(Baekhyun)
Mientras me alistaba, Jongdae me esperaba en la sala. No quería ir solo a la fiesta, así que llamé a mi primo a que me acompañara.
-¡Listo! Hora de irnos - dije sin ánimos mientras bajaba las escaleras.
-Ya era hora. Ya iba a pedir una pizza porque tengo hambre - se quejó Jongdae.
-Allá comeremos. Ahora vamos.
Salimos de casa y Yunho, mi chofer, ya nos estaba esperando.
-¿Llevas tu ropa de fiesta, Yunho? - pregunté.
-Lo estoy llevando por si acaso, joven. Aun no sé si infiltrarme en la fiesta o no.
-Yo te estoy dando permiso. Solo no tomes mucho, porque luego me tienes que traer.
-Nos tiene que traer - resaltó Jongdae subiendo al carro.
-No se preocupe joven, seré precavido.
Le sonreí y él también. No era una mala persona, me llevaba bien con la servidumbre ya que prácticamente me había criado con ellos. Yunho era mi chofer personal, desde que empecé la universidad mi padre lo contrató. Él sabia sobre mi ex-relación con Chanyeol, no le importaba y siempre estaba dándome uno que otro consejo...
Al llegar, la fiesta ya había comenzado, los guardaespaldas seguían en sus lugares. ¿Qué acaso por un día no podían dejar de cuidar a Luhan o la casa? Baje del carro y sin darme cuenta Chanyeol recibía a algunos invitados. Al darse cuenta de mi presencia su sonrisa desapareció, luego abrió los ojos como platos al ver a Jongdae salir del carro y tomar mi mano para meternos a la casa.
-¡Joven espere! - gritó Yunho y yo me giré para verle - Iré a estacionar el carro. Si me necesita búsqueme en la fiesta o tal vez en la piscina.
-Claro Yunho, te buscaremos. Tu solo diviértete - se metió Jongdae - Baekhyun entremos de una vez - y nuevamente tomó de mi mano. Pase por el lado de Chanyeol lo mas sonriente que pude, no quería mostrarle ningún atisbo de sufrimiento de mi parte.
Entre a la casa y encontré a mis amigos de la universidad. Minseok al verme vino a saludarme.
-Baekhyun, tienes que hacer algo con Luhan.
-¿Qué? ¿Por qué? ¿Dónde esta?
-Esta embriagándose con todo el Whisky que pueda.
-Tiene sus motivos. Ayer se enteró que Xiang le engaña.
-¡¿Qué?! No lo puedo creer. Pobre Luhan, de razón esta como esta.
-Si, pero no le digas que te conté.
-Obvio que no - negó con la cabeza y luego miró a la persona a quien tenía a lado.
-Oh, lo siento. Te presento a mi primo Jongdae - le señalé a mi primo - Jongdae, él es Kim Minseok.
-Mucho gusto - saludo Minseok con una adorable sonrisa.
-Hola - mi primo saludo de forma cortante - Vamos con Luhan, Baek - me tomó del brazo con fuerza y me llevó hasta la zona de la piscina.
-¿Qué sucede? - me quejé - ¿Por qué el apuro?
-Creí que habría gente de nuestra clase...
-Y la hay.
-No. Ese amigo tuyo que me acabas de presentar, se nota que no es como nosotros.
-¡No seas ridículo! - grité - Minseok será un chico de baja economía, pero es muy inteligente. Yo lo admiro mucho porque trabaja y estudia a la vez. Aparte... ¿Cuál es el problema? Yunho es mi chofer y se va a divertir en esta fiesta.
-Pero el sabe cual es su lugar. Yunho no se mezcla con nosotros, mantiene su distancia con la servidumbre...
-Escúchame Jongdae, pero escúchame bien - advertí - Si quieres no le hables a Minseok, pero hay de ti que lo trates mal. Te las veras conmigo ¡¿Entendiste?!
-Ok. Ya entendí.
-Ahora, a divertirnos... - mandé.
Luego de darle su gritada a Jongdae, le presente a mis otros amigos y lo deje con ellos. Fui en busca de Luhan y tomé algunos tragos con él, luego me fui a bailar con Hyorin, mi amiga de universidad.
Poco a poco el calor se fue apoderando de mi cuerpo, sudaba por todos lados. Fue entonces que decidí salir un rato de ese ambiente. Caminé hasta alejarme un poco de aquella bulla, llegué a la playa, me quité las zapatillas y anduve por la arena descalzo. Se sentía bien respirar aire fresco, hasta que una voz interrumpió mi tranquilidad.
-¿No deberías estar con tu nuevo "pasatiempo" en la fiesta...?
(Jongin)
El día había llegado. Me encontraba en camino a la casa donde empezaría mi primer trabajo.
Al llegar, observé que había una fila de autos en la entrada principal. Los jóvenes que salían de ellos vestían bien y se notaban que eran chicos con dinero de sobra. Cuando llegó mi turno de entrar, la persona encargada me preguntó mi nombre, al ver que no estaba en la lista intentó sacarme del camino.
-No vengo a la fiesta. Soy el nuevo guardaespaldas - me defendí bajando del carro.
-¿El amigo de Chanyeol?
-Si.
-¡Chanyeol! - llamó por su teléfono/radio - Acércate a la puerta - no esperé mucho y Chanyeol apareció - ¿Es este tu amigo? - preguntó.
-Si. Jongin, que bueno que llegaste - me saludo estrechándome su mano - Ya estaba preocupándome. Disculpa a Kangin ¿Quieres? Es algo desconfiado.
-No hay problema.
-Bienvenido seas - comentó Kangin - Ahora entren de una vez, los jóvenes siguen llegando.
-De acuerdo - asentí. Subí a mi carro y Chanyeol se acomodó en el asiento del copiloto.
-Vamos, te diré donde guardar tu carro y de paso te enseñaré donde dormirás esta noche.
Hice caso a sus instrucciones y me llevó hasta una parte casi apartada de la casa. Era un lugar con varias casas pequeñas a lo que deduje que serian los búngalos. Guardé mi carro en el garaje de uno de los búngalos, y luego me llevó a una habitación con una sola cama.
-¡Aquí es! Esta es mi habitación, pero la ocuparas solo los fines de semana.
-Se ve muy acogedor - dije mientras acomodaba mi terno en el armario.
-Por cierto, este búngalo lo compartes con otras dos personas más. Ya luego los conocerás - luego hizo una pausa - No eres homofóbico ¿verdad?
-¿Por qué lo preguntas?
-Nada. Olvídalo.
-En todo caso, no lo soy. Si no, no hubiera aceptado el trabajo sabiendo que el dueño de casa esta casado con un hombre...
-Cierto, tienes razón... - asintió.
-De casualidad... ¿Qué es lo que hay? ¿Es cumpleaños del dueño?
-Nada que ver, solo amaneció con bueno humor...
-Estaba pensando si, tal vez ¿Podría infiltrarme en la fiesta?
-jajajajaj - rió con ganas - Era eso... claro que puedes. Además hay gente que ni el mismo dueño conoce. Anda, vamos.
Salimos del búngalo y caminamos con dirección a la fiesta. Y mientras lo hacíamos, Chanyeol me aconsejaba comportarme como si fuera uno de ellos, osea decir que tenía dinero y listo. De pronto se quedó callado al mirar a un joven que estaba solo en la playa y caminaba descalzo por la arena...
-¿Quién es? - pregunté.
-Nadie - respondió con rapidez - Ve caminando, ahora te alcanzo... - y se fue con dirección hacia el joven.
Me dirigí a la fiesta, primero pase por la piscina. Los chicos jugaban a las guerras tirándose agua a la cara, o sino tenían a una que otra chica en sus hombros y jugaban a quien cae primero... Dentro de la casa, se escuchó que la gente estaba echando porras a alguien, entré y traté de ver a quien rodeaba la multitud, de pronto choqué con alguien...
-Lo siento - se disculpó este.
-No hay problema. Fue mi culpa.
-...- me miró con detenimiento - ¿Eres amigo de...?
-No - interrumpí antes de que terminara su pregunta - No soy amigo del dueño, soy el nuevo guardaespaldas.
-Ahh. ¿No deberías estar trabajando?
-Bueno, comienzo mañana.
-Ya veo. En ese caso, diviértete.
-Gracias.
-Por cierto, mi nombre es Minseok.
-Mucho gusto, el mío es Jongin.
-Bueno, te dejo. Adiós y diviértete.
-Igualmente...
Me junte con la gente que estaba aglomerada, ellos hacían un circulo y miré al joven que estaba en el centro bailando con una chica. Como olvidar aquella piel blanca, cabello rubio y aquellos ojos que ahora estaban delineados y le hacían verse hermoso... Esperen, dije "hermoso" Sacudí la cabeza por mis pensamientos, fue entonces que la música cambió a una más ¿sensual? Luhan dejó de bailar y sin darse cuenta se acercó hasta donde yo estaba y tomó de mi mano, ahora me bailaba de forma sensual, pero no me miraba, en ningún momento me miró hasta que junto nuestros cuerpos y casualmente rozó su miembro con el mío... Sentí la sangre subir a mis mejillas ¿Qué debía hacer? ¿Dejarle e irme por la vergüenza?
-¡Oh! Lo siendto - fue entonces que levantó su vista y me vió - Jongin - dijo muy animado - Vinishte...
-Hola - respondí con vergüenza en mi rostro, y lo peor es que mi erección del momento no me ayudaba.
Luhan me abrazó rodeando mi cuello con sus frágiles brazos. Luego sentí todo su peso sobre mi cuerpo, intenté separarle con cuidado, y cuando vi su rostro... estaba ¿durmiendo? Luhan se había quedado dormido en mis brazos.
-Ayúdenme - pedí - no pesaba mucho, pero quería acomodarlo. Todos se me juntaron, incluyendo Minseok. Luego acomodé a Luhan entre mis brazos y le cargué - ¿Dónde esta el dueño? - pregunté a Minseok - pediré una habitación para Luhan...- Minseok me miró con cara como si yo estuviera perdido.
-Él es el dueño - señaló a Luhan.
-¡Él!
-Si. Luhan es tu nuevo jefe.
La noticia fue como un baldazo de agua fría. Nunca creí que Luhan fuera el ¿Esposo del señor Xiang? ¡¿Luhan estaba casado con un hombre?! Esto tenia que ser un mal entendido...
-¡Sígueme! - pidió Minseok - Te llevaré a su habitación.
Seguí a Minseok escaleras arriba, pasamos por un pequeño pasadizo y la primera puerta a la izquierda era la habitación de Luhan, lo dejé tendido en la cama y miré hacia alrededor... mis dudas se habían aclarado. Luhan si estaba casado con un hombre, había varias fotografías de él a lado de Xiang.
-¿Qué estas mirando? - preguntó Minseok - ayúdame a cambiarle.
-¿Cambiarle?
-Si, cambiarle - le quitó las zapatillas y luego su camisa dejando al descubierto su piel nívea. Luego se dirigió hacia el closet y sacó una piyama - Por favor ayúdame - pidió nuevamente.
-¿Qué debo hacer?
-Sostenle, y yo le pondré su polo para dormir.
-De acuerdo - asentí.
Tomé del cuerpo medio desnudo de Luhan, he hice que se mantuviera sentado sobre la cama. Minseok le puso con cuidado el polo y luego le dejé recostado. Me incorporé y caminé hacia la salida.
-¿A dónde crees que vas?
-Abajo - inquirí.
-Aun falta algo - me señaló con sus ojos la parte baja de Luhan.
-No. No me atrevo a cambiarle los pantalones...
-Ok. Yo lo haré, si deseas cierra los ojos...
-No te da vergüenza.
-No. Luhan es mi amigo hace años, y créeme - hizo una pausa y suspiró - le he visto en peores situaciones. Ahora, cierra tus ojos.
Hice caso a lo que me había mandado, y me entró la curiosidad de como se vería Luhan sin sus pantalones. ¿Y si miraba por un ojo? ¿Minseok se daría cuenta? La curiosidad me carcomía, entonces decidí abrir los ojos, pero cuando lo hice Minseok ya había terminado. "Lastima" dije para mis adentros. No. ¡¿Que rayos me pasaba?! Me cacheteé mentalmente.
-Ahora si. Por favor cárgalo de nuevo, lo dejaré dentro de su cama.
Asentí con la cabeza, cuando le cargué Minseok acomodó las sabanas y luego le recosté con cuidado. Se veía muy tranquilo durmiendo de esa forma, parecía un niño tierno e inocente.
-Vámonos - Minseok tomó de mi brazo y me sacó de la habitación - Gracias por ayudarme - dijo al fin - No tenia a quien acudir, Baekhyun no estaba por ningún lado.
-¿Baekhyun?
-Ahh si. Ya lo conocerás luego, es el mejor amigo de Luhan.
-Claro...
Bajamos a lo que seria aún la fiesta, todos seguían con lo mismo y se notaba que tenía para rato. Me despedí de Minseok y me dirigí a los Búngalos. Al llegar a mi habitación encontré a Chanyeol sentado sobre su cama y llorando.
-Chanyeol ¿Qué sucede? - me preocupé.
-No es nada - gimoteaba e intentaba secarse sus lagrimas.
-¿Sucedió algo? Puedes contármelo, soy tu amigo - me senté a su lado y él recostó su cabeza en mi hombro y se puso a llorar aún más - Tranquilo, tranquilo. Todo pasará...
HORAS ANTES
(Baekhyun)
-¿No deberías estar con tu nuevo "pasatiempo" en la fiesta...?
No era necesario girarme para ver de quien se trataba, reconocía su voz, su perfecta voz. Intenté seguir mi camino sin prestarle atención.
-No puedes ir por allá, esta a oscuras...
-Ahora ¿te preocupas por mí? - me giré de golpe.
-No. Solo son ordenes...
Asentí y desvié la mirada. Intenté regresar por donde había venido, pase a lado de Chanyeol sin mirarle... y nuevamente su voz interrumpió mi andar.
-Ahora veo que tenia razón - no respondí, y me mantuve dándole la espalda - Siempre fui tu pasatiempo, alguien con quien podías acostarte cuando quisieras. Siempre me utilizaste... - fue entonces que decidí encararle.
-¿Qué? ¿Eso piensas? - me indigné - ¡Pues si eso quieres creer, créelo! - chillé.
-Ja. Claro, no tienes como excusarte. Sabes que es cierto.
-...
-Y ahora que harás con ese pobre muchacho, ¿También lo utilizas? También lo utilizarás como a mi ¿verdad?
-No sabes lo que dices - grité - No tienes ni idea de lo que dices... ¡¿Acaso me tomas por un puto?!
-A estas alturas ya no sé que pensar de ti - sus palabras eras frías e hirientes.
-¡Eres increíblemente idi**a! ¡¿Quién te crees para hablarme de esa manera?! No eres nadie para hablarme así.
-Tienes razón, no soy nadie, nadie para ti. Nunca lo fui.
Estaba empezando a desesperarme, no tenia derecho de hablarme ni tratarme de la manera en que lo estaba haciendo. De repente mi pecho empezó a dolerme, pero no me importó.
-Ya te dije que si eso quieres creer, pues créelo así. No pienso darte ninguna explicación. No ahora, tuviste tu oportunidad en la mañana.
-¿Crees que estoy aquí por qué quiero regresar contigo? Ni en tus sueños. No volvería contigo ni aunque me pagaran por hacerlo. No te das cuenta que a veces eres una persona insoportable - confesó - que siempre quieres ser el centro de atención y que a veces eres arrogante.
-¡¿Entonces por qué estuviste conmigo?! - chillé, y no lo soporte más, mis lagrimas empezaron a caer sin que yo lo permitiera - Dime ¿Por qué estuviste conmigo? - le empujé golpeando su pecho - Dime, dime - pedía a gritos y desesperadamente - ¡Por qué estuviste conmigo! Pudiste dejarme desde antes y no tener que esperar cuatro meses para hacerlo.
-¡Pues me diste pena! Me dabas pena, lo confieso. Fue por eso que no terminé con esto a su debido tiempo - ¿Cómo podía decirme aquellas palabras mientras me veía llorar? Lo odiaba, lo odiaba por eso.
Me limpié el resto de lágrimas con el dorso de mis manos. Le di la espalda para irme y dejarle ahí parado. Pero él me detuvo tomándome del hombro y haciéndome girar a la fuerza.
-¡Aún no he terminado!
-¡Pues yo si! - grité - No tengo nada de que hablar contigo, eres un testarudo por no querer escucharme.
-Baekhyun - ladeé la cabeza para ver quien era - Vámonos a casa - era mi primo, mantenía una expresión seria, seguramente había escuchado parte de mi discusión.
-¿Para qué lo llevas a tu casa? Seguro para enredarte con él.
Esto estaba llegando a su límite y yo no lo soportaba más.
-Si, Chanyeol. Lo que tú digas... si quieres creerlo así, créelo.
Fue entonces que fui con Jongdae. Él me alcanzó mis zapatillas que había dejado a un lado de la playa. Me llevó hasta el estacionamiento y me metió al carro. Yunho ya nos estaba esperando.
-¿Le sucedió algo joven? - preguntó con tono de preocupación.
-No te preocupes, Yunho - Jongdae me metió y Yunho prendió el motor.
Mientras íbamos con dirección a mi casa, Yunho volvió a preguntar.
-Fue Chanyeol ¿verdad?
-Con qué ese es su nombre - intervino Jongdae.
-Si, fue su culpa. Me trató horrible... lo odio - sentí el pecho apretarme.
-Joven, si desea yo puedo hablar con él.
-No te escuchará, es muy testarudo.
-No tiene caso hablar con él. Después de todo lo que te dijo.
-¿Escuchaste? - pregunté a mi primo.
-Si. Escuché cuando dijo que eras un insoportable y un arrogante. Y que no estaría contigo aunque le pagaran por hacerlo... ¿Quién se cree que es para decirte eso?
El hecho de volver a recordar sus frías palabras me puso peor. Mi pecho me apretaba y dolía al mismo tiempo, sentía que cada respiración que daba era peor, intenté controlarme y no podía. Mi corazón estaba volviéndome a fallar...
-¿Te sucede algo? - preguntó mi primo - ¿Por qué te coges el pecho?
-Me duele.
-No seas dramático, solo has terminado con él y ya.
-No estoy siendo dramático - apenas podía hablar - me duele de verdad.
Entonces, mis latidos aumentaron, sentía que el corazón se me saldría del pecho y me retorcí de dolor en mi asiento.
-¿Joven?
-Llévame - pedí, pero mientras intentaba hablar el dolor aumentaba - al hospital. Ahora.
-Oh Dios, Esto es serio. Yunho - gritó - pisa el acelerador.
Sentí que el coche se movía a gran velocidad, las calles pasaban muy rápido, Jongdae gritaba a Yunho y yo perdí el conocimiento...