¿Yo amaba a Logan?...no…no lo sabía, pero acabamos de hacer…el amor, acaso solo ¿me deje llevar?, pero yo también participe esta vez… ¿Qué debo hacer?, ¿Qué debo responderle?
-está bien Kalil, no te preocupes- se levantó de la cama y fue a prender la luz de la habitación, yo me senté envolviendo mis piernas con mis brazos, quedando mis rodillas cerca de mi pecho
-¿es tu cuarto?- creo que él no recordaba que estaba desnudo, ya que se movía en su habitación de un lado a otro sacando ropa pero ¿qué más podría verle? Toque todo lo de él ¡todo! Y el también…
-sí, desde aquí puedo ver tu casa- ya volvió el Logan extraño, se acercó a mí y me ofreció un pantalón blanco y una playera negra – te quedaran grandes, pero así dormirás cómodo- es decir que me estaba… ¿invitando a dormir a su casa?, la verdad es que ya estaba cansado, agarre la ropa
-gracias- ninguno se movió, el solo me veía y yo veía mis pies
-¿quieres cambiarte en el baño?- señalo con su pulgar una puerta, no quería moverme aun
-no…tu ve al baño…yo me cambio aquí- lo mire, el levanto un poco su ceja
-de acuerdo- ahora no me dijo nada raro, tomo otra muda de ropa y se adentró a lo que sería el baño, me levante y me puse el pantalón y la playera, me quedaban un poco grandes, pero el pantalón tenia elástico, la ropa tenía su olor impregnado, me volví a acostar en la cama, y me tape con las cobijas, eran suaves y al igual que la ropa, tenían su olor, vi mejor la habitación, las paredes eran blancas, no había cuadros, solo había en una esquina un gran librero que estaba repleto de libros, algunos gruesos y otros delgados, tenía lámparas en el techo, como las de su sala, y había otras dos pero estas sobre los pequeños buros que había al lado de cada cama, las lámparas eran cuadradas, parecían de cristal, en su perímetro tenia madera, eran elegantes, el piso era de madera y solo había un pequeño tapete rectangular con rayas de colores anaranjado, café y blanco, lo único que se me hacía raro es que no tuviera cuadros ¿no le gustaran?, si no le gustaran no había tantos en el recibidor… salió Logan del baño, llevaba un pantalón blanco y una camiseta de tirantes café, dejando expuestos sus músculos… otra vez esos pensamientos, Logan no me miro, fue a apagar las luces y vi su silueta en la oscuridad, se metió a la cama e inmediatamente me abrazo atrayéndome hacia él, quedo mi cabeza sobre uno de sus brazos y del otro lado de la cama entrelazo mis pies con los suyos, sentí su anillo, debía preguntarle ¿por qué lo tenía ahí?
-Logan…- levante un poco mi cabeza, y lo vi, era realmente perfecto y más con ese reflejo de la luz de la luna que entraba por su ventana
-¿sí?- me volteo a ver
-¿Por qué tienes un anillo en tu pie?- el no aparto la mirada de mí, pero yo la desvié a él gran librero que había
-porque quiero- levanto un poco sus hombros
-oh… ya veo…- ¿acaso debo formular bien mis preguntas?, o ¿él debe responderlas con alguna frase más larga?
-fue un regalo de mi madre cuando yo tenía 3 años, antes me cabía en los dedos de mi mano, pero como ya no…me lo puse en el dedo del pie- no me esperaba esa respuesta, su madre había muerto hace 10 años, tal vez ese anillo le recordaba a ella, me pegue más a su cuerpo, ya empezaba a tener sueño y ya se me hacía difícil mantener mis parpados abiertos
-descansa Kalil- me dio un beso en la frente y me abrazo más fuerte
-descansa Logan- dure un poco más despierto, y caí al mundo de los sueños.
Desperté con unos rayos de sol en mi cara, aun no abrí los ojos, recordé que no estaba en mi cama…y que ayer había hecho el amor con Logan, no sentí a Logan a mi lado, abrí los ojos y estaba solo, me quede un rato acostado y muchas preguntas me invadieron ¿yo amaba a Logan?, ¿él lo decía enserio?, no sabíamos nada del otro, pero ya habíamos compartido un momento tan íntimo…
-ya despertaste- entro Logan a la habitación, nos miramos, él todavía tenía la pijama- ¿quieres darte un baño?- dejo mi uniforme doblado al pie de la cama, yo me senté
-si- tome el uniforme y me levante, sentía rara nuestras conversaciones, se dirigió a mí y me dio un beso en la frente, lo mire y me sonrió un poco- te espero en la cocina- sin más, salió de la habitación, y me dirigí al baño el cual era impresionante, con todas sus palabras, era enorme, todo era de mármol, había un gran tocador con 2 lavamanos y 3 espejos cuadrados, tenía las mismas lámpara que su cuarto, del lado derecho había un jacuzzi, que en la parte de atrás de él tenía una gran ventana que daba vista a el jardín trasero, y de decoración tenía 3 enredaderas colgando, al lado de la puerta, en donde yo me encontraba aun, había sobre una pequeña plataforma que igual era de mármol, una cabina de vidrio, con una regadera dentro, era espectacular el baño, cerré la puerta, le puse seguro, por cualquier cosa, y me adentre a la cabina, deje que el agua callera en mi cuerpo, se relajaron mis músculos, después salí del baño envuelto en una toalla y me puse el uniforme, que ahora olía a limpio, ¿lo habrá puesto a lavar Logan?, me puse los Convers y salí de la habitación, me perdí un poco entre los pasillos, pero di con unas escaleras, las baje y me encontré con la entrada, podía irme, pero quería ver un poco más a Logan, camine por el recibidor, después por la sala, el comedor hasta que llegue a la cocina, ahí estaba Logan sentado en la barra comiendo cereal con leche, si es lo máximo siendo los dos unos inútiles en la cocina,
-siéntate a mi lado Kalil- se levantó y saco otro plato hondo el cual lleno con leche y cereal, me senté y después el, empecé a comer, aunque no tenía tanto apetito,
-¿estás bien?- dejo de comer y se quedó viéndome, yo baje la vista y la centre en el cereal que nadaba en la leche
-crees… ¿crees que está bien?- baje un poco más la vista
-no le veo problema al cereal, o ¿quieres otra cosa?- de verdad era un idiota
-no me refiero al cereal… es…sobre…lo que hicimos… ¿crees que este bien?, digo, ni nos conocemos y ya lo hicimos…- me hundí un poco en la silla, el recargo su codo en la barra, puso su mejilla sobre su mano y me miro
-si nos conocemos, o ¿acaso hicimos el amor por teléfono?- que fácil le salían las palabras, el no apartaba la vista de mí, pero la sentía un tanto pesada, no quería verlo para nada
-no me refiero a eso…- no me dejo continuar
-¿entonces a que te refieres?- dijo con una voz muy seria, me hundí un poco más en la silla
-me refiero a que… no sabemos nada del otro-
-¿y eso que? , para eso existe el tiempo- eso era
-si…pero nos saltamos la parte de saber más del otro…-
-Kalil- giro mi silla, levanto mi barbilla me encontré con un Logan muy serio, que me miraba fijamente- eres el único que sabe lo de mi madre, a excepción de mi padre y Lorena, eres el único, eso es suficiente para conocerme-
-pero no es suficiente… y tú no sabes cosas sobre mí- baje la vista
-mírame Kalil- fue una orden, me dio un poco de miedo, pero levante la vista un poco- te gustan los videojuegos y desvelarte, aparte de mirarme desde tu balcón-
-eso es muy poco- volví a bajar mi vista y deje caer mis hombros- y ya nos acotamos
-hay gente que en la primera noche de conocerse se acuestan, y al siguiente día ni se recuerdan además llevamos de conocernos 7 días, para mi es suficiente-
-solo nos hablamos 2 días, y desde el martes al viernes en la tarde no platicamos,-
-fui a buscarte a tu casa- levante la vista, ¿a buscarme? –el martes en la tarde fui a buscarte, tu madre me dijo que habías salido a conocer la ciudad junto a un compañero, ese martes quería decirte que iba a salir toda la semana para atender unos asuntos en Seattle, pero que regresaría a terminar lo que el lunes en la noche comenzamos- ¿Qué, que?, ¿puede llegar a ser más raro?- y claro que me hubiera gustado pasar esta semana contigo y conociéndote, tenía la oportunidad de dejar para después los asunto de Seattle, viajando toda la noche para avisar en la oficina que tendría que esperar ese asunto 2 semanas por otros asuntos que tenía , pero cuando pase por el Golden Gate, te vi muy acaramelado con lo que yo creo era tu guía de la ciudad- ¿guía?, ¿será que nos vio… a mí y a Bruno?
-Bruno…-susurre su nombre
-así que ese es su nombre, Bruno,- baje la vista,- pues sí, te vi con ese tal Bruno, así que pensé que tendrías quien te cuide esta semana, y me fui-
-pero no es… -no me dejo continuar
-me puse celoso al verte ahí con el- ¿celoso?, ¿Por qué?, no éramos, digo, no somos nada para que me ande celando
-pero tú y yo no somos nada- me levante de la silla, y me aleje de él negando con la cabeza y la vista en el piso
-te amo- levante la vista- ya te lo había dicho
-¡pero apenas nos conocemos!- levante un poco la voz, él se paró de su asiento y camino hacia mí, yo retrocedí- ¡no te acerques!- puse mi mano frente a mí en señal de alto, él se detuvo – ¡no creo en el amor a primera vista!- retrocedí un poco más-
-ni yo, pero me gustaste cuando platicamos en la cena, y me gustaste aún más cuando nos besamos en mi sala ese lunes en la tarde, y me enamoraste cuando anoche hicimos el amor- ¡no podía creerlo!, eso es una broma de quinta, ¿en qué mundo vive?, el ambiente se puso tenso, no me di cuenta cuando avanzo hasta mí y me tomo de las muñecas
-¡suéltame!- forcejee un poco, pero era inútil
-Kalil, tranquilízate- me apretó aún más las muñecas, seguí forcejeando
-¡te he dicho que me sueltes!- di un jalón para abajo y logre soltarme, pero sus manos me acorralaron contra la pared
-tranquilo Kalil, platiquemos más calmadamente ¿sí?- trato de agarrar mis manos, pero las escondí atrás de mi
-debo irme a casa- debía salir de ahí rápido, tenía mi vista en el piso, ninguno se movió, el seguía frente a mí con sus manos a cada lado de mi cabeza, entonces las bajo lentamente, suspiro pesadamente, acerco su mano al bolsillo y me extendió mi llave, la tome sin más, salí de la cocina, Logan no dijo ni hizo nada, debía apurarme, pase por el comedor casi corriendo, en la sala vi mi mochila, la tome rápidamente y corrí hacia la salida de esa casa, cruce la calle y llegue a la puerta principal de mi casa, no podía meter bien la llave al picaporte, estaban temblando mis manos, más bien todo mi cuerpo, quería entrar a mi casa ¡ya!, hasta que al fin lo logre, pase y cerré la puerta tras de mí, puse el seguro y corrí a cerrar todas las cortinas, no quería ver nada ni a nadie, cuando ya estaba seguro todo, me avente al sofá y comencé a llorar, pero ¿Por qué?, no me hizo nada, pero me sentía tan mal, estaba confundido ¿acaso no me entendió? ¿Por qué lloraba por alguien que ni conocía? Y ya lo habíamos hecho, no quise pensar en más y me quede dormido en el sofá.
Desperté por que empezaba a tener hambre, saque mi celular de la mochila, eran las 2 de la tarde, me levante y fui a la cocina, abrí el refrigerador, había un poco de lasaña y una nota, tome la nota y la desdoble, era de mi madre
*sé que es tu favorito, te quiero hijo, cuídate*
Saque la lasaña y la metí al horno de microondas para calentarla, y empecé a pensar en Logan, ¿desde cuándo tenia estos problemas?, antes era más fácil, sin preocupaciones y en mi pequeño mundo, alejado de todos y de este tipo de problemas, odiaba los problemas y por eso siempre los evitaba a toda costa, tenía que hacer eso, evitar los problemas, sonó la campanita del horno y saque la lasaña, la empecé a comer junto con una vaso lleno de jugo, quede lleno, subí a mi cuarto, cerré la ventana y las cortina, ni mire la casa de Logan, prendí mi computadora y decidí volver a ser el mismo yo de siempre, y solo interesado en mi mundo de videojuegos, anime, manga y comics, era lo mejor.
Pase el resto de la tarde jugando, vi el reloj eran las 6 de la tarde, me pare y fui a cambiarme el uniforme, me puse mis pantalones de mezclilla azul marino, una playera de manga larga negra con la palabra anime, y una sudadera negra, junto con los mismos Convers azules, al empezar ponerme las muñequeras, vi que tenía unas ligeras marcas rojas, Logan, el muy idiota me había lastimado, bueno…no…. Más bien yo fui por tratar de zafarme, ¡pero él no tenía por qué agarrarme de las muñecas!, está bien, fue culpa de los dos, decidí ir a el puente Golden, y tal vez tiendas de comic y manga, tome mi llave y salí de casa, puse mis manos en los bolsillos de la sudadera, hacia un poco de frio, y empecé a caminar sin mirar la casa de Logan.
Llegue al puente y me quede bastante tiempo ahí, hasta que oscureció, fui todavía a ver algunos negocios y tiendas de anime y manga, compre varios mangas, ya tenía que leer mañana, regrese a casa con mis bolsas de la compra del día, otra vez no mire a casa de Logan y entre a casa.
El domingo no salí para nada, me la dedique a leer mis nuevos mangas, vi películas, y jugué un rato, hasta que llegaron mis padres, pero me hice el dormido en mi habitación, sentí que me arropaban, me daban las buenas noches y un beso de mi madre, me termine quedando dormido.