Cuando Yuu se fue, quedaron dos miradas totalmente perdidas por el camino que este había tomado, Takashima miró a su niñera e infló las mejillas al notar de nuevo esa mirada que no le gustaba nada en la chica.
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Entraron ambos a la casa y ,mientras Hikari le preparaba el desyuno, Takashima veía el reloj una y otra vez, quería que el tiempo corriera, quería que ya fuese tarde y su mamá estuviese en casa para que Yuu fuera de nuevo y hablará sobre las clases de guitarra.
Hikari: Shima?......... estas muy distraído pequeño, aún tienes sueño?.- el niño negó con la cabeza, pero no quería hablarle a su niñera, esta sonrió del lado y volvió a voltear hacia la estufa donde estaba terminando de preparar el desayuno.- Nee Shima, porque no me habías dicho que tenías un vecino tan lindo como Yuu?.- al escuchar eso, el pequeño sintió una punzadita en el pecho, una que le hacía querer alejar a Yuu de donde estuviese Hikari, Takashima no entendía muy bien ese sentimiento, él simplemente sabía que no le gustaba la forma en que Hikari veía a Yuu y no quería que lo volviera a ver, el niño nuevamente no le respondió nada y solo inflaba sus mejillas mientras tenía la cabeza apoyada en sus brazos sobre la mesa, así paso una buena parte del día, Takashima no dejaba de ver el reloj, cuando dieron las 5 salió al patio trasero y parándose de puntitas miró por sobre la cerca, hacia la casa de su vecino, debido a la hora, Takashima sabía que ya debía haber llegado de la escuela, asi que tan solo se sentó recargando la espalda en la cerca, pasados unos minutos escucho las notas que siempre le provocaban una sonrisa en el rostro, y escuchando aquellas notas cerró sus ojos y se quedó dormido.
Yuu había salido, como casi todas las tardes, a ensayar un poco con su guitarra, esperaba ver la cabellera del castañito asomarse por la cerca pero no notó nada, se detuvo.
Aoi: Ya habrá llegado?.- dijo para sí mismo, refiriéndose a la mamá de su pequeño vecinito, se levanto, entro a su casa, dejó la guitarra sobre un sillón y salió hacia la casa de al lado, tocó el timbre, Takashima incluso estando en el patio, logró escuchar el timbre, y corrió hacia la puerta, dejando a su paso a una apresurada Hikari que había salido de la cocina secando un plato con una toalla y se dirigía hacia la puerta también, Takashima llegó hasta esta y la abrió y apenas al ver al pelinegro del otro lado de la puerta se lanzó de nuevo contra él.
Uruha: Yuu¡¡¡¡.- dijo mientras lo abrazaba nuevamente, Yuu sonrió para sí, ese pequeño le producía una felicidad que no solía sentir, este notó como la chica se asomaba por la puerta y le sonreía con ternura al ver de nuevo la reacción del pequeño.
Hikari: Vaya, en verdad te adora.- la chica le revolvió los cabellos al pequeño mientras este se escondía más en los brazos de su vecino.
Aoi: Si, eso parece, hola de nuevo.- le sonrió a la chica.- asumo que no a llegado la mamá de Shima?.
Uruha: No, pero no te vayas.- se apresuró a decir el pequeño, que con su reacción hizo reír a Yuu y a Hikari.
Aoi: bien…..pues, no me voy entonces, aún tardará mucho?.- dijo dirigiéndose a la chica.
Narra Aoi
Hikarí: No, llegará tal vez en unos 15 minutos……………..quieres….pasar?.- dijo abriéndome más la puerta para que entrara, solo sonreí y asentí, para poder caminar, cargué a Shima ya que este no se me despegaba, al alzarlo, este inmediatamente puso su cabeza entre mi hombro y mi cuello y se acurrucó ahí, volví a sonreír sin poder evitarlo.
Estuve en el sillón de la sala con un Shima aferrado a mi cuello mientras Hikari y yo hablábamos de cualquier cosa sin importancia y ella sonreía tontamente y me hacía gestos coquetos al hablar, yo solo pasé por alto todas aquellas insinuaciones, no me interesaba nada con ella, así que yo solo le respondía y hablaba amablemente, sin ningún tipo de coqueteos , pronto llegó la mamá de Shima y este corrió a donde ella, la llevó de la mano hasta la sala diciéndole que yo estaba ahí, Hikari se fué, despidiéndose de mí dándome un beso en la comisura de los labios, no dije nada, solo me aleje sin mostrarle ninguna sonrisa y sin más me dirigí a la mamá de Shima, hable con la señora sobre las clases que le había prometido a su pequeño y ella felizmente aceptó y me ofreció, incluso, pagarme por las clases, yo me negué, después de varios intentos, la señora me agradeció, me despedí de la mamá de Shima, cuando fui a despedirme de Shima lo noté un poco decaído, pero se despidió de mi de nuevo con un abrazo asi que solo asumí que tenía sueño. Regresé a mi casa, mañana mismo comenzaría con las clases para Takashima.
---Al día siguiente después de la escuela---
Llegué a mi casa a dejar mi mochila, me senté a comer lo que mi madre había preparado y tomé mi guitarra para ir con Shima, toqué la puerta, la cual atendió Hikari, la salude rápidamente con la mano mientras pasaba al lado de ella, noté su mirada, pero no la tomé en cuenta, escuché de nuevo mi nombre gritado por parte del castañito, le sonreí, después empezamos con las clases, Shima se veía fascinado con todo lo que yo le decía, sentí en todo momento la mirada de Hikari sobre mi pero la ignoraba.
Hikari: Yuu, tengo que irme, no falta mucho para que llegué la mamá de Shima, asi que supongo que lo puedo dejar a tu cargo.- la miré y asentí con una sonrisa amable.
Yuu: Claro no te preocupes, ve con cuidado.-
Hikari: Dile que me disculpe, que vendré mañana.- la chica salió, esta vez sin despedirse, seguimos con la clase hasta que llegó la mamá de Shima.
Señora Kouyou: Buenas noches Yuu.
Aoi: Buenas noches señora, Hikari me dijo que tenía que irse, que la disculpara, vendrá mañana.
Señora Kouyou: Ooo ya veo, gracias por quedarte con mi hijo.
Aoi: Descuide……. Bueno, debo irme yo también aún tengo algunos deberes.- la señora Kouyou se despidió de mi y subió a su habitación, me giré para despedirme de mi pequeño aprendiz, me iba a agachar para darle un abrazo y lo que hizo me dejo helado, apenas me agaché un poco, el niño se puso en puntitas y me dio un inocente beso en los labios, lo miré a los ojos y él me sonreía.- Shi…… Shima, emmm….. asi no es como debes despedirte de mí……….. ni de mi ni de nadie, en realidad, menos algún hombre.- no sabía que decirle al niño.
Uruha: Porque? A mi………. a mi me gusta despedirme asi de Yuu.- de nuevo me quede sin saber que decirle.
Aoi: Pero esta mal Shima, no lo hagas.
Uruha: A Hikari no le dijiste nada, porque ella si se puede despedir asi? .- me dijo con un puchero en los labios y los ojos le brillaban, no sabía que hacer, Shima iba a llorar y no quería que lo hiciera, pero solo me quede en silencio y vi como una lagrimita salía de sus ojos.- Te gusta que Hikari lo haga pero yo no.- dijo y ya no pudo contener otras lágrimas, sentí un vacío en mi pecho al verlo llorar y escucharlo decir eso y de repente me sentí culpable.
Aoi: No….. no Shima, no es eso…….
Uruha: pero la prefieres a ella…….. no le dijiste nada y a mí si
Aoi: No, esto no tiene nada que ver con ella Shima..
Uruha: Claro que si, te gusta que ella lo haga pero yo no.
Aoi: Yo no dije que me gustara que ella lo hiciera Shima.- y ahí estaba yo, Shiroyama Yuu de 17 años rindiéndole cuentas a un niño de 10 años.
Uruha: Y porque a ella no le dijiste nada y a mi si?
Aoi: Shima no me gusta Hikari……… aaaa olvídalo pero no lo vuelvas a hacer.- mire al niño y este solo tenía sus puñitos en sus ojos, intentando que las lágrimas dejaran de salir, y hacía pucheritos con los labios, de verdad odiaba verlo llorar, ese niño tenía una hermosa sonrisa y sus lágrimas me dolían, sentí un horrible peso en mi pecho y mi cuerpo actuó, me agaché y lo abracé.- No llores Shima, por favor.- sentí como el pequeño se retiraba las manos de su carita y volteé, me miraba aun con lagrimas en los ojos, pero ya sin llorar, le limpié la carita con la manga de mi camisa y le sonreí.- Te veo mañana pequeño.- le revolví el cabello y me levanté y fui a la puerta sin mirar atrás, porque rayos me afectaba tanto ese castañito? Me fui a mi casa pero casi no dormí esa noche, al día siguiente fue todo un reto levantarme para ir a la escuela.
Pasaron un par de meses, Shima progresaba bastante, era muy inteligente y ya había cumplido los 11 años, nos llevábamos 6 años y unos cuantos meses, tres tal vez, ya que mientras el cumplía los once yo recién tenía los 17. Siempre que iba a darle clases, Hikari estaba allí, lo cuidaba desde las 1:30, que el pequeño salía de clases, hasta que su mamá llegase, aveces me resultaba incomodo estar ahí ya que sabía que a Takashima le disgustaba que Hikari se me acercara tanto, pero no es como si pudiera correr a la chica cada que yo llegara, así que solo ignoraba los intentos de la chica por llamar mi atención, asi fue por esos meses, pero Hikari pareció entender que yo no quería nada con ella y fue perdiendo interés. Estaba de nuevo dando una clase más a Shima, viendo como ya tocaba con cierta facilidad una gran parte de una canción de mi autoría, sonreí, era lindo verlo tan cercano a la música, se notaba en su carita que le fascinaba tocar la guitarra, me quedé mirando las manos de Shima sobre la guitarra, tan finas y pálidas, Shima siempre tuvo un aspecto delicado que lo hacía verse un poco afeminado, se levantó del sillón y un poco apurado dijo que iría al baño, me dio un poco de risa verlo correr hacia el, durante esos meses Hikari se iba mas temprano, aprovechando que yo cuidaba del niño hasta que llegase su madre, como todos los días, Hikari se marchó, Shima salió del baño, se sentó a mi lado, y se quedó mirando sus puños sobre sus rodillas, yo lo miraba pero él no alzaba la mirada, porque estaba asi? Hace apenas cinco minutos estaba bien.
Aoi: Shima?......... que pasa?.- vi como el niño tensaba un poco sus brazos pero no levantaba la vista.
Uruha: Yuu………..
Aoi: Dime.
Uruha: Te….. te quiero.- se hundió más en el sillón, sonreí del lado, en esos meses yo había logrado encariñarme mucho con ese pequeño.
Aoi: Yo también te quiero Shima.- puse mi mano en su espalda, pronto me volteo a ver
Uruha: No, asi no…… no te quiero como cuando le digo a mi mami que la quiero……………es…….. diferente.- retire mi mano, lo miré, confundido.- me dan………… cosquillitas….. aquí .- se tocó su pancita, yo solo lo veía, el ver como aquel pequeño intentaba describir lo que para mi tan solo se podía decir con un “me gustas” ……. Cuando pensé eso me quede helado.- siempre…… siempre quiero verte, siempre quiero estar con Yuu……..- esas palabras estaban acabando conmigo, como carajo hacía que me quedara asi de inútil tan solo escuchándolo?, entonces volteó a mirarme, su carita estaba totalmente roja y aún se tocaba su pancita, esa mirada me hizo entender que tal vez Shima estaba esperando que yo dijera algo.
Aoi: Shi…ma.- mi voz salió tan dispersa, pero que rayos pasa conmigo?.- sigue……..sigue tocando Shima, ya casi acabamos la canción, será tu primer canción¡¡¡.- no se me ocurrió que otra cosa decirle, por dios¡¡ tenía 11 años debe estar confundiendo las cosas, cuando dije eso, vi como los ojos de Shima perdían cierto brillo, entonces sentí como mi pecho se estremecía……………… le había dolido, agacho su cabecita y movió sus manos nerviosamente en sus rodillas, su silencio y quietud estaban matándome.
Uruha: A Yuu no le gusta estar conmigo?.- pude escuchar como su voz sonaba un poco entrecortada…………. Iba a llorar, no no no , no me gusta verlo llorar.
Aoi: No Shima, no es eso……………… claro que me gusta estar contigo…….- Shima levantó su carita y cuando volteó a verme, sus ojos brillaban de nuevo, sonrió emocionado y sin dejarme terminar de hablar se aventó sobre mi, aferrándose a mi cuello, se sentó en mis piernas y se acomodó en mi pecho, yo estaba pasmado por su rápida reacción cuando ni siquiera me había dejado terminar, bueno……… era un niño, ya se le pasará……………… no?, dejé pasar unos minutos, el niño no se movía para nada, agaché mi vista y fue entonces que noté que estaba dormido, sonreí, aveces hacía cosas que me resultaban extremadamente tiernas, me quedé mirándolo por un rato hasta que oí la puerta abrirse, la mamá de Shima había llegado.
Señora Kouyou: -entrando a la sala y mirándonos con ternura.- Ohh vaya, lograste dormirlo temprano Yuu.- le sonreí nerviosamente a la señora, no se porque me había puesto nervioso, solo sé que también me sentía un tanto enfermo y pervertido porque no me di cuenta que había estado observando dormir a Shima por media hora, que rayos sucede conmigo?.- Shima se la pasa hablando de ti todo el día y le encantan las clases sabes? Aveces pienso muy seriamente en que reemplaces a Hikari.- la señora se rió divertida, a mi eso solo me puso más nervioso, yo no podía hacer más que sonreírle.- pero bueno, tienes colegio y más cosas que hacer, ya mucho has hecho con darle clases de guitarra a mi bebé.- la forma en la que la señora se refirió a su hijo me hizo sentirme mas enfermo todavía, es decir, Shima ya no era un bebé literalmente, pero era más pequeño que yo, la señora suspiró cansada.- Yuu te importaría llevarlo a su habitación? Déjalo en su cama e iré por el cuando sea hora de cenar.
Aoi: Seguro.- asentí con la cabeza mientras me levantaba lentamente con Shima en mis brazos. La señora me sonrió.
Señora Kouyou: Su habitación está subiendo las escaleras a la izquierda, es la primera puerta.- asentí y fui hacia allá.
Cuando llegué abrí, con el pie, la puerta, ya que mis brazos estaban ocupados, entré, encendí la luz y llevé a Shima a su cama, lo recosté con cuidado y cuando me iba a levantar para terminar de dejarlo acostado, sentí como se aferraba a mi cuello de nuevo.
Uruha: Te quiero Yuu!!.- no pude evitar sonreír, y dándole un abrazo, solté un sincero…..
Aoi: Y yo a ti Shima.- mi mente me seguía diciendo que solo era un niño y todo se le pasaría, así que no vi problema con decirle eso, escuché la risita de Shima, pero aún no me soltaba del cuello.- Bueno pequeño Koala no puedes quedarte pegado a mi cuello, anda vamos suéltate ya.- le dije mientras tomaba cuidadosamente sus bracitos para separarlos, cuando cedió, me topé con su mirada, además estaba sonrojado, se veía indeciso.- que pasa Shima?.- lo vi jugar con sus deditos.
Uruha: Entonces ahora si me puedes dar un beso?.- por un momento el suelo se movió de lugar, como es que Shima soltaba esas cosas con tanta facilidad?, yo solo lo miré y luego cerré mis ojos y negué con la cabeza , tenía intenciones de ir hacia la puerta e irme hasta que escuché los sollozos del niño, levante la vista y Shima tenía un notable puchero en la cara, como entre disgusto e impotencia, las lágrimas de nuevo amenazaban a sus ojitos miel con salir.- diji…… dijiste que me querías.- de nuevo infló las mejillas y paró los labios haciendo que pareciera más pato de lo normal, me reí y le tomé una mejilla, la jalé un poco.
Aoi: Si Shima, te quiero, pero no puedo darte un beso.
Uruha: Si puedes.
Aoi: No, no puedo….
Uruha: Porque?
Aoi: Porque no, Shima.
Uruha: No me quieres.- una lágrima de frustración rodo en su mejilla.
Aoi: No es porque no te quiera Shima, es porque no está bien.- me miró entonces con un poco de curiosidad mientras se limpiaba su lágrima con su manita.
Uruha: Porque no esta bien Yuu? Yo quiero que Yuu me de un beso y Yuu dijo que me quiere, porque no esta bien?.- me quedé mirando al niño unos segundos, no sabía que decirle.
Aoi: Porque…….amm…… porque eres más pequeño que yo Shima y además eres niño y yo también…….
Uruha: Pero a mi me gusta Yuu………..- cruzó sus bracitos en ademán de enojo e inflo de nuevo sus cachetes, me quede totalmente estático, mirándolo……….. era tan directo.
Aoi: No Shima, estás confundido.
Uruha: No es cierto¡¡¡ tú estas confundido porque dices que me quieres pero no me quieres dar un beso, entonces no me quieres.- se notaba ya bastante la frustración del pequeño y empezó a llorar.
Aoi: No, no llores, por favor………….shhhh, tu mami va a oírte.- lo abracé, acallando un poco sus sollozos.
Uruha: Porque no quieres que mami me escuche?............. fue mami la que dijo que no estaba bien?...... no le diré nada a mami, lo prometo.- me miró con ojos suplicantes y brillosos.
Aoi: No Shima……. No puedo.
Uruha: Que si puedes!, quiero mi beso.- de nuevo soltó a llorar, estaba llorando cada vez mas fuerte y yo volteaba constantemente a la puerta, que le diría a su mamá si lo escuchaba?, lo tomé de sus mejillas y sin más le di un pequeño beso en sus labios, el castañito inmediatamente se quedo callado, me separé y al verlo, él solo me miró extremadamente sonrojado, pero inmediatamente sonrió de lado a lado y sus ojos parecían estrellas color miel, de verdad era tan feliz por eso? De nuevo lo sentí aferrarse a mi cuello, pasaron unos cuantos segundos cuando se separó lo suficiente para mirarme.- me das otro? No le diré a mi mami ni a mi papi si?.- preguntaba emocionado, no pude evitar una sonrisa, todas su palabras eran demasiado sinceras e inocentes.
Aoi: No shima, querías UN beso y te di UN beso, basta, ahora acuéstate ya.
Uruha: Me darás más después?.- pude ver la ilusión en sus ojos, sabía que si decía que no en ese momento, lloraría de nuevo.
Aoi: Si……… después Shima, pero ya acuéstate, te veré mañana.- pude ver como sus ojitos se encendían todavía más y gritaba un pequeño “sii” de emoción, salí de su cuarto, me despedí de su mamá y me fui a mi casa.
Al siguiente día cuando la mamá de Shima llegó, me propuse a irme cuando la señora me habló.
Señora Kouyou: Yuu, me permites un momento?.
Aoi: Claro, dígame.
Señora Kouyou: Mi esposo y Yo debemos salir de viaje la próxima semana, y Hikari saldrá de vacaciones con unos amigos………- ya tenía idea de por donde iba el asunto pero aun asi no dije nada.- me preguntaba si tu nos harías el favor de cuidar de Takashima, mi hijo te estima mucho y yo confío en que Shima estaría muy bien si tu lo cuidas, saldríamos el viernes en la noche y regresaríamos hasta el próximo viernes, igualmente por la noche, te dejaría dinero suficiente para todo lo que necesite mi hijo.- me quede en silencio por un momento, no podía……….. que rayos haría yo si Shima insiste con que quiere besos? Que se supone que haga cuando me ha hecho pensar , incluso, si estoy bien de la cabeza, si no estoy enfermo o si soy un pervertido, que hare?? Pero si no lo hacía, que pasaría con Shima? Hikari no estará y la familia Kouyou no es muy sociable debido a que están fuera todo el día……….. carajo¡¡.
Aoi: ammm…….. bien, de acuerdo………….
Uruha: Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.- Shima salió corriendo de detrás de una puerta del pasillo, debió haber estado escuchando, se estampo contra mí, yo solo amortigüe un poco el golpe, frenándolo un poco con mis brazos, la mamá de Shima sonrio tiernamente.- Voy a vivir con Yuu¡¡¡¡¡.- el comentario del pequeño hizo reir a su madre pero a mi no tanto………………….. temo por mi cordura.