Capítulo 4 - Boyfriend
- ¿Y eras lindo cuando tenías doce años?
- Pues ¿te parezco lindo ahora?
- Claro que sí, eres muy lindo -Dennis me regaló un beso en la mejilla, me ha estado preguntando cómo era yo cuando tenía 12, como él.
- Entonces sí era bastante lindo a los doce también, no es que haya cambiado mucho… total, fue hace dos años.
- Pero es que yo aún no te he visto.
- ¿No has visto una foto mía a los 12? -pregunté eso porque yo pensaba que sí.
- Aún no, y tu “Face” dice que te lo creaste el año pasado.
- Sí, fue cuando cumplí trece.
- Entiendo ¡pero quiero verte ya! ¡C’mon! -en serio que mi peque parece emocionado, eso me hace sonreírle.
- Está bien, deja que busque en las fotos de mi USB.
Me bajé de la cama para ir a buscar mi USB de fotos familiares en mi cajón, cuando lo encontré tomé la notebook también y la encendí. Volví a mi cama con todo y me recosté al lado de mi hermoso novio, ambos estamos desnudos aquí en mi habitación, bueno después de todo hemos estado haciendo nuestras cositas hace solo un rato, estamos ahora en nuestro descanso, para luego tener energías para una segunda ronda. Ya lo sé, ya lo sé… pueden llamarme pervertido como antes pero ya les dije que no me importa, total: los novios podemos hacer cositas cuando nosotros queramos.
En fin, cuando se encendió la notebook con el USB me puse a buscar las fotos que Dennis me había pedido, no me demoré mucho en encantar unas cuantas y de inmediato puse la pantalla completa para que mi niño hermoso las viera.
- Yes… You were really cute -me dijo mirándome a los ojos, después de ver algunas fotos mías.
- And now?
- Now… now you are so handsome.
- And cute?
- Cute too!!
Después de esa pequeña pero genial conversación en ingles Dennis se me lanzó encima para besarme, rodamos en la cama, pero me detuve a tiempo para no caernos, estamos al borde de la cama, él sobre mi y besándonos de una forma única, solo con Dennis me siento así. Sus besos y caricias me hacen sentirme en el paraíso. “You are my great boyfriend” me dijo justo después que nos separamos del beso, eso me hiso sonreír mucho, en serio que me pareció muy tierno de su parte.
- ¿Entonces soy tu boyfriend? -le pregunté acariciándole una mejilla con mi palma.
- Sí, eso ya lo sabes.
- Claro… pero es que es la primera vez que me dices “boyfriend”.
Dennis soltó una pequeña risita para después volver a juntar mis labios con los suyos, solo rozándolos, al final este travieso me terminó mordiéndome el labio inferior, no me dolió mucho pero igual no me lo esperaba.
- Auh… -me quejé un poco.
- Tranquilo, no te dolió tanto ¿no?
- No mucho pero igual…
- Es que… me gustó tanto verte más peque… como que me pusiste juguetón otra vez -pronunció medio sonrojado y con una sonrisa de travesura.
- ¿De verdad? Solo por verte a los doce años…
- Sip… mira, toca aquí… ya estoy duro de nuevo.
- Dennis… como que ya estas creciendo -dije tocándole su… su ya saben qué, que en serio esta duro y como que me provoca…
- Jaja… sí ya estoy creciendo… pero el tuyo aún es más grande que el mío.
- Es porque soy mayor que tú…
- Anyway… me gusta mucho hacer cositas sexys contigo ¿sabes?
- Sí, ya me lo has dicho varias veces antes… Dennis… ahh… -comencé a gemir un poco ya que mi peque esta besándome en el cuello.
- ¿Tus padres no llegaran hasta la noche verdad? -me preguntó deteniéndose un momento.
- Aja… me dijeron que tenían una reunión de adultos… estamos solos por unas horas más tú y yo.
- Oki… puedes apagar la notebook si quieres, vamos a estar ocupados haciendo otras cositas.
- Peque pervertido -le susurré al oído.
- Y así te gusto.
- Sip, mucho.
Nos besamos una vez más, ya les dije que besarme con Dennis es una de las cosas que más me gusta en el mundo… me sorprende y me emociona también lo caliente que puede ser mi peque de cabello castaño cuando se excita. Aún no le hemos dicho a nadie que hacemos el amor pero que importa, total es un asusto solo de los dos. Y además, Dennis cuando está caliente es imparable, se pone tan sexy que no me puedo resistir a hacer el amor con él por horas, claro eso es cuando estamos solos y podemos hacerlo. ¡Oigan! Ustedes también nos han visto hacer nuestras cositas… tal vez ustedes son los pervertidos, Jeje…
Ya pasaron como unos diez minutos… mi peque sexy y yo estamos haciendo un 69… aprendimos eso él mes pasado, es una larga historia… ¿recuerdan que empecé a ver esos mangas llamados shotacon? Bueno pues hace tiempo se los mostré a Dennis y a él también le gustaron, algunos días que las tareas no nos molestan vemos esos mangas en la computadora cuando estamos juntos, la verdad me gusta mucho más ver shota cuando estoy al lado de Dennis, aunque en algunas páginas me da algo de vergüenza por obvias razones, las imágenes son tan… pornosas… ¿existe esa palabra? Como sea, igual son así.
Yo estoy recostado en la cama y Dennis está sobre mí, siento la delicia que es que él chupe mi pene, sentir su lengua tan suave y húmeda… me da una sensación riquísima y la succión de su boquita… no hay un adjetivo tan bueno para describir lo bien que se siente. Ahora yo busco no quedarme atrás, también estoy chupándosela a mi novio, me da algo de pena decirlo así de frente pero que rayos… ya lo estoy haciendo de todos modos. El pene de mi niño es un poquito más pequeño que el mío, pero no importa, es bastante lindo, duro y sabe muy dulce… aunque con el liquido pre-seminal que le está saliendo ahora como que ya sabe más saladito. Siento como Dennis me lo está metiendo más en la boca… eso es tan pervertido, tan excitante.
Veo una entradita rosadita y perfecta desde aquí… mientras seguimos en lo nuestro y yo sigo chupando y lamiendo estoy mirando el culito de mi peque. Sus nalgas perfectas y redonditas… y al separarlas un poco puedo ver su entradita tan linda… esto me está excitante tanto que creo que… ¡Ohhh rayos… sí es eso! Voy a…
- Ya eyaculaste… Jajaja… me gusta cuando te hago que te excites.
- Ahh… si sigues diciendo esas cosas vas a hacer que me venga otra vez.
- Jaja… bobito, deja que me limpie un poco.
- Lo hice dentro de tu boquita ¿no?
- Sí, pero igual quiero limpiarme… me cayó un poco en la cara.
- Sorry… -le sonreí mientras lo veía tomar los pañitos húmedos.
- No importa, está bien.
- Qué bueno estuve eso…
- Yeah, pero yo aún quiero un poco más.
- Dennis… -su lado de niño pervertido es genial.
- ¿Qué? Ya sabes que hoy es uno de mis días hot.
- Jajaja… ok, está bien.
Mi castaño se puso de pie en la cama y yo me quedé arrodillado aquí mismo, después de frotar la punta de su penecito contra mi mejilla y que yo le diera unas lamiditas ya se la estoy chupando. Quiero hacerlo tan bien como para que lo haga eyacular en menos de 5 minutos, espero poder logarlo.
Mi peque esta acariciando mi cabello mientras yo sigo con lo mío, me encanta cuando nos miramos, yo lo veo hacia arriba y él me mira a mí como se la chupo… le gusta mirar, esta tan lindo… Siento como lo hunde más en mi boca, Dennis se está excitando cada vez más y sus gemidos lo delatan también, eso es bueno.
“I’m cumming… ahh…” dijo entre susurros y a los segundos sentí su lechita llenar mi boca, no tarde mucho en rendirme ante su dulce y peculiar sabor y me lo pasé, ya no me da vergüenza. Deje a Dennis suspirando y se sentó frente a mí con las mejillas coloradas. Cuando terminé de relamer mis labios me acerqué para besarlo y él me correspondió de inmediato.
- ¿Y ahora es el turno de quien? -pregunté, aunque no lo crean estoy tan caliente como para seguir ahora.
- Obviamente es mi turno, después de ver lo lindo que eras cuando tenías mi edad quiero hacerte mío.
- Jajaja está bien… pero ya te dije, solo fue hace 2 añitos.
- Igualmente, verte peque fue muy lindo y también… excitante.
Me acerqué a morderle la oreja a oreja a Dennis, si quiere ser juguetón ahora está muy bien, tengo una forma genial para seguirle el juego y creo que a mí también me gustará mucho. Me recosté de espaldas sobre la cama y separé mis piernas, Dennis no tardó en acomodarse y colocarse entre mis piernas, rozando su pene contra el mío.
- Oye… pero se bueno conmigo, es mi primera vez -le dije tratando de agudizar mi voz.
- No es tu primera vez, ya lo hemos hecho antes.
- Claro que lo es… solo tengo 12 añitos…
La carita que puso mi castaño fue genial, le brillaron los ojos al imaginarme así creo, se mordió el labio inferior mientras me sonreía y yo lo tomé de ambos hombros con mis manos.
- Así que solo tienes doce… está bien, seré gentil contigo Jeremy de doce años -me dijo en voz baja y me besó en la mejilla.
- ¿Me va a doler? -volví a repetir esa voz aguda, creo que lo estoy haciendo bien, es divertido.
- Solo un poco al principio, pero luego solo sentirás rico ¿ok?
- Sip, quiero que me hagas sentir rico Dennis.
- Claro que sí… que lindo niño eres.
Dennis y yo nos abrasamos mientras nos uníamos en un delicioso y húmedo beso justo antes de sentir la punta del pene de mi novio rozar con mi entradita…
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Estamos casi a la salida del día escolar, ahora mismo solo escuchamos al profesor explicar lo poco que queda de clase, solo faltan unos minutos para la hora de salida y como hoy es miércoles, hoy le toca a Dennis asistir a sus clases de karate. Siempre entrena los lunes, miércoles y viernes después de la escuela y me gusta ir a verlo. Su entrenamiento es en una sala especial de la escuela, tienen todo un espacio para entrenar ellos solos y lo bueno es que pueden haber algunos espectadores. Me gusta ver a mi Dennis con su traje blanco que parece pijama, aunque me ha dicho cientos de veces que no es un pijama, es un pequeño enjoncito y lo amo. Como ya saben, Marco también está en el equipo de karate, pero como nuestro amigo pelinegro está mucho más adelantado él entrena en otro horario: los martes, jueves y sábados. De hecho es muy valiente para levantarse temprano los sábados y venir hasta aquí a la escuela para practicar. Yo creo que sería muy perezoso para levantarme temprano.
¡Acaba de sonar el timbre de salida! Tomo mi mochila y me apresuro para salir del aula e ir al dojo de karate de la escuela. Dennis ya debe estar ahí esperándome para darle un beso en la frente antes de empezar, casi siempre llegó antes de que empiece su clase y aprovecho para besarlo en la frente, creo que es un bonito detalle.
- Oye Jeremy ¿ya estas apurado otra vez?
- Oh, sí Dan… ya saben que tengo algunas cosas que hacer.
- Pero hace tiempo que no salimos juntos con los demás.
- Dan ¿no estuvimos todos en el cine el domingo pasado?
- Bueno sí, pero tú no estuviste en el Arcade.
- Bah… bueno… es que tengo algo que hacer…
- Mira, ahí vienen Mario y Brandon, vamos no seas aguafiestas -me pidió mi amigo.
- Lo siento amigo, pero justo ahora tengo que irme rápido, ya podemos salir mañana, bye bye!
No me gusta dejar de lado a mis amigos pero justo ahorita quiero ver a Dennis, en serio quiero ir a verlo entrenar y ayer después de bañarnos le dije que me encantaría ir a verlo hoy. Jeje… ayer jugamos hasta que se hiso de noche, fue tan… genial.
Salgo del pabellón principal de la escuela y salgo al patio, tengo que cruzarlo y pasar de largo la piscina para llegar al dojo de la escuela. Acabo de llegar y aún no han empezado, eso es bueno. Creo que aún están todos en los vestidores, algo genial es que he como he venido a ver las clases desde que empezó la escuela, el sensei de Dennis ya me conoce y me deja pasar a los vestidores, creo que piensa que soy el primo de Dennis o así. Después de saludar al sensei entro a los vestidores, hay varios chicos que ya están amarrando sus cinturones y otros quitándose los calcetines, sigo caminando y encuentro a mi peque sentado en una banco ya casi terminando de vestirse.
- Hola peque -le saludé sentándome a su lado.
- Hola Jere, que suerte que hayas llegado temprano hoy -me sonrió.
- Sip. Dennis ahorita voy al baño, pero ya regreso.
- Ok, entonces ya te veré sentado en las gradas.
- Claro, ven y te doy tu beso de una vez.
Volteé para ver que nadie estuviera viéndonos y rápidamente le di su beso en la frente a mi precioso novio. Luego de ver su linda sonrisa me puse de pie y salí de los vestidores, salí también rápidamente del dojo ya que el baño ahí es solo para los que entrenan.
Ahora estoy saliendo del baño del pasillo, camino con mi mochila de nuevo hacia el dojo, no está muy lejos y seguro ahora si ya están por empezar, ya están a su hora.
- ¡Mira ahí está Jeremy! ¡Lo encontramos! -escuché la voz de Brandon detrás de mí.
- Hola chicos y… ¿Gianfranco? -me sorprendí al ver que el mayor también estaba con mis amigos.
- Gianfranco nos invitó a ir al Arcade, solo faltabas tú -dijo Mario sonriendo.
- ¿Yo también tengo que ir? -pregunté.
- Claro que sí, ya no tenemos más clases. Ya pues Jeremy -esta vez el que habló fue el mayor.
- Ehh… es que en serio no puedo chicos tengo que quedarme.
- ¿Y qué vas a hacer entonces?
- Le dije a Dennis que hoy lo vería entrenar karate.
- ¿Solo eso? Vamos no creo que se moleste si no te presentas -dijo una vez más el mayor.
- Pero yo quiero ir a verlo -respondí.
- Ya lo verás otro día Jeremy, ahora vamos a jugar todos al Arcade -Brandon empezó a empujarme por la espalda.
- Pero…
- Nada de peros hoy amigo, vamos que yo invitaré las gaseosas.
Luego de que Gianfranco dijo eso último todos se animaron aún más, creo que no entienden que no quiero ir ahora con ellos, Dan y Brandon me están jalando prácticamente… rayos esto es imposible, tengo que zafarme de este aprieto.