Kyungsoo despertó a la mañana siguiente, envuelto en los brazos de Jongin, aunque no podía recordad cómo llegaron a la cama. Su cabeza palpitaba, como él sabía que sería, y su pecho estaba todavía ligeramente aceitoso por el removedor de maquillaje de la noche anterior.
Apenas se había movido cuando Jongin murmuró: "La aspirina y el agua están en la mesita de noche."
El mayor estaba infinitamente agradecido mientras alcanzaba el medicamento antes mencionado, tragando dos pastillas sin realmente tener que moverse de su lugar cómodo. Los brazos de Jongin se apretaron alrededor de él, el más joven nunca abrió los ojos, y le acarició la cara en la unión entre el hombro y el cuello de Kyungsoo.
"¿Qué pasó anoche?" Kyungsoo quería saber, y su voz sonó ronca y gruesa.
Jongin todavía no abrió los ojos. "Entre los sietes, nos bebimos unas seis botellas de soju. Eso es lo que sucedió anoche".
"Maldita sea," Kyungsoo gruñó, volviendo la cabeza para que pudiera presionar los labios contra la mejilla de su novio. Aunque Jongin estaba evidente aún medio dormido, se las arregló para girar la cabeza lo suficiente como para que sus labios se encontraran brevemente.
A medida que el medicamento hacía su magia, Kyungsoo volvió a caer en el sueño y se acurrucó en los brazos de su novio. La próxima vez que se despertó, fue un poco más allá de las diez. Gimió y se dio la vuelta, frotándose los ojos. Como era de esperar, Jongin seguía dormido, acarició su rostro en el cuello de su novio.
Kyungsoo dio un beso casto en la sien de Jongin y se desenredó de su novio para ir a tomar una ducha. Jongin todavía estaba inconsciente cuando Kyungsoo salió, sacando la ropa de la maleta. Como no quería despertarlo, el mayor salió de la habitación en silencio en busca de algo para comer.
Oyó voces bajas mientras se acercaba a la cocina. Kyungsoo no era el tipo de persona que le gustaba espiar, pero se detuvo en seco al oír el nombre de su novio.
"Estoy preocupado por Jongin." Era la voz de Luhan. Hablaba bajo, pero la casa estaba en silencio y Kyungsoo, congelado en el pasillo, podía oír cada palabra como si estuviera de pie junto a él.
Como era de esperar, fue la voz de Sehun que respondió. "¿Sobre qué?" Preguntó, aunque distraídamente. "Jongin es un chico grande. Él puede manejarse a sí mismo".
"Sobre todo esto sin sexo" Luhan respondió y Kyungsoo sintió que su corazón se saltaba un par de compases. "He conocido a Jongin, ¿qué? ¿Casi dos años? Y tú lo conoces desde hace más tiempo, ¿verdad?"
Sehun definitivamente sonaba distraído. "Mm. Más de cinco".
"En todo el tiempo que lo conozco, algo como esto nunca ha sucedido," Luhan murmuró. "Y apuesto a que nunca ha ocurrido en todo el tiempo que lo conoces bien."
"¿Por qué te preocupas tanto?" Sehun exigió, un poco molesto.
Kyungsoo se armó de valor para echar un vistazo a la cocina, y vio a la vez por qué Sehun estaba molesto. El chico chino estaba sobre el mesón, con sus rodillas separadas. Sehun estaba metido entre las piernas. Ambos estaban sin camisa, y los pantalones de chándal de Sehun colgaban suficientemente bajo en las caderas para revelar caderas huesudas que casi rivalizaban a las de Jongin. El más joven fue presionando besos en la abierta expansión lechosa del pecho y la clavícula de su novio, y él estaba cada vez más molesto por cómo afectaba a Luhan.
"Porque él es nuestro amigo", dijo Luhan, dando al más joven una bofetada juguetona en el hombro desnudo. "Me temo que si no tiene sexo pronto, él va a hacer algo estúpido."
Sehun todavía lo estaba besando, por lo que le tomó un momento para responder. "Es Jongin. Por supuesto que va a hacer algo estúpido. Por un lado, está saliendo con un chico que no ve la luz. Eso es estúpido en sí mismo".
Luhan frunció el ceño y le dio a su novio otra bofetada. "Hey, no hay nada de malo en Kyungsoo-yah. Él es un buen chico".
"No dije que hubiera algo malo en Kyungsoo" Sehun refunfuñó, alcanzando al mayor de nuevo, acariciando su cara en el pecho desnudo de Luhan. "Me gusta Kyungsoo. Pero todo el mundo sabe cómo es Jongin cuando se trata de sexo. Sólo digo, ¿por qué salir con alguien así si no se va a acostar con él?" Hizo una pausa. "¿De verdad crees que Jongin hará algo estúpido?"
Luhan se encogió de hombros, suspirando. "No lo sé. Creo que él realmente ama a Kyungsoo, pero el pobre hombre tiene que echar un polvo en algún momento".
Kyungsoo se escondió en la sala una vez más, mordiéndose el labio inferior. Él no estaba preocupado de que Jongin iría a dormir con otra persona, confiaba en Jongin demasiado como para preocuparse por eso. Pero ¿si Luhan tenía razón? ¿Qué pasa si Kyungsoo volvía loco a su novio reteniendo el sexo? Era un pensamiento inquietante.
Baekhyun tropezó en el pasillo, con cara de sueño. "Kyunggie", dijo con voz ronca, y su voz sonaba con más resaca de lo que Kyungsoo nunca lo había oído. "¿Cómo te ves tan... despierto?"
Kyungsoo forzó una risa, pasando un brazo alrededor de los hombros de su amigo. "La aspirina y el agua, amigo. Vamos a conseguirte algo para esa resaca".
No fue sino hasta mediados de la tarde antes de que todo el mundo se arrastrarse fuera de la cama, y todos estaban con demasiada resaca para hacer mucho más que de estar en frente de la televisión. Kyungsoo se acurrucó a Jongin, con el brazo del joven sobre los hombros. Era tarde, y él podía decir que algunos de los otros se estaban poniendo somnolientos.
Él tiró de la manga de Jongin para llamar la atención de su novio. "Estoy listo para ir a la cama, baby” dijo en voz baja. Ponerse de pie, tirando a Kyungsoo detrás de él por la mano. "Vamos a ir a la cama," él anunció al grupo.
"Nos vamos a la ciudad mañana, ¿no?" Sehun preguntó desde su posición en el regazo de Luhan, con sus brazos envueltos alrededor del cuello de su novio. "Así que tengo que configurar nuestra alarma a las siete y media?"
Jongin asintió, tirando de Kyungsoo detrás de él hacia la escalera trasera. "Sip. Brillante y temprano. Noche de los individuos".
Kyungsoo no dijo todo lo que se transformaron en pantalones de chándal y se arrastró entre las sábanas de la cama enorme de Jongin. Jongin apagó las luces y se acurrucó más cerca. "Buenas noches, cariño," murmuró el más joven, presionando sus labios tiernamente sobre Kyungsoo.
El chico más bajo agarró la cara de Jongin y lo atrajo hacia abajo para un beso largo y estremecedor. Aunque Jongin probablemente habría estado contento con unos cuantos besos de buenas noches castos. Fue Kyungsoo quien tiró del labio inferior de Jongin con sus dientes, lo suficientemente fuerte para sacar un poco de sangre, pidiendo la entrada. El joven parecía sorprendido, pero, como de costumbre, no dudó en dar su novio exactamente lo que quería.
Kyungsoo se sentía extrañamente agresivo por como él forzó a Jongin a ponerse sobre su espalda, subiéndose a sí mismo encima de su novio. Los besos que habían compartido estaban hambrientos, necesitados, apasionados. Era como si de repente no existía nada excepto Jongin. Todo el sentido de Kyungsoo fue consumido por Jongin. Su olor, su tacto, la forma en que él sabía. Todo era Jongin, Jongin, Jongin.
Cuando el más joven finalmente se retiró, estaba jadeando pesadamente. Kyungsoo podía distinguir el enrojecimiento leve en sus mejillas en la luz de la luna pálida más allá de las cortinas. "¿Qué te pasa, cariño?"
Kyungsoo conectó sus labios otra vez, sin aliento, nervioso. "Jongin, ¿me amas?"
Esto, obviamente, no era la respuesta que Jongin esperaba. "Por supuesto que sí. Más que cualquier otra cosa".
"Y tú sabes que yo también te quiero, ¿verdad?"
"Por supuesto." La respuesta fue tan instantánea que Kyungsoo nunca pensaría en ponerlo en duda.
Él tomó una respiración profunda, encontrando la mirada inquisitiva de su novio. "Quiero que me hagas el amor."
Hubo una larga pausa mientras ni parpadeó. Ni un soplo se libró entre ellos. Cuando Jongin finalmente habló, rompiendo el silencio, su voz era ronca y gruesa y rasposa y Kyungsoo sintió lo positivo acercarse, nunca había sonado más sexy. "E-¿estás seguro de que es lo que quieres, cariño?"
"Te amo, Kim Jongin", dijo Kyungsoo serio. "Quiero ser tuyo. Quiero que seas mío. Para siempre."
Kyungsoo estaba acostado en su espalda antes de que realmente pudiera comprender lo que estaba sucediendo, los labios de Jongin de repente unidos a la piel sensible, donde el hombro se unía a su cuello. Jongin era tan hábil que era sólo cuestión de segundos antes de Kyungsoo estuviera gimiendo y retorciéndose bajo su toque.
Aunque Kyungsoo era consiente que Jongin se estaba volviendo loco de deseo, él más joven se aseguró de ir despacio. Sabía que era la primera vez de Kyungsoo y era obvio que él quería que fuera memorable, sorprendente y perfecta. Mientras su boca dejó una estela ardiente de besos por el cuello de Kyungsoo y a través de su clavícula, su mano bajó al miembro de Kyungsoo a través de sus pantalones. Aunque Kyungsoo estaba más nervioso de lo que jamás había estado en su vida, también era más difícil con en el pensamiento de que su sexy novio estuviera dentro de él.
Kyungsoo estaba necesitado e impaciente, pero se obligó a no apresurarse. Se mordió el labio inferior con fuerza en un intento de reprimir las órdenes urgentes para 'prisa' y 'hacerlo ya.' Una mano se enredó en el cabello desordenado de Jongin mientras que con la otra apuñó las suaves sábanas
La mano del joven se hizo más insistente y su boca se arrastró abajo, besando la piel justo por encima de la cintura de los pantalones de Kyungsoo. Entonces Jongin fue enganchando los pulgares en el elástico sacando los pantalones y la ropa interior de Kyungsoo. Él envolvió el miembro de su novio en la boca, moviendo la cabeza de arriba abajo como experto.
Kyungsoo no pudo contener los gemidos. Había conseguido un montón de mamadas de su novio en los dos meses y medio que habían estado saliendo (y algo más, incluso antes de que habían comenzado oficialmente), pero sabiendo que esto conducía a más, lo hizo sentir mucho mejor.
Jongin quitó la boca para mirar a su sudoroso y jadeante novio desde entre sus piernas. "Dime si quieres que pare, ¿de acuerdo? Prométemelo, cariño"
"Yo te lo p-prometo" Kyungsoo jadeó, su pecho subiendo y bajando. "Sólo... ¡por favor!"
En lugar de cumplir, Jongin se levantó de la cama y abrió de un tirón el cajón de la mesilla de noche. Rebuscó por el interior casi frenéticamente, murmurando para sí mismo: "Yo sé que dejé por aquí... Sé que lo hice... ¡Ajá!" Sacó del cajón triunfalmente, una botella medio vacía de lubricante y un pequeño paquete en la mano. Rápidamente se sentó de nuevo en la cama entre las piernas abiertas de Kyungsoo.
El mayor se sonrojó y bajó la mirada. "No uses eso", dijo, con la voz tan baja que era casi inaudible.
Jongin se detuvo, mirando hacia el otro hombre con curiosidad entre su flequillo sudoroso. "¿Qué? Tú no sabes lo que estás diciendo, cariño. Si yo no lo uso, voy a hacerte daño... "
"No es el lubricante", dijo Kyungsoo, nervioso. "El condón. No uses el condón. Yo sólo... quiero sentirte..."
La mirada en los ojos de Jongin cambió, y cuando él se inclinó para presionar sus labios con los de Kyungsoo, era suave, tierno y amoroso. "Está bien. Lo que quieras, cariño".
Cuando se había situado a sí mismo entre los muslos temblorosos de su novio una vez más, se cubrió tres dedos de su mano derecha generosamente con el lubricante fresco antes de tomar el miembro de Kyungsoo en su boca una vez más. Aunque Kyungsoo sabía que la habitación en la que estaba alojado Yixing estaba justo al lado de la de Jongin, no pudo contener los fuertes gemidos lascivos que se derramaban de sus labios.
Se quedó sin aliento cuando Jongin arrastró sus dedos bien lubricados-abajo de la hendidura de su culo, pero fue más por la sorpresa ante la frialdad del líquido. Su cuerpo se tensó mientras esperaba a que el dedo que sabía que pronto rompería su entrada. Jongin podía sentirlo tenso, por lo que utilizó la mano limpia para frotar círculos calmantes sobre el hueso de la cadera expuesta de Kyungsoo hasta que el mayor se relajó, y luego empujó lentamente su dedo dentro.
No fue la primera ni la segunda vez que Kyungsoo había tenido un dedo dentro de él, pero no por ello era más cómodo. Él se movió alrededor de unos pocos segundos, tratando de acostumbrarse a la intrusión, pero la boca de Jongin en su polla resultó ser más que suficiente distracción. En poco tiempo sus caderas estaban revirtiendo por su propia voluntad. Esto significaba que se estaba obligando a sí mismo entrar más en la garganta de Jongin de lo que estaba acostumbrado, pero también significaba que Kyungsoo se estiraba a sí mismo aún más cada vez que él empujaba hacia atrás en el dedo de Jongin.
Kyungsoo definitivamente se dio cuenta cuando Jongin añadió un segundo dedo, pero no fue tan doloroso como lo que esperaba, porque los dedos de Jongin fueron cubiertos tan a fondo en el lubricante. El joven continuó la mamada, manteniendo a Kyungsoo distraído mientras sus dedos comenzaron a hacer tijera y estirar el apretado anillo de músculos.
Cuando se añadió el tercer dedo, Kyungsoo se estremeció de dolor, pero no gritó. Nunca había sido estirado tanto, pero él no dijo nada porque sabía de primera mano que el miembro de Jongin era más grande que tres dedos. Así que se mordió los labios y continuó montando los dedos de Jongin, esperando que el dolor disminuyera.
Con la boca todavía moviéndose arriba y abajo del eje pulido de Kyungsoo, Jongin comenzó a encresparse dedos, buscando. Las puntas de sus dedos apenas habían rozado sobre el haz sensible de nervios que era la próstata de Kyungsoo cuando el mayor gritó, su visión borrosa en el puro éxtasis que ese simple toque había creado. Sonriendo, con los labios estirados alrededor del pene de su novio, Jongin comenzó a abusar adecuadamente de la próstata de Kyungsoo. Para Kyungsoo, todo el dolor había desaparecido, reemplazado por nada más que el placer más puro.
Cuando Jongin retiró sus dedos y la boca, Kyungsoo se quejó en voz alta por la ausencia repentina. "¿Estás listo, cariño?" susurró, su voz aún más ronca ahora.
Kyungsoo no confiaba en sí mismo para hablar, así que se limitó a asentir.
Jongin extendió una generosa cantidad de lubricante sobre su palpitante erección antes de tirar de los tobillos de Kyungsoo sobre sus hombros. Alineó la cabeza de su pene con la entrada estirada de Kyungsoo. "Dime que pare si te duele", dijo.
Una vez más, Kyungsoo asintió.
Jongin empujó lentamente, viendo como su dura longitud desapareció en su novio sudoroso. No se detuvo hasta que fue totalmente enfundado en su interior, enterrado tan profundo que sus pelotas se apretaron contra la rabadilla de Kyungsoo. Se inclinó y apoyó la frente contra la de su novio, la piel sudorosa rozando entre sí. "mierda, cariño " jadeó entre dientes. "Eres tan jodidamente estrecho"
Kyungsoo no dijo nada. Él estaba apretando los dientes para no gritar de dolor, batiendo sus pestañas para evitar las lágrimas. Él sabía que iba a doler, pero no tenía ni idea de que esto podría dañar tanto. Incluso con todos los cuidadosos preparativos de Jongin, se sentía como que estaba siendo rasgado en dos.
Un pequeño gemido escapó a pesar de sus intentos de mantenerse callado.
Jongin lo cogió, por supuesto. "¿te duele, cariño? " susurró, presionando tiernamente, suaves besos a cada centímetro de piel expuesta que podía alcanzar. "¿Quieres que me detenga? Puedo sacarla si quieres que... "
Kyungsoo agarró el brazo de Jongin lo suficientemente apretado para dejar moretones. "No te atrevas" dijo entre dientes. "Sólo... sólo dame un minuto."
Así que se quedaron allí por varios minutos mientras Kyungsoo intentó dejar su respiración irregular bajo control y Jongin trazó designios amorosos a sus lados con temblorosos dedos sudorosos, con los labios sin dejar sus besos constantes. El dolor no cedió por completo, pero finalmente llegó a un punto en el que Kyungsoo no pensaba que iba a morir ya.
Pasó los dedos nerviosamente por el cabello húmedo de Jongin. "Muévete", susurró. "Por favor."
Jongin se apoyó sobre sus rodillas, sus manos aferradas a las pantorrillas de Kyungsoo para mantenerlo en su lugar, y él movió sus caderas una vez. Ambos se quejaron en voz alta, el ruido reverberante de las paredes inmaculadas. Sus manos apretaron con más fuerza alrededor de las sábanas. Por doloroso que había estado unos minutos antes, ahora le estaba dando un placer inconmensurable y Jongin sólo se había movido una vez.
Cuando vio que a su novio le gustaba lo que estaba haciendo, Jongin cogió el ritmo poco a poco, girando sus caderas hasta que encontró lo que estaba buscando de nuevo. Cuando su pene rozó el manojo de nervios enterradas profundamente dentro de Kyungsoo, el mayor echó atrás la cabeza viendo las estrellas que danzaban ante sus ojos, sus dedos arañando las sábanas como para mantenerlo conectado a tierra. "Oh, Dios", se quejó. “Eso... sólo ¡oh dios!"
Los labios de Jongin se torcieron en una sonrisa feroz, y de inmediato empezó a golpear en Kyungsoo tan fuerte como pudo, asegurándose de apuntar a su próstata con cada embestida. El aire estaba cargado por los sonidos de su respiración pesada, se choques de piel contra piel, de maullidos agudos de Kyungsoo por cómo su novio lo penetraba.
La mano del joven se deslizó hacia abajo para agarrar el miembro de Kyungsoo, que sentó la fuga a través de su abdomen. Sus dedos sudorosos rodearon la polla del mayor, el bombeo a tiempo con sus embestidas. Sólo tomó un par de movimientos duros antes de que Kyungsoo alcanzara su orgasmo con un grito salvaje, explotando sobre su estómago y la mano de Jongin.
Jongin continuó bombeando, y luego la soltó. Tumbado sobre la almohada, con el pecho agitado, demasiado cansado para hacer algo aparte de mirar con una especie de fascinación, Kyungsoo vio como Jongin se llevó la mano sucia a los labios y, sin apartar su mirada de la de su novio, lamió su semen. Sus caderas nunca detuvieron su empuje constante.
Cuando su mano estaba lo suficientemente limpia, agarró las caderas de Kyungsoo con las dos manos y utilizó el apalancamiento para guiar a Kyungsoo abajo sobre su pene más duro y más profundo. El mayor gritó de dolor y placer, sintiendo que empezaba a endurecerse de nuevo a pesar de que todavía estaba bajando de su orgasmo anterior.
Sólo tomó un minuto de golpear implacablemente a su novio para que Jongin sintiera el calor dolorosamente familiar en el estómago. Aumentó el ritmo aún más, se estrelló contra Kyungsoo bastante fuerte que se presionó contra la cabecera, gritando a cada golpe. Cuando llegó Jongin, era diferente a cualquier orgasmo que había tenido. Echó hacia atrás la cabeza con un gemido silencioso mientras pintaba las paredes de Kyungsoo de blanco con su liberación.
Cuando las paredes apretadas de Kyungsoo lo habían absorbido hasta dejarlo seco, se desplomó en la parte superior de su novio, casado de repente, pero no estaba demasiado cansado como para deslizar sus brazos alrededor del mayor, acercándolo aún más cerca, enterrando la cara en su cuello. Los temblorosos brazos de Kyungsoo rodearon la cintura de Jongin.
Después de varios minutos de silencio, Jongin levantó la cabeza lo suficiente como para presionar sus labios. "¿Cómo fue?" preguntó, vacilante, como si después de toda la espera no había cumplido con las expectativas de Kyungsoo.
Kyungsoo lo besó de nuevo, y sonreía cuando se apartó. "Fue increíble. Fue perfecto." Otro beso. "Te amo."
"Te amo, también." Jongin no pudo evitar sonreír.
Se abrazaron así por un poco más de tiempo, y una mueca de dolor expresó Kyungsoo cuando Jongin salió. "Creo que deberíamos limpiar", dijo el mayor, haciendo una mueca ante los brillos pegajosos que cubrían sus cuerpos.
Jongin negó con la cabeza, tirando de las mantas sobre ellos. "Lo haremos por la mañana," murmuró, queriendo dormir.
"¡P-pero hay en las sábanas!" Kyungsoo gimió, sus grandes ojos se volvieron aún más grandes. "¡Y en mi!"
Jongin rió mientras se acurrucó más cerca, con los brazos llegando a rodear la cintura desnuda del mayor. "Vivirás. Lo prometo."
Kyungsoo suspiró profundamente, pero sonreía mientras se acurrucó en los brazos de su novio. "¿Jongin?", preguntó después de unos minutos de silencio.
Tenía miedo de que Jongin pudiera estar ya dormido, pero él respondió con un adormilado, "¿Sí?"
"Te quiero mucho. Con todo mi corazón. Espero que sepas eso."
Jongin presionó un dulce y tierno beso en la parte posterior de su cuello. "Lo sé, cariño. Yo también te quiero. Más de lo que nunca sabrás".