Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Descubriendo el Verano por Bad boy x3

[Reviews - 703]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Buenos días, buenas tardes o noches ^o^

Aquí estoy nuevamente con un nuevo capítulo, que la verdad me fue un poco más difícil de escribir, tratar de meterme en los zapatos del peque no fue sensillo esta vez, pero le puse mucho esfuerzo.

Espero sea de su agrado, queridos lectores ¡A leer! 

Capítulo 23 – Las mil y una emociones

Estoy que no me lo creo… “GAY DENNIS GAY”… O mejor dicho, quisiera no creer que esto esté sucediendo. Al leer esas palabras escritas en este trozo de papel arrancado de un cuaderno me siento tan raro… es una mezcla de frustración, un poco de vergüenza y enojo… enojado es tal y como me siento ahora, volteo mi cabeza hacia atrás, hacia el fondo del salón donde estaban todas esas personitas que se me quedaron viendo cuando entré al aula, pero ahora ni me miran, solo hablan entre ellos… volteo hacia los demás sitios donde hay gente, pero nadie voltea a verme a mí, nadie que se ría y me dé un indicio de quien fue esa estúpida persona que me dejó esta nota en mi pupitre. Genial… ahora no podré desquitarme con nadie en específico… ¡Pero qué ganas tengo de hacerlo!

Pero esperen, tomemos esto con un poco de calma… fuera de quien sea el inadaptado que me escribió esto, lo más importante ahora es que ¿Era por eso que algunas personas me miraban tan raro cuando llegué a la escuela hoy? Esa de por sí ya fue una sensación fea, pero esto… es algo que no puedo tolerar. No me importa que usen la palabra gay, lo que me enoja en serio es que la están usando como si fuera un insulto, lo hacen para molestarme, de eso estoy seguro y además… Si todas esas personas me miraban raro hoy ¿Entonces es que todos ellos saben que soy gay? ¿Tantos desconocidos saben que me gustan los chicos? ¿Me molestarían por eso o tal vez me tratarían mal por ese hecho?

-     Hola Dennis, que temprano llegaste –escuché la voz de Juanmi.

-     Buenos días… ¿Te pasa algo?

-     Hola… -saludé a mis dos amigos que ya se sentaron junto a mí.

-     Ángelo tiene razón, te ves raro ¿Qué te pasa?

-     Me duele la cabeza… miren lo que encontré en mi pupitre.

Les mostré ese papelito que de por sí ya me está arruinando la mañana, ellos dos se quedaron mirando por unos instantes y el primero en hablar fue mi amigo de risos color chocolate.

-     ¿Pero por qué? ¿Quién te lo dejó?

-     ¡No lo sé! Si lo supiera creerme que ya le hubiera dado un puñetazo en la barriga –contesté.

-     Auch, eso en serio debe doler –habló de nuevo el ricitos.

-     Eso me deja muy confundido Dennis… O sea ¿Quién además de nosotros sabe eso de ti?

-     Solo ustedes y mis otros amigos más cercanos… claro que aún no se lo cuento a Valery pero ayer se lo conté a… -me detuve.

-     ¿A quién? –preguntó Juanmi.

-     A alguien… a una amiga.

No sé explicar bien como me siento… lamento no poder expresarlo, todo este asunto me confunde mucho, pero… ahora lo único que quiero hacer es pensar, no creo que Romana haya sido la persona que les haya ido a contar mis cosas personales a todo el mundo ¿o sí? Quiero decir… no la conozco de mucho tiempo, pero en el poco tiempo que la conozco se ha hecho mi amiga y porque confío en ella es que ayer le conté eso tan personal sobre mí. La verdad es que el solo pensar que ella ha estado contando eso a la gente de la escuela, hasta a personas que ni conozco me causa tristeza… Pero en serio no sé si ella habrá sido capaz de hacer eso o no, todo el enojo de hace poco va desapareciendo para ahora sentirme confundido y pensativo… solo quiero hablar con Romana cuando llegue la hora del receso, necesito hablar con ella.

De pronto, unas risas y murmullos me sacaron de mis profundos pensamientos, un grupo entero de mis compañeros de aula están pasando y ahora se sientan en sus pupitres, lo que no me gustó fue la forma en la que entró ese grupito de chicos y chicas, con risitas, murmullos y miradas hacia mí. Creo que no soy paranoico si algo me dice que están hablando sobre mí y supongo que ahora ellos y muchas más personas en la escuela saben que a mí me gusta… ¡Jeremy! ¿Cómo es que hasta ahora no había pensado en él? Si a mí me han dejado esta tonta nota solo para molestarme… ¿Será que a él también lo estén molestando? Eso… eso no lo puedo permitir, puedo aguantar a los estúpidos bromistas si los ignoro ¡Pero no dejaré que molesten a mi chico!

-     ¿Dennis?

-     Tierra llamando a Dennis Hooper, reacciona –vi la mano de Juanmi moverse frente a mi cara.

-     ¿Qué sucede? –pregunté volviéndoles a prestar atención.

-     Te estábamos tratando de hablar desde hace rato –dijo Ángelo.

-     Sí, pero solo te pusiste medio ido y luego parecías muy enojado.

-     Oh, es que estaba pensando mucho, disculpen –contesté.

-     Oye bobo, sabemos que estás muy enojado por lo de ahora, pero sabes que somos tus mejores amigos.

-     Sí y pase lo que pase te vamos a defender –dijo el ricitos con mucha confianza en su voz.

Awww, eso hasta a mí me hizo sonreír en un momento así, es que las palabras de estos dos bobos fueron tan bonitas, sin dudas ellos son mis amigos, puedo confiar en ellos y eso me pone feliz, yo quiero darles las gracias, pero justo antes de poder decir una palabra llegó Valery casi corriendo y se detuvo justo a mi lado. Volteo a verla y puedo notar que tiene una expresión medio rara en su cara de chica bonita, creo que nunca había visto a mi amiga con esa cara. “Dennis ¿Es verdad todo lo que dijiste en ese video?” me preguntó. ¿Video? ¿Cuál video? Tal vez será que… ¡Ah! La campana de inicio de clases acaba de sonar, todos tenemos que sentarnos, antes de que Valery se fuera la tomé de la muñeca y le dije en voz baja para que solo ella pudiera oírme, “Tenemos que hablar, pero espérame a que te cuente todo yo primero” fueron las palabras que salieron de mis labios. Ella me miró a los ojos y asintió con la cabeza y ahora se va caminando hasta su pupitre en la parte trasera del salón.

Nervioso, ahora es así como me siento… que día tan pero tan raro, hasta ahora he tenido tantos sentimientos diferentes encontrados… y ni son más de las 8 de la mañana. Según lo que parece, durante todo este día me voy a sentir de miles de formas diferentes…

 

Nada, no me he podido concentrar en nada que tenga que ver con las clases de hoy, mi mente ha estado totalmente perdida entre los nervios de hablar con Valery y en lo preocupado que estoy por ver a Jeremy, y además está por tocar la campana del receso, eso lo sé porque he visto hacia el reloj de la pared un par de miles de veces en todas estas horas de clase. Mientras veo como ese segundero va avanzando poquito a poquito siento como las palmas de mis manos empiezan a sudar un poquito ¿esto es normal? Antes esto solo me pasaba cuando me derretía por estar con mi chico de cabellos dorados, aunque bueno, supongo que estos son unos nervios distintos, eso debe ser… ¡Ah! La campana de nuevo, ahora sí es el receso. Me pongo de pie de inmediato, ni me importa guardar mis cuadernos, solo sé que quiero ir a ver a Jeremy, doy varios pasos hacia la puerta del aula pero de pronto me acuerdo de Valery, me detuve en seco.

Volteé hacia atrás, ahí están Valery y mis dos amigos mirándome, trato de ignorar todas esas demás miradas que siento sobre mí y trago un poco de saliva, creo que lo mejor es quedarme y hablar con Valery de una vez… espero esto no dure todo el receso, en serio, no saben lo nervioso que estoy ahora mismo. Me acerco a mi amiga de rubios y ondeados cabellos e intento respirar con tranquilidad, pero creo que no puedo hacerlo bien. “Este… mejor Juanmi y yo nos vamos a la cafetería, vente para acá” escuché la voz de Ángelo, de un vistazo noté que él y Juanmi salieron del salón, junto con otros de mis compañeros de salón… “Parece que el gay tiene problemas”, “Shhh, no le digas así, vámonos” también logré escuchar con algo más de dificultad, eran voces de mis compañeros de aula las que sí logré oír. Me pongo más serio de lo que pensé, pero no tengo de otra, al manejar mis emociones soy muy impulsivo.

-     Valery, antes de que me digas nada, tengo que decirte algo.

-     ¿Sobré qué? –me preguntó mirándome a los ojos, pero sin sonreír como siempre.

-     Sobre mí… algo que no te había contado antes –bajé mi cabeza.

-     ¿Y por qué no me lo habías contado?

-     No lo sé… solo no lo hice.

-     …

-     En fin… la verdad es que soy gay –tomé un poco más de aire- Pero no me arrepiento de eso, yo soy feliz como soy y estoy seguro de quien soy.

-     Waoh… no sabía cómo reaccionar, no pensé que me lo dirías así de directo Dennis…

-     Ya no tengo nada que ocultar… no sé cómo se han enterado los demás del salón, pero en fin, ya no me importa –mentí al final, creo que en realidad si me importa.

-     Pues… me hubiera gustado que me lo dijeras tú mismo porque querías, no porque ya me enteré.

-     Lo siento… en serio no sé porque no te lo dije –la volví a mirar a los ojos.

“Dennis” escuchamos los dos y volteamos hacia la puerta del aula, Jeremy está parado ahí, parece un poco agitado, se me está acercando con una carita que me dice que está preocupado por mí. Sin pensarlo dos veces, di unos pasos hacia él y lo abracé, no me puedo aguantar para nada las ganas de abrazarlo, solo en sus brazos me siento totalmente seguro y protegido. “Estaba preocupado por ti, en cuanto tus amigos me dijeron lo que te hicieron solo quería saber cómo estabas” me dijo él. “Y solo podía pensar en ti, en si te estaban molestando también” le dije sin dejar de abrazarlo con mucha fuerza.

-     Ustedes dos son novios ¿Cómo es que no lo noté antes? –dijo Valery.

-     Ahora varias personas lo saben –hable yo soltando poco a poco a mi Jere.

-     Tendremos que hablar de eso luego. Lo siento, creo que los interrumpí.

-     No Jeremy, no es eso –dijo la rubia- tú te preocupas por él y ahora lo veo.

-     Lamento no haberte contado antes… ¿ya no quieres ser mi amiga ahora que sabes que soy gay?

-     Si serás un idiota a veces Dennis –me dijo ella con cara de tristeza- yo te quiero mucho, no me importa si eres gay o no, estaba preocupada por ti.

-     Amiga…

Ya se imaginarán lo sentimental que me puse en ese momento, así que por favor pasemos toda la escena de abrazos, porque en serio me pondría más sentimental aún si se los cuento. Ya al estar yo más tranquilo Valery nos contó a Jeremy y a mí que se enteró de que soy gay porque lo vio en un video de youtube que lo habían compartido por el face, en dicho video estábamos Romana y yo conversando en el teatro de la escuela y aunque no se nos escuchaba muy bien, hasta le habían puesto letras para que se entendiera la conversación completa.

-     En esa conversación los dos se dijeron mucho –nos dijo la rubia.

-     No puedo creer que nos hayan grabado, no puedo creerlo.

-     Tenemos que ver ese video –pronunció mi novio de forma muy seria.

-     De hecho… hasta dices que te besaste con Ángelo.

-     ¡¿Qué?! –se me pusieron hasta las orejas coloradas.

 

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Lamentablemente esa hora de receso me quedó súper pequeña y durante el resto de las horas de clase apenas pude concentrarme, mientras pasaban las horas veía a Ángelo de reojo, él no me ha dicho nada de que lo hayan estado molestando también, pero eso no significa que no lo vayan a molestar… Es increíble que nos hayan grabado ayer a Romana y a mí, no pensé que alguien sería capaz de hacer eso. Igualmente… ¿Quién sería capaz de hacer algo así? Eso sería ser la persona más chismosa del mundo. Además, ayer Romana también me estuvo contando cosas intimas de ella misma, como que le gusta una chica, si ella hubiera sido cómplice de esa trampa entonces no me hubiera contado nada así de importante y la verdad… no vi ninguna mentira en su mirada. Ahora que me acuerdo… en más de cien preguntas que me hizo ella a la hora de salir del taller de canto, también me dijo un secreto muy bien guardado según ella misma, algo sobre la gema carmesí que siempre trae colgando en su cuello: “Esta gema es muy, muy importante para mí, mis hermanas mayores me la regalaron, es mi amuleto de la suerte para cantar bonito. Dennis en serio no sé qué sería de mi voz sin este amuleto. Solo te lo contaré a ti porque tú fuiste tan lindo como para contarme tus cosas, guardemos esos secretos como amigos”.

Exactamente me dijo esas palabras, las recuerdo bien y yo creo que son muy ciertas, Romana nunca canta sin usar esa gema de color rojo colgando de su cuello, en realidad, nunca le he visto sin usarla, no me podría estar mintiendo. Ahora… ya estamos en hora de salida, no he querido irme con nadie más que solo con Jeremy, ahora mismo es cuando más lo quiero a mi lado, ya estábamos llegando a la esquina de la escuela cuando escuché que nos llamaban “¡Esperen!” mi chico y yo volteamos a ver, pero por la voz yo ya sabía quién era.

 

Pov’s Ángelo…

Hasta ahora, este día ha sido muy extraño, no lo digo solo por Dennis y todo lo que le ha pasado, sino que, por alguna razón me he sentido con un cosquilleo muy raro por todo mi cuerpo, no sabría cómo explicarlo ¿saben? Pero bueno, de seguro no es tan importante, hace poco terminaron las clases, me despedí de mis amigos y ahora me estoy yendo a casa. Ahora que lo pienso, hoy solo he visto desde lejos a…

-     Oye mira, ¿ese no es el niño que se andaba de besos con Hooper?

-     Creo que sí, él debe ser el tal Ángelo.

-     ¿Están hablando de mí? –volteé a mirar a esos dos chicos mayores.

-     Sí, es él, ya lo había visto antes con Hooper –dijo uno de ellos.

-     ¿Y eso que tiene? –pregunté.

-     Oh niño, dinos, ¿te gustan los besos de ese chico?

-     Sí, dinos, ¿él sabe besar bien? Jajaja.

Esas palabras me dejaron muy tonto, ósea… están de hablando de Dennis… ¡Y de mí! ¡Y de besos! ¿Pero como saben que Dennis y yo? ¿Esto es en serio?

-     No les diré nada –me tapé la boca con las manos- déjenme en paz.

-     No podemos escucharte si te cubres la boca.

-     Solo dinos quien era el hombre y quien la mujer cuando se besaban.

-     ¡Nadie era nadie! Los dos… los dos éramos los chicos.

-     Jajajaja –rieron ellos al mismo tiempo.

Rayos… no debí decir eso, en realidad, no me gusta nada que me estén siguiendo de esa forma, yo solo quiero irme a casa, no quiero que me sigan a ningún lado esos dos que son más grandes que yo.

-     Oye chico ¿No te gustaría besarnos a nosotros también?

-     ¿Qué? –dije sin entender del todo.

-     Cierto, con esa cara de niña seguro también besas como una.

-     No soy una niña… ya cállense –dije con algo de temor porque se están acercando a mí.

-     ¿Qué rayos hacen molestando a este chico? –se escuchó una voz muy seria- ¿Te están molestando Ángelo?

-     ¡Gianfranco! –me sorprendí al verlo, no saben el alivio que tengo ahora.

-     Solo estamos jugando con él, no es nada –dijo uno de los molestosos.

-     ¿Te están molestando estos dos renacuajos o no? –me preguntó Gianco.

-     Esto… sí –respondí.

-     Ya lo escucharon ¡Lárguense de aquí si quieren regresar completos a casa!

“Tranquilo viejo, no es para tanto”, “Igual ya nos íbamos, pareces un loco así, vámonos” fue lo último que dijeron esos dos tipos y se fueron casi corriendo por otro camino. Yo me detuve de caminar solo para ver como esos tontos se iban, ahora me siento… a salvo, volteé a ver a Gianfranco y él se acerca tranquilamente hacia mí.

-     ¿Estás bien? –me preguntó.

-     Sip… en serio, me alegra mucho verte –sonreí.

-     No podía dejar que te hicieran algo.

-     Ohh… ¿por qué?

-     Pues porque… no quiero que te pase nada, ni que te molesten –dijo él agachando un poco la mirada.

-     E-Eso es genial… -lo tomé de la mano- gracias Gianco.

Ay cielos… estar así de cerca al chico que me gusta… mis rodillas me empiezan a temblar un poco, ayer estaba igual con él, la verdad es que ayer durante todo el taller de natación lo pasamos juntos, él ahora me trata de una forma amable, linda… me gusta mucho y yo… trato de no insultarlo más, solo quiero ser amable… es un poquito difícil de explicar, pero me siento muy feliz de estar junto a Gianfranco y ahora que me ha protegido de esos idiotas… me hace sentir a salvo.

-     ¿Sabes lo lindo que te pones cuando te sientes apenado? –escuché.

-     ¿En serio? –levanté la mirada para verlo a los ojos.

-     Sí… me gusta estar contigo, la verdad que sí.

-     Waoh… -sonreí mucho- a mí también me gusta.

-     Ángelo… ¿Quieres que te acompañe a casa?

-     Ehh… Sí, eso sería genial.

-     Bien, vamos.

Ahora los dos empezamos a caminar juntos… ¡Y aún estamos tomados de la mano! Casi no me lo creo, estamos caminando de la mano ¡Gianfranco y yo! Esto me gusta tanto que no puedo parar de carcajearme como un tonto enamorado, tengo que aprender a disimular mejor cuando me hace sentir mariposas por todos lados, pero no lo puedo evitar… ahorita mismo mientras camino con él de la mano, mi corazón está que canta “Oh oh oh oh oh” ¡Y me encanta!

-     Oh, oh, oh, oh…

-     ¿Qué estás cantando Ángelo?

-     Yo nada, es mi corazón el que canta… ¡Digo! Es solo una canción… que me acordé.

-     Jajaja, sí, como tú digas.

-     Eh, eh –canté feliz porque me creyó.

-     Y bueno ¿Por qué te estaban fastidiando ese par de renacuajos?

-     Ah… -me quedé frio.

Notas finales:

Y aquí termina este pequeño pero intrigante capítulo, tal vez algunas personas ya hayan atado cabos de sobre quien quiere perjudicar a nuestro Jerennis.

Creo que estoy en lo cierto cuando digo que es muy nuevo ver como se tratan ahora Ángelo y Gianfranco, ciertamente se están tratando mejor cada vez, pero no se preocupen, van avanzando poquito a poquito, jaja.

Nos vemos la próxima semana, cuidense and see ya later! :D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).