Un Encuentro
Luego de que Sasuke y Naruto prepararan un plan, sasuki salió del departamento:
Chicos voy por el cilantro – dijo con voz lastimera la princesa – lo olvidamos en la verdulería – y la princesa se fue.
Sasuki chan voy contigo'ttebayo – pero su brazo izquierdo fue atrapado impidiéndole ir con la azabache.
No vayas tras ella – dijo Sasuke aún apretando el brazo del dobe – ella necesita asimilar lo que esta pasando en su familia, en su vida, dale tiempo a solas.
Pero…
Estará bien – Sasuke acaricia el rostro de Naruto – debemos permanecer juntos y apoyarla
……………………………………
En un calabozo subterráneo lejos de Konoha
……………………………………
Una mujer de larga cabellera negra, piel blanca pero maltratada con los años estaba concentrada en su celda preparando su escape:
¡Es hora de salir de aquí! ¡Jutsu liberación de tierra! – y como si hubiera sido Moisés separando las aguas, la tierra iba dando paso a la mujer mientras ella avanzaba, la misma tierra iba guiándola hacia la superficie, mientras se alejaba de la celda la tierra tras de ella volvía a su forma original, poco a poco sus pasos la llevaban a la libertad y la encontró cuando la tierra al abrirse dejaba entrar rayos de sol que molestaban su vista.
He salido – exclamó la mujer – no debo perder el tiempo, tengo que encontrar a mi hija y a Aragon para decirles la verdad – sin tener un rumbo exacto, confió en que sus pasos la llevarían al lugar correcto.
… Así pasaron días y semanas, tomaba agua de algún río que encontrara, comía frutas que aparecían en el camino y de no encontrar nada comía hojas o raíces, ella no iba a rendirse en su misión, luego de tanto pesar por fin había llegado a un pueblo, sin saber que en ese preciso lugar encontraría a la mayor felicidad de su vida…
Agua – la mujer pedía –
Mientras que en la puerta norte de konoha, los guardias veian a la débil mujer acercarse hasta que ella se desplomó frente a sus ojos, ellos la llevaron al hospital …
Cerca del Hospital de Konoha
Sasuki había tomado la costumbre de caminar sin rumbo por la aldea, le servía para despejar su mente y ese día sus pies o el destino decidieron llevarla al hospital, sin querer ella se encontraba en la entrada cuando vio a los 2 guardias llegar con la azabache que venía semi inconsciente, en ese momento, 2 pares de ojos negros se miraron, se encontraron en un momento cósmico, sin saberlo, madre e hija se reunían.
(De nuevo por las 500 palabras)
Un Encuentro
Luego de que Sasuke y Naruto prepararan un plan, sasuki salió del departamento:
Chicos voy por el cilantro – dijo con voz lastimera la princesa – lo olvidamos en la verdulería – y la princesa se fue.
Sasuki chan voy contigo'ttebayo – pero su brazo izquierdo fue atrapado impidiéndole ir con la azabache.
No vayas tras ella – dijo Sasuke aún apretando el brazo del dobe – ella necesita asimilar lo que esta pasando en su familia, en su vida, dale tiempo a solas.
Pero…
Estará bien – Sasuke acaricia el rostro de Naruto – debemos permanecer juntos y apoyarla
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En un calabozo subterráneo lejos de Konoha
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Una mujer de larga cabellera negra, piel blanca pero maltratada con los años estaba concentrada en su celda preparando su escape:
¡Es hora de salir de aquí! ¡Jutsu liberación de tierra! – y como si hubiera sido Moisés separando las aguas, la tierra iba dando paso a la mujer mientras ella avanzaba, la misma tierra iba guiándola hacia la superficie, mientras se alejaba de la celda la tierra tras de ella volvía a su forma original, poco a poco sus pasos la llevaban a la libertad y la encontró cuando la tierra al abrirse dejaba entrar rayos de sol que molestaban su vista.
He salido – exclamó la mujer – no debo perder el tiempo, tengo que encontrar a mi hija y a Aragon para decirles la verdad – sin tener un rumbo exacto, confió en que sus pasos la llevarían al lugar correcto.
… Así pasaron días y semanas, tomaba agua de algún río que encontrara, comía frutas que aparecían en el camino y de no encontrar nada comía hojas o raíces, ella no iba a rendirse en su misión, luego de tanto pesar por fin había llegado a un pueblo, sin saber que en ese preciso lugar encontraría a la mayor felicidad de su vida…
Agua – la mujer pedía –
Mientras que en la puerta norte de konoha, los guardias veian a la débil mujer acercarse hasta que ella se desplomó frente a sus ojos, ellos la llevaron al hospital …
Cerca del Hospital de Konoha
Sasuki había tomado la costumbre de caminar sin rumbo por la aldea, le servía para despejar su mente y ese día sus pies o el destino decidieron llevarla al hospital, sin querer ella se encontraba en la entrada cuando vio a los 2 guardias llegar con la azabache que venía semi inconsciente, en ese momento, 2 pares de ojos negros se miraron, se encontraron en un momento cósmico, sin saberlo, madre e hija se reunían.
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