(Jongin)
-Jongin, ¿sucede algo? - preguntó Taemin al verme con semblante triste. Estábamos en la cafetería almorzando, pero yo no había probado bocado alguno. No tenía ánimos de nada.
-No sucede nada - respondí.
-Es que desde ayer estas con la misma cara. Pareces ido.
-Creo que es porque me despidieron del trabajo.
-¿Te preocupa el dinero? Si quieres yo podría prestarte hasta que consigas uno nuevo. Ya luego me lo pagas.
-No Taemin, gracias... ya le pedí a mis padres que me manden.
-¿Es enserio? ¿Y tu orgullo? - Minho preguntó sorprendido.
-No lo sé, creo que desapareció.
Habían pasado ya dos días desde aquella noche. Minseok se fue a su casa en un taxi y yo me dirigí a la mía, no negaré que estaba con la rabia encima y de impotencia me puse a llorar en todo el camino. Jamás me había pasado algo similar ¿Por qué tendría que llorar por Luhan? Al fin y al cabo, era su decisión seguir con aquel tipo. Era su problema si le volvían a golpear o no. Pero yo no lo tomaba así de fácil, a mí por algún motivo me afectaba todo esto.
En las clases solo pensaba en qué podría estar haciendo o si le había vuelto a golpear otra vez. Estaba demasiado distraído, tanto que ya me habían llamado la atención varias veces. Minho y Taemin lo habían notado, no estaba bien.
-Hola - saludó una voz que ya reconocía, pero esta vez no causo ningún efecto en mí.
-Hola Victoria - saludé sin ánimos.
-¿Cómo estás? - me preguntó de una forma muy sonriente, parecía estar feliz por verme.
-Bien...
-¿Qué te sucedió? -señaló mi labio partido.
-Tuvo una pelea - se metió Taemin y lo fulminé con la mirada.
-... - llevó su mano hacía mi barbilla y me alzó un poco - Esta algo inflamado, podría recetarte algo...
-¿Estudias enfermería? - pregunté.
-No. Estuviste casi cerca, estudio medicina.
-En ese caso aceptaré que me recetes algo...
Ella sonrió por mi respuesta y sacó una hoja de su cuaderno que llevaba en las manos. Escribió sobre la mesa y luego me la entregó. Luego se dirigió a Taemin:
-Mañana tenemos otra presentación y te necesito - pidió.
-¿Mañana? No. Tengo otro planes - dijo mirando a Minho.
-¿Me abandonarás? Enserio te necesito. La coreografía no es tan difícil...
-Ya sé - interrumpió, tenía una idea en mente y luego me miró como si yo fuera un trofeo - Jongin puede mañana.
Victoria me miró de forma tímida y agregó:
-¿Podrás Jongin?
Este es el momento que había estado esperando por mucho tiempo. Poder tener una presentación y que mi pareja fuera Victoria. Ahora debería estar como un loco aceptando su ofertar y sentirme nervioso porque ella me lo propuso, pero no. Este no era el caso, no tenía ganas ni de bailar.
-¡Vamos Jongin tu puedes! - me animó Minho.
-Será fácil Jongin. Yo te guiaré en todo - se metió Victoria. Tenía a tres personas esperando que salga un "si" de mi boca. Ya que más daba.
-De acuerdo... - acepté no muy convencido.
-¡Gracias! - se alegró Victoria y luego me abrazó de la felicidad.
En la misma hoja que escribió "mi receta", también escribió en donde nos encontraríamos al día siguiente. Luego de eso se despidió y se sentó junto con sus amigas en otro mesa.
-¡Ay el amor! - suspiró Taemin en son de burla y yo bufé.
-No estas con ánimos ¿verdad? - preguntó Minho.
-No.
-Pero, ¿Qué tienes en la cabeza Jongin? Siempre has esperado este momento para poder conocerla mejor. Ahora sigues cabizbajo y no tienes ni una pizca de alegría. No te entiendo...
-No tengo ánimos.
-Te contaré algo - inquirió Taemin - ese día que la acompañé a tener su presentación, casualmente escuché su conversación con una amiga. Y sabes qué.
-¿Qué?
-Tú le gustas - me señaló.
-Imposible, no nos conocemos.
-Te digo la verdad. A Victoria le gustas, y creí que tu también le gustabas...
-Si me... gustaba. Ahora ya no. No negaré que es linda, pero ya no me gusta.
-¿Es por la chica que invitaste a salir y te rechazó? Te gusta mucho ¿cierto? - preguntó Minho.
-No quiero hablar del tema. Lo siento - tomé mis cosas y salí de la cafetería.
Esta vez no me dirigí a ninguna clase. ¿Para qué? Si mi mente no podía estar concentrada. Estaba de más ir.
Al llegar a casa fui directo hacia mi cama. Mañana era fin de semana y me tomaría el tiempo para buscar algún nuevo trabajo. Además, estaba nuevamente solo. Chanyeol había regresado a trabajar el día de ayer, y lo peor es que no tenía un teléfono como para llamarlo y preguntarle por Luhan.
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Al despertar era muy temprano. Eran las cinco de la mañana y el sueño no regresó. Me levanté y me fui a la computadora. Terminé de hacer algunos trabajos encargados de la universidad. Luego me duché y almorcé ramen.
Al terminar salí de casa y fui a la dirección donde tenía que encontrarme con Victoria. Era el Instituto Seúl de Artes, había demasiadas personas, entre bailarines y animadoras con pequeñas faldas... ¿Qué tipo de espectáculo iba a ver? Victoria no me había mencionado que habría tanta gente.
Seguí caminando y pregunté por la sala de danza, una señorita muy amablemente me indicó como llegar al lugar. Cuando entré encontré a Victoria sentada en una esquina de la sala. No solo estaba ella, habían más bailarines ocupando el lugar y practicando sus coreografías. Me acerqué y su rostro se iluminó cuando me vio.
-Lo siento... - me disculpé - no sabía como encontrar la sala de danza.
-No te preocupes - se incorporó - ya me estaba preocupando por ti. Creí que no vendrías.
-¿Cómo crees eso? Soy un hombre de palabra.
Victoria sonrió y por un momento recordé la razón por la cual ella me gustaba. Su sonrisa perfecta, ojos grandes, cabello largo y.... sacudí la cabeza para quitarme esos pensamientos. ¿Ahora resulta que nuevamente me gustaba Victoria?
-Empecemos con la coreografía - inquirió. Ella tenía una radio a batería. Puso la canción, la escuché detenidamente y mi cuerpo empezó amoverse por si solo.
-Creo que puedo hacerlo...
-Eso pensé. Podemos improvisar ahora.
-¿A qué hora es nuestra presentación?
-A las ocho de la noche. Por cierto, no te lo comenté pero nosotros representamos a nuestra universidad. Por eso muchas personas han venido hoy, la semana pasada Taemin y yo pasamos a la siguiente etapa. Espero que esta vez suceda lo mismo.
-Prometo que daré todo de mí.
-Confío en ti - sonrió - Empecemos de una vez. No quiero perder un minuto más...
Las horas pasaban mientras seguíamos practicando. Victoria bailaba demasiado bien para ser una chica... pero era perfeccionista, quería que los pasos nos salgan a la perfección. Por lo menos hasta el momento no teníamos problemas con eso. Yo ponía de mi parte, pero mis ánimos aún seguían por los suelos, lo hacia bien pero no parecía sentir la música.
Hubo una parte en la que consistía apegar nuestros cuerpos. Yo tenía que tomar de su cintura y llevarla a mi ritmo. Solo era un minuto, pero aún así me sentí nervioso mientras lo practicábamos. No pude evitar sonrojarme y ella también lo hizo.
De pronto mi teléfono se escuchó. Me solté de Victoria y fui hacía mi mochila a contestar. Mis ojos se abrieron como platos y mi corazón empezó a saltar de felicidad, era Luhan.
-Luhan... - respondí apresurado.
-Hola Jongin, ¿Por qué no has venido hoy?
-Xiang me despidió.
-¿Cuándo?
-El día del incidente en la noche - mordí mi labio esperando que no solo me haya llamado para eso.
-¡Oh! Lo siento por lo de esa noche. Sé que soy un completo idiota...
-No te llames así. No eres idiota.
-¿Dónde estás? Escucho mucha bulla...
-Estoy practicando baile, tengo una presentación dentro de dos horas.
-¿En dónde? - preguntó de forma rápida.
-Estoy en el Instituto Seúl de Artes
-Eso queda a una hora y media ¿no?
-Algo.
-Iré para allá.
-¿Qué? ¿Vendrás? ¿Aquí?
-Si. Te veré allá, mantente atento al teléfono. Te llamaré si me pierdo. Te veo al rato - y colgó.
No dejó que hablara más ¿Por qué habría tomado la decisión de verme? ¿Querría hablar conmigo? Bueno, eso era obvio. ¿Pero de qué? De todas maneras esta era mi "ocasión" para poder hablar con él, preguntarle por qué me dejó para irse con Xiang, aunque no tenia derecho de hacerlo. Nosotros no éramos nada… ¡Ahhh!
De pronto me sentí nervioso pero a la vez feliz. Lo vería, lo vería, lo vería.
Corrí hacia donde Victoria, ella estaba tomando agua y descansaba por mientras. Presioné el botón de "play" en la radio para empezar una vez más la coreografía. Tenía que hacerlo bien, Luhan me vería y no quería hacer un papelón.
-Te veo animado. ¿La llamada tuvo algo que ver con tu cambio de humor?
-Algo - respondí sonriente.
-¡Perfecto! A buena hora que te llamaron.
Transcurrió aproximadamente una hora, tuve que ir a ponerme mi vestuario con el que participaría. Poco a poco las parejas se fueron presentando. Yo esperaba que sea mi turno, Victoria estaba algo nerviosa y traté de tranquilizarla. En eso, nuestro turno llegó. Salimos al escenario, por pura casualidad me puse a buscar entre la multitud si por ahí estaba Luhan. Pero eran demasiadas personas y casi no las podía distinguir.
Empezó la música y nosotros dimos lo mejor de nosotros. La coreografía nos había salido como tanto lo habíamos practicado. Perfecta.
-¡Jongin nos a salido a la perfección! - gritó Victoria de la emoción y me abrazó.
-Si... - me limité a responder.
Regresamos a la sala de danza para recoger nuestras cosas. Tomé mi mochila y saqué mi teléfono solo por si a caso, encontré nueve llamadas perdidas por parte de Luhan. La última llamada había sido hace quince minutos. ¿Habría llegado o se habría perdido? Marqué su número y esperé a que respondiera.
-¿Jongin dónde estás? - fue lo primero que dijo al responder.
-¿Dónde estas tú? ¿Llegaste al Instituto?
-Si. Estoy algo desubicado. Creo que estoy por la zona de teatro.
-No sé donde queda eso. Pero quédate ahí. Iré por ti.
-No. Mejor regresaré al estacionamiento.
-¡No! - negué de forma rápida - no te vallas...
-No pensaba irme. Te esperaré en el estacionamiento. Busca mi carro, ya sabes cuál es.
-De acuerdo - asentí - nos vemos en unos minutos. Caminé hacia la salida pero Victoria me llamó. Ya hasta me había olvidado de ella.
-Jongin ¿Dónde vas?
-Me tengo que ir...
-Pensé que esperarías los resultados...
-Hmmm - me quedé pensativo. Seria cosa de ir primero con Luhan, decirle que me espere solo un momento y luego regresaría con Victoria - ¿Demoraran mucho en decir los resultados? - pregunté.
-Solo una media hora más - era tiempo suficiente.
-Ok. Haremos esto. Un amigo me esta esperando en el estacionamiento, iré a verle un rato, le diré que me espere y luego regreso para los resultados ¿Si?
-... - su expresión cambio a una de tristeza y desvió la mirada - Claro no hay problema, yo espero... - murmuró.
-Gracias.
Fui corriendo hacia en estacionamiento y al llegar busqué con la mirada el carro de Luhan. Cuando lo encontré corrí hasta allá, él me había visto llegar y salió mientras me acercaba.
-Hola - saludó de forma tímida. Llevaba sus manos dentro del los bolsillos de su polera. Esta vez ya no llevaba gafas y su rostro ya no estaba como aquella noche. El moretón había desaparecido, mejor dicho el color morado había desaparecido porque aun seguía inflamado.
-Hola - saludé casi sin aliento - ¿Cómo has estado?
-Bien... - solo respondió eso. Sus ojos me miraron detenidamente y yo solo lo miraba a él. Luego llevó una mano hacía mi mentón y me giró el rostro - Tu labio esta inflamado, solo un poco. Como son gruesos uno no se da cuenta que tuviste una pelea. Por lo menos lo tuyo no se nota.
-¡Auuu! - me quejé cuando posó un dedo sobre mi labio - duele.
-Lo siento. ¿Tomaste algo para la inflamación? - soltó mi mentón y volvió a guardar su mano en su bolsillo.
-No. No necesito nada, por si solo se desinflamará.
-Pienso que por lo menos deberías ponerte hielo...
-¿Ahora te preocupas por mí?
-Si.
-¿Por qué? - me apresuré en preguntar.
-Porque tu te preocupaste por mí ese día que Xiang me volvió a golpear. Siento que te debo un favor.
-Me hubieras pagado el favor si ese día te hubieras ido conmigo y no con él.
-¿Estás molesto por eso?
-No. Solo estoy algo resentido - dije la verdad.
-Entiendo... Minseok también lo esta.
-¿Has hablado con él?
-Si, hoy estuve con él. Él fue quien me dijo que te buscara - por lo menos tenía a alguien a quien agradecer por este encuentro.
Hubo un silencio incomodo. No sabía de que hablarle o si poder preguntar algo de forma tan libre.
-Gracias... - dijo de pronto mirándome de forma intensa a los ojos.
-¿Por qué?
-Por defenderme aquella noche. Si no fuera por Minseok y por ti probablemente estaría hospitalizado.
-Eso ni lo digas. Tuviste suerte que Minseok te haya llamado estando a mi lado.
-De eso te quería preguntar. No he manejado desde tan lejos solo por darte las gracias. De hecho tengo muchas preguntas que hacerte.
-Adelante... - animé.
(Luhan)
-Adelante... - me animó a preguntar.
-Verás, cuando hablé con Min... - un sonido de música interrumpió la conversación. Jongin tuvo que contestar su teléfono.
-¿Si? - hizo una pausa - Victoria lo siento. Allá voy. No demoro - luego colgó - Luhan...
-Lo siento si te estoy retrasando en algo.
-Es que hoy tuve una presentación y dentro de cinco minutos darán los resultados. Mi compañera de baile me esta esperando.
-No te preocupes. Ve. Ya hablaremos otro día - puse mi mano en la puerta de mi carro, no tenía intensión de quedarme. Si estaba ocupado hablaría con él otro día. Pero Jongin puso su mano en mi hombro e impidió que no siguiera.
-Por favor no te vayas.
-Pero...
-No estoy ocupado. Solo espérame diez minutos o tal vez quince. No más - pidió en forma casi de suplica.
-¿Y tu compañera?
-No te preocupes por ella. Yo me las arreglaré. Por favor, no te vayas.
Solté un suspiro y luego le miré. Sus ojos me decían a gritos que no me vaya. Además ya estaba aquí ¿Qué perdería?
-Ve. Yo te espero.
-¿Lo prometes?
-Lo prometo... - respondí.
-Gracias.
Jongin se fue corriendo y esta vez entre al carro para esperarle. Tenía unas cuantas preguntas que hacerle. Minseok me había contado todo. Jongin aquella noche preguntó por mí. Y hasta insistió para que Min me llamara. La gran pregunta era: ¿Por qué? ¿Por qué tanto interés de su parte? No quería que él se preocupara por mí. Y no tenía por qué.
Los diez minutos pasaron y Jongin no aparecía. Solo esperaría cinco minutos más o si no regresaría a casa. No podía darme el gusto de regresar tarde, Xiang estaba de viaje y me llamaba a cada rato. Ahora se había convertido en una persona más posesiva y controladora. Odiaba que tuviera que ser así, pero me había hecho entender que no quería perderme. Además que habíamos retomado nuestra relación, él había dejado a su amante por mí y yo le había dado una última oportunidad. Estaba muy arrepentido por su engaño y esta vez hasta me quiso llevar de viaje con él. Ahora ya no teníamos guardaespaldas, el día de ayer había despedido a todos y les había pagado por su trabajo. Me había dado algo de pena Chanyeol, él si necesitaba el trabajo. Baekhyun me había contado su situación. Fue al único que conservé para que sea mi chofer solo de lunes a viernes. Los fines de semana seguían siendo libre. Me daba algo de pena Tao también, cuando regresé a casa me había enterado que Xiang lo había botado. Por lo menos ahora Kris estaría nuevamente con él.
"Toc toc toc" - Jongin llamó a mi ventana con pequeños golpecitos. Le hice una señal para que entrara y así lo hizo. Se sentó en el asiento del copiloto con una sonrisa en su rostro. ¿Estaba emocionado?
-Ahora sí... - soltó - pregunta lo que quieras...