Capítulo 5: Amor platónico
Ya era un nuevo día y Usopp recién había llegado a mi casa le abrí la puerta, le agradecía mucho que me ayudara a busca al marimo, realmente esperaba que estuviera bien. Las pláticas no fluían, el ambiente era tan raro, esperaba que solo fuera un mal sueño, pero sabía que no lo era. Prepare algo ligero para el almuerzo, lo único bueno era que mis preocupaciones tendían a irse un poco cuando cocinaba ya que me concentraba más en lo que hacía.
-Sanji… Nunca te había visto de esa manera, tu gato es un afortunado en tenerte. Estoy seguro que lo encontraremos – Me intentaba dar ánimos, mas no estaba dando mucho resultado, no hice gran cosa para el almuerzo, así que serví la comida en la mesa ambos nos sentamos de frente.
-Gracias… ¿En verdad me veo tan mal? –sonreí levemente, ya teníamos los carteles que pegaríamos por las calles y estaban de otro lado de la mesa.
-Sí, te digo, nunca te había visto así hasta ahora –
-Gracias Usopp por acompañarme… -No tenía muchas ganas de hacer nada. En cuanto terminamos la comida, salimos rumbo a las calles pegando los carteles y preguntando si es que lo habían visto.
Nos habíamos pasado todo el día pegando y preguntando por Marimo, sin embargo no teníamos rastro alguno de él, reamente deseaba que estuviera bien ya que antes de perderse lo había tratado mal.
-Vamos a casa Sanji, mañana continuaremos la búsqueda. –Su estómago gruño, si solo habíamos comido aquellos hotcakes con miel de maple y un poco de leche de soja… Al marimo le gustaba la leche de soja. Asentí y nos dirigimos a mi casa, le prepararía una rica cena, después de todo me ayudaba como nunca.
-Usopp eres una gran persona. De verdad te lo agradezco… ¿Un poco de te? –
-Sí, por favor Sanji- Comenzamos a tomar él te, mientras me hacia la plática. Me distraje un poco de la situación actual hasta que surgió algo que no me esperaba.
-Entonces cuenta ¿Qué tal te fue con Nami? ¿Cuándo la boda? –
-Usopp… Nami y yo terminamos, odia a los gatos y… -Comencé a contarle todo lo que había pasado, él estaba algo sorprendido, yo también creía que Nami era otra clase de persona, después de todo nunca me había pasado por la mente terminar con nuestra relación por un gato.
-Pero sabes, ahora que lo pienso, no me afecta, lo único que realmente me afecto ese día fue la pérdida del Marimo con patas. Sabes si hubiera sabido que eso pasaría habría terminado con ella desde antes, Marimo no tenía la culpa. Lo quiero más a el que a ella. –
-Vaya tú dejando a esa mujer por un gato… Sí que no te conocía bien. –Daba una mordida a su pan con una sonrisa. Si, realmente yo tampoco me lo hubiera esperado si alguien me lo hubiera contado antes.
–Pero cuenta Sanji, si no estabas enamorado de ella… -Sabia a donde quería llegar así que conteste a la pregunta que pensaba mi haría.
-Solo creí estar enamorado por ser una bella dama… Pero, hay alguien… Te contare, aun que siento que es algo estúpido.-
-¡¿Ehh?! Sanji, el amor no es estúpido. –
-No lo será pero el mío lo es… Es mi amor platónico, me había dado cuenta de que estaba enamorado unos días antes de la pérdida del Marimo, pero, era un amor imposible. -
-Vaya Sanji… ¿y quién es la afortunada?- Al escuchar sus palabras me sonroje un poco, era algo vergonzoso, lo dije en voz baja, una voz apenas audible.
-Es el… -
-¿Qué? –
-¡Es hombre! –Desvié mi mirada evitando la suya, si me había enamorado de un hombre, no tenía idea si eso era lo peor o el otro hecho. –Pero, es mi amor platónico porque jamás seré capaz de sentirlo...-
-Yo creí que solo pensabas así de las mujeres entonces ¿tú eres el de abajo?-
-¿Qué preguntas haces Usopp? –Mi cara se tornó roja ¿Qué preguntas hacia? Estuve a punto de arrojarle algo pero su mano me detuvo, quería que siguiera contándole –Idiota. Lo digo en el buen sentido, sentir un abrazo… -Aun estaba rojo y escuchaba como Usopp contenía aquella risa, así que seguí hablando -Bueno su nombre es Zoro y tiene un extraño cabello verde lo cual me hace decirle Marimo al igual que mi gato. No sé si sea más raro que me enamorara de un hombre o el hecho de que Zoro solo es parte de un sueño. Si jamás lo he visto en persona solo en mis sueños. ¿Es algo estúpido no crees? Enamorarte de alguien de un sueño. –
-Y aparte de homo, resulta ser un sueño… Mira Sanji, deberías olvidarlo si es un sueño jamás lo veras-
-¡No soy homo idiota! Solo realmente amo a Zoro, pero aun en mis sueños no soy capaz de decírselo –Me recosté en la mesa, haciendo a un lado mi plato y taza con te. –Lo que siento es estúpido, realmente estúpido –
Sin el marimo y Zoro realmente me sentía más solo que antes.
Zoro no sería capaz de enamorarse de mí, yo jamás le diría nada. Jamás podría sentirlo, nunca podría verlo fuera de mis sueños y al parecer desde ahora ya no le vería nunca más ni siquiera en mis sueños.
To Be Continued…