Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Primer amor por Kirauchiha

[Reviews - 285]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Mayo... finales de examenes y semestre TuT intento escribir todo lo que puedo pero mi vida pende de un hilo(hipoteticamente)  

Espero que el cap les guste. Me he prepuesto terminarlo para mi cumplaños asi que escribire mucho mucho

Me dio mucha alegria enterarme de donde eran algunos de ustedes. Mexico, España y Peru. Me alegra mucho que las locuras de mi imaginacion llegen hasta lugares extrangeros. Ahora si un dia voy para España espero tener donde llegar ;) 

Tambien Mexico DF y guadalajara. ya tengo a donde llegar para las ferias de libros

De verdad aprecio mucho sus comentarios

Y para aquellos auq aun no han dicho de donde son, los invito a que lo hagan. Yo soy de Mexico, durango especifico la comarca lagunera :·3

 

El tic tac de un viejo reloj muggle hacía eco en la habitación resonando en los oídos los presentes. Regulus y Severus se encontraban recargados en una de las paredes. James estaba junto a la puesta, y Peter se encontraba  sentado en las sillas con la cabeza hundida en los brazos sobre la mesa. Sirius estaba en el suelo junto a la cama. En cambio Lucius se había quedado de pie junto a la ventana observando el paisaje, hundido en sus pensamientos.

Fue el ruido de Remus revolviéndose en la cama lo que llamo la atención de todos. Llevaba dormido casi dos horas. Sirius y James se habían negado a llevarlo a la enfermería, según ellos, por suplica del  mismo Remus quien les había hecho jurar que, pasara lo que pasara, no lo llevarían al castillo

Remus abrió lentamente los ojos. Tenía la visión nublada y la cabeza le retumbaba. Escuchaba un agudo chillido. Poco a poco pudo distinguir a su alrededor. De pronto Sirius apareció.

-¿Remus cómo te sientes?

-Como si me hubiera golpeado una Bludger –musito Remus con la garganta seca.- ¿Qué paso?-entonces como si lo hubiera invocado los recuerdos de la noche anterior regresaron a su memoria. Como un fuerte golpe en el estómago. Recordó con dolor haber visto a Lucius y a Severus justo antes de transformarse. Y como licántropo recordaba vagamente perseguir un dulce aroma. ¡Lo invadió el terror! Quiso incorporarse pero las manos de Sirius se lo impidieron –Dime que fue una pesadilla

-Es un poco difícil de explicar-dijo Sirius. Vio que el rostro de Remus se llenaba de una súplica que no sabía identificar.

-¿Lastime a alguien? ¿Están todos bien?

-No te preocupes nadie salió herido- soltó de pronto James que se había acercado a la cama. Observo detenidamente a Remus y añadió-Nadie excepto tu

 -Solo fue un enorme susto. No te preocupes, todos estamos bien.-Sirius sonrió tratando de animarlo pero una sombra se asomaba en sus ojos

-Ellos…-comenzó Remus. La voz le temblaba y de sus ojos se asomaban las lágrimas contenidas- ¿Ellos saben…saben lo que soy?

Remus vio como Sirius levantaba la mirada observando a su alrededor y supo de inmediato que no estaban solos. Una parte de él quería volver a sumergirse en la oscuridad, olvidarlo todo. No quería ni imaginar en lo que pensarían. Sintió como su corazón se encogía solo en pensar en Lucius. Lo odiaría por ser un licántropo, por ser una criatura asquerosa y repugnante.

-Si-respondió Sirius- Lo saben

El mundo de Remus se vino abajo. Todo a su alrededor daba vueltas y creía haberse caído en un hueco muy profundo, oscuro y frio.

-¿Yo los lastime?-pregunto Remus con tanto miedo que su cuerpo comenzó a temblar.

-Son muy fuertes-comento James tratando de aliviar los ánimos- Nosotros fuimos los que te lastimamos

-Y tenemos que llevarte a la enfermería-sugirió Sirius

-Primero quiero hablar con él a solas-a Remus se le erizo la piel cuando escucho la distinguida voz de Lucius de tras de Sirius

James y Sirius intercambiaron una mirada después observaron a Remus buscando una respuesta. Un leve asentamiento de cabeza les dio la indicación. Salieron de la habitación seguidos por Severus, Regulus y Peter.

---oOoOo---

Sirius decidió no esperar y entro a la habitación continua, donde Remus se había trasformado, lo encontró hecho un desastre. Era normal. En la transformación habían hecho enojar al licántropo y la habitación pago el precio. Sirius se acercó al viejo ropero y, con un ligero movimiento de varita, lo regreso a su lugar. De ella saco la varita de Remus. De pronto Severus entro

-¿Necesitas ayuda?-pregunto Severus

-Necesito compañía-soltó dejándose caer sobre la pared hasta el suelo. Sentía el cuerpo muy pesado y un horrible nudo en la garganta.

Severus se sentó a su lado. Dejo caer la cabeza sobre el hombro de Sirius y cerró los ojos. Después de que Remus regreso a su forma humana ayudo a curarlo, no iba a dejarlo a manos de los ineptos Sirius y Potter. Limpio y curo las heridas de Remus y con un hechizo muy eficiente le dio de tomar las pociones necesarias.  Por consiguiente no había dormido en todo la noche contando la madrugada hasta el despertar de Remus

-Lo siento-soltó de pronto Sirius. Severus abrió los ojos- Te puse en un gran peligro

-No fue tu culpa. Habíamos planeado seguirlos

-¿Desde cuándo lo sabían?

-No hace mucho-comenzó Severus-Desde tercer año sabía que ocultaban algo pero no fue hasta que Regulus menciono sus desapariciones en luna llena. Solo yo sospeche lo que Remus era. Pero Lucius quería saber su secreto. Si de alguien es la culpa es mía. Yo sugerí esto. Quería ver con mis ojos a un licántropo y nos puse a todos en un gran peligro. Sin mencionar el dolor que le provoque a Remus y seguramente a Lucius

Sirius dejo salir un suspiro. No podía culpar a Severus por su curiosidad ni tampoco podía dejar que se culpara. Sabía que tarde o temprano alguien iba a descubrir el secreto de Remus, y el destino había jugado porque fueron precisamente ellos quienes lo descubrieron. La culpa no era de nadie.

-No fue culpa de nadie-dijo Sirius- Habría pasado de todas maneras. No estoy seguro  si me alegro o no que hayan sido precisamente ustedes quienes lo descubrieran. No sé si Regulus o Malfoy estén de acuerdo pero me gustarían que guardaran el secreto

-No le diremos a nadie-soltó Severus sin pensarlo. No estaba seguro si los otros guardarían el secreto pero de él no saldría ni una palabra.

-Gracias- dijo Sirius. Su cuerpo se relajó un poco-¡Por Merlín! Jamás había pasado una noche así. Temía por ti, por Regulus, James, Peter incluso Malfoy. Y por Remus. Siempre se ha lamentado ser un hombre lobo y ahora que estuvo a punto de lastimarlos, no puedo pensar siquiera en cómo se sentirá. Sin mencionar a Malfoy. Si yo te perdiera por eso, seria insoportable

-Lucius no haría eso

-¿De verdad?-Cuestiono Sirius. Severus cerró la boca inseguro. Sabía que Lucius quería a Remus pero que fuera un licántropo era algo diferente y muy serio-Igual que Malfoy soy un sangre pura y conozco todos los prejuicios que existen con la pureza de las “razas”

-Lucius es mi amigo a pesar de que soy mestizo

-Solo hace falta conocerte para querer ser tu amigos-Sirius dejo salir un enorme suspiro después giro para ver a Severus y añadió-Muchas cosas pasaron por mi mente estas últimas horas. Una de ellas era el miedo de perderte. Me pregunte que hubiera hecho. Nunca me había importado mucho el tiempo pero en ese momento lamente mucho el que había perdido molestándote y sin aceptar mis sentimientos.

El cuerpo de Sirius tembló ligeramente cuando termino de hablar. No sabía porque pero a Severus lo invadió  un desasosiego que jamás habría experimentado. Y por un momento imagino, solo por unos segundos, que Sirius moría en manos del licántropo. Entonces lo comprendió. El dolor y miedo que producía Sirius al pensar que nunca más estarían juntos. Su lamentación por haber perdido tanto tiempo comportándose, ambos, como unos niños. Se sintió igual, confundido, perdido y desesperado ante la idea. Se dio cuenta que también había perdido mucho tiempo. Severus busco a ciegas la mano de Sirius. La tomo con fuerza al tiempo que levantaba la cabeza para tocar los labios de Sirius con los suyos. Un tierno beso que tenía más sentimientos que cualquier otro.

-Hagamos que ese tiempo valga la pena.

---oOoOo---

La habitación quedo en total silencio. Remus apretó los puños alrededor de las sabanas. Su respiración se había acelerado. Y su corazón latía tan fuerte que creía que en un momento a otro saldría de su pecho. Lucius se acercó lentamente a la cama y al sentirlo cerró instintivamente los ojos.

Respiro tres veces profundamente conteniendo el aire en sus pulmones incapaz de volver a sacarlo. La opresión en su pecho le exigía más oxígeno. Iba a explotar pero al mismo tiempo sentía que se hundía. Abrió y cerró la boca para tomar más aire. Estaba hiperventilando. Lo sabía. Llevo sus manos a la boca haciendo un hueco con ellas para regular su respiración. Pero fue inútil. ¡Se hundía! Se hundía cada vez más. De pronto sintió como gentilmente tomaban sus manos y las apartaban de su boca

-Tranquilízate- susurro dulcemente Lucius

Remus abrió los ojos. Lucius estaba a unos escasos centímetros

-Mírame-ordeno. Lucius tomo con una mano la barbilla y lo obligo a levantar la cabeza hasta que sus miradas se encontraron. Plata y oro.

No sabía como pero los ojos plateados siempre lograban sumergirlo en una paz que no lograba comprender. Su color frio y la calma que expresaban logro tranquilizarlo solo un poco. Pero los latidos de su corazón seguían latiendo demasiado rápido. Le había costado escuchar a Lucius atreves del palpitar en sus oídos. Solo cuando Lucius había levantado su rostro comprendió lo que decía

-Solo respira por la nariz-susurro Lucius. Sin saber cómo Remus logro hacerlo. Respiro profundamente por la nariz y soltó el aire por la boca. El primer intento le costó un horrible dolor en los pulmones que le atravesó el pecho y sus ojos se cristalizaron de lágrimas de dolor. Los siguientes fueron menos dolorosos.

-Gracias- murmuro Remus cuando por fin pudo respirar con tranquilidad

Sin embargo Lucius no contesto y desvió la mirada a la ventana por donde entraba rayos de la luz del alba. Pasaron unos segundos en total silencio. Remus escuchaba el tictac del reloj resonar demasiado fuerte en sus oídos hasta el corazón que le atravesaba como ajugas que se enterraban cada vez más en cada palpitar

-¿Ese era tu secreto?-pregunto por fin Lucius. Remus no pudo contestar sentía que el nudo en la garganta le había robado la voz- Todas tus heridas no eran infligidas por alguien más sino por ti mismo.

Remus asintió en silencio. En su momento le había parecido lindo que Lucius lo protegiera por si alguien más se metía con él. Pero Remus no necesitaba ayuda. Una de las muchas cosas que las personas ignoraban de los licántropos era la fuerza que adquirían sus cuerpos humanos. Remus no necesitaba que lo protegieran.

-¿Cómo paso?-continúo Lucius. La pregunta sorprendió a Remus. Nunca antes había contado su historia a alguien más. Solo a sus amigos les había dicho lo sumamente necesario. Pero con Lucius se sentía diferente. Quería que él entendiera todo lo que había sufrido, que fuera el único que conociera su historia.

-No recuerdo mucho-se sorprendió al escuchar su propia voz, ronca y muy muy cansada-Era muy chico cuando sucedió. Un hombre quería vengarse de mi padre, envió a Fenrir Greyback-a Lucius se le erizo la piel al escuchar ese nombre-A él… bueno le gusta atacar niños y era una venganza excelente. Yo estaba jugando en un parque cuando sucedió, creí que me había atacado un enorme perro. Cuando desperté había personas en casa que no conocía, enfermeras y mendimagos. Nunca había visto a mis padres tan preocupados. Mi madre se negaba a verme a los ojos no por miedo sino por tristeza. Les pregunte muchas veces lo que pasaba pero ninguno quería aceptar la verdad. Supongo que mi padre guardaba las esperanzas hasta el último momento. En mi primera trasformación me llevaron al sótano  y me dejaron ahí sin ninguna explicación. Llore sin entender nada hasta que un extraño cosquilleo recorrió mi cuerpo y vi como mis manos comenzaban a cambiar, después vino el dolor.  Desperté en los brazos de mi madre que seguía llorando pero la duda había desaparecido de sus ojos. Mis padre lo intentaron todo al final comprendieron que no había nada que hacer.

Lucius guardo silencio mientras que Remus hacia una pausa. Meditando, recordando lo que había vivido hacía mucho tiempo pero que en su corazón guardaba como si hubiera sido ayer.

-Mis padres fueron muy valientes, pudieron dejarme con los mendimagos o deshacerse de mi pero era su hijo-continuo Remus-Mi madre no quería que los doctores se acercaran más a mi así que nos mudamos. Compraron otra casa apartada de la población para que mis gritos no se escucharan. Supongo que lo más difícil fue explicarle a un niño sobre su maldición pero lograron hacerlo. Al principio no podía creerlo pero había visto mis manos cambiar frente a mis ojos. Después de eso creo que todo se volvió más oscuro y rutinario. Me volví aislado y temeroso. Tenía miedo de lastimar a mis padres o alguien más. Pensé que mi vida iba a ser siempre así incluso pensé en acabar con ella. Hasta que Dumbledore llego. Mi madre le había contado todo y él acepto que yo ingresara a Hogwarts. Construyo la casa y ayudo a los rumores para que nadie se acercara. Lo demás ya lo sabes. James, Sirius y Peter descubrieron mi secreto y se convirtieron en animagos para acompañarme.

Durante unos minutos Lucius guardo silencio. Remus había terminado de contar su historia y él trataba de asimilarla ¿Cómo se debía sentir? ¿Que debía decir? Era fácil saber cómo debía sentirse porque sus emociones se revolvían en su interior, desde la tristeza, dolor, angustia, el espanto, la furia, y la traición. ¿Pero que debía decirle? ¿Qué lo sentía? Claro que lo sentía pero no ganaba nada con decírselo. ¿Y que debía hacer? Ahí en la cama, con golpes y heridas, estaba Remus. Su Remus. El chico frágil, responsable, gentil del que se había enamorado. Pero detrás de todo eso se escondía un hombre lobo. Una criatura oscura que había estado a punto de matarlo, junto con sus mejores amigos

-No espero que te quedes- la voz de Remus lo saco de sus pensamientos. Volteo a verlo. Contenía las lágrimas-No era mi intención mentirte o engañarte. Nunca quise que te enteraras de esto. Lo siento.

-Y si nuestra relación hubiera avanzo ¿Qué habrías hecho?-pregunto Lucius pero como respuesta solo obtuvo el silencio de Remus-¿Me lo hubieras dicho?-insistió y Remus movió la cabeza de un lado a otro –Lo suponía

La furia ardía en su interior. ¿Acaso le iba a mentir todo el tiempo?  ¿O antes que lo descubriera iba a terminar su relación? Apretó los puños fuertemente.

-Esto es demasiado-dijo Lucius después de unos segundos. Respiro profundo y dejo salir todo- No negare que lo que sentía por ti era real Remus. Pero esto. No puedo amar a una criatura oscura.

Remus sintió como era consumido. El hueco que se instaló en la boca de su estómago se llevaba ton con él. Ya no era capaz de reaccionar. Todo a su alrededor se nublaba. Contuvo las ganas de pedirle a Lucius que lo perdonara ¿Pero que lo perdonara de qué? Era un hombre lobo y no había nada que cambiara eso. Simplemente se sintió demasiado cansado, demasiado pesado para hacer algo.

-Lo siento-dijo Lucius pero Remus creyó escucharlo muy muy lejos como si estuviera en un mal sueño. Una de las peores pesadillas.- Esto es muy difícil. Prometo…

Lucius se acercó, estiro una mano para tocar su mejilla pero Remus se retiró a tiempo. Bajo la cabeza y apretó fuertemente las sabanas que lo cubrían para tragar el nudo en su garganta. Las lágrimas comenzaron a salir sin contenerse.

-Solo dame tiempo- Dijo Lucius y al final salió de la habitación 

 

Notas finales:

Fue un capitulo chiquito lo se pero ya tango la mitad de lo que sigue lo que pasa esq me gusto mucho como quedaba en suspenso. 

Y paso lo que nadie queria Lucius x Remus fuera TnT (tal vez) ahora solo falta como sigue con los demas. 

No recuerdo si les habia comentado que esto tendra una secuela de la cual ya tengo algunos argumentos y como va a ir la historia. asi que no entristescan por las parejas

espero sus comentarios

nos leemos pronto 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).