profesor parecía haberse quedado soldada a su cuello…
-Mi raza es la raza humana!!!- rugió Goku con una furia sorprendente…
Nunca hubiera esperado algo como esto del Rey…
Durante el tiempo que habían compartido juntos había llegado a admirarlo… Incluso a tomarle afecto…
Pero ahora…
Ahora la mascara al fin se había caído y se revelaba su verdadero rostro…
Les había mentido…
Les había echo creer que eran hermanos con el único propósito de separarlos… Con el único propósito de llevar a cabo sus siniestros planes…
En verdad el Rey había cambiado tras 15 años en la tierra?
O aun era ese líder tirano y déspota que alguna vez gobernara Vegita…?
Un saiyajin despiadado… Al que solo le importaba el poder… Y restaurar el antiguo esplendor de su reino…
Goku lo comprendió todo en ese momento…
El Rey jamás dejaría de ser El Rey…
-Debería matarte ahora mismo…- susurró Goku apretando aun más la mano que mantenía alrededor del cuello del monarca, mientras pensaba en todo el dolor que había pasado a causa de ese hombre… Mientras pensaba en lo cerca que había estado de perder a Vegeta… y eso… eso era algo que no podía perdonarle…
Vegeta miraba la situación con bastante temor en los ojos…
Jamás había visto a su profesor de esa manera… Pero… su enojo estaba perfectamente justificado…
Sin embargo el príncipe no era capaz de sentirse enojado…
Ahora solo podía pensar en el inmenso alivio que le daba no ser hermano de Goku…
-Serias capaz… de asesinar a tu Rey???- preguntó el Rey Vegeta mientras se esforzaba por tomar aire…
-Tu no eres mi Rey… y tu reino ya no existe…- le espetó Goku, comenzando a aflojar la opresión que mantenía sobre el cuello del monarca e intentando calmarse…
Este tragó aire a grandes cantidades… Y los tres se quedaron mirándose a los ojos…
-Vegeta y yo nos iremos de aquí…- dijo Goku de pronto… -Y jamás nos volverás a ver…- el profesor iba a agregar algo mas, pero en ese momento, un poderoso temblor sacudió por completo la mansión, haciendo que les cayera polvo desde el techo donde las paredes se agrietaban…
-Oh dios que es eso!!- exclamó Bulma, saliendo del estado inconciente en el que se hallaba sobre el sofá…
El temblor fue disminuyendo de apoco… Pero la alarma en los ojos del Rey era innegable… Un presentimiento frío se deslizó por la nuca del monarca, y una seguridad absoluta lo invadió en ese momento… Una certeza tan innegable como impactante… Sus huesos aun temblaban por el estruendo que se había provocado fuera de la casa… y también por la energía maligna que sentía vibrar desde el exterior en cada nervio de su ser…
-Es Freezer…- dictaminó el Rey, sin ninguna duda…
-Que??? Pero como???!- exclamó Vegeta…
-No lo se! Pero lo sé!!! Es él!!!...- exclamó el Rey… -Creo que incluso puedo sentir su presencia maligna!!!-…
Vegeta miró con desesperación a Goku, quien ya había soltado por completo el cuello de su padre…
No podía ser…
No podía ser que fuera Freezer…
No con Goku en este estado…
No con Goku allí…
Por un momento, a la mente del Rey acudió el rostro de Bardock… Con esa misma expresión con que lo había visto por ultima vez…
¿Acaso podía ser cierto…?
¿En verdad había llegado la hora decisiva…?
No cabía duda…
Todo su ser así se lo decía…
Era una verdad que se le presentaba de pronto… Pero era casi como si su corazón lo supiera desde hacia mucho tiempo…
La batalla no seria en el espacio, ni tampoco en un planeta lejano…
Seria aquí mismo, en la tierra… Ahora…
Freezer los había encontrado… Y era momento de ajustar cuentas…
-Debemos salir… Es hora de enfrentar el destino…- susurró el Rey con decisión…
Goku no comprendía como podía ser que el extraterrestre hubiera dado con ellos, pero se mantuvo cerca de su príncipe, casi como si ya lo estuviera protegiendo, incluso antes de que la batalla final comenzara…
Sin que fuera necesario decir tan siquiera una sola palabra mas, los tres hombres salieron de la casa, seguidos por Bulma, quien no entendía nada y seguía arrastrando con ella su largo vestido de novia…
-Vaaaaya…. Hasta que al fin salen las cucarachas…- dijo una voz burlona y suave por arriba de sus cabezas…
-Zarbon…- casi rugió el Rey, mirando con odio al sujeto de piel celeste claro y cabellos verdes que flotaba varios metros por encima de ellos y que sin duda era el causante de provocar aquel temblor que había movido la mansión hasta sus cimientos, obligándolos a salir…
-Hola Rey… como anda todo por Vegita???- preguntó Zarbon con una enorme sonrisa, haciendo que el Rey sintiera de deseos de tirarse sobre él para destrozarlo…
-Bien vamos… Milord lo espera por allá…- indicó el afeminado soldado al ver que el Rey no respondía a sus sarcasmos y señalando hacia un punto en el cielo mientras comenzaba a alejarse hacia allí…
-Estamos demasiado cerca de la civilización…- dijo Goku mirando a su alrededor, mas preocupado por eso que por lo que les fuera a pasar ahora a todos ellos…
-Tienes razón… apenas Zarbon se haya alejado volaremos todos hacia las montañas… Se que nos seguirán…- susurró Vegeta…
El Rey no tuvo mas opción que estar de acuerdo, así que los tres empezaron a emprender el vuelo…
-Espérenme!!! Yo también quiero ir!!!- exclamó Bulma desde el suelo…
El Rey flotó un poco hacia ella y la sujetó de la cintura…
-Bien… es peligroso que te quedes aquí sola…- murmuró el Rey tomandola con fuerza mientras Bulma se ponía toda roja…
Zarbon estaba ya bien lejos de allí, cuando Goku, Vegeta y el Rey salieron disparados hacia las montañas… Pero de refilón pudieron apreciar, en toda su magnificencia, la nave de Freezer…
El Rey de inmediato se dirigió hacia un precipicio donde había una cueva en medio de la montaña más alta, como si pensara que aquel punto podría servirles de algo contra el extraterrestre…
Pero no, no era por eso que lo había elegido…
El Rey dejó a Bulma en el interior de la cueva, todo estaba a oscuras allí dentro y desde el techo goteaba agua del deshielo, pero era una ubicación mas segura que cualquier otra…
-No te muevas de aquí hasta que todo haya terminado… ¿De acuerdo?- le ordenó el Rey, y la peliverde asintió con fuerza…
Ni Goku ni Vegeta entendían por que el Rey se molestaba tanto en protegerla, cuando después de todo la humana ya no le servía para nada…
Allí mismo tenía a Freezer…
Había llegado el momento que había deseado durante años…
Ya no necesitaría ir a buscarlo…
Ahora todo se decidiría allí… Allí y ahora… De una vez y para siempre…
Fuera de la cueva se escuchó el viento y los truenos provocados por la nave de Freezer, que habían oscurecido por completo ese día soleado, casi como si de un eclipse se tratara…
Y entonces… los tres guerreros saiyajin salieron al exterior de ese precipicio… Había llegado el momento de la verdad…
El ejército de Freezer era enorme…
Alrededor de su gigantesca nave en forma de platillo volador se agrupaban decenas de soldados…
Cientos de ellos… todos dispuestos a atacar a la orden de su soberano, y en la lejanía, el inmundo reptil les sonría a los últimos guerreros de la raza que él había eliminado 16 años atrás…
-Es la hora- susurró Vegeta, tomándose de la mano de Goku con fuerza…
El Rey por su parte solo podía observar al monstruo que le había arrebatado su reino, su planeta, su raza… pero por sobre todo a la persona que había amado hacia tanto tiempo…
-Al fin… al fin es momento de la venganza- susurró el Rey apretando un puño y mirando con rencor el objeto de su ira…
-Vaya vaya… ya me esperaba que fueras tu quien había sobrevivido el día en que explotó Vegita…- dijo el tirano desde su asiento levitante…
Estaba muy lejos, pero su voz se sentía sorprendentemente fuerte y cercana…
-Vaya planeta asqueroso e insignificante escogiste para que fuera tu guarida… Bien creo… no te molestara que lo haga arder un poco…- dijo Freezer aun sonriendo…
Uno de sus brazos se elevó hacia el cielo, acumulando algo de energía en su mano que luego fue lanzada al pie de la montaña donde se encontraban los saiyajins…
De inmediato el fuego pareció extenderse por todo el enorme bosque que cubría esa parte de la tierra, alzándose en llamas infernales que rugían bajo el cielo oscurecido… el fuego brillaba en los ojos de Freezer… y en los de todos sus soldados…
Goku miro hacia abajo… Hacia ese lugar donde hacia tan poco tiempo se había amado con Vegeta… Ahora todo ardía en llamas… Ese lugar perfecto, destruido en tan solo unos segundos por la mano de ese bastardo…
-Un espectáculo digno de verse Milord…- alabó Zarbon, mientras Dodoria detrás de ellos se reía grotescamente…
-Vaya, ya lo creo soldado Zarbon… muchas gracias… y tu que me dices Vegeta??- preguntó el emperador del universo al Rey que observaba todo con los ojos llenos de odio puro…
-Digo… Digo… que te mataré!!!!!!- exclamó lleno de ira asesina…
-Cuando quieran empezar… aquí los estaré esperando- dijo Freezer sin dejar de sonreír, con esa voz suya tan particular…
-Vamos!!- exclamó Goku, lanzándose hacia la criatura repleto de ira por la vision de su lugar especial en llamas, pero la misma mano que antes lo había sujetado ahora lo hizo retroceder…
-Tu no puedes- murmuró Vegeta –Tienes que cuidar a nuestros hijos…-
-Si yo no ayudo todos moriremos- le recordó Goku…
Vegeta observó a su amado, através de las cenizas que llovían del cielo oscurecido por culpa de los incendios que había causado Freezer por todo el bosque que rodeaba las montañas… El viento se había tornado gélido y fuerte, alzando desde el suelo aquellas cenizas, llevándolas hacia ellos, como una lluvia gris e infinita…
La ceniza se acumulaba sobre el cabello negro de Goku, y sobre sus cejas y pestañas, haciéndolo parecer un anciano…
Sus ojos negros estaban llenos de ira, tristeza y miedo, pero aun así sus dedos se aferraban a la mano de Vegeta…
-Mejor sería que te fueras de aquí- susurró el príncipe con la voz enronquecida y sintiendo como sus ojos comenzaban a humedecerse…
-Jamás me iré de tu lado Vegeta… aunque ahora debamos afrontar la muerte juntos…- respondió Goku con gran decisión…Y al ver su mirada, Vegeta comprendió que no existiría nada en todo el universo, que hiciera a Goku desistir de su decisión de luchar junto a el… codo con codo…
El principe suspiró con fuerza, antes de clavar sus ojos negros, penetrantes y sinceros en los de Goku…
-Kakarotto… jamás quise nada de lo que tuve… excepto a ti… así que por favor… ten mucho cuidado…- susurró Vegeta colocando una mano sobre el rostro de su amado…
Goku asintió y ambos hombres se volvieron para mirar a aquel que había venido para exterminarlos…
-Ya están listos?? Vamos de una vez, quiero terminar el trabajo que comencé hace mas de 16 años… quien hubiera dicho que ustedes los saiyajines tenían el don de esconderse como ratas.- se burló Freezer con desprecio, observando a los guerreros que a su vez también le miraban desde la entrada de la cueva, enclavada en aquel precipicio…
-Vaya Vaya… Mi querido Rey Vegeta… cuanto tiempo ha pasado… espero que esta vez intentes defender a tu hijo y a este inmundo planeta en lugar de escaparte como hiciste en Vegita… dejando al pobre Bardock solo para que muriera en mis manos…- prosiguió el inmundo reptil…
Para el Rey eso fue lo peor que pudo haberle dicho… Bardock…. Bardock… como se atrevía siquiera a mencionarlo???
-Jamás… óyeme bien… jamás vuelvas a decir su nombre.- dijo el Rey con voz fría y tajante, mientras sus ojos negros ya brillaban llenos de rabia incontenible…
-Bahh no me digas que sentías algo por esa basura de clase baja?... ja-ja-ja!!- dijo Freezer sin dejar de reírse, su risa era espantosa, y pareció resonar por toda la faz del planeta…
El Rey miró a su hijo de reojo, quien solo desviaba la vista hacia otro lado, y el astuto Freezer lo comprendió todo….
-Ohhhhh!! Creo que ya empiezo a entender misterios que me tuvieron varias noches en vela! … No me digas… no me digas que Bardock es el padre del mocoso ese!!? Con razón nadie se explicaba como era posible que tu aparecieras con ese niño salido de la nada!!- se regodeó Freezer, por lo visto el lagarto inmundo encontraba muy divertida la historia de la vida de los guerreros saiyajines…
-Que se siente ser el hijo de una basura de clase baja joven Vegeta??- prosiguió Freezer mirando al muchacho malintencionadamente… Y el Rey casi esperaba que su hijo desmintiera que era hijo de Bardock, pero no…
Vegeta dio un paso adelante entonces, sin miedo…
.-Estoy muy orgulloso del lugar del cual provengo!!! Esa persona… Bardock…Él dio la vida para protegerme… a mí y a mi padre… pero tú eso jamás lo comprenderás por que no sabes lo que es el amor y la lealtad…Por ti no daría la vida nadie…-
El extraterrestre le frunció el ceño al joven, pero enseguida una sonrisa despreocupada apareció en su repulsiva cara…
-Bahh no son más que palabras bonitas… pero al final… ustedes serán los derrotados…y yo… el vencedor-…
Los tres saiyajines miraron por un momento mas hacia el cielo, donde ese monstruo los esperaba, elevado sobre ese precipicio que parecía hallarse en los mismísimos confines de la tierra… Había llegado el momento de vengar a su raza… Los tres sentían esa verdad corriendo por sus venas, quemando su ser… Y la sonrisa de Freezer los invitaba a atacar, los invitaba a intentar cobrarse toda la sangre que había sido derramada…
-Basta de charlas… es hora…- murmuró el Rey en un susurro rápido y decidido, y sin previo aviso se lanzó sobre Freezer, con los ojos llenos de odio puestos en él…
-¡¡Papá no!!- gritó Vegeta al ver el repentino e impulsivo ataque… De inmediato el príncipe fue detrás de su padre sin dudarlo, y Goku fue detrás de Vegeta…