Capítulo 15 – El placer de amar
Siento como mi corazón late rápido… mientras veo a mi chico de cabellos dorados quitarse su chaqueta, la deja caer sobre la alfombra, luego hace lo mismo con su camiseta, y ya puedo ver su torso desnudo de nuevo, hace más de dos meses que no lo veía así, solo en mis sueños y… cuando pensaba en él varias veces. Muerdo mi labio inferior, no puedo evitarlo, Jeremy es en serio muy guapo, me dan ganas de besarlo por todas partes, en especial al ver el pecho tan bonito que tiene y ese vientre tan planito y blanco. “Jeremy, ven” le dije sin poder aguantar las ganas de tenerlo cerca. Vi a mi chico sonreír y vino sin demora hasta mí, se sentó a mi lado y lo primero que hice fue darle un beso en su mejilla, se siente caliente, eso es muy lindo.
- Peque ¿tienes ganas de… tú sabes? –me preguntó mirándome a los ojos, ¡eso me puso más nervioso de lo que ya estaba!
- Pues… sí tengo ganas… ¿Tú no tienes?
- No es que no tenga ganas… eres el chico más precioso del mundo y verse así… me dan ganas de hacerte de todo.
- Jeje… que lindo.
- Pero… Malena y su hermano están discutiendo ahora y…
- Ya sé lo que me vas a decir… pero es que…
No quiero meter la pata, menos aún ser un insensible con mi prima, ya sé que ellos están peleando justo ahora, pero… “Jeremy… tal vez no sea el mejor momento pero es que ya no puedo aguantarlo, después de decir por fin la verdad sentí que ya estaba más libre y… pues… tengo muchas ganas de… hay no” dejé de hablar y bajé mi mirada, perfecto, ahora los nervios ya se me fueron por todos lados, no quería sentirme mal por estar pidiéndole a Jeremy que hiciéramos cosas pervertidas justo ahora pero… tal vez tiene razón y no es el mejor momento, soy un chico malo, tal vez yo no debí…
Todos mis pensamientos son interrumpidos al sentir los dedos de Jeremy tomándome del mentón, guiando mi mirada hasta encontrarme con sus hermosos ojos verdes, ahora siento que me derrito de nuevo. “Déjame adivinar… te sientes tan feliz de por fin haberme contado la verdad que ahora no puedes aguantar las ganas de hacer el amor conmigo ¿es eso mi peque?” al terminar de escuchar sus palabras solo sentí mis mejillas arder y mi corazón latirme aún más rápido ¡Ay Jeremy, solo tú eres capaz de hacerme sentir así de avergonzado! Me da algo de pena… pero al final le asentí con la cabeza, él tiene razón, eso es lo que me pasa.
- Aww… ¿mi Dennis está con las hormonas alborotadas? –me preguntó sonriéndome.
- Muy alborotadas… -hice un puchero.
- Cosita… de solo verte, a mí también se me alborotan todas mis hormonas, jeje.
- Bobo… te quiero demasiado –le sonreí aún con un poquito de pena.
- Y yo te amo a ti mi bomba sexy –me dio un fuerte abrazo.
- ¡Ah! No me llames así, me da vergüenza –dije escondiendo mi cara contra su hombro desnudo.
- Pues a quien no parece darle vergüenza nada es a Gato Miau, míralo ahí.
Me separé de mi rubio y volteé hacia la puerta de mi habitación, Gato Miau está sentado ahí en la alfombra mirándonos como si nada. Me puse de pie y lo cargué hasta afuera de la habitación, ya en el pasillo él se puso a maullar, “Lo siento pequeño, eso no lo pueden ver los gatitos, tendrás que esperar hasta que tus papis terminemos” le expliqué al minino, que se puso a rodar en el suelo, le di un par de caricias en su cabeza para consentirlo y luego ya entré de nuevo en mi habitación, asegurándome de que mi mascota que quedaba afuera, cerré la puerta de mi alcoba y le puse el seguro, no queremos ningún susto si a mis papis se les ocurre regresar de pronto ¿no? Pero si todo sale bien… tenemos un poquito más de dos horas para jugar, yay!
- Iré a lavarme las manos, no me tardo nada –dije entrando al baño de mi habitación.
- Dale, te espero aquí –escuché a Jeremy mientras se quitaba las zapatillas.
Mientras me lavaba las manos me puse a verme al espejo ¿me veré lindo? Pues… tengo que ser el niño más lindo para Jeremy ¿cierto? Luego de secar mis manos con la toalla me concentré en hacer caras bonitas en el espejo o bueno… son caritas un poco bobas, pero creo que son muy tiernas, hasta cuando hago puchero. Oh bueno, creo que sí soy lindo después de todo, jeje. Ahora con una sonrisa en mi rostro salí de nuevo a la habitación y cierro la puerta del baño, veo que Jeremy está sentado en mi cama, pero a diferencia de mí, él está usando sus jeans, me pregunto por qué no se los quito, después de todo yo estoy en bóxer, estaríamos iguales.
- ¿No vas a desnudarte también? –le pregunté y luego mordí mi pulgar.
- Pues estaba pensando en que tú podías desnudarme a mí, sé que a ti te gusta quitarme la ropa, jaja.
- Rayos… ¿Cómo lo sabes? –me acerqué hasta él y me arrodillé en el suelo, frente a sus piernas.
- Porque soy un “X-men” y tengo telepatía.
- Oye, esa es mi frase, no me la robes.
- Jajaja… oye, ya quiero empezar.
- Oki… Jeremy pervertido.
Tomé los pantalones de mi novio por los bordes y lentamente se los bajé hasta poderlo verlo ya solo en ropa interior, le quité por completo los jeans y… al verlo semi-desnudo siento como unas cosquillas recorren todo mi cuerpo, aún me siento nervioso pero… a la vez me siento con muchas ganas de estar besándolo hasta más no poder. Me acerqué mucho a él y me subí en la cama también, sentándome en sus piernas, ya teniéndolo frente a mí, mi rubio empezó a darme besos en las mejillas, dándome cosquillas al sentir sus labios besarme, mientras yo me reía empecé a dar saltitos, lo tomé de los hombros con mis manos y también empecé a besarlo, pero yo quiero besar su cuello, el sabor de la piel de Jeremy es tan rica… no sé a qué sabe, pero me sabe muy bien y además huele rico. Mientras los beso siento como su lengua recorre mi hombro y sube por mi cuello, haciendo que yo lance un gemido casi involuntario.
- Jeje, sigues siendo muy sensible mi pequeño… -me susurró en el oído.
- Es que esto me encanta, estar contigo siempre me encanta Jere.
- Y tú eres tan perfecto Dennis, tienes un cuerpo tan hermoso y finito –me dijo mientras subía sus manos por mi cintura.
- Ahh… Jere, extrañaba tanto tus manos… tus besos, tus caricias, todo.
Luego de declárale mis sentimientos cerré mis ojos y lo besé en los labios, siento mucho calor… esto es tan genial… amo estar así con mi chico, mientras mis labios y los suyos se unen y juegan miento los brazos de Jeremy que me envuelven y me pegan más a él, yo solo puedo ahogar mis suspiros sobre sus labios, este momento sabe delicioso… más rico que cualquier muffin. Al separarnos del beso pude ver un hilito de saliva que nos unía, pero en unos segundos ese hilo se rompió porque Jeremy se volvió a acercar a mí para darme piquitos en mis labios, eso en serio me encanta, son los besitos más lindos y dulces que hay ¿no es un amor? Soy muy suertudo al tener a mi guapísimo Jeremy Sommer, pueden tener un poquito de envidia si quieren jeje, pero Jere es solo mío, mío de mí.
Sentí como Jeremy me cargó y luego me recostó sobre la cama, ambos nos pusimos a rodar sobre ella mientras nos llenamos de besos y nos acariciamos con nuestras traviesas manos, entre tantos besos y caricias pude notar que ya había un muy lindo bulto en los bóxers amarillos de mi Jeremy, así que me atrevo a ser un travieso y le toqué con mi mano ahí abajo, sintiendo lo duro de su erección, él se sorprendió y mientras me sonreía también me tomó de mi erección sobre la ropa, “Jajaja, suéltame Jere, no seas tan pervert” le dije entre risas, con mi otra mano le empiezo a hacer cosquillas en su cuello y funcionó, se empezó a reír, pero de lo que no me acordaba era de que yo soy mucho más cosquilludo que él, así que cuando me empezó a devolver las cosquillas solo pude rodar con él sobre la cama, ambos entre muchas risas.
- ¡Auch!
- Jajaja, lo siento, nos caímos de la cama.
- No te preocupes peque ¿tú estás bien? –me preguntó, él está sobre mí ahora.
- No, tengo mucha hambre… ¿me das de comer?
- Oh Dennis… me vas a volver loquito así.
- Puedo… Puedo ser travieso a veces.
- Está bien cosita, aquí tengo algo para ti, arrodíllate.
Jeremy se puso de pie y me ayudó a levantarme también, él se sentó en la cama y yo me arrodillé frente a su bulto tan apetecible, “Ya puedes comer todo lo que quieras, es todo para ti” me dijo en un tono algo pervertido, que me hiso sentir una corriente de electricidad en mi espalda, en serio que me excité. Primero empecé a lamer la erección de Jeremy por sobre ese lindo bóxer amarillo, casi lo podía sentir dentro de mi boca y eso me daba más ganas de tenerlo dentro… mordí con suavidad su pene y escuché gemir a mi rubio, luego de eso froté mi carita contra su pene y aunque esa prenda esté de por medio… ¡huele tan bien!
A los pocos segundos le quité la ropa interior, al ver su pene de nuevo… verlo desnudo por completo… Ay corazoncito por favor no te me salgas del pecho, estoy súper emocionado. Empecé por darle besitos a su pene, está caliente y también muy firme, luego de unos besos y unas dos lamiditas más tomé el pene de Jeremy con mi mano derecha y empecé a masturbarlo lentamente, al hacerlo escuchaba sus suaves suspiros de mi chico de risos dorados, alzo la vista para verlo a la cara y su expresión es de puro placer… muerdo mi labio inferior y mi mano libre se cuela entre mis boxers, empiezo a masturbarme yo también… no puedo durar ni un segundo más, quiero volver a saborear el pene del chico que amo, me acerqué mucho y metí la punta de su miembro en mi boca.
- Ahh… ahhh! Dennis!
- Mmmm…
- Oh Dios… que rico, ahhh!
- Mmm… mmm… -no puedo decir nada más, porque estoy muy ocupado chupando y lamiendo su delicioso pene.
- Esto es demasiado… ahhh! Peque!
- ¿Vas a eyacular Jeremy? –pregunté y de inmediato volví a meter su pene en mi boca.
- Sí! Pero aún no pares, lo… ahhh! Disfruto… demasiado!
Le hice caso a mi novio y se la sigo chupando todo lo que quiera, hacerle sexo oral me gusta mucho, pero lo que más disfruto es que lo hago gozar a él, porque lo quiero mucho y me encanta hacerle esto… y además sus sabor, es muy rico en serio. A los pocos minutos sentí como mi boquita se llenó de leche de Jeremy, la cual saboreé un poco y luego me la pasé, yay! Lo lobré, lo excité tanto como para hacerlo eyacular, jeje.
“Ahh… eso fue fantástico” escuché que dijo Jeremy, que ya está tumbado en mi cama, con una expresión de cansancio y una boba sonrisa, jaja, se ve tan lindo así. ¡Oh ya sé! Le daré una linda sorpresa, me bajé los bóxer y ya estando totalmente desnudo me recosté a su lado, él abrió los ojos y se me quedó mirando y pues su cara… ¡Tierno!
- ¡Chico Tomate! Estas todo rojo –le dije mientras le sonreía.
- Pues es que… luego de tanto tiempo sin verte… hasta me pones nervioso Dennis.
- Yes… Sé a lo que te refieres, me he sentido igual todo el tiempo ahora.
- Oye… esos de ahi son vellitos públicos –dijo señalando mi entrepierna.
- Ehh… sí, el mes pasado me empezó a salir.
- Jeje, Dennis estás creciendo –me sonrió y me acarició la cara.
- ¿Pero siempre voy a ser tu peque?
- Claro que sí, ahora y siempre, mi único peque.
- Te amo Jere.
No le dije nada más y lo besé en la boca, nos besamos así desnudos y recostados en la cama por más de diez minutos, el calor en mi habitación iba aumentado y supongo que también habrían corazoncitos flotando por todas partes ¿no sería hermoso? Yo creo que sí. Luego de tantos besos en mis labios, Jeremy ya me estaba besando todo, todo mi cuerpo entero, besó y lamió cada parte de mi cuerpo adolescente, besó mi cuello, lamió mis pezones, jugó con mi ombligo, me hiso sexo oral por varios minutos… sentir su boca tan caliente y húmeda jugando y saboreando mi pene me hiso tocar el cielo más de una vez, pero yo no quería eyacular tan pronto yo… ya quiero sentir el pene de Jeremy de nuevo dentro de mí, unirnos al hacer el amor, eso quiero ya…
Me vuelta sobre la cama, quedando boca abajo, separé mis nalgas para que Jeremy pueda ver mi entradita, “Cielos… está tan linda y rosadita como siempre” escuché de la voz de mi rubio, eso me excitó bastante… a los pocos segundos sentí su húmeda lengua chocar contra mi agujerito, me puse a gemir como gatito en celo, esa sensación tan maravillosa… tan húmeda, caliente, tan fantástica… Mi perfecto novio me lamió mi culito por varios minutos mientras separaba mis nalgas con sus manos y yo apretaba las sábanas blancas, hasta que llegó el momento en que sentí que se detuvo, solté mis últimos gemidos y luego Jeremy me cambió de posición, ambos estando de lado sobre la cama, con su mano derecha levantó una de mis piernas, dejando mi culito expuesto a su pene que ya estaba completamente duro de nuevo…
- Dennis Hooper te amo mucho… quiero hacerte el amor.
- Hazlo… quiero que me lo hagas, por favor… mételo Jere.
- Aquí voy… ¿listo? –acomodó la punta de su pene en mi entrada.
- Sí, lo estoy, hazlo… ahhh… ahh!
Y entonces lo sentí, su pene entrando en mi culito… lo primero que sentí fue algo de dolor pero… es un dolor que puedo aguantar, sé que dentro de poco solo sentiré placer… de hecho… creo que lo estoy empezando a sentir… ahhh, Jeremy lo está metiendo más y yo… ahhh! Solo puedo gemir… Oh my God! Que sensaciones! Empiezo a… a sentir rico… ahh!
- Dennis estás súper apretado… ahh…
- Es que… no… ahh! No me he tocado en todo este tiempo.
- Ahh! Ya veo… esto es demasiado, me encanta…
- Metelo hasta el fondo Jere… me siento genial… hazme sentir mejor.
- Como tú quieras mi peque –me dijo para darme una embestida más fuerte.
- Ahhh! Ahí!
Al escuchar mis gemidos, mi rubio sí que se ha emocionado, está haciéndome el amor más rápido y su pene llega cada vez más profundo dentro de mí, yo no estoy asustado, todo lo contrario, me encanta en serio sentir a Jeremy hacerlo conmigo. El dolor del principio ya no existe, ahora solo siento el placer incalculable de que me penetre con tantas ganas y amor… mis gemidos suenan cada vez más fuertes, esto es genial… cada segundo que pasa me siento más excitado y con ganas de eyacular… En eso sentí que Jeremy lamió mi oreja y eso en serio me vuelve loquito, hace que me retuerza por tanto placer junto.
- Ahhh! Jeremy… ya casi no puedo más, estoy al borde de… ahh!
- Sí, siente todo el placer que quieras mi Dennis… yo estoy en el cielo.
- No dejes de hacerme el amor, ahhh! Así me encanta!
- Ahh! Dennis que delicia!
Empiezo a masturbarme con una mano, siento que ya estoy por eyacular, seguimos en esa posición juntitos, estando de ladito haciendo el amor sobre mi cama, mezclando nuestros gemidos de puro placer y también dándonos besos en la boca… La excitación ya fue demasiada para los dos, que en eso yo llegué a eyacular, es un placer increíble, hace meses que no me sentía igual… a los segundos siento que Jeremy eyacula dentro de mí y su lechita caliente llena mi culito, rayos… acabo de volver a sentir cuando mi rubio me llena… es tan tibio y agradable, la satisfacción que siento ahora es hermosa, me siento realmente bien.
Volteé hacia Jeremy que está a mi lado, recostado como yo en la cama, y él me sonríe a mí, nos miramos con emoción y dulzura mientras respiramos algo agitados, Yo me acerco a él para acurrucarme contra su cuerpo desnudo. Creo que en ese momento las palabras no hacen mucha falta, para los dos fue algo fantástico, eso lo sé, estamos felices ahora mismo.
- Amo hacer el amor… en serio –escuché que dijo Jeremy.
- ¿Pero solo conmigo verdad?
- Obvio que sí, pequeño celosito, jeje.
- Porque yo solo haré el amor contigo, eso nunca lo olvides –le dije hablando en serio.
- Está bien, yo haré lo mismo entonces, solo estaré contigo siempre, siempre, siempre –me dijo en un suspiro mientras sonreía.
- Yay! –pronuncié emocionado.
Luego de conversar y reír juntos en la cama, decidimos tomar una ducha juntos, después de todo luego también tendríamos que cambiar las sabanas y ordenar mi habitación. Oh! Y que no se me olvide darle de comer a mi gatito, seguro que ya nos está extrañando. Y obvio, más tarde iré a ver si Malena está bien, tengo que saber que ha pasado con ellos.